El final fue desastroso.

El mundo mágico cayó en la destrucción total, con el caos y la muerte agarrados de la mano. El mundo sucumbió en oscuridad más profunda. Todo creían que con la llegada del héroe profetizado, el mundo estaría salvo, que la magia estaría salvo, que él los salvaría. Pero grande fue esa equivocación al confiarle todo a un niño. En primer lugar no debieron ponerlo a él, en la primera línea de la batalla, murió apenas con 17 años o eso creyeron todos.

Pero fue cierto que no debieron dejar que un niño tuviera el liderazgo de una guerra que los propios magos más fuertes no pudieron detener.

El señor oscuro se apoderó del ministerio y con ello la magia como todos conocían, empezó a deteriorarse. Para hacerlo más claro, lo sangre puras que lo siguieron en primer lugar, empezaron a extinguirse por la ira del Lord, que enojado había mandado a decapitar a todos y cada uno de ellos, quienes le habían jurado lealtad, encontrándose nada más que un devastador final.

Los mestizos que habían presenciado el inicio de la gran guerra, empezaron a desaparecer y los pocos que lograron aparecer años más tarde, estaban muertos. Encontraron sus cadáveres en un foso en estado de descomposición, personas que antes eran influyentes en el ministerio también estaban allí.

Y nadie quería hablar de los sangre sucia, como les decían. Ellos fueron torturados en la plaza pública, y sus cadáveres se encontraban regados por todos lados, eran usados, torturados y esclavizados, como si no hubiese una ley que lo prohibiera.

Aunque de hecho, no. No había una ley, esto era solo una masacre.

Un maldito juego enfermizo que ya no tenía escape.

Y en la mansión donde se hospedaba el señor oscuro, de la cual se había apoderado en contra de la voluntad de los verdaderos dueños y los había asesinado por traicion, allí había un secreto, el mejor guardado del Lord.

En aquel sótano lugubre, asqueroso y abandonado, mantenian cautivo a el único heredero de ese lugar, Draco malfoy, y también la única esperanza del mundo.

Sin piernas, sin brazos, con el cuerpo lleno de heridas por haber recibido latigazos, con el cabello largo y sucio, con los huesos sobresalientes por no haber comido debido a que vomitaba todo lo que pusieran en su boca, debido a la repulsión que sentia por comer la carne humana que le obligaban a ingerir a la fuerza, con los ojos más muertos que una persona de afuera, torturado por años desde la muerte del héroe.

Draco malfoy la única fuente de magia que quedaba en el mundo mágico, el único sobreviviente de la masacre en la escuela de hechicería y por supuesto el único sobreviviente de todos los sangres puras en el mundo.

Por qué al señor tenebroso no le bastó solo apoderarse de Londres, sino que se apoderó de todo el mundo mágico, expandiéndose alrededor de todo el mundo como una peste negra, no sabía cómo estaba el mundo muggle, pero suponía que pronto ya comenzaría una guerra de ese lado también.

El mundo se vino abajo, poco a poco, sin embargo aún con todo el poder que poseía, de hecho él estaba asustado por aquella profecía. La primera que él creyó ganar contra el destino, fue la del elegido, creyó que matándolo iba a salvarse de su cruel final, ysin embargo la otra profecía terminó por destruirlo completamente al mantener a Draco con vida. Bueno, de cualquier manera si Draco muere él también lo hará.

Cuando Draco pensó que ya no había esperanza en esta vida, los susurros empezaron a escucharse. La ansiedad empezó a sentirse en toda la mansión ya que las bases aliadas estaban siendo atacadas. Al principio el Lord se rió. Dijo "cómo puede ser que aún le queden fuerzas para seguir luchando en contra" sin embargo más tarde, su sonrisa cruel fue reemplazada con una cara de ansiedad, cuando algunos países fueron liberados de la tiranía que él había impuesto.

Primero fue Rusia. Luego la India. China. Otros países del continente asiático. Luego fueron hacia América central. Luego América Latina. Volvieron y destruyeron la base en Francia. Luego, algunos países aislados de Europa hasta que por fin llegaron a Londres y lo primero que atacaron fue el ministerio, liberando a los tres dragones que tenían recluidos allí, rompiendo las posesiones más valiosas del Lord.

Aún así, ya habían destruido todo el mundo mágico, ya habían destruido la magia. Ya no había algo por el cual luchar, solo quedó la pequeña esperanza, pero también era tarde para él.

Por qué a él ya no le quedaban más días.

Draco lo sabía. Por eso se había conectado con la poca magia que le quedaba, a los sueños premonitorios de la única adivina oculta que quedaba de la masacre y la envío con el líder de aquella rebelión, para que le diga dónde estaba el último fragmento del alma de voldemort, y para que ya no volviera por él.

El líder y su escuadrón de rebeldes habían logrado bastante pero ya era tarde, hubiese sido genial si la guerra hubiera terminado hace 10 años, antes de que Harry Potter muriera en la batalla de hogwarts. Pero ahora eso ya no importaba, solo esperaba que pronto la guerra terminará y que los sobrevivientes pudieran seguir adelante.

Draco respiraba con dificultad mientras esperaba que pasaron los minutos que lo alejaban de su muerte, faltaban solo 10 minutos, tan poco tiempo para alcanzar su sueño eterno, el final de su vida y su sufrimiento. Aún así, su cuerpo aún buscaba respirar aire limpio, e inútilmente seguía jadeando sin entender que él moriría allí, en ese sótano donde había sido torturado y abusado, donde le habían cortado sus extremidades y lo habían obligado a comérselo, donde fue testigo de la maldad de aquellos hombres que abusaron de niños y mujeres jóvenes y ancianas, de hombres a los que torturaron hasta la muerte, donde había visto nacer la desesperanza.

Se escucharon pasos proveniente del pasillo, Draco pensó que era un mortífago que venía a acabar con él, sin embargo sus pisadas no se escuchaban como una amenaza, más bien Draco lo escuchó familiar, sin embargo no tenía las fuerzas para levantar la cabeza.

La puerta se abrió, y una figura encapuchada se abrió paso entre los cadáveres de la habitación mientras se acercaba hacia su dirección. Las cadenas que lo ataban se cayeron en pedazos en unos segundos, su cuerpo mutilado cayó sin fuerzas en los brazos de aquel sujeto, que lo envolvió en una sabana suave y limpia.

—estoy aquí, Draco.

Esa voz...

No fue necesario levantar la vista, por qué el mismo Harry Potter tomo su rostro para que lo mirará, unos brillantes ojos verdes lo recibieron con pena y dolor.

Había perdido la voz hace años, tantos, tantos años. Pero ahí estaba él, con la emoción en sus ojos sin vida, con los labios agrietados y la garganta magullada, intentando decir algo. Cualquier cosa.

—no digas nada.

Viniste...

La voz resonó en la cabeza de Harry, quién no quería que Draco notara como le temblaban las manos y los ojos.

—perdoname por llegar tan tarde, Draco.

Draco quiso negar, pero ya no quedaban fuerzas en sus músculos. Ya no le quedaba nada.

Gracias por volver...

La voz de Draco desapareció de la mente se Harry así como su presencia. Se habia ido.

El pequeño cuerpo maltratado fue abrazado gentilmente mientras que Harry intentaba evitar que sus lagrimas salieran, no pudo mirarlo, no pudo ver lo último que quedaba de Draco, pero aún así lo abrazaba sin querer soltarlo, aferrándose al hombre que ya no estaba.