¡Hola! Aquí está el capítulo Treinta y Dos =) Gracias por sus comentarios en el capítulo anterior! Espero que les guste el nuevo capítulo y antes de que se me olvide, me hice una nueva cuenta de wattpad, la hice por si perdía esta y para publicar mas historias y adaptaciones.

Lugares donde publico mis historias

En wattpad, mis dos cuentas son

LupitaUchihaHaruno96 en esta están todas mis historias y adaptaciones.

LupitaMorenoA96 en esta sólo está un pequeño oneshot, muy pronto publicaré más historias en esta

En fanfices

diamante uchiha

Cómo me tardé con el capítulo, hoy subiré uno más como disculpa.

Bueno, ahora disfruten de la lectura

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Capítulo Treinta y Dos

Era otro día más para Sakura, se encontraba en el jardín de la mansión sembrando más flores de cualquier tipo y color. Junto con ella estaba su hija Sarada recostada en una manta que la pelirrosa había puesto en el verde pasto para que su hija no se ensuciara. Como hoy no tenía clases de repostería, se dispuso a sembrar mas flores en el jardín. La pelirrosa estaba sembrando rosas de color blancas y rojas. A Sakura le encantaban las flores, ya sean exóticas o las ya conocidas y le encantaba sembrarlas, como solía hacer con su difunta madre Mebuki.

Su madre le había enseñado a sembrar flores y cuidarlas.

El pensar en su mamá la entristecía, pues ella junto con su padre habían muerto dejándola a ella totalmente sola, pero luego recordaba que tenía a su hermano Sasori, a ese hermano que había perdido y ahora había encontrado.

*Te extraño, mamá... Sasori y yo te extrañamos…*Pensaba Sakura mientras contemplaba una rosa blanca.

-Sakura...-La pelirrosa escuchó la voz de su cuñada Shion.

-Shion. Hola...-Dijo Sakura mientras se paraba de donde estaba agachada junto con su hija en brazos.

-¡Necesito de tu ayuda!-Dijo Shion.

-¿Qué sucede?-Preguntó Sakura.

Shion se acercó a la chica pelirrosa, el semblante de Shion era de preocupación y miedo.

-Estoy embarazada...-Soltó Shion.

-¿Qué?-Murmuró Sakura.

-¡Ay, Sakura! Tengo miedo.-

-Tranquila, eso es una buena noticia, deberías estar feliz.-

-Si lo estoy, pero tengo miedo por como se tome la noticia Sasori. ¿Y si me pide que aborte? Sakura tengo miedo.-Shion comenzó a llorar.

-No, tranquila, no llores que te puede hacer mal...-Decía Sakura.-¿De cuanto estás?-

-D-De dos se-manas-Contestó sollozando la rubia.

-No te preocupes, yo te apoyaré en todo lo que pueda. Pero Sasori tiene que saberlo.-

-Pero no sé como decirle que estoy embarazada.-

-No te preocupes yo te ayudaré.-Dijo Sakura a su cuñada.

-Gracias, Sakura-chan.-Dijo Shion, mientras se secaba las lágrimas. Shion se sentía ahora mejor, pues con la ayuda de Sakura podría decirle a Sasori que estaba esperando un bebé de los dos.

Sólo esperaba que Sasori no se enojara con ella y le pidiera que abortara.

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Konan se encontraba en su departamento acompañada por Nagato, quien había ido a verla cuando había recibido la llamada de la pelimorada. Cuando llegó al departamento de Konan, entró con la llave extra que le había dado Konan a él y cuando entro al hogar de la chica, la vio triste y supuso que fue por culpa de Pain. Konan le había contado todo sobre la visita de Pain y que le había dicho que la amaba. Konan le había pedido un consejo a Nagato sobre lo ocurrido.

-Si lo sigues amando, dale una oportunidad de que te recupere, pero no se lo pongas fácil... Pero si ya no lo amas, entonces dile que te deje en paz y que no quieres saber nada de él.-

Konan escuchó atentamente a su amigo. Ella seguía amando a Pain. Así que le daría una última oportunidad, pero no se lo dejaría tan fácil. No. Pain tenía que sufrir.

-Gracias, Nagato.-Dijo Konan a Nagato.

-Bueno, te dejo y cuídate.-Konan acompañó a Nagato hacia la entrada y cuando abrió la puerta vio que afuera estaba Pain, el pelinaranja veía molesto a Nagato y el pelirrojo sonrió, pues sabía que su amigo estaba celoso y molesto de que él estuviera junto a Konan.-Nos vemos-Nagato besó a Konan en la mejilla.

Pain al ver que Nagato había besado a Konan, se molestó aun más. Tenía ganas de matar a Nagato. El pelirrojo sonrió pues había logrado poner más celoso a Pain.

-A-Adiós.-Respondió Konan sonrojada por el beso de Nagato y después de eso Nagato se marchó.-Hola, Pain...-

-Hola, Konan... Te traje esto.-Pain le dio una bolsa de regalo a la pelimorada.

-Gracias.-Dijo Konan.

-Puedes abrirlo, si quieres.-Dijo Pain y Konan abrió la bolsa y de ahí sacó un mameluco amarillo con dibujos de perritos y osos.

-Pain, es lindo, gracias.-Dijo Konan

-De nada.-Respondió Pain.-Konan, lo que ayer te dije, que te amo. Es cierto, te amo y espero que me des una oportunidad.-

-Pain, me hiciste daño. Rompiste mi corazón, me dijiste que amabas a esa chica y eso me dolió y mucho...-

-Lo siento, Konan. Por eso dame una oportunidad de enmendar mis errores y de demostrarte lo mucho que te amo.-

-No sé que decirte...-

-Por favor, Konan.-

-Yo... Hablaremos de eso otro día.-Dijo Konan y le serró la puerta a Pain en la cara.

-Rayos...-Se quejó Pain. De nuevo le pasó lo mismo, Konan le serró la puerta en las narices. -¿Y ahora que hago?-Dijo Pain. Entonces se acordó de Sakura. Decidió que iría a su mansión a pedirle un consejo.

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Ya era de noche, en la mansión de los hermanos Haruno, se encontraban Sasori y su hermana Sakura cenando junto con Shion y Naruto. Todos comían y de vez en cuando hablaban. Shion no podía cenar, pues estaba nerviosa ya que Sakura la había animado a decirle a Sasori sobre su embarazo. Tenía miedo de que su amado reaccionara mal ante la noticia.

-Está deliciosa la cena. Incluso hicieron mis platillos favoritos.-Decía Sasori.

Sakura y Shion habían hecho los platillos preferidos de Sasori para tenerlo contento y manteniera esa alegría en el momento en que Shion le diera la noticia.

-Que bueno que te guste, amor.-Dijo Shion.

Sakura le hizo señas a Shion para que ya le dijera la noticia a Sasori.

-Sasori, te tengo que decir algo importante.-Sasori puso atención a su novia.-Bu-Bueno, verás, meacabo de enterar de algo...-

-¿Y qué es?-Preguntó Sasori.

-Y-Yo... Yo estoy... Embarazada.-Dijo al fin Shion.

Estoy embarazada.

Embarazada.

Esas palabras se repetían en la cabeza de Sasori. De repente el pelirrojo comenzó a ponerse pálido. ¿Qué era lo que le había dicho su novia?

-¿Sasori?-Murmuró Shion al verlo callado y totalmente pálido. Como respuesta, Shion vio como su novio caía al suelo desmayado.-¡Sasori!-

-¡Hermano!-Dijo Sakura al ver caer a su hermano. Shion, Sakura y Naruto se levantaron de donde estaban sentados, Naruto levantó a Sasori.

-Oye, Sasori..-Naruto le daba de palmadas en las mejillas al pelirrojo para que despertara.

Sasori comenzó a reaccionar.

-Ay, ¿Qué me pasó?...-Murmuró Sasori.-¡Shion! ¿Qué fue lo qué dijiste? ¿Estas embarazada?-

Shion solo asintió.

-Dios, eso es una gran noticia.-Dijo Sasori y abrazó a su novia.

-¿No estás molesto?-

-Por supuesto que no. Al contrario, estoy feliz.-

Shion solo sonrió y besó a su novio. Al fin le había dicho la noticia a Sasori. Se sentía feliz, pues el pelirrojo no se molestó con ella.

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Al otro día Pain había regresado al departamento de Konan, dispuesto a acercarse a Konan como le había aconsejado Sakura.

-Creo que debes llevarle regalos, ramos de flores y demostrarle cuanto la amas. Acercarte a ella poco a poco para que ella te deje entrar n su vida de nuevo.-

Pain estaba en el departamento de Konan, haciendo labores domésticos, al principio Konan nolo dejaba entrar y ayudarla, pero luego de hablar con ella, la convenció. Konan miraba a Pain lavar los platos. Le daba un poco de lastima hacer sufrir al pelinaranja, pero tenía que hacerlo ya que él la había hecho sufrir mucho.

-¿Necesitas que te ayude?-Preguntó Konan.

-Ya casi termino.-Respondió Pain.-lListo, terminé.-

-Gracias Pain.-

-De nada.-

Hubo un silencio entre los dos. Un silencio que no era incómodo. De repente l reloj que Konan tenía colgado en la pared sonó, marcando las 7:30 PM. Pain supo que ya era hora de irse a casa.

-Me tengo que ir, Konan. Mañana vendré otra vez a ayudarte.-

Konan lo acompañó a la puerta de entrada. Pain se despidió de Konan con un beso cerca de los labios. Ese casi beso hizo sonrojar a Konan.

-Nos vemos.-Susurró Pain en el oído de Konan.

-A-Adiós.-Dijo la pelimorada y después cerró la puerta. El corazón le latía como loco a Konan. Posó sus dedos en sus labios, tuvo suerte de resistirse ante ese mino beso, de lo contrario ella y Pain estarían haciendo otras cosas.

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Al otro día, en la mansión de los Uchihas, estaban Mikoto junto con su esposo e hijos desayunando. Los tres hombre, como siempre hablaban de negocios. y de la pronta boda de Itachi con Izumi.

-Ya sólo faltan tres días para la boda.-Dijo Mikoto.

-Si... Estoy orgulloso de ti hijo.-Dijo Fugaku a su hijo mayor.

-Pero no olviden de que también se acerca el comienzo de mi plan para que mi otouto recupere a Sakura-chan.

-Cierto... Sasuke, no eches a perder esta oportunidad.-Le dijo Mikoto a su segundo hijo.

-Lo sé mamá.-Respondió Sasuke.

Solo faltaban tres días para que la boda de Itachi se celebrara y con ella entrara en marcha el plan de Itachi.

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Y aquí está el nuevo capítulo. Tal vez no les guste como quedó, pero es que se me estaban acabando las ideas, pero el siguiente capitulo creo que si les gustará.