CAPITULO 1
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400 días.
Sé lo que están pensando. ¿Qué hace este sujeto escabulléndose de su casa antes de que los rayos del sol se asomen si quiera?
Voy a presenciar uno de los espectáculos más maravillosos sobre la faz de la tierra; el amanecer.
Estacione cerca del negocio familiar, "Diversión buena y limpia", rentamos kayaks, el nombre lo puso mi madre. Tengo unas cuantas horas antes de tener que volver y trabajar. Camine por la arena descalzo, justo como me gusta, la sensación de la arena rodeando mis pies, siempre ha sido inigualable. Al llegar a la orilla, no perdí el tiempo, sujete mi tabla a mi tobillo y braceé con calma, pero no demasiado lento, solo lo suficiente para alejarme. Cuando me sentía suficientemente internado en esta agua salada que amo, me tendí encima de mi fiel amiga y permanecí acostado hasta que la luz empezó a filtrarse. Los rayos rosas y naranjas empezaron a colorearlo todo lentamente. Sublime… simplemente, perfecto.
Por más que me esfuerzo para buscar las palabras precisas, no puedo... no podía jamás explicar la sensación tan maravillosa y electrizante que me invade al sentir este líquido incoloro y a la vez cristalino sobre mi piel, es lo mejor. Esto es vida… la vida…
Dejo de pensar cuando veo una ola enorme acercarse, braceo rápido, tengo que alcanzarla, cuando lo logro, me pongo de pie y… una explosión de emociones recorre todo mi cuerpo… inhalo con fuerza y siento como ese oxigeno anhelado por mis pulmones lo permea todo. Amo esto… lo amo con todas mis fuerzas.
Me gustaría estar aquí siempre, congelar el tiempo y continuar horas enteras, minutos, segundos… con esta emoción, con esta imagen de mí mismo. No quiero perderme de la sensación tan gratificante que me envuelve y hace que olvide todo lo que no está del todo bien en mi vida. Pero es imposible…
Suspiro intentando soltar todos los pensamientos lúgubres que pueden invadirme en cualquier momento. Demasiado tarde. Aquí están ya. No logro sacarme de la cabeza las palabras de esa chica. El dolor que debió o debe padecer aún. Perder a quien amas… Simplemente es inimaginable para mi.
Respiro con fuerza una vez más y levanto los brazos drenando todas esas ideas. Lo consigo 5 segundos más.
Nado con calma de regreso y debido a las ideas recientes, también con un poco de apatía hasta la orilla. Al llegar a la arena, camino a paso confiado hasta mi WV. Debo tomar esas pastillas…
¿Cómo escapar de esto si todo lo que hago, todo lo que me rodea es un recordatorio?
Ni hablar, las tomo con pesar y me apresuro para recibir a esa gran familia de la que me hablo Karin, rememorar a mi hermana siempre me saca una sonrisa. Melancólica, pero sonrisa al fin y al cabo. Me saco el traje de baño rápidamente y me coloco una camisa y unas bermudas secas junto con mis sandalias.
Miro un poco alrededor y contemplo todo una vez más. Aunque la niebla de la mañana y el olor a sal marina espesan el aire y hace frío, la playa se ha empezado a adornar con algunas personas iniciando el día. De pronto reparo en algo. "El lugar secreto" está abierto, es la cafetería de unos amigos. No veo a ninguno de los chicos en la playa, por lo que me imagino que deben estar dentro.
Veo de nuevo la tienda de Kayaks y aun no aparece nadie, por lo que en instante decido que puedo ir a saludar antes de encaminarme al trabajo, tal vez podría planear una sesión con alguno de ellos esta semana.
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