Los siguientes días dentro de la Academia Youkai pareciera transcurrir de manera normal para los chicos del Club de periodismo. Habían podido adelantarse en los estudios que habían dejado atrás debido a los conflictos en el que se habían visto envueltos muy seguidos, habían tenido más trabajo extra correspondiente a su Club esta vez sin censuras como la comisión de seguridad pública fue destruida.
Esto sin embargo, había dado pie al poco tiempo libre debido a que faltaba solo menos de un mes para la terminación del primer semestre y las clases y exámenes se hacían más intensos. Por lo que el mantenerse los chicos ocupados, era algo ya natural.
"Odio las matemáticas ahaha…" decía nadie menos que Aono Tsukune casi que llorando en su escritorio de estudiante de su salón como en estas se daban las clases de matemáticas comunes de secundaria
Su compañero sentado a su lado, de cabello castaño casi rojizo, llamado Kay Namura, procedió a verlo de forma que evocaba lastima por él. Se notaba por la expresión del chico que debía de costarle entender todas las directivas y reglas que la profesora estaba dictando en el pizarrón lleno de fórmulas matemáticas que parecían interminables.
Para Kay no había mucho problema en seguirla aunque le representara por momentos dificultad, no en si por las fórmulas matemáticas sino por la apariencia de la profesora que las dictaba, Ririko Kagome se llamaba según recordaba. Ella vestía una blusa la cual llevaba una ranura abierta dejando ver parte de sus senos y un traje de cuero que llevaba debajo añadía mas atracción hacia la susodicha profesora, eso si contamos su falda muy corta que ninguna maestra debería de usar añadía a unas medias negras casi transparentes que dejaban ver parte de sus encantadoras piernas.
Honestamente, ella parecía vestir como una de esas Dominatrix pero encubiertas que había visto en revistas y demás por ahí. No como una maestra de clase. El chico suspiro, la Academia Youkai sí que era un lugar muy peculiar después de todo.
"Muy bien, resolvamos este problema usando este modelo de formula… adelante Tsukune-Kun." le dijo la maestra Ririko refiriéndose a Tsukune el cual salto sorprendido de su asiento
"etto… s-si… a ver… jejeje…" Tsukune no podía gesticular nada coherente como no sabía qué hacer en algo que no comprendía
"Bueno ¿no estabas prestando atención a tu profesora o sí? No deberías andar fantaseando en clase." dijo la Sensei moviendo un dedo negativamente
"Ya que después de todo la prueba de semestre está por venir… ya que estamos acabando el primer semestre, así que estudien muy duro." termino de decir la profesora
"¡uwaaaa! ¡Me había olvidado completamente de la prueba de semestre! ¡Si no paso me tocara repetir de nuevo el semestre!" Eran los pensamientos frenéticos del chico como parecía perdido
La maestra Kiriko solo lo miro fijamente dándole una mirada curiosa, decidió que lo vería después de clases.
…
"¿Quieres que te ayude en matemáticas?" le preguntó Kay a su amigo Tsukune mientras ambos caminaban por los pasillos de la escuela
"¡Si por favor! ¡Tú eres muy bueno en eso! ¡Además que en la última vez ocupastes un lugar entre los diez primeros!" le dijo Tsukune pidiéndole ayuda
"Fue el décimo puesto por si no lo recuerdas." le recordó el chico peli castaño
"Pero al menos lo lograste… yo a duras penas puedo seguirle, ya que nos hemos estado metiendo en situaciones peligrosas una después de otra… el estudiar simplemente se me fue de las manos. Cuando me di cuenta ya era tarde para ponerme al día… aunque he conseguido ¾ de todo hasta ahora meter en mi cabeza… las matemáticas ahora siguen siendo un misterio para mí." le respondió el chico peli marrón
"Pero bueno… eso son fórmulas que se vienen estudiando desde el año pasado… ¿no me digas que en tu antigua escuela seguías teniendo problemas con esto?" le pregunto curioso Kay
"No me preguntes por eso Kay-san… tu sabes del porqué de mi presencia aquí." le respondió el chico deprimido con un aura de depresión encima de él que lo hacía ver peor
Kay solo se rasco la cabeza, honestamente sabia del porque Tsukune estaba aquí ya que era su ultimo chance de pasar el grado. Igual él no tenía tiempo tampoco para ayudarle aun con lo mucho que quisiera. Tenía que a veces alternar entre sus estudios y deberes como estudiante aunque fueran una simple tapadera, e investigar más el área de este lugar tratando de hallar alguna pista sobre el paradero hasta ahora desconocido del que había sido el Vigilante de este mundo… si es que alguna vez existió.
"Escucha Tsukune, me gustaría ayudarte de veras… pero también tengo mis responsabilidades ¿sabes? Así que no sé si me quede tiempo de ayudarte… ¿Por qué no le pides ayuda a Moka o Yukari? Estoy segura que ellas te darán una mano…" respondió el chico como después tuvo que despedirse para continuar con su investigación de la escuela
Tsukune solo se quedó en el pasillo, sin saber qué hacer. No quería serle una molestia a Moka y ya
Kurumu había solicitado (o más bien obligado) la ayuda de Yukari, pero no tenía otra opción si es que quería pasar el semestre.
Fue cuando una voz que le llamaba lo sacó de sus pensamientos.
"¡Tsukune-Kun! Qué bueno que te encontré, te andaba buscando." era la voz de Ririko Kagome, la maestra de matemáticas
"¿Sensei? ¿Qué se le ofrece?" le pregunto el chico curioso por saber qué quería su maestra con el
La expresión de Ririko era suave como le hablo en palabras amables "¿No has podido rendir en clase últimamente, verdad? Eso ha llamado la atención de tu Sensei."
Tsukune solo trago saliva ante sus palabras, Ririko se sonrió cuando descubrió eso.
"Si necesitas ayuda en tus estudios, entonces tu Sensei te la dará…ven a mi oficina después de clases. Te daré clases especiales después de la escuela. Tus estudios serán más fructíferos que estando solo." ella dijo antes de acercarse a Tsukune y presionar su suave cuerpo en contra del chico
Ella acarició la mejilla del chico haciéndole sonrojar por la proximidad peligrosa con la que la maestra se le acercaba. Ella era hermosa y el uso de gafas le hacía resaltar más su atractivo sexual.
"Sabes, estudiar es algo grandioso y es una de las cosas que te enseñare." le dijo la hermosa maestra como procedió a alejarse dejando a un chico rojo y confundido detrás
…
En el salón del Club de Periódico…
"¿Eh? ¿Tomaras clases después de escuela con Ririko-Sensei?" exclamo Kurumu sorprendida
"Si, así es. Antes que me diera cuanta, ya estaba metido en eso." exclamo un Tsukune derrotado sentado en una silla
Los únicos en ese momento en el salón eran Tsukune, Kurumu, Yukari y Moka la cual esta estaba sentada más atrás mientras repasaba sus libros para los próximos exámenes a venir. Kay no se veía por ninguna parte ni tampoco Gin, fuera de la terminación del semestre, no han habido muchos trabajos referentes en los Clubes en estos últimos días debido a que todos se preparaban para los exámenes por ende que no hubiera casi trabajo para cualquiera de un Club.
"Es una lástima, ella siempre es así." dijo Kurumu rompiendo el hielo
"¿Kurumu-chan?" decía Tsukune confundido
"Ririko-Sensei es mi profesora de curso, pero es algo extraña. Ella se apasiona por enseñar, pero ella es el tipo de persona que tiene solo una cosa en mente y no puede pensar en más. Así que ella tiene la tendencia de sobrepasarse con todo." le explico Kurumu
Tsukune solo trago saliva ante eso, se oía muy exigente esa profesora.
Pero Kurumu rompió toda sensación de hielo con lo siguiente que dijo "¡Además solo porque tiene tetas grandes es que se lleva la atención de todos los chicos! ¡Las mías son más grandes!"
Tsukune solo enarcó los ojos ante esto, Moka solo se sonrojo como miro a su propio pecho solo para después sacudir la cabeza y no prestarle más atención siguiendo con lo suyo. Yukari solo aprovechó para burlarse de la peli azul.
"¿No me digas que estas celosa de las tetas de tu profesora? Actúas como un bebe Kurumu-chan." le dijo la pequeña bruja burlona
Mientras ambas proseguían a una aparente discusión sobre el tamaño perfecto para las mujeres, lo cual Tsukune solo suspiro, su atención se centró en Moka que estaba concentrada estudiando.
"Moka-chan ¿sabes a donde fue Kay-san? Casi no se le ve últimamente por aquí." le pregunto Tsukune curioso
Moka solo fijo su vista un momento en el para responderle.
"Él ha estado algo ocupado terminando a lo que vino a hacer aquí. Por ende que no ha tenido mucho tiempo de venir aquí, entre tratando de estudiar y hacer su trabajo le queda pesado, pero lo entiendo. Además no importa, pronto se terminara el semestre y tendremos más tiempo de pasarla juntos." respondió la chica sonriendo antes de volver a lo suyo
Tsukune solo la miro algo triste, era probable que Kay se fuese terminado el semestre por lo que la confianza de la chica le parecía más bien un intento de ocultar su ansiedad ante esto, no pudo pensar más cuando las otras dos chicas llamaron su atención.
"De todas formas ¿Cuál es el problema con las clases después de la escuela? Tenemos las vacaciones de verano terminado el semestre de todas formas." respondió la joven bruja escribiendo en el pizarrón usando magia de su varita para hacer aparecer las palabras
"Y en nuestra Academia los estudiantes que obtienen menos de 50 puntos, tienen que ir a un colegio de verano obligatoriamente. Así que el tiempo para estudiar es ahora… ¡si quieren estar libres para este verano!" exclamo una contenta
Yukari agitando su varita
Tsukune solo sudo frio ante esto
"Las vacaciones de verano, me había olvidado de eso. Así que hasta la Academia Youkai tiene vacaciones de verano normales. ¡En ese caso me esforzare para obtener buen puntaje! Y después podré pasar tiempo juntos con todos…" eran los pensamientos de Tsukune como se había animado por la noticia y encontrado una motivación
…
Kay se encontraba caminando afuera por los alrededores de la escuela, estos momentos los aprovechaba para investigar el terreno de esta dimensión, más en relación con el paradero del vigilante desaparecido, lo cual sugiere que después de todo este tiempo en que no se han hallado rastros de este, sugiere que no podría estar vivo.
Él no tenía forma de probarlo ya que debido a sus débiles poderes no tenía forma de hacer un rastreo más minucioso del área donde se encontraba, no podía enfocar su Ki o Cosmos para seguir un rastro de señal aun con todo el tiempo que paso. No podía ni enfocar su mente, menos usar algún truco mágico, no podía hacer nada más que hacerlo a la antigua que era recorrer toda el área en busca de algo 'extraño' o 'fuera de lugar'. Algo de por sí muy natural en este lugar sobrenatural. Prácticamente era como buscar una aguja en un pajar.
El chico se tomó su tiempo como se paró cerca de la entrada del túnel por donde había venido hasta aquí, cerca de su lado había una especie de espantapájaros tenebroso con un cartel y detrás de este había un acantilado que daba a un mar que parecía rojo color sangre.
El chico solo se quedó viendo el mar pero sin verlo realmente, solo atrapado en sus pensamientos. Pronto su tiempo aquí terminaría y no había podido encontrar pistas del paradero del vigilante, aunque quizás alguien más se encargaría de esto como el
Mundo Espiritual, el trabajo y ayuda prestada por los Centinelas había acabado, y no había pruebas de que algo más incluyeran su presencia prolongada en este mundo. Si bien parte de él se alegraba por volver al lado de su hija, algo dentro de él, sentía que esto no había terminado, y que habían más misterios por resolver aquí.
No sabía porque, pero tenía esa sensación de que algo faltaba y que no estaba bien. ¿Sería esta horrible sensación algo que ver con lo que sucedía en el mundo espiritual que le dijo Kurama? ¿Con la desaparición del Vigilante? ¿Algo más sucedía que él no se diera cuenta? ¿El director Mikogami sabía algo que no quería decirle?
El chico peli castaño suspiro, había tantas cosas que no cuadran de hecho. Pero no sabía dónde o cómo empezar a buscar, este lugar le mantenía casi que 'cautivo' e incomunicado del mundo exterior. Además que prácticamente vulnerable a cualquier ataque con sus poderes anulados.
Quizás era mejor no pensar en ello, debido a que estaba próximo por irse. En uno de sus bolsillos estaba una carta que le había llegado de parte de Kurama directamente del mundo espiritual a su correo. No la había leído aún todavía pero estaba seguro que era debido a su pronta terminación de su misión aquí. El solo dejo que una suave brisa que pasaba por ahí le recorriera como cerró sus ojos y no pensó en nada más. Solo relajarse por unos momentos.
La sensación de comodidad duró poco pero fue placentero, él sabía que si quería podía quedarse más tiempo aquí si podía, ya que él podía regresar al lado de su hija cuando quisiera y sin necesidad de que pasara mucho tiempo, podría volver poco después de que se fuera y no haberse perdido de mucho. Pero realmente fuera de su sentimiento de que las cosas no parecían conclusas, no había más razones de peso o legítimas para su presencia aquí. Este mundo debía de continuar su camino sin él y ver como la relación entre humanos y Youkais podrían en un futuro florecer por buen camino.
Si es que lugares como la Academia Youkai existían, o gente como las del Mundo Espiritual que se encargaban de vigilar todo este proceso. El no pudo más que desear el fumar un cigarrillo en esos momentos pero no había traído uno consigo a este lugar, por lo que no pudo más que aguantarse las ganas una vez saliera de este sitio.
Extrañaría en parte este lugar, ignorando las batallas y luchas a muerte que libró el aquí, su estadía aquí ciertamente fue peculiar por muchas cosas peculiares en este lugar, pero a la larga diría que hasta fue divertido. Extrañaría además a sus compañeros y amigos que hizo aquí, no les dijo toda la verdad pero era mejor así, no necesitaban saber más que para confundirse o entristecerse si es que no lo volvían a ver. Pero uno nunca sabe, quizás si tuviera tiempo, pudiera venir de visita aquí alguna vez. Quizás.
El chico solo se regresó por donde vino, ya se estaba ocultando el sol y no quería quedarse atrapado en medio de la oscuridad en este lugar tan peligroso. El solo pensó en llegar a su dormitorio rápido, hacer sus trabajos y deberes, comer algo y finalmente poder acostarse a dormir después de un día ajetreado.
…
Salón de conferencias
Tsukune solo trago saliva como se encontró frente a la puerta del salón. Aunque seguía motivado por saber lo de las clases de verano, parte de el no pudo evitar sentir escalofríos ante lo que hacía.
"Disculpe, soy Aono Tsukune de la clase 3 de primer año. Estoy aquí por las clases extra. Voy a pasar." respondió el chico como sin más procedió a entrar al salón donde debía de esperar su profesora
Al entrar no pudo evitar quedarse rígido como si fuera de piedra ante la vista de él. Lo que veía parecía sacado de la casa de una bruja, sin ofender a Yukari claro. Había cortinas que colgaban del techo y cubrían las ventanas, había también velas y candelabros encima de mesas contada por veintenas, así como calabazas y calaveras también que brillaban. Ni que decir de extrañas ollas que parecían salir burbujas de quien sabe qué. Una extraña niebla también parecía cubrir el salón lo que hizo aterrar más a Tsukune.
"Me alegra que hayas venido Tsukune-Kun." hablo una voz como la puerta detrás de él se cerró de golpe dejando notar a la figura que estuvo detrás de esta todo el tiempo
La figura era Kagome Ririko, la maestra de matemáticas la cual había citado a Tsukune hasta aquí. Ella parecía vestir con poca ropa como llevaba puesta una falda corta de cuero sobre un ligero negro ajustado. Su estómago estaba al descubierto dejando ver su ombligo, llevando una camiseta de mangas de cuero negro que estaba divido por la mitad solo unidos con cordones para no dejar a la imaginación los prominentes senos de la profesora. Además de una medias rayadas y tacones altos, ni que decir de sus gafas que le hacían ver más Sexy.
Tsukune solo pudo más que entrar en pánico, puesto que se sentía avergonzado de la situación incómoda en la que se encontraba "¿¡Ririko Sensei!? ¿¡Porque anda usted vestida así!?"
"¿mph? Solo pensé que vistiendo así, te ayudaría a concentrar en tus estudios." pregunto ella casi que sonrojada
"¡Eso es un poco raro! ¿¡En qué clase de cosas anda metida Sensei!?" dijo Tsukune pero su diatriba fue detenida como un corte en su mejilla derecha le detuvo
"¿Extraña? ¿Qué puede ser extraño? yo soy tu Sensei." hablo la mujer con voz sepulcral mientras sostenía un látigo en sus manos con el cual había atacado a Tsukune
"En educación, la Sensei es la que demanda respeto, y los estudiantes son esclavos del Sensei."
"¡E-espera un minuto Ririko-Sensei!… Deténganse." hablo el chico ahora asustado como intentaba mediar ante quizás la maestra enojada
"Mis clases de escuela son muy estrictas. Pero todo es por tu bien Tsukune-Kun." sonrió la mujer mientras se ajustaba las gafas "¡Ah! ¿No es maravillosa la educación?"
Terminó de decir la hermosa mujer como Tsukune solo trago saliva ante esto.
…
Al día siguiente por la mañana…
Por los pasillos de la Academia Youkai.
"¡Yukari-Chan! ¡Ayúdame a estudiar, por favor!" Le rogo Kurumu a la joven bruja
"¡Eso no va suceder!" rio la pequeña niña, no tenía ninguna intención de ayudarla
Pero antes de que pudiera hacer algo, fue envuelta en una fuerte soga inmovilizándola por la mitad de su cuerpo.
"¡Kya! ¿¡Que me estás haciendo!?" Grito la joven bruja siendo casi que arrastrada por la Súcubo
"¡Tú me tienes que ayudar! Estoy empezando a preocuparme por la prueba de semestre." le dijo la chica peli azul como seguía arrastrando a la pobre
niña por todo el corredor
"¡Ya es muy tarde para ti Kurumu-Chan! ¡No tienes ninguna oportunidad!" le grito Yukari pero Kurumu no quiso hacer caso como seguía
En eso al dar vuelta por una esquina del pasillo choco con una figura que casi la hacer caer.
"¡Kya! ¿Oh? ¿Tsukune?" decía Kurumu al darse cuenta que con quien había chocado era Tsukune a espaldas de ella sin voltearse
Tsukune solo se quedó rígido sin voltear como profería frases en un tono bajo.
"¿Tsukune, estas bien? Estas actuando de una manera extraña." le dijo Kurumu pero Tsukune seguía sin prestar atención como seguía recitando frases
Yukari tomo nota de lo que decía y no pudo más que reprimir un gesto de sorpresa por lo que había entendido.
"Él está recitando fórmulas matemáticas. ¡Y de las verdaderamente difíciles que todavía ni hemos aprendido!" exclamo Yukari sorprendida
Kurumu solo no pudo más que sonreírse a sí misma, quizás había encontrado a alguien más útil y dispuesto que Yukari a ayudarle a estudiar ¿y qué mejor que su destinado?
"¡Qué hombre tan inteligente eres! ¿Realmente eres bueno estudiando no Tsukune?" decía Kurumu tratando de abrazar al chico pero casi lo logra como este le rehuyó comenzando a caminar lejos
"Uh… ¿Tsukune?" se quedó Kurumu confundida por su acción lo mismo que Yukari Algo raro estaba pasando con Tsukune.
…
Kay y Moka caminaban por los pasillos de la escuela, ambos charlaban como seguían caminando
"¿Entonces Tsukune te pidió ayuda ayer?" le pregunto curiosa Moka
"Pues sí, pero como sigo ocupado no pude ayudarle. ¿Él te pidió ayuda de casualidad? Le pedí que lo hiciera si no podía él solo." le respondió el chico Namura
"Pues no, no lo hizo. De hecho según me entere ayer, él está recibiendo clases extras por la misma
"Profesora Ririko." le dijo la chica peli rosa
"¿Ah sí? Supongo que debe ser algo bueno, al menos recibirá ayuda de alguien mejor de la que podamos brindarle nosotros." respondió Kay encogiendo los hombros
"Pues sí, ojala le ayude." respondió Moka como decidió cambiar de tema "Ya que después de todo, si logra pasar, podremos tomar las vacaciones de verano después de finalizado el semestre." respondió alegremente la chica
"Ah sí, eso, sí." respondió Kay sin muchos ánimos, sabía lo que vendría después de eso, él sabía que ella sabía que quizás el tuviera que irse después de finalizado el semestre y el hecho de que ella le dijera eso, quizás fuera como si le dijera que si pudiera quedarse más tiempo al menos
El chico solo resoplo, no quería mentirle a ella en esto, ya bastante ha ocultado o mentido para ser más deshonesto con la persona que más le ha ayudado y protegido aquí. Sentía que ella no se lo merecía.
"Moka, Yo…" el chico fue detenido como la chica le interrumpió
"Escucha Kay, sé que tienes que irte después de finalizado el semestre, y está bien. Debes de tener otros deberes y responsabilidades pero… ¿qué te parece si decidimos pasar el poco tiempo que nos queda corto juntos? Antes de que tengas que irte… mira que con todo esto de los exámenes y demás no hemos tenido tiempo de estar todos juntos, y podríamos provechar antes de que te vayas de pasarla felizmente en cosas que no sean estudiando o trabajando, o combatiendo jeje… el punto es que ¿qué tal si los últimos recuerdos que tengamos sean felices?" le pregunto la chica bajando la mirada aunque con una sonrisa forzada en su hermoso rostro
Kay no sabía que decir, podría tomarse un tiempo corto de hacer lo que decía Moka, total, quizás si fuera una ida para siempre, aunque no lo aseguraba, igualmente algo de tranquilidad siempre le era bienvenido. De todos modos ¿Cuándo desde hace tiempo que la pasaba bien? ¿O que pretendía divertirse sin tener muchas preocupaciones rondando por su cabeza? Él se preguntaba si es que hubiese tenido una "vida normal" de chico normal de estudiante de secundaria ¿hubiese sigo igual?
"Está bien, me parece bien." respondió el chico sin muchas ganas, al menos un poco de tiempo juntos no estaría mal, así sea un corto tiempo fingiendo que era 'un chico normal' disfrutando con sus compañeros de escuela un rato libre y agradable, algo que quizás no se repita a futuro
Su conversación fue interrumpida cuando fueron abordados por Yukari y Kurumu en los pasillos
"¡Qué bueno que los encontramos! Los estábamos buscando." les hablo Kurumu nerviosa
Kay solo enarco una ceja, parecían nerviosos por algún motivo, algo importante debe de ser para que estuvieran así y estuvieran buscándolos.
"Chicas ¿Qué sucede? ¿Por qué andaban buscándonos?" les pregunto Moka algo extrañada
"Hay algo extraño sobre esas clases extras de Ririko-Sensei." la que comenzó fue la pequeña Yukari
"Conozco a algunos muchachos en mi clase que también tomaron clases extra con Ririko Sensei. De la noche a la mañana se volvieron inteligentes, pero actuaban como sirvientes de Ririko Sensei. Y Tsukune estaba actuando muy extraño cuando le vimos… actuaba como si fuese un Zombie mientras recitaba cálculos matemáticos complejos que ni siquiera debemos de ver sino hasta cursos más elevados." termino de decir la pequeña Yukari
Los dos chicos, Kay y Moka fruncieron el ceño ante esto y se voltearon a ver algo confundidos, el primero en hablar fue Kay.
"¿Crees que algo malo le esté pasando a Tsukune por tomar esas clases? ¿Hay alguna prueba de que esa tal maestra le esté haciendo algo malo?" le pregunto Kay, conocía a Yukari y sabía que debía de fiarse de lo dicho por la pequeña bruja, no por algo era una de las personas más inteligentes y perspicaces que haya conocido aun a su corta edad
"Aun no tengo pruebas, pero puedo darme cuenta por lo que he visto y por los rumores que circulan en torno a Ririko Sensei, que puedo decir que no son buenos." le explico la pequeña bruja
Kay se quedó pensando, si algo le sucedía a Tsukune debía de comprobarlo, ya que después de todo él era su amigo y fue en parte culpa suya por no poder ayudarlo que el chico pudo involucrarse en algún peligro por querer estudiar arduamente para el examen.
"¿Quizás debamos de comprobarlo? Podríamos ir después de clases a ver que está sucediendo en la oficina de la maestra donde imparte sus clases ¿no lo crees?" le pregunto Moka a Kay el cual se quedó meditando
"Es muy probable, deberíamos hacerlo pero estoy algo ocupado con mi vigilancia e investigación. Pero puedo agarrar un poco de tiempo en la noche, cuando todo este oscuro e ir ¿ese es el horario cuando Tsukune aun toma clases no? Puedo hacer mi trabajo antes de que anochezca e ir directamente cuando ya sea de noche cuando Tsukune empiece sus clases." hablo Kay
"Pero ¿Por qué por la noche? ¿Por qué no antes de que oscurezca? Será más fácil y rápido además que si esa maestra le está haciendo algo malo a Tsukune, debemos de impedirlo." respondió Kurumu impaciente, si algo malo le sucedía a su destinado, ella no quería esperar pacientemente
"Lo entiendo Kurumu, pero es mejor así, ya que por la noche habrá menos gente y si ocurre que algo malo sucede, podremos usar la oscuridad a nuestro favor si sucede alguna confrontación, además que habrá menos gente que resulte lastimada por eso. Desde lo de la batalla contra la comisión de seguridad, no hay quien se encargue de la seguridad de la escuela como tal y debemos ser precavidos en estos casos, y aun no tenemos suficiente pruebas de que algo malo le suceda a Tsukune como tal, por ende es mejor esperar el mejor momento para comprobarlo que es cuando las clases estén más adelantadas ¿captas?" Le respondió Kay analizando la situación
Kurumu bajo la cabeza comprendiendo la situación, no podían ser osados y acusar a una profesora de algo que no se había comprobado ni afectarse por Tsukune que no se sabía que le pasaba. Lo mejor era ser cautelosos y averiguar con más calma en la mitad de las sesiones y con menos gente de testigos que pudieran señalarlos en caso de presentarse algún incidente contra ellos.
"Me parece bien lo que dice Kay-san. Luego de lo de la Comisión de Seguridad Publica, debemos ser más precavidos, ya no hay quien se encargue de la seguridad como tal de la escuela aunque ellos no lo hayan hecho muy bien que digamos. E involucrarnos en mas conflictos puede ser algo perjudicial para nosotros ¡Desu!" hablo Yukari secundando el plan de Kay
"Yo lo apoyo." secundo Moka apoyando a Kay
A la larga eran tres contra uno, y después de charlar para atar cabos y comprender mejor el plan, se retiraron cada uno a sus deberes hasta que sea el momento en plena noche.
…
Salón de conferencias, más tarde…
"Bien, sí. Puedes hacerlo bien si le pones el alma… bien hecho mi estudiante prometedor." era la voz de Ririko Kagome, maestra de matemáticas mientras felicitaba a su alumno, Aono Tsukune quien escribía en su cuaderno ecuaciones matemáticas mientras tenía su expresión como alguien lejano, como si estuviera ido en su propio mundo
"Bien Tsukune, esta noche deberé de darte la instrucción adecuada de nuevo hoy, ya que están próximos los exámenes en pocos días." hablo Ririko Kagome como su cuerpo comenzó a transformarse
Sus piernas se fusionaron y parecían formar una especie de cuenca de escamas. Esta se formó y alargo casi varios metros de largo hasta terminar en una punta, la cual una especie de flor roja floreció en la punta, sus 'pétalos' se abrieron como si fuese una flor dejando una estela de filas de dientes pequeños en cada 'pétalo de la flor'. Este solo 'mordió' literalmente la cabeza del chico el cual no hizo nada por evadirlo siendo controlado por su Sensei.
Una gran oleada de información acompañada de choques eléctricos golpearon al cuerpo del chico, como la información entraba directamente en la cabeza del chico. Los sentidos del niño estaban abrumados pero no pudo evitar sentir y gritar algo de dolor inconscientemente como los choques eléctricos continuaban. Numerosas ecuaciones matemáticas comenzaron a circular por su mente, como todos los demás pensamientos quedaron en blanco, exceptuando el conocimiento que le suministrado y obedecer a su Sensei incondicionalmente.
"huhu… estoy enviando el conocimiento directamente a través de tu mente. De esta forma no podrás pensar en nada más que en tu Sensei y en tus estudios. Este es mi poder. Si, si es lo mejor para Tsukune." dijo maestra Ririko como un rubor se extendió por toda su cara el ver su trabajo llevado a cabo con satisfacción
…
Kurumu se encontraba afuera del salón de conferencias, usado usualmente por Ririko como su oficina personal. Estaba dubitativa mientras esperaba al resto de su grupo, ella se había adelantado antes de llegar los demás y aquí estaba sola. Mirando por una de las ventanas pudo notar que ya estaba oscureciendo como los últimos vestigios de la luz del sol desaparecían en el horizonte. Los demás chicos no debían de tardar en venir.
Ella pensó que quizás su impaciencia le jugo mal y no debió adelantarse, como todos los demás ella tenía deberes que llevar a cabo y prepararse para los exámenes en pocos días. Pero una angustia por Tsukune le hizo decidirse en venir. No podía controlarlo, los sentimientos que tenía por el chico le hacían hacer estas cosas, después de todo ¿qué Súcubo no vive del amor?
Fue cuando en sus meditaciones pudo escuchar un grito que venía desde adentro del salón de la maestra. Era de Tsukune.
Un escalofrió recorrió su espalda al pensar que algo malo podía estarle sucediendo al chico, por lo que impulsada por ese miedo, entro sin preámbulos al salón.
"¡Tsukune!" grito Kurumu a todo pulmón sorprendiéndose en parte por lo que sucedía adentro
"¿Ah? ¿Quién eres tú? ¡Estamos en medio de una sesión importante! ¡Largo de aquí!" hablo en voz alta y molesta Ririko Kagome mientras levantaba su cola de forma amenazadora
Fue ahí cuando Kurumu identifico el tipo de monstruo que era Ririko como profirió su nombre en voz alta "¡Tu¡ ¡eres una Lamia!"
Bite Size Monster Dictionary: Lamia
Un monstruo proveniente de leyendas griegas, su parte superior del cuerpo es humana, mientras que su parte inferior es de reptil. Posee la habilidad de controlar la mente de las personas. También es identificado como un monstruo terrible, que atrae a los niños y los mata.
"Que perspicaz." dijo Ririko en tono sarcástico burlándose de la chica "Ahora ¿podrías por favor irte de aquí? Estoy colocando todo lo que tengo en la educación y no quiero interrupciones."
"¡Deja de hablar y libera a Tsukune en este instante!" le insto Kurumu en voz alta
Ririko solo la ignoro como atrajo a Tsukune cerca de ella, un sentimiento angustiante sintió Kurumu como vio que Tsukune dócilmente besaba la mano de la Lamia cuando esta se la tendió, era obvio que Tsukune actuaba en contra de su voluntad como podía ver los escalofríos recorrer su cuerpo.
"¿Ves? Este es el vínculo entre un estudiante y su maestra ¡Oh! ¿No es la educación algo maravilloso?" dijo ella sonrojada como Tsukune seguía besando su mano
Kurumu no soportando más esta escena, agarro un candelabro con velas que había a un lado en una mesa y con fuerza se la arrojo directo al rostro de la Sensei-Lamia, la cual impacto a un lado de su rostro.
Esto enfureció más a la Lamia que la pasó a mirar con una mirada de muerte "¿¡Qué demonios crees que estás haciendo pequeña niña!?"
"¡Liberar a Tsukune de una mujer horrible como tú!" le grito de igual forma Kurumu como su transformación en Súcubo se dio como sus alas y colas salieron de su cuerpo, así como sus garras también crecían de forma largas y filosas y sus orejas se volvían puntiagudas
Ririko estallo en cólera por el insulto y movió su cola dispuesta a golpear a la chica y erradicar su molestia, ella la movía intempestivamente como su cola choco con algunas mesas tirando algunos objetos al suelo pero Kurumu ya había evadido como emprendió vuelo con sus alas.
La lamia siguió lanzando su cola hacia la Súcubo, la cual se encargaba de evadir siempre, la chica peli azul esperaba el momento dado para lanzar su ataque. El momento se dio como pudo esquivar la cola de la Lamia a un lado y aprovechando el teniéndola cerca, con sus filosas garras corto la punta de la cola en forma de flor de un corte casi limpio.
Un enorme grito cubrió toda la habitación que hizo que tanto Tsukune como Kurumu se taparan los oídos, Ririko gritaba de dolor como rabia comenzaba a cruzar sus facciones antes hermosas, una sed de sangre de apoderaba de la Lamia como la razón la abandonaba en pro de sus instintos Youkais.
"¡Tu! ¡Maldita!" Rugió la Lamia como algo increíble sucedía
La punta de su cola cortada comenzaba a regenerarse como una nueva flor salía de la punta de su cola recién formada. Esto era algo común en los reptiles al perder una extremidad, se regeneraba otra cubriendo la que perdían. Siendo una Lamia perteneciente a esta clase de Youkai, era algo normal.
Sin esperar más tiempo, la Lamia reanudo el ataque ante una Kurumu sin muchas opciones, solo le faltaba hacer algo a la chica que quizás podría funcionar. En un momento los ojos de Kurumu comenzaron a brillar de color purpura como sus pupilas parecían haberse ido, su aura de Youki comenzó a crecer y la rodeaba.
"¿Qué? ¿Qué está sucediendo?" se decía Ririko Kagome como un extraño escalofrió comenzó a rodear su espalda, la mirada de la chica parecía salida del mismo infierno y por los rabillos de sus ojos pudo notar que algo se movía a su alrededor
Todos los objetos que estaban sobre las mesas entre calaveras, calabazas, candelabros y velas, parecían tomar vida propia como estos parecían contorsionarse y adquirir más volumen y altura, de pronto estos comenzaron a atacar a Ririko quien se movía asustada, lanzando ataques de su cola a los objetos, pero estos iguales seguían con su ataque.
Todo esto era visto por Tsukune que estaba recostado a un costado y apoyado en la pared, viendo todo suceder. El reconoció esto como el ataque de las ilusiones de Kurumu que ya había usado ella antes. Los objetos parecían cobrar vida, pero Tsukune sabía que eso era falso como las ilusiones de Kurumu eran poderosas que hacían creer que los objetos realmente cobraron vida.
Los candelabros comenzaron a enrollarse en todo el cuerpo de la Lamia, imposibilitando sus movimientos mientras que las calabazas y calaveras comenzaban a morder su cola y extremidades así como atacar su rostro con cabezazos. Las velas fue lo último como parecían prenderle fuego a la Lamia y está desesperada y sin poder moverse se retorcía y chocaba por todos lados, tumbando y destruyendo toda la habitación.
Fue ese el momento esperado por Kurumu al ver a la Lamia tan indefensa que preparando sus garras se lanzó al ataque en picada, antes que Ririko pudiera prever que sucedía un profundo corte en su estómago provocado por las garras de Kurumu le hizo ahogar un grito. El ataque tuvo la suficiente fuerza de derribar a la maestra y hacerle caer sus gafas al mismo tiempo que chocaba con las mesas y quedaba inconsciente.
Kurumu volvía a la normalidad como volvió al suelo, lucia cansada pero aun incólume. Poso su vista un momento en el cuerpo de la maestra inconsciente y no pudo más que evitar darle una mirada de desagrado y desprecio antes de dirigirse hacia donde esta Tsukune.
"¡Tsukune! ¿Estás bien?" le pregunto preocupada la chica peli azul
Tsukune por toda contestación le dio una sonrisa "Descuida Kurumu-chan. Estoy bien." dijo Tsukune.
La cantidad de información que le había sido suministrada por Ririko se iba, la ayuda que necesito para estudiar para el examen se esfumaba también
"¡Tsukune-san! ¡Kurumu-chan! ¿¡Están bien!? ¡Oímos gritos!" era la voz de Sendo Yukari que llegaba al lugar quedándose en la puerta con Moka y Kay detrás de ella
"¡Descuiden! ¡Estamos bien!" hablo Kurumu como ayudando a Tsukune a levantarse, ambos caminaron hacia la salida
"Necesitamos llamar a los profesores y…" dijo Kurumu como lanzo una mirada de muerte a la maestra inconsciente "Asegurarnos que esta vez sí sea uno de los buenos." respondió ella como los demás le ayudaron en salir
"Disculpa por cierto, pero no pude evitar adelantarme, supongo que me impaciente mucho je." respondió la chica peli azul sonriendo
"uhm… descuida, al menos fue para bien que llegaste a tiempo, ya tendrás tiempo de contárnoslo, por el momento, salgamos de aquí." le respondió el chico llamado Kay como el grupo salió de aquel lugar
…
Con respecto al caso de Ririko Kagome, sus otros casos de estudios excesivos se convirtieron en un problema, y como castigo debido a las quejas de estudiantes quienes habían sido liberados del control mental cuando esta fue derrotada. Termino suspendida por dos semanas sin dictar clases.
Cuando el hechizo del lavado de cerebro termino, todas las lecciones aprendidas se perdieron también. Los estudios tuvieron que ser desde el comienzo de nuevo. Y pronto el día de la prueba de semestre llego…
Los chicos se habían esforzado mucho aun con todos los problemas y trabajos que tuvieron que cargar encima, pero increíblemente pasaron la prueba… bueno, casi todos. En el salón del Club de periódico…
"Felicidades Tsukune, pasaste la prueba." le respondió Moka amigablemente al chico quien solo sonrió
"Gracias. Y si, realmente tenía mucho miedo durante la prueba, sudaba mucho y me temblaban las manos y todo eso." respondió nervioso Tsukune, mirando sus calificaciones, el promedio total de todo era de un 89 de 100 puntos, nada mal de hecho.
"¿Y cuándo sacaron ustedes dos?" les pregunto Tsukune a Moka y a Kay quienes estaban sentados a su lado respectivamente
"Yo saque un 99, por un punto y casi saco 100 jeje." respondió la chica peli rosa mostrando su calificación
"Yo saque un 97." respondió Kay mostrando su calificación también
"jejej veo que todavía me falta mucho para estar en su liga." respondió el chico sobándose la nuca
"Al menos obtuviste mejores puntos que ella." le respondió Kay como señalo al frente del salón
"¡UWAAAAA! ¡No es justo! ¡Solo obtuve 44 puntos en la prueba! ¡Me toca escuela de verano! ¡No puede ser!" gritaba histéricamente Kurumu
"Meh. Y eso que hasta yo le ayude a estudiar." respondió Yukari mirando su calificación la cual había sacado un 100 cerrado, el máximo puntaje.
Los tres chicos solo suspiraron y rieron en voz baja. Pero un pensamiento molesto había estado molestando a Tsukune desde el incidente con la maestra Ririko. O más bien desde hace tiempo, pero no fue hasta hace poco que comenzó a caerle más mal y más fastidioso desde lo de la maestra de matemáticas.
Y es que nunca antes se había sentido tan inútil, había ayudado a Kay y los demás anteriormente en batallas pero no precisamente en la lucha, aunque su presencia había logrado definir la victoria contra Hei en dos oportunidades. Pero por su culpa casi mueren sus amigos con el incidente de la comisión de seguridad pública y contra Kuyou. Así recientemente caso sucede lo mismo con él, con lo de Ririko Kagome.
Él no podía culparse pues era solo un ser humano en contra de monstruos, pero aun así hasta Kay que no había tenido mucha suerte tampoco, había logrado adaptarse y dar mejor pelea que la que pudiera dar el. Aun si él fuese un detective espiritual sin poderes, el hizo más que lo que él podría hacer nunca. Esta sensación de inutilidad le había llevado a querer preguntarle a Kay, pero no sabía que respondería él y si pudiese hacerse. Ya que sabía que su amigo estaba ocupado y quizás debía de volver pronto, una vez terminado sus asuntos aquí. Pero quizás debía de intentarlo.
Sin Kay, no sabía que sería de el en los siguientes años en esta escuela o si querer seguir estudiando aquí. Casi pierde la vida en varias oportunidades sino fuera por la ayuda de sus amigos, confiaba en las chicas pero aun así no podía evitar sentirse algo más inseguro sin su compañero masculino en el grupo. Debía de aprovechar antes de las vacaciones de verano o debía de decidir si quería regresar aquí o no. El preguntarle a Kay, como se hacía para obtener poderes espirituales si podía. Los detectives espirituales son o fueron humanos alguna vez ¿no? Quizás la clave estuviera en preguntarle y poder aprender para no ponerse en peligro ni sentirse inútil nunca más.
Por su parte Kay pensaba también, un tiempo corto en compañía de sus compañeros de aquí no estaría mal, pero sabía que tarde o temprano la diversión debería de acabarse y debía de regresar. Algo dentro se sentía mal respecto al hacer eso. Pero no había nada que pudiera hacerse. Recordó la carta que se le envió del mundo espiritual y tomó nota de abrirla y leerla esta misma noche cuando regresase a su dormitorio. Algo le decía que era muy importante.
Moka solo pensaba en el tiempo que pasaría al lado de sus amigos, sobre todo más cerca de Kay. Quien sabe, quizás pudiera convencerlo de que pudiera quedarse un poco de tiempo más aquí. Las esperanzas no había muerto aún.
Sin saberlo los chicos no sabían que serían unas 'vacaciones' que nunca olvidarán. Literalmente.
FIN DEL CAPITULO
