Disclaimer: Twilight le pertenece a Stephenie Meyer, la historia es de LozzofLondon, la traducción es mía con el debido permiso de la autora.

Disclaimer: Twilight is property of Stephenie Meyer, this story is from LozzofLondon, I'm just translating with the permission of the author.

Capítulo beteado por Yanina Barboza

Grupo en Facebook: Tradúceme un Fic


Oigo los rápidos pasos de Rose y Alice detrás de mí, pero no me doy la vuelta, no puedo.

¿Quién diablos se cree que es? Estoy enojada, no, estoy furiosa. Pero a medida que me alejo de la cafetería, me doy cuenta de algo más. Estoy herida. Nunca había sentido este tipo de dolor antes. Rechazo, humillación... las emociones recorren mi cuerpo, desbordándose como lava, rebosando y filtrándose hasta mis pestañas.

Y qué si lo presioné un poco. Pero ¿cuál es el problema? Y, ¿qué pasa si quiero saber un poco más sobre el tipo con el que estoy, estaba, follando? Eso es perfectamente natural, ¿verdad?

Odio esto. Odio este sentimiento de incertidumbre. Sobre todo, quiero odiarlo. Pero no puedo, y eso me enfurece aún más. En todo caso, todavía me siento horrible; como si yo tuviera la culpa por la forma en que me atacó.

―¡Bella! ¡Espera!

Me detengo, tomando una respiración profunda, negándome a enfrentarlas.

―¿Qué diablos fue eso? ―pregunta Rose, deteniéndose frente a mí.

Me encojo de hombros, sin saber qué más puedo hacer. No sé qué fue eso.

―Chica, eso fue... brutal. ―Alice me mira con simpatía, sonriendo suavemente.

Los estudiantes comienzan a salir de la cafetería tres segundos antes de que suene la campana. Sus ruidosas pisadas se acercan rápidamente a donde estamos.

No puedo quedarme aquí.

―Me voy a casa ―les digo a Alice y Rose, justo cuando Angela se une a nosotras, su expresión preocupada.

Nadie discute, tres cabezas asintiendo, sin saber qué hacer. Nunca hemos estado en esta situación antes. Nunca hemos sido humilladas públicamente de esta manera, no nosotras. Mierda como esta no les pasa a las chicas como nosotras.

Necesito espacio. Necesito un plan de acción. Necesito pensar, procesar.

Conduciendo a casa, pienso en todo, reproduciendo cada momento una y otra vez en mi cabeza.

Sé que he sido estúpida. Supe desde el momento en que Edward Cullen puso un pie en Forks que él era un problema, tal vez incluso alguien muy dañado. Pero yo fui masilla en sus manos desde el momento en que me besó por primera vez. ¿Parte de esto es mi culpa? Absolutamente. He sido intocable durante mucho tiempo y supongo que me arrullé con una falsa sensación de seguridad.

La peor parte es que, si él estuviese frente a mí ahora, no estoy segura de poder ocultar mi dolor. Se excitaría con la agitación dentro de mí, sin duda.

Quiero arrancarle los ojos y lastimarlo como él me lastimó a mí. Quiero que sienta una pizca de la rabia que burbujea bajo mi piel.

No puedo recuperarme de esto. No esto. Esto es nuevo.

Sé lo que tengo que hacer.

Es posesivo y arrogante. Son tanto sus debilidades como sus fortalezas.

Volver al punto de partida.

Si jugar significa mantener a Edward Cullen en mi vida, no puedo parar.