Capítulo 5

Bella 18 años

—Bien, vamos— dijo arriba de la moto, tendiéndome un casco, esta vez me subí sin rechistar— ¿no vas a preguntar a dónde vamos?

—Sorpréndeme

—Creí que no te gustaban las sorpresas— dijo con su sonrisa engreída

—Las cosas cambian — trate de imitarlo

Bella 26 años

Y vaya que podían cambiar, acaricie el tatuaje que tenía en mi brazo y sin poder evitarlo comencé a llorar, mientras abrazaba la botella de tequila, estaba perdida.

—¿Bella?— esa voz, podría reconocer esa voz en cualquier lugar, di la vuelta y comencé a buscarlo, pero la luz me cegó momentáneamente.

—¿Edward?¿Eres tú?— mi vista comenzó a aclararse un poco, cuando su cuerpo cubrió la luz.

—Si, soy yo— ahí estaba, cómo el dios griego que era emergiendo de la luz, caminando hacia a mi. Cómo siempre no pude esperar por él, comencé a correr a hacia él con los brazos abiertos, él me recibió y me envolvió en sus brazos, olía maravillosamente, tal cómo lo recordaba, a cigarrillos, menta, colonia para después de afeitar con un toque de alcohol, su whisky recorde.

—No, puedo creerlo eres tu— bese desesperadamente sus labios— no tienes idea de cuanto te extraño, de cuanto te amo

—Tranquila ya estoy aquí cariño, no me volveré a ir sin ti— me prometió mientras me sostenía en sus brazos y me acariciaba el cabello, tratando de calmarme.

—Dios mío Bella— podía escuchar una voz, lejana, sonaba preocupada, quería decirle que no se preocupara— vuelve a dentro cariño, mami esta bien, solo esta dormida— yo estaba bien, estaba con Edward, él me protegería— llevémosla adentro— ignore las voces y me concentré en Edward, no me importaba nada más en el mundo que el

—Vamos, por Nessie— dije tomando su mano, mi hija se pondría tan feliz al verlo

—¿Nessie?— pregunto confundido

—Si, Renesmee

—Por que le dices ¿Nessie?— su voz cambio, podía notar un rastro de enojo

—¿De que hablas?, es su apodo— dije confundida

—¿Por que apodaríamos a nuestra hija cómo el monstruo del lago Ness?— estaba colérico

—Edward de que…— no estaba entendiendo nada

—Debemos llevarla al hospital— ahora había otra voz, junto a la primera— sus labios están azules, voy a llamar a una ambulancia, cariño ven conmigo, mami esta bien, solo esta dormida— la voz comenzó a irse nuevamente.

—Mi hija no es un monstruo— me reclamo Edward alejándome de el.

—Edward.. yo.. Harry…— balbuce herida por su rechazo

—Tu Isabella, tu eres el monstruo— sus ojos brillaban con odio, odio hacia mi.

—Edward ¿de que hablas?, no… no entiendo

—¿Crees que no se lo que querías hacerle a Remy?— ¿Cómo lo sabía? Nadie más que Harry lo sabía.

—Tiene 26 años— la voz había regresado con más fuerza acompañada de otras, pero trate de ignorarlas

—Su temperatura es de 34°, debemos ingresarla de inmediato

—¿De que estás hablando? yo… jamás le haría algo así a Remy — trate de defenderme, pero era inutil

—Claro que lo harías, se lo hiciste a E.J, ¿Que no recuerdas?— me sostuvo por los hombros y comenzó a agitarme con violencia

—Eso fue un accidente… yo… tu— no pude contener el llanto— tú estabas ahí…

—No, Isabella, yo no estaba ahí, no te lo habría permitido, eres un monstruo, no mereces estar viva, yo sí me habría hecho cargo de E.J y de Remy. Eres un monstruo…

Escuchaba demasiado ruido de fondo, no podía concentrarme en lo que decía Edward, pero lo agradecí, sabía que sus palabras eran crueles, pero eran verdaderas.

—Señor, lamento informarle que su esposa ha caído en coma— ¿de quién eran esas voces? jamás las había escuchado

—¿Que?— ¿Harry? que hacia aquí, tenía que irse o Edward se enojaría más

—Tiene 0.7% de alcohol en su sistema, trataremos de sacarlo de su sistema, ¿señor?¿Se encuentra bien?

—Si, solo que no comprendo porqué hizo esto, tenemos una niña pequeña..— la voz de Harry se rompió— lo siento, necesito un poco de aire

—Claro, la enfermera se quedara con ella— escuche un estruendo que me arrastró a la oscuridad

Bella 18 años

Reconocí el camino aún en la oscuridad, íbamos a su casa. Al entrar al bosque redujo la velocidad.

—El camino es engañoso de noche— me aclaro. Nos detuvimos afuera de su casa — espera aquí no me tardo— dijo entrando a su casa. Me quede parada cómo estatua en mi lugar, pensé que me había invitado a su casa.— listo, vamos— salió con una mochila y tomo mi mano

—¿A dónde?

—Sorpresa— dijo con una arrogante sonrisa torcida que comenzaba a encantarme

Caminamos por el bosque, apenas veía nada, los árboles tapaban la luz de la luna, pero Edward parecía conocer a la perfección el camino ya que no se tropezó ni una sola vez a diferencia de mi. De pronto el se coloco detrás de mí y me cubrió los ojos

—¿Que haces?, me voy a caer más si haces eso— le advertí, comenzando a caminar con más cautela

—Mantengo la sorpresa hasta el final

—Si me caigo y me parto el cuello me las pagaras Edward— amenace— regresare cómo fantasma y te atormentare el resto de tus días

—Tranquila no te dejaré caer— me susurro en el oído, su voz recorrió mi columna vertebral, provocando escalofríos y cómo no, un tropiezo, pero no me caí, gracias a que me sostuvo por la cintura— no me tientes— susurro por lo bajo, tan bajo que ni siquiera estaba segura de haberlo escuchado

—¿Tentarte a que?— pregunté, pero él no me contestó— Edward— lo llame— ¿tentarte a que?— el siguió sin contestar por lo que me pare en seco— o me respondes o no daré ni un solo paso más— lo amenace cruzándome de brazos

—Bien— dijo antes de cargarme sobre su hombro cómo un costal de papas

—Edward— chille— bájame, bájame— le rogué— caminare, caminare lo prometo— le ofrecí

—No pienso contestar tu pregunta, no aun— me advirtió

—Estaba bien, pero bájame

—Mmm— lo considero un momento

—¡Bájame!

—Pero así es más rápido

—Bájame, por favor— volví rogar. Él me ignoró hasta que finalmente se detuvo, me coloco en mis pies— grac..

—No me tientes— me interrumpió— porque comienzo a querer pasar el resto de mis días junto a ti— no tuve tiempo para contestar nada, ya que me besó.

No era el primer chico que besaba, había besado a Jared el amigo de Jake y a Ben de mi clase de matemáticas, pero eso no se comparaba con este, este era un beso í sus manos en mi cintura, me sostenían suavemente, su toque era tan delicado, como si temiera romperme, se separó lentamente de mi para que ambos pudiéramos tomar aire

—Al agua pato— nuevamente no tuve tiempo de asimilar sus palabras, ya que me encontré siendo arrojada a un lago.

—Edward!— mi reclamo se vio interrumpido por el salto de Edward —¿que demonios haces estás loco?— le dije salpicando

—Loco quizás, pero por ti— nado hasta mi, tomo mi cintura y nuevamente me beso.

Mi mente se turbó, deje de pensar claramente y me entregue por completo a sus labios que reclamaban mi boca — mira es la constelación Draco— dijo señalando un par de estrellas

Bella 26 años

—Lo lamento mucho, pero las grandes cantidades de alcohol han provocado daños irreparables en el feto, su hígado esta comprometido, además sus pulmones están seriamente dañados, debido a la cantidad de cigarrillos que fumaba la señora Rogers, por no mencionar la ligera desnutrición que presenta su esposa, lo mejor es practicar un aborto pero necesitamos su consentimiento— la voz extraña me saco de la oscuridad, sonaba enojada ¿conmigo?

—No…¿ de que habla?— Harry estaba confundido— utilizamos… no ella… nos cuidamos, no puede estar embarazada— logró decir

—Tiene 15 semanas de embarazo…

—¡Isabella!— el grito de Edward me regreso al presente, ya no estábamos en la nada, estamos en la cabaña

—¿Que sucede?— me acerque a la puerta donde estaba— ¿papá?— pregunté confundida al ver a Charlie parado en nuestra puerta echando humo por las orejas

—Estás embarazada— me acuso al mismo tiempo que me daba una bofetada

—No, claro que no— negué mientras colocaba una mano en mi mejilla, sentía mi piel escocer

—Es imposible.. —volvió a decir Harry incrédulo

—Es necesario que firme el consentimiento, pero puede tomarse su tiempo para firmar, ella está estable y ninguno de los dos corre un riesgo inmediato.

—Su… su mano está caliente… ¿eso es bueno?

—No, debería tener una temperatura normal, tiene fiebre— anunció la voz extraña

—No me mientas— levantó nuevamente su mano

—Charlie— intervino Edward antes de que me golpeara nuevamente— no te voy a permitir que la golpees— dijo con voz contenida

—Quítate de mi camino Edward— Edward me coloco detrás de él protegiéndome— soy su padre… ella es menor de edad, puedo hacer lo que quiera con ella

—No, claro que no, no tienes ningún derecho sobre ella, legalmente es mi esposa— me escondí más detrás de él, no quería ver la rabia y sobre todo la decepción de mi padre, se suponía que iría a la universidad, saldría de este pueblo, no que me casaría con el primer chico que conociera.

—Harry ¿Cómo está?— Esa voz, ¿era mi padre?

—Hola, te trajimos un poco de comida— ¿Sue?, ¿Que hacían aquí?, se suponía que estaban en Forks

—Charlie, Sue, gracias, está estable por el momento

—¿Que sucedió?— papá sonaba preocupado

—No lo sé con claridad, ella estaba en el jardín ... .— su voz se volvió a romper, ¿por que Harry lloraba tanto?, ¿quién lo estaba lastimando?, quería decirle que parara, él no merecía ser lastimado por nadie— estaba inconsciente, estaba fría…

—Los paramédicos la diagnosticaron con hipotermia— intervino la voz de ¿Ann?— la trasladaron aquí a urgencias donde cayó en coma, los análisis de sangre les advirtió sobre un alto nivel de alcohol en su sangre, que provocó el coma— explicó con voz cansada

—¿Dónde está Remy? — pregunto Sue, agradecía que se preocupara por mi hija, pero no tenía permitido llamarla de esa forma, nadie tenía permitido hacerlo después de lo que sucedió.

—¿Remy?— preguntó Ann confundida

—Se refiere a Nessie, esta con mi hermana Emma— dijo Harry

—Si, no te importa me gustaría cuidarla— hubo un silencio de repente— mañana— aclaró— Charlie ¿por que no vas a traerle a Harry la ropa que le trajimos?

—Claro, Ann ¿quiere un café o algo de la cafetería?— preguntó amablemente Charlie

—Claro, pero lo acompaño, necesito un poco de aire— Una puerta se cerró y pude sentir una cálida mano sobre la mía, traté de mover mi mano pero no pude.

—¿Cuántas semanas de embarazo tiene?— preguntó Sue

—¿Cómo lo sabe?— Harry nuevamente estaba confundido

—La conozco desde que era una niña, además tiene pecas— tocó mi mejilla— en todos sus embarazos le han salido pecas— ¿por que de repente se creía mi madre?

—¿Embarazos? creí… que solo… Nessie… ¿Dónde está?— Harry sonaba demasiado incoherente

—Él no pudo… tuvo un aborto antes de tener a Remy— quería grítale que se callara, no tenia ningún derecho de hablar de eso.

—15 semanas, pero está muy dañado por el alcohol y los cigarrillos que fumaba

—¿Fumaba?¿Tomaba?— preguntó horrorizada

—Creo que ella no lo sabía, no me dijo nada, tengo que firmar para que le practiquen un aborto, es lo más seguro para ella.

Gracias a todes por su apoyo, espero que les guste el capitulo de la semana.

Cualquier duda estaré leyendo sus comentarios.

Nos leemos pronto :)