Disclaimer: Twilight le pertenece a Stephenie Meyer, la historia es de LozzofLondon, la traducción es mía con el debido permiso de la autora.

Disclaimer: Twilight is property of Stephenie Meyer, this story is from LozzofLondon, I'm just translating with the permission of the author.

Capítulo beteado por Yanina Barboza

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Rose me mira fijamente desde mi cama, parpadeando sin comprender.

―Hablo en serio ―le digo, riendo nerviosamente. Ahora que he contado los detalles, suena jodidamente loco.

Me encuentro con nada. Por un momento estoy preocupada. Girándome hacia Alice, que está mirando fijamente una foto nuestra en la pared, empujándose de un lado a otro con el pie, mi vieja silla de computadora crujiendo como un latido constante mientras se mueve, lanzo mis manos al aire.

»No es tan increíble.

Angela arquea una ceja y me mira con escepticismo, al menos es movimiento.

―Está bien ―comienza Alice, inclinándose hacia adelante y apoyando los codos en las rodillas―. Déjame aclarar esto. Tú… —apunta su dedo en mi dirección―, y Edward Cullen, ¿han decidido ser "amigos"? ―Estrecho los ojos ante las comillas con los dedos, pero asiento.

Antes de que pueda defenderme, Rose me interrumpe.

―¿Y van a ver cómo les va? ¿Intentar empezar de nuevo? ¿Tú... y Edward el "puto" Cullen? ―No está convencida, no es que pueda culparla.

Supongo que es mi culpa, dejé algunos detalles fuera.

―Él no es… ―Sí, esto es más difícil de lo que pensaba. Puede que no haya estado follando con otras personas, pero no sé cómo puedo defender sus escapadas sexuales sin sonar ingenua.

Suspiro, sintiéndome derrotada y oprimida.

―¿Pueden solo... darme el beneficio de la duda? ―La ceja de Rose se levanta de nuevo y yo frunzo el ceño―. ¿Qué es lo peor que puede pasar?

Burlándose, Rose niega con la cabeza.

―¿De verdad quieres que responda eso?

Alice se recuesta en la silla y se muerde el labio mientras me estudia.

―Mira, B, sin ofenderte, pero... has estado desde el principio enganchada con Edward Cullen, no subestimemos el control que tiene sobre ti, ¿de acuerdo?

Un hilo perdido en mis vaqueros llama mi atención, mis dedos juegan con él, jalándolo, viendo cómo se deshace.

―Pero me gusta. ―Mi voz es débil, tímida―. No puedo simplemente olvidarlo y seguir adelante. Si existe la posibilidad de que podamos... empezar de nuevo, quiero aprovecharla.

―¿Y qué hay de él? ―pregunta Angela cuidadosamente desde su lugar habitual en el suelo.

―Dijo que quería lo mismo. Y... yo le creo.

Asintiendo, ella lo deja pasar.

Que es más de lo que puedo esperar de Rose.

―Hay demasiadas cosas sobre ese chico que me aterrorizan. Pero… ―Se encoge de hombros―. Le daré el beneficio de la duda. Por ti, no por él.

Sonrío agradecida, antes de girarme hacia Alice, quien asiente en silencio estando de acuerdo con Rose.

―Te cubrimos la espalda ―agrega.