Concurso de parejas

Era San Valentín y se suponía que ese año, para hacer las cosas más divertidas, los hijos de varias parejas iban a organizar un evento para sus padres.

Ishigami Tsukiku, de trece años, había tomado el mando del evento, a pesar de que nadie estuvo de acuerdo, y decidió que deberían hacer una competencia por mucho dinero para la mejor pareja.

Hubo oposición a su idea, pero acabó metiendo a Ryusui a la ecuación y él creyó que era una idea brillante y financió todo el proyecto (también por ser un tío consentidor), por lo que los demás se vieron obligados a ceder.

Tsukiku originalmente quería que fuera una competencia llena de preguntas científicas y pruebas físicas, pero al final las cosas se fueron por otros rumbos y planearon hacer algo que tuviera más que ver con el día de San Valentín, y fue por eso que ese catorce de febrero todos habían acabado en una gran pradera con un escenario, una pista de correr y una mini feria.

Aparte del dinero que aportó Ryusui, los padres de los niños habían aportado una cantidad significativa también, así que todo eso se iría al premio mayor, que resultó ser lo suficientemente jugoso para que incluso Senku, que consideraba aquello una total estupidez, sintiera ansias de ganar.

Y así comenzó la primera prueba.

—¡Bienvenidos, bienvenidos a todos nuestros participantes! —Elioth, hijo de Gen y Elise (una ex novia de antes de la petrificación con la que se reencontró), iba a hacer de anfitrión para el evento—. ¡Empezaremos con el emocionante concurso de parejas!~ ¡Primero! ¡Las parejas deberán presentarse y decir algo que les gusta el uno del otro! ¡Empecemos con la primera parejita!~

—¡HOLA! —Taiju agitó los brazos exageradamente saludando al público que estaba compuesto por sus hijos, amigos sin hijos y parejas que no quisieron participar ya sea que tengan hijos o no.

—¡Hola! —Yuzuriha saludó con menos entusiasmo.

Los dos estaban en un mismo podio que tenía una pantalla digital dividida en dos por una línea, con un corazón de cada lado, y todas las parejas tenían el mismo podio.

—¡Yuzuriha, me gusta todo de ti! ¡Muchas gracias por aceptar ser mi esposa! —gritó Taiju, abrazando a su mujer, que rio nerviosamente.

—Me gusta que me des las gracias cada día desde que nos comprometimos, pero en serio, no es necesario. —Palmeó su espalda con resignación.

Pasaron a la siguiente pareja, Chrome y Ruri.

—Me gusta de ella… umm… —Chrome frotó su nuca con nerviosismo—. B-bueno, me gusta todo, pero supongo que me gusta su sonrisa y cuando ríe y… todo eso. —Tosió incómodamente.

—Aw, me gusta cuando dices cosas así. —Ruri lo miró amorosamente.

El siguiente fue el matrimonio Saionji.

—Me gusta de mi esposa… el sonido de su risa. —Ukyo tomó la mano de su mujer, que estaba tan conmovida que se lanzó a besarlo y no dijo nada, por lo que Elioth pasó a Tsukasa y Minami.

—Me gusta de mi Tsuka… ¡todo! Pero lo amo mucho por ser un gran esposo y gran padre. —Se abrazó a brazo de Tsukasa, que palmeó su cabeza con rostro desinteresado.

—Hmm, Minami me ha dado a mi hijo, es algo que siempre le agradeceré —solo dijo Tsukasa, ganándose un chillido emocionado y más abrazos.

Pasaron a los padres de Elioth, Gen y Elise.

—Me gusta de mi Elise-chan su lindura y que es muy difícil para mí entenderla, es un dulce enigma~.

—Me gusta del pretty boy su dedicación, sin duda pone mucho empeño en sus objetivos —opinó sin mucho interés la señora Asagiri.

Pasaron a la siguiente pareja, Kinro y Kirisame.

—Kirisame es una guerrera fuerte y me gusta que siempre sigue las reglas. —Kinro asintió solemnemente, haciendo sonrojar a su esposa.

—Me gusta… lo mucho que tiene en cuenta el orden y las reglas. Es admirable —dijo ella, evitando mirarlo.

Podrían llevar quince años de matrimonio, pero algunas cosas no cambiaban.

Siguieron Senku y Kohaku.

—Me gusta de la leona… que aún no me ha matado por seguirla llamando así. —Senku rio al ver la mirada asesina de su esposa.

—¡Pues a mí me gustarías más si dejaras de llamarme así!

La última pareja eran Ginro y Shovel, una aldeana un par de años menor con dientes un poco saltones. Para todos fue una sorpresa que él se casara, pero Shovel lo gobernaba con puño de hierro, así que todos agradecían que ya no fuera tan molesto.

—A… a mí me gusta todo de mi esposa, claro. Todo —aseguró Ginro, sudando profundamente mientras Shovel lo miraba con ojos entrecerrados—. No tiene nada de malo, nada en absoluto.

—Y a mí me gusta que tengas eso muy claro. —Ella le apretó el hombro con fuerza, sonriendo.

—¡Empecemos con las preguntas!~ —canturreó Elioth, lanzando confeti de las mangas de su traje—. ¡Primero, una fácil!~ ¿Qué día se hicieron novios?~ Si uno contesta bien, tienen un punto. Si los dos contestan bien, tendrán los dos puntos. ¡Contesten!~

—¡Oh, yo lo sé! ¡Fue el día en el que Senku volvió del espacio! —gritó Taiju con entusiasmo.

—Sí, el primero de octubre —contestó Yuzuriha.

—Lo tomaré como válido, ¡punto para ambos!

—Veamos… —Chrome se llevó la mano a la barbilla, pensativo—. Fue en… en… Abril ¿no? —Miró nerviosamente a Ruri, que asintió con un suspiro resignado.

—Sí, en mi cumpleaños…

—¡Bu-bueno, acerté en el mes! —Aun así, Elioth solo les contó un punto.

—¡JA, JA! Esto bien podría arruinar algunos matrimonios. —Ryusui estaba divirtiéndose en las gradas junto con Francois y sus gemelos que nadie sabía si eran niños o niñas o de dónde habían salido.

El matrimonio Saionji contestó todo bien.

—Vamos, Tsuka, muéstrales a todos que sabes nuestro aniversario de novios —dijo Minami, con una sonrisa orgullosa, muy confiada.

Tsukasa la miró fijamente, antes de torcer los labios.

—Mi padre con suerte recuerda el aniversario de bodas, no creo que recuerdo esto —murmuró Haishi, único hijo de los Shishio.

—¡Ja, mejor! ¡Mis padres podrán tomar la delantera y ganaremos el premio! —Tsukiku sonrió, triunfante.

—Fue en… ¿julio?

—¿Qué fecha, Tsuka? —preguntó Minami entre dientes, con su sonrisa comenzando a temblar.

Tsukasa admitió no recordarlo y Minami se fue de espaldas lloriqueando. Al final solo obtuvieron un punto.

Gen y Elise acertaron en su respuesta, al igual que Kinro y Kirisame.

Cuando pasaron a Senku y Kohaku, los dos se miraron fijamente.

—La pregunta era… cuándo nos hicimos novios ¿verdad? —preguntó Kohaku nerviosamente.

Elioth asintió.

Kohaku miró a Senku, que tenía una mano en la barbilla, pensando profundamente.

—¡Agh, no puede ser! —exclamó Tsukiku—. ¡Más les vale contestar bien!

—Nunca tuvimos un noviazgo como tal… —contestó Senku lentamente—. Simplemente empezamos a… —Miró de reojo a los niños en las gradas— a besarnos… Y luego Kohaku se embarazo y Kokuyo puso un cuchillo en mi cuello para obligarme a casarnos.

—¡Y menos mal que lo hice! —gritó Kokuyo en las gradas, con Shizuku, hermanita de Tsukiku, en su regazo.

Elioth no les dio ningún punto y Tsukiku estrelló la palma de la mano en su frente, ya viendo el premio perdido.

Ginro no recordó el día en el que empezó su noviazgo y Shovel le dio un fuerte codazo en el estómago, aunque al final ella tardó dos minutos en recordar el día y Kinro dijo que ese no era el correcto y que ni siquiera estaba cerca y lo inventó, pero Shovel aseguró que era cierto y Elioth prefirió creerle y les dieron un punto.

—Creo que la siguiente pregunta debe ser más fácil y más importante, ¿qué día se casaron?

Taiju solo recordaba que su boda fueron dos días seguidos, pero no la fecha, solo tuvieron un punto.

Chrome tampoco recordó, solo un punto.

El matrimonio Saionji obtuvo los dos puntos, igual el matrimonio Shishio (Tsukasa era lo suficientemente responsable para recordar el aniversario de bodas).

Umi, hija de los Saionji, chocó los cinco con Haishi, ambos felices por el éxito de sus padres.

Elioth les preguntó luego a sus padres, Gen y Elise, que contestaron los dos correctamente el veinte de diciembre. Kinro y Kirisame tampoco se equivocaron y así llegaron a Senku y Kohaku.

—Eh… —Kohaku se quedó en blanco y miró a Senku, que la miró con resignación.

—Primero de octubre. —Eso sí lo recordaba, porque sí fue una fecha concreta, a diferencia del noviazgo.

—¡Al fin! —gritó Tsukiku en las gradas.

Por último, ni Ginro ni Shovel recordaron el día, así que obtuvieron cero puntos esa vez.

—Ow, pobrecitos… —Shira, hija de los últimos dos (perturbadoramente parecida a Ginro) hizo pucheros descontentos.

—Vamos con una pregunta un tanto comprometedora~. Sin embargo~, queremos que esto se mantenga para todo público, así que solo deben contestar~ ¿arriba o abajo?~ —preguntó Elioth, con una pequeña sonrisa maliciosa.

—¡Elioth! —Gen pareció sorprendido de que se atreviera, mientras que su madre sonrió casi orgullosa.

—¿A quién se le ocurrió esa pregunta? —indagó con disgusto Yok, un amigo de Tsukiku.

—¡A mí, JA, JA! —Ryusui chasqueó los dedos con una gran sonrisa.

—Pueden elegir no contestar, pero perderán el punto~ —canturreó el joven Asagiri.

Yuzuriha se sonrojó, mientras que Taiju pareció no entender, y su esposa le dijo que solo pasaran la pregunta.

—¡No pienso decirles nada, montón de depravados! —Chrome estrelló las manos con fuerza en su podio, aumentando más las risas de Ryusui. Ruri también pasó de la pregunta.

El matrimonio Saionji tampoco quiso contestar.

—A-abajo —contestó Minami, sonrojada, pero intentando fingir que no le importaba.

—Arriba —dijo Tsukasa sin interés ni vergüenza.

—Agh, creo que voy a vomitar… —Haishi enterró el rostro entre las manos.

—Arriba y abajo, ambos —contestó Elise, luciendo más bien feliz de decirlo.

—E-Elise-chan, nuestro hijo está aquí… pero bueno, ambos. —Suspiró resignado.

Por supuesto, Kinro y Kirisame se negaron a contestar.

—Arriba. —Kohaku, después de que Senku le susurrara a qué se refería la pregunta, contestó sin demasiada pena, aunque evitando mirar a nadie.

—Abajo. —Senku rascó su oído con fastidio.

—Pues yo prefiero estar abajo, pero… —A mitad de la contestación de Ginro, Shovel le pegó con una sartén en la nuca, callándolo de inmediato.

—¡Elegimos no contestar! —aseguró ella.

Hicieron otro par de preguntas y quedaron con mayor puntuación el matrimonio Asagiri, seguidos de cerca del matrimonio Saionji.

Pasaron a la siguiente fase del concurso, que era una carrera de parejas donde uno de los dos tenía que cargar al otro.

—Esto es ridículo, la leona los hará morder el polvo a todos, cargándome o no. —Senku rio arrogantemente, como si la enorme velocidad de su esposa fuera suya también.

—No soy una leona. —Kohaku solo lo miró mal.

—¡Lo sabemos!~ —Elioth rio alegremente—. Fue por eso que Tsukiku-chan propuso esta carrera~.

—Y para hacerlo más justo agregaremos accesorios para igualar más las condiciones —afirmó Haishi.

—¡Ja, de todos modos mi mamá ganará! —aseguró Tsukiku, con fuego en los ojos.

—Eh, yo también participó, ya sabes —murmuró Senku.

—Ah, sí, sí, claro, tu peso ligero será útil. —Tsukiku rascó su oído con indiferencia, ignorando la mirada ofendida de su padre.

A Taiju le vendaron los ojos y le pusieron patines, aprovechando que no sabía patinar. Tendría que equilibrarse mientras Yuzuriha lo guiaba.

—¿Quién cargará a quién? —preguntó Yok a Chrome y Ruri, ganándose una mala mirada de Chrome.

—¡Por supuesto que yo la cargaré!

—¿Estás seguro? —preguntó Ruri—. Soy más rápida que tú, querido.

—¡Y-yo puedo! —aseguró, casi lloriqueando, y Ruri rio con dulzura y palmeó su espalda, cediendo.

—Bien, entonces pueden tener estos patines con propulsores. —Yok les entregó una caja y pasó al matrimonio Saionji, mientras que Haishi y Kinji (hijo mayor de Taiju y Yuzuriha) llevaban varias muñequeras y otras cosas hacia el matrimonio Shishio.

—Debes colocarte todo esto, papá —le dijo Haishi a Tsukasa, enseñándole las muñequeras—. Cada una pesa cinco kilos. Además, también serás vendado.

—Muy bien. —No tuvo problemas en aceptar ponerse todas las muñequeras pesadas.

A los Saionji les dieron otros patines, mientras que a los Asagiri, además de los patines, le dieron un carrito a Gen para que pudiera cargar a Elise sin morir en el intento, siendo tan debilucho y siendo que Elise también era una nerd.

A Kinro y Kirisame los esposaron y vendaron los ojos del hombre.

Y en cuanto a Senku y Kohaku…

—Esto es ridículo, ya están exagerando —masculló Senku con disgusto al ver como colocaban muchas muñequeras pesadas en los brazos de Kohaku y además le vendaban los ojos y además le pedían colocarse unos zapatos con tacones de aguja como de veinte centímetros—. ¿Qué haremos si esos tacones se rompen?

—No se romperán, yo me aseguré de ello, tío. —Ruchiru, hijo de Chrome y Ruri, le sonrió con todos los dientes—. También soy científico, los diseñé junto con Kinji, duraran.

—Yo quise diseñarlos, pero no me dejaron —refunfuñó Tsukiku, pero nadie le hizo caso.

A Ginro solo le vendaron los ojos, sin ponerle peso extra ni nada, y hasta de eso se ofendió.

—¡Oigan! ¡Yo también soy un guerrero! —se quejó el rubio, ganándose otro sartenazo de su esposa.

—¡Tú cállate e intenta ganar!

La carrera empezó y Taiju dio un grito de guerra y salió corriendo… en la dirección contrario.

—¡No, Taiju-kun da la vuelta! —gritó Yuzuriha.

—¡¿A la izquierda?! ¡De acuerdo!

Tsukasa tomó la delantera, pero con los patines con propulsores todo iba más o menos parejo, excepto por Ginro llevando a Shovel mucho más atrás, zigzagueando por los constantes gritos de la mujer. Kohaku iba casi última, sorprendiendo a todos.

—¡Oh, vamos, leona! ¡Estoy diez billones por ciento seguro de que puedes hacerlo mejor que eso! —gritó Senku, ganándose un grito mucho más fuerte de que no era ninguna leona.

—¡Vamos, mamá! ¡No me hagas perder, ya aposté por ti! —gritó Tsukiku en las gradas.

—¡Vamos, mami y papi! —chilló la pequeña Shizuku, aplaudiendo.

Ya que pasaban cerca, Kohaku pudo escuchar los ánimos de sus niñas, aunque la mayor no era muy alentadora, pero eso la motivó y finalmente se acostumbró a los incómodos zapatos y corrió a toda velocidad, asegurándose de prestar atención a las indicaciones de Senku, logrando así estar a la par de Tsukasa.

—¡Más rápido, Tsuka! ¡Que no nos venza! —gritó Minami, jalando del cabello a su esposo, que hizo una mueca, pero siguió corriendo.

Al final, Kohaku ganó la carrera de todos modos y como celebración le plantó un gran besote en los labios a Senku, delante de todo el mundo, haciendo a muchos irse de espaldas puesto que no era nada común ver a esos dos darse una demostración de afecto.

—Ugh, ya me arrepentí de planear este concurso… —Tsukiku hizo un gesto de vomito.

La siguiente fase era más bien acumular puntos en juegos de feria, cosa que incluso podían hacer con sus hijos y lo que hizo que todos se divirtieran a lo grande, pero los niños organizadores se olvidaron de que Gen era un tramposo de primera y todo lo que el matrimonio Asagiri tuvo que hacer fue jugar a los dados y otros juegos de "azar" decenas de veces, logrando acumular tantos puntos que le ganaron aplastantemente a las demás parejas.

Aun así, todos se divirtieron y disfrutaron de juegos artificiales luego, donde algunas parejitas hasta se pusieron románticas, incluso los mismísimos Senku y Kohaku.

—Definitivamente —habló Tsukiku con repulsión al ver a sus padres volver a besuquearse bajo los fuegos artificiales—. Me arrepiento de este estúpido concurso.

Fin.

Holaaaaa :D

Lamento no haber subido esto ayer, estaba ocupada D:

Con esto ya doy por finalizada la bella Semana SenHaku :'D

En realidad termino ayer, pero me alegra haber llegado con todos los temas aunque tarde x'P

Último tema: San Valentín!

Ojala q este fic les haya gustado y que hayan disfrutado toda la semanita! Yo me divertí mucho!

No olviden que se les ama mucho, muchisimo y me despido!~

CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!