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•Capítulo 3•

•"La letra de un sospechoso"•

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—Veo que sigues con la misma actitud.

¿De nuevo tú?

—Solo te habló por que él estaba alterado, a pesar de todo no quiere preocuparlos.

Si el idiota de Deku no quiere preocupar a los demás, entonces que se lo diga a alguien que de verdad le importe.

—Eres el único que tiene en sus contactos, ¿Cómo quieres que lo haga?

—Solo pide una cosa.

No me importa.

Adiós.

—¡No! ¡Esperá!

—Lo único que quieres es que le digas a los demás que esta bien.

—¡Solo eso!

¡Yo no soy ningún maldito mensajero!

¡Si no quiere preocupar a los demás que venga y muestre su puta cara de una vez!

—Núnca te ha pedido un favor.

¿¡Y!?

—¿No creés que sería bueno complacerlo con aunque sea uno?

¡Como dije! ¡No soy un maldito mensajero!

¡Si ese bastardo creé que puede irse así nada mas para luego tomarme como un teléfono humano esta bastante equivocado!

—"Teléfono humano"

—Suena bastante gracioso para ser escrito por una persona con tu tipo de genio.

Maldición.

—Vamos, solo ese favor.

No.

—Por favor.

¡No!

—No será nada mas.

¡Eres tan molestó como ese nerd! O acaso debería de decir, ¿Molesta?

—No soy mujer.

¡ja! Eres tan idiota.

Tú mismo te acabas de delatar.

—¿En qué? Solo admití mi sexo.

Que despreocupación.

Pero hay algo que no entiendo.

—¿Cuál?

Deku nunca tuvo mas amigos a parte de mi y de los otros idiotas que siempre lo molestabamos.

¿Hubo algo que ese imbécil no nos dijo?

—Es mejor que te quedes sin saber.

[Visto. ]

[Cinco en punto de la tarde, tres de abril.]