Capítulo 8

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Natsuki

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Han sido unos días espectaculares, y me encantaría seguir en este lugar, disfrutando el tiempo con Shizuru, solo relajándonos, pero cuando Mashiro me llamo antes de salir a correr, supe que debíamos volver ese mismo día, llego el momento de actuar.

En el regreso a casa no dijimos mucho, creo que Shizuru noto que estaba ansiosa, y es que no sé qué más esperar sobre lo que sea que Mashiro haya encontrado.

Pasamos a la casa de Shizuru, arreglamos nuestras cosas, y aproveche de darme un baño para volver a salir más rato, a las seis de la tarde golpee la puerta de Shizuru para avisarle que debíamos irnos.

- De acuerdo vamos – dijo vistiendo un hermoso vestido hasta las rodillas – pero esta vez en mi auto.

- Bueno – digo, me gusta manejar, pero creo que ella quiere hacerlo hoy, así que solo por esta vez.

Se nota que está feliz por convencerme.

Le doy la dirección del café y ella conduce perfectamente hasta llegar al lugar, nos estacionamos y miro la hora, 6:30pm.

Apenas entramos diviso a Mashiro.

- Shizuru, ordena lo que quieras, yo invito – le digo – iré a ver a Mashiro, pero volveré contigo – le doy un beso en la mejilla y camino hacia mi amiga.

Cuando Mashiro me ve, se levanta a saludarme y luego nos sentamos.

- ¿Qué tal los días de descanso? – me pregunta.

- La verdad, fueron perfectos – contesto sonriendo.

- Me alegro – dice, para después ponerse seria – El problema con la prensa fue un acto desesperado de Reito, el padre de Shizuru está presionándolo, quiere que Shizuru deje su empresa rápidamente, además que desea celebrar una boda dentro de unos tres meses.

- Ahora entiendo lo que mencionaba Nao – comento – dijo que Reito ha buscado a Shizuru todos estos días, en su casa, oficina, y otras partes.

- Nuestras empresas están observando todo de cerca, después de todo si los Fujino logran casar a Shizuru con los Kanzaki, sería algo que tener en cuenta.

- Entonces, ¿qué tienes para mí?

- Pruebas del convenio entre el señor Fujino y Reito, sobre el matrimonio e incluso cosas del pasado, además con Nao descubrimos algunos negocios turbios que tiene, al usar fondos de la empresa.

- Entonces, lo que tenemos de él es, malversación de fondos, fabricación de noticias falsas en contra de una deportista, y planes secretos a espaldas de Shizuru – menciono.

- Hay muchas cosas más, pero con eso se puede empezar – dice Mashiro – se dice que esta contratando mercenarios del extranjero, creo que se dio cuenta que no era tan fácil quitarte de en medio.

- Ósea que los Kanzaki son una empresa gigante, pero que bajo las sombras son una especie de mafia sucia.

- Te lo dije antes, ellos no dudan en desaparecer a la gente – me dice – la diferencia en esta ocasión es que eres una figura publica demasiado conocida, si te quieren fuera, deben pensar en un mejor plan.

- Por eso mercenarios.

- ¿Estás segura de que los quieres enfrentar? – me pregunta seria – Los Fujino son de temer también, y tu te echaras a las dos familias encima.

- No importa que, la protegeré – le aseguro.

- Te apoyare en lo que pueda – me dice – pero nosotros no somos de armas, en ese detalle no puedo ayudarte, todo lo que sea negocios, investigación, incluso espionaje empresarial déjamelo, pero deberás ver cómo te proteges del ataque físico.

- Esa parte la tengo lista – menciono – no te preocupes por eso.

- No se porque siento que jamás dejare de conocerte.

- Porque soy una caja de sorpresas – sonrió para aligerar el ambiente.

- Ahora debes decirle a Shizuru.

- No sé cómo.

- Déjamelo a mi entonces – me dice Mashiro.

Le hago una seña a Shizuru para que se acerque, ella se para y empieza a caminar hasta nosotras.

- Hola Mashiro-san – saludo – un gusto volver a verte.

- Hola Shizuru-san – saluda Mashiro.

Después de los saludos, mi hermosa castaña se sienta a mi lado.

- ¿Disfrutaron su café? – pregunta Shizuru.

- Si – le digo – estaba muy bueno.

- Oh, por cierto, Shizuru – empieza Mashiro – felicitaciones.

- ¿Por qué? – pregunto Shizuru extrañada.

- Porque supe que tu padre hizo un trato con Reito hace un año, y ahora corren los rumores de que te casaras pronto – respondía inocentemente, que inteligente es mi amiga, dejar caer la bomba de la mejor manera – Mi padre estuvo hablando con el padre de Reito y él le comento lo orgulloso que estaba de que su hijo hubiera hecho un trato tan asombroso, después de todo dos empresas como las suyas fusionadas seria espectacular.

- ¿Qué mi padre hizo qué? – pregunto furiosa – Y Reito es cómplice – tenía una mirada que da miedo, pero al menos sé que es en contra del niño bonito.

- Oh, lo siento – dijo Mashiro – Pensé que estabas enterada de la inminente fusión, y por eso te casarías.

- Créeme – dijo seria – Ni, aunque se acabara el mundo, me casaría con ese imbécil, menos para complacer a mi padre.

Diciendo eso salió furiosa del restaurante.

- Eh… gracias por decírselo a Shizuru, pero debo irme para que no cometa una locura – dije rápidamente – adiós.

Y salí corriendo tras ella. Creo que no tendremos un camino fácil, pero al menos el niño bonito estará fuera sí o sí.

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Shizuru

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Entre furiosa al auto, lo iba a matar, ¿cómo se atreve a usarme?

Pero, antes que lo encendiera llego Natsuki corriendo, y abrió la puerta.

- Yo manejare – dijo decidida – Tu dime donde quieres ir, pero yo manejo – se veía que no dejaría que protestara, así que me baje y entre en el asiento del copiloto.

Ella encendió el auto y lo saco del estacionamiento.

- Dime adónde vamos – dijo tranquila.

- Mejor escribo la dirección en el GPS – mencione escribiéndola.

- De acuerdo.

Y luego no dijo nada más, y en este momento ame que estuviera aquí, conmigo, cuidándome, apoyándome, y supiera que en este momento no quiero hablar.

Entonces me puse a pensar y analizar los últimos años de mi vida, desde que conocí a Reito en la universidad. Nunca me cuestioné como nos conocimos, pensé que solo eran coincidencias, cuando nos encontrábamos en diversas partes, hasta que empezamos a hablar más y nos convertirnos en amigos, ahora que lo pienso si es un poco sospechoso, solo que en esa época andaba deprimida por cierta peliazul, que justo ahora está a mi lado, pero olvidándonos de eso, muchas cosas comienzan a tomar sentido.

Mi carrera iba bien, con Haruka planeábamos nuestro futuro felices, pero entonces terminamos los dos años de negocios para cambiar al rubro que nos interesaba, mi papá no tenía como saberlo, él estaba en Kioto, yo había dejado claro que estudiaría sin personas vigilándome, y me cerciore de eso minuciosamente, después de todo un Fujino puede saberlo. Por lo que siempre me pregunte fue, ¿cómo? ¿Cómo lo supo? Pero ahora tenía mi respuesta, que hábil y rastrero es mi padre, puso a alguien a mi lado de quien jamás desconfiaría, y lo utilizo en mi contra.

El que Reito me apoyara esos años que trabaje arduamente para seguir estudiando, solo hizo que confiara más en él, el que a veces sutilmente me dijera que quizás una carrera más empresarial me vendría mejor, como a veces insistía en que yo seria igual de buena en los grandes negocios como él. Todo me lo tomaba relajada, como si el inocente de mi mejor amigo solo diera su opinión sin querer. Sabia quiénes eran los Kanzaki, por nombre, nunca compartí con ellos, pero Reito se ganó mi confianza, pero el desgraciado se ha burlado en mi cara todos estos años.

Pensé que era mi amigo, que jamás me dañaría, que podía contar con él. Tengo tanta rabia, y duele saber que alguien que ha estado 6 años contigo, solo sea una mentira.

Todo este último año de relación, una mentira, propuesta, si claro, como me alegro de no haber dicho que sí. Dios me da asco haber dormido con él ese día.

Ahora esta desesperado, porque siente que lo dejare y su plan se ira al carajo, por eso las llamadas y mensajes.

De repente me fije que estábamos estacionadas en un subterráneo. Me giré y allí vi esos hermosos ojos esmeraldas mirándome preocupada.

- Natsuki – dije con mi voz entrecortada.

Ella abrió sus brazos y yo salte a su regazo para abrazarla. Donde ella me acuno haciéndome cariño. Me dejo llorar y gritar de la rabia, mientras solo me acariciaba. Odiaba mostrarme débil, pero esto me supero, y sabía que con ella podía mostrarme así.

- ¿Por qué no pueden dejarme en paz? – dije entre sollozos – Quiero ser feliz, mi trabajo me hace feliz, pero mi padre no lo entiende.

Ella me abrazo más fuerte.

- ¿Cómo pudo? – dije dolida – Se supone que era mi mejor amigo, me mintió por seis años – dije esta vez con rabia – ahora entiendo porque me propuso matrimonio el otro día.

Ella me aparta un poco para ver mi rostro, limpiándome las lágrimas con sus dedos.

- ¿Te propuso matrimonio? – pregunto con cuidado, estaba claro que no le agradaba la idea.

- Sí, pero le dije que lo pensaría – dije mirándola, y ella hizo una mueca – Estaba confundida de acuerdo, llegaste tu y volviste mi mundo de cabeza – exclame – te odiaba, por todo el pasado, y por cómo me hacías sentir – le dije viendo sus ojos brillar, ya que más daba – lo que me haces sentir Natsuki, me vuelves loca, me exasperas, a veces quiero tirarte cosas, pero sé que nadie nunca me podrá hacer sentir todo lo que tú me provocas, y quiero estar contigo, quiero esto que tenemos.

Dios acabo de llorar y gritar contra mi padre y mi exnovio, porque obviamente será mi ex, y a los segundos después estoy en los cálidos brazos de la única mujer que he amado pero que me rompió el corazón, pero que me lo está devolviendo poco a poco, recogiendo cada parte que se rompió.

- Y si tu supieras todo lo que me haces sentir Shizuru – me dice sonriéndome tiernamente – tanto que hasta me da miedo, por eso luchare por ti, contra quien sea, te lo prometo, nunca me iré.

Me sentía tan segura con ella, que por primera vez desde que la volví a ver, ya no tuve ninguna duda, le había dicho a Haruka que quería esto, estar con ella, aunque aun quedaba algo de miedo, pero ya no, no tengo más miedo.

Recuperándome de todas las emociones, era hora de actuar, y en este instante era acabar con ese maldito que cree que puede jugar conmigo. Me levanto del regazo de Natsuki, salgo del auto y me arreglo, retoco el maquillaje para que no se vea que llore y me preparo para la batalla, veo que Natsuki habla brevemente por teléfono, pero sale del auto para caminar a mi lado.

Ahora solo tengo rabia dentro de mí, una que quiero explotarle en la cara a Reito, subimos al elevador, y Natsuki toma mi mano que está hecha un puño, haciéndome relajarla, entrecruza nuestras manos y me sonríe. Se que por dentro debe estar queriendo matar a Reito, pero se controla para calmarme a mí, ¿cómo no derretirme por ella?

Una vez llegamos al piso, camino hacia la puerta, pero antes de tocar, miro a Natsuki.

- Espérame acá – le digo.

- ¿Qué? No, Shizuru debo entrar contigo – me dice seria.

- Natsuki debo manejar esto por mi cuenta, no quiero que te involucres en esto – le pido, sé que si se involucra estará en la mira de mi padre.

- No me puedes pedir que te deje entrar sola ahí Shizuru, no se puede confiar en él, créeme, no sabes que pueda hacer, ¿qué pasa si reacciona violento? – me dice frustrada.

- Se defenderme – le respondo – y si te necesito gritare, ¿ok?

- ¿Me lo prometes? – pregunta, pero sé que se está controlando.

- Si, te lo prometo – agarro su cabeza con mis manos y la miro directamente – confía en mí, sin que te des cuenta estaré de vuelta contigo, y nos iremos a casa.

Ella suspira, y asiente, me da un beso en la frente y se apoya en la pared un poco alejada para que Reito no la vea al abrirme.

Golpeo la puerta, y rápidamente la abren, Reito se ve feliz de verme, y enseguida me hace pasar.

Entro rápidamente al living para que no intente saludarme de beso. Entonces alcanzo a ver su computadora al fondo, donde estoy segura de que una foto de Natsuki está en ella. Él entra detrás de mí y sigilosamente la apaga.

- Que hermosa sorpresa mi amor – exclama feliz.

Cínico.

- No te atrevas a llamarme así en lo que te queda de vida – levanto la mirada furiosa - ¿Amor? Si claro, dime algo, ¿cuándo ibas a dejar caer la máscara? – escupí enojada – ¿Cuándo nos casáramos? ¿O volviéramos de la luna de miel?

- No tengo idea de que estas hablando – me dice como si no supiera nada – Pensé que venias a conversar lo que ha pasado.

- Lo sé todo Reito, no te hagas el inocente – hablo seria, quiero arrancarle la cabeza – Mi papá debe estar feliz, ¿cierto? Pensando, recuperare a mi heredera.

Entonces lo veo, aunque para otros sea imperceptible, veo el asombro en sus ojos.

- Dios, que enojada estoy conmigo misma – resoplo – seis años engañada, pensando que eras mi amigo, y luego rematándolo para que cayera en la trampa de casarme contigo – aplaudo – eres un excelente actor, debo reconocerlo.

- Shizuru, de verdad no sé de qué estas hablando, cálmate por favor – me dice – sentémonos y hablemos – me invita, pero ni loca me sentare – no sé qué cosas te habrán metido en la cabeza, pero de verdad nada es cierto.

Como si le fuera a creer.

- Escúchame bien, porque no lo repetiré – digo seria – Terminamos, no quiero volver a ver tu cara por el resto de mi vida, porque te miro y me das asco, nunca fuiste mi amigo, eso me quedo claro – digo con disgusto para empezar a caminar – Ah y algo más, nunca te ame, solo me sentía cómoda contigo, nada más– después le tire la caja de la sortija al pecho.

Saliendo del living siento como me agarra de los brazos y me da vuelta, y esta vez es su verdadera cara, no la del inocente novio, sino la que se escondía abajo, y lo que veo es a alguien que puede ser muy peligroso.

- ¿Crees que puedes irte así de fácil? – me dijo enojado – Hay mi querida Shizuru, cometiste un error al venir aquí – me lleva de vuelta al living arrojándome al sillón con fuerza - ¿Quién te dijo? ¿Fue acaso tu amiguita la clienta?

- Ella no tiene idea de esto – le digo sin miedo – Yo tengo mis medios de saber las cosas, en especial cuando de repente veo actitudes desconocidas en mi "novio".

Creo que fue buena idea mencionar eso, porque lo veo dudar.

- Bueno, quien allá sido no importa – dice tranquilamente – Te quedaras aquí, hasta que tu padre llegue, y luego hablaremos de nuestro inminente matrimonio corazón – sonríe el cínico.

- ¿En serio crees que me casare contigo? – pregunto riéndome.

Pero parece que no le causo gracia porque de repente lo tengo encima de mi aprisionando mis manos, no lo vi venir, rayos no debería haber sido descuidada.

- Si cariño, lo creo – me dice cerca de mi rostro – de hecho, estoy seguro.

- Entonces sueña, porque no lo hare – le escupo en la cara, y creo que ahora sí que lo hice enojar, creo que es hora de quitarlo de encima, y largarme de aquí.

Pero antes de que pueda actuar me agarra más fuerte de las manos separando mis piernas con sus piernas, intento soltarme, pero es fuerte, y utiliza una técnica que me deja inmovilizada, deja solo una mano sosteniéndome, para bajar la otra y empezar a subir mi vestido, lo que me deja en shock antes que pueda soltarme. Dios este asqueroso piensa violarme. Entonces recuerdo y grito tan fuerte como puedo, justo antes que él me tape la boca.

Luego, lo único que sé, es que en cuestión de segundos escucho una puerta venirse abajo, y como el cuerpo de Reito es quitado de encima mío, entonces la veo, tomándome en brazos y dando órdenes, a no sé quién, porque lo único que me importa en este momento, es que ella está aquí, ella vino por mí, y me salvo. Entierro mi cabeza en su hombro mientras ella me carga camino al elevador, una vez estamos dentro levanto la cabeza para mirarla.

Se ve tan enojada, como si quisiera volver y matarlo, pero una vez se da cuenta que la miro cambia su rostro completamente y me sonríe, ahora solo muestra alivio, de que estoy aquí en sus brazos, de que llego a tiempo.

- Ya todo paso – me dice – las autoridades lo verán, y las noticias lo desprestigiarán como un violador, me encargare de todo eso – me asegura.

- Natsuki, no es tan fácil, su familia es poderosa.

- Pero la de Mashiro lo es más, y soy socia de uno de sus departamentos, que justamente son noticias, televisión, revistas, periódico, así que hoy mismo estará en todas ellas.

- Espera un momento – digo – Si eso es cierto, ¿por qué no frenaste las noticias malas acerca de ti en el pasado?

- Casi nadie sabe de ese negocio – explica – Así que hubiera sido sospechoso, además no era como si lo usara a mi favor, eso sería mentir, puede que sea idiota, pero no quería llegar a eso.

- Gracias – le digo – De verdad pensé que él…

- Lo siento, debí entrar antes – se lamenta, mostrando la frustración que siente consigo misma – no debí dejar que eso pasara…

Pero yo la interrumpo, y la hago mirarme tomando su rostro.

- No es tu culpa – le digo – Natsuki tú me salvaste, tú me proteges, estoy aquí en tus brazos mientras tú me cuidas, y no hay ninguna otra parte donde desearía estar.

Y entonces acerco su cabeza con mi mano para besarla, es un beso simple y dulce, que no dura más de unos segundos, pero que me hizo suspirar y sentirme bien. Cuando la vuelvo a ver, sonríe completamente.

Llegamos al estacionamiento, y hay una ambulancia esperándonos. ¿Qué?

- ¿Por qué hay una ambulancia? – pregunto extrañada.

- Tus muñecas, las tienes lastimadas, ellos las revisaran, tomaran fotografías que serán pruebas contra el malnacido.

Entonces me fijo que tiene razón mis muñecas están rojas, y duelen, tienen las marcas de que alguien me sostuvo fuertemente. Pero lo que me extraña es lo rápido que sucedió todo, ósea no han pasado más que unos minutos y una ambulancia ya está aquí.

Natsuki tiene muchos secretos al parecer y más contactos de los que creí, tantos, que le acaba de declarar la guerra a los Kanzaki sin ningún temor. Todo esto me intriga, pero lo dejare para después, en este momento estoy demasiado cansada, ha sido un día con muchas malas sorpresas y sustos.

Así que después que me revisan y sacan las fotos que necesitan más mi declaración, Natsuki me coloca en el asiento de copiloto, reclinando el asiento y yo caigo en el mundo de los sueños.

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Natsuki

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Shizuru estaba furiosa cuando salimos del restaurante, así que le pedí manejar yo, en todo el camino decidí no hablar, se notaba que no deseaba conversar, eran demasiadas cosas que asimilar, que sabía que no debían ser fáciles, así que la deje manejarlo a su manera.

Una vez detuve el auto en el estacionamiento ella al fin reacciono. Cuando dijo mi nombre tan rota, sentí que se me rompía el corazón por ella, por no poder sanar eso que la dañaba. Entonces hice lo único que podía, abrí mis brazos y ella enseguida vino hacia mí, escucharla llorar y gritar era como si me apuñalaran el corazón, quería acabar con su padre y Reito por dañarla así. Y lo haría.

Pero cuando me conto que no había aceptado la propuesta de Reito y dijo que estaba confundida porque yo aparecí, sentí como mi corazón saltaba de felicidad, reconoció que quiere de verdad estar conmigo y dios que estaba eufórica por eso, estos días juntas sabía que teníamos algo, los besos, coqueteos y demás, pero ella ahora me lo dijo.

Cuando se bajó del auto a arreglarse llame a Nao rápidamente.

Nao: Cachorra.

Yo: Necesito apoyo en el departamento de Reito.

Nao: ¿Qué sucede?

Yo: Muchas cosas, pero siento que algo pasará, y Shizuru podría estar en peligro.

Nao: De acuerdo, ¿qué necesitas?

Yo: Usa a tus infiltrados en la policía, mándalos para acá a la espera de mis ordenes, y ten una ambulancia en el estacionamiento en caso de que la necesite.

Nao: ¿No crees que exageras?

Yo: No tengo tiempo para explicarte las nuevas cosas que se por Mashiro, pero debo dar todo de mi para protegerla, ¿está claro?

Nao: Tu mandas, enseguida mando todo para allá, mantente conectada en la otra línea.

Con eso corto y me bajo del auto para acompañarla, se ve muy enojada, y con rabia, así que cuando subimos al ascensor le tomo la mano y ella se relaja, cuando entrecruzo nuestros dedos, nuestras manos calzan perfecto.

Una vez estamos afuera me pide lo que sé que me va a pedir, aunque no me guste, porque yo conozco de lo que es capaz, pero aún no puedo decirle todo, menos acá con ella enojada, y aunque le insista, sé que no me dejara entrar, así que le hago prometer que gritara, ella acepta eso, pero aun así coloco un muy pequeño micrófono en su bolsa, solo por si acaso.

Me coloco mis audífonos, uno conectado al micrófono de Shizuru, el otro con Nao.

Mientras escucho como Shizuru le grita y el malnacido niega todo, los dos policías ya están aquí, además de uno de los hombres de Nao que es una mole, ideal para tumbar una puerta, es una suerte que Nao haya tenido gente vigilando cerca, ahora solo queda esperar, no quiero que nada le pase a Shizuru, así que hare de todo para arrestar a ese tipo y arruinarlo.

Entonces escucho como él cambia la voz, dejo de fingir, y creo que el bolso se cayó, por el sonido, ¿debería entrar ahora?, o ¿esperar? Lo siguiente que se es que lo escucho hablar de mí, sobre que su padre vendrá y que se casarían, pero cuando Shizuru se ríe, todo se escucha más tenso, y ahí es cuando me doy cuenta de que algo más pasa, porque la escucho forcejear, y de repente el grito, en segundos la puerta esta abajo, quito a Reito de encima de ella, y los policías lo esposan, yo simplemente tomo a Shizuru en mis brazos y la saco de allí.

Al ver sus muñecas y como tembló, me entra una rabia, debería matarlo, pero a la vez tengo rabia conmigo misma, no debí haber esperado, debí entrar antes, mas aun sabiendo lo hijo de puta que es en realidad.

Lo único bueno es que apenas se derrumbó la puerta una cámara capto a Reito en la posición precisa para demostrar que era un violador. Así que no podría mentir en la estación de policía.

Le explico a Shizuru sobre como hundiré a Reito, y se nota que esta sorprendida, bueno es normal, todos piensan que solo gano carreras, pero mi dinero esta invertido en muchísimas cosas, y es tiempo de usar ese poder escondido para proteger lo que amo, así que eso hare.

Hace 7 años atrás deje que esta hermosa mujer me odiara y no hice nada para arreglarlo, lo que ella escucho y después pensó, fueron cosas que se podían explicar, o al menos debería haberla seguido, pero mi idiotez, e inseguridad no me dejo, si pudiera retroceder el tiempo, habría salido corriendo tras ella, hubiera ganado todo este dinero y poder con ella a mi lado, mientras ella cumplía su sueño también, no habría tenido que lidiar con Reito, habría hecho todo para cuidarla desde un principio, pero no lo hice, y aunque quisiera retroceder el tiempo, es imposible.

Perdí muchos años, pero ahora ella está aquí, conmigo, y usare todo lo que tengo por hacer las cosas bien esta vez, aunque tenga que ir contra la familia Kanzaki o la familia de Shizuru, no dejare que nadie la toque, quizás el pasado se no pueda cambiar, pero puedo cambiar el presente y el futuro, y en ese futuro Shizuru estará conmigo, y no la volveré a dejar.

Al llegar a la casa de Shizuru la dejo descansando en el auto, mientras entro rápidamente, recojo mis cosas, luego voy a su pieza y armo una maleta, con su ropa, recojo sus cosas de trabajo y coloco todo en el auto. Cierro todo y vuelvo a subir para manejar a mi casa.

Cuando estamos por llegar Shizuru empieza a despertar.

- ¿Dónde estamos? - dice abriendo los ojos.

- Casi llegando a mi casa.

- ¿Cómo? – se sienta rápido - ¿Por qué vamos a tu casa?

- Después de lo que paso es obvio que los Kanzaki no se quedaran tranquilos – contesto – y si son como los describió Mashiro, tu casa no será segura. – le explico – Pero mi casa está llena de la más alta seguridad, así que estarás bien conmigo – le sonrió – Piénsalo como unas minivacaciones, donde tendrás todas las comodidades, además que aún me estarás vigilando.

Entonces ella me sonríe.

- Minivacaciones, ¿eh?

- Sí, tendrás piscina, jacuzzi, sala de cine, de juegos, sauna, y muchas cosas más – le cuento, mientras ella abre más los ojos – No te sorprendas, sabes que soy media exagerada.

- Creo que disfrutare mis vacaciones – dice – pero aún tengo que hacer mi trabajo, además no traje nada.

- Pase a tu casa, empaque ropa, y otras cosas, además traje tus cosas del trabajo.

- Ósea tienes todo super planeado.

- Solo quiero que estes bien – la miro al detener el auto antes de entrar – Déjame cuidarte.

- Esta bien – dice – pero deberás explicarme ciertas cosas después, algo me dice que sabes mucho mas de lo que se.

Asiento y abro las puertas, entro con el auto de Shizuru hasta donde están todos los míos. Luego la ayudo a bajar, y empiezo a entrar las cosas que traje de su casa.

La instalo en la habitación de al lado, por cualquier cosa, además le señalo, otra habitación que sirve de oficina, para que instale lo que desee de trabajo allí, y la transforme como quiera, ella solo me mira todo el tiempo, mientras me muevo y le voy explicando todo sobre la casa también y cómo funciona cada cosa, solo quiero que se sienta cómoda, y en casa.

Le preparo un té mientras ella me espera en el living, y cuando vuelvo conversamos un poco, quiero asegurarle que conmigo estará bien, que la cuidare completamente. Que entienda que de verdad me preocupo.

Y luego pasa algo que solo me deja sonriendo, porque ella me da un beso en los labios, pronunciando mi nombre tan sexy y se va a ducha, para prepararse para dormir, la verdad es que ni me había dado cuenta de la hora, todo paso tan rápido luego del café con Mashiro, que ahora que veo la hora son más de las diez de la noche, yo no me duermo muy temprano, pero Shizuru debe estar exhausta, así que mejor que tenga una buena noche y descanse.

Me preparo un café y me siento en la terraza que da a la piscina. Solo doce días viviendo juntas y pareciera muchísimo más tiempo con todo lo que ha pasado.

Pero de esos la mitad han sido un sueño, con nosotras dos, descansando y formando un vinculo que las dos queremos. Conociéndonos mas cada día, me gusta demasiado todo esto.

Pero la sonrisa se me borra al pensar en lo que estuvo a punto de pasar si no hubiera entrado por ella, siento que podría ir directo a la estación de policía donde este y matarlo, pero esto me recuerda que debo saber que sucedió, así que llamo a Nao.

Yo: Araña.

Nao: Cachorra, hasta que te dignas a llamar.

Yo: Estaba ocupada.

Nao: Me imagino, en todo caso estoy llegando a tu casa.

Yo: Te espero.

A los cinco minutos siento como abren la puerta principal, y luego Nao aparece para sentarse al lado mío.

- Me debes muchas explicaciones Natsuki.

- Lo sé – suspiro.

- ¿Qué sucede? – pregunta - ¿Por qué acabo de hacer que arresten al niño bonito? Pensé que dijiste que esperáramos.

Agarro mi cabeza, nada es fácil conmigo, Mashiro tenía razón.

- Reito es un malnacido – empiezo – no solo engaño a Shizuru por seis años, haciéndose pasar por su amigo y luego novio, porque tenía un trato con el papá de Shizuru – me empiezo a exaltar – como ya sabíamos, Mashiro ya tiene todas las pruebas de eso, y de otras cosas, pero además… -dios que rabia me da - que apenas le muestra su verdadera cara a Shizuru intenta violarla – digo ya gritando de rabia - ¿Cómo? ¿Cómo pudo intentar hacerle eso? Debería haberlo matado.

- Vaya resumen, estoy segura de que hay muchísimo más, pero eso me deja ver varias cosas – dice Nao analizando todo, sé que está pensando como la jefa de sus redes, y conexiones – Si ese tal Reito es quien dicen mis hombres que es, además de las pruebas de las falsas noticias contra ti, mmm… esto no te saldrá muy fácil Natsuki, más si tomas en cuenta que todos estos días he estado pensando en que tanto Shizuru como Reito son herederos, por lo que hay que saber que paso dar.

- ¿Crees que no lo sé? – le digo – Joder sé que esto es tremendo, pero no es como si fuera solo un punto inservible – le señalo – y la ventaja es que ellos esperan a una don nadie con mal pasado, que ahora solo es deportista, no todo lo que tengo en secreto, por ahora él solo vio que debía ser cuidadoso, pero no se imagina más allá.

- ¿Estas segura de esto?

- Si, ella lo vale todo – contesto segura – Así que si tengo que sacar todo lo que tengo para protegerla, lo hare.

- Eso quiere decir que volverás a trabajar conmigo también.

- Cuando empezaste toda tu organización que honestamente parece más Yakuza que otra cosa, te apoye y trabaje un año contigo para armarla, porque tú me apoyaste en mi sueño.

- Si, y luego dijiste que no era lo tuyo, que querías concentrarte solo en las carreras, que de ese trabajo me encargaba yo, y ya han pasado seis años desde entonces.

- Volveré – dije seria - nunca he dejado de entrenar, y manejar armas tampoco me cuesta – es la verdad - pero entre mis compromisos deportivos, quiero que me entrenes más con mis armas, para eso tenemos el sótano inmenso acá vacío.

- Lo empezare a armar mañana, y mandare a instalar más seguridad en cada punto de esta casa y alrededores, además pondré a diez de mis hombres para que vigilen desde afuera.

- Pareciera que nos preparamos para una guerra – digo irónicamente.

- Porque parece que puede llegar a serlo, en estas horas he descubierto que los Kanzaki han desaparecido a más gente de la que te puedas llegar a imaginar y los Fujino no se quedan atrás, si me llamas yakuza a mí, créeme ellos son peor, porque al menos yo tengo honor, ellos no.

- Mashiro ayudara, con la parte empresarial – explico – nosotras preocupémonos de esta área, ya que informantes de Mashiro dijeron que Reito está contratando mercenarios.

- ¿En serio?

- Si – respondo – al parecer quiere hacerme desaparecer de manera mas discreta, y que no los asocie a ellos.

- Esto es una mierda.

- Si que lo es – suspiro – por mientras deja que lo arresten solo por lo que paso hoy, en una semana sacaremos a la luz sobre como él estuvo detrás de las falsas noticias en contra de mí, y luego golpearemos mas allá, a su familia, exponiendo sus malversaciones de fondos.

- Me gusta tu plan.

Nos tomamos unas cervezas y seguimos hablando otro rato, me cuenta como Reito está detrás de las rejas, que se presentaron las fotografías, los exámenes médicos, declaración y testimonio de testigos. Es obvio que saldrá bajo fianza hasta que haya un juicio, que se ira agravando con las semanas, pero mientras tanto le darán una buena paliza en la celda, por algo pague para eso, destaque muy claramente que le pegaran tanto en la entrepierna que ya no la sintiera jamás.

Lo bueno es que aunque salga bajo fianza, las noticias lo van a basurear, está listo todo para transmitirse a primera hora, mande a incluirlo en los titulares de los periódicos también, y Nao le pago a muchos influencers, y gente que va a esparcir más la noticia, además de generar odio hacia él en cada comentario, cuando los Kanzaki intervengan ya va a ser tarde, porque todos los importantes ya habrán opinado en contra, y no pueden detener una noticia que no se esperan, así que jaque mate en esta malnacido, el primero de muchos.

Después que Nao se marchara me duché, y caí agotada en mi cama.

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Shizuru

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Después de despertar en el auto me encontré con que Natsuki me había traído a su casa, me sorprendió mucho, pensé que simplemente iríamos a mi casa, pero ella me planteo que no estaría segura allá, y sinceramente creo que tiene razón, lo que me sorprendió aún más es que hubiera pasado por mi casa para empacar mis cosas e incluso traer todas las cosas de mi trabajo, es increíble.

Me planteo todo como unas minivacaciones, y la verdad es que después de todo el estrés de este día esta casa seria como vacaciones, lo cual es fabuloso después de nuestros días en el lago, en especial después que me fue mostrando cómo funcionaba todo.

Ella estaba tan pendiente de mí.

- ¿Necesitas algo más? – me preguntaba al verme recorriendo la que sería mi oficina según ella, era enorme.

- Creo que es demasiado.

- No digas eso, podemos instalarle lo que quieras, vi que tenías una pequeña librería en tu dormitorio, acá podrías instalar algo así, además de sofás para sentarte a leer, puedes comprar un escritorio más grande, ehhhh… adornarla como quieras – me explicaba como si quisiera que armara todo desde cero a mi gusto, y nunca me fuera – Si no te gusta la pintura, la podemos cambiar también…

- Natsuki – la frene – Esta bien, tranquila, me agradan muchas de tus ideas, así que veremos qué hacer, gracias.

- Solo quiero que te sientas en casa Shizuru – me decía mirando nerviosa – Se que quizás no son las condiciones perfectas o que había imaginado para que te mudaras conmigo… - se sonrojo – Ósea… lo que quiero decir… que te sientas bien.

Mmm, Natsuki se había imaginado que me mudaría con ella, interesante. Tan linda mi Natsuki.

- ¿Hay algo más que necesites? – preguntaba - ¿Te gustaría un té?

Esta mujer me derrite, quien diría que la seria princesa de hielo, de la preparatoria terminaría siendo así conmigo, es que parece imposible, como si fuera un cambio de 360°, que he podido descubrir estos días con ella.

- Me gustaría un té, gracias – le sonrió, y ella sale rápidamente hacia la cocina a prepararlo.

Mi vida había cambiado completamente desde que Natsuki volvió a mi vida, pase de odiarla y quererla matar, a estar feliz a su lado, y sentirme segura.

Ahora que lo pienso, si ella no hubiera aparecido, jamás habría visto esa actitud de Reito el otro día, tampoco me habría enterado de nada porque solo me relaciono con mi círculo íntimo, jamás hubiera escuchado a Mashiro Blan diciéndome todo lo que pasaba.

Puede que no podamos retroceder el tiempo y cambiar el pasado, que nos separó, y me daño, pero podemos agradecer el presente, y como la vida nos volvió a unir, porque sin Natsuki, habría terminado con una vida horrible, al lado de mi padre y con un esposo que es un monstruo, sin embargo, ahora estoy con ella sintiéndome feliz.

Pase a sentarme en el living, y Natsuki volvió trayendo con cuidado mi té, que olía delicioso.

- Aquí esta – me ofreció.

- Gracias, de verdad – la mire queriéndole decir con mis ojos lo aliviada que estaba por tenerla conmigo.

- No es nada Shizuru – me dijo – Tu solo relájate que yo me encargo de todo.

- Vas a tener que explicarme que significa eso.

- Todo a su tiempo – dijo.

La mire seria.

- Tranquila Shizuru – me miro calmada – Jamás haría algo para dañarte, a los demás sí, pero a ti no.

- Eso no me deja más tranquila.

- Es un decir – sonrió – Solo quédate tranquila, sabiendo que nos puedo cuidar y proteger a ambas, sin importar si tu familia o la de él vienen.

De verdad me generaba demasiada curiosidad, a Natsuki no le importaba enfrentarlos, cuando otros estarían aterrorizados, sabia que sabía mucho más.

- ¿Quién eres Kuga Natsuki?

- Alguien que va a dar todo por ti – me dijo segura – puede que quizás aun dudes, o pienses que por el pasado fallare de nuevo, pero te lo juro Shizuru, te demostrare que te llegare a merecer, así que si me preguntas quien soy, solo diré, alguien que daría todo por ti.

Eso me dejo, me dejo… sin palabras, yo Shizuru Fujino sin palabras.

Esto era lo que pasaba con ella, sacaba a relucir todas las emociones que siempre cubría perfectamente, pero contra ella no tenía escudo, ni barreras, y eso era lo que me había asustado, pero ya no me asusta más. Todos estos días en la casa del lago además de lo de hoy me han demostrado que ya no debo estar asustada. Me gusta esto, ser yo misma, y verla a ella siendo ella misma, y no la idiota prepotente.

- Me gustas demasiado Shizuru – me dijo de repente – Bueno de hecho… es más que eso… - se rasco la cabeza sonrojada, tierna – Ósea… mucho más que eso… millones de veces más que eso… - intentaba explicarse, pero la entendía, quiso decir me gustas para que no me asustara si decía algo más profundo, aunque con sus acciones los pasados días y como se había expresado acerca de querer estar juntas lo sabía, sin que lo dijera.

Así que decidí salvarla, por mientras el me gustas estaba bien, sabía que había mucho más, de ella y de mí, pero para empezar después de que al fin terminé con Reito y con todo lo que está pasando es una buena base.

- Tu también me gustas mucho Natsuki – le sonreí, y lo puedo jurar, nunca la había visto tan feliz, sus ojos, su sonrisa, todo brillaba.

- Eso me hace muy feliz.

- A mí también – le dije, y entonces bostece, estoy muerta del cansancio, pasaron muchas cosas malas pero el día termino bien, gracias a esta hermosa mujer que me está mirando.

- Oh debes estar muy cansada – se dio cuenta – Ve a descansar, yo arreglare unas cosas y luego descansare también.

- Si, me duchare y me dormiré altiro – me levante, le di un beso en los labios, y vi cómo se sonrojo, tan tierna – Buenas noches, Nat-su-ki.

Y así me fui a descansar, mientras ella se quedaba sin palabras, por la forma en que la llame y por cómo me fue caminando, moviendo más las caderas.

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Capítulo largo.

Vaya capítulo, sabemos más cosas de Reito, y lo sucio que es. Al menos por ahora ya lo mando a la cárcel desprestigiándolo también. Natsuki y Shizuru pensaron en como el tiempo no se puede retroceder, pero que están felices de estar juntas en el presente. La familia Kanzaki y Fujino son de temer, pero Natsuki esta dispuesta a todo por proteger a Shizuru. Nao de verdad tiene una especie de yakuza a su cargo, así que se pueden proteger, pero muchas cosas pueden pasar. ¿Qué creen que pasara ahora? Se han dicho que se gustan, aunque es mucho más, además que aun debemos saber que sucedió en el pasado.

Muchas gracias a todos los que están siguiendo y leyendo la historia, de verdad eso me hace feliz.

:Invitado: Bueno creo que ya están muy bien, pero es verdad que tienen aclarar cosas, gracias por leer.

Chat'de'Lune: Shizuru ya cayo rendida como dijiste, más después de lo que ha pasado. Reito es alguien que de verdad quiere sacar a Natsuki del mapa, pero como dijo Natsuki jaque mate en esta oportunidad. Ahora muchas cosas mas se vienen. Como siempre un placer leer tus comentarios, muchas gracias por seguir acá después de tantos años, saludos.

: Muchísimas gracias, por el ánimo, y el saber que disfrutas la historia me hace feliz. Jajajaj yo también hacia eso, pero mientras estudiaba, de leer en los descansos.

: Se viene cosas buenas entre ellas, pero también otras cosas, teniendo contra ellas a muchos. Que mal que no te lleguen las actualizaciones, y tengas problemas , pero aun así mil gracias por darte el tiempo de seguir y leer mi historia, además de comentar. Saludos.

Danny: Me alegro de que te este gustando la historia, y gracias por seguirme. Espero que te haya gustado este capítulo. Saludos.

Saludos a todos y cuídense.