Aviso
Hanabi estaba buscando el mejor regalo para su hermana cuando se encontró con Naruto.
/adorar/
profundo amor y respeto por alguien
Decir que hoy era un día normal para los Hyuuga, era cierto. Bueno, excepto para las hermanas Hyuuga.
La nieve caía del cielo cubriendo la aldea de blanco. Era una escena perfecta digna de una bola de nieve, sin embargo, no importaba lo hermosa que pareciera, ni siquiera podía deleitarla.
Su entrenamiento no fue fructífero en estos días. Debe haber sido todo porque su hermana apenas estaba en casa últimamente. Misiones aquí, misiones allá, misiones en todas partes.
Ugh. ¡Incluso se perdió el Festival Rinne!
¡Pero ahora era diferente!
Su hermana llegaría pronto a casa y podría finalmente pasar tiempo con ella en este día tan especial de sus vidas. ¡Sip! ¡Eso es!
"Hanabi-sama," Natsu llamó después de que ella llamara a la puerta.
La joven se puso de pie, con los ojos brillantes de anticipación, "Oh, ¿ya está aquí Nee-chan?" Salió zumbando por la puerta, pasando junto a su institutriz.
"Sobre eso, Hanabi-sama..." Hanabi la miró y ya se dio cuenta de lo que quería decir.
Su corazón se hundió inmediatamente. Ella está en una misión de nuevo, ¿eh?
Cada vez que iba a perder una oportunidad de salir con su nee-chan, Hanabi no podía evitar tener fuertes sentimientos de arrepentimiento. Arrepentida de los años que eligió creer a su abuelo y eligió mirar a su hermana con una luz distante.
Podrían haber entrenado juntas durante esos tiempos. Podría haberse unido a ella y a Neji nii-san mientras aprendían nuevos jutsu, mientras reían juntos, mientras mejoraban juntos y sobre todo mientras celebraban sus cumpleaños juntos.
Sin embargo, Neji nii-san ya no estaba con ellos y su nee-chan tiene que celebrar otro cumpleaños sin una familia.
"Tal vez, podríamos darle un regalo, para que cuando vuelva, sepa que querías celebrar su cumpleaños con ella."
Su cara se iluminó. ¡Esa sería una gran idea!
"¡De acuerdo, Natsu! Iré a buscarle a Nee-chan un regalo perfecto, ¿de acuerdo?"
"¡Hanabi-sama!" La joven escapó de su institutriz cuando estaba a punto de intentar impedir que saliera del recinto de Hyuuga sin ninguna compañía.
"Natsu,"
"Oh, Hiashi-sama, lo siento, Hanabi-"
"Enviaré a Ko para que la siga."
"Mis disculpas Hiashi-sama."
El jefe del clan levantó la mano en señal de desaprobación, "No hay nada de que disculparse". La repentina respuesta de su jefe de clan, la sorprendió.
"Fue la ausencia de inspiración lo que llenó a Hinata de dudas cuando era más joven." Hiashi-sama declaró con un tono reminiscente y la institutriz notó que sus ojos estaban puestos en el lugar donde Neji y Hinata-sama solían entrenar, "Irónicamente, ella sirvió de inspiración a Hanabi y sacó la fuerza de su hermana menor, la misma fuerza que Hinata dudaba en exhibir cuando era una niña."
Natsu sabía de la admiración de la joven Hyuuga por su hermana mayor. Sin embargo, vaciló durante unos años, nadie podía culpar a la joven. Ella era inocente y era sólo una simple presa de sus duras tradiciones con Hinata-sama y Neji como la víctima roída.
"Pero Hiashi-sama, ¿no es cierto que desde que la guerra terminó e incluso un poco antes, el recinto de Hyuuga se ha llenado de crecientes alabanzas a Hinata-sama? También se habló de que se las arregló para desarrollar un nuevo jutsu en medio de la batalla."
El jefe del clan cerró sus ojos solemnemente, "Ella finalmente ha encontrado a alguien a quien admirar."
Natsu no echó de menos esa mirada en los ojos de su líder mientras los abría y miraba al cielo. Ya había sido testigo de esa mirada antes, cuando era una niña pequeña y Hiashi-sama era un joven que se asombraba de una cierta belleza que se asemejaba a la de una medianoche serena. Incluso la propia Natsu no pudo evitar adorarla. Su clan era mucho mejor cuando ella aún estaba viva.
Pero, ¿qué debería conseguirle? Hanabi siguió preguntándose mientras paseaba por el campo de entrenamiento donde su nee-chan solía ir.
Su hermana lo tenía todo.
¿Productos de belleza? Hmm, aunque su nee-chan está en la edad en que las chicas se preparan como todas las demás kunoichi, no creía que su hermana necesitara ningún producto de belleza. Su piel recordaba a la temporada actual y se veía tan elegante y cara como una porcelana. Bueno, su hermana se parecía mucho a una muñeca de porcelana, ahora que lo pienso. Su cabello era de noche, y era largo, suave y delicado. Su nee-chan era la única que tenía ese color en su clan y eso puso a Hanabi un poco celosa.
Sí, ella sabía que era hermosa también, pero a sus ojos, su hermana era como las hadas que sólo se imaginaba en sus historias cuando era más joven.
Ella suspiró fuertemente. ¿Qué podía conseguir para ella? Bueno, no podía adquirir el sentido de la moda para el caso. Y aunque le regalaba la ropa que había visto en las revistas de hoy en día, estaba segura de que su nee-chan la cubriría con su chaqueta holgada.
Ah, nee-chan, ¿cuándo florecerás como una flor?
"Jutsu clones de sombra!"
La joven chica rápidamente activó su byakugan y se mantuvo en alerta máxima.
"¿Por qué no puedo hacer esto correctamente -ttebayo?"
¿Dattebayo? Entonces ese debe ser...
Rápidamente se escondió detrás del árbol para ver al rubio shinobi y a su clon tratando de atar el hitai-ate alrededor de su frente.
En ese momento, ella cuestionó los estándares de su hermana. ¿Cómo puede enamorarse de este tipo?
Su victoria durante la guerra condujo a la paz entre las aldeas, pero también les ha costado daños, que su clan ayudó a rectificar. Esto hizo que su entrenamiento con su padre se estancara un poco, por lo que usó su tiempo libre para cuidar de su hermana, de la que se dio cuenta que era una asistente frecuente en el hospital. Lo más probable es que, debido a este tipo, la joven pensó. Y con eso, comenzó a interesarse por las cosas de su hermana y una de ellas eran las revistas femeninas que abordaban el amor, que de ninguna manera describían a Uzumaki Naruto.
Para la joven, el rubio parecía no ser material para un novio en ningún ángulo. No parecía un hombre que te haga perder la cabeza. Para Hanabi, parecía un vago.
No es refinado, es ruidoso e hiperactivo. ¿Qué clase de romance obtendrá su hermana de este tipo de hombre?
Maldición, estaba tan lejos de Neji nii-san, el mismo epítome de la gracia Hyuuga.
Y si alguna vez se juntan, ¿cómo harán los Hyuuga para seguir el ritmo de Uzumaki Naruto?
¿Pero por qué su hermana arriesgó su vida por este vago?
Hanabi no pudo evitar los celos que la arañaban. Cuando eran más jóvenes, ella vio a su hermana observarlo. Nunca pudo entender lo que su hermana vio en ese chico. Incluso después de observarlo personalmente ahora, pfft, ella todavía no podía verlo. Sí, ahora era el héroe de la aldea y probablemente el shinobi más fuerte, pero Hanabi necesitaba muchas razones para aprobar el chico para su hermana.
Su nee-chan era una princesa y él ni siquiera es encantador.
"¡Hey Naruto!"
"¿Tenten?"
"Te veo luego en casa de Kurenai-sensei, ¿está bien?" La morena saludó al chico mientras se marchaba con algunas bolsas de comida en la mano.
"¿Qué sucede hoy?" Naruto preguntó inocentemente y en voz alta para que Hanabi lo oyera.
¡Eso es todo! La joven no pudo evitar sentirse molesta. ¡Ni siquiera sabía que hoy era el cumpleaños de su nee-chan! Sus puños apretados. Para la joven mente de Hanabi, ¿cómo podía su hermana arriesgar su vida por alguien que ni siquiera sabía el día en que nació?
Sin pensarlo dos veces, le tiró tres kunai al rubio que efectivamente evitó el asalto.
"¡Oye! ¿Por qué fue eso?" Preguntó, mirando extrañamente a la joven, "¿Una Hyuuga?"
"¡Deja de hablar y demuestra tu valía!" Hanabi lanzó otro ataque que el rubio evitaba constantemente.
"¿Qué te pasa en serio?"
"¡Tú! ¡Eres tú el que está mal!" La joven declaró mientras se dirigía a él con la palma de la mano.
Nee-chan siempre te ve, ¡pero ni siquiera intentas mirar en retrospectiva! Le dolía siempre. Para Hanabi, el amor de su hermana era el más cálido que había recibido en su vida, ya que realmente no llegó a experimentar cómo era tener una madre. Para ella, su nee-chan era lo más cercano a ser madre. Y decir que este tonto chico rubio se lo merecía, después de descuidar a su nee-chan durante tanto tiempo, fue una gran broma para Hanabi.
"Woah! Deja de golpear así. Sólo te harás daño a ti misma" aconsejó Naruto mientras desviaba su ataque causando que se tropezara.
Nunca me rendiré hasta que averigüe lo que mi hermana vio en ti.
Ella se puso de pie con un espíritu inquebrantable y se preparó para otro ataque, "¡No seas amable conmigo!" Ella exigió mientras avanzaba.
El rubio sonrió a su fuerza de voluntad y ligera arrogancia mientras llamaba a algunos clones. Ella realmente le recordaba a alguien.
"Tu velocidad es genial, pero no deberías concentrarte en atacar, al menos debes averiguar cuál es el verdadero yo dattebayo."
¿Qué? ¿La estaba entrenando? ¿Entrenándola? ¡Pero esto no era un entrenamiento para ella!
"¡Tómame en serio, vago! ¡Esto no es un entrenamiento!"
"Sí, sí, te entiendo. ¡Te entiendo -ttebayo! Caray, te pareces mucho a Kono-"
"¡Hakkeshou Kaiten!" La misma técnica hizo que los clones de Naruto desaparecieran. Este jutsu hizo que él también luchara bajo el mando de Neji durante sus exámenes chuunin. Esta niña debe ser muy seria. "¡Basta de clones!" Ella anunció con confianza mientras los párpados del rubio se teñían de naranja.
La heredera Hyuuga notó el cambio en su chakra, pero no le importó. Hay tantas emociones que se están moviendo en ella en este momento. Era la primera vez que se encontraba con el shinobi en persona y no podía evitar este tipo de sentimiento. Realmente no sabía lo que era. Pero no podía negar que ver al chico siendo tan amigable con ella no ayudaba, estaba haciendo su corazón mucho más pesado. Él le estaba dando miedos y a ella no le gustaba lo que sentía.
El shinobi refrendó todos sus ataques y ella sólo terminó tropezando con el suelo.
"¡Wow! ¡Realmente tienes un gran potencial justo ahí -ttebayo!" El rubio le sonrió mientras la joven agarraba sus puños con fuerza, evitando que las lágrimas cayeran de sus ojos.
Hanabi no podía aceptar el hecho de que él era lo que su hermana le decía que fuera. No podía aceptar que Naruto le sonriera como si fuera su hermana menor. Le hacía sentir que su nee-chan estaba a un paso de ella y más hacia el chico. Hanabi sintió que le quitaban a su hermana.
Pero nee-chan ha pasado por mucho. Ella merece ser feliz.
Sí, ella lo sabía. Sabía que su hermana merecía recibir el amor que le dio y aún más. Podía recordar que su nee-chan dudaba en luchar contra el pensamiento de su hermana que la hacía fuerte. Adoraba tanto a su nee-chan que era su calor en las noches de nieve. Su amor era el único amor que sentía desde que eran niñas. Y era la suavidad de sus manos lo que buscaba, siempre que estaba preocupada.
"Tus ojos tienen la misma determinación que una cierta Hyuuga que conozco. Sin embargo, la suya tenía esa bondad y calidez en ellos, un tipo de fuerza diferente que la mayoría de la gente, e incluso ella, a veces ni siquiera se daba cuenta. ¿Sabes qué? ¡Podrías ser como ella dattebayo!"
Hanabi miró al chico que se sentaba a su lado en el suelo. "Todavía puedo recordar como ella nunca se rindió aunque la mayoría de la gente a su alrededor le dijo que no podía hacerlo. Ella tiene el corazón para perdonar incluso en los momentos más difíciles. Fue lo suficientemente valiente como para arriesgar su vida por sus amigos y por la gente que quería." Naruto se detuvo un momento. Sus rasgos mostraban que un cierto recuerdo le molestaba, pero apartó el pensamiento y miró el atardecer en su lugar, "Se puso de pie a mi lado y me sostuvo cuando estaba a punto de caer. Siempre me apoya, me cuida y es amable. Ni siquiera sé cómo lo hace, a pesar de que la vida ha sido dura para ella y eso es lo que la hizo fuerte".
Entonces, el rubio respiró hondo. Estaba sonriendo, pero hay un tipo diferente de soledad en sus ojos que Hanabi no echaba de menos, "Para ser honesto, ni siquiera sé cómo darle las gracias adecuadamente después de todo eso."
La joven Hyuuga sólo podía mirarle fijamente. Sus palabras fueron exactamente lo que ella sentía hacia su hermana y fue sólo un testimonio de que Uzumaki Naruto también adoraba su nee-chan.
¡Espera un segundo! ¿Acaba de correr hacia su nee-chan? Basado en las revistas que ella leyó, ¡el momento fue exactamente así! Y esto implicaba una nueva misión para la joven Hyuuga. Tal vez, ella había perdido muchos detalles de la vida de su nee-chan últimamente que ni siquiera estaba al tanto de que el vago realmente le prestaba algo de atención a su hermana. ¡Ella debe obtener todos los detalles de esto!
Hanabi se puso de pie con una cara orgullosa y anunció, "¡Hmph! ¡Definitivamente seré como ella algún día! ¡Me aseguraré de que lo veas!" Y ella comenzará manteniendo su cabello tan largo como su nee-chan lo mantuvo.
El rubio se levantó y comenzó a caminar con ella, "¡No puedo esperar a que llegue ese día dattebayo! Uh, hmm, no sé tu nombre todavía. Soy Uzu-"
"Sí, ya te conozco. ¡Soy Hyuuga Hanabi! ¿Te suena de algo?"
El rubio inclinó la cabeza, "Hmm... realmente no. Lo siento. ¡Pero es un placer conocerte Hanabi dattebayo! La próxima vez, te presentaré a alguien que conozco. Se parece mucho a ti." La morena sólo podía suspirar. ¿Por qué esperaba que la conociera si ni siquiera se dio cuenta de que su hermana lo acechaba todos esos años? "¿Qué tal si tomamos algo de Oshiruko en el camino ya que hace frío? Mis amigos estaban todos en misiones y ha sido bastante patético y aburrido, especialmente con sólo un brazo -ttebayo."
"Sopa de judías rojas, ¿eh? A mi hermana también le gusta eso."
"¿Tienes una hermana?"
"Bueno, sí." Luego su tono se volvió extrañamente triste, "En realidad hoy es su cumpleaños. Y no sabía cuál era el regalo perfecto para darle".
"¡Naruto!" Su conversación fue interrumpida por un Kiba apresurado con Akamaru siguiéndolo de cerca.
"¡Hey, Kiba! ¿Acabas de regresar de tu misión?"
Fue Akamaru quien ladró en respuesta.
"Y en realidad nos dirigimos hacía Kurenai-sensei. Será mejor que nos acompañes. Es el cumpleaños de Hinata."
"¿Cumpleaños de Hinata?" Muchos pensamientos aparecieron en la cabeza de Naruto, pero definitivamente lo que más le llamó la atención fue...
Hanabi mencionó que hoy era el cumpleaños de su hermana y hoy era el cumpleaños de Hinata ... ¿Podrían ser?
Su cabeza se dirigió inmediatamente a donde estaba Hanabi, "Hana-" pero ella se fue antes de que se diera cuenta.
"¡Hey Naruto! ¿Con quién estás hablando? No veo a nadie allí."
"Bueno, Hanabi estuvo aquí hace un rato."
"¿Hanabi? ¿Te refieres a la hermana pequeña de Hinata?" Kiba preguntó y confirmó la especulación de Naruto.
Y no sabía cuál era el regalo perfecto para darle. El rubio no echaba de menos la tristeza subyacente en él. Hace un tiempo, el rubio sintió que tenían una comprensión sobre la cierta Hyuuga de la que hablaba y vio que el espíritu de la niña era igual al de su hermana. Ella debe haberla adorado tanto. Sólo eso era un regalo perfecto. Conociendo a Hinata, sabe lo mucho que ella valora a sus seres queridos.
"Bueno, adelante Kiba. Yo te seguiré en breve. ¡Sólo tengo algo importante que hacer -ttebayo!" Naruto dijo mientras se alejaba a toda velocidad hacia algún lugar para consternación de Kiba.
¿Cuándo se dará cuenta ese idiota?
A los diecisiete años, Hinata sólo podía contar con sus dedos los momentos en los que su cumpleaños se consideraba una celebración. Por nombrar algunos, el primero fue cuando su madre aún vivía. Echaba de menos los días en los que todavía sentía el abrazo amoroso de su madre y la cálida mirada de su padre. El siguiente fue cuando la cuidó Kurenai-sensei, el otro fue cuando Neji nii-san lo celebró por primera vez con ella y el más reciente fue cuando cumplió dieciséis años, el último cumpleaños al que asistió su Neji nii-san. El pensamiento grabó una pizca de tristeza en su corazón, pero fue reemplazado instantáneamente al ver las nuevas caras que se añadieron a la lista de personas que celebraron este momento de su vida hoy.
Tenten-chan y Rock Lee-kun fueron los nuevos miembros adicionales de su esfera. Dijeron que eso haría feliz a Neji nii-san y Rock Lee-kun incluso le ofreció formar parte de su equipo, una idea que Shino-kun, Akamaru y Kiba-kun rechazaron totalmente. Por supuesto, otra adición fue la bebé Mirai. Con sólo mirarla, Hinata no pudo evitar desmayarse. Era un tesoro y siempre le sonreía cuando la veía. Acunar al bebé en sus brazos le daba un tipo de alegría diferente. ¡Ni siquiera era su bebé y aún así se sentía tan borrosa!
"¿Dónde está Naruto?" Tenten le susurró a Kiba.
"Dijo, que nos alcanzará. Tiene algo importante que hacer".
La chica morena sólo podía suspirar. ¿No han pasado ya suficiente tiempo para acercarse realmente el uno al otro?
"¡Hinata-san! ¡Que este nuevo año de tu vida te traiga alegría y te lleve al verdadero espíritu de la juventud!"
"Gracias, Rock Lee-kun." La tímida Hyuuga comentó mientras entregaba a la bebé Mirai a Kurenai-sensei.
"Realmente brillaste este año Hinata y sé que seguirás brillando aún más en los años venideros."
"Kurenai-sensei", Hinata se giró y abrazó a su sensei, una figura materna que la apoyó y le mostró su amor familiar. La primera persona que celebró su cumpleaños desde que su madre falleció.
Hinata estaba muy agradecida de tener a estas preciosas personas a su alrededor. Siempre atesorará la consideración y el afecto que le dieron en su cumpleaños. Sin embargo, en el fondo sentía un espacio, un hueco que no se llenaba en su corazón, un agujero que dejaba una marca.
Trató de apartar el pensamiento y, en cambio, se centró en las bendiciones que recibió.
"La comida va a ser definitivamente deliciosa, porque fue Kurenai-sensei quien cocinó todo eso, ¡mientras yo cuidaba de Mirai-chan!" Tenten anunció mientras Lee sostenía un pastel redondo con velas encendidas '17' en la parte superior, "¡Aquí, Hinata-san! ¡Pide un deseo para los próximos años de juventud! "
Todos se reunieron y la saludaron mientras se inclinaba un poco para soplar las velas, "¡Feliz cumpleaños, Hinata!"
Hinata, aunque sentía un poco de espacio en su corazón, nunca pensó en desear más. Hasta que pensó en su Neji nii-san. Paz, le deseó a su Neji nii-san paz. Aunque ya no está con ella por su cumpleaños, sabía que siempre la cuidaba.
"¡Espera!" Una voz familiar causó una vibración en su columna vertebral.
"¿Naruto-kun?" El rubor se deslizó por sus mejillas cuando el chico de los bigotes apareció ante ella. No esperaba que viniera, pero al verlo delante de ella, su espíritu se elevó a otro nivel.
"¡Lo siento, llego tarde -ttebayo!"
"¿Qué pasa con esa gran entrada, Naruto?" Kiba intervino agresivamente, tratando de parecer agitado, pero en el fondo estaba realmente orgulloso y feliz.
"¡Wow! Realmente usaste el Modo Sabio, ¿eh, Naruto?" Tenten señaló mientras el rubio respondía,
"Bueno, sí, realmente quería llegar aquí. Es el cumpleaños de Hinata después de todo, ¿verdad?"
Kurenai-sensei sonrió victoriosamente, Kiba lanzó una sonrisa de satisfacción, Shino permaneció callado y Tenten retenía a Lee, que estaba a punto de arruinar este momento.
El rubio se acercó a la tímida chica y le hizo una sonrisa de vergüenza mientras se frotaba la nuca.
"Honestamente, me siento muy mal, porque no sabía que hoy era tu cumpleaños." Naruto se rio tímidamente y dijo: "Debí saber que era lo correcto. Quiero decir que has hecho mucho por mí y yo..."
"Naruto-kun, está bien. Lo entiendo." Ella le transmitió como la luz de la luna en un cielo nocturno nevado y aspiró al rubio en su mirada, lo que lo puso nervioso.
"Caray, Hinata. A veces no lo sé. ¿Qué digo? Uh... siempre eres así, dattebayo."
"¿Eh?"
"Yo-yo quiero decir, uh..." Naruto se rio nerviosamente mientras se ponía al día en lo que decía: "Bueno, es que puede que nunca llegue a celebrar un cumpleaños apropiado yo mismo y no sepa nada de cumpleaños, pero como hoy fue el día en que naciste, sé que es importante. ¡Feliz cumpleaños Hinata! ¡No sabes lo agradecido que estoy de haberte conocido dattebayo!"
"Naruto-kun."
¿Estaba coqueteando con ella en serio delante de nosotros? Kiba meditaba medio molesto y medio triunfante, mientras que los demás no podían evitarlo, pero se sentían felices por los dos, especialmente por la cumpleañera.
"Eh, Hinata, en realidad hay otra cosa", dijo Naruto mientras miraba hacia atrás.
"Nee-chan", una joven Hyuuga, con el cabello más corto, apareció por detrás y comenzó a acercarse a su hermana.
"¡Hanabi!" Lágrimas cayeron voluntariamente sobre los ojos de Hinata mientras su hermana corría hacia ella y la abrazaba con el mismo abrazo que solía hacer en aquel entonces.
Ella echaba de menos esto. Cuando era más joven, el cansancio de su duro entrenamiento no le impedía pasar tiempo con su hermana pequeña, ya que era su amor el que le hacía sentir que todavía tenía una familia a la que aferrarse, que todavía estaba en casa. Sin embargo, la tensión en su clan puso un muro entre ellas, y esto impidió que Hanabi fuera cálida con ella como lo fue.
Pocos momentos antes y después de la guerra le devolvieron gradualmente el afecto de su hermana pequeña, pero de alguna manera sintió que había algo que retenía a Hanabi. Ella no sabía lo que inspiraba a su hermana pequeña, pero realmente no importaba. Hinata siempre estaba esperando este día, el día en que su hermana pequeña sería su hermana pequeña. El día en que finalmente regresara a sus brazos, tal y como eran entonces.
Su corazón estaba ahora lleno, y realmente, no podía desear más. Neji nii-san, ¿estás mirando?
"Chicos, siento interrumpir, pero las velas..." Kiba intervino con una enorme sonrisa en su rostro que no pudo ocultar.
Todos ellos compartieron una risa alegre y saludaron a la cumpleañera mientras soplaba las velas.
Fue simple, pero fue cálido, todo lo que ella siempre deseó.
Mientras los demás se asentaban para hablar de sus misiones y aventuras después de la guerra e incluso durante la misma, Hanabi activó su byakugan y lanzó su ataque más fuerte, "¡Tijeras!"
"¡Papel!" Naruto declaró, seguido de un gruñido.
"¡Debería haber usado mi Modo Sabio en esto!"
"¡Te dije que no me subestimaras!"
Fue el vago que fue tras ella. Fue él quien la iluminó para que su sola presencia fuera un regalo perfecto para su hermana. Sí, puede que no sea el tipo más inteligente que la joven Hyuuga conocía, pero ella descubrió que tenía algún tipo de sabiduría y brillo en él. Tal vez eso es lo que su hermana vio en él.
Meh, ella todavía no podía ver por qué su nee-chan se enamoró del tipo. Quiero decir, ¡mira ese color! Naranja, ¿en serio? Bueno, ahora que lo pienso, su hermana tampoco tenía un fuerte sentido de la moda.
Supongo que son el uno para el otro.
"Ah, así que Naruto es ahora amigo de tu hermana, Hinata." Kurenai-sensei declaró mientras acunaba a su bebé en sus brazos.
"Creo que le gustan mucho los niños". La niña de ojos blancos sonrió cálidamente en la escena de su hermana pequeña divirtiéndose con el rubio.
Mientras que, por otro lado, Kiba tenía otra opinión que hacía que la cumpleañera se sonrojara mientras él le daba un codazo en el brazo: "Para mí es más como conocer a los suegros, ¿no crees Hinata?"
"¡Kiba-kun!"