¿Qué tal? Nanami los saluda (^-^)/

-Perdón si me tardé tanto en subir este capítulo, pero, quería que aparecieran todas las oc's que me enviaron (Todos los oc's que salen en este capítulo saldrán en el resto de la historia)

-Sus oc's me encantaron, les agradezco por permitirme usarlas.

-Disclaimer: Los personajes le pertenecen a ChiNoMiko.
Aqua Yukishiro le pertenece a Mey-chan Sakura
Lulú Silizu le pertenece a Silizu
Katherine Evans le pertenece a SakuHoshi
Celyan Kinohiro le pertenece a Miku-nekita
Crystal Kinohiro le pertenece a Hikari Thaisho x3
Rous Miyanuishita le pertenece a BonyHoney
Ana Benect le pertenece a Ananeko
Senra Lay le pertenece a Akira Nubl

-Este capítulo más que nada fue para presentar a todas las Oc's.

MALESTARES E INCOMODIDAD

Eran cerca de las seis de la madrugada, la mañana era singularmente fría y el peliazúl que se disponía a hacer su rutina, sintió como si su cabeza fuese a explotar y un insoportable asco se hizo presente. Cubrió su boca e inhaló profundo, quizá había comido algo el día anterior que le causó esa sensación. Pero, ¿Qué?. No era posible, cuando comenzó a caminar al baño las náuseas volvieron y ya ésta vez no lo pudo contener. Punzadas fuertes en su cabeza no le permitían detenerse, jamás en su vida se había sentido así. Es verdad que más de una vez estuvo enfermo, pero, eso no se sentía como una enfermedad.

Enjuagó su boca con abundante agua y aprovechó para cepillarse sus dientes, pero, en el momento que introdujo el cepillo a su boca las náuseas volvieron. No alcanzó a hacer el primer vaivén cuando se encontró devolviendo nuevamente. Puso una mano en su cabeza y cerró sus ojos, las lágrimas caían de sus ojos violáceos; se sentía tan mal, pero, no podía faltar a la universidad. Justo ese día tenía una prueba muy importante, esa decidiría si estaba apto para la carrera de diseño de vestuario; así que respiró con cuidado unos minutos más y se lavó su rostro para alistarse.

Por fin había comenzado la universidad y podría estudiar algo que siempre anheló. Todo el mundo sabía lo mucho que el peliazul amaba la ropa y diseñar una le parecía algo demasiado atractivo, podría vestir a su hermano como a él se le diera la gana y su novio también. ¿Novio? En el momento en que acomodó su chaqueta color naranja en su dorso de quedó pensativo. Es verdad que él y Kentin llevaban más de un año saliendo, pero, jamás se "comprometieron" a un noviazgo; frunció el entrecejo al recordar que en su aniversario discutieron y no pudieron celebrar nada.

—Alexy, ¿Ya estás listo? —Escuchó la voz de su gemelo detrás de su puerta—

—Sí, salgo en unos segundos...

Acomodó sus cascos de música alrededor de su cuello y salió de su habitación para encontrar ahí a su gemelo. Ambos entraron a la cocina donde se encontraba su madre preparando un delicioso desayuno de frutas para sus tan preciados hijos. Los gemelos eran lo más maravilloso que tenía la familia Le Brun, luego de enterarse que no podrían tener hijos, la mejor decisión que podían haber tomado era adoptarlos. La mujer tomó su cabello rizado en una coleta, dejando a mayor vista su tono de tez morena; sin duda los gemelos tenían suerte de tenerla a ella como su madre.

La mujer puso dos platos con una variedad de frutas exquisitas y un jarrón con jugo de naranja, como tanto les gustaba a ellos. Armin comenzó a comer saboreando cada fruta que tomaba con su cubierto, pero, cuando Alexy intentó dar un bocado sintió cómo un asco lo invadió sin siquiera haber probado un poco. Se levantó rápidamente y corrió hasta el baño. Sintió golpes continuos en la puerta y por tercera vez enjuagó su boca, haciendo lo posible para no provocarse náuseas nuevamente.

—Hijo, ¿Estás bien? —Preguntó su madre con tono preocupada aun dando unos pequeños golpes a la puerta— ¿Puedo entrar?

—Sí, pasa —Respondió y dio un fuerte suspiro—

—Cariño, ¿Qué sucede? —Preguntó entrando con lentitud al baño— ¿No te sientes bien? ¿Quieres ir al médico?

—No, no te preocupes, mamá —Sonrió y secó sus labios— Si voy al médico no iré a la prueba de hoy, recuerda que es muy importante para saber si estoy apto para la carrera.

—Cierto... ¿No has pensado en escoger otra carrera? ya sabes, como tu hermano.

Negó con su cabeza y sonrió de costado —Armin está estudiando computación por que quiere llegar a crear su propio juego, y yo quiero estudiar diseño de vestuario por que me encantaría crear mis propias prendas. Debo irme, Aqua nos debe estar esperando... adiós mamá.

Besó la mejilla de la mujer y salió del baño, tomó sus cosas y le hizo una mueca a Armin insinuando que ya era hora de irse. El pelinegro tomó su bolso y salió junto a su hermano sin despegarse de su pequeña consola. La mujer era muy buena con ellos, amorosa y preocupada por su bienestar; pero, desde que Alexy les confesó su preferencia sexual, varias veces intentaron hablar con él para que cambiase su opinión. Los gemelos comenzaron a caminar en dirección a la casa de una de sus mejores amigas, ambos sin decir una sola palabra ya que el peligro iba muy concentrado en su juego y Alexy se hundía en sus pensamientos.

Comenzó a juguetear con sus dedos, sin cambiar ni un momento se expresión. Estaba serio, malhumorado por su dolor de estómago y por que justo en esa mañana le había dado por pensar en su relación con Kentin. Aun faltaba una cuadra para llegar a la casa y la joven de baja estatura estaba esperándolos sentada en una banca con un cuaderno en sus manos. Alexy sonrió y le gratificó un cálido beso en la frente de la castaña; Armin la saludó de la misma manera y la chica se levantó de la banca para comenzar a caminar con los gemelos.

—¿Estabas leyendo? —Preguntó al peliazul—

—No, estaba escribiendo una canción... preferí salir de casa, me siento un poco más inspirada cuando estoy al aire libre —Respondió la castaña moldeando una suave pero cálida sonrisa en sus labios— Llegaron más temprano de lo habitual, ¿Sucedió algo?

—Algo así —Alexy arqueó una ceja y cruzó sus brazos— parece no ser mi día... para empezar me siento como barco en alta mar, he tenido unas horribles náuseas y mi madre parece no retractarse de su idea de querer convertirme en hetero. Además estuve pensando en mi relación con Kentin y me di cuenta que hay varias cosas que hemos dejado de lado.

—¿Como qué?

El peliazul hizo una mueca y soltó una carcajada —Algún día te lo diré, aún tienes una mente candorosa que conservar, Aqua.

La castaña se lanzó sobre el más alto e intentaba jalar el cabello azulado del chico que sólo reía al ver los ataques de su tan querida amiga. Ella era alguien muy especial, ya que fue una de las pocas personas que se preocupó por él y su gemelo; a pesar de tener la misma edad, Aqua siempre se comportó tan preocupada por el bienestar de los gemelos sin dejar esa actitud tan inocente que la caracterizaba. Fue el hermano mayor de ésta quien se preocupó de que nadie le hiciera daño al peliazul y su hermano, varias veces se metió en problemas al intentar protegerlos.

~...En la universidad...~

Llegaron a la universidad y la castaña fue a averiguar dónde estaba su clase, ella había pasado la prueba de veterinaria. Mientras que la prueba de diseño de vestuario apenas sería realizada ese día.

Armin apagó su psp y lo guardó en su mochila —¿Sabes a qué sala debes ir? —Preguntó metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón—

—Sí. ¿Y tú?

—Sí, pero estoy esperando a Celyan...

—¿También escogió la carrera de computación? Crystal me había dicho que ella iba a estudiar música

El pelinegro asintió y posó su mirada en las gemelas que se acercaban a ellos. Ambas parecían muy apresuradas, la más alta de cabellera de un tono azabache con reflejos azulados y rosa en las puntas frunció el entrecejo y tomó la mano de Armin.

—¿Qué haces tan calmado? ¡Vamos a llega tarde! —Dijo con un semblante histérico—

—C-Celyan, debemos ir a averiguar donde está nuestra sala. Tranquila

—Ya averigüé donde está, apresurémonos. Te veo cuando termine la clase, hermana.

—Vale —La más baja, de cabellera del mismo tono que su gemela pero con un largo descomunal; la diferencia es que ésta lo tenía teñido hasta la mitad de un color azul platinado. Moldeó una tenue sonrisa en sus labios— Que te vaya bien

La gemela más alta tomó de la mano al pelinegro y casi arrastrando, se lo llevó a su sala de clases. Alexy y Crystal soltaron una pequeña carcajada, sus hermanos eran totalmente distintos. La más baja tomó su cabello en una coleta y miró de reojo al peliazul

—¿Tú sabes a dónde tienes que ir?

Alexy negó con su cabeza —¿Y tú?

—No exactamente, pero debo ir a buscar a Iris... ella escogió música también. Nos vemos luego, que te vaya muy bien —Dijo la pelinegra dándole un leve pellizco a la nariz del peliazul—

~...Pasillo...~

Alexy comenzó a caminar en dirección a la oficina del director, metió sus manos a los bolsillos de su chaqueta y suspiró. El malestar prevalecía y eso le molestaba mucho, él era un chico alegre e infantil y por culpa de esas horribles náuseas no podía estar jugueteando por ahí como de costumbre. Aun así era muy extraño, ¿Qué podría estar causándole esa molestia? Frunció el entrecejo y mordió su labio inferior, con su mano derecha descubrió un poco el costado de su vientre. Una cicatriz resaltaba en su pálida piel, deslizó la yema de su dedo índice sobre la cicatriz y entrecerró sus ojos.

Recordó que el día en que el tal "bowser" se marchó del orfanato, él encontró esa cicatriz. ¿Qué le habrán echo en ese lugar? Durante bastante tiempo sintió que su cuerpo no estaba bien, no se sentía exactamente mal; pero, sí sentía algunos cambios.

Sintió una mano posarse en su espalda y de inmediato soltó su camisa, cubriendo su cicatriz. Se volteó y expandió sus ojos para luego moldear una cálida sonrisa en su rostro. Sus ojos se posaron en su tan preciado castaño, que venía acompañado con dos chicas más. Rous era una chica de un fino cabello color rubio platino, y además era dos años menor que su primo, Kentin; aun que no había un lazo sanguíneo, ella podía comprender perfectamente al castaño. Senra también era prima del militar, ella tenía su cabello de un tono lila muy primoroso; ésta también entendía muy bien a Kentin y tenía la misma edad que Rous.

—¡Hola Alexy! —Dijo la rubia besando la mejilla del peliazul—

—¡Hola! ¿Cómo estás? —Sonrió y lo saludó de igual manera—

—Hoy amanecí con cierto malestar, ¿Ustedes cómo están? —Respondió Alexy— ¿También iban a averiguar dónde estaba su sala?

—Algo así, pero, no creo que la sala de artes sea tan difícil de encontrar —Argumentó Senra— ¿Vamos, Rous?

—¿Las dos escogieron artes?

—¡Sí! —Respondieron al unísono—

—¡Genial, las dos tienen un talento brillante! —Dijo el peliazul—

—Gracias —Respondió la rubia— Bueno, nosotras nos vamos. Nos vemos después Kentin...

Las chicas se marcharon, dejando solos a la pareja. El peliazul se ruborizó y se levantó sobre la punta de sus pies para gratificarle un cálido besos a los labios del castaño. Éste correspondió al beso del más bajo y puso sus manos rodeando el menudo dorso de su novio; separaron sus labios para cruzar sus miradas y volver a acercarse para darse mimos.

~...Patio...~

El castaño separó su rostro de su novio y miró el reloj de su muñeca para asegurarse de que aún había tiempo antes de la prueba del peliazul. Kentin tomó la mano de Alexy y comenzó a caminar con él hasta el patio, acomodándose debajo de un bello árbol.

—Escuché que le dijiste a las chicas que amaneciste con malestar... ¿Ya estás mejor? —Preguntó Kentin recostándose sobre el césped—

—Un poco, a veces me dan náuseas —Respondió Alexy— Mi amor, ¿Sabes qué? Estuve pensando y me di cuenta que jamás me pediste que fuera tu novio.

Kentin miró de reojo al peliazul y suspiró —N-No... Alexy, los dos somos hombres; no es necesario hacer ese tipo de cosas.

—¿Por qué no? El que seamos hombres no es un impedimento

—¿Por qué te preocupa eso ahora? Llevamos un año y medio juntos, el pedirte que seas mi novio es sólo una costumbre

—No es cierto —Cruzó sus brazos y desvió su mirada— B-Bueno, dejemos a un lado el tema de la petición... Tampoco eres tan detallista; siempre me dices "Alexy", jamás has echo ni el más mínimo esfuerzo en decirme un apodo cariñoso.

—¿Qué te sucede? ¿Por qué estás tan sensible? —Preguntó con un tono molesto el castaño mientras se sentaba para mirar al peliazul a los ojos—

—¡No estoy sensible! —Levantó la voz frunciendo el entrecejo— ¿Acaso sólo puedes ser meloso cuando nos acostamos?

El castaño lo miró y se levantó molesto; chasqueó la lengua y comenzó a caminar en dirección a la universidad. El peliazul hizo una mueca triste, odiaba discutir con Kentin y mucho menos cuando no se sentía bien; cuando el peliazul se enfermaba siempre estaba Kentin y Armin cuidándolo, ya que muy pocas veces se sentía mal. Se levantó lentamente del césped y se dirigió a la universidad, puso una mano en su cabeza y suspiró; encontró al director caminando por el pasillo quien le dijo que la prueba estaba por comenzar y le indicó dónde estaba la sala.

~...Después de la prueba...~

Salió de la sala y se apoyó contra una pared del pasillo, y suspiró para esperar a su hermano. En la mayor parte de la prueba salían preguntas sobre tipos de moda e incluso tuvo que hacer un dibujo de una prenda. Mordió su labio inferior y puso una mano en su frente, comenzó a sentirse mareado de la nada. La vista parecía nublarse, no se sentía bien; una incómoda punzada en su cabeza le impidió mantenerse de pie, sus ojos parecían tan pesados que comenzaron a cerrarse.

Abrió lentamente sus ojos, y respiró agotado. ¿Qué podía estar causándole tantos malestares? Con la yema de sus dedos tocó el lugar donde estaba su cicatriz y no pudo evitar pensar que lo que le hicieron en ese lugar era el causante de sus malestares, pero, ¿Qué podían haberle echo? No, que estúpido pensarlo. Miró a un lado de la camilla en la que estaba acostado y vio a dos chicas. Una de ellas se encontraba de espalda, dejando ver su lacio cabello rojizo y la otra estaba sentada mirando su teléfono celular, traía su cabello azul grisáceo atado a una coleta.

Se quedó en silencio y miró al otro lado de su camilla y vio a su gemelo junto a una chica baja de cabellera castaña. Estaban charlando, ambos tenían sus mejillas con un leve enrojecimiento; el peliazul dibujó una sonrisa en sus labios, su hermano era bastante tímido y verlo conversando con una chica le parecía bastante genial.

—¡Alexy! —Escuchó la voz de una de las chicas que se encontraba en el otro lado de la camilla— ¡Al fin despiertas!

—A-Ana... ¿Qué me pasó?

—Eso me gustaría saber, no te andes desmayando en cualquier lugar. Si Kitty no hubiese estado ahí, te hubieras dado un buen golpe en el suelo. —Dijo Ana—

—Lo siento, Ana —Dijo con una sonrisa y fijó su mirada en la peliazul— Gracias Kitty, la verdad es que no recuerdo nada.

—No me lo agradezcas, eres el novio de mi mejor amigo... —Respondió Katherine—

—No me asustes así —Dijo Armin acercándose a su gemelo— Sentí que casi me da algo cuando me dijeron que estabas en la enfermería, pero cuando vi que era Lulú quien te estaba revisando me tranquilicé bastante. Está estudiando medicina.

—Oh... cierto. Ya me habías hablado de ella antes —Dijo Alexy— Un gusto conocerte, pequeña... me han dicho que eres muy buena curando a las personas

—E-El gusto es mío, Alexy —Respondió con timidez Lulú— tu hermano también me ha hablado bastante de ti.

Cuando el peliazul posó su mirada en su gemelo, vio a éste sonrojado hasta las orejas y con su mirada desviada. Alexy soltó una pequeña carcajada y se levantó lentamente. —Entonces, ¿Por qué me desmayé?

—Pensé que podía ser fatiga, pero, tu hermano dijo que te despertaste con náuseas y que ni siquiera pudiste probar el desayuno; de modo que no creo que sea eso... Lo mejor será que te vayas a ver con un médico que pueda revisarte bien. —Dijo Lulú—

—Hmm... está bien, gracias.

Las chicas y los gemelos salieron de la enfermería, afuera los esperaba Aqua que parecía preocupada. Kitty se despidió de los gemelos, y de las demás chicas y se marchó lentamente. Lulú debía hablar con uno de sus profesores, de modo que también se despidió de los chicos y se marchó.

~...Casa de los gemelos...~

Las chicas acompañaron a los gemelos a su casa, no querían que algo le sucediera en el camino. Aqua era demasiado protectora con los gemelos, a pesar de ser bastante baja era una chica a la que temer; Ana adoraba a los gemelos, ya que los consideraba como sus hermanos. Al entrar la madre de los chicos les dio una cálida bienvenida.

Subieron a la habitación del peliazul, y se sentaron a un lado de él; su madre abrió la puerta y entró con una bandeja con patatas fritas y unas cuantas cosas más para comer.

—Gracias tía —Dijo Aqua al ver los chocolates—

—Gracias —Dijo Ana—

—Gracias mamá —Dijeron al unísono los gemelos—

La mujer les obsequió una tenue sonrisa y salió de la habitación. Los chocolates y las patatas fritas fueron lo primero en desaparecer, ya que Aqua y Armin tenían un pequeño problema con esas comidas. Alexy suspiró y tomó un poco de jugo, su sabor estaba más dulce de lo habitual y puso su mano izquierda en su boca. Se levantó rápidamente y se corrió al baño, pensó que luego de haberse desmayado ya no se sentiría mal; pero, cuando sintió ese sabor en su paladar no pudo evitar querer devolver. Enjuagó su boca y salió del baño, afuera lo estaba esperando Ana; la pelirroja chasqueó la lengua y abrazó al peliazul que tenía lágrimas en sus ojos.

—Tranquilo, Alexy... ¿Qué te parece si vamos al médico? Así podrá recetarte algo para que se te quite este malestar.

El peliazul asintió —Esta bien, pero, no quiero que mi mamá se entere que voy al médico ¿Sí?

—Como tú digas —Dijo Ana sonriendo—

Quizá lo mejor era ir a un médico para acabar de una vez con las náuseas y los mareos. Sí, eso debía hacer. ¿Qué podía salir mal? Todas las personas se enferman.

¡Espero que les haya gustado! (^-^)/

*Si hay algo que no les haya gustado de sus Oc's me avisan por PM.

Las parejas son:

ArminxLulú
LysandroxAqua
NathanielxKatherine
VicktorxCelyan
LeighxCrystal

Y tengo un problema ya que el sensualote de Castiel tiene un harem (UwU) Aun quedan libres: Jade, Dake, Dajan, Dimitry.
Según como vaya avanzando la historia veré con quien se queda Castiel (._.) O si quieren pueden escoger entre los chicos que quedan.

Eso es todo, cuídense. Nos leemos luego (/*3*)/