Gracias por vuestros comentarios fabaguirre167, yagui y Carol Aragon. Esta historia la comencé a escribir en el 2016, fue la primera que subí a esta plataforma pero no la terminé. En esos años había un grupo de chicas en su mayoría de México y Argentina que compartían sus historias favoritas por fanfic y por facebook, era un grupo encantador. Pero yo eliminé mi cuenta, así que perdimos el contacto. Si vosotras tenéis cuenta de faceebook os recomiendo que busquéis a Mayra Exitosa, ella administraba el grupo.
Capítulo 20.
Residencia de los Kleisss
- Tío Christopher, ¿qué ocurre? ¿me mandaste a llamar?
- Así es Karen, toma asiento por favor. Cariño, lo que te voy a decir no será fácil de asimilar, tu padre ha sido detenido junto al conde de Salisburry, tu tío Colin Campbell y su nieta Sara Legan. Lo que te deja a ti como la administradora de las empresas de los Kleiss.
- Papá estaba desaparecido. Desapareció cuando murió mamá.
- En realidad Karen, tu padre intentó protegerte dejándote a mi cuidado, y tras la muerte de tu madre yo decidí mudarme definitivamente a nuestra mansión de Florida, este ha sido nuestro hogar desde entonces. Karen, tu madre no murió en un accidente de coche, tu madre sufrió un atentado y aunque en el hospital hicieron todo para que se recuperará, un hombre irrumpió en su habitación y terminó con su vida. Tu padre prefirió alejarse de ti para protegerte. Hace unos días, me ha enviado los papeles que te acreditan como la nueva baronesa Kleiss, tu padre te ha cedido el título en vida, tiene el sello de la corona. Cariño, tu primo Duncan no aparece, y tu tía Olena está reclamando ser la nueva duquesa de Campbell. El informe que tengo aquí es una copia del que se ha entregado a la policía, así que ella también será detenida. ¿Sabes lo que eso quiere decir?
- Tío Christopher, yo... yo no puedo asumir el ducado, estoy segura que mi primo Duncan está vivo, debe de estarlo. Yo no quiero estar en medio de toda esa superficilidad ni en medio de tantas operaciones fraudulentas. Tia Olena le ha hecho mucho daño a Terry, no quiero saber nada de ella, no quiero trabajar con ella y no quiero volver a verla. Yo tengo mi propio camino, yo soy actriz. Además, Robert Hattaway me ha convocado para un nuevo proyecto y ya había decidido volver a Nueva York.
- Entiendo Karen, pero las empresas de los Kleiss siguen siendo tuyas, ¿qué quieres hacer?
- Antes de ser un gran médico, estuviste ayudando al abuelo en sus negocios, tienes más experiencia que yo, y conoces las empresas mejor que yo. ¿Podrías asumir la administración de las empresas de los Kleiss? Yo te firmaría los papeles que hicieran falta.
- Karen... Pero es tu legado.
- Lo sé tío, sé que mucha gente depende de nosotros, por eso no voy a mal vender las empresas. Pero sinceramente, yo no tengo ni idea de laboratorios, medicamentos ni de aparatología sanitaria. Por favor tío Christopher, asume el mando, estoy segura que Arthur y Kelly estarán encantados de ayudarte.
- En eso tienes razón. Está bien Karen, me encargaré. Pero en algún momento tendrás que afrontar que eres una baronesa y que tienes más responsabilidades que manejar empresas o administrar tierras.
- Lo sé. Ese momento llegará. Por ahora solo quiero saber si es posible hablar con papá. Necesito que me explique todo lo que ha ocurrido durante este tiempo.
- No creo que sea prudente Karen, los delitos de los que se acusan a tu tío son muy graves. Y si mi hermano formaba parte de ellos. Aunque no puede ser, tu padre siempre fue un hombre de honor.
- No sé qué le pasa a la familia de mamá, Sara y Eliza hicieron tanto daño a Terry y a Candy. ¿De qué acusan a tío Colin y a los demás?
- De una serie de asesinatos durante los últimos 30 años: que incluye a miembros de la familia Argyll, Andrew y McGregor. Así como del lavado de dinero en la compra-venta de obras de arte, operaciones fraudulentas en el suministro de armas al ejército inglés, y en relación a tu padre, se le ha vinculado con la alteración de precios en la compra-venta de material sanitario, aunque tu padre alega que la firma no es suya.
- Pobre papá, yo estoy segura que no es culpable.
- Cariño, yo no sé qué decir, mi hermano cambió mucho en cuanto se asoció con Colin Duncan, aunque el acuerdo matrimonial fue negociado por nuestro padre y nunca supe cuáles fueron los términos del mismo.
- Gracias por hacerte cargo tío, yo necesito asimilar lo que ocurre, despejar la mente, pensaba irme a Nueva York este fin de semana, pero voy a adelantar mi viaje, parto esta noche.
- Pero Karen, al menos quédate a saludar a tus primos.
- Está bien, voy a buscarles a ver si me acompañan a la estación del tren.
- Ay Karen, no cambias.
Días después
- ¡Lady Margaret!
- Hola Christopher. Sigues siendo el mismo galán de siempre.
- No puedo creer que estés aquí, estabas desaparecida, tantos años sin saber de ti, te fuiste embarazada y ya nunca más supimos de ti. Camila siempre dijo que seguías con vida. Tenemos tanto de que hablar.
- Lo sé. He vuelto Christopher, he vuelto porque volveré a asumir el condado de Campbell. Y porque mi hija tiene que asumir el condado de Salisburry. Iré a Londres y he venido a pedirte que me acompañes.
- Te acompañaré porque yo también tengo que presentarme como el nuevo administrador de las empresas de los Kleiss, luego regresaremos Margaret, porque tenemos que hablar con el heredero de los Briand, que estoy seguro se convertirá en el nuevo duque de Campbell. No me mires con esa cara, yo también tengo que contarte muchas cosas. Ducan desapareció y Elizabeth tuvo un hijo Tom.
El doctor Christopher Kleiss le cuenta a una confundida Margaret, que su sobrino Duncan había desaparecido tras recibir una carta de Thomas Briand, que desconoce el contenido de la misma, pero que Camila también había recibido una misiva del mismo remitente, y que por ello había viajado con su pequeña hija Karen. Thomas le escribía para decirle que su sobrina Elizabeth había muerto a manos de Alexander Briand, que era el verdadero padre de Sara. Y que solo Tom era su heredero universal, y que le dejaba al cuidado de Sir Stevens. Lady Margaret le explicaba que tuvo que huir porque oyó una conversación entre su hermano Colin y Alexander, una conversación que ponía en riesgo la vida de ella y de su todavía no nacida Dorothy. Le contó que tuvo que viajar a Escocia, que los Andrew aceptaron proteger a su suegra la baronesa de Salisburry, y que luego viajó a Michigan en donde conoció a un hombre maravilloso que le dió un hogar y unos hijos preciosos, pero que este había sido víctima de un sicario de Alexander Briand, que cuando mataron a Thomas una bala dañó a su marido y ya no pudo volver a trabajar.
- Así que Thomas murió a manos de su propio hermano.
- Es horrible.
- Margaret, Karen no quiere saber nada de las empresas de los Kleiss, me ha pedido que yo asuma la administración. Y en relación a los Campbell no quiere ver a Olena, ella no sabe que tú has regresado, pero estoy seguro que ella te apoyará para que seas tú quien gestione las empresas de los Campbell hasta que aparezca Duncan o hasta que Tom tome las riendas.
- Estoy de acuerdo contigo, es mejor que vea a mi sobrino cuando regresemos de Londres. Estoy segura que Sir Stevens le seguirá cuidando. Por ahora contamos con la protección de los Andrew, pero todavía no les diremos nada de nuestro heredero. Ellos han sido hace poco víctimas de un atentado, alguien dentro de esa familia les está traicionando.
- Lo he leído en los periódicos, en la presentación de Candice McGregor Argyll. Margaret, ¿tú sabes porque Colin está tan obsesionado con los Argyll?
- Creo que lo sabes.
- ¿No puede ser solo por Priscilla?
- Oh Christopher, tendremos que volver a los orígenes. Te lo contaré.
