Nada de Crepúsculo me pertenece, la historia es de Sthepenie Meyer y yo solo lo utilizo con fines de entretenimiento.
Summary: Secuela de pérdida en crepúsculo. Y de ese modo el león se caso con la oveja. ¡Qué oveja tan estúpida! ¡Qué león tan morboso y masoquista! ¿Qué hago resolviendo sus problemas?
Advertencia: Todos los personajes pertenecen a Meyer, excepto Hannah James, Danielle James y Charles.
Advertencia 2: Algunas frases originales del libro Amanecer aparecerán en la historia.
Parte XXV
Nunca mates una mosca sobre la cabeza de un tigre. — Proverbio Chino
Nunca en mi vida me había sentido, justo como en aquellos momentos. Era raro de por si que yo fuera la única humana que había logrado algo imposible, bueno aunque técnicamente eso nunca había sido imposible. Levante la vista de la carretera y pude observar como me adelantaba un lobo negro en medio de la espesura; Edward Cullen se enfadaría y mucho.
Aumente más la velocidad de la Ducati y un ensordecedor ruido, rompió el silencio de la solitaria carretera que conducía a la mansión de los Cullen, ahora que me aproximaba de nuevo a los vampiros, me pico el bichito de la inseguridad y también el del temor, me asustaba que al estar los tres bandos no se resolviera nada de esto, sino que se aumentara el problema.
Bueno, también me sentía un poco mortificada por que no había dicho toda la verdad a los Quileutes, aunque pensándolo bien, era mejor dejarle ese trabajo a Jacob Black, él tenia todo el derecho de informar sobre la situación cuando estuviera seguro que había improntado a la hija de su acérrimo enemigo, así que mejor le dejaba esa parte de la historia al lobo, por que de seguro no me creerían, cuando les dijera que la niña no era venenosa.
Tras un minuto en silencio, frene frente al porche, pero lo que no me esperaba, era la comitiva que me estaba aguardando. Lobos y vampiros me observaban como si acabara de atropellar un cachorrito, me quite el casco para observar mejor el panorama y no dudaba, que esto se pondría color de hormiga.
— ¿En que estabas pensando? —pregunto Edward enfadado.
Solté un suspiro de resignación, al menos no habría espectáculo que lamentar.
— Lo mejor para todos —conteste enfrentando su dura mirada—. ¿Crees que no me doy cuenta, que en cualquier momento puedo morir?
— ¿Morir? —inquirió estupefacto—. Nunca te pondríamos un dedo encima.
Me cruce de brazos y me baje de la moto, camine unos cuantos pasos y alce la vista para mirar a Edward, hasta ahora me daba cuenta cuan baja de estatura era.
— No lo digo por ustedes —musite para los dos—. Soy considerada una Cullen, un pie fuera de este terreno y se desatara una guerra.
— Parece que eso no te detuvo, para ir donde no debías —comento Edward con sarcasmo.
— Tengo buena noticias —revele y lance una mirada hacia atrás—. Si ya los escuchas, te ruego que todo salga bien, vienen con las mejores intenciones.
Sam y los demás miembros de la manada, aparecieron en su forma lupina en menos de lo que pensé; la cara que pusieron los demás no tenía precio, una humana había intervenido para que las diferentes magias coexistieran sin problemas.
Edward enfoco la vista hacia el lobo más cercano a Sam y luego arqueo una ceja, eso significaba que Paul debía estar rumiando las posibles maneras de acabar conmigo y mi particular insolencia. Jacob aulló para hacerse notar, Edward en cambio negó con la cabeza, ¿Por qué se demoraban tanto? Debía haber paz entre todos y no me importaba caminar sobre fuego para lograrlo.
— Eres una humana demasiado temeraria —dijo Edward rompiendo la tensión del momento—. Gracias por hacer esto por nosotros; solo ten cuidado de no volver a desafiar a Paul, estaría encantado de una excusa, para cobrarte esa muestra de altanería.
Esboce una sonrisa para nada arrepentida, me imaginaba que Paul debía estar muriéndose de ganas porque todo saliera mal y así poder restregarme en las narices, que mi intento por dejar de pelear, se había ido a la caneca de basura.
Jasper y Emmett tensaron sus músculos, mientras que los lobos que hacían guardia para los vampiros se tensaron como si les fueran a tomar una foto, la rigidez del momento se podía cortar con un cuchillo filoso, nadie se atrevía a pronunciar palabra alguna, como si la sola mención de algo produjera una pelea sin vuelta de hoja.
Un carraspeo suave rompió el ambiente y la mirada de todos, se concentro en la persona que acababa de llegar, Carlisle observaba todo, como si fuera un comisionado de asuntos exteriores de la ONU, la dureza de las posiciones de todos se relajo por un instante y los ojos del líder cayeron en mi, como única responsable del encuentro.
— Vaya —comento paseando los ojos entre los presentes—. Me parece que alguien cumplió con su cometido.
— De manera irresponsable —medio Edward con un tono serio—, pudo haberle pasado algo y al parecer eso no le importaba.
— Por ultima vez —dije apretando los dientes para no pelear—, no me iba pasar nada y deja tanta paranoia de tu parte.
— Por que no vas con los demás Hannah —dijo Carlisle para calmar los ánimos entre Edward y yo—, ya has hecho suficiente por nosotros.
Con una mirada de Carlisle cerré mi boca y fui por la moto, estaba un poco disgustada por que no me dejaban participar de un asunto importante, supongo que no me necesitarían, ya que el lector de mentes lo haría por si solo. Arrastre la moto lejos de la reunión y supuse que se alejarían unos cuantos metros para no hacerle estrés a la embarazada que debía estar que se moría de los nervios.
Un golpe suave en la parte trasera de la moto, me hizo detenerme, para cuando voltee la mirada, Seth empujaba con ambas manos la parte trasera de la Ducati, en silencio entramos el vehículo y con un sentimiento común, el de la frustración. Suponía que a él también Jacob lo había confinado a la retaguardia, en sus ojos estaba el dolor que lo trataran como si fuera un niño que no podía con asuntos de mayores, Seth había crecido mucho con respecto a otros jóvenes de su edad, él había pasado con éxito el dolor de la muerte de su padre y la transformación de algo, a lo que seguramente no estaba preparado.
— Edward prácticamente se volvió loco —comento Seth cuando terminamos de parquear la moto en el garaje—, no lo había visto así… desde la pelea con los neófitos.
Levante la vista y solté un suspiro, Edward era bastante desconcertante, ¿no debería estar alegre si yo me alejaba de ellos?, así no tendría por que preocuparse por mi, en un ataque posible de los Quileutes.
— ¿Qué sucedió? —pregunte con suavidad, mientras limpiaba con un paño el polvo de la moto.
— De todo un poco —contesto Seth con un gesto serio en el rostro—. Cuando Edward se dio cuenta que Jasper no se había enloquecido, no le tomo mucho para atar los cabos y darse cuenta que estaban planeando algo, llego del bosque furioso y llamándote como si hubieras cometido un crimen.
Solté una sonrisita, me imaginaba la expresión medio enloquecida de Edward cuando se dio cuenta del teatro y la furia que seguramente descargo contra Jacob y Jasper, seguramente muchos habrían estado desconcertados de la actitud del vampiro que hasta el momento había aparentando estar sereno.
— Espero que no haya indispuesto a Bella —dije fijándome en el joven lobo.
— Alice tuvo que cerrarle la boca —dijo Seth con humor—. Algunos pensaron que iba a descuartizar a su hermana, hasta que Jasper lo tranquilizo y le explicaron lo que estaba sucediendo, claro después de que te marchaste en la moto.
— Por eso me llamo con tanta urgencia —dije pasando el paño por la parte baja de la moto—. No tenía la necesidad de armar tanto drama.
— Le importas demasiado —comento Seth con una pose despreocupada—, casi le da un ataque de desesperación y si no fuera por Emmett, seguramente hubiera ido por ti a la reserva.
— ¿Emmett? —inquirí levantando ambas cejas.
— Él lo detuvo —respondió Seth con un movimiento vertiginoso de la cabeza—. Solo con la mediación de Carlisle, accedió a soltarlo y eso fue un poco antes de que llegaras. Alice lo tranquilizo con una visión de tu llegada.
Puse las manos en mi cadera y estaba un poco sorprendida por lo que había pasado en mi ausencia, sentía que había pasado días desde que me había despedido de Leah en la entrada y de haber visto a un Edward desconfiado impidiéndome la salida; sin decir una palabra, le coloque el forro a la Ducati y sacudí el polvo de la ropa, Alice no estaría feliz cuando viera mi pinta.
— ¿Lograste algo? —pregunto Seth con un tono tímido.
— Espero que si —conteste con vacilación—. Fue un poco difícil que algunos creyeran en mí, Paul se opuso mucho a mis razones.
— Paul es aun más cabezota que Jacob —dijo Seth soltando una carcajada—. Me imagino que trato de poner todas las trabas posibles.
— Se hubiera tirado encima de mi, si Sam no se lo hubiera impedido —comente haciendo que Seth apagara su risa con rapidez.
— Pero no te hizo nada, ¿cierto? —pregunto Seth auscultando mi cara en busca de alguna herida causada por el cuñado de Jacob.
— Claro que no —conteste negando con la cabeza—. Le debo una disculpa, después de todo me excedí en llamarlo monstruo.
— Creo que todos han excedido con esta situación —comentó Seth con un tono serio—. Bella va salir de esta y el bebe solo se va dedicar a llorar, no creo que una criatura tan pequeña vaya a exterminar un pueblo entero.
Como me gustaría que la gente pensara como Seth, así nos ahorraríamos muchos inconvenientes por el camino. Pase un brazo por los hombros de Seth, cuya altura estaba casi igual que la mía, la presencia del chico me relajaba de cierto modo, es que con él no había que estar mintiendo, tampoco aparentar que estabas feliz y muchos menos iba enojarse y entrometerse donde no lo habían llamado.
— ¿Sabes una cosa, Seth? – le pregunte mientras íbamos camino hacia la sala de los Cullen.
— Dime – contesto un poco sonrojado por tratarlo de esa forma.
— Me recuerdas mucho ha alguien – comente con un sonrisa.
— ¿Si? —pregunto con una sonrisa reluciente—. ¿Quien? ¿Tu novio?, sabias que Jacob lo insulta por lo menos diez veces en el día, Leah y yo tenemos casi una imagen de él.
—No, te pareces a mi hermano – conteste conteniendo la nostalgia—. Se llama igual que tú, de hecho sugerí y casi obligue a mi madre que utilizara tu nombre.
— Gracias —comento Seth sorprendido.
— ¿Cómo esta eso, que Jacob insulta a Charles? —inquirí una ceja.
Seth emitió un sonrisa traviesa y ambos nos detuvimos en el umbral de la sala, desde donde se podía ver a Rosalie pegada a la ventana, a Esme acariciando el vientre de Bella y a una Alice que parecía practicar yoga sobre el centro de la sala.
— Creo que le tiene un poco de envidia —revelo Seth con un aire de sabihondo—. Esta un poco celoso por que te vas a casar con él, de hecho alguna veces Leah le da un porrazo para que se calme, se vuelve un poco exasperante.
— Se le pasara —lo tranquilice—. Jacob pronto se va enamorar, lo que espero le alegre enormemente y se olvide de estar insultando a Charles.
— ¿Lo quieres mucho, verdad? —pregunto Seth con esa inocencia.
— La verdad, si —dije soltando un suspiro—; aunque a veces quisiera darle una tunda por majadero.
— Me refería a Charles —aclaro Seth apretando los labios para no reír.
— Niño listo —masculle aparentando enojo—. De no ser así, no estaría en estas y mucho menos hubiera aceptado su propuesta.
— La gente a veces se comporta de una manera rara —comento Alice abriendo sus ojos y fijando su vista en nosotros.
— ¡Hannah! —exclamó Bella con alegría y un poco de alivio.
Camine junto a Seth para reunirme con los únicos ocupantes del salón, Alice se levanto de su posición y me observo ceñuda, como si hubiera echado a perder el día, Esme me recibió con un abrazo amoroso y Rosalie ocupo su puesto de guardiana al lado de Bella.
— ¿Dónde estabas? —pregunto Bella con un tono de reproche.
Intercambie una mirada con Seth y él se hizo el desentendido.
— Fui a visitar a Charlie —conteste con una sonrisa—. Quería asegurarme que no había muerto de intoxicación, y también para saber como lleva todo esto.
— No lo lleva muy bien, lo se —comento Bella bajando la mirada al suelo—. De verdad, quisiera decírselo.
— Todo a su debido tiempo —comento Esme pasando su mano por mi cabello—. Me alegro que hayas llegado sana y salva, aun no puedo creer que manejes la motocicleta de Jasper. ¿Quieren algo de comer?
— Si no es mucha molestia —dijo Seth balanceándose en sus pies.
— Siempre es un placer —comento Esme yendo a la cocina en un paso demasiado humano.
Seth se sonrojo y fue a sentarse a un rincón de la sala, seguramente para no estorbar en el camino de Alice, la vampira menuda me observaba con un gesto ceñudo y en parte de evidente alivio, supongo que no le era nada gracioso tratar de mirar, si no había muerto en mano de los lobos.
— Suéltalo Alice —dije mirándola como se contenía—, o te vas envenenar con tu saliva.
— ¡Eres una irresponsable! —explotó Alice agitando sus manos con impaciencia—. ¡Irte a la boca de los lobos! No pensaste en los demás, si alguno iba dolerle si te morías, por más que quisiera salvar a Jasper y a Edward de su sed.
— Alice —reprocho Rosalie mirándola con enojo.
— Deja que se desahogue Rosalie –medie un poco divertida—. Lo mínimo que puede hacerme es quizás dejarme sin cabeza.
— Yo jamás lo haría —replico Alice haciendo un puchero.
Claro que ella jamás lo haría, tendría que enfrentarse al humor de Edward y seguramente a Jasper no le haría gracia pasar una eternidad sin su amada.
— ¿Te hicieron algo? —preguntaron Rosalie y Bella al unisonó.
— Nada —conteste negando con la cabeza—. Él único que recibió una bofetada fue Paul.
— En serio —dijo Seth sonriendo—. ¿Quién fue le valiente que lo hizo?
— El señor Ateara —respondí ahora sonriendo por el hecho—, dejo a todos un poco contrariados.
— ¿Qué hizo Paul? —pregunto Bella temblando un poco
Torcí los labios un poco, después de todo si tendría que ir a pedirle una disculpa, había estado alterada al igual que ellos, pero no era una excusa para tratarlo de ese modo.
— Bueno —dije en un tono vacilante—. Le dije que era un monstruo, admito que estaba un poco enfadada y eso conllevo, a que quisiera abalanzarse sobre mi y quizás destrozarme en el proceso de venganza.
— No se como se puede confiar en ellos —rezongo Rosalie componiendo un gesto de aversión—. Aun así los trajiste, expusiste la vida de Bella y el bebe, en cualquier momento pueden entrar y acabarnos a todos.
— No sucederá nada de eso —medio Alice soltando un suspiro—. Ellos están dispuestos a una tregua, creo que Hannah cumplió su cometido al ir hablar con los Quileutes.
— Sin embargo, ¿No te hizo nada? —me pregunto Bella con preocupación.
— No te preocupes —la tranquilice—. Los chicos evitaron que cometiera un posible asesinato, además Paul solo lo hizo para defender a su familia, él cree que estas haciendo algo malo y que nosotros apoyamos esa locura. Pero pronto entenderá que sus temores son infundados, que nada de lo que piensa es real.
— Ojala fuera tan optimista como tú —reconoció Bella intranquila.
— No te preocupes por lo que piensen los demás —medio Rosalie—. Si luchaste por este bebe desde el principio, no puedes rendirte ahora, no cuando esta a punto de nacer.
— Quizás esta tregua, permita que cacen —reconoció Bella lanzando una mirada hacia la ventana—. Edward necesita alimentarse.
Los bracitos de Alice me rodearon como si estuviera comprobando que esta viva, su cuerpo se sacudió un poco y me dio un poco de remordimiento por haber ido de manera impulsiva a donde los lobos, pero sabia que ellos no iban hacer nada que me lastimara, solo estaban actuando de la manera que creían correcta.
— Todo estará bien, Alice —dije dándole unas palmaditas en la espalda.
— No lo vuelvas hacer —me regaño con un tono de reproche y también de felicidad—; no creo volver a soportar que mi visión sea tan limitada, cuando estés corriendo peligro.
— Me vas hacer llorar —dije en un hilo de voz.
Varios pasos se escucharon en la sala y también las voces de los hombres del clan de los Cullen, los murmullos cesaron y al parecer todas las miradas se centraron en nosotras dos, mientras que las dos nos separamos entre sonrisas y por mi parte, limpiándome unas lagrimas que se me habían escapado sin querer.
— Gracias —dijo Emmett estrechándome entre sus brazos y alzándome del suelo.
— ¿Cómo les fue? —pregunte a nadie en particular, mientras el grandulón me ponía en el suelo.
Carlisle y Edward intercambiaron una mirada de tranquilidad, los dos vampiros tenían un gesto sereno, me mordí el labio inferior esperando una respuesta, mientras tanto Jacob entraba a la sala acomodándose los botones de la camisa soltando un suspiro, Leah ni siquiera se tomaba la molestia de entrar, no se sentía tan cómoda como Seth y Jacob entre los vampiros.
— ¿Qué sucedió? —pregunto Seth rompiendo el ambiente.
— Ve con Leah —contesto Jacob dirigiéndole una mirada de autoridad—, ella te contara todo.
— ¿Paso algo malo? —inquirí pidiendo una explicación.
— Por que no se lo cuentas Edward —dijo Carlisle esbozando una sonrisa—. Después de todo, ella hizo posible esto.
Carlisle se alejo de la sala y se dirigió hacia la cocina, donde seguramente Esme seguía cocinando para los lobos y unos cuantos humanos que éramos huéspedes de su casa. Edward dio unos pasos algo desganados hacia su esposa, Jacob continuo en el espacio que separa la entrada de la sala y me observaba de manera seria, Jasper y Alice se habían alejado, mientras que Emmett se había sentado a un lado de Rosalie, quien ahora le pasaba los dedos entre su cabello; daba la impresión que yo había ido a molestar un tigre demasiado tranquilo y ahora debía preocuparme por su reacción.
— ¿Y? —puntualice perdiendo un poco la paciencia.
— ¿Cómo le haces? —pregunto Edward observándome sobrecogido.
— ¿Cómo hago que? —pregunte extrañada y algo descolocada de sitio.
— Para pasar de villana a heroína —contesto Edward con perplejidad.
Contemple a Edward un poco confusa, ¿Villana? ¿Era así como me veía algunas veces en la vida?, no deberíamos estar celebrando en vez de estar descifrando un acertijo, pero Edward había elegido un mal momento por ser críptico.
— Cállate —medio Jasper emocionado—. Nos acaba de salvar la vida.
— Dirás la tuya —observo Edward con una sonrisa burlona.
— ¿Puedes explicarme? —insistí haciéndome notar.
— Claro —accedió Edward—. Hace no mucho ahorcaste a Newton, golpeaste a Jessica y planeaste esto a mis espaldas. Minutos después, logras que la manada vuelva a confiar en nosotros de forma parcial.
— ¿Eso es malo? —indague temerosa.
— Es estupendo —contesto Edward atrapándome entre sus brazos como si quisiera que me escondiera de por vida en su cuerpo, para que no volviera a cometer otra tontería.
— Basta —dije tratando de no reír—, ha sido suficiente.
— Has conseguido lo que querías —comento Jacob sentándose cerca de la salida—, ahora tengo que hacer presencia en la Push más de seguido.
Cuando Edward me soltó para ir con su esposa, metí la mano en el bolsillo izquierdo del jean y extraje de el, un aro dorado con una imponente piedrita azul que hace mucho tiempo no veía, deslice con cuidado el objeto que me había traído suerte en este embrollo, había temido perderlo en todos los días que mi vida había sido una locura, pero ahora en adelante ocuparía el lugar que correspondía. Así Jacob le dirigiera una mala mirada y no tuviera un gesto contento. Ahora oficialmente, me había convertido una mujer comprometida en esta historia.
Hola a todos los lectores de esta historia, espero que hayan pasado unos encantadores días sin mi presencia. Creo que me he demorado mucho otra vez para actualizar, pero ya saben esto de no tener internet te limita muchas cosas, además que el mundial le dio por volverse algo adictivo y más si tu madre le da por ver casi todos los partidos apoyando los seleccionados de nuestro , también ha sido un poco mi culpa el haberme demorado, además de que algunos planes de estudio les dio por hacerme la vida algo imposible estos últimos días, también la graduación de mi hermana me quito un poco de tiempo, la película que por poco no veo este fin de semana, ah, aunque no lo crean Hannah James también contribuyo a esto, la verdad he estado escribiendo un poco su historia paralela y me ha consumido parte del tiempo, así como el final de esta historia, no podía dejar escapar las ideas tan buenas que se han cruzado por mi cabeza.
Antes que se me olvide, quiero agradecer a todos los que me pusieron mensajes en el anterior capitulo, ya pasamos los 500 y ahora vamos por los 505, de verdad muchas gracias por su tiempo y paciencia por esperar cada actualización de esta historia, no se que haría si ustedes no siguen ahí apoyando mis ideas y divirtiéndose con este personaje que ha hecho de las suyas transformando la historia de Crepúsculo por completo. Por cierto, felicitaciones a VanessaX3 por que fuiste el review 500, ¿Podrías enviarme tu correo en el próximo mensaje que dejes? Acuérdense queridos lectores, que completar cada centena de mensajes el afortunado ganador recibirá una sorpresa en su mail, a falta de que no puedo enviarles ninguno de los personajes de los libros, ya saben los muñecos no los venden en mi país aun.
SDPYR: ¿A ver cuando puedes enseñarnos la situación Edward- Hannah- lobos?, esta pregunta es de mi parte, ¿podrías explicarme Al. Smith. Cullen?; ¿Algún otro personaje del mundo de Hannah aparecerá en la historia?, bueno, la verdad si aparecerán unos cuantos personajes, pero digamos que de maneras distintas, ya sabes alguna retorcida idea se me ocurrirá; ¿Hannah leyó el nuevo libro de Meyer sobre Bree?, pues la verdad ni siquiera lo he leído yo y tampoco me interesa, así que Hannah no hará alusiones al libro. SCDPYR.
Antes que se me olvide, así que quienes no hayan visto la película, pueden saltarse el siguiente párrafo y continuar con las despedidas. La verdad sentí un poquito de envidia cuando leí el mensaje de Angeli014, en mi país habían funciones a las 11:59 el día antes del estreno y la verdad ni siquiera me entere y el viernes no tenia como verla, mi hermana y yo estábamos que nos comíamos las uñas por saber como era la película, hasta que finalmente el bichito de la curiosidad se calmo el sábado en la noche, me estaba muriendo de la emoción antes de que empezara la película y me fui desinflando a medida que pasaban los minutos de la película, lo siento pero no puedo ver igual a Pattinson después de ver su beso con otro hombre en esa película que hace de Dalí, casi salto de la indignación al ver que el vampiro parecía más enamorado que Bella, por todos los cielos, Kristen podrías pasar la realidad a la ficción para que se me quite la aversión de verte besando con Robert (No lo digo por que me guste el actor, de hecho amo a Jasper), la verdad no parecía nada enamorada y más parecía una tortura besando al vampiro; por cierto, casi me da un paro respiratorio en las escenas de Jasper y me paso lo mismo que a ti Valee404, en la sala cuando estaban en la escena de Jacob y Bella en una especie de lago superficial, me preguntaba por donde aparecería Hannah para dañarles el momento, ¿Jacob no era más divertido y pícaro en este libro, que un aburrido y sufrido personaje? Por todo lo demás, en la pelea me hicieron tapar los ojos y creí que de nuevo estaba viendo el hombre lobo, a pesar de todo, espere ver a una Leah más amargada, solo queda esperar la próxima película. Siento haberme desahogado de esta forma, pero era todo lo que tenia que decir o me iba suceder lo mismo que a Alice.
Por ultimo y no menos importante, Quindi quizás en la próxima tu seas la ganadora animo y un saludo muy especial a Alejane0, tu extendido mensaje me hizo emocionar muchísimo, la verdad cuando la gente como tu escribe de esta forma, me hace recobrar los ánimos y seguir adelante con la historia, por que se que muchos en diferentes países están esperando la actualización y concuerdo contigo no hay nada como leer Orgullo y Prejuicio, es mi segundo libro favorito, gracias por tus palabras, personas como tu me hacen pensar que no pierdo mi tiempo escribiendo historias sobre algo que nos une en común, espero verte más seguida por aquí, al igual que Lux andas desparecida, Cassandra gracias por continuar leyendo mis historias y también a Valee por su entusiasmo en los mensajes. Creo que ya di mucha lora, espero que les haya gustado el capitulo.
Hasta una próxima oportunidad, hasta entonces…
;) Kathyarius
