Capitulo XIV
Toscana, Italia
Gretta se movía con gracia entre los viñedos. Estaba satisfecha con lo bien que se estaban dando los cultivos. Revisaba cada detalle, faltaba muy poco para el término de la cosecha, así que pronto Jihoo regresaría a Casa. Quería que encontrara todo Perfecto. Su estancia en Corea fue muy placentera, sin embargo, no pudo evitar sentirse inquieta por algunas actitudes de su novio, aunque al final, El estuvo como siempre.
Por fin conoció a Jandi, y pudo ver que era una mujer muy hermosa, pero sobre todo, alguien en quien cualquiera confiaría, entregada a su desempeño como Médico. Se veía una mujer muy inteligente, fuerte y capaz igual que ella. Por algo, era la prometida del hombre más rico de Corea. También pudo conocer en persona a Gu Junpyo, escuchó de él por su tío, le había dicho que rechazó la compra de los viñedos y que fue Él quien le proporcionó el contacto del Imperio Yoon, pero no supo más de él. Ella sabía que Jihoo tenía dinero en Corea, pero no tenía idea que formaba parte de los 4 hombres más ricos y poderosos del País. Algo que Jihoo jamás hizo notar. Estaba segura de que en la viña, nadie tenía idea de quién era realmente Yoon Jihoo, puesto que él trabajaba igual que todos, no le importaba ensuciarse o comer en un picnic en medio del campo con sus trabajadores. Trataba a la servidumbre como amigos, y siempre estaba preocupado por el bienestar de todos. Una risa se asomó en su rostro cuando recordó cómo al principio, ella desconfiaba de él, pero con esas actitudes que tenía con todos, cayó irremediablemente bajo sus encantos, enamorándose perdidamente de él. Aún recordaba su primer beso.
Era un día soleado de mucho calor. Pero para Gretta era un día muy emocionante, porque era el último día de cosecha.
-Gretta! Ya está listo el desayuno! Ven a comer!- le gritó su abuela.
-Voy!- contestó
-Que cocinaste hoy abuela?, ¡Abuelo Seok!!- dijo muy alegre y corrió a abrazarlo.
-Ya ya niña! – dijo el Abuelo Seok,- todavía no entiendo estas costumbres de abrazar todo el tiempo-, Gretta moría de risa.
J-Hola Jefe!- le dijo a Jihoo que ya estaba comiendo. El solo levantó el rostro en modo de saludo.
-Espero que hoy no discutan entre ustedes- Dijo la abuela.- El año pasado, la cosecha fue buena, pero pudo haber sido mejor si no hubieran peleado ese día-.
-No discutiremos abuela- la tranquilizó Jihoo.
Terminaron de comer y los ancianos les desearon suerte y bendiciones a ambos. Salieron rumbo a los viñedos. Iban discutiendo de quien recaudaría la mayor cantidad de uvas. Llegaron y Gretta lo retó.
-A ver cuánto puedes hacer Yoon Jihoo-
-Este año es mío! -Le dijo Jihoo.
-Ya veremos- y ambos tomaron sus canastas y corrieron entre los campos para cosechar uvas. Cuando terminaron, compararon sus canastas, ambas tenían la misma cantidad, Pero parecía que la canasta de Jihoo estaba ligeramente más llena.
-Creo que Gané, Señorita Gretta – , ella arrugo la nariz un poco
-Quizás! Pero el próximo año, no te dejaré ganar.
Jihoo abrió los ojos. – osea, que me dejaste ganar?-
-Asi es! De otra forma no lo hubieras logrado.-
Jihoo entrecerró los ojos.- Te castigaré por no darme el crédito.-
Ella iba a responder, pero fue jalada por las mujeres de la viña. Era hora de la tradicional "Pisa de Uva", un espectáculo que a Jihoo le encantaba ver. Todos los hombres se pusieron alrededor de unos enormes contenedores, los cuales estaban repletos de uvas frescas. Cada uno debía escoger a una Mujer para que entrara en ellos, normalmente eran sus hijas, esposas o novias. Las mujeres se lavaban los pies en la orilla de los contenedores y esperaban a quien las cargaría para meterlas al contenedor. Gretta estaba de pie, esperando a algún trabajador o al capataz para que la metiera, como sucedió el año anterior. Pero se sorprendió al ver que frente a ella estaba Jihoo. Su corazón empezó a latir muy rápido. Ya había sucedido en varias ocasiones, pero esta vez, era realmente preocupante. Él la tomó de la cintura y la acercó a él, sus rostros estaban muy cerca.
-¿Lista?- le dijo.
Gretta por un momento no reaccionó al sentir su aliento tan cerca. Así que solo asintió con la cabeza.
Jihoo se mordió el labio inferior y la cargó con toda su fuerza para meterla al contenedor. Una vez adentro, Gretta se levantó la falda y empezó el tradicional baile. Gretta estaba llena de jugo de uva por todo su cuerpo, y estaba feliz, realmente feliz. Los hombres aplaudían alrededor mientras disfrutaban del espectáculo. Ella pudo ver a Jihoo aplaudiendo y riendo y… algo más que la puso nerviosa. Cuando terminó la danza, los hombres empezaron a sacar a sus mujeres del contenedor.
Jihoo volvió a tomar a Gretta de la cintura para sacarla pero no la soltó. La mantenía abrazada a él. Gretta se sintió muy nerviosa. Él tomó algo de su frente y se lo llevó a la boca.
-Están deliciosas!- dijo El.
Gretta sentía el corazón desbocado y un calor recorrerle todo el cuerpo, a pesar de estar toda empapada. Jihoo la tomó de la mano y se la llevó corriendo hacia los campos. Estaba cayendo la tarde, y las tonalidades naranja y amarillo hacían un paisaje hermoso. De pronto Él se detuvo.
Ella lo veía confundida, pero sentía que su corazón quería salirse de su pecho y no por la carrera.
Él la recorrió con la mirada y luego dijo;
-Te ves realmente sexy haciendo eso. ¿Esa tradición está hecha para alterar a los hombres?- Le preguntó.
Ella sintió que sus piernas ya no le respondían. Nunca Jihoo había sido tan directo. Y entonces, sin previo aviso, sintió sus labios sobre los de ella. El beso fue suave e intenso.
Cuando se separaron, Jihoo la miró con ternura, y le acomodó un mechón de pelo. Ambos sonrieron nerviosos.
-La abuela Emma va a estar satisfecha de que esta vez no peleamos.- le dijo Él.
Ella sintió que no podía resistirse y le rodeó el cuello, diciéndole,
– No quiero pelear-
y lo besó de vuelta de forma más apasionada.
Gretta atesoraría ese momento como único. Después de ese día, vivió los momentos más felices de su vida.
-Señorita Gretta!- le dijo Lorenzo que había llegado hasta ella corriendo.
- Le busca su Tío y otra persona en la oficina del Patrón!-
-Te dijeron que querían?
-No Señorita! Sólo que es Urgente.
-Está bien! Voy para allá. Gretta se Montó en su caballo, y dio vuelta para regresar a la Casa Grande.
Entró en la oficina y estaba su Tío con un hombre de rasgos asiáticos. Se pusieron de pie al verla.
-Gretta!! Como te va sobrina?- le dijo el Señor Bianchi y se acercó a ella para darle un efusivo abrazo y un beso en la mejilla. – cada día estás más hermosa!
-Hola Tío!- contestó ella sin mucho entusiasmo y algo contrariada.
- Mira, te presento al Señor Lee Kun He. Él y su esposa conocieron al Doctor Yoon Jihoo en Corea, hace unas semanas. –
-Mucho gusto Señorita Gretta! su tío me ha hablado maravillas de usted y su habilidad como vinicultora. –
- Gracias! , el gusto es mío. Por favor! tomen asiento. – Les dijo ella sentándose en la silla de Jihoo. - A qué debo el honor de su visita?- les preguntó.
- Bueno Sobrina, iremos al grano. El Señor Lee, ha viajado desde Corea para estar en el lanzamiento del nuevo vino. Quiere hacer trato con el Doctor Yoon, para exportar el vino en Asia. Pero quiere una garantía de que el Primer Lote será para El.
- Me parece bien! Aunque le advierto que El Señor Yoon, no está interesado en expandirse en Asia, más que sólo en Europa y America. En Asia, solo haría negocios con el Grupo Shinwa
- Precisamente el Presidente del Grupo Shinwa, - la interrumpió Lee, -es quien me cedió la compra del vino para exportar, ellos no están interesados. –
- Eso es extraño- mencionó Gretta pensativa.- Aún así, no puedo garantizar la venta del primer lote sin la autorización de jihoo–
- Querida sobrina!- le dijo Bianchi– Lo más seguro es que al final tu te quedes al frente de los viñedos, el Doctor Yoon tal vez ya no regrese a Italia.
-¿Cómo dices?, Jihoo regresará, él lo prometió. Y no dejará estos viñedos que tanto ama.-
- Antes de venir nos llamó el Señor Gu y, está preocupado de que el Doctor Yoon esté interviniendo en su compromiso. Parece que El y su Prometida se han estado viendo. Es por eso que no piensa asociarse con Yoon y le cedió el derecho al Señor Lee. Siendo él quien hará las exportaciones en Asia, con la condición de que el Señor Yoon regrese a Italia y no vuelva. Pienso que, si eres inteligente, es tu oportunidad de quedarte con la Viña. El conflicto amoroso de esos dos nos daría beneficios a nosotros. – terminó de decir Bianchi mirándola sonriente y de forma sugestiva.
- Si usted me garantiza la primera venta, nosotros nos encargaremos de que Yoon Jihoo regrese a Italia y ceda todos los derechos de la Viña a tu nombre. – dijo el Señor Lee.
Gretta se puso de pie de forma enérgica y se dirigió a ellos indignada.
-Pero, como se atreven a pedirme algo así?! Yo jamás traicionaría a Jihoo!, están hablando con la persona equivocada. –
Bianchi y Lee se miraron entre ellos.
-Estaremos esperando su llamada Señorita Gretta, yo me quedaré unos días más en Italia. – dijo sacando un sobre de su bolsillo. – y juzgue por usted misma, si el Señor Yoon aún es merecedor de su lealtad. – y asentó el sobre frente a ella. – que pase buenas tardes, con permiso. – le dijo haciendo una reverencia y poniéndose de pie para salir.
-Creo que el Doctor Yoon se equivocó al fijarse en la prometida del Presidente de Shinwa, esta cavando su propia tumba. Tu puedes salir beneficiada de todo esto sobrina, piénsalo!- le dijo Bianchi saliendo también.
Gretta volvió a sentarse con los brazos cruzados, bufaba indignada. Miro el sobre frente a ella y solo lo guardo en el cajón. Cualquier cosa que ese sobre tuviera adentro, seguro no era nada bueno para Jihoo. Lo abriría cuando El regresara.
Y que era eso de que se estaba viendo con la prometida del presidente de Shinwa? Esa no era otra que Jandi! Sabía que Jihoo estuvo enamorado de Jandi por muchos años, lo escuchó una vez que estaba hablando su abuela Emma y el Abuelo Seok. Ella estaba ahí sin querer y se interesó cuando nombraron a Jihoo. El Abuelo Seok decía que él sufrió mucho por eso, pues ella había elegido a su Mejor amigo. Y entonces supo el nombre de la persona que lo tenía tan mal desde que llegó al pueblo. Le desesperaba verlo ahogado en alcohol en las bodegas de la viña, varias veces fue a reclamarle que si para eso había comprado los viñedos, para morir ahogado en alcohol. En su delirio nombraba a Jandi y eso la molestaba.
-¿Quieres vivir o morir?- Eso no me interesa! Mucha gente espera que restaures los viñedos, los niños mueren de hambre y tu solo te encierras en estas bodegas a embriagarte por un amor no correspondido!-
Le había gritado una vez que lo encontró tirado en el piso, ahogado en alcohol, le dio coraje y lástima en ese momento. Pues cuando estaba sobrio era un ser humano gentil, amable y muy hacendoso. Un día tomó la decisión de llevarlo al pueblo y que viera las condiciones en las que vivía la gente. Ese día, él lloró frente a los viñedos y pidió perdón, lo escuchó decir que no volvería a pensar en ella y que haría todo lo posible por mejorar la vida de estas personas. Desde ese momento Jihoo empezó a preocuparse por la Viña haciéndola fructífera y escuchando los consejos de los expertos y de Gretta. Lo único que seguía haciendo, era tumbarse Todas las noches sobre la hierba a ver las estrellas, Gretta pensaba que no estaba cumpliendo totalmente su promesa de olvidarla. Odiaba tanto el hecho de que estuviera así por alguien que no lo amaba. No concebía la idea de que alguien no pudiera amarlo. Por eso siempre discutían y se peleaba con él, de algún modo quería que la olvidara por completo y empezara a ser El mismo, o tal vez, es que ella ya se estaba enamorando de él. Se sintió tan celosa la vez que se atrevió a interrumpirlo cuando estaba viendo el firmamento, y ella le comentó que podía comprar una estrella, y después ella recibió el documento del certificado de propiedad a nombre de Geum Jandi. En ese momento deseó ser Jandi, y que alguien la amara tanto como Jihoo la amaba a ella. Y ahora que por fin tenía su amor, no iba a dejar que se lo quitaran. Mucho menos Jandi, que por sus antecedentes sabía que nunca amo a Jihoo. Ella estaba segura de que Él la amaba a ella ahora y Jandi solo era su pasado. Él se lo confirmó en su estancia en Corea y también en las pláticas que ha tenido con él en estos días por teléfono. ¡No! Jihoo no podía estar otra vez enamorado de Jandi y mucho menos estar saliendo con ella, pero existía ese miedo, la abuela Emma se lo hizo ver cuando Él se fue. Sería un tonto si volviera a ilusionarse. Esperaría su regreso y como se lo dijo una vez, lo amaba tanto que solo quería verlo feliz y si eso significaba perderlo, tenía que asegurarse que no sufriría de nuevo, pero ahora, El era de ella y si alguien quería quitárselo, tendría que enfrentarse a ella primero, aún si esa persona fuera Geum Jandi.
Con esa determinación se puso de pie, se puso su sombrero y montó su caballo para ir a los viñedos.
Seúl, Korea
Jandi se encontraba en la oficina del Jefe de Pediatría, tocaba la placa que antes tenía su nombre y que ahora rezaba "Dr. Kim Yun Ho, Jefe de Pediatría". Era injusto que Jihoo la haya despedido sin justificación válida.
La puerta se abrió.
-Doctora Geum! Regresaste!- le decía el Médico que más apreciaba Jandi.
- Hola Doctor Kim!- le contestó Jandi sin mucho entusiasmo. – Veo que te ascendieron.- le dijo señalando la placa.
-Si bueno, el Doctor Yoon me había dado el puesto temporalmente, luego tuvo una reunión con nosotros y nos dijo que probablemente ya no regresarías debido a una solicitud de traslado. Me preguntó si quería continuar en el puesto. Le dije que si, pero que si regresabas te lo daría de inmediato y él estuvo de acuerdo. Y veo que regresaste! Lo cual es un alivio! Te necesitamos Jandi!- le dijo el doctor con ojos suplicantes.
Jandi suspiró torciendo la boca. – Lo Lamento!, estoy despedida!-
-¿Qué? No puede ser! El doctor Yoon no ha abierto vacantes porque esperaba tu regreso. ¿Cómo es que estas despedida?
- ¿No abrió la vacante?-
-¡No! Me encargo a mí abrirla en caso de necesitarla, y.. no me ha dicho nada. –
Jandi estaba confundida. ¿Por que la despidió entonces, si esperaba que ella volviera?
De pronto se abrió la puerta de la oficina.
-Oh! Doctora Geum, Bienvenida! Que bueno que ya está aquí!- le dijo una doctora Joven- Tenemos una emergencia del bebé con neumonía. Había respondido al tratamiento del Doctor Yoon, pero tiene una recaída. Doctor Kim, vine a buscarle pero creo que la doctora Geum debería venir, es su paciente. – le dijo.
- Es el bebé Xiao?- preguntó Jandi
- Asi es!- le contestaron ambos.
- Vamos!- le dijo a Jandi el doctor Kim. Pero esta no se movió de su lugar.
-No puedo ir! Recuerdas? Estoy despedida!- le recordó Jandi
- Jandi! Aunque estes despedida, no tenemos neonatólogo! Eres la única que puede revisar al bebé! Es tu especialidad! Debes atender esta emergencia!-
Jandi lo pensó y luego hizo un asentamiento de cabeza.
-Bien! Vamos!- dijo ya con determinación.
-Yo avisaré al doctor Yoon- dijo la Joven Médico.
-Hazlo!- dijo el doctor Kim.
Jihoo salió de su oficina con la cabeza a punto de explotar de tantas emociones y dudas que le provocó ver a Jandi y lo que le dijo. ¿Había roto su compromiso? ¿Qué no se supone que se habían ido de viaje para recuperar el tiempo perdido, y tener un acercamiento más íntimo, según Junpyo?
Cuando fue a su casa le dio a entender que ellos necesitaban ese espacio para recuperar su intimidad, después que se fue, Jihoo tenía revuelto el estómago y quiso romper todo! Ella sería suya y El no podía hacer nada! Era un imbecil nada más! Verla en su oficina, le hizo imaginar las caricias y besos que debieron compartir en esa playa, entregándose mutuamente. El odio de saber eso le nubló la mente y la despidió. No iba a soportar verla y saber que ya no sería suya. Sabía que él no tenía ningún derecho de sentirse así, ellos estaban prometidos, pero últimamente todo lo referente a Jandi le causaba un caos mental y emocional.
-Doctor Yoon! Doctor Yoon! Se solicita su presencia en el Area de Cuidados Intensivos de pediatría!-
Se escuchaba en el voceador del Hospital, interrumpiendo los pensamientos de Jihoo. De inmediato se dirigió hacia allá. Al llegar se dio cuenta que era el bebé que había atendido horas antes. Su sorpresa fue mayor cuando vio a Jandi haciéndose cargo.
Al llegar, solo se miraron pero ambos no dijeron nada. No era momento de reclamos, había que atender la emergencia.
-¿Qué pasó?- pregunto Jihoo
-El bebé tuvo una recaída, después del tratamiento que sugirió Doctor, parece que sus pulmones estaban colapsando, pero afortunadamente la doctora Geum estaba aquí y ya se encuentra estable.- se apresuró a responder el Doctor Kim
-Deben continuar con el tratamiento que dio el Doctor Yoon- dijo Jandi.
-Efectivamente el bebé tiene Septucemia. Solo tiene que estar unos días más en cuidados intensivos debido a que puede presentar recaídas, necesita seguir en observación hasta que se estabilice por completo. –
- Está bien doctora-
Jandi se quitó el equipo protector y se dirigió a las salida.
Jihoo la tomó del brazo. – Bien hecho! doctora Geum-
Jandi no respondió, sin mirarlo hizo un asentimiento de cabeza. Se soltó de su agarre y salió a los pasillos.
Jihoo salió detrás de ella y empezó a seguirla. Después de varios pasillos, Jandi se detuvo y dio la vuelta para encararlo.
-¿Por qué me sigues? ¿Vas a reclamarme por entrometerme con un enfermo debido a que ya no trabajo aquí?-
Jihoo metió las manos en los bolsillos de sus pantalones y torció una sonrisa.
-No serías tú, si no desobedeces órdenes para ayudar a alguien, aunque tú sufras las consecuencias!-
Jandi lo encaró enojada. -¿Ahora estás analizándome? ¿Piensas que me conoces?-
-Te conozco!- Le replicó él.
Se quedaron viendo sin hablar
-¿Por qué rompiste tu compromiso?- preguntó El
-¿Por qué mentiste sobre la vacante?-Le preguntó ella de vuelta.
Seguían mirándose fijamente de forma desafiante. Al final Jihoo rompió el silencio.
-Creo que ambos no hemos sido del todo sinceros-
