Athena fue a la cocina por algo de agua, últimamente sentía muchas nauseas, el televisor estaba prendido algo en las noticias llamó su atención, levantó la cabeza y tomó el control del televisor y le subió un poco el volumen para poder escuchar bien "Empresario Souji Kusanagi fue encontrado esta mañana en el lago por unos turistas que pasaron por allí, se presume que fue asesinado de manera cruel ya que estaba atado de pies y manos, las condiciones en la que lo encontraron fueron horrible, se presume que fue torturado y luego lanzado al lago helado con vida, su cuerpo está en un estado de descomposición avanzado...
Athena se llevo las manos a la boca, ella sabía que tarde o temprano sucedería y agradecía el hecho de que ese hombre no siguiera respirando, el había asesinado a Kyo, ahora ya había pagado su traicion.
Yuki por su parte estaba devastada al ver las noticias, lágrimas gruesas rodaron por sus mejillas, Souji estaba muerto, su hijo no iba a tener un padre, eso le rompía el corazón, no podía ir al funeral de su ex esposo o se meteria en problemas con Yagami, no podía hacer nada, solo observar, mientras ella sufría, Athena de seguro estaba disfrutando su desgracia.
Habían pasado varios días, no supo porque Iori le pidió que fuera al jardín de la mansión, estos dias no se habia sentido bien y además este mes no le habia bajado la sangre, olvido varias veces tomar la pastilla y esta mañana se hizo un test de embarazo y el signo más no tardo en aparecer.
"Positivo, Positivo positivo "
Esta embarazada, después de eso fue al jardín y habia practicado las miles de formas de decirle al pelirrojo sobre su embarazo.
Los jardines eran hermosos y habia una fuente con grandes adornos de ángeles, Athena se paró justo al lado.
Una figura familiar en un traje negro apareció frente a ella se quedó clavada en el lugar, estupefacta!
El hombre tenía un cigarro en la boca y una mano en el bolsillo del pantalón. Su rostro era tan bien parecido.
Sus rasgos faciales eran tan delicados como los de Kyo. Athena observó al hombre cuidadosamente.
Por su figura y rasgos faciales, concluyó que se trataba del hombre de la otra noche que la salvo.
Hace mas de un año que no lo veía sin embargo su aspecto habia cambiado al igual que su ropa. Su piel era mas bronceada como antes y se ve elegante, tenia un mechon largo de color blanco que tapaba algo de su frente.
En otras palabras, aquel hombre era Kyo. No habia otro hombre tan parecido. Ella confiaba en su suposición.
Ha cambiado mucho, no lo reconocia, se emocionó y camino hacia el a toda prisa.
—¡Kyo! -Su voz sono alegre y se puso algo nerviosa al pararse frente al hombre.
El solo la observo con una leve sonrisa.
— Lo siento pero no soy el. Soy un ex agente de Nest fui uno de sus experimentos que tambien tiene el ADN de Kyo.
Athena se dejo caer en el banco de jardin y sostuvo su cabeza. Se encontraba sumida en un estado mental de turbación.
Ella recordó esos años en el que Nest hacían experimentos, hasta habían secuestrado a Kyo mucho tiempo.
Además, sus ojos eran negros en vez de marrones
No es Kyo.
La sonrisa en el rostro de Athena desapareció, se parece a el porque fue un experimento de Nest así como K'.
El hombre noto la decepción de Athena, por lo que sacó un dulce de su bolsillo y se lo entregó.
— Parece que lo extrañas. Soy Nameless, no Kyo. Prueba esta golosina, es dulce. Si tienes algo dulce en la boca, no te sentirás triste.
Ella no estaba familiarizado con el nombre, Nameless.
—Gracias
Ella se sintió desesperanzada.
El no era Kyo.
Además, Kyo era un hombre arrogante y su voz ahora que lo escucha mejor tenia un asentó extranjero.
—Una vez te vi con Kyo en Roma, se veian felices en esa playa.
Athena al recordar ese viaje a Roma con Kyo su rostro se ilumino. Ella tomó el dulce y luego miró el hermoso rostro que tenia delante.
—¿Porque me salvaste aquella noche?
Nameless arrojó la colilla al suelo y la pisoteó con sus zapatos. Una sonrisa siniestra apareció en su rostro cuando dijo:
—Tenia que haberte matado ese era mi deber pero.. me recordaste a Isolde, es por eso que te ayude, ella fue mi novia. - el curvo sus labios y sonrió. —También bailaba de aquella forma tan extrovertida. - luego el parecía algo disgustado por compararla con su gran amor.
Athena al sentirlo tan frio supo que algo malo había pasado con Isode.
—En verdad lo siento, debio ser una mujer estupenda.
—Si lo era..
—Fue Iori quien te encontró para que vinieras a verme.
— Así es pero no fue exactamente una invitación. - dijo el con frialdad. En ese momento Iori apareció, Nameless con una mano en el bolsillo lanzó una mirada siniestra y agresiva al pelirrojo. —Me trajeron a la fuerza, luego me dijo el porque.
Athena no sabia que método había traído Iori a Nameless pero lo hizo por ella.
— Entiendo, gracias por salvarme.
— Ya que sabes que no soy Kyo me voy tengo trabajo que hacer. -Luego de pronunciar aquellas palabras. Nameless hizo un gesto con la mano y se marchó. Su aura se había vuelto tan violenta que nadie se atrevía a acercarse a él.
Athena se quedó clavada en su lugar avergonzada.
— Fui una tonta en creer que era Kyo. - ella mantuvo la cabeza gacha sin mirar a Iori ni una sola vez.
— ¿Desepcionada? - preguntó Iori con seriedad.
—No, no estoy decepcionada pero hubiera querido verlo con vida y decirle "Kyo eres una gran persona y te quiero, pero amo a Iori Yagami mas que nada y no te preocupes por nuestra hija ella sabra quien eres porque la veras crecer" . -dijo Athena con una sonrisa tranquilizadora a lo que Iori asintió aliviado. — No tenías que traer a Nameless, con tan solo decir que estaba equivocada era suficiente.
—Te lo dije varias veces, no me creiste.
—Si es cierto, lo siento cariño, soy patética ¿no es asi? En verdad lo siento, no te merezco. - Athena inclino el cuello hacia un lado, manteniendo la cabeza baja.
—Mirame.
— No puedo me siento tan patética.
Iori al fin perdió la calma.
Se sento junto a ella y le sostuvo el rostro obligándola a mirarlo a los ojos. Sus miradas se encontraron, y una luz confusa brilló entre ellos.
— No vuelvas a decir eso nunca. Eres una gran mujer y una madre maravillosa.
—Hablando de eso... debes saber que estoy embarazada. - confesó ella con una sonrisa. Era tan brillante que Iori alcanzó a ver sus dientes blancos.
Ella habia preparado como decirle a Iori de una manera mas romántica hace unos minutos pero con lo sucedido lo había olvidado por completo.
Iori se quedó mudo y frunció el ceño.
— ¿Embarazada?
— Asi es, vanos a tener otro hijo. Te dejare elegir el nombre esta vez.
Aún no había terminado de hablar, cuando Iori la abrazo. Estaba aprisionada contra él y enseguida sintió un beso cálido en sus labios.
Mientras la besaba, Iori dijo.
— Athena, gracias por hacerme tan feliz. - Iori la levantó por la cintura y la dejó sentarse en sus piernas, la pareja era perfecta, Athena estaba contenta y colocó sus manos alrededor de su cuello. Iori la abrazo con fuerza por temor a que escapara de sus brazos. —Nos queda un futuro maravilloso junto con nuestros hijos.
Iori nunca imaginó formar una familia, mucho menos una tan hermosa y maravillosa como la que tenia, pero estaba infinitamente agradecido con la vida porque fue posible y se sentía muy dichoso, el amor que sentia por Athena era infinito.
— Cariño mi amor por ti sigue creciendo cada dia, envejeceremos juntos, estoy segura que en muchos años más seguirás siendo igual de guapo. Nuestro futuro juntos será grandioso.
Athena volvió a sonreír, sabía que todo lo que venía para ellos eran cosas buenas y que nada los podría separar de nuevo, estos últimos meses habían sido hermosos y Iori la había tratado y cuidado de ella como una reina, bueno él siempre la a tratado así, pero desde que se habia enterado de su embarazo sus cuidados se habían incrementado, lo que la había hecho enamorarse mucho más de él.
FIN
