Capítulo 18

Instrucciones escuchar: SOAK - Sea creatures

Te vi al terminar el concierto de The Growlers, te vi Terry, te vi y William se dió cuenta, me abrazó... sabía nuestra historia.

Años atrás, cuando te conocí, estabas ensayando con Susana para la audición de Romeo y Julieta, me gustaste desde el primer momento en que te escuché, creo que por esas frases del guión que interpretabas en ese instante, las estrellas y la luna me recuerdan a ti... a las noches de los ensayos en el colegio Stanford, nunca te diste cuenta de que yo existía, yo pasaba totalmente desapercibida para ti.

Tú estabas con Flammy, que era prima de Kelly, y por tanto también mi prima, por eso me sentía culpable, porque me gustabas, y yo no podía hacer nada, la verdad es que hacían una bonita pareja, tú estabas pendiente de ella y ella estaba enamorada de ti, era una chica muy afortunada, estaba contigo, podía abrazarte, podía besarte... Pero le fuiste infiel con Susana, si Terry yo fui testigo de como Susana con su cara de pez se te insinuaba todo el tiempo, hasta que caíste. No sabía qué decir, ni qué hacer, podría haber empeorado las cosas. Pero todo siguió su curso y a las pocas semanas Flammy te dejó, se fue a Finlandia, ella no quería que fuéramos a despedirla al aeropuerto, aún así fuimos, y te vi detrás de una columna, vi cómo te debatías entre ir tras ella o dejarla ir.

Decidiste dejarla libre, pero a cambio empezaste a beber, sé que cometiste un gran error, aún así tú no te mereces esto. Seguiste con Susana y tu relación con ella se volvió tormentosa, ella empezó a liarse con otros chicos, no sé cuál es su problema, no la entiendo, y no sé si podré aguantarlo más, dice que te ama pero ella no lo dice en serio, ella no sabe lo que es amar.

Cuando me escogieron para representar a Julieta fui muy feliz, tú serías Romeo, mi Romeo. Pero mi felicidad duró poco, Susana me humilló delante de todos cuando se enteró que le denegaron el papel, luego la expulsaron, aunque todos piensan que se marchó del colegio porque su madre, la señora Marlow, no estaba de acuerdo con el reparto de la obra.

A partir de entonces una lista interminable de chicas pasaron por tu cama, ellas decían que te amaban pero no, no creo que ellas sepan lo que es el amor, hacer el amor, sin amor, como si fuera algo que no valiera nada. Acostarse contigo no es amarte.

Hasta que llegó el día de la representación, realmente estás hecho para el teatro, tu seguridad en el escenario, tu forma de conectar con el público, la forma en la que me mirabas, yo... yo seguía enamorada de ti. Cuando terminó la obra, todos nos aplaudieron, reconocían el talento que desprendías, y con ello las murmuraciones empezaron: tu fama de conquistador te precedía.

No entiendo esta ciudad, y creo que tú tampoco, creo que deberíamos irnos lejos, solo tú y yo, porque no entiendo a la gente de aquí, son curiosos, realmente no les importamos, criaturas del mar que interfieren en nuestros sueños, ojalá desaparecieran, ellos no saben lo que es el amor. Sabía que oíste lo que dijeron de tus noches fuera de casa y de tus altercados en los bares, por eso fui a tu camerino, quería saber si estabas bien.

Toqué la puerta, me abriste y desprendías pasión, pasión por el teatro, pero estabas ebrio, otra vez... Quise hablar pero no lo permitiste, una breve felicitación y devoraste mi boca, me hiciste tuya, todavía recuerdo tus manos recorriendome, fue increíble, me quedé dormida y al despertar ya te habías ido. Lloré, lloré porque yo si te amaba y sabía que nunca te volvería a ver.

Desde entonces rezo por ti, y ya sabes que no creo en las religiones, pero quiero que seas mejor. Por favor Terry, por favor recupérate, vuelve a ser tú... por ti, por mi... por nuestro hijo.