"El bar"

Hola hermosas lectoras! Estoy super contenta de estar un viernes mas con ustedes, trayéndoles un nuevo capitulo de esta historia que espero les este gustando. Quiero agradecerles por el apoyo que eh tenido con este nuevo proyecto, mil gracias lindas.

Serena Princesita Hale

MartuSobrino

Muchas gracias por sus lindos reviews hermosas, me han dejado con una sonrisa enorme!

Ahora si, disfruten de este capi!

Renesmee POV.

Un par de toques en la puerta de la biblioteca hicieron que volteara abruptamente, cerré el libro con una sola mano y la puse en el estante.

-Pase-respondí mientras caminaba para encontrarme con la sirvienta, quien aún tenía puesto el impecable uniforme.

-Señora Black, la cena especial que pidió esta lista, ¿gusta que la sirva?-pregunto con una suave voz, aunque no era joven tengo que admitir que es eficiente, justo como las demás, algo que me alegra en verdad.

-No, esperare a que mi marido llegue a casa. Puedes retirar a descansar, yo serviré la cena, gracias por tu ayuda-sonreí de forma comprensiva, sabía que habían tenido un día pesado y aun mas después del pedido que les había hecho a última hora.

-Compermiso señora-dio media vuelta después de finalizar la última palabra, después de unos segundos escuche la puerta cerrarse haciendo el menor ruido posible. Volteé hacia el estante y inhale profundamente, desvié la mirada para ver el reloj que colgaba en la pared, Jacob está a punto de llegar.

-Hoy será una noche especial-susurre mientras esbozaba una sonrisa, mis tacones hicieron eco en la gran biblioteca mientras daba grandes zancadas para salir y dirigirme hacia las escaleras.

Esta vez decidí hacerme un peinado recogido, manteniendo mis rizos, un vestido blanco de una sola manga y accesorios plateados pero que nunca le quitaron el protagonismo al vestido. El maquillaje solo consistía de unos labios rojos y varias capas de mascara para pestañas, aplique un poco de rubor en mis mejillas y después de poner un poco de perfume en mi cuello me observe en el espejo. Asentí al estar satisfecha con el resultado final y salí de mi habitación directo al comedor donde lo decore de una manera romántica, con velas y unas rosas rojas. Me encargue de que la luz fuera tenue en el área del comedor, regrese a la cocina y coloque los platos y la comida, que aun estaba caliente, en el centro de la mesa. Levante mi mano izquierda para ver la hora en el reloj que me había puesto minutos atrás, Jacob estará por llegar en poco tiempo, y para darle la sorpresa salí por la puerta principal para esperarlo al pie de las escaleras.

Observe el cielo oscuro, no había estrellas ni podía ver la Luna gracias a las nubes, estaba segura que esta noche caería una tormenta, abrace mi cuerpo con ambas manos al sentir el frio en mi piel, y el suave aire golpeando mi cuerpo suavemente. Pero eso no detuvo mis intensiones de esperar a mi marido, y teniendo la vista fija en el único camino que daba a nuestra casa, los minutos pasaron…y pasaron…y pasaron. Solté un suspiro y antes de adentrarme a la casa volteé para echarle un último vistazo a aquel angosto camino, esperando ver el auto de Jake, cosa que nunca sucedió.

Un escalofrió recorrió mi cuerpo completamente, mi vista se encontraba fija en las escaleras que daban al segundo piso, no quería darme por vencida tan rápido, tenía que confiar en la palabra de Jake, en que en verdad quería arreglar las cosas. Con ese pensamiento y con la poca esperanza que me sobraba me senté en el segundo escalón de la escalera, trague saliva con dificultad al darme cuenta como un nudo en mi garganta aparecía. Suspire cansada antes de levantar mi mano para ver la hora, esto ya iba mas allá de un retraso, mordí mi labio inferior, ¿y si le llamaba? Negué con mi cabeza y en mis labios una sonrisa se posiciono, ya sabía perfectamente lo que sucedería, no me contestaría así que, ¿para qué intentarlo?

Rasque mí frente a causa de la desesperación, y con una mano en la cintura me acerque al comedor, que seguía con las velas encendidas. Observe la mesa lista para aquella cena romántica que se supone, a esta hora, estaríamos en el postre, o solo disfrutando de esa botella de vino tinto, trague saliva al mismo tiempo que tomaba la botella entre mis manos. Pase la lengua sobre mis labios y me senté en la silla más cercana, tome la copa y sin pensarlo más me serví un poco de ese vino que tanto le gustaba a Jake, para ser honesta era delicioso.

-No me hagas esto Jake, no otra vez-rogué en voz baja antes de tomar otro sorbo.

Otro par de copas le siguieron con la esperanza y paciencia al límite, es que, ¡había sido una estúpida en creer en él! Sabía perfectamente que vivía para el trabajo y nada más, además del hecho que ya me había sucedido lo mismo un par de veces, solté un suspiro al que le sobraron palabras para describir lo decepcionada que estaba. Un par de lágrimas salieron para recorrer mis mejillas, esto ya no volvería a suceder, ya no estaría aquí para ver como Jacob se burlaba de mí cuantas veces quisiera, tome el último sorbo de la tercera copa y me levante de la silla. Rápidamente tome mi abrigo y mi bolso y salí mientras buscaba las llaves de mi auto en la bolsa, me subí en él y encendí el motor al segundo siguiente.

No tenía la menor idea hacia donde me dirigía, solo quería ir lo más lejos que pudiera de mi hogar, quería olvidarme de lo que Jacob había ocasionado en mi, y aunque ya había sentido lo mismo varias veces, aun no podía acostumbrarme de este sentimiento. Era la soledad, y aunque mi marido no lo hiciera con intención, no me sentía deseada o amada por él, el trabajo estaba de por medio, siempre lo estuvo y en esto yo salía sobrando. Acelere haciendo que el motor rugiera y seguí mi camino por la carretera, las luces de las calles se colaban de vez en cuando iluminando mi cara. Y con ese pensamiento de querer olvidar lo ocurrido hace minutos atrás, unas luces captaron mi atención, era el nombre de un bar iluminado con luces que aparecían y desaparecían.

Me estacione justo enfrente e inmediatamente un valet parking corrió hacia mí y abrió la puerta del piloto para que yo pudiera salir. Aun con la mirada fija en el bar le entregue las llaves a aquel joven y camine dando cortos pasos, acercándome a la puerta con cierta inseguridad, baje mi cabeza en cuanto mis manos tocaron las elegantes puertas de vidrio. Habían sido pocas las veces que había ido a un bar y todo esto quedo atrás en cuanto me convertí en la señora Black, estaba a punto de darme la media vuelta y salir de ese lugar, pero mi vocecita interna lo impidió.

-Vamos Renesmee, quieres olvidar, ¿no es así? Este es el lugar perfecto para hacerlo, unas copas no te harán nada mal…lo necesitas-

Y obedeciendo a esa vocecita abrí la puerta para entrar al bar, la decoración era algo modesta, las paredes estaban pintadas de un café claro, con algunos sofás en el centro del bar con un color café, más oscuro para darle contraste el lugar. Ahí algunas personas ya se encontraban sentadas, charlando y riendo de vez en cuando mientras sostenían un Martini en la mano, volteé mi vista hacia el lado derecho, donde en una esquina se encontraba un piano de color rojo. Al parecer este lugar era exclusivo, ya que solo podía ver a mujeres con vestidos formales, y a los hombres vestidos de traje y corbata, por lo menos había elegido un bueno lugar para desahogar mis penas. El piso era de mosaico negro con algunos brillos, y la música era algo suave y elegante, pero baja para que los clientes pudieran charlar a gusto. Seguí caminando para dirigirme hacia la barra, donde un barteneder vestido impecablemente de camisa blanca de manga larga, con un chaleco negro y moño, se encontraba preparando una bebida. Exhale mientras tomaba asiento en la silla alta de en medio, el bartender me sonrió y después sirvió la bebida para que un mesero se la llevara después.

-Buenas noches, ¿Qué bebida quiere que le prepare?-

-Un Martini por favor-

-En seguida-respondió antes de comenzar a tomar todo lo que necesitaría para servirme aquella bebida.

-Aquí tiene-me entrego la copa minutos después.

-Gracias-la tome y rápidamente tome un sorbo, me tome el tiempo para disfrutar la bebida, pedí otro Martini mas cuando me finalice el primero y después pedí otro más, hasta que perdí la cuenta pero no me importo.

Mi celular comenzó a vibrar dentro de mi bolsa haciendo que saltara ligeramente, con un poco de dificultad logre encontrar mi celular, vi el nombre de Jake en la pantalla junto con el número de teléfono. Estuve a punto de contestar pero me detuve justo antes de presionar le botón, la llamada se perdió pero en seguida comenzó a vibrar nuevamente, ¿ahora se preocupaba por mi? Tome mi Martini aun observando el celular y me tome la bebida de un solo sorbo antes de meter el celular en la bolsa, ahora era yo la que no quería ser interrumpida.

-Otro por favor-le pedí al bartender.

(Play: Me & Mr. Jones de Amy Winehouse)

Gracias al bajo volumen de la música logre escuchar unos pasos acercándose cada vez más, baje mi mirada hacia el bolso, que se encontraba en la silla cerca de mí, y de la nada unos zapatos negros, impecables, aparecieron. Me mantuve observándolos por unos segundos antes de levantar la vista para darme cuenta que, justo como los demás, también tenía puesto un pantalón negro, donde sus manos se encontraban dentro de sus bolsillos, pude ver que en su mano izquierda llevaba un reloj de oro, también llevaba puesto un saco negro, y una corbata del mismo color. Mi corazón comenzó a palpitar rápidamente cuando llegue a su rostro, era un joven, su piel era pálida, sus carnosos labios tenían el color de una manzana, podía ver lo suave que era. Su nariz era muy fina, inhale profundamente cuando llegue hasta sus ojos, eran verdes, pero había algo mas, eran tan profundos, sentía que su mirada podía llegar a mi alma, sus cejas pobladas hacían su mirada aun más interesante. El cabello de aquel chico era café, se veía claramente que tenía un cuidado especial, ya que brillaba gracias a la tenia luz que había en el bar.

-¿Me permitirías invitarte un trago?-pregunte con una voz dulce pero a la vez ronca, apreté mi mandíbula, no solo él era atractivo, su voz lo hacía aun más atractivo e interesante.

-Justo acabo de pedir uno, gracias-respondí de forma cortante antes de voltear hacia el estante donde se encontraban todas las bebidas.

-Un whisky a las rocas, y cargue la bebida de la señorita mi cuenta-le dio las instrucciones al bartender con una sonrisa, mordí mi labio inferior tratando de disimular aquella sonrisa que estaba a punto de escapar de mis labios.

-Pero que mal educado soy…-siguió la conversación conmigo,-permíteme presentarme, me llamo Alec…Alec Vulturi-extendió su mano hacia mí.

-Renesmee…-me calle por unos segundos, ¿Por qué dudaba sobre mi apellido?,-Black-estreche mi mano con la suya, él la tomo suavemente, pero no conforme con eso, acerco mi mano hasta sus labios y le dio un corto beso antes de dejar mi mano libre.

-El nombre perfecto para una bella dama-tome la copa del Martini y con nerviosismo la lleve hasta mis labios para tomar un sorbo,-a la que, me parece, viene sola-se sentó para seguir con la conversación.

-¿Eso está mal?-pregunte de forma retadora viéndolo a la cara.

-En esta ocasión no-dijo antes de tomar un sorbo de su propia bebida,-no hubiera tenido la oportunidad de acercarme a ti, no te había visto por aquí-afirmo con el ceño fruncido.

-¿Cliente regular?-pregunte alzando una ceja.

-Mi lugar favorito para tomar un whisky a las rocas después de un día estresante de trabajo-

-Entiendo-aleje mi vista.

-Pero tu aun no has respondido, ¿Qué te trae por acá?-abrí mi boca para contestar pero Alec levantó el dedo antes de hablar,-una decepción, ¿quieres desahogarte de aquel que te rompió el corazón?-

Abrí mi boca a causa de mi nerviosismo, no sabía que contestar y el hecho de que se encontraba tan seguro y tan firme en sus palabras, causo que me dejara sin voz a mí. Solo pude asentir suavemente mientras tomaba otro sorbo, Alec solo soltó una risita y pidió otro trago.

-No puedo creer como alguien puede hacerle eso a una mujer tan bella como tú. Si yo fuera ese hombre-se acerco hacia mi oído,-no estarías en este lugar, es más, no te dejaría salir de mi habitación-susurro.

-Pero no lo eres y discúlpame pero tengo que irme-tome mi bolso rápidamente y con manos temblorosas, pero antes de que pudiera alejarme de aquel extraño, su mano me tomo a la altura del codo haciendo que me detuviera.

-Espera, quisiera volver a verte, eres una mujer muy hermosa como para no volverte a ver y la ciudad es muy grande para intentar buscarte-me zafe de su agarre y le mostré mi mano izquierda.

-Lo siento pero llegas tarde, soy casada-

Alec me dedico una sonrisa torcida.

-Si ese no es problema para ti, para mi mucho menos-tomo mi muñeca haciendo que abriera mi mano,-toma, esta es mi tarjeta, llámame cuando desees-

Del bolsillo de su saco sacó un billete y lo dejo en la barra antes de irse hasta que lo perdí de vista, sentí la tarjeta en las yemas de mis dedos, eso fue lo único que hizo que alejara mi vista. Alec Vulturi, vicepresidente de la empresa Vulturi, camine lentamente hacia la salida, esa empresa estaba en las más importantes del país y eso que no la habían explotado en su totalidad. La empresa Vulturi era la empresa hotelera más importante que podría haber, ahí recurrían empresarios dispuestos a invertir en cualquier proyecto que la empresa tuviera en manos, incluso cuando solo tenían la idea o algunos puntos. Los que invertían en las propuestas de la empresa Vulturi sabían que tendrían ganancias millonarias, ellos nunca se equivocaban, sus proyectos siempre terminaban siendo un éxito, y justo ahora había conocido al vicepresidente. Con ese pensamiento subí al auto para regresar a casa, aunque el rostro de Alec Vulturi se quedo en mi mente.

¡Ahhh! Ya salió nuestro querido Alec, aunque un poco diferente ya que esta vez será humano, pero no crean que será diferente al carácter y personalidad del vampiro que estamos acostumbrados lindas.

Espero que les haya gustado este capitulo y si es asi, ya saben que un review es mi mejor paga, además de que me animan a seguir adelante y su punto de vista o criticas constructivas me ayudan mucho con la historia.

Ahora la pregunta es, ¿Qué hara Renesmee? ¿Le llamara a Alec? ¿Su matrimonio mejorara? Si quieren saberlo entonces no se pierdan ni un capitulo. Gracias por tomarse el tiempo de leer este capi hermosas!

Espero actualizar la siguiente semana, el viernes. Cuídense mucho lindas, besos y ya saben que las quiero mucho!