Título: El señor y la señora de Capricornio.
Declaimer: Como ya saben los personajes de Saint Seiya no son míos sino de Kuramada.
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El santuario de Athena, aquél bello lugar estaba de fiesta. Luego de tantos sucesos trágicos y tétricos por fin se respiraba algo de calma, pero, además, otro motivo en específico actualmente era la razón de la alegría para todos los habitantes del mismo. Los pequeños bebés cumplían su primer año de vida. Mikeyla, la pequeña niña de Camus y Danna era una niña dulce, con su escasa edad derretía a todo quien la tomara en brazos. Su cabello era ahora recogido en bucles, los cuales denotaban el blanco en sus raíces el azul verdoso en las puntas.
Por su parte, Damián, el pequeño de cabellos lilas y ojos rojizos era muy inquieto. Por mucho que físicamente se pareciera a Mu, en lo que respecta a su actitud era la personificación de Arianna, lo cual se convirtió en un genuino martirio para los abuelos.
Si bien ambos pequeños no habían manifestado ningún atisbo de cosmos, los ángeles Miguel y Rafael ya habitaban en los diminutos cuerpos. Al principio esto fue una preocupación para los padres, pero ambos seres aseguraron que los infantes poseían el poder suficiente para albergarlos sin que sufrieran desgaste físico.
-¡Muy bien! ¿Dónde está la niña favorita del tío Milo! – canturreaba alegremente el de escorpio. Aunque parecía imposible de creer – porque él tenía una estricta política de "los niños entre más lejos mejor", - era uno de los más apegados a la pequeña Mikeyla. Sí, incluso era oficialmente su padrino, pero es que cómo culparlo, si la niña en cuanto abrió sus pequeños ojitos color esmeralda lo enamoró por completo. Era adorable.
-Ese regalo es enorme Milo. – comentó Danna algo apenada ante el voluptuoso obsequio del peliazul.
-¿Tú crees? Me pareció algo pequeño…Creo que mejor le traigo otro…
-¡Está perfecto Milo!- interrumpió Camus tratando de agilizar la apertura de obsequios.
Al abrirlo, notaron que era un inmenso escorpión de peluche. Sip, otra cosa que a él lo llenó de orgullo, fue que su ahijada nació bajo el signo de escorpio. ¡Ja! Que Afrodita se tragara esa. Hicieron una apuesta sobre bajo qué signo nacerían los niños y resulta que él fue el vencedor.
Por otro lado, el pequeño Damián ya había abierto todos sus obsequios y ahora se encontraba sentado al lado de su padre comiendo todo lo que estuviera a su alcance – gracias a Athena, el pequeño no nació con esa necesidad de ingerir sangre humana como su madre. Eso sí, como todo bebé tenía su rostro totalmente cubierto de pastel.
-No me explico como después de tener un aprendiz al que criaste de niño sigues siendo tan malo. – Comentó Shura mientras veía al carnero batallar por limpiar al pequeño niño.
-Jajaja…Es solo que Damián es algo inquieto por lo que es difícil para mí. Kiki siempre fue un niño muy tranquilo. – Explicó el pelirosa con pena. No era que no supiera controlar a su retoño, de hecho, tenían una relación padre-hijo maravillosa, sin embargo, dada su naturaleza pacifista pocas veces Damián lo obedecía. Con Arianna por otra parte, parecía un soldado, pero era obvio, su esposa utilizaba métodos de crianza espartanos.
-Descuida, estás haciendo un excelente trabajo con él. – halagó el español sentándose a su lado y saludando al pequeño.
-Te lo agradezco, padrino. – mencionó Mu con tono bromista.
Sí, para sorpresa de todos los dorados, el de Capricornio fue nombrado padrino del pequeño niño semi demonio. ¿La razón? Simple. Arianna alegó que quería que su pequeño también tuviera conexión con el idioma español debido a que fue criada en América Latina; pero al no existir nadie en el Santuario con esa ascendencia lo más cercano fue el dorado español (Aldebarán hablaba portugués y Arianna nunca supo entenderle, así que lo descartó).
Aquella decisión fue un duro golpe en el ego de Shion.
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Luego de la fiesta, ambas madres se excusaron y se dirigieron a hablar con Shion, pues tenían una solicitud que hacerle. Una vez que llamaron la atención del Patriarca, la primera en hablar fue Arianna:
-Bueno…Danna y yo hemos estado pensando por un tiempo en volver a cantar. – inició la chica de cabellos castaños causando la sorpresa de los presentes. – Como saben, lo dejamos por los eventos de hace dos años y también por el nacimiento de los niños.
-Pero, ahora que han crecido un poco, queremos retomarlo. Tenemos un proyecto en mente. Es muy grande y el motivo de hacerlo público se debe a que queremos que el Santuario sea el escenario.
-¿Escenario? – preguntó Camus con intriga. Estaba algo sorprendido de que su esposa no le comentara nada al respecto.
-Osea, sí…-intervino Afrodita – Queremos que el Santuario de Athena sea el lugar donde se graben los videos para el álbum que estas dos preciosas están pensando lanzar.
-Espera, "¿queremos?" -preguntó Aioria.
-Si, Afrodita será nuestro diseñador de vestuario. – Ante esta revelación hecha por Arianna el aludido infló el pecho con orgullo. Había llegado su momento de brillar. – Y bueno, eso no es todo. Para este proyecto queremos contar con bailarines.
-Principalmente porque queremos seguir pasando tiempo con los niños es que vamos a recurrir a esta opción. Es la que nos da mayor comodidad a ambas. Contactamos con un grupo que nos pareció absolutamente increíble y se que tendremos éxito si el trabajo lo realizan ellos. – apoyó Danna.
-Bueno…de mi parte no tendría inconveniente, sin embargo, dejaré la última palabra a la detective. -comentó Shion mirando a la pelinegra quien estaba sentada junto al rubio.
Al volver al santuario Catrina y Shion iniciaron un proyecto de trabajo conjunto entre la policía de Rodorio y el Santuario con el fin de darle mayor seguridad al pueblo y evitar que sucesos, como los ocurridos con Higor y el asesinato de las mujeres, nuevamente ocurrieran. La pelinegra era la representante del Santuario por lo que también tenía en el lugar operaciones conjuntas.
-Mmm, creo que si mantienen el escenario lejos del coliseo no habría ningún inconveniente. Actualmente estamos trabajando en un caso complejo que implica a varias bandas de narcotraficantes en la zona. – comentó, la ahora, detective oficial del santuario.
-¡Perfecto! Lo tomaremos muy en cuenta. – exclamó Danna con alegría.
-¿Y cuándo iniciarán el proyecto? – preguntó Shura llamando la atención de Aiorios. Conocida a su amigo de toda la vida, él nunca fue de sentir curiosidad por las cosas ajenas, es más prefería ignorarlas, pero en esta ocasión pareció sentir interés por lo que estaba seguro de que algo ocurría.
-Nuestro mánager aún está en negociaciones con el grupo de baile, así que en cuanto nos confirmen, empezaríamos a grabar la próxima semana. Esperamos tener las canciones listas en un mes, por lo que el grupo estaría llegando aproximadamente en mes y medio. – informó Arianna a lo que el español se puso tenso.
Un grupo de baile…rayos, imploraba a Athena que no fuera esa persona, sin embargo, él nunca ha sido una persona con buena suerte…
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Luego de la fiesta, el dorado de Sagitario alcanzó a Shura justo antes de que éste llegara a su templo y una vez ahí, lo detuvo con el fin de saber qué era aquello que mantuvo a su amigo tan incómodo durante el resto de la fiesta.
-¡Hey! – llamó el castaño mientras detenía a Shura. – Sé que probablemente no sea mi problema, pero ¿estás bien? Noté que estuviste algo tenso después del comunicado de las chicas.
Shura permaneció en silencio unos segundos meditando si contarle o no a Aiorios su inquietud. Luego de convencerse de que quizá su persona exageraba, habló:
-El grupo de baile. Es lo que me tiene así. – reveló.
-¿Qué? ¿Por qué? – preguntó el castaño algo extrañado. Que él supiera Shura no tenía alguna especie de miedo a los bailarines.
-Hace diez años conocí a una chica aquí en Rodorio – inició el dorado de capricornio con incomodidad – Ambos teníamos dieciséis años. Ella y yo…
Una amistad como la suya no era en vano. Aiorios sabía perfectamente cómo leer a su amigo:
-Se gustaban…- Shura lo afirmó, sin embargo, por lo visto eso no era todo. – Tuvieron sexo…
-¡Éramos unos adolescentes! – exclamó el español visiblemente incómodo. Por mucho que se tratara de su mejor amigo, se seguía sintiendo vulnerable. – Escucha, ella y yo no llegamos a más porque elegí mi deber con Athena y ella quería ser una bailarina profesional. Además, según entendí, sus padres se fueron de Rodorio porque estaban siendo amenazados por una pandilla.
-Mmm, ya veo. Aún así, Shura eso pasó hace mucho tiempo. ¿Qué acaso no la has olvidado?
-No. Esa mujer tiene algo que…me ata como si fuera un idiota. – se quejó el peliverde con frustración.
-Oye…vamos amigo. Te entiendo, pero ¿sabes cuántas agencias de baile hay en el mundo? Es prácticamente imposible que sea ella. Descuida. – aconsejó el griego mientras lo rodeaba con su brazo. Era la primera vez que veía a su amigo en ese estado. Shura siempre se caracterizó por ser alguien que guardaba la calma sin importar la situación, por lo que sin duda debía ser una chica espectacular.
-Tienes razón. Quizá solo estoy exagerando. – razonó el de capricornio.
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Dos meses después.
El español se encontraba en el coliseo con el resto de dorados. Habían sido solicitados como apoyo en el caso de las bandas narcotraficantes ya que, se descubrió que el problema era mayor. De nuevo eran liderados por la detective Santana, la cual en el último año demostró ser una profesional a la altura de cualquier dorado. El rubio estaba más que orgulloso del crecimiento emocional que su amada había tenido en el último año gracias a la terapia psicológica que tomó bajo incentivo de la doctora Sofía.
-De momento, lo que tenemos es lo siguiente: la droga que venden es una combinación de éxtasis con crack. En altas dosis y dada la combinación puede resultar mortal. La descubrimos luego de que seis jóvenes de entre 14 y 17 años ingresaran al hospital del Rodorio. – explicaba Catrina mientras con ayuda de Milo repartía las carpetas correspondientes.
-Aquí hay informes de hace diez años. – comentó Camus extrañado. - ¿A qué se debe eso?
-Aparentemente el tráfico en Rodorio inició hace 10 años. Era distribuida por una banda en formación. No recuerdo el nombre de su líder…
-Klaus Manoplas. – habló Shura llamando la atención de Catrina y el resto de dorados. – Tuve conocimiento del caso. Salió en los periódicos. Según supe, hubo familias que debieron escapar del pueblo.
-Exacto. Está muy bien informado, Shura. – comentó Catrina.
La pelinegra no pasó por alto la intervención del dorado de Capricornio. Si bien fue un suceso que llegó a la opinión pública, datos como la identidad del líder no fue divulgada. Lo sabía ya que ella misma se encargó de revisar todas las pruebas que había en torno al caso.
-¿Qué debemos hacer? – preguntó Shaka con interés.
-Por ahora la policía de Rodorio se está encargando de la vigilancia, sin embargo, en los últimos días ha habido un incremento en la actividad de venta. Las detenciones han sido de diez personas cada tres días. – mencionó la pelinegra.
-Suena como si estuvieran tratando de distraer a la policía. – comentó Saga pensativo. Era obvio según los patrones de arresto que venían en el informe.
-Así es. Creemos que se preparan para la llegada del líder de la banda, por lo que buscan distraer a la policía para que no parezca sospechoso. Nuestro trabajo será atrapar al líder en cuanto pise el pueblo.
-¡Entendido! – respondieron los dorados al unísono.
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Danna y Arianna esperaban ansiosas la llegada del grupo de baile. Al final llegaron a un acuerdo, por lo que los ensayos empezarían en dos días y las filmaciones la semana siguiente. Ambas se encontraban en Aries con el fin de darles la bienvenida al grupo, el cual se hospedaría en la casa de Afridita gracias a la amabilidad de éste.
-¡Mira, son ellos! – señaló Arianna con emoción y notando a las cinco personas que ingresaban acompañados por el guardia principal.
Se adelantaron y bajaron a darles la bienvenida.
-¡Hola! Ustedes deben ser el grupo de baile Incógnita. Mucho gusto, mi nombre es…
-Por supuesto que sabemos quienes son. – interrumpió con alegría una mujer de cabellos azules, tez blanca y ojos color miel. – Sería una falta de respeto de nuestra parte no conocer a dos artistas de su nivel, señoritas Danna y Arianna.
-Vaya, pensé que con nuestra ausencia nos olvidarían. – comentó Arianna halagada.
-Eso es imposible. Somos grandes admiradores de su trabajo, por lo que estamos muy emocionados por trabajar en este proyecto. Mi nombre es Aria. Soy la líder y coreógrafa del grupo. – se presentó la joven con una sonrisa radiante.
Al fin había vuelto al lugar que fue su hogar y también vería a su viejo amigo…
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¡Hellooo!
Si, ya sé que ha pasado muchísimo tiempo y espero que estén muy bien. Ha pasado de todo un poco (UNIVERSIDAD), pero aquí vamos, sacando poco a poco. También estoy con otros fics (los cuales les invito a leer), y nada, pues aquí estamos.
Como ya ven, esta vez nuestros protagonistas serán Shura, Milo y Afrodita…así que se vienen cosas buenas, interesantes, misteriosas y suculentas, por lo que no duden en seguir el fic, agregarlo a sus favs y comentarlo.
Pdt. Cambié el nombre de usuario porque este me gustó más. Soy adicta a las papas fritas y tengo varios meses de tener una obsesión con ellas jaja.