NO SOY DUEÑO DE INUYASHA. PERO SI SOY DUEÑO DE MIS HISTORIAS Y NO DOY PERMISO A NADIE A UTILIZARLAS.
GRACIAS POR LOS COMENTARIOS, SON ESPECTACULARES! GRACIAS ABSOLUTAS POR SU APOYO. TODO MI CARIÑO A TODOS MIS LECTORES.
ABRAZO ENORME.
Capitulo 58
A casa era mucho decir, esto, no era su casa… Esto, era un caos.
A medida que la pareja avanzaba hacia la escalinata del palacio los ojos de Sesshomaru se llenaban de mini campamentos y asentamientos a cada lado de los frentes del palacio. Cada asentamiento con su carpa, sus habitantes y sus actividades, machos y hembras , hombres y mujeres, fogones, humo, cánticos y algunos malabaristas…
Lo había decidido…Mataría a Inuyasha.
Kagome avanzaba con la cabeza gacha, las miradas de todo el plantel femenino la estaban abrumando de tal manera que estaba segura de que si las miradas quemaran ella sería un montón de cenizas antes de llegar a la escalinata.
Sesshomaru sintiendo el aroma a feromonas asfixiante y el aura sagrada fluctuando detrás imaginó el motivo y al girar y ver los rostros enojosos de las "Damas" presentes tuvo la confirmación a sus sospechas, el Señor de la Casa arribaba acompañado de una hembra, humana, sacerdotisa y además, LA Sacerdotisa de Shikkon. Los gritos de salutación hacia él, la curiosidad y el descontento general lo alteraban cada vez más.
Otorgándole el lugar adecuado a su pareja, ralentizó su paso hasta que Kagome estuvo a su altura, para permitirle ingresar al palacio a su lado y no caminando detrás, detalle que no pasó desapercibido por ninguno de los presentes, generando murmullos y revuelo.
Jaken visiblemente alterado corrió a postrarse a los pies del Daiyoukai, sus ojos suplicantes le decían al Lord de sus intentos fallidos por detener esa locura.
La cuasi sonrisa de Inuyasha ante el rostro consternado de Sesshomaru, llevaba a los miembros del Inutachi a preocuparse por el incierto futuro del hanyou irreverente.
Pero la presencia al lado del Lord apaciguó todo lo demás, Kagome regresaba caminando junto a Sesshomaru, y era conducida de su espalda baja, por una mano con garras, que advertía a los ojos incrédulos: "Esta hembra es mía". Aunque al intentar percibir algún aroma, nada podían percibir. Extrañamente la Miko humana, no olía a nada… Vaya cosa extraña…
Inuyasha supo desde antes que a Sesshomaru le gustaba Kagome, pero NUNCA, nunca pensó que ella accedería a su acercamiento de ese modo…
Igualmente se preguntaba ¿De qué modo?, ¿Qué significaba esto?, acaso la estaba cortejando? Y ella aceptó?
-"¿Kagome?"
-"Apártate mestizo"
-"¿Qué mierda?!"
Kagome no miraba a nadie, simplemente entraba por la puerta principal del palacio de la Luna, intentando no sentirse extraña, intentando no asustarse, intentando no huir…
No lo haría, ella era fuerte, ella era una Señora, La Señora de la casa de la luna y demostraría su valía.
Ya conocía los códigos de los Inu youkai, de los demás youkai y además conocía muy bien el corazón humano.
Mirai Sesshomaru había confiado en ella, este Sesshomaru, también, por lo que de ninguna manera iba a defraudarlos, ni a sí misma.
Caminaba sin desviarse ni un milímetro, esbelta, hermosa y majestuosa, llamando la atención y la mirada de los youkai presentes. No podían olfatear su esencia pero su figura y musculosa presencia los hipnotizaba a cada paso que ella daba.
Sesshomaru mirando hacia su hermano con voz profunda y sus colmillos asomando por sus labios, al masticar las palabras dirigidas al segundo de Occidente
-"Mestizo, a mi despacho"
Los ojos dorados de Inuyasha, los violetas de Miroku, los azul verdosos de Danaka, y demás brillantes, muy abiertos y atentos observando
-"Ustedes, también"
Jaken intentaba escabullirse
-"Jaken, acompaña a Lady Kagome a mis aposentos"
-"A sus…?"
-" Jaken"
-"Hay Mi Lord, ahora mismo!"
El rostro del kappa aplastado contra el mármol del piso, y de inmediato de pie y caminando apresuradamente delante de Kagome
-"Por aquí…Sacerdotisa"
-"Jaken"
-"Miko Sama!"
En el despacho Sesshomaru se sirvió una copa de agua, revisaba papeles, rollos y escuchaba los pormenores que Danaka le adelantaba.
Los demás estaban tiesos, quietos y no articulaban palabra.
-"Muy bien Akira San"
Luego de guardar los pergaminos, el Lord caminó hasta sus ventanales y miró hacia abajo
Ahora la semi sonrisa de Inuyasha se plasmaba visiblemente en su rostro.
-"Y cómo fue que el palacio de la luna se transformó en un circo de variedades?"
-"Keh! Ese despelote de afuera es culpa tuya! Si no fueses un culo arrogante y respondieras a tus…Admiradoras de una vez, no tendrías ese desfile de hembras calientes por ti, babeando por los jardines"
Inuyasha disfrutaba mientras veía las mandíbulas de su hermano apretarse con rabia. Contenía la carcajada. Sesshomaru por su parte comenzaba a sonreir, aterrorizando a los presentes
-"Danaka"
-"Sí, Mi Lord"
-"Cuantos de los shogunes, y terratenientes esperan afuera?"
-"Casi todos Mi Lord, sólo faltan los Lores Cardinales y los Shogunes del Este"
Regresando a su escritorio, Sesshomaru se sentó con mucha gracia, tomó unos pergaminos
-"Dile a Jaken que envíe mi palabra a los Lores y terratenientes del Este para que vengan"
La mirada de todos estaba desconcertada. Sesshomaru se reclinaba e su sillón y apoyándose en sus posa-brazos, cruzaba los dedos, afinando los ojos se dirigió a Inuyasha una vez más.
-"Lo has hecho bien, mestizo, Éste Sesshomaru se complace con tu desempeño como segundo de Occidente"
Inuyasha sin entender lo seguía mirando
-"Gr-gracias…Supongo"
Todos lo observaban como a un lunático que había perdido la razón, Miroku se adelantó a preguntarle
-"Sesshomaru Sama… Es que estás agradecido por el…Curioso despliegue en el exterior?"
Sesshomaru continuaba su escrutinio de cada miembro del inutachi frente a él.
Luego de beber de su vaso de agua, suspiró y casi sin inmutarse comunicó al grupo
-"Éste Sesshomaru está cortejando la Shikkon No Miko… Dadas ciertas circunstancias le he propuesto unirse a mí y ella ha aceptado, nuestro emparejamiento se realizará la noche de la luna de primavera"
-"KEH! NO!"
-"Felicitaciones Lord Sesshomaru…"
Sango contaba con los dedos
-"E-eso será en dos noches!"
-"Hn. Al estar ya en palacio casi todos los terratenientes será todo más rápido, gracias a Inuyasha, no habrá motivos para retrasar en emparejamiento"
-"Eso no nos dará tiempo!"
-"Claro que si, Kagome Sama, espera reunirse contigo tajiya, para discutir sus cosas y planificar. Ella confía que entre las dos y algún personal de palacio lograrán prepararse con suficiencia"
-"No me refiero a eso! No nos dará tiempo de encontrar a Kagura!"
El intenso estallido salpicó a todos. La copa de cristal hecha añicos en la mano del Lord de la luna. Su sangre goteaba por la madera antigua del escritorio, pero no se daba cuenta
-"¿Cómo que KAGURA?!"
Los ojos brillando con fuego, los pergaminos y estatuillas temblando en sus anaqueles. El poderoso youki elevándose a los cielos. Miroku en el estudio, Kikyo en su habitación, Kagome en su camino al dormitorio real, sintiendo el calor quemándoles la piel.
Kagome y Jaken frente a la puerta del dormitorio de Sesshomaru se detuvieron en seco. La joven Miko inspiraba y el silencio los consumía.
Casi en un susurro la voz de la sacerdotisa
-"Sesshomaru"
El kappa sin pensarlo dos veces corrió hacia donde se encontraba su Señor
-"Jaken!"
Kagome corría detrás de él, se dirigían directamente al despacho de Sesshomaru.
Los gritos se oían desde afuera, el personal de palacio corría para todas partes intentando huir del youki opresor.
-"Y cuándo demonios pensaban decírmelo! DANAKA!?"
-"Mi Lord, Estamos buscando por todos los rincones y no hemos hallado nada aún. "
Su mirada se clavaba en Inuyasha pero de todos modos se llamó a silencio y soportó los gritos de su Señor
Sesshomaru conocía demasiado a su mano derecha. Y también a su medio hermano. Supo de inmediato quién era el responsable de callar semejante NOVEDAD.
Pues sí, Inuyasha les había dicho que no le dijeran nada a Sesshomaru hasta que supieran algo más. Eran todas suposiciones de todos modos y no creyó demasiado importante, ya que habían buscado por todo el palacio sin encontrar nada. Seguramente ya no estaría allí.
Kikyo y Miroku habían puesto otros encantos y sutras por todo el palacio, para contrarrestar los de Kagura, las paredes de mármol brillantes parecían una vidriera de ofertas callejera.
A medida que lo conducían a Sesshomaru por los corredores mostrándole los encantamientos y relatándole los sucesos, Jaken se topó con ellos.
-Sesshomaru Samaaaaa!"
Tomando al sapo de sus ropas lo comenzó a zamarrear
-"Dónde está Kagome?!"
Los ojos rojos del Señor del Oeste
-"K-Kag…Quién?"
El kappa colgaba del cuello ahora, el iracundo Señor del Oeste estaba a punto de asesinarlo, Kagome llegaba corriendo casi sin aliento
-"Aquí estoy, Mi Lord"
Jadeando y asustada por el despliegue de youki, gritos, miradas extrañas y violencia por parte de su "Novio".
Jaken caía al piso abruptamente, el gruñido y los colmillos saliendo de por las líneas de los labios.
-"Busquen de inmediato el PROBLEMA y erradíquenlo ya!"
-"Sí, Mi Lord, enseguida!"
-"Hai Sesshomaru Sama"
-"Si, de inmediato"
Y se desparramaron en todas direcciones, a excepción de los humanos del inutachi que se tomaron las cosas con tranquilidad y caminaban a su paso calmo y deliberaban dónde buscar OTRA VEZ.
-"¿Cuál es el PROBLEMA?"
Entre tanto Kagome observaba a Sesshomaru y no lograba identificar el motivo de su ira o la naturaleza del PROBLEMA Y era claro que él, ni pensaba decirle.
-"Ven Miko"
Recién llegados a palacio y silencios, preguntas sin respuestas…Miko… Harta y cansada la joven espetó su respuesta
-"Camino detrás suyo Lord YOUKAI"
Se sintió como una puñalada en su espalda. Sesshomaru aún con los ojos rojos se volvió a verla.
-"Miko…"
-"No me vengas con amenazas, estoy cansada, preocupada por todo este lío que no entiendo, Tengo que ocultar mi esencia a todos, no debo tratarte cariñosamente, Jaken que me deja sola, tengo que correr por detrás, llegamos al palacio y afuera hay un festival con un centenar de mujeres y hembras youkai que me miran con ojos asesinos y encima de todo eso me llamas MIKO?... Mátame si deseas, pero primero quiero darme un baño y descansar, el bebé me pide alimentos y todo esto me está causando nauseas"
Y ante semejante declaración, Shimaru retrocedió con las orejas bajas y Sesshomaru sintió estas otras palabras como una puñalada, pero en el pecho.
Tenía razón en todo su argumento. En sus ojos bicolor se veía la mirada de disculpa del Lord y su bestia.
Sin esperar un solo minuto más, el Daiyoukai tomó en sus brazos a Kagome y se dirigió directamente a sus aposentos.
A medida que se acercaban al dormitorio, el macho Inu le susurraba palabras de consuelo
-"Este Sesshomaru te aseará, te acicalará y te atenderá y a su cachorro, Miko"
Ella sentía los besos y la lengua de su pareja pasear por su frente. A pesar de su rostro inexpresivo y su caminar altanero y frío, ella sentía consuelo en sus palabras.
El sonido gutural de su voz adormecía a la joven agotada
-"Yo te cuidaré Saiai"
-"Hn."
Frente a su recámara real Sesshomaru pronunció las palabras "secretas" y las enormes puertas talladas se abrieron de par en par.
Sus ojos se llenaron de velas, pétalos secos por todo el piso, una bandeja con un pequeño odre que al parecer contendría sake , algunas frutas, y… bandejas con platos conteniendo restos de alimentos, huesos y cáscaras, como si alguien hubiese estado viviendo en su habitación en su ausencia
Continuando su camino hacia la gran cama, una vez dentro se quedó helado, tieso en su lugar, aún sosteniendo a su esposa en sus brazos mientras ambos contemplaban a la bella y muy desnuda mujer dormida en su cama.
-"¿Qué significa esto…Sesshomaru?"
-"Yo…"
Al escuchar los murmullos de la pareja, Kagura fue entreabriendo los ojos y sonrió al ver al Lord de pie frente a ella
-"Bienvenido a casa Sesshomaru"
Pero al notar a la mujer en brazos de su ex amor, Kagura enfureció
-"Qué mierda hace la puta de Inuyasha en tus brazos?"
