Bueno, ha paso mucho tiempo desde que subo una historia y esta de verdad que tenía demasiadas ganas de escribirla. Haré unas aclaraciones antes de comenzar.

Este es mi primer fanfic de categoría M así que me disculpo si es un poco redundante y no muy descriptivo. Es sexualmente explicito y es Pricee, así que, por favor, si no les gusta o interesa, por favor, no leerlo.

Tiene lugar después del capítulo Orion Pax, tercera parte y está escrito desde la perspectiva de Arcee.

Es humanformers, principalmente, porque no estaba segura de poder describir bien el acto sexual si los dejaba como robots, pero lo trabajaré para el futuro.

Creo que esos son los aspectos importantes a la lectura, así que, sin nada mas que decir, espero que lo disfrute.

En medio de un momento y la eternidad

Ya es tarde, demasiado tarde, a decir verdad, y luego de un día tan intenso y cargado de emociones como el que tuvimos hoy, los niños se fueron a dormir.

Creo que ni siquiera había palabras para describir todo lo ocurrido. Para comenzar, Optimus al fin había vuelto con nosotros después de tres largos meses, meses que parecieron una eternidad y que estuvieron cargados de lágrimas, momentos de tensión, incluso ocasiones en que sentíamos que nos habían derrotado, como si lo hubiéramos perdido todo. Creo que una buena palabra para describir nuestro sentir actual era alivio.

Y sumado a eso estaba la extrema felicidad, especialmente de los niños, de tenerlo de vuelta en casa.

Estaban tan felices que ni siquiera podían separarse de él. Le hablaron toda la tarde sobre lo sucedido durante su ausencia, lo que ocurría en la base y fuera de ella, le hicieron miles de preguntas sobre su pasado como Orion Pax, incluso podría decir que se peleaban por su atención. Era su forma de demostrar afecto y cuanto lo extrañaron.

En algún momento pude sentir que Optimus estaba un poco intimidado y no lo culpo, pero se mantuvo bajo control, como solo él podía hacerlo, y mantuvo su actitud calmada a pesar de tener una enorme cantidad de pensamientos en su mente. Como me gustaría poder leer esos pensamientos de vez en cuando.

Y volviendo un poco a los niños, era tanta la energía que traían encima y realizaron tantas actividades para liberarla, que eventualmente el cansancio llegó a ellos.

Creo que está de más decir que teníamos más de una razón para dejarlos dormir aquí así que Bumblebee ofreció su habitación para que los cuatro pudieran descansar, creo que Miko se refirió a eso como pijamada. En fin, con eso en mente, dieron unas cálidas buenas noches y se fueron a dormir felices y tranquilo, así como no se habían sentido en semanas.

Y ahí estaba yo, sentada mirando a ningún lugar en específico y sonriendo solo por recordar los acontecimientos de esta tarde, cuando noté que Optimus no estaba en la base.

Comencé a mirar en todas direcciones, buscándolo, cuando un vago recuerdo de Bulkhead avisando que saldría a patrullar cruzó mi mente y me era imposible recordar si Optimus también había dicho algo que justificara su ausencia.

Tanto mi reacción como mi expresión debieron ser muy evidentes pues Ratchet me dio una respuesta casi inmediata, como si hubiese leído mi mente "Subió hace unos minutos" me informó antes de regresar a su monitoreo, le agradecí mientras me levantaba y caminaba hacia el ascensor.

Una vez arriba pude encontrar a Optimus con facilidad, estaba de pie y observaba con la mirada perdida la inmensidad del desierto frente a él, inmerso en sus pensamientos. Sostenía un cigarro en la mano, parecía que lo fumaba poco a poco, confirmando con esa simple acción como miles de pensamientos invadían su mente, casi como había ocurrido horas antes, pero esta vez parecía ser de forma más cruel.

Me quedé observándolo un momento, era impresionante como, a pesar de estar en completa soledad, su máscara de líder hermético seguía intacta, permaneciendo en un constante estado de alerta, impasible e imponente incluso frente a la nada.

Mis ojos debieron quedarse demasiado tiempo sobre él pues eventualmente notó mi presencia. Giró su cabeza ligeramente, casi como si quisiera voltearse a mirarme, "Sabes que puedo apagarlo si lo deseas" me dijo en un tono bajo y tranquilo, suficiente para llamar mi atención.

No pude reaccionar, ni siquiera supe que contestar, lo que lo invitó a continuar "Si es lo que se necesita para que te acerques, así lo haré" ahora si se volteó completamente para poder mirarme a los ojos y sentí como mis mejillas se calentaban, no fue mi intención importunarlo.

"Descuida, no me molesta" fue lo único que pude decir mientras expresaba una ligera sonrisa. Él me respondió con el mismo gesto, una ligera sonrisa, antes de volver a acercar el cigarro a sus labios y poner sus ojos otra vez en el desierto. Primus, podría morir por esa sonrisa.

Luego de lo que pareció ser una eternidad comencé a caminar hacia él hasta que llegué a su lado y observé en la misma dirección para contemplar la noche.

Lentamente empecé a sentir como la atmósfera a nuestro alrededor era impregnada por una gran tensión que reflejaba un fuerte sentimiento de angustia "¿Estás bien?" fue lo único que salió de mi boca y mis ojos reflejaban más preocupación de la que pretendía. Él bajó la mirada "Si, lo estoy" contestó casi susurrando, como si evitara contestar, su voz aún firme y su cigarro otra vez entre sus labios.

Estaba casi atónita, era como si se prohibiera a si mismo responder con sinceridad y eso me dolía. Mi cuerpo reaccionó antes que mi mente apoyando mi mano sobre su fuerte brazo, haciendo que me viera directo a los ojos "¿Seguro?" le dije con el mismo tono de preocupación, nuestras miradas chocaron con más intensidad de la que alguna vez imaginé.

No duró demasiado, Optimus parpadeó un par de veces antes de desviar su mirada en un gesto como de volver a la realidad y se alejó un poco, dándome la espalda mientras apagaba su cigarro y mirando hacia la profunda noche, intentando volver a su característico semblante que se desvaneció por un segundo "Si, estoy seguro" fue su única respuesta, su cuerpo entero comenzaba a tensarse.

Sabía que no quería ser descortés, pero creo que era la única forma que tenía en ese momento para evitar que todas sus emociones y todos sus pensamientos salieran a la luz, desbordándose.

Una parte de mi me decía que mi siguiente movimiento podía importunarle, pero me dolía verlo así, quería ayudarlo y apoyarlo, que supiera que no está solo, y esa parte de mi fue la que me llevó a reaccionar, él necesitaba soltar todo el peso que cargaba sobre sus hombros.

Lentamente me acerqué a su cuerpo y lo abracé por la espalda, apoyando mi cabeza entre sus escápulas. Pude sentir como su cuerpo se tensaba más, no esperaba esto de mi parte y honestamente yo tampoco, solo sabía que debía hacerlo "Optimus por favor…dime que ocurre, dime en que piensas…lo que sientes" le dije con cariño y tranquilidad para hacerlo sentir seguro "Necesitas sacar todo esto".

No quería presionarlo, pero lo que fuera que sintiera lo estaba matando, de ninguna forma era fácil, Optimus no es del tipo de persona que habla de estas cosas, al menos, no desde que la Matrix lo convirtió en Prime.

Esperé pacientemente a que dijera algo, cualquier cosa. Finalmente dijo dos palabras "No puedo" fue lo único que expresó mientras su respiración se hacía un poco más intensa, y luego de una pausa, continuó "Ya no puedo con esto Arcee. Fracasé como líder y debido a mis acciones precipitadas les he fallado a todos" apretaba sus puños mientras que su voz contenía un dejo de vergüenza y decepción.

Separé ligeramente mi cuerpo del suyo y solté mi abrazo cuando noté que se estaba volteando para quedar frente a mí, aun evitaba mirarme, pero debo admitir que es un comienzo que en serio valoro.

"He estado pensando en todo lo ocurrido. Lo último que recuerdo sobre nuestra misión es estar en el núcleo de La Tierra invocando a la gran Matrix del Liderazgo para derrotar a Unicron y luego perdí el conocimiento. Cuando abrí mis ojos estaba en un lugar completamente diferente luchando contra Megatron frente a un portal espacial con la insignia Decepticon grabada en mi hombro en lugar de mi Insignia Autobot" me dijo, suspirando antes de continuar "Mientras escuchaba hablar a los niños, contando todo lo que sucedió aquí durante mi ausencia, no pude evitar pensar en todo lo que les hice pasar…toda la angustia y desesperación, ni siquiera tuve la capacidad de darles una respuesta cuando Jack me preguntó qué ocurriría una vez liberado el poder de la Matrix" hizo otra pausa, no porque quisiera, sino, porque se obligaba a no continuar.

Apoyé mi mano sobre su rostro, lo observé con ojos compasivos, ojos que quería que él viera, tal vez eso lo animaría a continuar. Y vaya que funcionó, pues una vez que nuestras miradas se cruzaron, pude sentir que se relajaba un poco "Está bien, puedes continuar" le dije mientras acariciaba su rostro con mi pulga. Él sujetó mi mano con la suya y la apartó de su rostro, pero no la soltó, nos quedamos así hasta que decidió continuar.

" Desde que me volví un Prime se me ha dicho que tengo diversas responsabilidades y obligaciones, las más importantes claramente, detener la guerra y siempre proteger a Cybertron y a sus habitantes…pero no lo logré, no pude detener a tiempo la guerra y solo he causado la perdida de millones, tanto guerreros como civiles, además de llevar la guerra a otros mundos…mundos como La Tierra" Comenzó a explicar "Cuando invoqué a la Matrix yo…" otra vez ese silencio y esa mirada perdida, nuevamente lo invité a mirarme "Tu…" dije para que continuara "Sentí dolor Arcee…sentí un dolor que jamás había experimentado en toda mi vida de soldado, era desgarrador, casi como si estuviesen extirpando mi spark a sangre fría" dijo finalmente.

No podía creer lo que me decía, jamás hubiese imaginado algo de tal magnitud. Optimus siguió hablando "Es cierto que se me otorgó este poder, esta reliquia, para poder defender Cybertron…no me arrepiento de mis acciones Arcee, he aprendido a vivir con ello, pero…no puedo dejar de pensar en todo lo perdido, en todos aquellos a quienes he lastimado…lo diferente que podría haber sido mi vida…no dejo de pensar que esto no es una bendición Arcee…esto es una maldición…Y para colmo ni siquiera soy capaz de recordar todo lo que ocurrió mientras estuve en

La Némesis, todo lo que pude haber entregado a Megatron que podría ser perjudicial para millones" apretó sus ojos y tomó una inhalación profunda, luego siguió hablando "Los puse en una situación realmente difícil, eventualmente el título de Prime y la carga que conlleva los alcanzó a ustedes también…les fallé Arcee y lo lamento en los más profundo de mi spark" finalizó.

Me dolió profundamente escucharlo, en su voz había una variedad de sentimientos: dolor, culpa, vergüenza, incluso podía percibir ira y odio hacia sí mismo. Jamás lo había visto así pero no me sorprende, era nada más cuestión de tiempo. Es cierto, una reliquia tan poderosa parece una maldición más que una bendición considerando todo el costo personal que significa.

El peso es enorme, puedo entender por qué se siente así, yo me sentiría igual estando en su posición. Ser el líder de los Autobots le ha costado demasiado, no puede vivir ni sentir como cualquier otro solo por ser un Prime…eso rompe a cualquiera.

No sabía que decir y comencé a sentir como las lágrimas se acumulaban en mis ojos, todo ese dolor, no es justo, después de todo lo que ha sacrificado, no me parece justo que su vida sea casi una tortura.

Me sorprendió mucho mi siguiente acción.

Sin saber que más hacer y solo guiada por mi spark, lo abracé nuevamente, con fuerza, demostrándole todo mi cuidado hacia él, todo mi cariño y apoyo.

Su cuerpo se tensó casi de inmediato y no hizo ningún movimiento, pensé que tal vez me había excedido, por mucha confianza que podamos tener, al final del día sigue siendo mi comandante.

"Optimus no le has fallado a nadie, hiciste lo que debías para poder salvar este mundo y muchos más, estabas dispuesto a sacrificarlo todo para proteger a los habitantes de este mundo de la misma forma que lo has hecho por nuestra gente en el pasado. No puedo imaginar lo que significa ser el portador de un poder tan grande, tener que limitarse de tantas maneras diferentes solo porque un título dice que se debe poner todo lo demás por sobre ti mismo, pero quiero que sepas que para todos nosotros eres más que un Prime, tú eres Optimus, Orion Pax, eres un amigo y hermano, un confidente. Eres un líder realmente fuerte, noble y valiente, me siento realmente honrada de estar a tu lado. Sea lo que sea que haya ocurrido en La Némesis no es razón para hacernos pensar diferente de ti, el afecto y admiración que sentimos no cambia en nada y, si tuviésemos que hacer todo esto de nuevo, créeme que lo haríamos sin pensar porque, así como tú cuidas de nosotros, nosotros cuidaremos de ti. Somos un equipo, somos familia"

Contuve mis lagrimas a mas no poder, sentía que podía decirle mucho más, pero en ese momento, con un gran nudo en la garganta, solo pude expresar eso con una dulzura tan genuina que incluso me sorprendió que saliera de mi boca.

Mientras hablaba noté como su cuerpo lentamente se relajaba hasta que finalmente me devolvió el abrazo. Me atrapó ahí con mucho cariño y suavidad, era un sentimiento tan genuino, su barbilla suavemente se posó sobre mi cabeza y luego plantó un beso lleno de sentimiento.

Nos quedamos así por lo que pareció ser una eternidad. Cerré mis ojos y sentí como mis mejillas se calentaban mientras escuchaba como su spark latía, un sonido tan hermoso que me hacía sentir una paz que jamás creí llegar a alcanzar, sonreí de forma involuntaria.

Luego de un momento, Optimus separó su cuerpo del mío, liberándonos del reconfortante abrazo en que nos encontrábamos y llevándome de vuelta a la realidad. "Gracias Arcee…por tus palabras y tu compañía…gracias por siempre estar para mi" me dijo expresando una leve pero suave y sincera sonrisa.

Sostuvo mi mano con la suya y, con la mano que tenía libre, acarició con cariño mi mejilla aún sonrojada.

Mis ojos estaban perdidos en los suyos, sentía tantas cosas por este hombre, cosas que un soldado no debería sentir por su comandante.

Y tal vez era solo mi imaginación, pero podía jurar que él me veía de la misma forma. Anhelaba que así fuera.

De forma casi automática sujeté su mano con la mía y pasaba mi mirada de sus ojos a labios de manera constante. Sentía como si flotara, solo éramos él y yo. Primus, como deseaba besarlo en este momento.

Y nuevamente, de un instante a otro, la realidad me golpea. Optimus desvía su mirada y me suelta, su máscara otra vez estaba firme en su rostro, me impresionaba, era como si los eventos recientes no hubiesen sucedido, su semblante era el mismo que cuando subí.

Fue cuando comencé a reflexionar. Este momento que compartimos fue muy sincero, él expresó sus sentimientos como nunca había hecho en el pasado, pero la realidad es que seguimos en guerra y nosotros seguimos siendo soldados, y lamentablemente eso no cambiaría pronto. Volví al presente con el más amargo sentimiento de tristeza.

"Será mejor que bajemos, Ratchet debe estarse preguntando por qué tardamos tanto" me dijo con su voz serena. Sin embargo, pude notar un sentimiento diferente pero no estaba segura de cual, ¿Podría ser pena, decepción, dolor incluso? No estaba segura, pero algo me decía que era similar a lo que yo sentía en ese instante.

Asentí con la cabeza para darle la razón y juntos comenzamos a caminar en dirección al ascensor.

El descenso fue silencioso y tranquilo pero la atmósfera que nos rodeaba se sentía pesada y tensa, del tipo de tensión como si hubiese algo más que decir, como si lo que ocurrió arriba no hubiese sido suficiente y careciéramos del valor para expresarlo, ni siquiera habíamos vuelto a mirarnos.

Cuando salimos del ascensor, Optimus hizo algo completamente inesperado para mí: me sujetó por los hombros y acercó sus labios a mi oreja "Quisiera poder prometerte una vida juntos, lo digo en serio. De no ser por la Matrix, por mi título, por esta guerra, yo…ya te habría dado todo. Por favor perdóname. No sabes cómo me gustaría darte todo de mi" me susurró con el más sincero sentimiento en su voz, luego se separó de mí y caminó hacia Ratchet, dejándome ahí de pie con lágrimas queriendo escapar y recorrer mis mejillas una vez más.

Cuando logré reaccionar otra vez, sequé mis lágrimas de forma rápida y caminé hacia el pasillo que conduce a las habitaciones "Ya me iré a dormir, buenas noches" dije de forma rápida antes de salir casi corriendo del centro de comando, sintiendo los ojos de mis compañeros sobre mí.

Pude oír a Ratchet "Debe estar muy cansada, el día de hoy fue muy intenso" si tan solo supiera todo lo que acababa de pasar.

Había pasado un poco más de una hora y no pude dormir en todo este tiempo.

Estuve paseando por mi habitación, dando vueltas y vueltas, pensando en todo lo sucedido, todo lo dicho y no dicho, me recostaba a llorar y luego me levantaba otra vez, intentaba desesperadamente aclarar mi mente, las palabras de Optimus aún resonaban en mi cabeza.

¿Era una especie de declaración? ¿Tenía relación con lo hablado antes? ¿Qué tan diferentes serían las cosas? Ya no podía más e hice lo único que me faltaba: acostarme en la cama solo a mirar el techo.

Me quedé en esa posición un rato más, jugando con mi cabello. Todo fue demasiado confuso, él estaba emocionalmente vulnerable y ahora yo también, ¿Qué clase de cosas podían salir de eso? No lo sabía, pero llegué a un punto en que ya no quería más dudas, necesitaba respuestas.

Rápidamente me levanté de la cama y salí de mi habitación.

Estaba tan inmersa en obtener las respuestas que quería que ni siquiera me importó salir casi desnuda, solo llevaba puesto un top para dormir y unas bragas negras de encaje.

Para cuando me di cuenta de lo impulsivo que era todo esto ya era muy tarde, estaba parada justo afuera de la habitación de Optimus y había golpeado la puerta tres veces, imposible cambiar de opinión así que me mantuve firme, con el rostro ardiendo y la spark latiendo fuerte una vez que oí sus pasos acercarse a la puerta, pero firme.

Cuando la puerta se abrió nuestras miradas se cruzaron y no me tomó mucho tiempo darme cuenta de que solo llevaba puestos unos bóxers ultra ajustados. Hice mi mayor esfuerzo para no mirar su escultural y tonificado cuerpo y concentrarme en sus penetrantes y profundos ojos azules.

Su voz me hizo reaccionar "Arcee" fue lo único que dijo, mi nombre, pero la verdad es que no parecía sorprendido por mi presencia, era casi como si me estuviese esperando, o al menos, eso quería creer.

Tengo que admitir que la reacción que tuvo mi cuerpo si fue una sorpresa para mí. Impulsivamente me arrojé a sus brazos y lo besé profundamente mientras mis brazos se enrollaban en su cuello.

Optimus seguía sin parecer sorprendido y rápidamente me sujetó para hacerme entrar.

Una vez que cerró la puerta, me sujetó por los muslos y me levantó, permitiendo que enrollara mis piernas en su cintura. Suavemente se acercó a la cama y se sentó conmigo en su regazo, no separamos nuestros labios en ningún momento.

El beso se volvió cada vez más intenso y lleno de deseo, nuestras lenguas danzaban en la cavidad del otro. Mordía su labio inferior con pasión y pude oír como suaves suspiros ardientes se escapaban de su boca.

Podía sentir entre mis piernas como su gran bulto rozaba mi cuerpo mientras sus hábiles manos acariciaban mi espalda y agarraban mis nalgas, posándose ahí durante un momento, apretándolas y dándome unas cuantas nalgadas, haciéndome gemir con deseo.

Sus labios comenzaron a descender por mi cuello con besos hambrientos. Movió mi cabello hacia un lado para que no le estorbara y su cálido aliento en mi piel me ponía realmente ansiosa, deseaba que no se detuviera.

Yo acariciaba su cabello y cuello con suavidad y firmeza, queriendo mantenerlo ahí, pegado a mi cuerpo.

Entonces un impulso cruzó mi cuerpo, algo me decía que, si no era ahora, no sería nunca, y decidí hablar "No lo necesito todo" dije entre suspiros llenos de deseo. Optimus se separo de mi cuello para mirarme, lo noté un poco confundido.

Le sonreí suavemente mientras acariciaba con cariño su mejilla "No necesito una vida…solo te necesito a ti…aquí y ahora" él estaba un poco confundido ante esta revelación, decidí continuar "No me importa la guerra, no me importa lo que ocurra a futuro ni lo que sucedió durante estos meses, solo te quiero a ti, aunque sea por esta noche".

Sus ojos seguían fijos en los míos y una sutil sonrisa se formó en sus labios al fin "Solo a ti" me dijo antes ve volver a besarnos. No había necesidad de mas palabras, a fin de cuentas, Optimus nunca ha sido un hombre de muchas palabras, sus acciones demuestran todo.

Mis manos bajaron por su cuerpo hasta llegar a sus poderosos pectorales y comencé lentamente a recorrer su torso desnudo, trazando suavemente sus músculos y acariciando cada una de las cicatrices que lo adornaban, aquellas que decoraban su piel como un recordatorio de su trayectoria como guerrero. Amaba a este guerrero.

Mi mente y mis acciones se vieron detenidas cuando agarró mi top de dormir y me lo quitó, dejando mi torso igual de expuesto que el suyo, nuestras pieles a pocos centímetros de rozarse.

Mis mejillas se calentaron cuando noté esa cercanía y la forma en la que me observaba, era como si estuviera impresionado por mi cuerpo.

De pronto recordé que mi cuerpo también estaba cubierto de cicatrices, la mas reciente de ellas, realmente mas grande que las demás: el estúpido ataque de Starscream grabado para siempre en mi piel, un recordatorio constante y perpetuo de mi incompetencia en situaciones de ese estilo.

Estaba a punto de cubrir mi cuerpo cuando escuché la profunda voz de Optimus devolviéndome al presente "Eres realmente muy hermosa, cada parte de ti" me dijo con cariño.

Tal vez lo dijo con esa intención o tal vez solo fue mi imaginación, pero realmente sentí que leyó mi mente. Sus palabras fueron sinceras y extremadamente precisas. Sentía como si leyera hasta lo más profundo de mi alma.

Fue en ese momento que volvió a besarme, con mucha pasión por supuesto, pero creo que con un sentimiento escondido. Claro que me di cuenta, yo me sentía igual.

Mientras nuestros labios seguían juntos él se levantó, sujetándome con firmeza, y me recostó en la cama posicionándose encima de mí.

Sus besos bajaron suavemente por mi cuerpo, pasando por mi cuello y mis hombros, llegando a mi clavícula y finalmente a mis pechos. Besaba mi piel con deseo, casi como si hubiese anhelado esto por mucho tiempo.

Suavemente comenzó a pasar su lengua por mi pezón endurecido y me daba pequeños mordiscos, aumentando mi excitación. Suspiros calientes salían de mi boca y mis manos recorrían sus hombros y espalda para mantenerlo firme en su posición.

Con su mano sujetó mi otro pecho, masajeando. Sentía un cosquilleo por mi columna que se esparcía por todo mi cuerpo. Eran mágicas las manos de este hombre. Cerraba mis ojos sintiéndome en una nube de placer.

Sentí entonces como continuó descendiendo por mi abdomen y como sus manos acariciaban mis piernas, haciéndome flectar la rodilla de forma involuntaria.

Estaba atrapada en un vaivén, sintiendo un extremo placer y al mismo tiempo sintiendo que me torturaba, me quemaba por dentro y estaba comenzando a sentirme muy impaciente.

Mi desesperación aumentó cuando comenzó a besar la parte interna de mi muslo con una sensualidad que me hacía pensar que soñaba. Se acercaba peligrosamente a mi zona mas sensible y luego se alejaba. A cada segundo mi placer aumentaba al igual que mis gemidos, necesitaba detener esta tortura.

De pronto, de la forma mas repentina, Optimus se alejó de mí, separando completamente su cuerpo del mío. Admito que no era a lo que me refería con 'detener la tortura'.

Lo miré con una mezcla de decepción y sorpresa, incluso podría decir que con molestia. Él, por su parte, me miraba con lujuria y un toque de diversión, esbozando una sexy sonrisa "¿Ansiosa?" me preguntó con su sensual voz de barítono y sus profundos ojos clavados en los míos.

Yo asentí mientras mordía mi labio inferior y lo miraba con ojos suplicantes. Maldito sea mi lado mas sumiso.

El calor de mi cuerpo aumentó cuando pasó sus dedos por encima de mi ropa interior mojada, haciéndome suspirar otra vez "Ya veo…pero aún no es suficiente" me dijo con picardía antes de tomar entre sus dedos mis bragas y deslizarlas por mis piernas, dejándome completamente desnuda.

Nuevamente se acercó a mi cuerpo, directo a su principal objetivo esta vez. Podía sentir su respiración en mi humedad y finalmente sus labios.

Comenzó a besar y lamer mi vulva con hambre, acariciando mis pliegues con su lengua y succionando mis jugos como si fuera el mas puro y fresco de los manantiales, provocando que fuertes y desesperados gemidos escaparan de mi boca.

Mi espalda se arqueaba con cada caricia y mi excitación creció todavía mas cuando sentí que su lengua llegó a mi clítoris, lamiendo y besando mi pequeño botón de placer.

Y cuando sentí que estaba a punto de explotar, Optimus me llevó a otro nivel de placer cuando introdujo sus dedos en mi y aumentaba poco a poco el ritmo.

Estaba tan embelesada, la lujuria se apoderaba de mi cada vez más, mi temperatura en constante aumento y mis gemidos se convertían en gritos de puro placer. Acariciaba su cabello con desesperación y, cuando ya no pude más, lo solté y agarré las sábanas de la cama en un intento desesperado por aguantar la explosión inminente.

No podía aguantar mas y solté mi liberación en un orgasmo tan intenso que provocó que todo mi cuerpo se tensara al punto de presionar mis piernas a los costados de la cabeza de mi líder.

Vi como Optimus se levantaba, me miró directamente a los ojos de forma muy provocativa y lamió sus labios que estaban cubiertos de mis fluidos, me hizo derretir al instante.

"Deliciosa" me dijo con su sensual todo de voz antes de acercarse a mi rostro y atrapar nuevamente mis labios en un beso caliente. Podía sentir mis propios fluidos cuando nuestras lenguas se unieron.

Luego, de forma rápida, Optimus se levantó de la cama, parándose frente mi mientras yo me apoyaba en mis codos para poder observarlo mejor.

Aproveché el momento para volver a apreciar su escultural físico, ese cuerpo bien trabajado que había despertado mis más prohibidos deseos.

Si, prohibidos, a fin de cuentas, el seguía siendo mi comandante, a pesar de todos los sentimientos que tengo por él, a pesar de todo lo ocurrido durante este tiempo que compartimos, era mi comandante y lo seguiría siendo en la mañana. El pensamiento me deprimió un poco.

Pero rápidamente se desvaneció cuando lo vi quitarse los boxers, quedando totalmente desnudo ante mis ojos y despertando nuevamente el deseo en mi ser.

Que bien dotado estaba mi Prime, realmente un gran soldado.

Sentía que estaba babeando y que una sonrisa muy tonta aparecía en mi cara. No pude evitar preguntarme como rayos entraría eso en mí, me parecía increíble y entendí de forma casi inmediata por qué se aseguró tanto de que estuviera realmente preparada.

Cuando me di cuenta de que no dejaba de mirar su colosal miembro decidí levantar la vista para mirarlo a los ojos. La lujuria me invadía y, mientras mordía mi labio con deseo, le hice un gesto con el dedo para que volviera a mí, y así lo hizo.

Optimus rápidamente captó mi mensaje y, en un solo movimiento, me atrapó bajo su cuerpo y, como por milésima vez aquella noche, atrapó mis labios, besando y saboreando mi cavidad.

Mientras bajaba por mi mandíbula, cuello y hombro, decidí acariciar su cuerpo. Pasé por sus fuertes brazos, deslizando mis dedos por su pecho y abdomen hasta que llegué a su ingle.

Bajé mi mano y acaricié suavemente su miembro erecto, lo sujeté y hábilmente comencé a masturbarlo. Empecé de forma lenta y aumenté el ritmo poco a poco.

Podía escuchar como suspiros de éxtasis escapaban de su boca y a sentir su cálido aliento rozando mi sensible piel mientras su mano volvía a agarrar mi pecho.

Ya no podía seguir aguantando.

"Cógeme" le dije con mi voz llena de lujuria "Hazme tuya" continué cuando me miró a los ojos con un toque de asombro, mi voz suplicante y llena de deseo.

Optimus solo me sonrió en respuesta y comenzó a frotar su pene en mi muy mojada vulva. Compartimos una última mirada de confidencia y lentamente me penetró.

Solté un suspiro ahogado que reflejaba un punto medio entre el dolor y el placer mientras sujetaba su espalda con fuerza, aferrándome a su cuerpo.

"Estás tan apretada" me susurró al oído mientras entraba completamente en mí. Pude sentir como mis paredes se apretaban a su alrededor.

Nos quedamos en esa posición durante un momento, necesitaba acostumbrarme a tener su longitud dentro de mí.

Sentí su suave toque sobre mi mejilla, acariciándola con delicadeza "¿Estas bien? ¿Quieres que me detenga?" me preguntó con genuina preocupación en su voz. Ahí estaba, Optimus Prime en su máximo esplendor.

Lo único que pude hacer fue sonreírle y verlo con amor "Estoy bien, continua" le dije entre jadeos, él asintió "Por favor dime si quieres que me detenga" me dijo antes de besar mi frente como gesto de seguridad y confianza.

Por muy caliente que estaba siendo la situación, esto no era sexo y ya, él realmente estaba pensando en mí, así como yo pensaba en él. Compartíamos un fuerte vinculo en cuerpo y alma: estábamos haciendo el amor.

Lentamente comenzó a moverse sobre mí, uniendo sus caderas a las mías. El dolor rápidamente se convirtió en placer y sus embestidas comenzaron a aumentar poco a poco.

Nuestros gemidos se mezclaron en una sinfonía erótica que aumentaba nuestro placer a cada segundo que pasaba. Escuchar gemir al poderoso Optimus Prime era un verdadero deleite, esa profunda voz es capaz de despertar los mas bajos instintos de cualquiera.

Yo seguí acariciando su espalda con deseo, creo que incluso deje unos pequeños rasguños superficiales.

Optimus comenzó a moverse cada vez mas rápido y fuerte dentro de mí. Le suplicaba entre gemidos que no se detuviera. Podía sentir como su poderoso miembro golpeaba dentro de mí.

Movía mis caderas a su ritmo y agarraba su trasero en un desesperado intento de mantenerlo firme en su posición, unido a mí.

El calor comenzó a aumentar y pude sentir que estaba a punto de llegar a mi clímax "Optimus voy a correrme" le dije entre suspiros de éxtasis y fue señal suficiente para que empezara a darme mas duro y con mas fuerza que antes. Gritos y gemidos desesperados comenzaron a escapar de mi boca mientras mi agarre sobre su cuerpo también se volvía mas fuerte.

Liberé mi clímax en un poderoso orgasmo gritando el nombre de mi líder mientras que mis piernas se anclaban a sus caderas.

Él, por su parte, soltó un profundo orgasmo mientras se corría en mi interior, liberando una gran cantidad de fluidos mientras mis paredes se apretaban mas de lo que ya estaban en su longitud aún dura.

Cuando acabamos, nos quedamos en esa posición durante un momento, descansando y recuperando un poco de toda la energía que habíamos gastado.

Apoyó su cabeza en mi pecho y escuchaba mi spark mientras acariciaba su sedoso cabello. Optimus estaba increíblemente tranquilo, esto lo calmaba. Creo que, de cierta forma, esto lo hacía liberarse de la carga de los Primes.

Pasaron unos minutos y eventualmente salió de mí. La sensación de vacío me hizo sentir extraña pero no me importó demasiado.

Optimus se recostó en la cama y me atrajo a su cuerpo en un abrazo reconfortante. Acariciaba mi mejilla y me miraba con una mezcla de amor y tristeza "Lamento no poder darte más" me dijo en voz baja y con un poco de dolor "No necesito más, solo te necesito a ti" le recordé sonriendo "Somos guerreros, la vida que tenemos nos limita mucho y nos prohíbe mucho también, pero estoy dispuesta a esperar una eternidad de ser necesario…por ahora, tenerte junto a mi de la forma que sea es suficiente" acabé diciendo de la forma mas sincera y con el mas puro sentimiento en mi voz. Eso pareció darle seguridad y tranquilidad.

Optimus me abrazó todavía mas antes de contestar "Jamás podría alejarme de ti Arcee, eso te lo juro con toda mi spark" dijo con exactamente el mismo sentimiento que yo.

Juntamos nuestras frentes y nos dimos un último beso lleno de amor antes de caer dormidos en los brazos del otro.

En este momento nada más importaba. Éramos solo nosotros y nada más, aunque solo fuera por una noche.

Me desperté a la mañana siguiente envuelta en las sábanas de su cama sintiéndome mas feliz de lo que no me había sentido en mucho tiempo.

Optimus no estaba en la cama junto a mi y no había absolutamente ningún rastro de él en la habitación a excepción de una pequeña nota junto a mí.

"Te veías tan tranquila que no pude despertarte. Anoche me diste el regalo mas hermoso de todos. Tu presencia a mi lado y tus sentimientos puros fueron suficientes para hacerme entender que vale la pena seguir luchando. Mi eterna Sweetspark. O.P."

Con una sonrisa de enamorada en la cara abracé la nota, poniéndola justo sobre mi spark, recordando la noche anterior e imaginando un futuro que, a pesar de ser lejano e irreal, me devolvía la felicidad y la esperanza.

Luego de levantarme y arreglarme, caminé en dirección al centro de comando.

Cuando entré lo encontré a él, hermético e impasible como todos los días, inmerso en lo que Ratchet le enseñaba en la computadora.

Fue en ese instante que su mirada chocó con la mía y pude notar como sus ojos se suavizaron y la sombra de una sonrisa apareció en sus perfectos labios. Yo le sonreí de vuelta de forma sutil para que nadie mas pudiera notarlo.

Nadie sabría lo que ocurrió la noche anterior entre Optimus y yo.

Nuestro encuentro prohibido sería solo nuestro, como un intimo secreto, al igual que los sentimientos que tenemos el uno hacia el otro.

El momento que compartimos la noche anterior sería solo eso, un momento, un momento en que se nos permitió ser libres de la carga y miseria de la guerra. Pero el amor y la conexión entre los dos sería eterna.

Nadie sabe lo que ocurrirá en un futuro, pero, sea lo que deba ser, en mi spark siempre sabré que Optimus me pertenece y que yo le pertenezco a él, en cuerpo y alma, pues siempre seremos parte del otro y así será sin importar el camino que conduzca la guerra, sin importar el tiempo ni la distancia, ni siquiera la vida misma.

De alguna manera siempre vamos a estar juntos hasta que llegue el día en que realmente seamos uno.

Muchas gracias por haber leído esta historia, espero que les haya gustado. Voy a intentar seguir activa en la página y, eventualmente, subir mas trabajos de diferentes fandoms. Gracias nuevamente.