"Cena"

Hola hermosas lectoras! No me maten porfavor! Ya se que me tarde demasiado en actualizar y una disculpa no estará de mas después de las tantas que les eh dado anteriormente. Pero ya estoy de nuevo aquí con un nuevo capitulo! Como siempre, quiero darle las gracias a todas las hermosas lectoras que me han estado apoyando con esta historia, mil gracias.

Martina

Litvamp7

Wilmari Santana

C.L. Hernandez

Muchísimas gracias por dejar su review, no saben como me animaron y me impulsaron para escribir este capi.

Ahora di, disfrútenlo!

Renesmee POV.

Volví a meter la prenda en la bolsa con cansancio y aburrimiento, suspire y aun sentada en el piso, vi a mi tía Alice a la que, sin duda alguna, le encanto la idea de ir de compras. Sus ojos brillaban de alegría mientras decidía que prenda de la bolsa tomar y su sonrisa se engrandecía cuando observaba detenidamente la misma, pero mi ánimo hoy era totalmente diferente. Está claro que el gusto por las compras y la ropa lo había heredado de mis tías, a quienes el centro comercial era como el paraíso en la Tierra. Pero esta ocasión era diferente, no necesitaba ir a esa esperada cena, simplemente no quería, pero no había forma de rehusarme, por una u otra razón terminaría haciendo acto de presencia, así que no tenia caso el seguir peleando. Me levante del piso ante el último pensamiento y solo basto retroceder un paso para quedar sentada en la esquina de mi cama.

-Esto es absurdo ti-me queje,-aun no puedo creer que tena que ir a esa dichosa cena-rodé los ojos.

-Pues déjame decirte que no tienes opción-tomo una blusa y la observo detenidamente,-o vas solo por acompañar a Jacob o vas por el hecho de ser la única heredera del presidente y quien, por lo tanto, tendrá el mayor porcentaje de acciones-finalizo esta vez viéndome a los ojos.

-Sí, sí, ya se-bufe,-pero yo no sé nada de negocios, esta cena será la más aburrida de toda mi vida-proteste.

-Si no sabes de negocios está bien, tu sabes que Jacob y tu padre se encargaran de eso-me dio una solución mi tía, algo que no me convencía en absoluto, al contrario, me hizo sentir inferior.

-¿Y qué hare yo? ¿Asentir y sonreír solamente?-negué con mi cabeza,-solo quedare en ridículo ante los demás-

-Tienes que verle el lado positivo a la situación sobrina-trato de animarme mi tía, se levanto y camino hasta la cama,-lucirás espectacular con ese vestido, además estoy segura que no todo será acerca de negocios-

-Gracias por los ánimos tía, solo espero que no sea tan malo como espero-

Y aunque cambiamos de conversación y trato de distraerme con cualquier cosa, después de que mi tía se fue, siempre regresaba ese pensamiento, y para mi mala suerte las horas y minutos parecían correr más rápido, aumentando mi enojo y nerviosismo. Suspire con los ojos cerrados y espere unos segundos para abrirlos y dirigir mi mirada hacia el vestido, mi tía lo había dejado en la cama, junto con los accesorios y las zapatillas. Yo me había rehusado a sacarlos de la bolsa, y aunque admito que es hermoso, ni yo lo había elegido, le había dejado eso a mi tía quien gustosa me ayudo a escoger el vestido adecuado, además de que yo no sabía que usar en este tipo de reuniones, lo contrario a mi tía. Ella ah estado en algunas cenas similares, ya que mi abuelo le había heredado acciones iguales a todos sus hijos, Alice, Emmett y Edward, el ultimo tomando el puesto de mi abuelo como presidente de la empresa, después de tomar la decisión de retirarse, y por lo tanto tenia mas conocimiento que yo.

Apreté mi boca reteniendo la ira que recorría mi cuerpo, si, me estaba portando como una niña caprichosa, pero estar en una cena hablando de negocios, no era lo mío. Apartando el hecho de que yo terminaba quedando como una simple chica con cara bonita, no podía involucrarme en una conversación en la que no sabía de que estaban hablando. Pero después de ver el reloj por segunda vez, me resigne y termine caminando con paso cansado hacia el baño, donde tome una ducha y después de ponerme mi bata y una toalla en el cabello, me posicione frente al espejo. Pase mi lengua por los labios, antes de comenzar con el maquillaje, un smoky eye no estuvo de mas, pero no sería el protagonista de la noche. Quise darle un poco de misterio a mis ojos, lo que robaría las miradas seria mí vestido, largo y ajustado, el cual dejaba ver mi esbelta figura. Tenía unas mangas, de esa tela delgada y transparente, que se ondeaba con la más ligera brisa, haciendo mi caminar más elegante y despreocupado, la pedrería le daba un toque más formal, pero no rebasaba el límite del exceso, en la parte de la cintura había un diseño con la misma, dándole la forma de un cinturón. No escotes, ni exceso, pero no hacía falta nada de eso para que me viera moderna, y como toda una esposa joven, termine de ponerme las zapatillas y me detuve frente al espejo. El peinado fue algo de lo que no me podía olvidar, era recogido pero desordenado, algunos rizos a los lados no estuvo de más, eso le daría un toque divertido a mi persona y mi vestuario.

-No quiero ir-me quede una vez más, teniendo la esperanza de que tal vez si lo decía varias veces podría hacerse realidad, pero aleje mi vista en cuanto supe que no seria así.

-Lista, porque…-volteé rápidamente hacia la puerta en cuanto escuche la voz de Jacob, quien se calló en cuanto me vio. Se adentro a la habitación lentamente, sin despegar la vista de mi, su boca se encontraba medio abierta,-mi amor, te vez hermosa-dijo después de unos segundos.

-Te dije que no te decepcionaría-

-Nunca lo haces-camino hacia mi dando grandes zancadas para depositar un beso en mi frente,-me arreglare lo más rápido que pueda, vamos retrasados-hablo para sí mismo mientras veía el reloj.

La espera no fue larga, un baño rápido, traje negro, al igual que la corbata, camisa blanca, un peinado demasiado profesional y un poco de perfume, fue suficiente para que en cuestión de minutos nos encontráramos bajando las escaleras hacia la entrada. Jacob me ofreció su musculoso brazo y así caminamos hasta que el chofer abrió la puerta trasera del auto, entre yo primero y Jacob quedo a mi derecha.

No tenia ánimos de hablar y opte por ver el paisaje desde la ventana, la ruda mano de Jacob sobre las mías hizo que reaccionara volteando rápidamente, fruncí mi entrecejo, si, aun me encontraba molesta con él. Deslice mi mano y me cruce de brazos sin decir una palabra, pero Jacob no se rindió y dejo su mano en mi pierna, negué suavemente con mi cabeza.

-Aun estas molesta-afirmo silenciosamente.

-No hace falta discutirlo otra vez-respondí rápidamente,-me molesta estar en esta posición, es tan incomodo-

-Solo será esta vez Renesmee-tomo mi mentón para obligarme a verlo, pero me rehusé-Renesmee-esta vez su voz se escucho más fría, tomo mi mentón con un poco de fuerza y esta vez no pude hacer nada más que verlo,-eres mi esposa también, se que seré la envidia de todos en cuanto me vean entrar al lado tuyo-

-Pues querido, esta es la primera vez en mucho tiempo que salimos juntos-

-Reclamos no por favor-

Suspire con frustración y tape la cara con mis manos.

-Lo mejor será que dejemos esto así-

El viaje solo duro unos minutos después de nuestra pequeña discusión, la que trate de evitar, y al parecer los dos queríamos lo mismo, ya que el auto se quedo en completo silencio después de mis últimas palabras. Trague saliva cuando el auto se detuvo, el chofer salió y rápidamente abrió mi puerta, ayudándome a salir del mismo y después corrió hacia la puerta de la derecha donde Jacob salió y se abotono el saco con disimulo. Observo el restaurant por unos segundos antes de caminar hacia mí para que volviera a tomar su brazo, y así caminamos hacia la entrada, mis tacones hacían eco en el mármol, lo cual me recordó al pent-house de Alec, pero este no era el momento de recordarlo a él. En la entrada se encontraba una hermosa mujer con una falda negra al igual que su saco y sus tacones, su pelo rubio caía por sus hombros y los ojos verdes que veía a través de sus lentes combinaban perfectamente con esos carnosos labios pintados de rojo.

-Señor y Señora Black-dijo con una sonrisa,-por aquí por favor-

La joven nos dio la espalda y camino con sus altas zapatillas, un personal del restaurant abrió las puertas para dejarnos entrar, Jacob coloco su mano en mi espalda baja, volteé a verlo solo por unos segundos y el solo me dedico una sonrisa, mostrando su blanca dentadura. El restaurant se encontraba solitario, una suave y relajante música apenas podía escucharse, no había meseros, ni gente, todas las mesas se encontraba vacías, excepto una. La gran mesa en el centro del restaurant estaba ocupada por dos personas, mi padre y madre, quienes sonrieron cuando nos vieron caminar hacia ellos, en cuanto la chica nos sonrió y se dio media vuelta para regresar a su lugar, yo camine hacia mis padres.

-Hija, te ves hermosa-dijo mi mamá después de darme un beso en la mejilla y un abrazo.

-Gracias mamá, el verde te sienta muy bien-le devolví el cumplido lo cual hizo que se sonrojara,-hola papá-

-Mi niña, ¿Cómo has estado?-pregunto deshaciendo el abrazo.

-Bien-mentí dando unos pasos hacia atrás, dejando que mi esposo rodeara mi cintura,-¿y los dichosos asociados? Pensé que ya estarían aquí-mire a mi alrededor extrañada.

-No deben de tardar, al parecer también tuvieron un retraso a causa de su agenda en la empresa-

(Play: All about us de Jesse McCartney)

Di un paso hacia el lado izquierdo y exhale, sabía que en cualquier momento estarían aquí, y no me equivoque, los tacones de aquella chica hicieron eco junto con otro par de tacones, y por el mismo camino donde hace solo unos minutos Jacob y yo caminamos para llegar a esta mesa, la sonriente chica camino hacia nosotros dando grandes zancadas, detrás de ella, una cabellera rubia apareció, un vestido dorado y largo daba la sensación de que su cuerpo solo había sido pintado por ese color, sus hombros descubiertos y pálidos fueron una de las distracciones para cualquier hombre. Su cabello rubio también se encontraba recogido dejando ver unos aretes largos que se movían con el despreocupado caminar que, aunque tenía tacones altos, parecía que eso no le molestaba.

Detrás de ella otra cabellera rubia se hizo presente, pero esta vez provenía de un hombre, quien veía fijamente a la rubia chica que caminaba delante de él, sonrió y parpadeo antes de acomodarse el saco y apretar un poco el folder negro que sostenía en la mano izquierda. Su traje negro y camisa blanca, como todos los caballeros aquí presentes, solo que él no tenía puesto ni un moño, no corbata, solo tenía desabotonado el segundo botón de su camisa, al parecer en este tipo de cena esto era algo un tanto atrevido, pero él se arriesgo y para ser sincera, se veía muy bien. El siguiente también era un hombre, al parecer mayor que el chico de cabellera rubia, su cabello hasta los hombros brillaba con la luz, perfectamente peinado y sin un cabello fuera de su lugar, camino hacia nosotros con una sonrisa y un brillo en sus ojos. El traje negro al igual que su camisa pudo haber pasado desapercibidos si no hubiera sido por la corbata carmesí al igual que su pañuelo de bolsillo.

Inhale profundamente, mi cuerpo comenzó a temblar, sabía perfectamente quien era ese hombre y la chica rubia, si esto era cierto ahora si creería que el mundo es un pañuelo, baje mi mirada y sin estar lista para lo que venia volví a levantar mi mirada. La sangre se me bajo hasta los pies cuando su cabello castaño apareció, caminaba detrás de su padre dando grandes zancadas, sus pestañas solo un poco rizadas y largas cubrían el verde color de sus ojos, escondían esa profunda mirada que me debilitaba las piernas. Al igual que el chico de cabello rubio, sostenía un folder negro, disimuladamente lo observe, un traje negro y camisa blanca, el que no fue sorpresa para mí, pero, a excepción de los demás, el llevaba un moño negro y un pañuelo en el bolsillo izquierdo de su saco. Me sostuve fuertemente del brazo de Jacob y trate de regular mi respiración que cada vez se hacía más rápida y escandalosa, hasta ese entonces envidie a Alec, verlo tan pacifico hizo que todo diera vueltas alrededor de mi. Aun no nos había visto y mucho menos a mí, pero tenía miedo de lo que pudiera suceder en esa cena, tener a Alec y Jacob en el mismo lugar era de por si mucha presión, charlando y sentados en la misma mesa, ¡era un locura!

-¿Estás bien Renesmee?-susurro Jacob refiriéndose a mi respiración.

-Si, solo un poco nerviosa-respondí, me reí de mi misma, ¿un poco? ¡Moría de nervios!

La mano de Alec se dirigió hacia el botón de su saco y ahí lo mantuvo durante el recorrido hasta la mesa, los cuatro quedaron en una línea horizontal, en sus respectivos asientos y nos vieron con una sonrisa, excepto Alec, quien en cuanto llego a la mesa abrió el folder que tenía en la mano.

-Edward-extendió la mano el mayor de los cuatro,-me da mucho gusto conocerte en persona, te pareces mucho a Carlisle-

-El gusto es mío Aro-contesto mi padre tomando la mano de Aro,-te presento a mi esposa Isabella-

-Un placer señora, con todo el respeto Edward, pero tu esposa es muy hermosa-tomo suavemente la mano de mi madre y deposito un suave beso en ella, en cuanto dijo ese comentario todos soltaron una pequeña risita, excepto yo.

-Muchas gracias-contesto educadamente mi madre.

-El es Jacob, mi yerno-

-Mucho gusto-saludo Jacob saludándolos a todos.

-Y por ultimo pero no menos importante, mi princesa, mi única hija Renesmee Cullen-

Sonreí tímidamente y mientras mi padre decía eso Alec cerró el folder y levanto la mirada lentamente, lo que hizo que mi sonrisa se borrara en ese mismo momento, en cuanto mi padre termino de presentarme a sus futuros asociados, Alec clavo su mirada en mi. Aun viéndome fijamente Alec dejo el folder en la mesa, y no alejo su mirada cuando su padre me saludo de la misma forma que a mi madre, aquel rubio solo se limito a tomar mi mano suavemente. Jane me saludo y me sonrió con complicidad, sabía que me recordaba y también que debía salir con ella a tomar un café, así que yo también le correspondí y sonreí abiertamente. Trague saliva cuando Alec extendió su mano hacia mí, yo solo la observe y dude en tomarla o no, pero bien sabía que tenía que disimular, pretender que no lo conocía, y claro que sería de mala educación no tomarla. Con mi mano temblorosa tome la suya y el la apretó solo un poco para llevarla hasta sus labios, causando un cosquilleo que recorrió mi cuerpo entero, aun sin despegar sus labios de mi mano se atrevió a verme de manera picara.

-Es un placer-susurro cuando aleje mi mano.

-El placer es mío-respondí desviando mi mirada hacia su padre.

-Por supuesto-murmuro, abrí un poco mis ojos, pero nadie noto cuando lo hice ni tampoco escucharon las palabras de Alec,-un gusto Jacob-pase una mano por mi cuello cuando estrecharon sus manos.

-Ahora que ya nos presentamos, ¿Por qué no nos sentamos y pedimos una botella de vino?-dijo Aro sonriente.

-¿No cree que deberíamos de hablar sobre negocios primero?-Jacob le recordó a Aro el porque estábamos todos aquí.

Pero Aro solo soltó una risita y hizo un ademán con la mano, tomándole poca importancia al asunto.

-Primero ay que disfrutar de una deliciosa cena y después podremos hablar de eso-relaje mis facciones cuando Aro dijo eso, ahora sabia de donde Alec lo había heredado.

-Compermiso, yo…iré al tocador-me retire caminando lo más rápido que aquellos tacones me lo podían permitir.

Me sostuve del lavamanos más cercano, eso había sido…negué rápidamente, aun no podía creer que todo eso paso hace apenas unos minutos, en aquella mesa, lleve mi mano izquierda hacia mi frente y quite un poco de sudor. De todas las empresas a las que mi padre se pudo haber asociado, escoge justamente la empresa Vulturi, la empresa del futuro heredero de Aro Vulturi, me observe por el espejo, esto era demasiado, no podía estar más aquí. Mordí mi labio inferior y me aleje del enorme espejo, no había opción, tendría que estar aquí, viendo a Alec, aguantando sus miradas picaras y la sonrisa irónica que tanto lo caracterizaba.

-Basta Renesmee, tú te metiste en esto, ahora afronta las consecuencias-me dije a mi misma tratando de tomar fuerzas no se de que parte.

(Play: What is it about men de Amy Winehouse)

Me di media vuelta mientras parpadeaba, pero lo que vi venir fue más rápido que el querer abrir mis ojos para ver qué era lo que sucedía, gemí cuando mi espalda choco con la pared de mármol y con el miedo a caer tome lo primero que pensaría me daría la seguridad de que quedaría de pie. Lo primero que vi fue una camisa negra, y ese moño negro lo que hizo que negara con cansancio, alce mi vista y Alec se encontraba frente a mí con una sonrisa, ambas manos se encontraban al lado de mi cabeza.

-Así que eres una Cullen-hablo con seriedad,-eso es algo que…lo tenias muy bien oculto-

-No tengo porque estarte diciendo cada detalle de mi vida-trate de quedar lejos de él, pero sus manos no se movieron un segundo, me impidieron el paso para quedar libre de él. El solo me vio por unos segundos antes de bajar la cabeza y hacer un sonido con su boca en forma de negación.

-No, pero esto es algo importante-se alejo de mí repentinamente.

-Bueno, ya lo sabes-dirigí mi mirada hacia la puerta,-ahora debo regresar a la mesa-

-No tan rápido-me tomo por el brazo a la altura del codo,-apuesto a que tu esposo no te dijo lo radiante que te ves esta noche-susurro en mi oído.

-Tal vez si lo hizo-mi respiración volvió a traicionarme, mostrando mi nerviosismo.

-Sí, pero no de esta manera -entre abrí mi boca pero Alec me interrumpió,-de esta manera tan seductora que te pone nerviosa, con este tono de voz con el que quisieras entregarte por completo-dijo mientras caminaba alrededor de mi, cuando quedo atrás de mí, me tomo por la cintura,-¿o me equivoco?-me acerco aun más hacia él.

-Este no…-volvió a callarme, me dio media vuelta a modo que pudiera verlo a los ojos, y puso su dedo índice en mi boca.

-¿Por qué no te dejas llevar como lo hiciste aquel día?-me pregunto, poco a poco se acerco para depositar un beso en mi cuello.

-Claro que no, afuera esta nuestra familia, mi esposo-

-Y eso lo hace aún más interesante-de un segundo a otro me encontraba sentada en el lavamanos,-hay que arriesgarnos-

Y sin que pudiera responder estampo sus labios en los míos de forma salvaje, y aunque le golpe el pecho en repetidas ocasiones fue en vano, ya que su mano recorriendo mi pierna hasta llegar a mi mulso me debilito. Olvide todo lo que sucedía a nuestro alrededor, solo sentía sus besos en mi cuello y sus manos en mis piernas, no sé cómo pudo llevarlas debajo del largo vestido, en un acto involuntario mis manos apretaron sus hombros y arque mi cuello para que siguiera besándome. Y estoy segura que esto hubiera llegado tan lejos como Alec hubiera querido, pero el eco de unos pasos por el pasillo hizo que lo alejara rápidamente.

-Alguien viene-susurre con la respiración agitada,-puede ser alguien de nuestra familia-

-¿Y? Le puse seguro a la puerta, nadie podrá entrar-quiso acercarse a mí pero lo aleje nuevamente.

-No, no, no-quede de pie,-yo…te llamo-

Y sin más me aleje de ese hombre que en tan poco tiempo había encontrado la manera de hacerme perder el control con tan solo rozar las yemas de sus dedos en mi piel.

Regrese a la cena y me relaje al ver que había sido alguien de mantenimiento quien me había ayudado a alejarme de Alec, evitando que cometiera una locura, segundos después Alec regreso a la mesa y la cena continuo sin contratiempos. Algunas bromas y pláticas no estuvieron de más y la seriedad invadió el lugar cuando la cena termino y se enfocaron en los negocios, que, para ser honesta, sonaba muy bien y al parecer beneficiaría a las dos empresas.

-Perfecto, iniciaremos el plan cuanto antes-todos nos levantamos de la mesa y Jacob y Aro estrecharon sus manos.

-Esta será una fructífera asociación amigos-sonrió abiertamente Aro.

Y la cena termino así, todos estrechamos nuestras manos, como signo de satisfacción y también como despedida.

-Recuerda que me debes un café-me recordó Jane con nuestras manos estrechadas.

-No lo eh olvidado, ten por seguro que lo tendremos-ella solo asintió y se alejo de la mesa con el Demetri detrás de ella.

Alec fue el último en alejarse de la mesa, no sin antes verme con esos profundos ojos verdes, lentamente los alejo, tomo su folder y camino dándome la espalda detrás de su padre, justo como cuando lo vi venir.

Largo, largo capi esta vez, pero espero que haya sido de su agrado, ya saben que si lo fue un review es mi mejor paga, además de que me encanta saber su punto de vista o opinión acerca del capi o la historia en general. Una vez mas siento haberlas hecho esperar tanto tiempo hermosas.

Espero actualizar el próximo viernes, ya que finalmente estoy de vacaciones!

Cuídense mucho lindas, besos. Y ya saben que las quiero muchisisisisisimo!