Muchas veces me pregunto, incluso estando yo perdido y sin recursos, ¿por qué será que me preocupo tanto por Candy? Quizás es porque la creo presa de un dolor de mucho tiempo. Ella siempre disimulaba su pesar, pero ahora que lo pienso, con la única persona con quien se abría siempre era precisamente con Albert. ¿Qué tenía Albert, que lograba que ella abriera su corazón y desnudara su alma? Aún recuerdo cuando ella se empeñó en mudarse con él, sin pensar en su reputación o en el qué dirán. Por cierto, ninguno de nosotros pensamos, por alguna razón, que fuera algo malo lo que hizo; bueno, quizás Annie un poco que, por ratos, era la defensora número uno de Terry, que pienso más, era por el miedo de perder a Archi que por nada. Es que, sinceramente, Archi le dio siempre motivos, más cuando se perdía mirando fijamente a Candy, pensando, quizás, si pudo haber sido realidad su sueño de estar con ella, pero no, siempre despertaba. Claro, Annie lo sabía bien, pero ese temor creo que nunca lo dejaría atrás, incluso ahora. La realidad es que Candy tenía una deuda de gratitud muy grande con Albert, más que con nadie, y no sé, pero creo que también él la tenía con ella. Las razones se nos escapaban, al menos las razones más profundas de ese intercambio, pero ese agradecimiento mutuo no les permitía pensar en otra alternativa más que en irse a vivir juntos los dos, aún con Terry aparentemente de por medio.
Candy siempre fue independiente, pero en ese Magnolia en que vivía con Albert, ella de algún modo había construido su propio castillo con sus propias reglas. Y Albert pareció amoldarse rápido a su situación. No parecía debatirse en nada con el asunto. Hasta parecía muy feliz de vivir de ese modo, lo que era chocante a veces, más considerando que siempre fue un hombre libre, con su propio itinerario y sus propias reglas. Quizás lo que sentía por Candy era demasiado fuerte, y el verse sin memoria lo hizo más fácil para él. Él se cohibía cuando lo visitábamos en el Blue River. Puedo decir que se sentía muy a gusto con ella aún cuando ella era una adolescente. Quizás esa fue la misma razón para soltar lo que lo ahogaba en principio. Siendo un adulto joven, se le veía el interés en una Candy adolescente, y eso lo detenía de expresar probablemente lo que sentía por ella. Pero luego, sin memoria, eso que antes lo detenía para entonces, ya no estaba de por medio. Aparte, él no le hubiera hecho desplantes a Candy por el asunto de Terry. Creo que él respetaba demasiado su criterio como para mediar en ese asunto sentimental de Candy. Pero de que se le notaban los sentimientos, bueno, habría que hablar con todos los que conocían a Candy y a Albert para entender. Yo creo que hasta el mismo Terry se había dado cuenta.
Terry, por cierto, no hubiera durado dos horas viviendo con Candy. Sus expectativas de vida eran totalmente distintas. Terry quería ser él, no que fuera algo malo, pero ser él no le sentaba bien a una Candy que esperaba que, a cambio de lo que hacía por los demás, recibiera amor de recompensa. Por lo que sé, Terry no era persona de entender lo que significaba amar a nadie sobre sí mismo. Incluso, pienso que hubiera pagado por esa felicidad, sin responsabilidad alguna, sólo por mera gratificación inmediata.
Candy quería una familia, la que no obtuvo ni siquiera porque el tío abuelo la adoptó dentro del clan. Y es que no podía dársela. El tío abuelo siempre fue un personaje misterioso y lejano. Por lo menos accedió a darle un apellido a Candy, aún cuando Candy sencillamente prefería su libertad. Terry tenía sus ambiciones bien definidas, y ni siquiera porque encontró a Candy en Chicago, pudo anteponer su felicidad a lo que él quería. Él pensaba que enviarle una invitación para ver su obra y un boleto de ida en tren, todo cambiaría desde ese momento en que ella pisara NY. Ahora apuesto que Candy pagó por su inocencia con la pérdida de ella.
No, no pienso que pasara algo entre ellos que fuera reprobable. En todo caso, el dolor que él le causara, no dudo que Albert le hubiera cobrado la deuda por simple lealtad (y amor) a Candy. Para Albert, aún el poco tiempo que llevaba viviendo con ella en el mismo techo, todo se resumía a lo que podía hacerla feliz a ella. De hecho, no dudo que pensara que, de estar en sus manos, le hubiera dado el mundo a esa niña pecosa de hermosa sonrisa. Albert simplemente no tenía reparos. La felicidad de Candy no sólo era lo primero para él, sino que hubiera enfrentado al que fuera (a Terry, a la tía Elroy, a los Leagan) simplemente por hacerla feliz. Si eso no es amor (del bueno), entonces qué. Hasta le hubiera entregado a Terry en bandeja de plata si ella se lo pedía. Es de héroes…
Yo le di la cajita de la felicidad (de nuevo, espero que aún la guarde). Pensé que la necesitaría finalmente cuando Terry rompiera su corazón. Es que, hubiera tomado algo muy grande para que Terry no la dañara de algún modo. Porque desde que descubrió su llamado en la vida, Candy pasó a un segundo plano en su vida. De hecho, si no fuera así, hubiera hecho algo más por ella que llevar un noviazgo a distancia, o negar lo que se estaba publicando en los diarios sobre su relación con la hermosa actriz Susanna Marlowe. Quién podía culparlo, entonces, si se debatía en sus afectos por esa actriz. Pero lo que sé, Candy simplemente ignoraba lo que se publicaba de la relación mediática entre ellos con un aplomo que era sorprendente. Digamos, Terry no era un tipo malo, y no dudo que quisiera a Candy, pero Archi y yo nos dimos cuenta de inmediato que esa relación entre él y Susanna, que a todas luces era mediática, no lo era tanto. Candy también, no nos hagamos los tontos, pero ella tragaba un buche amargo, hacía los diarios y las revistas a un lado, y proclamaba que ella confiaba en su "novio". A nosotros, personalmente, nos daba ira, pero lo ocultamos de ella. A veces creo que hicimos muy mal en no decirle lo que realmente pensábamos. Sin embargo, también entendíamos que ella misma debía descubrir su propia verdad. Quizás ya lo hizo…hace tiempo…mucho tiempo.
Entre nosotros, y con nosotros, me refiero a Archi y Annie, Patty y yo, sencillamente nos callábamos a veces lo que se veía a simple vista cuando salía algún reportaje de la "pareja del año". Quizás nos lo estábamos imaginando, o al menos eso quisimos siempre creer. Por cierto, Albert ni le comentaba quizás porque tenía la fe de que todos estuviéramos equivocados, pero estoy casi seguro de que también se sentía muy mal con cada cosa que se leía sobre ese romance entre actores. Bueno, ahora que lo pienso, quizás es una impresión, pero a este tiempo, apuesto a que eso ya no es problema para Candy. Como dije, es probable que, eventualmente se diera cuenta de los sentimientos de Albert y le hubiera dado una oportunidad. A lo mejor ya están juntos. A lo mejor esta preocupación es en vano. A lo mejor Candy es feliz. Y a lo mejor dejó atrás, en su pasado, a Terry. Es más, podría apostarlo. Eso me da fe, igual que la probabilidad de poder regresar algún día y demostrar que sigo vivo y que no pierdo las esperanzas. Quizás llegue y encuentre a Candy y Albert casados y con hijos. Serían lindos, rubios, de ojos claros…
…
Hace pocos días, pude rescatar el viejo radio del avión. Fue toda una proeza, si les digo la verdad. Lo hice muy a tiempo. El agua salada comenzaba a corroer los cables, pero pude salvarlos. Ahora trabajo para hacerlo funcionar; eso me tomará unos días más, ya que las partes dañadas tengo que repararlas con lo que me ofrece el bosque de alternativa. La verdad es que, literalmente, mi vida depende de ello. Pero mientras hago este arreglo, tengo que pensar y pensar en lo que haré si puedo reconectarme con mi familia.
Seamos sinceros, para ellos yo estoy muerto desde hace más de 6 años. No sé si la tía abuela aún siga viva, pues para los efectos, ya tiene más de 80 años. Ah, pero qué digo, como van las cosas, ella nos entierra a todos nosotros. ¿Y el tío William, estará vivo; ya se habrá presentado en sociedad? ¿Cómo será su relación con Candy? ¿Le habrá permitido, si es como pienso, estar con Albert, que la ama con desespero? La verdad es que lo que conozco del tío William, demostró su bondad y buen corazón al concedernos a Archi, Anthony y a mí, la adopción de Candy en el clan. Y Candy, aunque nunca fue una mal agradecida, simplemente quiso ser como Annie, adoptada como la que consideraba su hermana, aunque el título no le agradara tanto después. El tío William lo hizo, le concedió un apellido y se mantuvo aún todo lo que hizo Candy, desde su escapatoria al Hogar cuando murió Anthony, la del Real San Pablo y su deseo de convertirse en enfermera. Nunca dio señas de reprenderla tampoco cuando se mudó a vivir con Albert. Considerándolo todo, definitivamente, el tío abuelo es diferente a la tía Elroy. Ella sencillamente vivía, desde que la conoció, para suprimir a Candy de nuestras vidas, pero la verdad es que ella siempre, fuera de toda consideración, fue la mejor influencia para nosotros, con esa excepción.
Ahora, tengo que admitirlo, y sin descartar su influencia, pero Candy innegablemente fue la que me inspiró para ser quien y como soy. Claro, tomé una decisión que ahora que lo pienso fue muy, muy mala, pero si no hubiera sido por ella, ni siquiera lo hubiera pensado en otras circunstancias. Fui libre por un momento, viví y salté de la cima de la comodidad para convertirme en todo un hombre. Ahora, si es que tengo la oportunidad, me iré a estudiar y a ayudar a Georges a convertir nuestros negocios en exitosos en el mundo entero, igual que Archi, porque me imagino que él también pensó en ese futuro que incluía aportar a nuestra familia, y devolver con creces las oportunidades que nos dieron desde niños. Es que nuestra familia es una de grandes comerciantes y de mentes privilegiadas. Yo creo que tengo mucho que ofrecer. Y se lo debo a ella y a Albert, porque él también me enseñó a ser libre e independiente. No reniego de la experiencia. Por otro lado, si Patty todavía es libre, quizás podamos reanudar nuestro noviazgo, y quién sabe si la despose y podamos construir una familia.
"Vez, Stear, tienes la motivación correcta", me digo todas las mañanas cuando me levanto y pienso en todas estas cosas.
Sí, estoy algo delgado y esta experiencia en soledad me ha curtido la piel de algún modo, pero no, nunca dejaré de tener la esperanza de salir de aquí y llegar a mi hogar sano y salvo. Ya lo peor pasó y sobreviví. Ahora tengo que arreglar este radio e intentar comunicarme, para darle a mi familia, al clan, la mejor noticia, y a mis dos musas, Candy y Patty, la inesperada sorpresa de regresar sano y salvo.
Continuará...
PD: Hola a todos y gracias por la paciencia y la espera. Hubo varias personas que ya conocían que llevo meses escribiendo esta historia (no tiene un año, pero estaba a pocos meses de...) He hecho varios cambios, porque escribir una historia original es algo difícil. Toma mucho esfuerzo, tiempo y concentración. Tengo que decirle, esta es una de las historias con más retrospectivas de las que he escrito hasta ahora. Recuerden que voy a mezclar los esfuerzos de Stear por comunicarse con el exterior con su análisis de la vida de los Ardlay, según vaya recordando sus primeros 20 años de vida con ellos. Como es un trabajo en proceso, pido más paciencia aún. No creo que sea demasiado larga. Calculo no más de 12 partes, aunque iré modificando las cosas según se vaya desarrollando la trama.
