Segunda parte del two shot
Hoola! Ya que Neko-Koneko-Kuroneko, mi queridísima gemela de otra vida y hermana del alma Javiera Soto (que estuvo molestandome, llemandome y armandome campaña en el face con unas amigas) mi best friend Lucía Sallette, mi gran amiga Jazmín, y Andrea que no paro un mísero segundo hasta que les dije que me ponía a hacer la conti de mandarme mensajes por face. He hecho esta sexy continuación, esta vez tendrá narraciones de parte de ambos. Advertencia lemon fuerte al mejor estilo youkai jejejeje que perver soy jajajaja bue disfrutenlo! Por cierto vieron el cap 5 de la nueva te porada? Waaaa Tomoe se le re insinuó a Nanami-chan y se le ve que quería hacerle algo bien "malo" jijiji. Bueno ahora sí los dejo tranquilos a leer!
Nanami POV
Despues de llegar a casa Tomoe actuó como si nada hubiera pasado, creo que me estaba esquivando, aún así no tengo el valor para ir a buscarlo me da vergüenza. No lo entiendo, luego de esos besos tan apasionados, estoy segura de que si Onikiri y Kotetsu no hubieran aparecido el no se hubiera detenido – sonrojada nivel tomate – ¡El quería llegar a más! Me dijo que esto no había hecho más que empezar pero parece que lo ha olvidado, ¿Qué fue todo eso? No logro entenderlo, siempre me ha dicho que no le intereso de ese modo, por qué entonces viene y me besa de esa forma, me da mucha vergüenza porque en el fondo me gustó demasiado lo brusco que fue ahhh ¿Qué fue eso? ¿Fue instinto? ¿Un capricho? ¿Qué fue?
Mientras estaba perdida en mis cavilaciones, note un sonido algo irritante, que parecía no querer detenerse, abrí los ojos y noté que era el telefono, me lebanté de donde estaba cómodamente recostada y fui a contestarlo con un animo en creciente depresión.
- ¡Nanami-chan! - saludó efusiva Ami
- Hola Ami-chan - trate de sonar lo más normal posible, no quería preocuparla
- ¡¿Quieres decirle de una vez Ami?! - sono desde fuera la impaciente voz de Kei, sin quererlo se me salió una sonrisa - eres muy lenta - la regañó - trae acá - dijo provablemente arrebatandole el teléfono a Ami - Momozono-san estamos en el centro de compras ¿Vienes? - soltó sin vueltas de ningún tipo
- Vale ¿Dónde me esperan? - pregunté, salir con las chicas seguramente me haría sentir mejor
- En la tienda junto a la heladeria - contestó ella y seguidamente colgó
Me cambié pero antes de irme deje una nota diciendo que me iba en mi puerta, así no preocuparía a nadie, ni tendría que enfrentarme a Tomoe, bajé las escaleras y me fui
Tomoe POV
Deapues de llegar a casa decidí actuar como si nada e intentar alejarme por un rato de Nanami, sabía que si me acercaba no resistiría mis impulsos y le haría algo así que mejor esperar a calmarme un poco. Estaba esforzandome lo más que podía. Pero el delicioso olor de Nanami estaba por todo el templo y estaba por enloquecer. Tenía que controlarme si hacía algo mientras estuvieran todos despiertos nos interrumpirían de nuevo y provablemente esta vez o los mataba a todos o seguía como si nada, ninguna de las opciones era viable. Pero en un arranque de debilidad fui a su cuarto encontrando en su puerta una nota.
Tomoe salí al centro con Ami-chan y Kei-chan, volveré por el atardecer
por fabor no te enojes por no haber ido a avisarte personalmente
es que estaba algo apurada
Nanami
No sabía si alegrarme o enojarme, por un lado no iba a enloquecer por las ganas de hacerle algo "malo" y por el otro no había ido a avisarme como debería haberlo hecho. Decidí aprovechar la oportunidad para deshacerme de futuros interruptores.
Lista de interruptores:
Mizuki: Resultado: ✔️borracho en su habitación dormido y atado por si las dudas hasta mañana o pasado
Onikiri y Kotetsu: ✔️Resultado: atados - y hambrientos - en la cocina con la vista fija en la comida
✔️
Ya casi atardecía, faltaba muy poco para que mi diosa volviera, una mirada completamente malvada cruzo mi rostro al tiempo que en mi cabeza desfilaban imagenes de mí mismo y de Nanami bastante subiditas de tono. Una que especialmente me gusto – y que había decidido haría real – fue una de mí mismo aún con el hamaka puesto pero ella completamente desnuda moviendose sobre la zona de mi miembro - y gimiendo mi nombre - mientras tenía mis garras en sus caderas marcando un ritmo
Y... Desperté de mi ensoñación a causa de un dolor punzante en mi entrepierna, algo sonrojado y bastante exitado por mis recientes fantasías corrí a micuarto para "calmar" mis dolores
Nanami POV
Estabamos en la ante-última tienda a la que iríamos según lo que dijo Kei, era una casa de ropas muy bonita, estaba viendo unos shorts y otros conjuntos que me encantaría poder comprar pero no me alcanzaba.
- ¡Momozono! Ven acá - me llamó a gritos Kei, obviamente fui a donde me llamaba, me señaló un vestido morado oscuro, estraples, que se ajustaba desde la zona de los pechos hasta la cintura a modo de corsé y luego caía libremente hasta 20 cm arriba de la rodilla, en la base tenía dibujos de pequeñas florecillas de color rosado, ciertamente era hermoso pero cuánto costaría? Además era MUY atrevido para mí seguro sería para ella
- Te vas a llebar ese? -
- No, tu lo harás, es precioso y está a tu alcance así que no quiero oír ni un pero de tu boca - dijo autoritaria
- Es demasiado atrevido para mí - me quejé
- Lo compras o lo compras - me exijió con una aura de miedo
- S-si - respondí algo intimidada
Una vez comprado el vestido fuimos a un local donde vendían maquillaje y por insistencia de Kei fuimos a ver los labiales, la verdad nunca había usado uno. Cuando era pobre no podía desperdiciar el dinero en eso y ahora que me he vuelto una diosa no se me había pasado por la cabeza usar uno
- Yo nunca he usado uno - tanto Kei como Ami me miraron como si fuera un alien
- Con razón nunca tubiste novio Momozono-chan - me observó y luego pasó su vista a los gloss de labios como diciendo elige uno o lo haré yo por ti
- Me da el de cereza por favor - pregunté a la mujer que atendía ahí, que me sonrió, lo envolvió en un paquete y me lo entregó - gracias - luego de que Ami comprara un gloss de fresa y Kei uno de piña, más un delineador y un rimel salimos del local. Kei se me acercó y me dijo que me probara el mío. Con cuidado me lo pase primero por el labio inferior y luego por el superior, cerre la boca y la abrí - qué tal?
- Te queda bien, seguro que a Mikage-kun le encantará - sorió pícaramente Kei, me sonrojé y desvié la mirada pensando en el beso que compartimos
- Bueno chicas yo... Debo volver a casa - les dije sonriente y aún sonrojada - adiós - pero cuando me di la vuelta una señora chocó contra mí, desviando el contenido de lo que sea que estuviera bebiendo sobre mi pobre ropa y ni siquiera se dignó a disculparse - ¡kyaaaahh no! ¡Mi ropa! - grité causando que Ami y Kei voltearan a verme, y con la más "inocente" mirada de su repertorio Kei me dijo
- Oh Momozono-san parece que tendrás que ponerte el vestido, agradece que te hice comprarlo - la sonrisa en su rostro daba miedo
- ¡Nanami-chan! Qué mala suerte - dijo Ami con cara de lo siento por ti
- No te preocupes - alerta! Sonrisa fingida a la vista - iré a ponerme ese vestido - entre al local del que venía saliendo y pedí permiso para cambiarme enseñándoles lo que le paso a mi ropa, al salir me puse un talismán de aire, no quería que nadie me viera con ese vestido tan revelador y atrevido me daba mucha vergüenza.
Recién cuando llegué al templo y estuve a unos pasos de mi puerta me quité el talismán, seguidamente exalé un pesado suspiro, guié mi mano hasta la perilla, estaba a nada de entrar en mi cuarto cuando siento que alguién me jala la mano, me da la vuelta y me acorrala contra la puerta de mi propio cuarto... Es Tomoe.
Tomoe POV
Estaba abajo, comiendo una fruta ante las llorosas y hambrientas miradas de Onikiri y Kotetsu quienes rogaban porque les diera aunque sea una fruta, que bien se sentía torturarlos jajaja; cuando de repente llego a mi un olor conocido algo mezclado con un sutil aroma a cereza, subí en seguida dejando solos a los espíritus.
Definitivamente no me esperaba lo que me encontré, Nanami estaba usando un vestido morado, corto muy corto, no debería usar algo como eso, casi no le cubra las piernas, ni hablar de los brazos o su cuello. No pude resistirlo, antes de que abriera la puerara la jalé y la acorralé contra la puerta. Al hacerlo me di cuenta de que tenía algo en los labios que olía a cereza y se veían más apetitosos de lo que ya eran
- ¡Maldita sea! ¿Es que quieres volverme loco mujer? ¿Qué traes en los labios? ¿Y ese vestido? - no sé por qué traía eso pero le iba a costar caro *sonrisa malvada*
- Y-yo una mujer tiro su bebida en mi ropa y como había comprado este vestido me lo puse - dijo demasiado rápido y nerviosa, pasé mi lengua por mis labios, se me antojaba más tentadora cuando se ponía así.
- ¿Qué traes en los labios? - pregunté haciendo uso de todo mi autocontrol para no abalanzarme sobre sus labios, estaba ansioso por volver a degustarlos
- E-es gloss de labios K-kei-chan d-dijo que me veía bo-bonita-a - tartamudeó parecía que mi cercanía le estaba afectando
- Nanami tengo hambre - dije de pronto, manteniendo la mirada fija en sus labios - y cada que te veo o siquiera pienso en ti - hice una pausa mientras me acercaba un poco más a sus labios estando ahora separado solo por milímetros de ellos, notando más fuerte ese olor a cerezas - me entran ganas de comerte entera, hasta parece que quieres que te coma, es un buen detalle que les des sabor cereza a tus labios - ya no lo resistí más la besé.
Narración normal
Desde el principio Tomoe fue brusco, no parecía tener ganas de ser amable, atrapó su labio inferior entre sus colmillos comenzado a succionarlo con fuerza, tirando de el con sus colmillos, haciendola sangrar lebemente y sintiendo plácidamente el sabor dulce y metálico de la sangre de su amada, hasta que le quitó por completo el sabor a cereza de sus labios, que ahora estaban rojos e hichados por su causa.
- Grrrr me gusta como sabes - gruñó el kitsune contra sus labios, volviendo a atraparlos, y esta vez entrelazando su lengua con la de ella succionandola de vez en cuando, sus manos cobraron vida y mientras que una tanteaba la puerta buscaba el picaporte y la otra se situaba en su cintura presionadola contra sí para evitar que callera cuando abriera la puerta.
Una vez abrió la puerta entró, la cerró y la re-acorraló contra la misma, se tomó la libertad de recorrer cada rincón de esa boca que le pertenecía solo a el.
Un rato después Tomoe la corrió de la puerta a la pared con brusquedad y la lebantó para que estuviese a su altura, claro que al hacer eso estaba obligando a Nanami a enrredar sus piernas contra sus caderas, permitiendole al demoníaco zorro sentirla mejor, de vez en cuando se le escapaba algún gruñido mientras la presionaba lo más posible contra sí.
Mientras el beso continuaba una de las manos de Tomoe encontró lugar bajo el vestido de la castaña, más concretamente sobre la tela semi-húmeda de las bragas de la joven quien gimió fuertemente al sentirlo acariciar sin pudor aparente su zona más sensible.
- ahh de-tenteh! - se le escapó no pudo evitarlo, entre la vergüenza y el placer que las caricias que su familiar le otorgaba no pudo evitar más que nada como una reacción pedirle que se detuviera, prueva de esto es que ni siquiera intentó bajarse
- No, hoy yo soy el amo, tu la sirviente, obedece - seguidamente volvió a donde estaba, haciendo exactamente lo mismo arrancandole tantos gemidos como pudiera a la castaña, quien aceptó silenciosamente la orden del peliplata.
Las garras del familiar se posicionaron a ambos lados del cuerpo de Nanami, acariciandola lebemente sobre el vestido, hasta que una se topo con nada menos que el cierre el cual no dudo un segundo en bajar, el vestido callo hacia sus caderas, dejandola casi totalmente desnuda faltaba que termira de caer y estaría en bragas.
- Baja - ordenó el kitsune, alejandose momentaneamente para observar mejor como la tela irónicamenre caía con lentitud, deslizandose por la piel de la joven hasta llegar al suelo ante la maliciosa mirada del familiar, la castaña amagó con cubrirse pero antes de que pudiera hacer siquiera un un movimiento más - no te cubras, quieta - ella asintió sonrojada incapás de mover un músculo. El peliplata se deshizo del haori y del kosode que cayeron con una insultante rapidez al suelo.
La miró relamiendose los labios, estaba a su completa merced, con esos pequeños pechos al aire, vistiendo esas infantiles braguitas a lunares, se acercó a ella y la tomo del mentón con las garras, la miró fijamente a los ojos unos segundos, o quizas fueron minutos no podría decirlo, solo supo que de un momento a otro se había perdido en los labios de aquella joven.
Tampoco sabría decir con exactitud cuando fue que el zorro termino sentado con Nanami a horcajadas de el mientras se besaban ardientemente, en una pelea de lenguas que ninguno quería perder, podría decirse que en un arranque Tomoe uso sus garras para desgarrar esa última prenda que cubría a su diosa. Sonrió de lado, estaba a punto de cumplir su fantasía de la tarde. Acomodó sus garras a ambos lados de su cadera y comenzó a moverla notando al instante el placer que eso le producía. La joven diosa de la Tierra podía sentir perfectamente miembro de Tomoe grande, duro y caliente, no podía creer que eso en serio estuviese pasando.
- Ahh ¡Tomoe! ¿Qué me haces? Ahh - movió especialmente fuerte sus caderas haciendola pegar un grito de placer
- Que mala Nanami ¿Quieres hacerme decirlo? - preguntó ronco el kitsune, cómo hacía para no jadear mientras hablaba, no lo sabían ni Nanami ni la autora - me mas-tur-bo con-ti-go - silabeó la frase aún ronco, logrando así exitarla más, que delicia! Podía sentir lo húmeda que estaba aún sobre la hamaka, no veía la hora de entrar en ella pero primero había mucho por hacer.
- Ahhh!¡Tomoee mal-ahh dito perbertidooh! - ni siquirera lagraba insultarlo esos gemidos le hacían perder la credibilidad
- Lo disfrutas - no podía objetar nada en verdad estaba disfrutándolo
Luego de un rato más con ese agotador vaiven Tomoe la lebantó desde los muslos como si fuera una pluma y la subió de frente a sus hombros, teniendo ahora un ángulo perfecto de su intimidad, la cual no esperó un segundo para empezar a recorrer con su filosa lengua.
- Grrr estas muy húmeda - recibió un gemido en respuesta, siguió pasando la lengua por ese preciada parte de la anatomia femenina, saboreandola, ¡Era muy dulce! Y el estaba enloqueciendo, al rato se puso a jugar con el clítoris de Nanami, succionandolo con fuerza, luego quiso probar morderlo para ver como reaccionaba la castaña, para su grata sorpresa ella apretó sus piernas contra su cabeza, gimiendole a gritos lo bien que se sentía, se entretuvo así por un rato, deslizando su lengua de arriba a abajo, hasta que quiso variar un poco y la penetró con la lengua, notó de inmediato lo estrecha que era, su miembro comenzaba a dolerle demasiado pidiendole con urgencia un poco de atención, oh definitivamente perdería el control al estar dentro de ella, al estar distraído pensando en eso no se dio cuenta de lo que hacía y para cuando quiso darse cuenta la cavidad de SU diosa se estrechaba aún más anunciando el orgasmo que llego solo unos segundos despues. Luego de gustosamente tragarlo bajo a una agotada Nanami de sus hombros, pero no iba a darle tregua aún, ¡No señor! Recién estaba comenzando.
La puso de bajo de sí, pero esta vez en lugar de ir a sus labios, atacó su cuello, succionandolo fuertemente, relamiendolo y mordiendolo lo más lebemente que podía considerando que sus instintos le rogaban enterrar los colmillos en esa terza y blanca piel. Siguió bajando y se encontró con ese pequeño par de pechos, paso su filosa lengua por el derecho y comenzó a juguetear con el pezón mordiendolo, dejando a su alrededor las marcas de sus dientes y pequeñísimas gotitas de sangre que se encargaba de limpiar, inevitablemente haciendola gritar tanto de placer como de dolor. Seguidamente repitió el proceso con su otro pecho, hasta hartarse y luego seguir viaje hacia el ombligo de la chica, jugando un rato con el, succionandolo lebemente y rara vez mordiendolo. Hasta que una acción inesperada por parte de la muchacha lo hizo detenerse.
Nanami no paraba de gemir, lo que Tomoe le estaba haciendo la estaba haciendo sentir en el paraíso, no concebía poder recibir tanto placer en tan poco tiempo, no tuvo conciencia de cuando fue que una de sus manos se deslizó hacia el hamaka de su familiar y acarició el erecto miembro de su familiar.
- Eres una niña mala, ahora que has hecho eso tendré que castigarte - dijo lebantandose de ella, con una sonrisa aterradora y una mirada oscurecida por la lujuria. Nanami se preocupó, no sabía nada del tema, así que no tenía idea de si había hecho algo malo. Pero antes de que pudiera darse cuenta estaba de nuevo sentada a horcajadas del familiar. Que suspiró de placer al sentirla nuevamente sobre su miembro, la abrazó por la cintura y se acercó al oído de la joven, dejando que su aliento chocara contra su oreja - lame mi cuello - ordenó sin rastro de pudor en la voz, y seguidamente mordisqueando el lóbulo de su oreja.
La chica obedeció sonrojada, comenzando a pasar dulce y lentamente su lengua por el cuello del yokai, que lentamente fue liberandola de su abraza, a medida que ella tomaba más confianza y se dedicaba a repartir besos o a succionarlo dejando pequeñas marcas rojas que desaparecían muy rápidamente de su piel. Llego un punto en que ella comenzó a descender por su pecho, encontrandose primero en el pectoral izquierdo con el diminuto pezón del kitsune quien no pudo evitar jadear al sentirla rodearlo con su lengua y seguidamente succionarlo consiguiendo así que este gimiera gravemente su nombre - ¡Nanami! - la chica siguió así por un rato hasta que decidió cambiar de lado para repetir nuevamente el patrón. Siguió bajando y esta vez delineó con la punta de la lengua los abdominales del familiar, haciendolo jadear muy lebemente, y entonces se dio cuenta de a donde había llegado, pero antes de poder detenerse Tomoe la hizo levantar la cabeza y mirarlo a los ojos, tenía una mirada tan provocativa como seductora y ni hablar de su sonrisa maliciosa.
- Nanami - hablo despacio, tratando de contenerse para no arrancarse el hamaka y penetrarla ahora mísmo - quítame el hamaka - dijo al fin
- Hai - respondió sonrojada, apartando la mirada y cumpliendo la orden del peliblanco
- Míralo - que cruel era por qué la torturaba así? Estaba avergonzandola demasiado, con timidez dirigió su mirada al miembro de su acompañante y se asustó un poco al ver lo grande que era, estaba segura de que eso no cabría en ella, la iba a partir al medio (O/-/O) - chupalo - ¿perdón? ¿Había escuchado bien? Nanami se preguntaba por qué le hacía eso, con una lentitud tortuosa y una timidez que estaba acabando lon los nervios del demonio zorro, Nanami acercó su lengua a la cabeza de su miembro, provocándole un espasmo y luego lo recorrió todo con ella, para finalmente meter todo lo que alcanzó dentro de su boca. La sensación que lo invadió en ese preciso instante fue un placer increíble, presionó su cabeza con sus manos tratándo de entrar lo más posible en su cálida boca. La joven diosa de la tierra recorría todo lo que podía mientras succionaba y mantenía en el paraíso al kitsune, su conciencia hace rato la había abandonado por lo tanto no supo cuando fue que le dio una ligerísima mordida, mordida que basto para que Tomoe la separara de sí bruscamente, la tirara al suelo y...
- Niña mal, esta es la tercera vez que te portas mal - le dijo ronco, haciendola despertar muy superfluamente, pues a penas lograba captar lo que le decía, lo único que tenía claro era que se sentía bien tenerlo sobre ella - tendré que castigarte, iba a ser considerado pero - pausa dramática - ya no - no dijo una sola palabra más, la penetró violentamente, llebándose de una sola envestida la virginidad de la joven diosa, sintió gustoso lo estrecha que era, gruñó - Grrrr estás muy apretada... Me encanta - era completamente delicioso sentir sus paredes contraídas entorno a su miembro mientra la penetraba a un ritmo al que sólo un yokai como él podría llenar haciendola gritar en esos momentos de dolor, por el momento eso le estaba doliendo a horrores, sabía que la primera vez dolía pero no que tanto, aunque puede que el hecho de que Tomoe fuera un yokai enloquecido influyera.
- Ahh! ¡Tomoe! ¡Por favor! Duele! Duele muchísimo! - gritó la diosa con lágrimas que salían de sus ojos, siendo acallada con un beso que intentaba no ser salvaje, uno que le transmitía todo el amor que le tenía pero que a la vez estaba tratado (bastante mal por cierto) de contenerse, pero como es de esperarse su estreches se lo ponía dificil, de alguna forma logró tranquilizarla.
Poco a poco el dolor comenzó a irse dando paso en su lugar a un placer que era completamente absorbente, que la hizo gritar el nombre de su amado, quien motivado por los gemidos de su adorada castaña aumentó el ritmo, haciendola delirar de placer. Así siguieron hasta que Nanami comenzó a sentir como si orgasmo se acercaba y Tomoe al sentir como las paredes de la chica lo apretaban no pudo evitar correrse con ella, enviando su semilla directamente al vientre de la oji canela.
Pero aún no habían terminado, no la dejaría ir hasta estar completamente satisfecho y estaba lejos de estarlo, se sentó en el futón y la sentó sobre sí pero de espaldas a el, comenzando a penetrarla de esta forma, mientras la tenía abrazada de la cintura, acercó sus labios al cuello de la chica, buscó un lugar en específico entre la Unión del hombro y el cuello, la lamió como preparando la piel y la mordió esta vez enterrando los colmillos en esa suave piel, finos hilos de sangre salieron de la reciente herida siendo inmediatamente borrados por la traviesa lengua del peliplata, acallando los últimos gemidos de dolor que Nanami había emitido. Siguió embistiéndola hasta que la castaña se vino y unas cuantas estocadas más tarde el también se corrió dentro de ella. Que de no ser por el par de fuertes brazos que la sostenían habría caído de boca al piso o mejor dicho al futón. Sonrió malignamente, la puso en cuatro y la penetró ahora en esta posición en la que podía llegar bastante más profundo y ella se vino dos veces antes de que el lo hiciera una. Nanami estaba agotada, medio magullada y somnolienta, por lo tanto no era de sorprenderse que ni bien el se viniera - y la arrastrara a ella también - se callera cuan larga era completamente dormida. Ante esto Tomoe salió de su interior preocupado, no entendía por qué se había desvanecido así tan de repente, hasta que se dio cuenta de que Provablemente eran las 4:00 AM y llenaban ahí encerrados más o menos desde las 8:32 PM era normal que la chica estuviera completamente agotada siendo ella humana, necesitaba descansar. La recostó más cómodamente sobre el futón y los tapo a ambos.
- Buenas noche Nanami - le susurró al oído y viendo que estaba completamente dormida - te amo - susurró aún más bajo si es que era posible, siendo respondido en sueños con un semitartamudeado - yo taahmbién teh ahmoh Tohmoeh - callo rendido a los brazos de Morfeo el también con la última – y tartamuda – frase resonando plácidamente en su cabeza
Como seis hermosas horas de sueño después
Tomoe despertó nota ando que ya había amanecido y que no había hecho el desayuno, para su suerte Mizuki estaba dormido o con resaca atado en su habitación y cuando despertara vería en el techo un letrero que decía claramente "Mi venganza por dejar ir a Nanami a Yomi no Kuni" nada de qué preocuparse; y Onikiri y Kotetsu estaban o dormidos en la cocina o traumados en la cocina – en plan me vale –, se encogió de hombros, hoy podía quedarse en la cama hasta tarde. Se dio la vuelta encontrandose a Nanami profundamente dormida con una expresión de paz y felicidad pura, parecía tan linda que no pudo evitar robarle un beso, que con el correr de los segundos se volvió más apasionado, y entonces una medio asfixiada diosa de la tierra lo empujó por el pecho para que la dejara respirar.
- ¿Tomoe es que quieres asfixiarme? - preguntó luego de toser un poco la castaña
- Solo quería besarte - respondió con la mirada y la sonrisa más inocentes de su repertorio, ante la mirada acusadora de Nanami
- Ahh qué sueño - se desperezó dejando a la vista del yokai parte de su cuerpo desnudo
- Nanami a menos que quieras que me lance sobre ti tápate - le advirtió el kitsune, después de todo el que avisa no traiciona. La chica en seguida se cubrió todo lo que pudo con la manta
- No! Déjame un descanso! - practicamente le rogó, había sido mucho para una noche, especialmente para su primera vez
- Jaja parece que hasta te doy miedo - se burló el peliblanco
- No es cierto! - se defendió Nanami - es solo que no creo poder lebantarme hoy - sonrió avergonzada - oye Tomoe qué somos ahora? - no lo tEnía muy en claro
- Para los yokais eres mi mujer frente al resto del mundo supongo que seríamos novios porque casados no estamos - le explicó el kitsune
- ¿Y por qué es diferente? - la verdad no entendía por qué era diferente entre los humanos y los yokais
- Por la marca que tienes en el cuello, lleba mi veneno por lo tanto cualquier yokai que se te acerque sabrá que eres mía y que si pone un dedo sobre ti puede darse por muerto - explicó con una sonrisa siniestra al final
- ¿Veneno? - ¿cómo que veneno? Ahora si estaba preocupada
- Tranquila, solo contiene mi escencia es más cosa de olor que otra cosa - seguía tranquilo - por cierto ni creas que dejaré de exigirte como diosa, ni dejaré de regañarte cuando te equivoques - le aclaró
- Ow entonces nada va a cambiar verdad? - preguntó algo desanimada Nanami
- Yo no diría eso, de ahora en adelante te tomaré en cualquier lugar de la casa, a cualquier hora, siempre que estemos solos - le dijo con una mirada llena de pura maldad
- ¿Qué? ¡No! Si nos descubren Onikiri, Kotetsu o Mizuki ¡No podré mirarlos a la cara nunca más! - se quejó la joven diosa de la tierra
- Tranquila, si nos descubren, me los como - dijo restándole importancia, dirigiéndole la mirada más inocente del repertorio
-¡No puedes hacer eso! - lo regañó
- Si puedo - rebatió aún con esa fingida inocencia - es cuestión de combertirla en un animal o una planta y ¡Liso! ¡La cena está servida! - incistió ahora con una mirada inocente tan falsa que denotaba la ansiedad por hacerles algo malvado a todos, salvo a SU Nanami
- Optaré por creer que bromeas - se rindió la chica - como sea no me despiertes necesito recuperar horas de sueño - dijo y sin darle tiempo a replicar se quedó dormida, regalándole una hermosa vista a su familiar que suspiró pesadamente y dirigiéndole una última mirada a su cuerpo desnudo, la vistió con uno de sus piyamas, se vistió a sí mismo y se dirigió a la cocina, tenía un almuerzo que preparar y ni siquiera había empezado.
Ahora sí fín!
Me llebo unos días perp terminé ojalá y lo haya disfrutado tanto como yo! Hasta la próxima ^-^
ANONIMO 1: genial me encanto quiero la conti tambien quiero saber que le va a hacer tomoe a kotetsu y onikiri jaja suerte.
Rta: Que bueno que te gustara! Aquí esta la conti! Espero te haya el castigo, no es tan cruel como querría Tomoe pero es cruel. "Después de todo no se siente el hambre hasta que no ves a otros comer frente a tus ojos" Alejandro Casona espero que lo hayas disfrutado
Aria
Ahh por favor haz la continuacion. No me dejes asi, ya se estaba poniendo bueno. O/O
Rta: Acá esta la continuación espero y la hayas disfrutado mucho. Jeje Tomoe es cruel
javi la hanyou
Por favor contunualaaa te lo ruego
Rta: Javiera, querida amiga acá tenes tu maldíta continuació! Ahora Hacé el maldito favor de dejarme tranquila! Te lo ruego como tu gemela del alma y hermana de otra vida apiádate de mí! Jaja gente bonita agradézcanle a esta hincha quinotos la continuación! Porque si ella no me hubiera jodido taanto entonces la conti la hubieran recibido el mes que viene
Sin más que decir se despide Actriztercaantirosita!
