Disclaimer: Ni Dragon Ball ni sus personajes me pertenecen, son obra exclusivamente de Akira Toriyama y Toei Animation, yo solo los uso para dar rienda suelta a mi imaginación.

Día 9: Disfraces.

Nunca pensó que Videl se vería así...

Él era muy caballeroso, su madre lo educó para que fuera siempre respetuoso con las mujeres, para que las ayudara cuando estuvieran en problemas, y para defenderlas cuando lo necesitarán.

Videl no era una damisela en apuros, desde que la conoció quedó admirado de su fuerte carácter y más de que supiera artes marciales ayudando a la policía de Ciudad Satán a derrotar a todos los criminales.

Claro, era consciente de que la hija de Satán era muy hermosa, y el detalle que más lo demostraba eran sus perfectos ojos azules.

Trago nervioso.

Siempre pensaba en lo linda que era, usará lo que usará, resplandecía ante todos...

Pero esto...

Era demasiado.

— Gohan, ¿Seguro me veo bien?

— Sí sí. Te ves... — dudo en hablar. La mejor amiga de Iresa iba vestida idéntica a su maestro. Un gi morado con cintas rojas ajustado a su formado cuerpo, una capa blanca caía desde sus hombros hasta sus talones y sus pies llevaban puestos los típicos zapatos cafés.

— ¿Qué pasa? — pregunto nerviosa. — ¿Crees que el traje de Piccolo no me queda por no ser verde? — siguió con broma.

El híbrido simplemente negó.

La artista marcial observó confundida como su amigo miraba de izquierda a derecha y hasta arriba para ver si se encontraban solos, y lo que vino después... Jamás lo vio venir.

Menos de parte de un nerd.

Se vio acorralada entre un árbol y el bien formado cuerpo de su amigo... ¿A quién engañaba? Gohan le gustaba, ella no lo veía como un amigo.

— ¿Gohan? ¿E-estás bien? — cuestionó con algo de temor pero más que nada con nerviosismo, el cejo del guerrero se encontraba fruncido y sus ojos... Demostraban un brillo especial.

— Por supuesto. — contestó con una sonrisa ladina. — Videl...

— ¿Q-que? — frunció el ceño. No se dejaría dominar por nadie, ni siquiera por el chico que le gustaba.

— No estás hermosa... — se acercó a su oído. — Para mí estas... Sexy.

— ¿¡Eh!? ¿¡Que!? ¿¡Qué diablos estas diciendo!? — se alteró tratando de librarse del firme agarre del hijo de Goku.

— Lo que oíste.

Y sin más la beso.

Videl aunque estupefacta correspondió luego de unos segundos, ¿Desde cuándo Gohan era tan atrevido? Bueno... Solo disfrutaría del momento antes de que el tímido muchacho volviera.

Y Gohan...

Él solo pensaba una cosa.

"Bendito día de los disfraces".

._.

Fin de la transmisión.