Flashback Lenalee
Estaba sentada esperando a que Allen volviera. Se había ido en un momento y yo ni me di cuenta. ¿Me pregunto dónde se había metido? Seguro se perdió devuelta; Allen-kun no tiene remedio. Pude ver de lejos unas explosiones. Activé mi inocencia y me acerqué al lugar donde ocurrieron esas explosiones. Lo vi a Allen destrozar a los akumas.
-¡Allen-kun! –grité enfadada-
-¿Eh? ¡Woah! ¿¡Lenalee?! –dice girándose sorprendido-
-La misma. ¿Qué estás haciendo? ¿Qué te dije de pelear solo?
-L-lo siento, no sabía dónde estabas
-Eso no es excusa, Allen-kun. Venga, vamos
-S-si… lo siento, hum, ¿Lenalee estás enfadada?
-Estaba preocupada, Allen-kun, ¡no sabía dónde te habías metido!
-L-lo siento… me había perdido
-Me imaginé…
-Lenalee…esto…gracias por buscarme
Cuando escuché esas palabras me giré mientras sonreía
-Moo, Allen-kun, ¿acaso eres un niño?
-C-claro que no
Estuvimos patrullando un buen rato, buscando a los buscadores que habían venido con nosotros, sin encontrarlos por ningún lado. De lejos vimos a una pequeña niña con un collar de cristal en sus manos sosteniéndolo fuertemente mientras era atacada por varios akumas de nivel dos.
-Vamos, niña, danos ese collar, no compliques más las cosas –dijo descaradamente un akuma-
-¡No! ¡Le prometí a esos señores que cuidaría de él!
-Si no lo entregas, ¡te lo quitaremos a la fuerza! –El akuma voló rápidamente hacia la niña-
-¡KYAAAA!
Detuve el ataque del akuma con una patada.
-¿Una exorcista? –dijo otro de los akumas- Mierda, tenía que llegar.
-No está ella sola. –al terminar de escuchar esas palabras, pude ver a Allen a través del akuma, ya que lo había destrozado con su inocencia-
-Allen-kun
-Vamos, Lenalee
-¡Si!
Entre Allen y yo terminamos con los que quedaban alrededor. La niña nos miraba con terror, pero seguía sosteniendo fuertemente ese collar. Miré a mi alrededor, la ciudad parecía haber sido atacada varias veces, ya que los edificios estaban hechos pedazos. Todos de un tono marrón oscuro. Me pregunté que haría esta niña en la ciudad
-Ey, dime, pequeñita –comentó Allen con un tierno tono de voz- sobre lo que dijiste antes… ¿unos señores te encomendaron cuidar eso?
-Si… unos hombres fueron asesinados por esos monstruos de antes… unos hombres que vestían todos de blanco.
- ¿Y porque te lo encomendaron a ti? –Continúo Allen-
-Yo lo tenía en mis manos... en realidad había venido a la ciudad a buscar un objeto que perdí cuando huí con mi familia del pueblo, y luego encontré esto… los señores me dijeron que probablemente era lo que estaban buscando, y cuando me lo pidieron, aparecieron esos monstruos.
-….
-(Los buscadores fueron asesinados por los akumas…) –pensé con tristeza-
-¿Y ellos te protegieron?
-Si…
Cuando terminó de contar la historia, la niña comenzó a llorar. Probablemente del susto o pena por los buscadores. Allen se agachó y comenzó a limpiar las lágrimas de su rostro. Luego se levantó y le dijo a la niña:
-¿Cómo te llamas?
-A-alice
-Bien, Alice, escúchame, tienes que irte, ¿si? Este pueblo es peligroso
-C-claro-¡KYAA!
Alice gritó y señaló atrás nuestro. Allen y yo nos dimos vuelta y tres akumas estaban atrás nuestro
-¿M-más monstruos? –dijo Alice temblando-
-Lenalee, llévate a Alice, por favor – me dijo Allen activando su inocencia-
-¿Cómo díces? ¿Quieres que te deje solo devuelta?
-Por favor, Lenalee, tenemos que protegerla a ella y a la inocencia, y tú puedes escapar más rápido de aquí
-¿La inocencia? –dijo curiosa Alice-
-Pero Allen-
-Lenalee!
Allen-kun me miró muy seriamente para luego sonreír y echarse a correr mientras decía:
-Te la encargo
Su silueta desapareció mientras se dirigía a los akumas. Tomé a Alice en mis brazos, activé mi inocencia y fui saltando techo por techo hasta que me alejé bastante del sitio y aterricé con la pequeña
-S-señorita… el chico… -Alice bajó la mirada y se limpió las lágrimas que caían por su rostro con su manga. Luego me miró y me dijo: Señorita…. Aquellos monstruos me seguía por este collar, ¿ no es así?
-¿E-eh? Si…
-Entonces, te lo entrego. Se que ustedes lo quieren por propósitos mejores, y si yo lo tengo solo les causaré problemas… asique toma, señorita –me dijo entregándome la inocencia- se qué harás un mejor trabajo cuidándolo.
Me sorprendió el razonamiento de la pequeña Alice, era más madura de lo que parecía.
-Gracias, Alice –dije mientras sonreía- Por lo que dijiste antes, asumo que conoces un poco este pueblo
-S-si, era el pueblo donde vivía antes
-Bien, huye o busca un lugar donde esconderte, si no tienes la inocencia y no te ven los akumas estarás a salvo.
-¡Bien! –dijo obedientemente la pequeña mientras se alejaba-
Inmediatamente volví al lugar donde estaba Allen, mientras me iba acercando vi una última explosión. Cuando llegué, Pude ver que Allen estaba ensangrentado totalmente. Cayó de rodillas al suelo, su inocencia se deslizó de sus manos y finalmente cayó por completo en el suelo. Ningún akuma alrededor, pero él estaba muy herido. Me acerqué a él, llamándolo un montón de veces sin recibir respuesta de su parte.
Fin flashback Lenalee
-(Después de eso, recuerdo que me crucé con Alice, fui a su pueblo y había otros buscadores. Ellos se llevaron a Allen a la orden y a mí me encargaron traer la inocencia…no entiendo que pudo haberle hecho perder la memoria….¿pasó algo mientras peleaba contra los akumas?) –Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando vi a Lavi y la enfermera hablar mientras caminaban rápido-
-¿Hablas en serio, Lavi?
-Oh, enfermera, ¡ya le he dicho muchas veces que si! Allen no nos recuerda
-Bien, vayamos rápido tengo que comprobar que le sucede –dijo la enfermera caminando más rápido-
-(Yo también quiero saber….debería seguirlos) –dije mientras fui detrás de ellos-
¡Hola a todos! Acá traje el segundo capítulo de Amnesia, espero que les haya gustado, y disculpen si no respondí mucho de sus dudas o si tardé en subirlo U.U sinceramente, ¡muchas gracias por los reviews! Me emocionó mucho que les haya gustado esta historia, fue una loca historia que se me ocurrió de un día para el otro asique no pensé que les gustara… ¡estoy muy feliz! ¡espero que sigan disfrutando de Amnesia, nos vemos en el próximo capítulo!.
