Era un buen día en villa raíz. El aire era fresco, el sol brillante y las flores bailaban en un tranquilo zig-zag al son de una melodía relajante y eterna. Lo único que podía arruinar este hermoso día era TULA.
TULA era un típico degenerado de villa. Vivía solo en su casa en una esquina poco transitada del pueblo. Nadie supo nunca cómo llegó, ni si tenía familia. Sencillamente un día apareció y la paz se fue.
TULA, el malhechor, se paraba durante horas con una cara de depravado mirando a la gente hasta que volteara y cuando le preguntaban qué quería gritaba VAGINAAAA o simplemente gemía y luego se reía solo.
Cuando la gente empezó a evitar las afueras de su casa, TULA, el acosador, empezó a espiar a las personas detrás de un árbol o de un letrero y, cuando se acercaban, saltaba de repente y los asustaba para luego decir: -Qué tal nena se peina ¿Te gusta la leche de burro? guiño guiño brrr roar gemido, etc.
Cuando la gente empezó a evitar salir de sus casas en general, TULA, el mal que nunca descansa, iba en el rango horario para dormir() a la casa de algún desafortunado a gritar alguna bobada o simplemente observaba a la persona en cuestión hasta despertarla y luego se iba corriendo entre risas.
En cierto punto, la gente empezó a usar los correos que nadie usaba para organizarse y hacer irse a TULA con sus propias manos y, ciertamente, lo que más molestaba era que, cada vez que iban a pelarlo, todo lo que decían se volvía de alguna manera en un chiste de doble sentido.
En fin, el buen día descrito en el primer párrafo fue el día en que los vecinos de Villa raíz se reunieron para hablar de TULA:
-Vecinos, es el momento de decidir qué hacer con TULA. Ha llegado demasiado lejos y sus fechorías están en boca de todos- dijo seriamente el presidente de la junta.
-¡Simple! ¡Hay que deshacerse de él!- dijo enérgicamente la damisela- cada vez que doy un paseo está TULA con su mirada clavada en mí con esa cara… agh, y encima todo lo que dice no va con nuestra elegancia ¡Lo quiero afuera!-
-O sea, no sé si sea tan malo- dijo una chica en una esquina luego de levantar ligeramente su dedo índice- tal vez se sienta solo y eso es todo…-
Silencio incómodo
-Estoy harto de TULA- dijo un tipo sin camisa mientras sostenía una guitarra eléctrica- hace poco encontré al amor de mi vida guiñe el ojo a la chica y cada vez que salgo con ella quiero mostrarle todo mi amor ¿sabes a lo que me refiero? Pero antes que pueda decir palabra ambos sentimos a TULA detrás de nosotros, lo miramos y sale corriendo, eso no es nada cool…-
-¡Cada vez que voy a ejercitar TULA empieza a correr detrás de mí y grita que lamería todo mi sudor con gusto!- Irrumpió la corredora de triatlón.
¡Odiamos a TULA! ¡Fuera TULA! ¿Qué es un burro? ¡Te queremos afuera! Las quejas comenzaron a salir una tras otra y la conversación empezó a subir de tono literal y figurativamente.
-Paciencia, paciencia…- Intentó calmar el presidente.
…
suspiro -Si no todo se tratara de pokemones podríamos haber creado… no sé, una entidad legislativa que dijera qué es lo bueno y lo malo y otra que haga cumplir esos mandatos cuando alguien los desobedezca-
Luego de esta reflexión del presidente los miembros de la junta se miraron entre ellos.
() A pesar de que en el esmeralda introdujeron un reloj, en ese mundo no hay noche como tal. Así que desde ahora la noche será llamada el horario para dormir y lo demás el horario para hacer cosas que no son dormir.
