Hola a todos, les traigo el siguiente cap de este fic. Espero que les guste la manera en la que retrate el Templo del Fuego.
Capítulo 28
El Templo del Fuego
El ingreso al Templo del Fuego fue, en cierta manera, más calmado del que fue el Templo anterior.
Link se vio en lo que era una enorme sala, que tenía frente a él unas escaleras que lo llevan a un nivel superior. A su vez, al lado de esta en una cierta profundidad, por un lado puede ver una puerta y al otro, como una especie de tótem hecho del material de lo que parece estar hecho el resto del templo.
Link caminó hacia la puerta primero. Pero estaba cerrada… y desde adentro. Eso lo hizo fruncir el ceño y soltar una maldición por lo bajo.
Fue al otro lado y tocó el tótem, el cual parecía estar para que se mueva usando una fuerz que Link no posee.
-Parece que solo me queda tener que subir las escaleras.
El muchacho empleó marcha hacia las escaleras y no tardó en subir los escalones, para poder saber que puede haber aquí.
Al llegar a la parte de arriba, Link se vio con lo que eran dos caminos. A la derecha, vio lo que era una puerta. Pero estaba con un enorme candado, lo que conlleva a que deberá de hallar una llave. Y a su izquierda, la puerta estaba para que la pueda abrir.
Camino en dirección de esta puerta, para poder tener en cuenta de que incluso tocar la manija para abrir la puerta, mostraba el calor del lugar. Le ardió solo tocar esa cosa, pero le quitó importancia.
Abrió la puerta y al cruzarla, llego a una nueva zona. Esta tenía la forma de un enorme rectángulo, a sus lados había dos construcciones que parecían llevar a un lado, en la parte del techo había como una especie de protuberancia que… parecía estar a borde de caerse, pero no era así. Y abajo, había solo lava. Un lago de lava por así decirlo.
Pero lo que llamó la atención, era que al frente se hallaba una pu7erta grande, con inscripciones a los costados de los pilares que parecían custodiarla, que eran como la cabeza de un dragón o algo así. Link no estaba seguro, dado que su visión se centró en quien estaba frente a la puerta.
-¡Darunia! – El joven gritó el nombre del Goron, quien se detuvo y giró para ver quien lo estaba llamando.
-¿Quién me goro-habla? – El Goron se fijó en la persona que estaba al otro lado de la sala y… - Esas ropas. Y ese goro gorro… ¡Link! – El Goron sonrió al ver al muchacho tras 7 años. – ¡No sabes la alegría que me da verte tras estos 7 goro años! ¡Mírate, eres ya un hombre!
Link sonrió al escuchar al Goron, se notaba que era el mismo de siempre. Y eso lo hacia todo más sencillo, al menos para él. Pero no fue capaz de decirle que lo de adulto, aun estaba lejos de la realidad.
-Me alegro de verte Darunia.
-Lo mismo digo Link. – Darunia también se mostraba de ver al muchacho que hace 7 años los ayudó. – Pero me imagino que tu llegada aquí no ha sido por casualidad.
Es verdad, las reuniones y las conversaciones pueden esperar. En estos momentos debe de decirle lo que sabe.
-Si. La Montaña de la Muerte…
-Si, lo sé. Hará erupción en solo días. Y eso no es bueno, más al no entender el porque Volvagia está actuando de este modo. – Darunia miró el dibujo que yacía en el muro. – Hace años, todo líder de la tribu aprende la verdad tras la Leyenda del Dragón Volvagia. Es verdad que el primero se comía Gorons, pero el que le vino fue más pacífico. Solo tratando con los Gorons por formalidad y se encargaba de regular la energía que hay en el volcán. Pero…
Link vio como Darunia soltó un suspiro, como si le fuera difícil decirlo.
-Tras la caída del Reino, Ganondorf vino un día. Solicitando que le juremos lealtad. Nos negamos, los Gorons somos leales a los que consideramos hermanos. Y el Rey Daphnes fue hermano de todos los Gorons. Y así será siempre. Y eso no le gustó al Gerudo.
-… ¿Qué le hizo a Volvagia?
-Lo hechizo. – Darunia no ocultó su molestia y desprecio contra Ganondorf por lo que había hecho. – Le puso una máscara maligna que lo puso bajo su yugo. Y ahora, es solo un ser que obedece la voluntad de Ganondorf. – Eso era horrible. – Lo peor, es que hace que Volvagia cada mes se coma a un Goron… Así nos tenía bajo control, decía él. Con todos asustados, no desenando ser los siguientes.
Que horrible. Maldito Ganondorf, ¿Cómo puede tratar así con otros seres y tratarlos como meras herramientas? Nadie merece eso.
-… Darunia, ¿Qué es lo que piensas hacer?
-Detener a Volvagia. – Dijo sin ápice de duda. – Puede que no sea su culpa, pero tengo la certeza de que el dragón desearía la muerte antes de seguir bajo el yugo de ese sujeto. Lamentablemente, no me pude hacer con el Legendario Martillo que mi ancestro usó. Tengo entendido que se halla en los pisos superiores del Templo. Pero debo de hacerlo, de esa manera podré evitar que vaya por los Gorons que están aprisionados.
Link recordó eso, hay Gorons aquí. Y quien sabe, puede que…
-… Yo voy por ellos. – Darunia lo miró con sorpresa. – Iré por los Gorons, para que así Volvagia no tenga nada a lo que ir. Eso puede ayudar. Además, le prometí a tu hijo ayudar.
-Ah… Mi hijo. – Darunia rio ligeramente. – Intuyo que ya te dijo su nombre. Jejeje. Quería darle el nombre de un guerrero valiente. Y pensé en el tuyo, Link. Espero que no te haya molestado.
-… Pensaré en una manera de llamarlo sin confundirme. – Darunia rio y Link solo sonrió. - Están a salvo Darunia. Él y los demás niños, traje amigos y ya nos hicimos cargo de las Gerudo que parecen haberse quedado o regresado a la Ciudad.
-Gracias Link. – Se veía el agradecimiento en los ojos de Darunia. – Gracias Hermano. No sabes como aprecio tu ayuda. Y lamento que nuestra reunión sea de este modo tras 7 años. Cuando esto acabe, tengamos una charla de hombre a hombre.
-… Así será. – Link le sonrió al Goron. – Solo ten cuidado Darunia.
-Igualmente Link. Este lugar es peligroso, no olvides usar la cosecha de los Gorons, eso te puede ayudar.
Daruni se giró y avanzó hacia la enorme puerta, abriéndola y pasando al lugar donde Volvagia debe de residir. El muchacho en eso vio como varias cadenas aparecieron sobre la puerta y un enorme candado dorado sellaba la entrada en su totalidad.
-Parece que tendremos que hallar otra manera de entrar. – Navi habló tras salir un poco del sombrero de Link.
-Si, pero hay que hallar a los Gorons y a ese supuesto Martillo Legendario. No sé que tan legendario puede ser, pero debe de servir en algo.
-No lo dudo… - Navi miró la zona y… - Vamos a la izquierda, puede veo una parte allá que parece ser como oculta.
Link observó bien y… era verdad. Parece que deberá de saltar sobre esos pilares y evitar caerse a la lava.
-Oh cielos… - Link tragó saliva al ver que un paso en falso y puede acabar derretido.
Pero tragó saliva, tomó distancia y corrió hacia el pilar, dando un salto que lo dejó llegar a done quería. Para luego seguir con el impulso inicial y saltar al otro pilar con un salto con pirueta, para dar uno más, llegando a lo que sería el lugar seguro. Eso estuvo cerca… Muy cerca.
-¡Eso fue genial Link!
-Si… Ni sé como lo hice. – Puede que sea instinto, no lo sabe. Y no le importa.
Caminó hacia donde estaba esa esquina oculta, para ver lo que era una jaula. Dentro de ella estaba un Goron hecho bola, como solo esperando lo inevitable. Y frente a las rejas, estaba un botón, uno que Link activó poniendo su peso sobre este.
Al activarse, la reja se abrió y el Goron se movió, alzando la mirada y viendo a…
-¡Ah, has venido a salvarme goro! ¡Gracias!
-Dalas luego. Sal de aquí y regresa a la Ciudad Goron. Hay gente ahí que son amigos. – Fieron las palabras del muchacho, a lo que el Goron asintió.
-AH, sé que puede ser obvio. Pero si deseas llegar a donde está el jefe. Debes de hacer que ese pilar caiga. No sé como, pero el sistema que lo elevaba y bajaba se trabó, por lo que ya no baja.
-Veré que puedo hacer.
-¡Suerte hermano!
El Goron se fue a paso rápido, al mismo tiempo que Link abría el pequeño cofre en el interior de la jaula. Una llave. Bien.
-Vamos Link, hay que avanzar.
Era verdad. No había tiempo que perder.
El muchacho repitió la acción, esta vez con más confianza que antes y llegó de regreso a la puerta que lo trajo aquí. La abrió y…
-¡Cuidado! – el grito de Navi lo avisó de las dos cosas que iban a él. Eran…. - ¡Keeses de fuego!
Link saltó a un lado para esquivar la embestida de esas dos cosas, sacó el gancho y disparó hacia el que iba contra él, destrozándolo en el vuelo. A su vez, que el otro ya volaba en el aire para ganar distancia.
El muchacho sacó el arco, cargó una flecha, apuntó y disparó hacia el roedor volador, su cuerpo siendo perforado y clavado en la pared por la flecha.
-… Debes de ir con cuidado. Aun con los Aretes el fuego te puede herir.
Eso lo sabía. Link siguió su camino, cruzando lo que era la puerta que estaba cerrada, gracias a la llave. Que como espero, se rompió. Negó con la cabeza y tiró el trozo en su mano al suelo.
AL cruzar la puerta, Link se vio con algo que no esperó.
Era un puente de madre, sobre un lago de lava, con pilares de roca volcánica en este. Algo de la lava saliendo como pequeños pilares. Así como que al final hay una puerta, a los costados parece haber algo también.
Habrá que ir con cuidado. Ese puente se ve poco estable. Y debe de ver que hay en las demás puertas.
Mientras avanzaba con cuidado por el puente, viendo que unos Keeses estaban en la zona, Link sacó el arco para estar listo en caso esas cosas vengan. Solo para notar a una buena distancia, que la puerta del frente estaba cerrada. Demonios…
Miró a la izquierda y vio una puerta… Muy bien. Se giró y dio saltos precisos sobre la roca volcánica y logró llegar a su objetivo. Miró la puerta y la abrió, para verse con otra jaula, con otro Goron y con otro switch.
Repitió la acción de antes y este Goron reaccionó más rápido que el primero. Se le veía muy feliz, a la vez que…
-¡Muchas goro Gracias! ¡Pensé que era el fin!
-¿Sabes algo de los demás? – Link hizo la pregunta y el Goron negó con la cabeza. – Ya veo. Sal de aquí. Yo seguiré buscándolos.
-Ten cuidado, algunas paredes que son engañosas. Golpea una que sea sospechosa con un arma y si hace un sonido que parece hueco, la puedes destruir con una bomba.
Agradeciendo el consejo, Link lo vio irse y tomar la llave que estaba en el cofre dentro de la jaula, para luego salir de ese lugar. Y al hacerlo, sintió una vibración en su bolsillo.
-¿Eh? – Se fijó que era… La Ocarina del Tiempo estaba brillando... ¿Por qué?
Se giró y alzó la vista, vio un cubo de un color similar al de la Ocarina y que tenía el mismo símbolo que el de la Puerta del Tiempo.
La Ocarina brillaba… ¿Acaso?
-… Prueba a tocar la Canción del Tiempo. – Fue lo que Navi le dijo. – Quizás pase algo interesante.
Y eso hizo, tocó las tonadas de la canción y en unos segundos, el cubo desapareció en una columna de luz, para aparecer frente a él. Era…
-Wow. Eso no lo sabía. Habrá que hablar con Zelda de esto. – Link no perdió oportunidad y se subió al cubo, logrando llegar a la zona de arriba. Donde había una puerta.
Al entrar, se vio en lo que parecía ser un tipo de estudio. ¿Acaso le perteneció al Sabio del Fuego? No importaba. Link examinó el lugar, para si hallaba algo. Y lo hizo. Halló lo que era como una llave algo diferente a las demás y a la que abre el cerrojo de la puerta central.
Junto a este, una nota.
-Busca el elevador que te lleva al cuarto secreto. Ahí yace el tesoro mejor escondido del Templo…. ¿Será El martillo ese?
-No lo sé. Será cosa que vayamos a ver si es así.
Navi tenía razón. Link salió del estudio, no sin dejar de preguntarse… ¿Por qué dejar algo así a la vista de todos? O… ¿Estaba seguro que nadie más lo buscaría?
Dejando eso de lado, Link volvió a la zona del puente. Viendo que aun quedaba investigar lo que era a zona del otro lado, dio saltos de nuevo con el cuidado de no caerse. Aunque una vez piso mal y casi se va a la lava.
-¡Link!
-¡No pasa nada! – El muchacho se aferró a la roca y subió para estar a salvo. Dando un salto más, llegando a zona segura. - ¿Ves?
-¡Nada de eso! ¡casi la palmas! Diosas… Este Templo es una desgracia.
Sin contar el calor. Link casi se cae porque el calor, aun con los aretes era intenso y lo hacía sudar. Esperaba no marearse por el exceso de sudor.
Caminó a lo que la parecía ser una pared… rara. La miró, le dio unos golpes con la mano y… se sentía hueca.
-… Ok, no pensé que sería literal. – Link sacó una bomba, la colocó frente a esa puerta, se alejó y…
¡BOOM!
La explosión se hizo cargo de la falsa pared y Link vio que tras esa pared… estaba la puerta.
-Bingo. – La cruzó sin dudarlo, para ver otro Goron encerrado. - ¡Hola!
-¡Ah, me han venido a salvar! ¡Gracias Diosas! – Parecía al borde de las lágrimas.
Link activó el switch, dejando al Goron libre su prisión. A la vez que este le decía algo.
-Puede que no lo sepas, pero hay unos Switchs hechos de cristal mágico que se pueden activar con la explosión de las bombas. Espero te sirva.
-Seguro lo hará. Ve. – Link vio al Goron irse muy agradecido, a la vez tomaba la llave en cofre. – Muy bien, vamos por esa puerta.
Link salió de la recamara anterior, volviendo a donde estaba el puente. Saltó las rocas y llegó a donde estaba la puerta que esperaba por ser abierta.
Link sacó la llave y la abrió, la cruzó y se vio frente a lo que era una habitación que parecía tener unas rejas de metal a un lado, que solo era cruzado deslizándose por una rampa de madera.
Link lo hizo con cuidado y al llegar al otro lado, vio que en medio hay un orificio del que sale lava hacia arriba con mucha fuerza. A su vez, había dos pilares que estaban al costado de ese orificio.
-Habrá que subir….
-Usa el gancho. Eso te ahorrará un poco de esfuerzo.
-Buena idea Navi.
Link sacó el objeto y apuntó a lo que era la parte más alta de la reja. Disparó y esta lo llevó hacia arriba sin contratiempos. Ya arriba, Link miró que era lo que tenía y se vio con que en uno de los pilares había un cubo con cada lado… con el dibujo de una cara.
Pensó en que puede hacer, por lo que solo se le ocurrió que puede… ayudarlo. Dado que al mirar hacia arriba, notó que había un orificio por donde pasar. Muy bien.
Link fue a ese pilar a través de las rejas, matando con la Espada Maestra a los Keeses que estaban ahí antes que empleen vuelo. Se puso frente al cubo y lo empujó con toda su fuerza. Y en unos segundos, el cubo cayó justo donde estaba ese orificio por donde la lava sale.
Saltó para poder estar sobre el cubo en el momento que la lava emergió, empujando el bloque hacia arriba y llevándolo a una nueva zona, donde justamente estaba una puerta con candado.
Link saltó antes que el cubo vuelva a caer y abrió la puerta con la llave que le quedaba. Muy bein…
-No me quiero imaginar lo que habría sido no tener esas dos llaves. – habría sido tedioso volver y buscar esa llave que te falta. Si, lo habría sido.
Al entrar al siguiente cuarto, Link se vio con lo que era… un cuarto con elevaciones en su constricción. Así como una reja donde se ve otro Goron.
-Hey. ¿Estás bien? – Link se acercó a la reja para ver al Goron, quien miró al muchacho y…
-Oh. ¿has venido a sacarme de aquí?
-Si. Pero… - Link miró la zona. – No veo un switch…
-Esta reja se abre con un switch en la parte de arriba goro. – El Goron sonaba deprimido. - ¿Crees poder sacarme?
-Lo haré. Solo espera. ¿Si?
Link vio el miedo en el Goron, así como un poco de esperanza. No se la podía quitar. Y con esa esperanza, el Goron vio a Link moverse a otra zona. De seguro para poder llegar a la zona de arriba.
Link escaló la primera parte y vio lo que parecía ser… ¿Una babosa en llamas? Esta ni le prestó atención así que solo siguió su camino. Escalando lo que era el siguiente nivel de la estructura y al ver que debía de ir a la derecha, vio un cubo y ese switch que el Goron le dijo. Ese que se puede activar con una bomba.
Dio un salto hacia ese lado, logrando llegar apenas. Miró el Switch y lo golpeó para ver que hacía. Del blanco que era, pasó a amarillo y pero a los segundos volvió a su color de siempre.
-¿No oíste como si algo se hubiera activado de nuevo?
-Si. Quizás sea lo que hace este Switch, pero no lo sabemos aún. Quizás si vamos arriba…
La sugerencia de Navi solo hizo que Link empuje el bloque que tenía cerca y al hacerlo caer, saltó para regresar a la zona baja de la sala y jalar el bloque hasta donde se le permite, que justamente es donde hay una reja de metal. Puede llegar a ella si salta.
Link se impulsó y saltó, logrando llegar a la reja y aferrarse con ella con sus manos. Sintió el calor a que había absorbido el metal y las manos le empezaron a arder. Pero suprimió el dolor… debe de subir. Un paso a la vez…
Mientras subía, pensaba en lo que este Templo le trata de enseñar. ¿Qué puede aprender de esto…? ¿Soportar el calor?
Al llegar a la parte de arriba, vio lo que era una columna de fuego que estaba justamente bloqueando una reja que llevaba a otro nivel.
-Eso debe de ser lo que el switch activa… o desactiva en este caso. – Link caminó al borde de donde estaba y vio el switch debajo suyo.
Sacó una bomba, prendió la mecha y la dejó caer a un costado del switch. Se giró para estar lo más cerca de esa columna de fuego porque cuando oiga la explosión, podrá escalar…
¡BOOM!
Tras el sonido, la columna de fuego desapareció. Pero Link sabía que solo sería por unos segundos. Por lo que corrió rápidamente a la reja y puso sus menos en esta apara subir.
Al hacerlo, sintió como el ardor iba a la palma de sus manos. Quiso gritar del dolor, pero se contuvo. Empezó a escalar, antes que el fuego se reactive. Y tras unos segundos de agonía, logró llegar a la cima y saltar para caer en suelo seguro justo antes de que el pilar de fuego regrese.
-¡Link! – Navi miró desde su lugar seguro el como Link se estaba quejando del dolor.
Sus palmas estaban al rojo vivo y se veían ampollas que se estaba formando. Era obvio, prácticamente tocó acero caliente. Y no solo ello, lo soportó.
Resistir… eso es lo que el Templo quiere enseñarle. Y de la peor manera posible…
El muchacho sacó como pudo una botella con poción roja, la abrió con dolor y dejó caer algo del líquido en las palmas de sus manos.
Link sintió el ardor de su piel siendo regenerada a toda velocidad. Su voz soltó algo de dolor, a la vez que lágrimas salían de sus ojos. Era horrible… Pero una vez la piel se regeneró a un punto en que puede usar sus armas, cerró la botella con lo que le quedaba de poción roja y la guardó.
-Sigamos…
Navi asintió. El muchacho cruzando la puerta, a la vez pensaba que… era injusto que lo consideren adulto cuando… aún puede sentir al niño que es tras su apariencia.
En la siguiente sala, Link sentía que era diferente a las demás.
Parece ser un tipo de sala con una forma que, por lo que puede ver desde donde está, parece ser de una luna creciente. Además que pilares que hay hacen que la alusión de que estaba recorriendo un laberinto. Y eso era malo, al menos para él lo era.
Pero lo peor no era eso, sino que habían grandes bolas de piedra que recorrían el camino que esas cosas hacían.
Y eso no le estaba gustando nada, dado que no quiere ser golpeado por una de esas cosas. Maldita sea. Lo que le faltaba…
Link miró hacia lo que sería la salida que puede tener. Pero…
-Quien sabe si es que hay algo aquí. Parece que deberemos de investigar la zona.
-… Y esquivar esas cosas para que no te aplasten. No lo olvides Link. – Si Navi, ya lo suponía. Gracias por el recordatorio.
Link rápidamente corrió en dirección a la izquierda, para ver que podía hallar.
Al hacerlo, se vio con varias de esas esfera de roca recorriendo los caminos, listas para aplastarlo de ser necesario.
Pero con habilidad logró esquivar las esferas de roca y llegar a lo era una esquina. Dónde vio a un Goron en una jaula. Y el switch para activarlo.
-¡Oh, me alegra ver a alguien que no sea esas Gerudos, goro! – el Goron miró a Link y él activó el switch para que la jaula se habra. – Muchas gracias. Sabes, hay puertas que parecen ser falsas. Las puedes matar con una Bomba.
-Eso… suena interesante. Gracias. – Link agradeció al Goron y lo vio irse. – Puertas falsas, ya nada me sorprende. – Dijo mientras tomaba la llave. – Rayos. El calor…
El muchacho sacudió la cabeza al ver borroso. Los aretes no podían evitar que su cuerpo sufra algo del calor. Y eso era notorio por el sudor que salía de su cuerpo. Tiene que….
Se puso de pie y volvió a investigar el caso laberinto que tiene ahí. Esta vez yendo al otro extremo de la sala, en esperar de hallar algo que le venga de maravilla.
Tras esquivar varios obstáculos, Link logró llegar a una puerta que parecía estar oculta a la vista común.
Entró a ella y pudo ver a un Goron encerrado. Cómo con los otros, presionó el switch y este se vio libre.
-Te los agradezco infinitamente. – el Goron sonrió al ver a Link. – Sabes, dicen que una buena poción verde ayuda a combatir este calor. Si vas a seguir sería bueno que bebas una, al menos para estar mejor para lo que sigue.
El Goron se fue, dejando en Link un buen trozo de consejo. De todos modos, él cogió la llave que estaba ahí y simplemente salió de ahí.
Recorrió el camino, en un intento de poder llegar a una puerta que no haya visto.
Estuvo corriendo por unos minutos buscando, a la vez que evitaba esas bolas del mal.
Y tras lo que le pareció una eternidad, llegó a una puerta nueva. La abrió, gastando una llave que tenía consigo. Pero al menos ya no estaba ahí… de nuevo.
Lo que no esperó, fue ver que este cuarto parecía sólo tener dos superficies sólidas. Dónde él estaba y dónde estaba la puerta que debe de abrir.
Lo único que une ambos extremos eran vigas de madera. Debe de usarlo para cruzar…
-No te caigas Link…
-Ya lo sé. No me digas lo obvio Navi.
Link no necesita más presión en sus hombros, lo que necesita es llegar a esa maldita puerta y seguir.
Dando un paso don cuidado, Link avanzó sobre la viga de madera, haciendo equilibrio, dado lo delgada que era.
Al llevar a mi que sería el otro lado, tras unos segundos angustiantes. Link soltó aire, pero sentía que los pulmones le pesaban y tenía la garganta seca. Maldita sea… estaba con sed.
Alzó la mirada y solo abrió la puerta con la llave que le quedaba, entrando a la sala que le sigue.
Al estar ahí, vio que era diferente. Era una sala repleta de lava en la parte baja, lo único que parecía que puede ser un canino eran rejas de metal que estaban suspendidas en el aire gracias al techo.
Esto será difícil.
Dio un salto para llegar a la reja, logrando pararse sobre ella, a la vez que esta se movía un poco por el peso extraño. Pero no era nada del otro mundo.
-Hey, esto no está tan… - En ello, sintió algo en su espalda. Se giró y… - Oh demonios.
Una pared de fuego había emergido de la nada y parecía estar avanzando hacia él.
Sólo le quedó correr hacia lo que puede ser el otro lado y esperar que las rejas no se caigan. Eso sería malo.
Link corrió a toda velocidad, dando saltos a las rejas que estaban separadas para llegar a una salida o lo que sea donde sea pared de fuego no lo alcance.
-¡Puerta! – Vio una puerta a su izquierda en una zona alta. - ¡Ah, con candado y ya no tengo llaves! – Y notaba también su mala suerte.
-¡Al otro lado, veo una puerta abierta! – Navi salió parcialmente de su refugio en el gorro, avisando a Link de que esa puede ser su salvación.
No perdiendo más tiempo, Link corrió hacia esa dirección. Y con un salto más, llegó a la superficie de rocas que era la construcción, ya no estando sobre esas rejas.
Las llamas se apagaron, como sabiendo que ya no había nadie ahí…
-… Quien diseño este Templo, era un sádico. – Link negó con la cabeza, dado que esto no era divertido.
Fue a la puerta y la abrió. Estaba sudando más. Lo que era malo, dado que él ya veía borroso.
Sacudió la cabeza y se vio en el cuarto del laberinto, sólo que en nivel superior donde eres capaz de ver la parte de arriba de las columnas que generan los murales del laberinto.
Link dio un salto hacia la construcción más cercana y…
-Hey, mira. – Navi señaló a unos años de él, lo que era un switch. - ¿crees que sea el que abre la jaula de ese Goron que dejamos atrás?
-Posiblemente…
-Y también, esta parte parece que se puede destruir. – vio lo que era el suelo, por así decirlo, hundido y con rajaduras. – Pon una bomba.
Link no lo pensó dos veces. Colocó la bomba y a los segundos, explotó. Dejando a la vista de él y ella, un orificio. Uno que tenía una reja que permitía bajar al nivel de abajo.
El muchacho presionó el switch y oyó que justo debajo de ese orificio algo se abría.
Link bajó rápidamente para ver si su teoría era correcta, soltándose a medio camino para llegar al suelo. Dónde vio que era así, esta era la jaula del Goron que dejó atrás.
-¡Ah, volviste goro! – el Goron sonrió al ver a Link. - ¡Gracias por no olvidarte de mí!
Link sonrió al ver la alegría del Goron, quien se limpió unas lágrimas que se le escaparon de sus ojos.
-Por cierto, no sé si es cierto. Pero oí que hay un ser que se le llama el Danzante en Llamas. El Cultivo Especial de los Gorons parece ser efectivo contra él.
-Eso suena bien. Gracias por la información. Ve, sal de aquí.
Link sólo vio al Goron irse, a la vez que él se hacía con otra llave dentro del pequeño cofre.
-Ok. Ahora hay que regresar. – Link guardó la llave y simplemente regresó a la reja de antes, empezando a escalarla para volver al nivel superior.
-Link, ¿Estás bien? Estás sudando mucho. – Navi le habló a su amigo, una vez llegaron a la parte de arriba de nuevo. – Quizás sea una buena idea beber esa poción verde.
-… Esperemos a que no haya más opción. No podemos sólo gastarla sin más.
Link sabía que era una opción viable. Pero no quiere usarla aún.
El muchacho empezó a saltar entre mural y mural para poder ver si hallaba algo. Y lo hizo, en una esquina de vio con otro Goron enjaulado. Y un switch.
Lo presionó y vio las rejas irse, salto hacia donde estaba el Goron, quien de veía herido.
-¿Estás bien?
-Si. Gracias goro. Yo estaba en la lista de ser los que debían de ser comidos primero por haberme resistido mucho.
Eso era notorio. Este Goron estaba completamente herido, nada grave. Pero si lo habían lastimado adrede.
Tras verlo irse, Link tomó la llave en el cofre y se giró para poder volver a dar saltos sobre los murales. Siguiendo el camino que lo llevaría de regreso a la puerta por donde llegó a esta zona.
Y cuando estaba por llegar a ella, es que alzó la mirada y vio lo que era una especie plataforma que estaba ahí. Cómo esperando…
Estaba sostenida por algo que la elevaba por un orificio en el techo.
El muchacho alzó una ceja. ¿Será este el elevador? Sólo hay una manera de saberlo. Sacó el gancho y apuntó justo al punto donde se veía que podía clavar la cadena.
Disparó y en segundos fue jalado por esta a la plataforma. La cual al sentir un peso extra, empezó a subir de manera lenta. Pero segura.
Al llegar a la parte más alta, se vio frente a una puerta. Entró por esta, para ver que estaba en una sala que parecía ser una especie de… camino elevado, pero que estaba con escombros.
A la lejanía, vio un cofre rodeado por fuego. Y había un switch a su costado. Por supuesto.
Link miró bien el lugar, viendo que había sobre unos escombros una zona donde puede clavar el gancho.
Muy bien. Debe de ser veloz y preciso. Tomó aire, presionó el switch y cuando vio que el fuego se apagó, corrió hacia donde estaba lo que era la elevación donde el gancho de puede clavar. Lo utilizó, fue jalado hacia ese lugar y usando el momentum, Link logró avanzar con velocidad hacia donde estaba el cofre y antes que las llamas regresen, se lo llevó consigo.
El muchacho cayó al suelo, con el cofre a su lado. Las llamas ardiendo en el lugar de antes. Soltó un suspiro…
-Ojalá sea una llave. – Link abrió el cofre y… - ¿y esto?
Del cofre no sacó una llave, sino un cuaderno viejo. Pero bien conservado.
-¿Tanto para un libro viejo? Que mal… - Navi soltó un suspiro, eso era decepcionante.
Y mucho. Pero a Link se le dio por abrirlo y ver que había escritorio ahí. Lo que vio, eran palabras que eran similares al Hyliano, pero a la vez diferente. ¿Por qué?
El muchacho tomó aire y guardo el libro, puede que no sea lo que buscaba. Pero no lo puede tirar, quizá a Zelda le interese.
Canino hacia la puerta por la que entró y la abrió. Sólo que al cruzarla se tambaleó y casi cae al suelo.
-¡Link!
-Rayos… ya no… - sentía que ya no sudaba. Estaba… mal.
El muchacho rápidamente sacó la botella con la poción verde, la destapó y la bebió de golpe.
Dio un suspiro, para ponerse a esperar que el efecto se active. El calor era insoportable.
-Link, ¿Estás…?
-No pensé que sería tan… difícil. Resistir este calor. Avanzar mientras busco a los Gorons… este templo está poniendo a límite mi resistencia. – Dijo mientras sentía poco a poco los efectos de la poción activarse.
-Quizás ese es el objetivo del Templo. – Navi le habló con un tono de preocupación. – El fuego es algo que da calor, pero a la vez es… peligroso. Si no tienes cuidado, pues te quemas. Y si lo haces…
-Resiste el dolor. – Link se puso de pie. – Ya me di una idea. – el muchacho afiló la mirada al decir ello. Su expresión más seria que la de antes.
Ya algo menor gracias a la Poción, Link regresó por donde vino. Bajó al lugar de antes gracias al elevador. Que justamente bajó frente a donde estaba la puerta que debe de cruzar.
Link sonrió al ver ello, la abrió y se vio de nuevo en esa sala con el Fuego que te persigue.
Repitió la acción de antes. Saltó para estar sobre las rejas que eran el suelo, la pared de fuego salió y Link corrió en dirección de donde estaba la puerta con cerrojo.
Usando lo que era un pilar que estaba cerca de él, para impulsarse y llegar a donde estaba la puerta. La abrió con una de las llaves y fue a la zona siguiente.
Y ahí vio que si era un maldito laberinto. Vio que de verdad un paso en falso y de la nada emergían como paredes de fuego que podían incinerarlo si no tiene cuidado.
Link sólo tomó aire y fue por el camino más cercano. Al hacerlo, pudo ver que tenía que ir con sumo cuidado. No sólo habían Keeses que lo molestaban, sino contradicciones que le lanzaban fuego.
Con mucha paciencia, y algo de ensayo y error, dado que si de ha quedado un poco por el fuego que le lanzaban y salía de la nada, Link llegó al fin a una puerta. Una donde usó la llave que le quedaba.
La cruzó y…
-¿Hay alguien ahí? – Link vio un Goron, este estaba herido y muy cansado por lo que ve. No sólo ello, se le veía desnutrido.
-¿Estás…?
-Oh, me alegro de ver a alguien. Vienes a sacarme de aquí.
-Ese es el plan. – Link busco con la mirada un switch, pero nada.
-El switch está arriba al otro lado de la sala. Pero no lo puedes activar, es muy duro para hacerlo por medios normales. Necesitas algo más fuerte.
-Rayos. Parece que tendré que hallar ese algo.
-Yo puedo esperar, no te preocupes. Ve.
Link asintió, prometiéndole volver. Se giró y cruzó la puerta. Dónde al ver el otro lado, se vio con que estaba al otro lado del laberinto de paredes de fuego.
Vio que estaba cerca a otra puerta que tenía llegar esquivando esas paredes de fuego. Cosa que hizo con cuidado. Y al llegar a esa puerta…
-¿¡Qué demo…!? – Dio un salto hacia atrás con pirueta al ver que la puerta lo atacó cayendo hacia él. – Agh. Debe de ser de esas puertas falsas que nos dijeron.
-¡Hora del Boom! – Navi dio la sugerencia y él asintió.
Sacó una bomba, la mecha se encendió y la lanzó hacia la puerta falsa, la cual se vio destruida por la explosión de la bomba.
Y tras el humo, quedó la puerta de verdad. La cual cruzó, donde se vio en una habitación con… lo que era una elevación, de la cual salían llamas.
No había nada más aquí, y no había salida tampoco. ¿Ahora que…?
En eso, Link sintió como las llamas que estaban en le medio se movieron. Se giró y vio que de esta salió un ente hecho de fuego.
-¡El Danzante de Llamas! – Fue el grito de Navi, al vez al ser moverse por la zona como si bailara. Mientras lanzaba fuego. - ¡bomba!
Link corrió para esquivar las llamas que le lanzaba esa cosa, dio un salto para no ser impactado. Sacó una bomba y se la lanzó justo cuando estaba por atacar.
La explosión pareció sacar algo del ente de fuego, parecía ser un… ser pequeño. Ese debía de ser su forma real.
Link corrió hacia él y antes que se pueda recuperar, lo atravesó con la Espada Maestra. Matándolo en el acto.
El muchacho vio el fuego desaparecer en esa elevación que estaba en el medio. Soltó un suspiro. Subió a esta y dejó que lo lleve al nivel de arriba.
Al hacerlo, se vio frente a otra puerta que cruzó sin problemas. Cruzando el pasaje que estaba ahí y subiendo por las rejas que estaban ahí tras usar el mismo truco de la bomba con el switch cercano para apagar las llamas que le impiden el paso.
El ardor en sus manos volvió, a la vez que sentía la piel quemarse. Pero no sé quejó, sólo subió como era posible y sin perder tiempo llegó a la zona de arriba, mucho más rápido que el intento anterior que tuvo hace poco.
Sacó la botella semi llena con poción roja. Echo lo que quedaba del líquido en la palma de sus manos y se pudo ver cómo la piel se regenero.
El dolor fue el mismo, pero esta vez no gritó. No hizo más que simplemente contener el dolor que quería salir de su garganta para luego tomar aire una vez el proceso acabó.
Se puso de pie, guardó la botella y cruzó la puerta.
Estaba en un cuarto similar donde halló el diario ese. Sólo que se veía más entero y no destruido como el anterior. Vio a la lejanía lo que era un enorme cofre siendo protegido por fuego, haciendo imposible que alguien se le acerque.
A su vez, vio que había un enorme orificio en medios de la sala, así como unas escaleras que bordean el borde.
Link vio el Switch y ya intuyó que hacer. Además que…
Presionó el objeto, vio el fuego apagarse y activó el Viento de Farore para poder impulsarse con más velocidad.
Corrió por esas escaleras al borde mientras subía hacia donde yacía el Cofre.
Sentía que el tiempo se le acababa, dado que veía como el fuego estaba empezando a aparecer de nuevo.
Y ya en un acto de desesperación, Link sacó el gancho y disparó hacia donde estaba el cofre, logrando hacer que la punta del objeto de clave en la madera y que está lo jale hacia el cofre.
Link uso la fuerza de la jalada de la cadena para poder empujar el cofre lejos de la zona donde aparecía el fuego.
Al hacerlo, sintió que el hombro izquierdo le dolió, dado que eso fue lo que usó para empujar el objeto.
-Agh. Eso sí dolió.
-No cabe duda que eres un loco de primera. – Navi le habló con cansancio, sólo a él se le ocurre algo así. – Anda, abre el cofre. Es grande, debe de haber algo valioso.
Y eso hizo, tras ponerlo de pie. Vio que en el cofre estaba ese mazo que Darunia decía. Era un mazo de un buen tamaño, a la vez que era rojo con detalles negros. El símbolo de los Gorons en los costados y la cabeza era de un color dorado. A esto él llama llamativo
Lo tomó y pudo ver que pata usarlo necesita de las dos manos para poder moverlo. Parece que tiene sus desventajas.
Bueno, ya lo tiene. ¿Qué sigue?
Link miró a donde debería de estar una salida y vio lo que parecía ser una plataforma con lo que era el símbolo de la cara o lo que sea que ha estado viendo en todo el Templo.
Fue hacia ella y vio que era… duro. Quizás sirva.
Alzó el Martillo Megatón, para dar un golpe a esa plataforma. Se vio como está tembló unos segundos antes de caer al vacío.
Link miró el martillo y sonrió. Esto era genial. Saltó para ver el interior del lugar donde podía ir ahora y vio uno de esos tótems, que le impedían avanzar por la obvia puerta que ve ahí.
Alzó el Martillo y lo usó para destrozar el Totem de un solo golpe. Dejando la puerta libre.
-Muy bien. – cruzó la puerta y se vio en un pasillo amplio, así como unos Keeses. – Saben, ustedes ya son una molestia.
Link los mató al acercarse a él con el Martillo Megatón, a la vez que avanzó y pudo ver que… el pasillo no lleva a nada. No había salida.
-Esto es… - Link miró de manera rápida el lugar.
No había nada raro aparte de unos bloques en el suelo y… un extraño pilar que no va con el decorado.
Fue a él, lo tocó y simplemente pudo entender que era… un mecanismo, uno que parece que solo se activa si lo golpean.
Link miró el Martillo y sonrió, lo agitó. Logrando hacer que el pilar se sacuda. Lo que llevó a que haya una reacción en cadena. El piso frente al Pilar se vino abajo y formó como una escalera gigante.
Ok. Ya estaba yendo a un lado. Link en eso, se fijó que había un switch azul. De esos que necesita tener siempre algo sobre ellos para que funcionen.
Se giró, vio los pequeños bloques en el suelo. Sonrió y tomó uno de ellos. Pesaban, pero no tanto como para que no pueda cargar uno.
Bajó rápidamente por la improvisada escalera y puso el bloque sobre el switch, haciendo que unos barrotes que le impiden el paso por la puerta se vayan.
Cruzó la puerta y se vio en un pequeño cuarto con otra plataforma solitaria, que tenía el mismo símbolo de los anteriores.
Link se puso encima de esta y usó el Martillo para golpearlo y hacer que caiga al vacío.
Él cayó con la plataforma, cayendo justo encima de una parte del cuarto donde estaba el laberinto y…
-Mira, una puerta con barrotes. Un switch…
-Que parece estar atorado u oxidado. – Link vio lo que Navi señaló.
Hacia atrás, veía algo. Pero puedo regresar luego. Tiene que ver a dónde lo lleva esa puerta.
Golpeó el Switch con el Martillo y los barrotes se fueron. Link cruzó la puerta y se vio en el mismo lugar donde dejó a ese Goron…
-Mira, ahí está el switch para abrir esa jaula. – Navi señaló hacia el otro lado, excelente. Ahora sólo debe de llegar él. ¿Y como lo hará?
Link en eso sintió la vibración que venía de la Ocarina. Eso lo puede ayudar…
Tocó la Canción del Tiempo y como si fuera magia, que lo era, un bloque azul apareció justo al lado de la jaula del Goron. Y en una buena posición que le permitía a Link usarlo para saltar al otro lado.
Dando el salto respectivo y apretando el Switch con el Martillo, activándolo y liberando al Goron.
-¿Puedes pararte? – Link fue con el Goron de antes y este asintió.
-Es nada goro. Debes de regresar a la entrada, ahí puede que halles lo que necesitas. Puedes hacerlo si logras hacer que la plataforma del cuarto central baje.
Link asintió, el Goron le deseo buena suerte y se fue a paso lento de ahí. El muchacho en eso pensó, mientras tomaba la llave del cofre que estaba ahí, que…
Subió por el bloque del Tiempo y salió por la puerta por la que había entrado al lugar. Se vio de nuevo en la zona del laberinto de fuego, sólo que esta vez se fijó en la plataforma frente suyo.
Saltó para estar sobre ella, sacó el Martillo y de un movimiento le dio un golpe que sacudió la plataforma con fuerza, antes que vaya a la zona inferior.
Link se aferró como pudo, antes de sentir como la plataforma llegó a su Destino. Miró donde cayó…
-Estamos de regreso a la recámara central. – Navi hizo la observación, a la vez que… - Dijo que en la entrada hallaremos lo que necesitamos. Andando.
Sin perder el tiempo, Link salto a la plataforma con la puerta que lo llevaría al inicio del Templo.
Link bajó rápidamente a donde estaba la estatua que había visto antes. Sacó el Martillo y le dio un golpe que lo destrozó.
Vio una puerta cerrada con llave y usó la que tenía para cruzarla. Estaba cerca de poder ir a ayudar a Darunia.
Al cruzar la puerta, se vio en una sala similar donde peleó con el Danzante en Llamas.
Y en efecto, del medio de la sala, emergió otro. Sólo que este se veía más agresivo.
-¡No tengo tiempo para ti! – Link le gritó a la bestia de fuego, que se lanzó a él para matarlo.
El muchacho sacó una bomba y se la lanzó a la cara, la explosión los alcanzó a los dos.
El Danzante perdió las llamas que lo protegían, trató de regresar a las llamas que estaban ahí para poder recuperar su poder.
Pero no pudo, sin previo aviso fue aplastado por el Martillo Megatón.
Link tenía sangre saliendo de las quemaduras que la explosión generó. El dolor estaba ahí, pero lo resistía… no dejará que eso lo tumbe al suelo.
-Link, debes de…
-No. No sabemos que puede pasar. Esa Poción roja es para emergencias. – Link calló a Navi con un tono que ella no pensó oír.
Era un tono más adulto, más seguro y confiado. El Templo lo estaba obligando a crecer…
El muchacho se limpió la sangre de la cara y avanzó a la puerta que estaba ahí. Y se vio con una jaula más y…
-Oh no. – Vio que en esta Jaula había un Goron muy herido, parecía estar en las últimas.
Activó el switch, las rejas de fueron y corrió con el Goron. Se arrodilló a su lado y trató de hacerlo reaccionar.
-Uuh… tú eres….
-Resiste. Deja que te dé una poción roja…
-No. No lo hagas… - El Goron se negó. – Tú … puedes necesitarla… para ayudar al jefe… - Link vio como el Goron parecía listo para morir. – Logré… logré evitar que lleven a más Gorons con Volvagia… el mismo dragón…. luchaba contra algo. No deseaba lastimarnos… hasta vi lágrimas en sus ojos por lo que hacía.
Link vio al Goron casi sin fuerzas. Este tomándolo de la túnica.
-Por favor hermano. Salva al jefe… salva a lo Gorons…
Y tras decir ello, murió. Link se quedó viendo el cuerpo del Goron unos segundos, antes de bajar la cabeza y apretar los dientes.
Ahí estaba la segunda lección del Templo… No importara cuanto lo intente, al final él era mortal. No podía salvar a todos… y aun siendo el Héroe Elegido, no podía a veces ir contra la muerte.
-Link… - La voz de Navi lo sacó de sus pensamientos. – Darunia. Hay que ayudarlo. A él y… a Volvagia.
Era verdad. Debía de cumplir su palabra. El muchacho se limpió las lágrimas y se puso de pie, dejando el cuerpo del Goron en una posición cómoda para cuando vuelva por él para llevarlo a la ciudad. Juro que cada Goron volvería a la ciudad…
Pasó a ver el enorme cofre decorado. Lo abrió de golpe, sin sutileza y tomó la llave para la puerta que lo llevará con Volvagia.
La mirada del Héroe del Tiempo era afilada y había perdido esa poca duda e inocencia que tenía en sus peleas.
Eran como los ojos de un lobo que iría a por su presa, sin dudarlo. Listo para morir de ser necesario.
Corrió de regreso a donde estaba la sala de la recámara Central y llegó a la puerta. La abrió el ingresó a esta.
Al hacerlo, se vio en una zona que parecía de verdad una recámara para algo grande. Vio una plataforma ahí, la usó de soporte para llegar a la que era la más grande, octagonal y el corazón del lugar.
Parecía tener 9 orificios en el relieve. Esto era extraño…
Y sin previo aviso la plataforma que lo trajo aquí se vino abajo. No hay salida…
-Estamos atrapados… - A Navi no le gustaba esto.
-¿Dónde está Darunia?
Link buscó con la mirada al Goron, logrando ver al otro extremo de la sala, una elevación donde estaba… Darunia, muy herido. Pero vivo.
-¡Darunia!
-¡Link, por los orificios de Lava! – el Goron le gritó al muchacho lo que estaba por pasar. - ¡Ten cuidado!
A esas palabras, el lugar empezó a temblar. Y mucho.
Link se giró para ver que era lo que generaba eso. Y del que era el orificio del medio, empezó a salir lava y a su vez…
-¿¡Qué mierda!? – Link no pudo evitar soltar la palabra mal sonante dado el shock que sintió.
Del suelo emergió una enorme criatura que fácilmente superaba los 10 metros, era como una enorme serpiente, con dos largos brazos, su cuerpo recubierto de escamas del color de la lava, su cabeza cubierta con una máscara negra con destellos vedes solo resaltaba sus dos enormes cuernos y lo que parece ser una melena hecha de fuego puro.
-El Dragón de Lava Subterráneo… ¡Volvagia! – Navi vio a la criatura que posó sus ojos en Link y afiló la mirada. - ¡Cuidado!
La bestia abrió la boca y lanzó una poderosa llamarada hacia el muchacho, quien saltó a un lado para esquivar el ataque. Link vio por los pelos como la llama cubrió la zona donde estuvo y la dejó en roca ardiente. Que poder…
Alzó la mirada y vio a Volvagia volar sobre él, no dejando de exhalar sus llamas con vehemencia, hasta el punto que Link no sabía si había fin para su ataque.
Sacó la Espada Maestra y se lanzó hacia Volvagia quien había bajado la cabeza para atacar mejor. El filo de la espada dio en la cara del animal, quien se quejó por el ataque. Pero Link vio que el daño que la Espada hizo fue prácticamente nulo.
-¿Cómo…?
La espada soltó un pulso en respuesta, la magia maligna de Ganondorf estaba ahí. Pero la máscara era tan dura que necesita dañarla más físicamente antes de romper la magia de esta. Y eso no era bueno.
Volvagia miró al muchacho muy molesto. Dio un rugido y se lanzó hacia uno de los orificios en el suelo, metiéndose en la lava y escapando de la vista de Link.
-¿Dónde…?
Link se giró y vio como de atrás suyo, de uno de los orificios de lava, Volvagia sacaba medio cuerpo y con un movimiento, agitó lo que era su melena de fuego. Link logró alzar el escudo a tiempo para resistir el impacto, pero este bastó para que él caiga al suelo.
-¡Link, arriba! – Navi vio como la bestia abría la boca. - ¡Va a lanzar fuego!
El muchacho se puso de pie y logró dar varias piruetas hacia un lado para esquivar las llamas que salieron. Rayos, apenas se puede defender y al atacarlo no logra nada. ¿Qué puede hacer?
-¡Usa el Martillo! – La voz de Darunia lo hizo pasar a verlo rápido. - ¡Eso lo puede lastimar!
Claro, el Martillo… Según las leyendas, eso es lo que derrotó al primer Volvagia. Puede que sea útil.
Sacó el Martillo y vio como Volvagia regresó al interior de la lava para buscar la manera de atacarlo. Parece que siente que esta estrategia es la mejor contra Link.
El muchacho prestó atención a todos los orificios que veía, mientras que Navi miraba los que estaban en el punto ciego del muchacho.
Vio un orificio sacar lava, pero no salió de ahí…
-¡Atrás!
El grito de Navi lo hizo girar y ver que el dragón emergió, listo para atacarlo y darle con su melena de fuego. Pero Link apretó los dientes, giró con toda velocidad agitando el Martillo hacia la cabeza de Volvagia, logrando darle un golpe tan preciso que le dio en la cabeza.
La bestia dio un rugido de dolor a la vez que se sostenía la zona dañada con sus manos. Se escondió en la lava, pero Link fue capaz de ver como trozo de la máscara que tenía se caía a pedazos. ¡Puede servir!
El dragón emergió rápidamente de su lugar de escondite y voló, mirando a Link con odio. Pero por un segundo, fue como si lo reconociera. Pero eso se esfumo de inmediato, para volver a atacar con sus llamas, esta vez no atacando a Link, sino al suelo. Era como si…
-Está calentando la zona con sus llamas. – Link sintió el aumento de temperatura, a pesar de que los aretes lo protegen de gran parte del calor, es mucho para él.
Trató de moverse para que no tenga que hacer frente al calor, pero Volvgia dio otro rugido y alzó vuelo, yendo a la parte superior de la habitación. Su cuerpo chocó con el techo y de repente, empezó a lanzar las rocas que hacia caer con el azote de su enorme cuerpo.
Estas caían a donde estaba Link, quien corrió por la zona para que esas cosas no le caigan encima. A su vez, Link no estaba seguro de que puede hacer para poder hacer que el enorme reptil se quede quieto.
Una roca le cayó muy cerca y apenas se pudo cubrir de los trozos pequeños que le dieron. Sin contar que cayó cerca de uno de esos pequeños pozos de lava. Link ya estaba sintiendo lo que era el efecto del calor.
Alzó la mirada y vio a Volvagia ir contra él con la boca abierta para comérselo. ¡Ni loco será su aperitivo!
Dio un salto que lo puso encima del enorme Dragón, dado que se aferró a los cuernos de él. Volvagia sintió al ente extraño en su cuerpo y se sacudió para quitárselo. Pero Link solo se aferró más a los cuernos de la bestia.
-¡Link, esta es una locura!
-¡Es lo único que se me ocurre! – el Héroe se aferraba con fuerza al dragón, el cual rugía por la molestia que sentía.
El muchacho vio que Volvagia iba al techo, de seguro para chocar su espalda y deshacerse de él. No en su guardia.
Se soltó y empleando todo su equilibrio, sacó el Martillo y le dio un golpe en la zona donde estaba en el lomo del dragón.
Volvagia rugió del dolor, a la vez que caía al suelo con Link. Ambos impactaron el suelo con fuerza, aunque se pudo oír el como el hombro de Link crujió.
-¡AGH! – El muchacho se tomó el hombro izquierdo, dado que siente que el hueso se movió. – Rayos…
-¡Link, arriba! – Navi vio como Volvagi se estaba irguiendo, a la vez que este botaba sangre por la boca.
El dragón tenía la columna dañada por lo último. Pero se centró en Link y abrió la boca para lanzar otra llama. Esta vez Link tomando su escudo y usándolo como protección contra las poderosas llamas del dragón.
El calor viajó por el metal con fuerza, a la vez que sus manos empezaban a arder. Apretó los dientes para soportar el grito que deseaba salir de su boca. Aun así, no se rindió. Solo resistió como el Templo le enseño. Y agradecía que el Escudo lo esté resistiendo, era como si de verdad fuera especial dado que aun con ser de un metal fuerte, se habría derretido y él habría muerto…
Volvagia dejó de atacar, en espera de ver si lo había calcinado. Solo para ver que Link corría hacia él, con el Martillo listo y de un golpe preciso en medio de la máscara, hizo que el Dragón se resienta.
Este se retorció en el suelo, a la vez que Link caía. Su hombro izquierdo pasó a ser acomodado por él mismo, a la vez que bebía una poción roja para que el dolor sea amortiguado. Y no solo ello, el muchacho sacó otra botella y bebió de esta, era la poción verde.
-¡Link, ¿Cómo puedes beber esas dos a la vez?! ¡No sabes que…!
Lo sabe, pero necesita amortiguar el dolor y debe de soportar el calor. No importa que deba de hacer. Debe de…
-Ayuda… - Una voz lo sacó de su estado de pensamiento. Alzó la mirada y… - Por favor… Ayuda…
Era Volvagia, el dragón se tomaba la cabeza, incapaz de moverse por el daño recibido por el Martillo. Pero su cabeza estaba ya casi sin la máscara y se podía ver que en medio de su frente estaba una gema de topacio que parecía ser como un bicho… Un parásito.
-Volvagia… - Link se puso de pie, las pociones trabajando, pero…
-Por favor…. Mátame… - Fue el grito desesperado de Volvagia, a la vez que lágrimas salían de sus ojos. - ¡Libérame!
Link apretó los dientes. Había olvidado eso en medio de la batalla, que Volvagia era una víctima como el resto. Que el Espíritu de la Montaña de verdad no era malo. Solo… estaba embrujado. Pero a su vez…
Sintió el pulso de la Espada Maestra en su espalda. Era una reacción al cristal en la frente de Volvagia.
Link sentía lo que la espada deseaba hacer, lo que debía de hacer. Pero… Eso solo significa que…
Apretó los dientes y… Recordó al Goron que murió. La prueba de que no los puede salvar a todos, aunque lo desee… Que…
-Pero puede darle paz a los que la buscan. – La voz de nuevo… Venía de la Espada Maestra. – Puede darle paz a este pobre ser que no desea sufrir más. Para él, eso sería mejor que vivir bajo el yugo de un ser maligno.
Al oír ello, Link supo que era verdad. Lo mejor era que Volvagia sea libre del yugo de Ganondorf. Por lo que fuerzas de su cansado cuerpo. Sacó la Espada Maestra y la tomó con las dos manos.
Su determinación pareció hacer que la Espada brille, su poder que repele el mal ahí. A su vez, se veía el brillo en el dorso de la mano izquierda de Link. El muchacho sintió la claridad en la mente de nuevo, alzando la espada para tenerla a un lado de él, corrió en dirección de donde estaba Volvagia.
El dragón parecía saber que era lo le pasaba y lo iba a dejar pasar. Pero la gema en su frente brilló y como obligando a que su cuerpo se mueva a atacar.
Las llamas salieron de la boca de Volvagia aun contra la voluntad del dragón. Y Link sabía que las debía de esquivar. Pero sería perder la oportunidad que tiene si lo hace….
-¡Corte las llamas, puede hacerlo! ¡Apunte con la Espada al Cielo y reúna la energía para lanzarla!
Sabe que es una locura, pero no le importa. Escuchará la voz que parece salir de la Espada Maestra. Y aun ante el grito de Navi, de que se mueva para que no sean incinerados, Link alzó la espada y la apuntó al Cielo.
De la nada, la Espada Maestra empezó a brillar y pareció cargarse de la luz que siempre emana.
De la nada, su mente le mandó la imagen de alguien haciendo lo mismo con él. Solo debía de agitar a donde quería...
Las llamas estaban ya cerca de él, pero Link se detuvo en su avanzar para poder agitar la espada y…
-¡Skyward Strike!
De la Espada Maestra salió una onda de corte hecha de la luz que se acumuló y para sorpresa de todos, cortó las llamas y le dio de lleno en la cabeza a Volvagia, justo en la zona del Topacio, rajando un poco la piedra.
El dragón se tomó la cabeza, el dolor lo estaba matando. Y Link sin perder tiempo, dio un salto hacia la cabeza del dragón y le clavó la Espada Maestra justo en la zona de la joya, logrando destruirla, pero a la vez…
La Espada Maestra soltó su brillo que destruye el mal y se vio la destrucción de la joya y como Volvagia caía al suelo.
Link sacó la espada rápidamente para ver como Volvagia daba sus últimos respiros. Lentamente, el cuerpo del dragón se estaba viendo consumido por el calor o la energía de la Espada, dado que solo estaban quedando sus huesos…
-Gracias… - Fue lo que el Dragón le dijo a Link, quien se arrodilló para verlo mejor. – Lo siento… Todo… - El dragón soltó unas lágrimas, antes de parecer sonreír. – Pero al menos…. Te pude ver de nuevo… Link…
El muchacho no supo porque oírlo decir eso, lo hizo derramar lágrimas que se evaporaron por el calor, pero que el dolor seguía ahí presente. Lloró y abrazó la cabeza del dragón sin entenderlo, solo sabía que su alma le decía que lo hiciera.
Volvagia sonrió una vez más, antes de que su cuerpo se vuelva polvo por el fuego y no quede nada, solo Link ahí… llorando sin entender porque. Sin entender ese dolor…
Había ganado, pero sentía que había perdido…
Navi se quedó en silencio y Darunia en su lugar, solo pudo bajar la mirada. Antes que una luz se haga presente y envuelva a todos.
Tras morir el destello, Link se vio en la Sala de los Sabios. Parecía no tener heridas, pero él sabía que era solo una ilusión. Estaba de rodillas, sus manos se hicieron puños al saber que…
-… Ganondorf… - Su voz llena de ira y odio al Gerudo, solo demostraban que el dolor que ese sujeto creó no se lo perdonaría jamás.
En eso, frente a él brilló el símbolo del Templo del Fuego, que era rojo y con una llama como imagen. Ahí, apareció Darunia…
-Hermano. Debo de darte las gracias por lo que has hecho. Has salvado a los Gorons. – Darunia le sonrió al muchacho. – Te has vuelto todo un hombre. Sabía que serías grande.
Link se puso de pie y negó con la cabeza.
-No lo siento así… No pude…
-Sé que sientes. – Darunia bajó la mirada. – No es sencillo, ver como Volvagia te rogaba la muerte para poder ser libre. Creo, que es una carga horrible de poner a alguien. Pero… Ten la certeza de que Volvagia deseaba ello.
-… No es justo Darunia. Esto… Nada lo es.
-Por supuesto que no. Pero así es la vida. Llena de sorpresas… Mira, ¿Quién iba a imaginar que yo sería el nuevo Sabio del Fuego? Debe de ser eso que llaman Destino…
-¡No me interesa el Destino! – Link alzó la voz. - ¡No me interesa nada de lo que digan con eso como excusa! ¡Ni que es lo mejor! ¡Nadie sabe lo que se siente lo que debo de hacer o lo que paso! ¡Nadie!
Darunia vio al muchacho y pudo ver el dolor en sus ojos. De que lo que fue obligado a hacer. Era mucho…
El Goron caminó a donde estaba el chico y puso su mano en su hombro.
-Puede que no… Pero yo creo que tú eres el que puede soportar esto. Desde ese día hace 7 años, sabía que estabas destinado a la grandeza. Y nada me haría más feliz que ayudarte a derrotar el mal.
-… Sabes cuál es el sacrifico que debes de hacer Darunia… Yo no…
-Lo sé. Pero tengo la certeza de que mi hijo y los demás lo entenderán. – Darunia sonrió. – Ten este medallón, que contiene el poder de los Espíritus de Fuego y mi eterna amistad. – Link tomó el Medallón de Fuego de las manos del Goron.
-Darunia, yo… - Link no supo como decirlo. – Puede que hace años no lo haya dicho, pero me alegra que me hayas llamado amigo y hermano… - Sonrió al final. – Me alegra de que sea así… Hermano.
Darunia sonrió con amplitud, pero se veía la emoción en sus ojos. Ambos sabían que era la hora… el Goron vio como Navi salía del sombrero de Link y le asentía. Él hizo lo mismo…
-Es hora… Toca esa melodía Link.
El Bolero de Fuego… Link sacó la Ocarina del Tiempo y empezó a tocar la tonada. Cálida e intensa como las llamas que dan calor cuando son usadas para el bien.
Cálida y llena de pasión. Como una amistad real que lleva a una hermandad sin la necesidad de lazos de sangre. Solo eso… hermandad.
Link terminó la canción y Darunia lo abrazó, a la vez que el muchacho pudo sentir las lágrimas del Goron y él no pudo contener las suyas, a la vez que lo abrazaba para poder despedirse. Al mismo tiempo que la luz del lugar los envolvía.
-No lo olvides jamás. Tú yo somos verdaderos Hermanos.
A la lejanía…
Se podía ver como la cima de la Montaña de la Muerte perdía esa energía maligna que había estado ahí años.
Todos los que vieron eso a la lejanía, se preguntaron qué o quién pudo hacer eso.
Pero Ganondorf en su castillo, lo sabía. Y eso lo hizo sonreír como no lo había hecho en años. El niño era fuerte…
-Puede que hayas ganado esta vez mocoso. Aprovéchalo… porque al final solo será mejor cuando caigas ante mí.
Y no lo negaba. Estaba emocionado de ver hasta donde llegará ese muchacho. Quizás vaya siendo hora de que… vaya preparando el próximo reto.
