Mientras no estabas

Un día Olvidable.

Cuando aterrizaron en Kame House se dirigieron con premura al interior, pero al abrir la puerta se encontraron con que la emergencia no era ni más ni menos que el cumpleaños de Tortuga.

De inmediato le reclamaron al anciano por hacerlos preocuparse, pero enseguida comprendieron que era una buena idea reunirse para celebrar a tan querido amigo.

Pasaron la tarde con el Maestro. Estaban sentados a la mesa, bebiendo y conversando. Hasta que el Maestro miró a Bulma y le preguntó - Dime, Bulma ¿No has sabido nada de Vegeta?

Bulma carraspeó un poco antes de responder - No, Maestro. Él mismo desactivó el sistema de comunicación de la nave… Sinceramente no sé si habrá encontrado a Gokú o si planea volver a la Tierra alguna vez…

-Oh, ya veo. De todos modos, debemos estar preparados. Les he dicho a estos muchachos que no dejen de entrenar… ¡pero no me hacen caso! Ellos quieren vivir una vida normal al parecer…

-Debería dejarlos… - le dijo la muchacha - después de todo dudo mucho que Vegeta nos haga daño.

-No puedes estar segura – interrumpió Yamcha – ese enano no es más que un desgraciado que solo quiere matar y destruir planetas.

Bulma puso mala cara, por suerte esa cara últimamente ya era normal en ella.

-Yamcha tiene razón, Bulma. Ese hombre es espantoso… Solo desea acabar con la Tierra – comentó Oolong.

-Mmm… si hubiera querido… ya lo habría hecho- refunfuño Bulma entre dientes, mientras tomaba un sorbo de su vaso.

-Solo esperemos que no vuelva nunca más a nuestro planeta- terminó diciendo el Maestro – es un muchacho demasiado voluble...

Todos quedaron pensativos unos segundos. En eso apareció en la puerta Krilin, quién venía acompañado de una muchacha.

Todos se voltearon y saludaron al recién llegado.

-Hola, muchachos – los saludó, pero enseguida se sorprendió al verlos a todos reunidos y les preguntó – Oigan ¿Cómo se enteraron?

-¿De qué hablas? – le preguntó Yamcha – Nos reunimos para celebrar el cumpleaños de Tortuga

-¡Oh! Es cierto… Lo había olvidado… Bueno, aprovechando que están todos aquí, les quiero presentar a mi novia…

-Hola, mi nombre es Maron - Dijo la muchacha que lo acompañaba - Todos son muy lindos.

Saludaron a la muchacha y los invitaron a sentarse con ellos, entre sonrisas cómplices por lo inesperado de la situación.

-Oye, Krilin… tu novia es muy bonita – comentó Yamcha, con algo de lascivia.

-Sí. Me das mucha envidia… ¿seguro que está por su voluntad? - pregunto Oolong.

Bulma notó que su novio no dejaba de ver a la pareja de Krilin. Eso la enfureció. Y se lo hizo notar -Oye, deja de mirarla así- le dijo por lo bajo.

-Pero, Bulma, solo estoy reconociendo que es linda, no tiene nada de malo…

-A Maron no le molesta… - dijo la chica, aproximándose a Yamcha – Tú también eres muy lindo y fuerte…- agregó, mientras sujetaba uno de sus brazos, tasando los músculos del joven. Enseguida miró por encima del hombro de éste y preguntó, mirando a Bulma - Ah, ¿esta señora es la madre de Krilin? Maron está encantada de conocerla.

Bulma sintió su orgullo de mujer herido, por lo que se saltó de su lugar para golpear a la chica, mientras media docena de brazos la sujetaba.

-OYE, QUE TE CREES. YO SOY UNA MUCHACHA TAMBIÉN. A QUIEN DEMONIOS LE DICES SEÑORA…SUÉLTENME, LE VOY A DAR SU MERECIDO A ESTA TONTA…

-Ay, señora, no se sulfure… - le recomendó Maron - si no es su madre no importa. Krilin me dijo que veníamos a conocer a su familia… si era la amante de su padre, Maron no juzga a nadie.

Bulma quería asesinarla con sus propias manos, pero por suerte Krilin intervino.

-Maron – dijo Krilin, con una gota en su cabeza, tomándole la mano y alejándola - ellos son mis amigos y te dije que ellos eran como mi familia ¿no lo recuerdas?

La chica se quedó en blanco un segundo, miró el cielo raso y respondió -Hum, no. ¡Pero el paisaje estaba muy bonito! - respondió ella, dando un aplauso.

Todos cayeron en cuenta que a la muchacha le faltaba algo invisible a los ojos.

-Maron, yo soy el Maestro de Krilin. Te haré una pregunta ¿Tú amas a este muchacho?

La chica miró confundida por un segundo, luego respondió - Oh, por supuesto… ¡Maron ama a todos los chicos lindos!

Desmayo general. Nadie agregó nada más al asunto. Si Krilin la había elegido como novia ya era su problema.

Todos volvieron a beber y comer y conversaron de otras cosas, pero en eso apareció Gohan.

-Ja, ja, ja… ¡Hola!

Voltearon a saludarlo y lo incluyeron a la celebración. Conversaron y disfrutaron de la playa durante toda la tarde. Hasta que unos gritos los sobresaltaron

-¡GOHAN! … ¡Se que estás allí!

Era Milk, que había seguido a su hijo hasta la Kame House, logrando que todos se pusieran en alerta, ya que era legendario entre ellos el mal carácter de la esposa de Gokú. Pero justo cuando salieron al encuentro de la mujer, Bulma comenzó a sentirse mareada, lo que atribuyó a la cerveza y el aire marino. No se dio cuenta de cuando perdió el conocimiento.

...

Al despertar se dio cuenta de que estaba en la capital. Era entrada la tarde, su aeronave estaba volcada y Yamcha estaba unos metros más allá. Ella estaba sobre un arbusto… "Vaya, parece que se nos pasó la mano con la celebración… no recuerdo nada… y por lo visto tuvimos un accidente de regreso…"

-YAMCHA… ¿ESTÁS BIEN? – gritó, buscando a su novio con la mirada.

Él sacudió su cabeza, miró por todas partes hasta que la encontró. Voló hacia ella y la bajó de donde estaba con delicadeza - ¿Qué ocurrió?

-No lo sé. Pero parece que la fiesta estuvo buena... – le respondió ella

-Tienes razón. Volvamos a tu casa. ¿No te duele nada? - le preguntó preocupado.

-No, estoy bien. Solo un poco la cabeza. Pero parece que mi aeronave está hecha añicos.

-No te preocupes por eso. Yo te llevó.

La ciudad también estaba toda destruida, escaparates rotos, gente en el suelo. Pensaron que quizás hubo un terremoto o algo así. No le dieron mayor importancia y volvieron a casa levitando.

Cuando llegaron, ya era de noche. Avanzaban por la sala, cuando Bulma recordó lo mal que le había caído la novia de Krilin.

-Esa chica no me gusta para Krilin. No tiene nada especial y no creo que ame a nuestro amigo como dice…

-Tú estás molesta porque es más joven…- comentó Yamcha como para sí.

-¿QUE DIJISTE?- dijo ella, amenazándolo con el puño.

-Nada, nada… decía que era una niña tonta… - negó con sus manos por delante, a la defensiva.

-Sin embargo, tú no dejabas de mirarla… - le reclamó, bastante ofuscada.

-Ya te dije que era solo por cortesía… - respondió con una gota sobre su cabeza.

-¿Sabes? Te comportaste como un verdadero imbécil…será mejor que continuemos mañana esta conversación. Estoy exhausta… Buenas noches.

- Bulma, pero…

-BUENAS NOCHES, DIJE.

Ella subió las escaleras y a continuación se oyó un portazo. Yamcha la miró alejarse desde donde estaba. Hubo un intento de seguirla… pero él también se sentía cansado.

En el balcón de su habitación, Bulma encendió un cigarrillo, mientras miraba las estrellas, sentada en el suelo. Se sentía tonta por haber peleado por esa estupidez, pero estaba muy molesta. "Esa idiota cabeza hueca… ¿con quién creía que estaba hablando? Yo soy Bulma, la mujer más inteligente del planeta… ¿qué estoy vieja?… esa tonta hirió mi orgullo con ese comentario…" - mi orgullodemonios, ya estoy pensando como ese idiota… - se puso de pie y se apoyó en el barandal - Aun no encuentras a Gokú, ¿verdad?... seguro que no, de ser así ya habríamos sabido algo… ¿Por qué desconectaste la comunicación? maldito idiota... ¿Y si tienes algún problema con la nave quien te va a ayudar? Serás muy inteligente, pero ¿serás capaz de reparar la nave?... maldito, te odio… Mejor me voy a dormir, para que se me olvide el mal rato que pase por culpa de esa tonta descerebrada y olvidar también a ese malagradecido.

Se desvistió y se metió en la cama, esperando por que el sueño llegara pronto. Pero como suele ocurrir, estaba por dormirse cuando alguien tocó a su puerta. Era su madre.

-Hija, ¿estás dormida ya?

-No, mamá. ¿Qué ocurre? - respondió Bulma, encendiendo su lámpara.

Su madre entró en la habitación y se sentó a los pies la cama. Acto seguido suspiró, sosteniendo un pañuelo cerca de uno de sus ojos.

-Querida, en unos días se van nuestros huéspedes… y la casa quedará taaaaan sola.

Bulma alzó sus cejas y le dijo, compasiva -Mamá… No te pongas así… Debes comprender que ellos tienen que volver a su hogar…

-Lo sé, cariño… venía solo a comentarte lo sola que se sentirá la casa sin sus cantos y sobre todo sin los niños… es hermoso verlos corretear de aquí para allá, mientras juegan.

Bulma, frunció el ceño y le dijo a su madre lo más diplomáticamente posible mientras se enderezaba e indicaba la puerta - ¡Mamá, si quieres nietos ve a pedírselos a Tights!

-Hijita, no te molestes… Pero debes saber que con tu hermana ya perdí las esperanzas… - dijo juntando sus manos, para luego abrir sus grandes ojos azules y mostrarlos llenos de emoción – eres la llamada a continuar con la Compañía… Qué más natural que seas la que nos dé descendencia…

La muchacha decidió que la única forma de escapar de esta conversación era dándole algo de esperanzas. Se dejó caer sobre sus almohadones y le dijo - Ay, sabes que no está en mis planes inmediatos, pero…

A Bunny se le iluminó la mirada - ¿Eso es un sí? – le tomó las manos – ¡Me alegro tanto!… podrías decirle a Yamcha que formalicen de una vez para que avancemos, no nos queda mucho tiempo y si no es molestia, ya podrían ponerse a practicar…

-¡MAMÁ! – exclamó con la cara roja brillante.

-Está bien… no te enojes – dijo, mientras se ponía de pie y avanzaba hacia la salida - me retiro más tranquila… que duermas bien y no olvides esta conversación…

Su madre salió de la habitación y Bulma se tapó hasta la cabeza, tratando de descansar. Pero se quedó pensando en que todo el universo se había confabulado para indicarle que ya no era la muchacha de antaño… "lo mejor es no seguir pensando en eso… aun soy joven, hermosa e inteligente… yo decidiré cuando sea el momento… "

Continuará…