Hola a tod s soy nueva, por estos rumbos, espero llenar las expectativas con esta historia, agradecería sus comentarios para la inspiración…

Los personajes no me pertenecen, tomo prestados para darle vida a esta historia.

Demonio Blanco

Capítulo 1

Tomo su bolso con mayor fuerza, estaba arrepentida de no haber asistido a la fiesta de cumpleaños de uno de sus compañeros, pero estaba cansada realmente, aunque en estos momentos sus pies caminaban deprisa, había escuchado a la distancia pasos acercándose cuidadosamente hacia la dirección donde se encontraba, si tan solo no tuviese que caminar todos los días con zapatos altos a altas horas de la noche, no estaría en esta situación, su cuerpo templo ante el susurro de uno de los hombres que la seguían pudo distinguir tres pasos diferentes, tomo con mayor fuerza su bolso, su gas de pimienta estaba en su mano, estaba segura que tendría la oportunidad al menos de aplicarlo con uno, pero con tres se estremeció solo de pensar en lo que podría sucederle…

¿Por qué tanta prisa pequeña? – la voz de uno de sus perseguidores le provoco escalofríos en su espina dorsal, mientras acelero el paso.

¿Quieres pasar un momento agradable en nuestra compañía? – escucho que preguntaba mientras se reían estrepitosamente

Mantén tus manos lejos de mí – grito mientras uno de los sujetos la tomaba de la cintura, uso el gas de pimienta y se echó a correr, no llego muy lejos antes que otro de los individuos la tomara de los brazos, la inmovilizó de tal manera que sus dedos se abrieron y el gas de pimienta rodo por el suelo

Suéltame – grito, mientras forcejeaba como una loca, el hombre poso sus manos deliberadamente sobre uno de sus pechos, el miedo se hizo aún más fuerte, no quería ser ultrajada por esos tipos en medio de una calle oscura y desierta no era así como quería que sus días terminaran, las noticias hablaban cada momento de hechos donde no solo violaban a sus víctimas sino también las asesinaban para que no hubiera problemas para el atracador.

No temas muñeca, haremos que valga la pena – el hombre paso su asquerosa lengua por su mejilla, se estremeció por enésima vez por el asco que aquel acto le provoco

He dicho que me sueltes – con enojo empujo al hombre con toda la fuerza que pudo un destello de luz alumbro, el hombre chillo repentinamente.

Estas loca, que eres – ella estaba confundida, ante aquel nuevo ataque, el hombre se dobló ante sus ojos sangre salía de su estómago, ella quedo de piedra sus manos estaban manchadas de sangre, pero ella no tenía nada con que hacer daño de esa manera.

Mike, te encuentras bien – el otro individuo se acercó, a su amigo y con furia en los ojos se dirigió hacia ella – maldita perra que es lo que le has hecho – su puño se dirigió a su estómago, el golpe la dejo si aire mientras su cuerpo caía sobre la acera mojada.

Vas a pagarla, te causare más daño del que puedas imaginar – se colocó sobre su cuerpo, mientras ella luchaba por llevar aire a sus pulmones, sus manos la tocaban y le hacían daño, estaba segura que ese día moriría, el tercer salió corriendo sin mirar a tras mientras los gritos de su amigo le gritase para que regresara.

Erick, eres un maldito cobarde – grito, mientras volvía su atención sobre la mujer, una cruel sonrisa se dibujó en su rostros – es mejor que Erick haya huido ahora serás solo mía – aseguro mientras tiro de su blusa bruscamente, haciendo que esta se rompiera y dejar expuestos sus pechos blanquecinos.

No te atrevas a tocarme, suéltame, toma el dinero del bolso, pero déjame ir – grito como último recurso, su mente estaba perdiéndose el olor a sangre que brotaba del otro hombre la estaba mareando…

Después que haya disfrutado de tu cuerpo, te dejare en algún contenedor de basura para que los perros terminen contigo – aseguro posando su boca sobre su garganta, ella cerro los ojos para no ver a su atracador, el peso del hombre salió de su cuerpo en ese mismo instante, sus ojos se abrieron con sorpresa al escuchar el crujir del cuerpo impactándose en la pared de un viejo edificio, el hombre frente a ella si podría ser llamado hombre, era el ser más extraño que podría imaginar encontrar, su cabello largo blanco como la nieve, de su espalda salían unas pesadas alas negras lo juzgo por el tamaño de las mismas, su ropa era negra en cuero pegado a su cuerpo, sus manos fuertes y poderosas sostenían al atracador por la garganta y pudo jurar que escucho el momento exacto en que el cuello del hombre se rompió bajo la poderosa mano de aquel extraño.

Su instinto fue correr, sabía que le daría alcance en instante, pero aun así, corrió tan rápido como sus pies le permitieron, dejo los zapatos tirados eran un problema en vez de una solución, no llego muy lejos cuando frente a ella batiendo sus alas aquel extraño la detuvo, lentamente aterrizo sus pies sobre el sucio suelo...

Sintió sus lágrimas correr por sus mejillas, mientras era observada por aquel extraño, con rostro de ángel…

¿Quién y que eres? – se a atrevió a preguntar, si iba a morir, por lo menos moriría sabiendo la verdad

Eres curiosa, pequeña humana, solo agradece que te haya salvado la vida – su sonrisa destello sus dientes blancos y perfectos, sus ojos color oro, impactaron aún mas

Gracias – susurro, tratando de aclarar su mente, quizá estaba teniendo un shock y el hombre frente a ella, era un hombre común y corriente.

¿Cómo te llamas? – pregunto, dudo que el respondiera a su pregunta, se elevó lentamente, cuando su altura fue considerable emprendió el vuelvo y ella fue incapaz de verlo, se había perdido entre la oscura y fría noche…

El sonido del despertador la sobre salto, había sido un sueño, demasiado real para su propio bien, se levantó a toda prisa hoy tenía su agenda llena, su jefe estaba a punto de darle un mejor puesto, era su oportunidad de demostrarle de que estaba hecha, se dirigió a la ducha treinta minutos después tomo las llaves de su apartamento ya había pedido un taxi al servicio, el timbre de su móvil la sobre salto sonrió ante aquel hecho sabía que su buen amigo seria fiel a su palabra.

Jack, buenos días que hay de nuevo – sonrió al escuchar a su amigo Dr. de la Morgue en Seattle, el saludo de siempre le causo gracias, su amigo era quien le informaba de cualquier acontecimiento en la ciudad, salió a toda prisa tendría la primicia de nuevo lo que aumentaría su posibilidad para ser Editor en la Revista para la que trabajaba.

Mientras se dirigía a la morgue, miro una vez más su reloj, llegaría con tiempo justo a la entrevista solo tenía que darse prisa con la nota sobre lo que había sucedido anoche.

Quince minutos después entro a la oficina donde la esperaba Jack, - llegaste de rápido – comento mientras se dirigía al cuarto frio, Bella, se quedó en shock, cuando su amigo, le mostro dos cuerpos en la morgue, sus rostros pasaron como flashes ante sus ojos, lo sucedido anoche, no había sido un sueño, eran esos dos hombres quienes la habían atacado, no quería creer lo que sus ojos estaban viendo.

Mike Newton, la herida en el estómago fue lo que le provocó la muerte, pudo haber sido causada por algún instrumentó corto punzante, le perforaron los intestinos – Jack seguía describiendo lo sucedido, Bella quería vomitar de la impresión, nunca antes ver un hombre muerto y saber cómo fue le había causado un shock, pero estos hombres fueron asesinados frente a ella, sus manos habían tenido la sangre de aquel hombre - y Tyler Crowley tiene el cuello roto y otros golpes severos por su cuerpo al parecer estaban drogándose en las afueras de un Edificio abandonado por la calle que va al Condado en el que vives, al parecer es obra de algún experto ya que no existe huellas en ninguno de las víctimas.

Bella, seguían en shock, ese hombre era real, existía y no era producto de su imaginación y lo que más le asusto es que realmente ella había escapado de ser abusada sexualmente por aquel hombre misterioso.

Bella, me estas escuchando – Jack le movió el hombre con calma – Bella te sucede algo, quizá es demasiado temprano para este tipos de noticias lo lamento – se disculpó, aunque la actitud de Bella lo intrigo.

Estoy bien Jack, gracias por la primicia, hare una fotos de los cuerpos y me iré, tengo cita para una entrevista en una hora y realmente no quiero fallar – sonrió, pero estaba segura que estaba tensa se le notaba, lo sentía, los ojos de Jack parecían estar acusándola directamente de aquellas muertes, quizá tuviera razón era su culpa, o quizá solo se estaba imaginando las cosas.

Termino su trabajo a toda prisa, realmente ni se detuvo a ver si las fotos habían quedado bien, solo quería escapar de aquel infierno en el que se había vuelto su vida en menos de 24 horas, sus manos estaban temblando y sudaban descontroladamente, su respiración estaba agitada, debía controlarse la entrevista era importante para su futuro.

Gracias Jack, como siempre te debo una – sonrió sin sentirlo – te parece el sábado por la noche – pregunto esperanzada que su amigo no tuviese en cuenta los nervios que su cuerpo experimentaba.

Seguro Bella, pasare por ti y saldremos a algún lugar – sonrió y se despidió de la chica, quien esperaba que aquella escena no arruinara su siguiente trabajo.

Ya se fue tu chica – la voz del detective, llamo su atención – Sam, no es mi chica, es una buena amiga – respondió el moreno llevándose el café a los labios.

Cualquier pensaría lo contrario, le das las noticias con prioridad, no es favoritismo sobre otros reporteros – su mirada fija sobre Jack le molesto.

Estas diciendo que hago esto porque quiero tener algo con ella, o estas acusándome de algo que no se – pregunto, Sam era un magnifico detective, pero tenía siempre reservas con Bella y él no se explicaba el porqué.

Estas, tan enamorado, que no te has fijado en su constante nerviosismo, la cámara temblaba en sus manos, es como si esos cuerpos no le fueran desconocidos – se acercó un poco más a Jack

Estás loco, ese trabajo de mierda te hace sospechar de todos, tiene una entrevista muy importante para su carrera, es lógico que este nerviosa y la escena que le he mostrado no es precisamente lo que hubiera querido para ella, si hubiese sabido de la entrevista en primer lugar – molesto salió a tomar un poco de aire, Sam era un sabueso, pero no tenía por qué sospechar de Bella.

El edificio era lujoso, no cabía duda de los millones que el propietaria debía poseer, respiro profundamente, aunque la escena de la morgue aún estaba en su retina, debía poner toda su atención a este trabajo de eso dependía su futuro, entro al edificio, el interior era aún más lujos todo era vidrio, los cuadros que colgaban de la pared de la recepción capto su atención era arte puro y los cuadros originales debían valer una fortuna…

Buenos días, bienvenida a Cullen Enterprise, me permite su identificación – la recepcionista con una amable sonrisa le pregunto – viene por solicitud de trabajo

Soy Isabella Swan, de la Revista Nuevo Mundo – mostro su gafete

El señor Cullen espera por usted, por favor si puede acompañarme – se dirigió al elevador, como era de suponer la oficina del Presidente de la Compañía se encontraba en el último nivel, minutos más tarde las puertas del ascensor se abrieron, no se detuvo a observar el lugar, estaba nerviosa, sus manos sudaban, apretó su puño muy pegado a su cuerpo, tomo nota de su vestido formal, estaba todo en orden

Señorita Swan – la secretaria llamo su atención, estaban frente a una enorme puerta de roble el Escudo tallado llamo su atención, pero no le prestó atención, pues las puertas fueron abiertas por la joven rubia, entró a la oficina lentamente, no sabía que era lo que le pasaba, estaba ansiosa, un frio corrió por su espina dorsal, fue consiente únicamente que la secretaria cerro las puertas a su espalda, lentamente se acercó al escritorio.

Buenos días, Señor Cullen, soy Isabella Swan de la Revista Nuevo Mundo – se presentó, esperando a que el Millonario se dignara a girar su silla.

Bienvenida Señorita Swan – la voz de aquel hombre provoco un nuevo sentimiento en ella, la silla giro lentamente, Bella quedo en Shock por segunda vez esa mañana.

Tu…..

Continuara….