yo pense que seria mas facil estee capitulo. pero no. espero lo disfruten y estén a atentos al siguiente. saludos :D
Estoy recostada en el sofá con los ojos cerrados, Charlie ve una película policial un poco más allá. Después de tener síntomas de pérdida ese día en la reservación Derek me dio reposo absoluto, eso significaba no ir al instituto, como doctor había extendido una licencia médica que me permitía dar exámenes libres, Ángela me llevaba la tarea y cada 15 días daba todos los exámenes que se acumulaban hasta la fecha. Tengo ocho meses y cada vez me siento más enorme. Charlie llamó inmediatamente a Renne cuando supo que había tenido síntomas de pérdida aunque le insistí que no, pero él decía que cualquier cosas que me pasará por muy molesta que ella estuviera conmigo debía enterarse. Eso al menos sirvió para hablar con ella, al día siguiente me llamo y conversamos largo rato, ella se disculpó por su falta de tolerancia y yo por haberla decepcionado. A los días me envió un regalo de navidad que no se había tenido el valor para enviar, era un libro de cuentos una selección de 300 cuentos para poder leerle a mi pequeño pateador Y para mí un colgante de plata en forma de óvalo con dos espacios para poner fotografías era hermoso tenía un estilo de principios del siglo xx que me traía nostalgia. Luego de ese día mamá me llamaba a diario, me hizo prometer que le avisará cuando naciera y así ella viajaría a conocer su nieto o nieta. Me lleno de paquetes con ropa de bebe pañales y cosas. Yo había utilizado mi fondo de la universidad Para comprar unas cosas un mueble para guardar toda su ropa, un cochecito, unos juguetes Charlie le había comprado la cuna y Derek bueno a pesar que me opuse a recibir regalos de él de todas formas me sorprendía con presentes que dejaba de vez en cuando en la casa, no me entregaba directamente a mi nada solo lo escondía por algún lugar de mi habitación cuando iba a examinarme.
A veces me venía a visitar de manera extraoficial lo agradecía mucho ya que nadie lo hacía a excepción de Ángela claro, me distraía con sus historias y conversaciones mutuas, me traía libros nuevos que yo terminaba rápidamente hablábamos de su saxofón y que era Aficionado a la fotografía y entre conversación y conversación planeamos el nacimiento de mi bebé, iba a ser difícil aún no desciframos como romperíamos el saco tan fuerte como la piel de un vampiro que lo cubría para eso necesitábamos dientes de vampiros pero donde conseguimos un vampiro que no nos quiera cenar y que no fuera un Cullen. Y así Derek se dedico a buscar e indagar entre todos los libros diarios y documentos que han pertenecido a su familia durante años para encontrar algo que nos ayude.
Un golpe en la puerta nos sobresaltó a Charlie y a mí. Fue un golpe fuerte Charlie se levantó con el ceño fruncido estaba muy pendiente en su película. Yo solo me quedé recostada pero esta vez con los ojos abiertos. Charlie abrió la puerta y se quedó prado después de un par de minutos entraron Billy y Jacob y papá con una cara de vacío. Tomé asiento en el sofá para poder saludar.
-Hola Bella
-hola Billy, Jacob - lo salude fríamente. Billy y Jacob tenían mala cara y se la habían transmitido a Charlie. Yo solo me quede callada escuchando la conversación.
- ¿Cómo sucedió?
- estaba en el bosque cazando y se desplomo.
-no puede ser- Charlie se tomaba la cabeza entre sus manos
-Sue nos necesita Leah y Seth están destrozados.
Charlie me quedo mirando un rato pensativo
-¿te molestaría quedarte un rato sola Bella?
-no papá ve. Yo estaré bien.
-Vamos Charlie está embarazada no enferma- Jacob y sus comentarios desafortunados.
-de hecho Jacob Bella tiene reposo absoluto no debería subir ni bajar escaleras en exceso. Casi pierde a su bebé.
- yo no sabía eso. Lo siento.
-bueno chico lo sabrías si vinieras más.- yo solo guarde silenció.- está bien ¿Bella estás segura que puedes quedarte sola?
- si papá tranquilo veré una película que me guste y la cena está lista así que estaré bien.
-Jacob puede cuidarla- me sorprendió que dijera algo así.
-papa sabes que debo ayudar a Sam.
- yo te justifico hazlo por mí por favor Charlie me llevará.
-claro sería un alivio si te quedas con Bella yo me llevo la camioneta de Bella y te dejamos la de Billy para que vuelvas.
- está bien- dijo Jacob. Yo no quería negarme sabía que así dejaría a Charlie tranquilo.
Después de unos minutos Charlie me dejó con Jacob diciendo que lo más probable que demorará.
-¿Te has sentido bien?
- algo, mejor.
-¿Cómo lo haces con el instituto si no puedes salir?
-Jacob ¿de verdad te importa? O solo intentas que no tener silencios incómodos.
-Bella de verdad lo siento como reaccione solo quede en Shock. Saber que ese tipo de aprovechó de ti y que encima te utilizo de experimento.
-Jake nadie se aprovechó de mí. Lo que me interesa saber y que de verdad le he dado vueltas es el hecho que eres un lobo.
-bueno ya que lo sabes creo que puedo darte detalles, ya te había dicho que los Quileutes descienden de los lobos. Nuestra primera conversión fue hace cientos de años atrás. Cada cierto año no convertimos cuando chupasangres andan dando vueltas. Chupasangres cerca más una chispa que detone nuestra ira y henos aquí.
- no me simpatizan. Son groseros.
- lo dices por Paul. Él es un idiota.- tuvimos un momento de silencio pero ya no incomodo-¿Quién es ese tal Derek? Un contacto de los chupasangres.
- primero que todo el apellido es Cullen y segundo Derek es doctor, tiene conocimientos sobre el mundo de los vampiros y me ayudará a traer a mi bebé.
- aún crees que será normal, un hijo de ese monstruo no podría ser normal será...
-¡Jacob para! mi bebé no será un monstruo- me desespere me paré del sofá y comencé a gritar- será gentil, será un pequeño quizás no como todos pero será mi pequeño.
- ¿y será niño? -dijo con sarcasmo
- en realidad no lo sé pero eso no importa es mi bebé y yo sabré…- quede estática un intenso dolor me hizo callar y caí sentada nuevamente al sofá.
-¿Estás bien?
-no.
-Bella estas pálida- se arrodillo frente a mí para tener su rostro frente al mío
- llama a Derek creo que es hora.
Jacob tomó mi teléfono y yo empecé a retorcerme de dolor. Era muy intenso no quería gritar, no quería alterarme más aún. Solo pienso en que llegarás y estarás junto a mí.
-viene en camino.
En diez minutos estuvo fuera de mi casa con su auto.
-Isabella.- puso su estetoscopio en mi vientre- ¿Que sientes?
- un dolor intenso en la espalda es intermitente.
- son contracciones, tengo que sacarte de aquí.
-¿dónde la llevaras?- solo se quedaron mirando
-Derek está bien, él lo sabe todo.
-perfecto, entonces chico es tu día de suerte me ayudarás con Bella. Necesito que la llevemos al auto.
En un solo movimiento Jacob me tomó en brazos el solo y me sentó junto a él en la parte trasera del auto.
-¿dónde vamos?
- a mi casa.
-¡no deberíamos llevarla a un hospital!
- si claro, Jacob pero como vamos a explicar algunos asuntos sobre el bebé de Bella
- deberíamos deshacernos de él
Yo solo escuchaba su conversación que casi se convertía en discusión
- lo que menos necesita Isabella ahora es que se tense así que tus comentarios guárdalos solo para ti.
-¿has pensado en algo?- preguntó entre mi dolor
-te juro que mi mente está trabajando a mil por hora en opciones. Por ahora solo sé que debes mantenerte relajada para evitar contracciones de más.
Llegamos a la casa de Derek, Jacob me tomó en brazos me dirigió dentro de ella
-al sótano
-¿Quién demonios tiene sótano en Washington?
-yo, busqué una casa con sótano, son útiles como ahora por ejemplo.
El dolor en mi espalda y vientre era insufrible, sentía que el cuerpo se me partiría en dos. Jacob me recostó en una camilla, sentía como mi bebé daba vueltas dentro de mí, ya quería salir. Derek empezó a preparar unos utensilios, y otras cosas que no reconozco, solo logró visualizar una jeringa y el bisturí.
Me comienza a romper la ropa tapándome con unas mantas. ¿Moriría? ¿Alcanzaría a ver los pequeños ojos de mi bebé? ¿Edward sabría de todo esto si llegaba a morir?
-Vamos Bella yo sé lo que piensas, y estarás bien.
-Gracias Jacob.
-Bella te pondré anestesia local, tendré que proceder a operarte.
-ok, tu solo has lo que tengas que hacer.- de repente siento un fuerte dolor en mis costillas, dejando que sacar un grito ahogado, sentía una costilla rota, sabía que era eso, ya me había roto una pierna una vez y era exactamente el mismo dolor y sensación. - creo que mi costilla.- Derek corrió hacia mí y Jacob me sostenía la mano.
-te rompió una costilla, tengo que sacarlo Bella y luego ver lo de tu costilla.
- la está moliendo por dentro, Bella por favor recapacita.
- Jacob… si no vas a... a... ayudar, vete.- mi respiración era entre cortada debido a la costilla, me dolía el hecho de solo respirar. Di otro grito ahogado y un dolor infernal en mi bajo vientre
-Sácalo.
- la anestesia aun no hace efecto no puedo
-no importa sácalo.- tomo el bisturí entre sus dedos
-Jacob, sujétala.
Sentí el metal perforar mi piel, y un dolor físico mayor al de cualquier otro que haya experimentado, mi respiración empezó a agitarse y sentía el olor de mi sangre, ese particular olor a oxido y sal que siempre me ha dado nauseas, intente no gritar pero era inevitable. De apoco comencé a cerrar los ojos, el dolor no me permitiría más tiempo despierta pero ¿qué tal si era l última vez que lo cerraba? no, no podía ser así debía ser fuerte, debía poder mantenerlos abiertos por mi bebe, debía reponerme así que me obligue a estar despierta.
no se en que momento Jacob salió de mi lado y estuvo junto a Derek, los miraba trabajar en mi como si el mundo fuera a terminar en cualquier momento Jacob le pasaba cosas, debía de suponer que vendas. Intentaban hablar bajo, para que no los escuchara, pero era inevitable estar totalmente pendientes de ellos.
-no puedo perforar
-definitivamente ese tipo es un monstruo
-solo los dientes de su misma especie perforar su propia piel. Debo sacarlo pronto o...
-¿o qué?
-o Isabella morirá desangrada.
- yo sé que servirá, no solo los de su especie perforan esta piel, hasta a un lado
Y por última vez sentí un desgarro, sudaba frio estaba tan desorientada y entre mi dolor y mi desorientación, sentí un llanto, el llanto que estaba esperando desde el momento que supe que existía, ese llanto me termino por convencer de que nada había sido un error que todo sucede por algo y si para poder escucharlo tuve que conocerlo a él y sentir el corazón roto, entonces valía la pena.
-Isabella conoce a tu hijo
Lo puso en mi regazo y pude ver un par de pequeños ojos oscuros, una piel blanca pero rosada y un corazón acelerado y agitado, sus pequeñas manos cerca de su rostro, simplemente perfecto, un poco de cabello en esa cabecita se sentía tan calentito. No podía pensar en nada más perfecto que él, era mío mi pequeño que se movía mientras yo dormía. Olvide todo dolor que sentí hace unos instantes solo puede articular una palabra en este momento tan perfecto
-Anthony.