Gracias por los comentarios chicas.
MadelRos: Gracias, sí totalmente de acuerdo, ojalá Albert pueda aclarar todo con Candy cuanto antes. La idea es que es un Albertfic, pero hay drama en los próximos capítulos, así que ya veremos qué ocurre. Me emociono porque tengo en la cabeza muchas ideas y de un minific está pasando a ser un fic de más de 20 capítulos haha.
Guest: Muchas gracias, espero que este capítulo también te guste.
Capítulo 19.
Instrucciones: Escuchar: Pixies - Ana
Aunque no formemos parte de la cara visible del Clan Andrew, Stear, Anthony y yo hemos decidido ayudar a Albert con la gestión de las empresas, no sólo por quitarle un poco de peso sino porque tenemos que aprender cómo se dirigen las empresas. Así que nos reunimos en casa de tía Elroy, entre ella, George y Albert nos están poniendo al día de todas las transacciones que se han llevado a cabo. Como Albert es el que tiene la agenda más a tope, es él quién decide cuándo vernos. Y Albert de nuevo nos ha cambiado el horario, así que esta semana me toca trabajar por la tarde, estos cambios de humor suyos nos descuadran la vida. Ya me había organizado la semana, con el Festival de Primavera, todo estaba planificado para trabajar por la mañana, ir al gimnasio por la tarde y tener la noche libre para ir a los conciertos. Sin embargo, pensé que aguantaría el ritmo, pero solo llevamos un día de festival y ya estoy destrozado. Lo único bueno de venir por la mañana al gimnasio es que está casi desierto, una hora de cardio, pesas y piscina, necesito relajarme.
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Clases de body combat es lo que necesito, quemar calorías y soltar la furia contenida que tengo, ¿cómo es posible que el tonto de Archie me hiciera esto?. Circuito de cardio acabado, algo de pesas y decido relajarme en el sauna, puse una toalla en la banca y me iba a recostar en ella pero me dió por la meditación, así que me quedé en posición buda. El sauna tenía una ventana que daba a una de las piscinas, estaba totalmente despejada, simulaban olas y en uno de los extremos salían chorros de agua, una buena idea para relajar la espalda. Pero ahora estaba aquí, empezando a sudar, calor, la respiración se dificulta, cierro los ojos y me concentro en respirar, en relajarme, pero no... alguien se ha atrevido a entrar e incordiar mi paz, no se si abrir los ojos o hacer como que no está y seguir respirando lentamente y olvidarme del mundo.
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He acabado con los brazos, ya estoy cansado así que voy a la ducha, pero tengo que destensarme e ir al sauna es una buena opción, abro las puertas y eres tú, Annie.
Su cuerpo tiene un delicioso brillo, lleva un bikini azul atrevido, y mi mirada se dirige irremediable a sus preciosos senos, ligeras gotas de sudor descienden en medio de aquellas dos maravillosas obras de arte, pasan por su cintura y hacia abajo. ¡Dios! esa postura no deja nada a la imaginación, me siento justo enfrente de ella, sigue con los ojos cerrados pero ahora ha cambiado de postura, cruza las piernas y apoya sus manos a los lados, sus larguísimas piernas se escurren, no encuentra la postura, mi miembro crece sin control, y ¡joder es Annie! tengo que irme, pero justo cuando lo iba a hacer ella abre los ojos, sus preciosos safiros me ven, está sorprendida me recorre con la mirada y se detiene en mi polla, esta dura a reventar y sin control, sus mejillas se sonrojan y se muerde el labio inferior, debo poseerla, no puedo mas.
Me acerco a ella y besos sus senos, los amazo a mi gusto, muevo el sujetador, mi boca se apodera de sus pezones, los muerdo, hago a un lado el tanga y la embisto, ¡qué estrecha es!, la llevo hacia la banca, quedando ella encima de mi, beso sus hombros, su cuello, la marco como mía, mi miembro sigue reclamando llenarla, ella es una amazona, perfecta, tan sexual, se entrega al placer, mi miembro sale y entra, quiero apoderarme de toda ella, quiero que se corra en mi boca, quiero correrme en su culo, demasiadas cosas que deseo hacer con ella, pero no estamos en el lugar adecuado, la adrenalina de que nos descubran hace que el sexo sea más salvaje, llegamos al orgasmo a la vez... la beso en los labios, y debemos salir de ahí, ya llevamos veinte minutos y debemos darnos una ducha de agua fría para cerrar los poros, salimos, ver el agua correr sobre ella, de la cabeza a los pies, ella es espectacular. Entramos al jacuzzi, los besos se hicieron más demandantes, y empezamos a tocarnos debajo del agua, iba a penetrarla otra vez, pero empieza a llegar gente al área de las termas, así que nos marchamos a los vestidores. He quedado con ella en la salida, tenemos mucho de que hablar.