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Capítulo Cuarenta y Cuatro
El ser modelo era su más grande sueño, desde niña soñaba con ser una modelo reconocida mundialmente, quería tener todo al ser modelo, quería tener dinero, una gran casa lujosa, joyas caras, ropa de marca y diseñada por diseñadores famosos, autos.
Karin quería tener todo aquello que siempre soñó desde pequeña.
Y cuando cumplió los dieciseises años, pidió a sus padres que la enviaran a una escuela especial para aprender todo sobre modelaje, aprendió de todo en esa institución, aprendió como caminar en las pasarelas y en la prensa, el pararse derecho, comportarse como toda una mujer con clase, el vestirse con ropa elegante y lo más esencial. Aprendió a seducir a hombres. Uno de sus profesores le enseñó en unas clases especiales el cómo utilizar su cuerpo a su favor y vaya que aprendió muy bien. Ese profesor la condujo al mundo del exquisito placer, además gracias a esas clases exclusivas ella aprendió a seducir a los hombres.
A raíz de su experiencia con su profesor, ella se volvió una adicta al sexo. Mientras aprendía todo sobre ser modelo, apareció una oportunidad para comenzar con su más grande sueño, a los pocos días comenzó a trabajar para una línea de lencería, para asegurar su carrera se volvió la amante del director para la cual comenzó a trabajar.
Rápidamente se volvió famosa, se convirtió en la modelo estrella de la línea para la que trabajaba, rápidamente comenzó a tener lo que siempre había soñado, a cada rato salían fotos de ella en revistas, en los periódicos solían poner reseñas de ella y de sus acompañantes, su fama creció y la hizo olvidarse de sus padres, como no quería saber de ellos y que se metieran en sus asuntos, los dejó de lado. Y nunca más volvió a tener contacto con sus padres. Desde que su sueño se había cumplido se ocupó en hacer que la prensa hablaran de ella, de su trabajo como modelo hasta de su vida amorosa.
Con frecuencia iba a fiestas de beneficencia o cualquier tipo de fiestas en las que sabía que habría cámaras y reporteros además aprovechaba para cazar hombres que tenían millones como para hacerla feliz y darle las cosas que se merecía. Sus relaciones no tenían importancia para ella, más que obtener beneficio para ella. Los hombres no tenían importancia para la pelirroja.
Hasta que su mirada lo vio a él. Al hombre perfecto.
Sasuke Uchiha.
Desde la primera vez que lo vio supo que ese hombre de mirada fría, porte elegante y actitud misteriosa era para ella. Karin rápidamente hizo una investigación sobre ese hombre, se enteró que era el segundo hijo del matrimonio Uchiha y que era el heredero junto con su hermano mayor de las empresas Uchiha y lo mejor la hizo gritar, él se encontraba soltero. Así que comenzó su plan.
Comenzó a frecuentar los lugares y a ir a las fiestas donde sabía que Sasuke Uchiha estaría, comenzó a acercarse poco a poco al misterioso Sasuke hasta que al fin lo tuvo donde quería, luego de varios meses logró hacer que todos hablaran de ella y su nueva vida amorosa con Sasuke Uchiha. Como Karin sabía que había logrado atraer a un hombre importante y que además podía darle una gran vida, comenzó a idear un nuevo plan, casarse con Sasuke.
Karin estaba tan convencida de que no tendría problema con lograr atar a Sasuke a ella, creía que por la buena relación sexual no habría problemas, pensaba que todo estaba asegurado. Hasta que apareció ella.
Sakura Haruno.
Una estúpida y simple mujer que no tenía clase, sin ninguna gracia. Esa rata pelirrosa -como ella la llamaba- atrajo por completo la atención de su Sasukito. Al momento de que esa tonta se metió en su camino, Sasuke rompió la buena relación que tenía con ella. Su odio hacia esa estúpida creció tanto por ver como Sasuke hablaba de esa tonta, como la alababa y la hacía parecer que era alguien importante.
Entonces, para deshacerse de esa rosada, hizo creer a Sasuke que no había problema que él la dejara, le lavó el cerebro al Uchiha diciéndole que quedarían como amigos y que quería conocer a la chica que había cautivado a Sasuke. Convenció a Sakura de que quería ser su amiga, no fue tan difícil pues la chica era tan ingenua que aceptó su supuesta amistad.
Y entonces siguió con su plan hasta lograr separar a Sasuke y a Sakura. El día en que Sasuke se deshizo de la pelirrosada se sintió tan feliz, ya nada podría meterse entre ella y Sasuke. Convenció a Sasuke de casarse con ella y cuando eso sucedió, se sintió tan feliz. Pero su burbuja de felicidad no duró mucho. Saskuke se enteró de lo que ella hizo y la desechó, se deshizo de ella de una forma tan humillante y después de eso perdió su trabajo, su fama como modelo se evaporó, ya no tenía nada. Era tan humillante para ella.
Y culpó a la rata pelirrosada, toda la culpa de que ella estuviera siendo humillada era de esa asquerosa, intentó recuperar a Sasuke y la vida que ella tenía pero fue en vano. Y cuando fue a París y Sasuke le dijo todas aquellas palabras, se sintió más humillada, en ella creció un odio hacia Sasuke, un odio profundo. Ya no quería recuperarlo, quería matarlo. Hacerlo sufrir.
Y que mejor forma de hacerlo matando su felicidad y lo que más amaba. A su bastarda.
-Prepárate, Sasuke, tu felicidad acabará muy pronto.-Susurraba Karin al ver a la bebé pelinegra. Karin acarició una de las mejillas de la niña.-Me encargaré de que sufras al ver a tú hija sin vida.-
Haría sufrir a Sasuke Uchiha.
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En la guarida de Orochimaru…
Tayuya se encontraba encerrada en una de las habitaciones de ese edificio. Estaba tan desesperada de buscar la forma de salir de ahí. Quería irse de ese lugar.
-Por favor, Dios, que alguien nos saque de este lugar.-Susurraba Tayuya que se encontraba en un rincón de la habitación donde estaba. Tenía miedo de lo que fuera a pasarle a ella, a Hinata y a la pequeña Sarada. Tayuya pedía que Hinata y la bebé estuvieran bien, no soportaría si se enteraba de que algo malo les pasó a ellas.
Por ahora agradecía que nada malo le sucedía a ella, pero por si acaso tenía un pedazo de vidrio que había encontrado en el lugar donde la tenían encerrada. Sabía que era riesgoso que ella hiciera algo al enemigo, pero no iba a permitir que nadie la lastimara, ni a ella ni a Hinata y a Sarada.
Pero muy pronto ella junto con Hinata y Sarada serían salvadas.
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Con Sasuke y Naruto…
El pelinegro y su, de nuevo, amigo se encontraban en las afueras de Konoha, desde el día en que Sasuke llamó a la serpiente rastrera de Orochimru no habían regresado a la vivienda Haruno, nadie sabía los planes de Sasuke y Naruto, sólo Itachi y Sasori sabían de la estúpida-como Itachi la llamó- y arriesgada idea de Sasuke y Naruto.
Sasuke y Naruto se encontraban con el auto del Uchiha, en espera del "equipo especial" que ambos chicos reunieron para llevar a cabo el rescate. Mientras esperaban a el equipo especial, Uchiha y Uzumaki se encontraban disfrutando de un bocado antes de entrar en acción. Sasuke tenía un cigarrillo y Naruto comía ramen.
-¿Podrías dejar de comer como cerdo?-Dijo Sasuke, mirando con un deje de asco la manera en que el rubio comía.-
-¿Y tu podrías dejar de sacar humo como chimenea?-Respondió Naruto y Sasuke solo bufó molesto.
-No puedo…-Respondió Sasuke.-Lo necesito, ya sabes, para calmar los nervios.-
-Cuando estabas con Sakura-chan habías dejado ese hábito.-Dijo Naruto dejando de comer su preciado ramen por un momento.-Incluso te habías ablandado un poco.-
Hubo un momento de silencio entre los dos amigos.
-Sakura logró cambiar cosas en mí.-Sasuke suspiró y miró el cielo, mientras pensaba en su amada pelirrosa.-Pero luego tuve que arruinar lo más lindo que me pudo pasar al desconfiar en ella.-Dijo Sasuke y Naruto lo miró mientras el pelinegro hablaba.-De todas las mujeres que conocí, ella fue la única en que no se interesó en mi por el dinero y prestigio que tiene mi apellido…-Un suspiro se oyó de Sasuke.-Sakura se coló en mi ser, no podía dejar de pensar en ella…-Sasuke dejó de hablar para tomar aire y seguir con su discurso.-Cuando Karin me dijo todas esas mentiras, me cegué por completo de solo pensar que ella y tú…-Sasuke miró a su amigo.-No debí dudar, Sakura y tú fueron víctimas de todo lo que Karin causó.-
-Todos fuimos víctimas de Karin.-Dijo Naruto.-Ella destruyó las vidas y sueños de todos.-Naruto dejó escapar un suspiro.
Estuvieron en silencio, sus miradas estaban perdidas en el cielo, el sol comenzaba a ocultarse entre las montañas, Sasuke miró la hora en su reloj de mano, eran las 4:55, parecía que la ayuda estaba retrasándose hasta que notaron como unas camionetas 4x4 de color negro se acercaban a ellos. Las dos camionetas se estacionaron y de ellas salieron unos hombres.
-Tardaron.-Murmuró Sasuke.
-Estábamos ocupados en subir el armamento que utilizaremos.-Dijo un hombre de cabello negro atado. Su mirada era perezosa.-… Y Choji tenía hambre.-
-Tenía que comer algo antes de entrar en acción, Shikamaru.-Dijo el sujeto llamado Choji, su cuerpo era robusto pero se veía que era fuerte.
-Me alegra volver a reunirme con ustedes chicos.-Dijo un castaño.
-Cuanto tiempo, Kiba.-Saludó Naruto.
-Hola, pene pequeño…-Dijo un hombre de tez pálida y cabellera y ojos negros.
-¡Aaah, Sai! Maldito, deja de molestarme con eso.-Gritó Naruto al hombre de nombre Sai.
-Bien, basta de tonterías y dinos ¿A quién vamos a exterminar?-Preguntó Shikamaru restándole importancia a la pelea de Naruto y Sai.
-Orochimaru.-Respondió Sasuke.
Shikamaru puso su rostro serio, sabía de Orochimaru, era un enemigo de Sasuke, así que supuso que era muy serio el que se hayan reunido todos después de tanto tiempo de no verse cuando dejaron su entrenamiento militar. Todos ellos se conocían por haber estado en una academia militar, algunos habían estado en esa academia porque querían dedicarse a esa labor, otros como Sasuke solo estuvieron ahí porque al ser hijo de un empresario debía aprender a defenderse en caso de ser secuestrado y además le servía para ser una persona de carácter serio y frío en los negocios. Durante su tiempo en la academia militar ellos habían sido amigos de combate y se llevaban bien porque sus familias se conocían.
-Orochimaru secuestró a mi hija, a la hija hija mayor de Hyuga y la novia del dobe.-Explicó Sasuke.-Me reuniré con Orochimaru pero puede que tenga una trampa para poder matarme en el momento en que nos reunamos.-
-¿Sabes donde se van a reunir?
-Hay un edificio abandonado a diez minutos de aquí. Ahí es donde nos veremos.-Respondió Sasuke.
-Entonces, debemos ir de inmediato.-Dijo Shikamaru.-Tengo una idea para poder vencerlo.-
-¿Y cual es esa idea?-Preguntó Kiba.
-Lo sabrás cuando lleguemos ahí…-Respondió Shikamaru a Kiba.-Créanme, esto será divertido.-Dijo Shikamaru para luego sonreír divertido y subir a las camionetas junto con los demás.
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En la guarida de Orochimaru…
Toneri se encontraba en uno de las habitaciones junto con Orochimaru, estaban en una reunión muy importante, Orochimaru hablaba sobre su plan cuando se reuniera con Sasuke Uchiha, cuando Sasuke le cediera la documentación de la empresa, unos tiradores serían quien acabarían con Sasuke. Mientras que eso ocurriera Orochimaru y los demás escaparían. Después verían como terminar con la mocosa de Sasuke o tal vez la dejaría con vida y "cuidar" de la niña.
-Cuando Sasuke esté muerto, quiero que quemen su cuerpo y se deshagan de sus restos…-Dijo Orochimaru.-No quiero que quede nada de él o que me incrimine.-
-Si, señor.-Respondieron los seguidores de Orochimaru.
-Bien, ahora vayan a tomar sus puesto, en menos de diez minutos Sasuke y yo nos veremos las caras.-
Los matones de Orochimaru asintieron y se fueron a tomar sus lugares. Solo quedaron Toneri, Orochimaru y Karin.
-Querida, Ve a prepararte, en un rato nos veremos.-Dijo Orochimaru a la pelirroja.
-No olvides nuestro acuerdo.-Dijo Karin y salió de la habitación.
-Después de esto, nos iremos por diferentes lugares… Al fin obtuviste lo que querías, Toneri.-Dijo Orochimaru.-Pero si me entero de que abriste la boca, yo personalmente iré por ti y te mataré.-
-Hmp.-Murmuró Toneri.-Vas a perder…-
-¿Qué te hace pensar eso?-Preguntó Orochimaru.
-Porque yo mismo lo sé.-Murmuró Toneri y salió de ahí dejando a Orochimaru.
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Toneri caminaba por los pasillos del edificio, sus pensamientos eran sobre Hinata Hyuga.
Recordó la mirada de miedo que le había dirigido cuando la vio después de que estuvieron juntos, él le transmitía miedo a la chica ¿Por qué no podía ver amor en él? ¿Por qué tenía que verlo como un monstruo y no como alguien que está enamorado de ella?
Porque había hecho las cosas mal desde el inicio. Porque por sus estúpidos arranques de celos la golpeaba cuando él creía que ella hablaba con otro hombre, porque era muy posesivo con ella que hasta le restringía el no hablar hasta con su primo Neji. Que estúpido, ahora se daba cuenta de todo lo malo que hizo. Quería obligarla a que estuviera con él, obligarla a amarlo a él y sólo a él.
*Demente, estúpido*Pensó Toneri.
Él no podía obligarla a amarlo, el amor se gana con muestras de cariño y no con golpes y amenazas, el amor no es obligar a alguien a estar con él. No. No el amor no era nada de eso. Y hasta ahora es que se daba cuenta de su peor error. Lágrimas salían de sus ojos al ver sus errores.
Hinata no se merecía estar al lado de alguien como él, ella se merecía alguien mejor, alguien que la ame, la deje ser libre, que la proteja y que no fuera un maldito obsesivo con ella. Y él no er el indicado. Por vez primera se daba cuenta de que él no era el correcto para estar con tan hermosa mujer. No se la merecía.
Entonces, por primera vez haría lo correcto. Haría lo que debió hacer hace mucho y no hizo y quiso escuchar cuando miraba a Hinata.
La dejaría libre.
Con decisión se encaminó a la habitación donde estaba Hinata para hacer lo que tenía que hacer desde hace mucho. Pero de repente se detuvo al escuchar explosiones y los gritos de los matones de Orochimaru. Un grupo de hombres corrió en por el pasillo donde él estaba, se les veía serios.
-¿Qué ocurre?-Preguntó Toneri a uno de los hombres.
-Nos están atacando, debe salir de aquí, señor.-Respondió el hombre armado y siguió corriendo dejando a Toneri.
El Otsutsuki al escuchar la respuesta de aquel hombre corrió a la habitación de Hinata, tenía que sacarla de ese lugar ¡Pero ya! Llegó a la habitación y abrió de golpe la puerta, Hinata lo vio al entrar.
-¿Qué ocurre?-Preguntó Hinata.
-Corres peligro.-Respondió Toneri y tomó a Hinata del hombro y salió con ella de la habitación.
-¿Qué pasa?-Volvió a preguntar Hinata.
-Están…-Toneri fue callado por una explosión.-Debemos marcharnos.-
Hinata asintió pues aquel estallido le dijo lo que estaba pasando.
-Espera…-Dijo Hinata.-¿Y Tayuya y Sarada? Debemos sacarlas también.
-No hay tiempo.-
No me iré sin ellas.-Gritó Hinata, Toneri vio la mirada decidida de Hinata y solo suspiró y corrió junto con Hinata al lugar donde se encontraba la otra chica. Llegaron casi tumbando la puerta y Tayuya se sorprendió al ver a Hinata.
-¡Hinata!-Dijo la pelirroja.
-Tenemos que irnos.-Dijo Hinata.-¿Y Sarada?
-Me separaron de ella.-Respondió Tayuya con temor.
-Debemos encontrarla.-Dijo Toneri para mrcharse con las dos chicas.
Tenían que encontrar a la bebé y salir de ese lugar antes de que los mataran.
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Y luego de medio siglo aparezco, lo siento, dije que no tardaría, pero ahora estoy estudiando y otra tragedia me pasó, murió mi madrina de bautizo y me deprimí y más aparte los estudios me tienen trabajando. Espero tener todavía lectoras.
Bueno, espero sus comentaruios.
¡Muchas gracias a todas y todos los que me dejaron sus comentarios en el anterior capítulo!