Capítulo ocho (final): De vuelta en el refugio.

El efecto de la babosa granada si que causó un gran impacto en la muchacha.

Exactamente, habían pasado tres horas y media (3:30) y aún no despertaba. Aunque, según Pronto, la muchacha quizás tenía algo de sueño y se durmió mientras estaba desmayada.

Todos lo miraron sin poder creer lo que el topoide decía.

-Eso es algo muy poco probable. -opinó el asiático. Por parte del otro humano y el gran ser azul, recibió que ellos asintieran con la cabeza.

-Ya despertará, amigo. -le dijo el troll de las cavernas al peliazul. A este último mencionado se lo veía nervioso, e incluso, de su frente, salían pequeñas gotas de sudor.

-Lo se Kord, pero no puedo creer que el efecto de esa babosa dure tanto. Y sólo es una granada. -murmuró frustrado.

-Bueno, Twist le dio muy cerca con respecto a la puntería. -volvió a opinar el experto en babosa-fu. -Es decir, con ese ataque que hizo, claro que iba a dejarla inconsciente.

-No ayudas. -le murmuró el ingeniero, al ver como el líder despeinaba su cabello azul nervioso.

-Bueno, pero Pronto cree que... -el rastreador se vio interrumpido cuando apenas abrió la boca para acotar algo, ya que se escuchó un ruido desde una de las habitaciones.

Inmediatamente, todos se pararon de los sillones para dirigirse al cuarto de la pelirroja, pero el líder levantó la mano en señal de que paren.

-Yo iré. -avisó. Antes de que Junjie, al igual que Pronto, abriera la boca para protestar, el ojiceleste ya se había dirigido escaleras arriba.

Este último mencionado, al llegar a la habitación de su amiga, no decidió tocar la puerta. Simplemente, tomó una respiración profunda y entró lentamente, sin tratar de hacer mucho ruido.

La Sting se encontraba en su cama, sentada, mirando hacia todos lados de su habitación, extrañada. Al ver al Shane, lo miró aún más confundida. ¿Qué ocurría?

-Hola, Trix. -le dijo él, dispuesto a darle un abrazo.

-¿Quién eres tú? -le preguntó ella.

Esa frase de tres palabras causaron en el chico un escalofrío. Sintió el famoso dicho de cuando la piel se pone de gallina. ¿Qué? ¿Cómo? ¿Era posible que por una simple babosa granada su "mejor amiga" (porque era más que eso para él) no recordara quién era?

No. No, no y no. Eso no podía ser verdad.

Un nudo se formó en su garganta, e hizo todo lo posible para hablar. Las palabras no salían.

-¿Q-qué? -preguntó tartamudeando. La experta en babosas se acercó a él sin dejar de mirarlo con sus ojos esmeralda, los cuales estaban más verdes que nunca. El chico tampoco dejó de mirarla, hasta que la tuvo a unos centímetros de él. Si movía un poco más su cabeza, podía chocar sus labios con los de ella.

La lanzadora se acercó a él y, en un abrir y cerrar los ojos, lo abrazó con fuerza, sorprendiéndolo aún más que antes. Sin dudar le correspondió el abrazo, pasando sus brazos alrededor de su cintura.

-¿En serio crees que podría olvidarme de ti? -le dijo la de ojos verdes en su oído, con una sonrisa, causándole un leve escalofrío al Shane. Este rompió el abrazo rápidamente y volvió a mirarla. Las palabras de ella seguían sonando en su cabeza.

-¿Acabas de bromear con qué no te acordabas de mí? -ella asintió, con una sonrisa. El muchacho también asomó una de estas en su rostro, totalmente aliviado. Y con eso, volvió a abrazarla. -Me asustaste.

-¡Trixie! -gritó el resto de la banda. Al notar que su líder tardaba mucho, afirmaron entre sí que la pelirroja había despertado. Pronto abrazó las piernas de la chica, mientras Kord la levantaba en el aire en un abrazo. El topoide también fue alzado, ya que seguía colgado de las piernas de la muchacha.

Una vez roto el abrazo, Junjie se acercó con una gran sonrisa a la joven y la abrazó, al igual que lo había hecho ella con el peliazul. Cabe decir, que este miraba la escena con el ceño fruncido: estaba más claro que el agua que estaba celoso.

-No fue lo mismo el refugio sin ti. -le comentó el asiático a la chica, una vez que se separaron. Esta tan sólo en respuesta, dio una bonita risa, haciéndoles crecer una gran sonrisa en el rostro al otro par de humanos.

-No volveremos a dejarte sola otra vez. -le dijo el rastreador, haciendo que todos asintieran con la cabeza. -Ahora, ¡hay que celebrar! Prepararé una cena especial en honor a Trixie.

Todos salieron de la habitación de la ojiverde, dejando a el Shane último. Cabe decir que Junjie no quería irse, así que, antes de hacer esto último, le dio un último abrazo a la muchacha de cabello pelirrojo.

Eli, antes de salir, miró a la chica y le regaló una tierna sonrisa, seguida de un abrazo que fue correspondido.

-¿Sabes? Junjie y Pronto tiene razón. El refugio no fue lo mismo sin ti y no volveremos a dejarte sola. Te extrañé mucho. -le dijo, antes de abrir la puerta e irse de la habitación de la especialista en babosas.

Terminé "Sed de venganza"! No se queden con este final, me falta hacer el otro fic que va a ser la continuación de este, es decir, la secuela. Lo que no se es como voy a llamarlo :P. Y tampoco tengo fecha para este.

Me acuerdo que el primer fic de "Sed de venganza", o sea, el original, tenía solo cinco capítulos. Muchos pensaran que no le agregue nada al anterior, solamente tres capítulos más, dando un total de ocho. Pero créanme que no fue así, porque este fic tiene muchas más palabras que el original y algunos cambios. Por ejemplo, en este último capítulo y los celos de Junjie.

Me esforcé mucho en hacerlo, ya que se me complicó tener que cambiar algunas cosas que ya estaban hechas. De todas maneras... Podrían darme su opinión?

Ah! Y otra cosa que tengo para preguntar. Prefieren la pareja de Eli y Trixie o de Junjie y Trixie? O el triángulo EliTrixieJunjie?

Sin nada más que decir, les manda un saludo enorme:

Violett Vader.