Ranma 1/ 2 no nos pertenece. Es de su creadora la gran Rumiko Takahashi. Esta historia está escrita con el único fin de entretenerlos y pasar un buen rato.
Mi querida Maya Shapiro y su servidora, Juany Nodoka hemos colaborado para llevarles ésta bonita historia de nuestra total inspiración respondiendo a la convocatoria titulada #RankaneWeek2023 #mily1unpalabrasdeamor #milyuntrazosdeamor de la página Mundo Fanfics Inuyasha y Ranma.
La historia cubrirá la semana completa, con un capítulo diario, enlazando cada tema sugerido con la trama de nuestra historia.
Deseamos infinitamente que la disfruten!!
CAPITULO 5 PASATIEMPO PARA DOS.
Bajo las estrellas.
A partir de ese primer beso hubo muchos más, aunque el primero siempre sería especial.
Ambos se declaraban su amor a la primera oportunidad, felices e ilusionados aún sin creer que pudieran estar juntos.
Ranma agradecido de que sus sentimientos fueran correspondidos por esa preciosa mujer y Akane asombrada al darse cuenta como cambiaron sus sentimientos. No hacía mucho tiempo que afirmaba odiarlo y ahora no se imaginaba no poder estar junto a él.
Con el pasar del tiempo fueron coordinando sus agendas para poder verse el mayor tiempo posible.
Algunos días Ranma acompañaba a Akane a su preparación rumbo a la pelea de campeonato. Cuando tenía que practicar sus técnicas Ranma prefería no asistir, porque notaba que Soun Tendo en ese aspecto era muy receloso. Él lo entendía perfectamente, puesto que fueron técnicas elaboradas específicamente para Akane y al final de cuentas, la familia de Ranma tenía amistad con muchas peleadoras del gremio. Era comprensible la desconfianza de Tendo.
Ranma estaba completamente seguro que lo suyo con Akane iba en serio, así que estaba convencido de que se ganaría su confianza al final.
Cuando le tocaba a Ranma entrenar, él sí accedía encantado a que Akane lo acompañara, puesto que su descomunal ego lo obligaba a lucirse frente a ella, algo que le molestaba a su entrenador Happosai. Por lo que Akane terminó por no asistir tampoco a los entrenamientos de Ranma.
Fuera de esas cuestiones, les encantaba pasar el mayor tiempo posible juntos… Podría decirse que su mejor pasatiempo era estar cerca y unidos al otro realizando cualquier actividad, desde una tranquila caminata por las calles de la ciudad, estar cómodamente sentados en la casa de Akane, disfrutando una agradable tarde de películas, palomitas de maíz incluidas, hasta llegar a acudir a las luchas amateur y gritar a todo pulmón con una cerveza en la mano.
Su relación iba tomando mayor profundidad conforme pasaban más y más tiempo juntos.
En la agenda de Akane se vislumbraba una pasarela de gran renombre, una muy conocida Casa de Modas tenía como imagen a la preciosa peleadora y estaban por lanzar una línea deportiva además de algunos vestidos de gala.
Para éste evento, por supuesto que invitó a Ranma como su acompañante y Saotome, encantado aceptó.
La noche de la pasarela todo el cielo estaba iluminado no solo con el brillo de las estrellas del firmamento, sino con la llegada de las figuras públicas y de espectáculos que hacían presencia en el lugar.
Ranma había llevado a Akane desde muy temprano al Show Room para los ensayos y posterior maquillaje, no se le permitió quedarse, pero se despidió de su novia con un beso y prometiendo que regresaría en la noche con su padre, no tardarían en llegar.
Y así fue.
Pasaron ambos la alfombra roja enjutados en elegantes smokings negros, fueron recibidos por una chica que acomodaba los lugares y los hizo sentar.
—Vaya, pensé que seríamos los primeros. Está casi lleno.
— ¿No habías venido a ninguno de estos eventos?
—Nunca Señor Soun. Es la primera vez.
—Oh muchacho — Dijo palmeándole la espalda — Espero que no seas celoso chico.
— ¿Cómo?
—Bueno debo advertirte, Akane está en camerinos con todas las modelos y de repente entran a saludarlas hombres de negocios, generalmente a felicitarlas y eso, o entran periodistas a buscar entrevistas pero siempre quieren sacarle el teléfono, no solo a mi hija, sino a las modelos en general.
La cara de Ranma era un poema, los ojos estaban desorbitados y abiertos como platos igual que la boca le llegaba al piso.
— ¡¿Qué?!
—Tranquilo. Akane sabe cómo manejarlos, pero debes saber que bajando de la pasarela también es asediada.
— ¡¿Y se supone que eso me haga sentir tranquilo?!
—Um… Bueno no precisamente, pero creí que necesitabas saberlo para que estuvieras preparado…
—Muchas gracias… Creo.
— ¡Oh mira, ya va a empezar!
Cuando lo dijo, las luces se apagaron por completo, y una canción con mucho ritmo y alegría comenzó a sonar, de pronto unas enormes y gordas lámparas alumbraron a una mujer con un micrófono en el centro de la pasarela que hablaba sobre la tendencia en el diseño de ese año y lo que se vería, Ranma miró todo alrededor, el aire inclusive olía distinto, a glamour si es que ese aroma existía, todo eran flashazos de cámaras y entonces cuando la mujer regresó tras bambalinas, la vió.
No esperaba que ella abriera el desfile, fue una total sorpresa, el cabello lo llevaba completamente levantado como si de una estrella de rock se tratara, lo que hacía que sus ojos se vieran enormes, usaba solo un top de entrenamiento blanco con pedrería y una malla que le llegaba a media pantorrilla, lo novedoso eran los tennis que se veían cómodos y grandes, ella caminaba con una completa seguridad, bamboleba las manos y en una de ellas una sudadera de cuello mao danzaba con ella, al final de la pasarela se detuvo y se colocó la sudadera que al chasquear los dedos se subía sola la capucha y cerraba, tal vez era un sistema de reconocimiento de sonido, realmente parecía magia, y no se hizo esperar la sorpresa de los presentes, Akane sonrió guiñando un ojo y todo fueron haces de luz que la fotografiaban, se retiró y las siguientes mujeres y hombres continuaron después de ella.
Ocasionalmente, Akane regresaba con cambios de ropa no tan llamativos como el primero pero sin duda interesantes.
A Ranma le encantó el final, no solo porque ya podría estar con ella sino porque Akane cerró el desfile con un hermoso y ceñido vestido blanco que le tapaba los pies, y entonces el campeón comenzó a alucinar un futuro que rogaba fuera pronto.
Las luces se encendieron por completo y las modelos se retiraron, segundos después Akane salió del brazo de un hombre que usaba una falda, camisa y corbata, supuso que debía ser el diseñador, todos se pusieron de pie y aplaudían, al parecer era todo un éxito.
Entonces el esperado momento llegó, lo miró por fin enviándole un beso a la distancia.
El diseñador agradeció y comenzaron a retirarse.
La campeona le hizo la seña de volver en seguida y fue a cambiarse.
Salió de los camerinos en un vestido negro entalladísimo de brillantes, corrió a abrazarlo y se fundieron en un apasionado beso que en esos momentos alertó e informó a todo el mundo con la prensa presente que Ranma Saotome y Akane Tendo tenían ahora una relación.
Todos los reporteros los rodearon preguntando sobre su noviazgo y entonces el hombre de la falda los salvó.
— ¡Hey chicos! —Dijo en tono cantarín y femenino— La noche es para mí y mis modelos, por favor, después hablamos de los chismes y de los novios de la preciosa Akane y este guapetón, pasemos al coctel por favor.
El tipo le cerró el ojo a Ranma y este sonrió agradecido.
—Amor ¿Vamos al cóctel? Tu papá ya se nos adelantó.
—Oh, él ha venido muchas veces, sí vamos pero ¿No dijiste que querías que fuéramos a otro lado?
—Sí amor, es solo que es tu evento y no quiero interrumpirlo.
—No interrumpes, la verdad quisiera irme, la prensa no nos va a dejar en paz.
—Bien avísale a tu padre y nos vamos.
—Él ya sabe que nos iríamos, se lo dije en casa.
—Entonces… En este momento ya eres toda mía.
Salieron de la Gala lo más rápido que pudieron y en cuanto estuvieron en la limusina, partieron de ahí, dejando las luces y el glamour atrás.
El auto poco a poco fue acercándose a su destino, un lugar muy especial que Ranma había elegido: un precioso Jardín Botánico donde servían cenas al aire libre.
Esa noche, el cielo seguía despejado dejando ver en su mayor esplendor la luna y las estrellas.
Ranma la ayudó a bajar del vehículo y tomados de la mano caminaron muy despacio, sonrientes hacia un sendero que estaba iluminado por pequeñas velas a ambos lados del camino.
Akane estaba encantada junto a su novio, había pétalos de rosa por todas partes y pronto llegaron a un área bellamente decorada, un pequeño candelabro alumbrando el centro de una mesa cubierta con un bellísimo mantel blanco destacaba. Las dos sillas que estaban junto a la mesa eran estilo francés. En un extremo había un colorido arreglo con perfumadas flores.
Una botella de vino rosado se estaba enfriando en una cubeta plateada y brillante. En la mesa reposaba una elegante loza y copas de cristal cortado, solo lo mejor para esa noche tan especial.
Los recibió un muy amable y solícito mesero quien de inicio les sirvió el espumoso vino rosado. Ambos brindaron por el éxito en la gala y por sus proyectos a futuro.
— ¿Te gusta lo que preparé para ti? — Le preguntó mientras tomaba la mano de la chica y la besaba.
—Todo es muy bello, Ranma. ¡Me encanta! ¿Entonces, tú lo preparaste ? ¿Personalmente? — Quiso saber sonriendo dulcemente.
El chico se inclinó hacia ella y le dio un beso en los labios. Jamás se cansaría de besarla.
— Me alegra que te haya gustado y sí, lo preparé todo yo mismo. Siempre hay tiempo para las cosas importantes.
Siguieron charlando un rato más hasta que Ranma le hizo una seña al mesero y de inmediato comenzaron a servirles la cena.
La entrada fue una deliciosa crema de papa con queso y albahaca. El humeante plato rebosaba de tersura y perfume natural, transportaba a enormes prados llenos de verdor, lo disfrutaron poco a poco mientras se entibiaba y seguían hablando animadamente.
Luego vino el plato fuerte.
Frente a ellos apareció un sedoso rollo de carne relleno de verduras con salsa blanca de champiñones, destellaba todavía al fragor de haber sido cocinado con la mayor calma, paciencia y cariño en el amoroso abrazo del calor al ser horneado.
Las verduras estaban vivas y brillantes, y la misma tersura de la crema se repetía en la salsa haciendo un espejo de sabor.
Al toque de sus labios una revolución de texturas, aromas y sazón se conectaron a ellos mientras el embriagante y seductor vino los relajaba a tal manera que no se dieron cuenta ni cuando les retiraron los platos y mientras lo hacían, Ranma le acariciaba los sedosos mechones que sobresalían del bello recogido que le habían hecho a Akane en el cabello.
— ¡Todo estuvo delicioso, muchas gracias amor! —Una muy sonrojada Akane se sentía adormecida con las suaves caricias de su amado.
— Aún no termina cariño, falta el postre…—Le dijo guiñándole un ojo.
—No creo que pueda probar un bocado más…
—Te gustará, confía en mí.
Les acercaron a la mesa una charola con primorosas y encantadoras fresas cubiertas de chocolate, el postre favorito de Akane.
Cuando las vio, dio un pequeño grito de emoción sorprendida de que Ranma descubriera ese pequeño detalle.
Él tomó una y acercándose a ella despacio se la ofreció en los labios. A Akane se le dilataron los ojos de puro placer y por un momento, la mano de Ranma que sostenía la fresa tembló… ¿Acaso esa mujer no se daba cuenta del efecto que provocaba en él?
Y mientras el enamorado y embelesado novio estaba en un infierno, su inocente acompañante saboreaba su postre, ajena a todo con sus preciosos ojos canela completamente cerrados.
Su boca se movía tan sensual, tan incitante y cautivadora que el hombre dudaba de todo su autocontrol, se enrojeció por completo viéndola disfrutarlo, sin darse cuenta, desde el primer día habían establecido un lenguaje secreto y de complicidad a través de la comida y la compañía…
Esa noche, debía terminar de la mejor manera en la que dos cuerpos pueden hablarse y hacerse sentir amor.
.
Continuará…
Hola,mis niños!!
Pues éste fue el siguiente episodio de nuestra historia. Resultó que lo que más les gusta a nuestros queridos protagonistas es ¡¡ estar juntos!! Y comer jajahaja. Gracias por su apoyo,estamos muy felices!!!
Nos vemos en el siguiente capítulo.