Ranma 1/ 2 no nos pertenece, es de su creadora la gran Rumiko Takahashi.

Esta historia es de nuestra inspiración y con el único fin de entretener.

Mi querida Maya Shapiro y una servidora estamos colaborando en la creación de éste fanfic respondiendo a la invitación hecha por la página Mundo Fanfics Inuyasha y Ranma en la #RankaneWeek2023

#milyuntrazosdeamor

#milyunpalabrasdeamor

Esta hecha con mucho cariño,deseamos que la disfruten mucho.

CAPITULO IV. BESO IDEAL.

Confesiones.

Akane despertó esa mañana muy emocionada y deseosa de su cita con Ranma, así que se levantó para dirigirse a su guardarropa y decidir el atuendo adecuado. En cuestión de minutos su recámara lucía sumamente desordenada con ropa tirada por todos lados.

Ya con el atuendo elegido, algo casual y práctico, un traje pantalón muy favorecedor, unas zapatillas cómodas y un bolso cruzado que podía servir para cualquier lugar, fue a ducharse para estar lista a tiempo.

Una hora antes de lo acordado en su cita Akane ya estaba lista y esperando a que llegara Ranma por ella. Su padre se encontraba en su estudio por lo que estaba sola viendo televisión mientras esperaba.

Pasados unos minutos tocaron al timbre por lo que la chica, pensando que se trataba de Ranma, acudió a abrir con una sonrisa en sus labios.

Al ver de quien se trataba su sonrisa se borró.

Ryu no esperó invitación y se adentró en la casa, se notaba molesto. Se giró y barrió a Akane de arriba a abajo.

— ¿Vas a alguna parte?

—Sí, tengo una cita para almorzar ¿Podrías marcharte, por favor? Tú y yo ya no estamos juntos ni tenemos nada que decirnos.

Contestó tranquila, no debía perder la compostura y menos por él, ya se imaginaba lo que habían hechos esos dos la noche anterior.

— ¿Nada que decirnos? ¡Estás loca! Eres mi novia, yo decido si hay algo que decir o no. ¿Crees que soy tu burla? ¿Qué puedes hacer lo que quieras y jugar con mi imagen? Anoche te vieron cenando con Ranma Saotome y sé perfectamente que no fue estrategia publicitaria. Eso fue algo personal. ¡Te burlaste de mí con el campeón!

— ¡¿Burlarme de ti?! ¿Quién eres, un caballero de la época victoriana? ¡Déjate de tonterías, Ryu! Yo solo fui a cenar con Ranma Saotome, eso y nada más, y realmente era muy importante aclarar algo con él y lo sabes, además, ¿Cómo te atreves a reclamar después de que te largaste con mi rival de pelea aun antes de terminar la firma de autógrafos? Tú tampoco me diste mi lugar al marcharte con ella y no precisamente para ir a comer, ibas muy aferrado a su cintura, tanto, que ni siquiera te interesó saber si llegué con bien a casa. Así que no vengas a reclamar nada. Quiero que te vayas. Ahora.

Ryu la tomó del brazo con toda la rabia que poseía cuando llegó Soun al escuchar los gritos y al notar que su hija estaba siendo violentada, se acercó furioso pero Akane, de un derechazo se liberó de Kumon de forma sencilla. El muy imbécil quiso responder al golpe pero Tendo se interpuso entre ellos. Viendo que no lograría nada Ryu decidió retroceder, aunque su furia no disminuyó.

—Esto no acaba aquí. Verás cómo la gente dejará de apoyarte cuando sepan que no eres más que una zorra, buscando al mejor postor. Claro, antes odiabas a Saotome, pero ya te diste cuenta que te conviene más que yo. Acabaré con tu carrera. Nadie te conocía antes y nadie te conocerá después. Y usted Tendo, tampoco volverá a tener trabajo en la ciudad.

—Vaya, vaya. Ryu Kumon, no te conocía esa actitud de patán vulgar y corriente.

El hombre sintió que la sangre se le iba a los pies, al girarse y encontrarse de frente con el campeón, lo peor de todo fue la fría mirada con la que lo enfrentó.

Era bastante consciente de que jamás podría ganarle en una pelea, ni dentro ni fuera del ring. Estaba en medio de un gran problema si decidía pelear. Optó por lo más seguro, dar un paso atrás.

— ¡Ranma Saotome! ¡Qué sorpresa! Mira, se trata de un malentendido. Verás, Akane Tendo es mi novia, casi prometida, pero está portándose de manera desleal. Estoy de acuerdo que debe ser vista y fotografiada contigo cuando así se requiera, tiene mi autorización para hacerlo. Pero anoche no lo hizo, quiso usarte para sus propósitos, ¿No te das cuenta?

Ranma hizo un esfuerzo sobre humano para no molerlo a golpes en ese momento, escuchó como la llamó y quiso hacerlo trizas, pero hay cosas que no se arreglan con golpes y menos conociendo un poco a la alimaña que tenía enfrente.

—A ver, Kumon. Aclaremos varias cosas. En primera, por muy novia, "casi prometida" que sea tuya —Esto último lo dijo escupiendo las palabras cargadas de celos —Akane no necesita tú permiso para hacer lo que le venga en gana. No eres su dueño. En segunda, ella y yo realmente fuimos a cenar como los buenos amigos que ahora somos y eso no tiene nada de malo, porque solo fuimos a eso…"Cenar". En tercera, a mí nadie me está usando ¿Que soy? ¿Un objeto? Lo que me molesta realmente es tu actitud tan soberbia y de muy poco hombre porque te atreviste a tocarla, de verdad, Ryu, si hay algo que me convierte en lo peor, es que se metan con ella.

—No… No fue así es que…

—Es que nada… Nada. Estás amenazando a los Tendo ¿Es correcto? Bueno, yo tengo algo que decirte. Conoces a mi familia, ¿No? Sabes quienes somos La Dinastía Saotome. Y me parece recordar que tenemos acciones en algunas de las empresas Kumon. ¿Qué pensará tu familia si de la noche a la mañana, los Saotome retiran sus acciones? ¿Les gustará saber que por un berrinche tuyo, perderán dinero?

— ¿No te atreverías o sí? Esto no tiene nada que ver con nuestras familias. ¡Además, esto es tú culpa!

— ¿Mi culpa? Tu atacas y amenazas a los Tendo ¿Y me culpas a mí? No seas tonto, Kumon, aléjate de aquí con dignidad. Yo no amenazo en balde. La decisión es tuya.

Ranma lo miró con semblante serio por lo que pareció una eternidad, ese hombre era imperturbable, el otro le devolvió la mirada tratando de aparentar la misma hombría pero no se sintió mejor y esto, terminó de convencer a Ryu que Saotome no estaba jugando.

Reconoció su derrota y salió de ahí sumamente avergonzado.

Ranma se acercó a Akane, quien había permanecido en silencio hasta el momento. Realmente estaba muy sorprendida de la actitud de Ryu. Hasta aquel día nunca había tenido algún comportamiento violento o posesivo con ella. Definitivamente, jamás se termina de conocer a las personas.

— ¡Ranma Saotome! ¡Qué gusto conocerte! Las circunstancias no son las mejores, pero te estoy muy agradecido.

Ranma volteó a ver al padre de Akane. Era un hombre muy agradable y como es natural se encontraba preocupado por su hija. Lo saludó de manera muy cordial. Ranma le hizo saber al Señor Tendo cuánto admiraba sus técnicas y que en un futuro desearía poder trabajar con él, lo cual puso a Soun sumamente encantado, jamás imaginó que el propio campeón fuera su admirador.

—Me alegra haber podido ayudar. Esas amenazas fueron viles y rastreras. Ustedes no se merecían ese trato — Y girándose hacia Akane, le dijo — Yo entenderé si estás muy afectada para poder salir.

Akane le sonrió agradecida con su comprensiva actitud. Y sintió aún más ánimos de ir con él.

—Estoy perfectamente y muy deseosa de salir contigo — le contestó ofreciéndole una sonrisa.

Ranma casi se tambalea al ver su hermoso semblante ¡Ella era preciosa!

Por fortuna pudo reaccionar a tiempo para no quedar en evidencia frente a ella y su padre y tomándola de la mano, se despidió del Señor Tendo.

Salieron de la casa más que animados de disfrutar al máximo su día juntos.

Akane le preguntó a Ranma si tenía algún plan en específico y Ranma le contestó que lo primero sería ir a comer algo delicioso. No acudieron al mismo lugar de la noche anterior pero si fueron a uno con un ambiente sumamente agradable y una comida realmente sabrosa.

Disfrutaron cada momento juntos, compartieron platos como la noche anterior, contaron anécdotas de sus peleas pasadas, peleadores que habían conocido y con quienes habían hecho amistad fuera del ring.

Akane pudo comprobar que Ranma era muy afectuoso ya que mantenía amistad con la mayoría de los retadores a quienes había enfrentado.

Terminaron de comer y saliendo de ahí, Ranma decidió mostrarle a Akane uno de sus lugares favoritos que se encontraba en las afueras de la ciudad, en una colina donde había un hermoso árbol de cerezos y bajo el una linda banca desde donde se podía ver la mayor parte de la ciudad.

Cuando deseaba alejarse un poco de tanta presión, a Ranma le gustaba acudir a ese lugar y reflexionar para estar consigo mismo. Era idóneo para estar a solas ya que para llegar a él tenías que subir por un sendero empedrado y no cualquiera podía hacer el recorrido. Pero ellos, siendo los atletas que eran podrían subir sin ningún esfuerzo.

Akane estaba realmente extasiada con el lugar ya que era sumamente acogedor y tranquilo. Al sentarse en la banca y observar alrededor se sintió en paz consigo misma.

Charlaron de temas triviales y poco a poco fueron llegando a temas más personales. Ranma le preguntó si se encontraba dolida por lo ocurrido con Ryu a lo que Akane le contestó que siendo sincera hacía tiempo que ya no sentía nada por él. En su momento hubo un flechazo pero poco a poco ese sentimiento había ido cambiando hasta convertirse en una costumbre y cada uno se había enfrascado en sus respectivas carreras hasta que quedó solo el hábito de estar juntos.

Por su parte Ranma le contó sobre Shampoo y el corto tiempo que estuvieron juntos y cuando se dio cuenta que no sentía nada por ella decidió terminar con la relación.

Se quedó callado un momento dudando si decirle a Akane la verdadera razón por la que ya no sintió nada por la chica china y al final decidió arriesgarse.

– Akane… Creo que debo ser completamente sincero contigo. Desde que yo te conocí, cuando observé tu fabulosa técnica de pelea, tus movimientos, quedé realmente admirado de tu destreza como peleadora. Al verte en las pantallas, en las revistas y conocer tu maravillosa forma de ser, quedé totalmente impresionado porque, no esperaba que fueras tan genuina, te he visto en muchos lugares por eventos y premios, tal vez tú no me notaste pero yo pude ver lo cálida que eres… Y… No voy a negar que tengo guardada cada entrevista donde has salido. A lo que voy es que realmente estoy muy entusiasmado de conocerte y estar junto a ti. He reflexionado mucho sobre mis sentimientos y… Yo me atrevo a decir que estoy… Que estoy… Yo estoy…—La cara de Ranma no podía estar más roja de vergüenza ¿De verdad iba a decirlo? Apenas la conocía, bueno, eso no era tan cierto, se dio a la tarea de saber de ella, primero como un fan pero después notó rápidamente su hermosura y calidez. Cuando ella lo disculpó sin reclamos, sin dramas y lo escuchó, confirmó que esa niña con ojitos chocolate era increíble — Yo estoy… Enamo… Enamorado…De…Ti…

Akane estaba en silencio con la mirada hacia otro lado y Ranma no se lo tomó muy bien, poco a poco se fue alejando de ella en la banca hasta llegar al otro extremo, sentía deseos de salir corriendo de ahí pero eso sería muy cobarde de su parte.

Y mientras él sufría su propio infierno personal de dudas y vergüenza no se dio cuenta que Akane se había acercado a él y lo estaba tomando de la mano. Esto hizo que Saotome saliera de su mundo de tristeza y notando sus manos unidas dirigió su mirada de cobalto hasta topar con los preciosos ojos color canela de la chica. Estos le devolvieron un brillo especial que lo embrujó de inmediato y sin poder contenerse se fue inclinando poco a poco hacía ella, despacio, con lentitud, con ternura infinita, como el roce de las alas de una mariposa, sus labios tomaron los de Akane. Eran dulces, frescos, suaves y él deseó más, mucho más de esa delicia por lo que fue aumentando la presión, explorando con su lengua cada espacio, cada borde, hasta llegar al centro y pidiendo permiso, se dispuso a explorar el interior de esa boca deliciosa.

Akane no opuso resistencia cuando la suave lengua de Ranma se introdujo en su boca. Esto le causó un placentero escalofrío que le recorrió la columna vertebral y conforme sentía moverse su lengua explorando, ella deseaba mucho más de él, no sabía que era, pero lo deseaba y lo descubrió al fin cuando Ranma le pasó una mano por la nuca y con la otra la tomó de la cintura haciendo que el poco espacio que había entre ellos fuera inexistente.

Ella puso sus brazos en sus fuertes pectorales y la mano que estaba tocando su corazón, podía sentir como éste aceleraba, al ritmo del suyo. Ambos conectados, ambos en la misma sintonía.

Continuará…

¡¡¡Beso,Beso!!! Ya hubo beso y debía ser así,tierno y suave, inolvidable.

Gracias infinitas por su apoyo!!!

Nos vemos en el siguiente.