Cuarto de los Lestrange
-¿Tu verdaderamente crees que tendría yo algún problema con el género de nuestros hijos?
-No lo sé, nunca los hemos tenido. Además esta vez podías elegir, y siento que solo la estás eligiendo por darme gusto, si es una gran oportunidad pero capaz y tu realmente no lo quieras y tu apellido…eres uno de los sagrados 28, si tenemos una niña tu apellido se perderá en cuanto se case, dudo que quieras eso…
-Bueno, resultó que quién lo sobrepiensa eres tu
-Rod, hablo en serio
Siento como Rod sale del hueco de mi cuello y se acomoda de manera que lo vea directamente.
-Yo también hablo en serio Bella, quiero que te quede bien claro, no me importa el género de nuestro heredero, no busco un candidato perfecto solo para hacerte felíz. Y bajo ningún supuesto los hijos son algo que sólo tu anheles en este matrimonio, una niña es perfecta para mi, amo la idea de ser el padre de una nena; mi nombre puede seguir a manos de mi hermano o de algún otro primo, pero mi felicidad no estaría completa si no tengo a quién darle todo mi amor y mi patrimonio, si no tengo alguien a quién darle todo de mí y ver cómo florece y mejora en ella… de verdad anhelo tener a quién enseñar y a quién mal educar, yo también quiero ser padre Bella y también he sufrido y llorado cada que no lo conseguimos y no sólo por que quiera hacerte feliz. Tengo mucho amor y cariño que quiero darle a un niño, una niña en nuestro caso, así que no te preocupes por mi, yo estoy muy feliz de que tengamos una niña, en serio, la ví el día de hoy y ¡ya me encariñé! tengo mil planes en mente para pasar tiempo con ella.
-No sabía que te sentías así Rod…
-No tenías por qué saberlo mi vida
-Vamos a tener una niña…
-Vamos a tener una niña…
-¡Es la mejor sorpresa que pudiste y podrás darme en la vida! No tienes idea de cuánto te quiero en este momento- cada día que paso con Rod lo estimo más. Pero el cariño que siento por él en este momento es realmente incomparable, nunca antes había sentido tantas ganas de amarlo -¡Siento unas ganas de amarte y mimarte en este momento!
-Y ¿Qué te detiene?
-Nada, absolutamente nada…
-¡Demos gracias a Merlín!
No necesitamos más consentimiento, ni explicaciones. El ambiente y el cuerpo lo dicen todo. De repente la habitación se pone caliente, la proximidad no es suficiente, las manos no te dan a basto para acariciar todo lo que quieres, los labios y el aire no alcanzan para besar todo lo que quieres.
Siento como Rod pasa sus manos de mis hombros a mi cadera, acariciando mi cuerpo todo ese camino.
-Tócame, todo lo que quieras, no te contengas…
-No deberías decirme cosas como esas en este momento Bella, ¿qué pasa si me emociono y por eso tu no disfrutas?
-Le pondremos empeño y entonces disfrutamos los dos, tú solo aprovecha la oportunidad, déjame quererte…- mientras digo esto paso mi mano de su cuello hacia abajo por el frente de su torso- mimarte…-hago movimientos en círculos sobre sus pezones- besarte…- sin dejar de hacer círculos sobre sus pezones, beso su cuello desde la base de las orejas hasta la clavícula- disfutarte…-bajo mi mano de su torso lentamente hasta su entrepierna- mientras tu te dejes llevar y me des lo mismo, vamos a pasarlo muy bien- su miembro ha estado erecto desde hace un rato, desde que empece con mis coqueteos, así que con el simple toque Rod ya está reprimiendo un gemido de placer, pero conforme muevo mi agarre de la base a la punta veo como le cuesta más trabajo reprimirlos, así que decido susurrarle al oído- no hay razón para que te reprimas amor, déjame escuchar cuánto te gusta lo que hago
-Bella…
-Dame el gusto y yo te dejaré escuchar los míos
Esa promesa es suficiente para que él deje de lado un poco de su pudor y pueda escuchar quedos gemidos de placer de tanto en tanto, cuando de repente me dice de manera entrecortada;
-No es Justo que yo sea el único que disfrute, déjame ayudarte- poco a poco baja sus manos de mi cadera a mis muslos y comienza a subir mi neglige hasta deshacerse de por completo de el- dejame verte Bella
Rod disfruta recorrerme con la vista por completo. Con deleite. Con hambre.
-¿Te gusta lo que ves?
Con el tiempo he aprendido a disfrutar ser vista por él, la manera en la que aprecia y venera mi desnudez para su deleite y mi ego se ha vuelto fascinate y muy estimulante, aunque al inicio era algo que me apenaba muchísimo.
-Siempre, ahora déjame probarlo…
-Bon appétit mi amor…
Vuelve a besarme, sus besos pasan de mis labios a mi mandíbula, después por mi cuello y así sigue descendiendo hasta llegar a mis senos, donde después de besarlos, lamerlos y succionarlos, susurra contra mi piel;
-No sabes lo mucho que aprecio que nuestra hija sea mayor, no voy a tener que compartir esto con nadie, en ningún momento
Después de decir esto vuelve a poner toda su atención a mis pechos.
-No sabía que tu lado posesivo podía ser tan excitante
-Yo tampoco sabía que te gustaba- aprovechando que ya no está utilizando su boca en mis senos, sube su rostro hasta que sus labios rozan mis orejas y antes de morder mis lóbulos me dice- pero hay cosas que sé que te gustan y aún no te hago- siento como una de las manos de Rod se posa en mi trasero y la otra baja a mi entrepierna- pero primero necesito que estés en otra posición- con la mano que .tiene en mi trasero me arrastra hacia arriba de él mientras baja un poco, hasta que su ereccion y mi entrepierna quedan una encima de la otra y comienza a hacer círculos con los dedos para estimular mi clitoris- ahora muévete verticalmente dulzura
-No tienes una idea de cómo me pone que me digas dulzura- siento como los dos estamos sobreestimulados, el juego previo comienza a estorbarme y sé que a él también- basta de jugar Rod, te quiero dentro y siento como tu suplicas por entrar, hazlo- en la posición en la que estamos es muy fácil que entre, solo tengo que direccionar su pene por el camino correcto, estamos lo suficientemente húmedos para que ninguno tenga problemas -déjame ayudarte- poso una de mis manos sobre su pecho para que me sirva de apoyo y con la otra tomo su ereccion y la guío a la entrada de mi vagina y comienzo a descender con mis caderas.
-Despacio Bella, si lo haces rápido no voy a durar mucho…
-No importa, también estoy por llegar…
Lo poco que se dice es entrecortado y mezclado con jadeos. Siento como estoy apunto de llegar al orgasmo, el placer me abruma, pero no soy la única, Rod esta igual.
-Rod, esta bien, ya no te fuerces, termina…
-Sé que estas apunto tú también, hagámoslo juntos…
Eso lo pone serio, se aferra mas a mí con la mano que dejó sobre mi trasero, levanta mas la cadera y los dos aceleramos el ritmo de las embestidas, nos acercamos más uno al otro y comenzamos a besarnos de nuevo, mas rápido, más profundo, fue imposible no terminar juntos. Siento como toda la tensión desaparece de mi cuerpo y como Rod se derrama dentro de mí. Nos quedamos en la misma posición y conectados hasta que nuestras respiraciones se regularizan y apasiguan.
-Eso fue muy intenso, no me mal entiendas, me encantó, pero es de las sesiones más intensas que hemos tenido
-Definitivamente, quedé agotada
-Ven recuéstate sobre mi, vamos a dormir
No me lo tiene que repetir, estoy muy cansada para siquiera pensar en buscar mi neglige, ademas Rod es lo suficientemente cálido como para no extrañar la ropa de dormir. En cuanto me recuesto sobre su pecho, él comienza a acariciarme el cabello y besa mi coronilla, a la par que acaricia toda mi espalda con uno de sus dedos.
-Vamos a necesitar pijamas
-¿Qué? ¿Ahora?
-No no no, en un futuro próximo, si tenemos una hija, mientras ella esté en casa no vamos a poder dormir así, ¿y si nos necesita?
-Oh, ya entendí, tranquila,ya había pensado en eso, hay pijamas en nuestros cuartos, aunque quizá quieras cambiarlas, tienen un rato guardadas…
-¿Nuestros cuartos?
-Sí, ya sabes… las parejas de matrimonios arreglados comienzan a dormir separados una vez que tienen hijos, no tienes por que quedarte aquí si no quieres, así que ya te designé un espacio y podemos usar este cuando tengas ganas de estar conmigo
Debo deshacerme de mi muy cómoda posición y enderezarme para hablar de frente con Rod, por que todo lo que dice es compltamente absurdo.
-Rod, estamos casado hace 20 años, compartimos cuarto hace 20 años, dormimos juntos hace 20 años y me estás diciendo que durante estos 20 años ¿haz pensado en mandarme a dormir lejos si teníamos hijos?
-No, no dije eso, es solo que es lo más tradicional, creí que tú querías lo mismo
-Pues no, no lo hubiera querido hace 20 años, mucho menos lo quiero ahora, estoy tan acostumbrada a tí que no podria dormir sino estás conmigo, así que lo que sea que tenias preparado, olvídalo, trae las pijamas aquí y asunto arreglado- después de eso vuelvo a acomodarme sobre su pecho- dicho eso, ya es tarde, hora de dormir
-Descansa mi vida.
-Ahora si "Descansa mi vida pero ¿que tal hace rato con tu "en nuestros cuartos"? Que tontería...
