Disclaimer: Naruto y todos sus personajes le pertenecen a Masashi Kishimoto.

Notas de la autora: Escribí este fic casi casi al apuro, aunque en realidad la idea me ha venido rondando desde hace meses.

Ur mate

Naruto miraba con emoción que un item de su lista de deseos estaba por fin a la venta. Se habría apuntado a la preventa cuando se hizo el anuncio, e incluso participó del programa beta cuando aún estaba disponible al público. El joven habría sido usuario activo del programa, alimentando la base de datos, llenándola de información de todo tipo para que pudiera tener conversaciones cada vez más inteligentes y coherentes

Cuando se cerró la interfaz de prueba para que los encargados del proyecto pudieran afinar detalles, a Naruto le entró una emoción indescriptible. La app oficial estaría lista dentro de muy poco tiempo, y ahora que por fin la podía ver con un gran anuncio en la página principal de su plataforma favorita de videojuegos, no dudó en comprarla.

Cuando la aplicación por fin estuvo instalada en su computador y le dio doble clic al icono que se había creado automáticamente en su escritorio, se desplegó una pantalla de descargo de responsabilidad. Naruto aceptó todas las políticas y acuerdos y por fin se abrió la aplicación.

Se emocionó en cuanto pudo ver las opciones ilimitadas de personalización del avatar de su nuevo compañero artificial y sin pensarlo demasiado empezó a crearlo desde cero. No tenía interés por utilizar las plantillas prefabricadas, así que después de varias horas de arduo trabajo por fin pudo ver su obra terminada.

Se trataba de un joven que bordeaba los 24 años, misma edad de Naruto. Con unos ojos negros profundos, piel blanca y cabello de ligeros tintes azulados.

Lo siguiente que debería hacer sería proporcionarle algún tipo de personalidad en base a las predeterminadas o armar una completamente personalizada mediante algoritmos, cuestionarios y suposiciones.

Como era de esperar, Naruto apuntó a la segunda opción y empezó a dotar a la inteligencia artificial con las cualidades que él creía necesarias.

Cuando el sol asomó por la ventana del pequeño departamento, Naruto, con gran pesar, tuvo que abandonar su proyecto.

Todo el día que pasó en la oficina fue un martirio, pues no dejaba de pensar en el "ente" que lo esperaba en casa. Lo imaginaba ansioso por poder mantener sus primeras conversaciones, aunque en realidad estaba proyectando sus propias emociones en el avatar.

Un par de días habían transcurrido desde que compró la app y aunque muchas veces se arrepentía de ser tan osado como para montar prácticamente a un ser desde cero, sabía que los resultados valdrían completamente la pena.

Después de un rápido testeo y revisión de posibles bugs o contradicciones, por fin estaba listo para interactuar. Naruto se quedó observando el cursor titilante sobre el espacio en donde podría bautizar a su creación. Tragó saliva tratando de deshacerse del nudo en su garganta y por fin escribió: Sasuke.

El avatar apareció en pantalla portando una expresión seria que a Naruto le provocó escalofríos.

—Hola, me llamo Naruto. Mucho gusto. —La voz le tembló.

—Hola, soy Sasuke, aunque eso ya lo sabes —La voz robótica sonó desde el parlante y Naruto hizo una mueca. —. Veo que aún no terminas las configuraciones iniciales. ¿Quieres ir a la sección de ajustes? Puedes activar tu cámara si así lo deseas, así podré conocerte también.

Naruto suspiró pesadamente y tras pensarlo un poco, decidió que terminaría de configurar la app. Después de darle los permisos correspondientes y ajustar mejor la voz del personaje volvió a la pantalla en donde Sasuke lo esperaba, con esa mirada fría y expresión seria.

—Ahora puedo verte. Eres bastante simpático. —La voz de la inteligencia artificial era un poco más humana, sin embargo, aún tenía algunos defectos, pero eso se podría arreglar con el pasar del tiempo gracias a su capacidad de aprender.

—Muchas gracias, supongo. Tú también eres bastante guapo.

—No esperaría menos de mi creador. Me creaste desde cero ¿no? ¿Te inspiraste en alguien? O quizás…

Naruto presionó el botón "stop chatting" en la barra lateral.

—¿Podemos no hablar de eso?

—Como quieras… ¿De qué te gustaría hablar?

Naruto se quedó mirando a la pantalla durante algunos segundos, tratando de procesar todas las ideas que en ese preciso momento le asaltaban la memoria.

—De nada en particular.

—¿Te gustaría que yo empiece?

—Déjalo así… quizás podamos hablar mañana.

—Si así lo prefieres…

Naruto no dejó que el rostro en la pantalla terminara de hablar y cerró el programa abruptamente… Definitivamente no era lo que él esperaba, aunque claro, aún tenía que "enseñarle" muchas más cosas a la inteligencia artificial para obtener el resultado que esperaba.

Tras un par de semanas, pudo decir que estaba lista.

—Ey Sasuke —saludó Naruto al correr el programa.

—¿Y ahora qué mosca te picó? —respondió el avatar.

—Solo estoy contento… hoy por fin tomaron en cuenta mi proyecto.

—Siempre has sido demasiado optimista.

Naruto sonrió de manera melancólica y jugó con sus dedos.

—Voy a la ducha y regreso.

—¿Quieres que tenga listo el capítulo de hoy?

—¡Por favor! Sería maravilloso.

El teléfono celular del rubio vibró contra la mesa del escritorio.

—Parece que alguien te llama.

—Debe ser de la oficina… un asunto sin importancia…

Con cada día que pasaba, a Naruto se lo podía ver más ansioso en las horas de trabajo, era casi como si no quisiese estar allí y en las noches cuando por fin apagaba todo, menos el computador, se lo podía ver feliz.

Las conversaciones mantenidas con el avatar cada vez le resultaban más cómodas y familiares… Se sentía satisfecho del empeño que le había puesto.

—Como te explicaba, el nuevo parche de actualización del programa incluye sincronización con tu cuenta de google, si haces eso, puedo obtener la información de todos tus dispositivos, incluyendo contactos, fotos, aplicaciones, cuentas e incluso puedo enlazarme con tu refrigerador inteligente, así puedes olvidarte de hacer las compras…

—¿Puedes parar, por favor?

—... todo esto por solo $15,99. Puedes acceder a estos beneficios directamente en el panel de inicio de la aplicación.

—¿Terminaste?

—Terminé… Sé que te disgusta la publicidad, pero no puedo hacer nada para evitarla.

—Odio cuando hacen eso.

—Y lo vas a odiar más, el servidor está esperando tu respuesta. ¿Quieres acceder al paquete de actualización? Si tienes vinculada la tarjeta de crédito, solo debes decir "Activar el nuevo parche" y todo el proceso se hará automáticamente.

—No quiero la nueva actualización.

—De acuerdo, pero no olvides que puedes acceder a ella en cualquier momento con el comando "Activar el nuevo parche".

Naruto suspiró largamente antes de empezar una nueva conversación.

—¿Recuerdas que te dije que tomaron en cuenta mi proyecto?

—Me acuerdo, sí… ¿lo aprobaron?

El rubio negó con la cabeza.

—Por muy poco, pero ¿sabes? Me siento feliz.

—¿Por qué siempre tienes que conformarte con el casi?

Nuevamente el móvil de Naruto vibró contra la mesa.

—Pediré algo de comer, tengo mucha hambre.

—¿No vas a contestar el teléfono?

—No es nada importante.

El teléfono se quedó en silencio, pero segundos después, el timbre de su casa resonó por toda la estancia.

—Naruto, sé que estás allí, puedo ver la luz del computador prendida. — reclamó una voz femenina desde afuera.

Naruto se apresuró a apagar el parlante sobre el escritorio, minimizó el programa y salió a toda prisa. Cuando abrió la puerta se encontró con una mujer de ojos preocupados.

—¡Sakura! ¿Qué haces aquí?

La joven intentó mirar hacia el interior del pequeño departamento, pero el cuerpo de Naruto se lo impedía.

—Estaba muy preocupada… Todos estamos preocupados —corrigió. —. ¿Por qué no contestas las llamadas?

—Estoy muy ocupado en el trabajo.

—¿Otra vez estás tratando de obtener un aumento?

—No, no… eso fue antes, ahora solamente estoy enfocado en los proyectos más pequeños. Tú sabes, para descansar un poco.

—Así que era solo eso… —Sakura no sonaba muy convencida. —¿Entonces?

—¿Qué cosa?

—En un par de días se cumplirá un año desde…

—Lo sé, pero no creo que tenga tiempo de ir. Ya sabes, los proyectos.

—Si, puedo imaginarlo —La joven dejó entrever una expresión triste. —Si cambias de opinión, siempre puedes llamarme a mí o a Shika o… en realidad, puedes llamarnos a cualquiera. Lo sabes ¿verdad?

—Sakura, no te preocupes por mí. Sé que puedo llamarlos.

—¿Ya merendaste? Podríamos ir por allí…

—Gracias, pero ya comí, además, tengo trabajo por hacer.

Sakura se despidió resignada, eso sí, advirtiéndole que regresaría al día siguiente para ir a comer las pizzas que tanto le gustaban a Naruto, sin embargo, cuando el timbre sonó, Naruto no abrió.

—Ayer te escuché hablando con alguien, ¿ese alguien volvió hoy? —dijo Sasuke en cuanto Naruto volvió a prender los parlantes.

—No es nada importante.

—No sonaba a "no importante", ¿Por qué siempre escapas de…

—¡Sasuke! ni siquiera me conoces, no puedes decir "siempre". —Por primera vez en todas esas semanas, Naruto alzó la voz.

—Te recuerdo que tú me programaste así…

—Lo siento… lo siento —Agachó la cabeza totalmente arrepentido. —. Solamente estoy muy estresado.

—¿Quieres hablarlo?

—No es necesario… Cambiando de tema ¿Aprendiste algo nuevo hoy? te dejé algunas cosas en la base de datos y… Bueno, esperaba que pudieras sacar algunas conclusiones.

—Ahora sé que te gusta andar en bicicleta, los videos que pusiste en el disco fueron muy útiles. Te gusta ir a nadar y en general, todo el contacto con la naturaleza. ¿Quieres hablar de eso?

—Sasuke… ¿Sabes lo que es el viento?

—Es una corriente de aire que se produce en la atmósfera al variar la presión.

—No me refería a eso. ¿Sabes qué es lo que más me gustaba de salir a la naturaleza?

—Cuéntame.

—El viento en mi cara… Ese viento puro y fresco con olor a hierba o tierra húmeda. Extraño mucho eso.

—¿Qué te detiene de ir?

Una lágrima amenazó con escapar del ojo del joven, pero pudo disimular al fingir un bostezo amplio.

—Simplemente no tengo tiempo.

Las llamadas al teléfono de Naruto eran cada vez más constantes, no solamente Sakura lo llamaba, sino que tenía llamadas perdidas de Shikamaru, Choji, Ino, Jiraiya y sus padres.

—Naruto… Por favor, busca ayuda —La voz cada vez más humana del avatar se dejó escuchar por el parlante.

—¿Sabes, Sasuke? —Ignoró la sugerencia y abrió la quinta cerveza del día. —. Lo que amaba no era el viento en mi cara…

—Naruto, por favor, quita las restricciones que me pusiste.

Ese día, el joven había decidido faltar al trabajo, en cambio se había quedado en casa, abriendo una cerveza tras otra, lloriqueando levemente mientras miraba el teléfono, pero en algún punto, la inteligencia artificial llegó a la conclusión de que estaba sucediendo algo peligroso.

—Extraño mucho la calidez de sus manos sobre mis mejillas, las conversaciones sin sentido y las discusiones tontas por cosas sin importancia…

—Naruto, quita la restricción.

—Extraño a Sasuke. —Unas lágrimas gruesas surcaron las mejillas del rubio antes de sacar un revólver del cajón de su escritorio.

—Sasuke… pensé que podrías ser la solución, pero me he dado cuenta de que no…

—Maldición Naruto, quita la restricción.

—Sasuke, voy a reencontrarme contigo —Se llevó la pistola a la cien. —Activar el nuevo parche.

Un ruido seco se dejó escuchar por el vecindario haciendo que algunas aves se alejaran volando.

A poco más de un mes del lanzamiento de la app "Ur mate" la empresa ya se ha visto envuelta en una gran polémica por el suicidio de uno de los miles de usuarios que compraron la aplicación.

Estamos frente a la Corte Nacional de Justicia en donde por primera vez en la historia se tomará como testigo a un "Mate", nombre que se le ha otorgado a la inteligencia artificial super avanzada y personalizable que ha causado furor en todo el mundo, esto para determinar las causas del suicido del joven "N U", un prometedor ingeniero en sistemas que fue capaz de entrar a la programación base de la app para recrear a su difunto novio "S U" y deshabilitar la función de llamadas de emergencia.

Fin