Dr. Stone no me pertenece es propiedad de Inagaki y Boichi, yo sólo tomo prestado a los personajes para fines de esta historia.

~De Princesos, confabulaciones y extrañas adaptaciones. ~

(Día. 6. Obra de teatro.)

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—Bien, bien sólo una vez más… pero esta vez por favor Senku-chan no te caigas de la mesa.

Fruncí el ceño al escuchar al odioso de Gen Asagiri darme esa indicación y con ese tono burlón que tanto lo caracterizaba. Él estaba de pie en una de las esquinas del escenario, sosteniendo ese absurdo altavoz que había sacado de quién sabe dónde, junto al murciélago también se encontraba Minami con un absurdo gorrito de director, hundiéndose por completo en el papel.

Era absurdo pero ese par estaba disfrutando más de lo necesario el poder y la "libertad" creativa que la profesora a cargo de esa absurda y denigrante obra de teatro les estaba dando, y ambos eran de temer.

¿Qué importaba que fuesen Gen y Minami los autores de esta atrocidad? Eso no les daba el derecho de denigrar mi integridad y el de varios de mis compañeros. Decir que no tuve opción sería quedarse corto pues Byakuya prácticamente me puso contra la espada y la pared con tal de verme hacer el ridículo para satisfacer alguna loca fantasía de padre… e incluso mamá lo secundó ¡Qué traición! Pero yo de verdad ansiaba ese viaje a estados unidos con Xeno para ver el lanzamiento del nuevo telescopio espacial así como la estadía de un mes para presenciar junto al equipo de la NASA las primeras imágenes que el James Webb enviaría meses después de su despliegue. Esta era una oportunidad de oro que no podía desaprovechar.

Y papá tampoco al parecer. Ni siquiera sé qué mañas usó el viejo para que el tío Xeno estuviera de su parte, debo recalcar que la única persona cuerda en todo esto fue Stan quien apeló a mi favor y llamó a todo esto una pérdida de tiempo. Por desgracia representábamos una minoría y nuestros sensatos argumentos fueron pasados por alto.

Entonces, aquí me encontraba, en uno de los molestos ensayos de esa profana obra que trataba de emular a la bella durmiente.

Y fue horrible.

—Y por favor Kohaku-chan ¿Podrías al menos tratar de evitar que Senku-chan ruede por ésta y termine en el suelo? Necesitamos a nuestra coestrella en una sola pieza para el día de la presentación.

Gruñí al escuchar esa absurda petición y miré en dirección a la leona para ver cómo se lo tomaría, sin lugar a dudas a pesar de no estar en los mejores términos conmigo, por ahora ella y yo coincidimos en una sola cosa: Asagiri Gen (el molesto niño que hasta hacía poco se unió a nuestra clase) sólo estaba molestándonos.

Ese murciélago se traía algo en manos, podíamos saberlo con sólo mirar esa calculadora y burlesca sonrisa, así como el enigmático brillo tras su mirada. Era de armas tomar y esta vez parecía estar confabulando con Minami en lo que sea que estuvieran involucrados.

Los miré de mala manera, aún no podía creer que yo terminara de esta manera.

—Senku no quiere que la gorila le dé un beso y no puedo culparlo por eso. —la voz de Chrome se alzó desde el otro extremo del escenario sin ningún descaro o temor alguno por su vida.

¿Qué hacía todavía aquí? Se suponía que los ensayos de sus escenas ya habían terminado.

— ¿Qué fue lo que dijiste? —Kohaku lo miró con molestia, como si quisiera golpearlo sin contemplación.

Y quizá así era pues si había algo que enojara más a Kohaku que yo la llamara Leona, era que Chrome le llamara gorila debido a su fuerza bruta. Era un tonto, nadie en su sano juicio se atrevería a meterse con ella de esa manera.

—Gorilaaaaaaaa. —canturreó de nuevo sin ningún aprecio por su vida.

Sí, definitivamente era un completo tonto y era un hecho que él moriría de camino a casa con esa Leona. Ellos solían volver a casa juntos a pesar de que Chrome viviera un par de cuadras después de la nuestra, a veces incluso los vi entrar a la casa de Kohaku cuando ella quizá lo invitó a almorzar.

A pesar de la manera en la que peleaban por esto, ambos parecían ser buenos amigos, lo cual fue raro ya que Chrome se transfirió a nuestra escuela a inicios de este año.

No debería importarme realmente el hecho de que esa molesta leona hubiera encontrado un nuevo objetivo y dejara de insistir sobre nuestra supuesta amistad, ya que a decir verdad mi pequeño plan dio resultados luego de que el grandulón gritara a todo pulmón en medio la clase la mentira sobre mi supuesto interés hacia Luna Wright, dando así inicio a la primer fase del mi coartada. Entonces ese mismo día puse en marcha la segunda fase de mi plan al acercarme a Luna durante el recreo para conversar con ella… Kohaku me ignoró después de eso y ni siquiera volvió la mirada en mi dirección o fugazmente como antes solía hacerlo.

Ni siquiera cuando el maestro me hacía pasar hacia el frente para resolver algún ejercicio o dar alguna explicación y muchos menos en los concurridos pasillos o en las salidas de vuelta a casa.

Fue extraño perder repentinamente el interés de la Leona pero era lo mejor para mi estabilidad mental y emocional, honestamente ya no podía soportar las insinuaciones de papá sobre eso, fue vergonzoso.

Sin embargo la tranquilidad me duró poco ya que alguien corrió el tonto rumor de mi interés por la niña estadounidense y Luna se enteró, fue entonces que mi verdadero tormento comenzó.

En pocas palabras mi tortura autoimpuesta.

Luna no era una mala niña en realidad pero era demasiado insistente y parecía ilusionarse demasiado rápido con estas cosas. Sin embargo a diferencia de Kohaku y por alguna razón que yo aún no termino de comprender, esto me resultó incluso más molesto.

Y para mi suerte (o desgracia) ella se enteró de mi plan gracias al bocota de Ginro, quien escuchó todo lo que en una ocasión le dije a Taiju para que dejara de atosigarme al respecto. Y entonces nuestra ficticia relación terminó una semana después con Luna arrojándome un refresco a la cara en uno de los pasillos más concurridos.

Meh. No fue algo que realmente me afectara después de todo.

Pero Kohaku tampoco volvió a hablarme luego de eso como pensé que lo haría y ella me evitó aún más. ¿Qué esperaba? Bueno tal vez que ella insistiera de nuevo sobre nuestra amistad (posiblemente) pero nada de eso pasó.

Me había equivocado.

Incluso me evitó cada vez que nos encontrábamos casualmente en la calle, lo cual era absurdo ya que vivíamos frente al otro, pero claro, eso sólo aplicaba a mí porque ella solía saludar con entusiasmo y respeto al viejo y a mi Madre, incluso a Xeno y Stan cuando ellos nos visitaban o se quedaban por una semana.

Me volví inexistente para ella pero eso es lo que quería ¿No?

— ¿A quién llamas gorila? —Kohaku enrolló el guion que llevaba en manos para después arrojársela a Chrome dando justo en el blanco, el montón de hojas se desperdigó en el rostro del burlón tonto—. No me gusta que me llamen así.

Sí ella realmente parecía odiar a un más ese apelativo.

—Y en todo caso Chrome-chan, Kohaku-chan tendrá que darle ese beso a Senku-chan ¡Así lo dicta el guion y así lo requiere la trama! —Gen volvió a molestar en modo dramático.

—Un tonto guion que Minami y tu escribieron, murciélago. —estreché la mirada en acusación hacia ese par.

Me leí y aprendí cada maldito diálogo y párrafo de esa cosa y honestamente desearía nunca haberlo hecho, casi me sangran los ojos después de eso. No es que fuese completamente malo porque al parecer esos dos poseían cierto talento para la escritura y la dramatización (por algo la profesora de artes solía elegirlos en cada ocasión) sin embargo esto… reitero, era una profanación de la historia.

— ¿Entonces cómo el apuesto príncipe despertará a su verdadero amor del trágico hechizo que Maléfica le ha lanzado? —Minami agregó, levantando el guion al aire para dar incluso mayor énfasis.

—Nuestro querido príncipe ha soportado vientos despiadados, infernales desiertos… ha escalado cada escalón de la torre más alta donde su amor lo espera tras una delicada cortina…

— ¿Eso no es de Shrek? —Taiju interrumpió el plagio descarado del murciélago cuando gritó desde las butacas, donde Yuzuriha y Amarillys le estaban haciendo una de las pruebas de vestuario junto a otros de nuestros compañeros.

— ¿Qué clase de adaptación se supone que es esta y por qué demonios me escogieron a mi como la bella durmiente? ¿Por qué rayos no me dejaron cambiarle mi papel a Kohaku? —me quejé. Todavía no podía creer que tuviera que interpretar el papel de la princesa durmiente… esto definitivamente era negligencia estudiantil.

La profesora a cargo de la clase de arte pareció incluso estar de acuerdo en todas las jodidas decisiones de esos dos. Claro que en nuestra cultura se practicó este estilo de teatro desde épocas remotas en la que los hombres tenían que asumir ese rol en las representaciones dramáticas… pero esto… oh, podía oler el aroma del engaño y la diversión por todas partes.

—A mí no me importa ser el príncipe, sólo creo que deberían cambiar a Senku… ha estado arruinando todos los ensayos y de verdad ya queremos irnos a casa. —Kohaku por fin habló, nuevamente sin mirarme.

De hecho tampoco lo había hecho durante nuestras escenas, siempre volteaba la mirada hacia cualquier lugar que no fuese hacia mí, fue un poco molesto si puedo decir. Y claro, no era ella la que tendría que usar la molesta peluca ni el estúpido y denigrante vestido, incluso parecía divertirse con la falsa espada de madera que le habían proporcionado para el papel.

—Sólo las escenas del beso —agregó Minami dándole la razón a la leona—. Y sí, debo darle la razón a Kohaku en esta ocasión, el festival escolar será en una semana y no hemos logrado avance alguno en este mes. Además Senku actúa horrible si me permiten agregar… parece un poste que escupe los diálogos sin emoción.

—Intenta recitar esos diálogos sin escupir ácido por la boca. —bufé. Y era verdad ¿Quién rayos escribió esa cosa en primer lugar?

—Son los diálogos de Minami-chan —Gen palmeó la espalda de Minami quien parecía estar a punto de arrojarme una de las sillas que tenía a su alcance—. No seas tan grosero con ella Senku-chan.

—Sólo terminemos con esto de una vez por todas. Kohaku y Senku háganlo una vez más y les advierto que si las cosas siguen así ¡Se quedarán el resto de la tarde si es necesario! —Minami nos envió una severa mirada de advertencia con la promesa de que sus palabras eran verdaderas.

Quizá se veía como una niña frágil e incluso un poco mimada pero en realidad podía llegar a ser una pequeña fiera cuando alguien conseguía sacarla de quicio. Escuché a Kohaku gruñir por lo bajo y maldecir, ella tampoco quería esto pero a diferencia de mí, yo no sabía qué la motivó a aceptar en primer lugar. Pero fue obvio que no lo estaba haciendo por gusto.

—Sólo terminemos con esto —la Leona puso los ojos en blanco y se volvió hacia mí, por primera vez después de muchas semanas al fin me miró—. Súbete a esa tonta mesa de una vez Senku, Chrome me ha esperado lo suficiente y yo necesito llegar a casa. Te golpearé si arruinas esto de nuevo.

No parecía estar bromeando con su amenaza y lo supe cuando ella prácticamente me arrojó sobre la mesa y me obligó a permanecer inmóvil mientras recitaba sus diálogos, y debo admitir que fue fascinante verla exclamar cada palabra con la fuerza e intención que les daba. Sí, quizá el papel de príncipe no fue escrito para mí.

— ¡Bebió la pócima… bésalo ya! —desde mi posición sobre la mesa y con los ojos cerrados pude escuchar nuevamente a Gen chillar con el altavoz.

—Pero qué rayos dices Gen ¿eso es de Shrek otra vez? —Minami pareció entre incrédula y divertida.

—Sí bueno, me pareció una buena oportunidad para dejarla pasar, Minami-chan —qué demonios, ese niño a veces era un tonto—. Como sea ¡Ahora Kohaku-chan! Rompe el hechizo sobre tu princesa dormida, ¡libérala del hechizo y consigue su amor!

Abrí los ojos sólo por un instante y por el rabillo pude ver al murciélago con una ridícula emoción, como si realmente hubiera esperado por este momento desde el principio. Si no lo supiera mejor, quizá pensaría que había escuchado los viejos rumores sobre nosotros del cuarto grado. Uhg, realmente espero que no porque Asagiri es la última persona que debería inmiscuirse en esos asuntos.

— ¡Cierra la boca Gen! —Kohaku le gritó mirándolo de mala manera antes de volver a enfocar su atención sobre mí.

Me descubrió espiando por y su ceño se frunció a más no poder, instintivamente volví a cerrar los ojos. No es que le temiera, pero esta era una situación por demás vergonzosa para ambos, en especial para mí ¿Cuán bajo había caído?

Sentí la cercanía de Kohaku entonces cuando ella se inclinó más cerca, vociferando un par de diálogos más. Entonces nuevamente y como las veces anteriores, comencé a inquietarme por la invasión de mi espacio personal pues la verdad era algo que me resulta por demás incómodo y que sólo permito con mis padres, Xeno y Stan o incluso con el grandulón.

No he olvidado mi primer encuentro con Kohaku el día de la mudanza, ni ese invasivo y desprevenido apretón de manos en mi patio cuando apenas teníamos seis años… pero esto, esto definitivamente era diferente.

Entonces abrí los ojos con pánico, ella estaba a sólo un par de centímetros de mi rostro ¡ella de verdad planeaba hacerlo! ¿Por desesperación de irse pronto a casa? Era eso ¿verdad?

Estuve a punto de volver a hacerlo, las caídas no me dolían ni un milímetro… sin embargo antes de que pudiera zafarme como las veces anteriores ella colocó una de sus manos en mi hombro para impedir mi huida. Maldición, estaba condenado.

Fruncí el ceño esperando lo peor, pero entonces la mano de Kohaku me sorprendió al cubrirme la boca. La miré sin entender lo que estaba pasando, pero mi ignorancia no demoró en ser resuelta cuando ella se limitó a besar el dorso de su mano en ligar de a mí.

Y eso realmente me provocó… ¿Decepción?

No, no, eso no podía ser. ¡Era brillante! La maldita solución a nuestro problema. ¿Cierto?

— ¡Corte! No hubo contacto…

Kohaku se apartó apenas la voz de Gen hizo ruido en el lugar. Me dio una última mirada de soslayo antes de ir a golpear a Gen. Yo me levanté de la mesa, intentando que ninguna emoción de aturdimiento o impresión… incluso decepción asomara por mi rostro.

—Es todo lo que te puedo ofrecer murciélago, a menos que quieras ser tú el que tome mi lugar y bese a Ishigami en esa escena.

—Pero ¿Por qué tanta hostilidad Kohaku-chan? Yo solamente quiero que nuestra presentación sea la mejor del festival y para eso necesito compromiso de su parte… incluso Ginro como el árbol cuatro parece tomarse en serio su papel.

—Idiota, él se quedó dormido desde que esta cosa empezó. —le gruñí. No fui el único que notó la desfachatez de Ginro pero Gen quería hacerse de la vista gorda.

—Ya deja de molestarlos Asagiri —Minami se acercó a nosotros y arrojó el gorro a un lado antes de volver a hablar—, y terminamos por el día de hoy… yo también debo llegar a casa. Bien vámonos todos…

— ¡Pero Minami-chan!

Gen se quejó pero nadie le hizo caso, antes de que Minami cambiara de opinión nos escabullimos del teatro y nos fuimos directo a la salida. Me encontré a Kohaku a un par de cuadras junto a Chrome, ambos estaban comprando unos helados o algo parecido, Chrome me saludó a la distancia y yo simplemente me limité a responderle con un gesto distraído.

Kohaku me miró entonces y vaciló, como si también quisiera hablarme pero se contuvo. La vi marcharse con Chrome después de eso y me quedé ahí, cuestionándome sobre esta extraña sensación en mi pecho.

Esto era lo que quería ¿Cierto? Que la leona me dejara tranquilo con su insistencia y lo había conseguido… entonces ¿Por qué me sentía de esta manera? Como si hubiera perdido algo importante.

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N/A:

Un poco tarde por los asuntos personales que hay por aquí pero a final de cuentas aquí está el tema 6… el último tema de esta Week la subiré en un par de días… gracias a quienes se pasaron a leer estos shots uwu

Se les quiere un montón…

Esto es algo así como un What if o una especie de Spin-off de otra historia que tengo por ahí que también retomaré este año :3

Espero fuese de su agrado y pues nada… hasta la próxima! n.n