[Demonios de la Vieja Escuela]
Volumen 1:
Life 0
Hyoudou Issei es mi nombre. Aunque todos mis conocidos terminan llamándome Ise.
Actualmente estoy viviendo en mi juventud, siendo más específicos, tengo unos 17 años, estoy a mediados de mi adolescencia.
La escuela a la que voy es una escuela privada, La Academia Kuou. Antes, era una escuela solo para chicas, pero ahora es mixta. Así que la proporción de chicas es mayor que la de los chicos, pero a medida que avanzan los años, aumenta el número de chicos, soy un estudiante de 2do año de preparatoria, en mi clase, la relación entre chicas y chicos es 7:3. Para los estudiantes de 3er año de preparatoria, es de 8:2. Incluso ahora, las chicas tienen una mayor autoridad y la mayoría de los integrantes del Consejo Estudiantil son chicas.
Los estudiantes con los que no estoy familiarizado dirían –¿No es ese Issei?, haciendo que me pregunte porque no han olvidado mi nombre.
Podrán preguntarse, ¿Soy popular?
Y la respuesta es un rotundo NO. No soy popular, al menos no en el sentido positivo de la palabra.
He sido acusado de espiar dentro de los vestidores femeninos del Club de Kendo. Aunque de eso ya ha pasado un tiempo, pero la gente no olvida fácilmente las cosas negativas, ¿no es así?
Bueno… siendo honesto, puedo decir que hubo un tiempo en el que me gustaba hacer eso, y era realmente divertido.
Sip, yo era un verdadero pervertido, y sigo siendo un pervertido.
Es solo que me canse de andar haciendo tonterías todo el tiempo. Llegó un momento en que me di cuenta de lo cansado, que es tener siempre en la cabeza, tonterías sin sentido.
No me dejó de gustar el tema, pero solo pienso en ello cuando quiero relajarme.
Pero me desvié del tema, recuerdo aquella vez en la que estábamos en la sala de almacenamiento al lado del Club de Kendo. Había un agujero en la pared, donde estábamos tratando de espiar.
Sí, "estábamos", en plural, éramos Matsuda, Motohama y yo. Estos dos andaban acaparando el agujero sin dejarme ni el más mínimo espacio, al final, acabe por rendirme y retirarme de la sala.
Ya que esos dos no paraba de decir…
-¡Ohhhhh… Murayama realmente tiene grandes pechos!
-Ahhh… Katase tiene buenas piernas.
¡Por supuesto que yo también quería echar un vistazo! Pero, no tenía las ganas suficientes para hacerlos a un lado y, para rematar, esos dos no sabían cómo controlar el volumen de su voz, y a ese pasa era un hecho de que nos iban a descubrir, así que decidí retirarme, y evitar problemas.
Estaban tan ensimismados en sus fantasías, y en placer que les daba lo que veían, que ni se dieron cuenta de que me había ido.
Entonces, ¿si no te han atrapado, por qué todos nos ponen en la misma clasificación?
Bueno… es bastante simple, porque somos amigos, es cierto que nunca me han atrapado en el acto, pero siempre estoy con ellos, así que todos nos juntan en la misma categoría, tampoco es que se equivoquen, ni nada por el estilo.
Además… siempre termino protegiéndolos de las consecuencias negativas.
Piénsalo, espiar los vestidores femeninos del Club de Kendo, un club de artes marciales, en una escuela en que la gran mayoría del cuerpo estudiantil son chicas. Si te atrapan, estas muerto.
Ahora, teniendo ese contexto, puedes adivinar lo que sucede. La razón por la que a Matsuda y a Motohama no los han hecho puré, soy yo.
Casi siempre logran llegar a tiempo a donde estoy, y si no lo lograran, bueno… los moretones que ganarían tardarían semanas en recuperarse.
A raíz de eso, todas las chicas me toman como el "rey" de los pervertidos. Ya que los protejo, soy uno de ellos, o eso es lo que deben pensar.
Es por eso que tengo tanta mala fama, incluso tengo historias de terror que circulan de chica a chica, los cuales hablan de lo "temible y pervertido" que soy, y que todas las chicas deben alejarse de mí.
Esa es la razón por la que nunca pude tener novia. Al menos hasta el milagro de hace unas semanas.
–¡Por favor, sal conmigo!
Una chica se me confesó en la entrada del plantel, a la hora de la salida.
Por un momento sentí lo que era ser joven. Para un tipo en mí situación, que nunca ha tenido una novia, debería ser un sueño hecho.
El nombre de la chica, ahora mi novia, es Amano Yuuma. Tiene el cabello negro sedoso y un cuerpo delgado. Ella era tan linda que, cualquiera se enamoraría de ella a primera vista.
En realidad, cualquiera hubiera dicho que sí, si alguna belleza se acercara y te dijera:
-¡Te amo, Hyodou-chan! ¡Por favor, sal conmigo!
No sería raro que alguien dijera –¿De qué Bishoujo ha salido esto? –pero sucedió de verdad.
La pregunta es, cómo es que un chico, tan ordinario como lo soy yo, y con la mala reputación que tengo en mi entorno escolar, ¿Cómo pudo ocurrir un milagro como este?
Y la respuesta, o respuestas, son simples.
La confesión no es tan espontanea como se ve a simple vista. Ya nos conocíamos bastante bien, ya que nos encontrábamos al cruzar un puente del parque al cual voy después de clases, al principio ni nos mirábamos, pero, hubo un momento en el que interactuamos por algo tonto, ella tropezó conmigo por andar más pendiente de su teléfono que del camino que recorría.
Desde entonces, cada vez que me ve parado en medio del puente, en el que me gusta observar el correr del rio debajo de mí, ella me busca conversación, empezamos por cosas simples, hasta que después de un tiempo, hablábamos de algunas cosas más personales, como la escuela, o el hogar, nuestros gustos, etc.
En cuanto al porque no se veía influenciada por mi reputación, bueno ella era de otra escuela, así que no sabía nada de eso, es más, yo fui quien le conté la situación, obviamente desde mi punto de vista.
Me imagino que eso dio paso a la confesión.
Hasta ahora, yo creía que estaba destinado a no tener una situación que pudiera clasificarse como romántica, al menos hasta que terminara la preparatoria. Pero parece que el destino le gusta jugar con las situaciones improbables.
Por cierto, a mis amigos no les hizo mucha gracia que consiguiera novia, antes que ellos. Y como no entenderlos, pervertidos o no, que adolescente no quería experimentar el "amor", pero al final, la situación en la que están, es culpa suya, y solamente suya.
Aun así, comencé a sentir lastima por mis dos amigos, así que les di un consejo, si ellos decidían seguirlo o no era cosa suya, ya hacia bastante con protegerlos del peligro.
Ah, en cuanto al consejo, era algo así –Dejen de parecer unos pervertidos sin control en frente de la gente, dejen de creer que las chicas son solo un pedazo de carne de gran atractivo, y compórtense lo más correctamente que puedan, pueden disculparse de sus acciones si es necesario, pero no conseguirán nada teniendo el cartel de "pervertido sin remedio" sobre su cabeza…
En cuanto a que estoy haciendo ahora, bueno… estoy caminado al lado de Yuuma-chan, en el parque al atardecer.
Sí, suena a una escena sacada de un anime de romance.
Hoy fue nuestra primera cita, al menos, la primera que podríamos considerar como "cita oficial"; ya que no es la primera vez que salimos.
Para esta "primera cita", use un plan que tenía desde hace bastante tiempo.
Era un domingo, el día en el que ambos estábamos libres de nuestras obligaciones.
Me levante temprano, me acomode lo más posible, me vestí lo mejor que pude, sin ser demasiado formal o informal, algo que me dio dolor de cabeza.
Llegue al sitio que acordamos, algo más temprano de lo esperado, el sitio en el que acordamos reunirnos fue el puente el que nos conocimos.
Mientras esperaba a que Yuuma-chan llegara, conté las personas que pasaban por ahí, solo por diversión. Durante ese tiempo, recibí un artículo raro de una persona de apariencia sospechosa. Fue una hoja de papel de aspecto sombrío con un extraño círculo mágico y una frase escrita en él: –Tu sueño será concedido. –Cualquiera lo tiraría a la basura, ya que los considerarían baratijas de mal augurio.
–Wow… sí que no pierden el tiempo… -murmure, ya que me parecía una gran coincidencia que recibiera esto en un día como hoy. Lo doble cuidadosamente y lo guarde en mi bolsillo, sin darle más importancia.
Unos diez minutos después, Yuuma-chan llegó, mientras preguntaba: –¿Llevas mucho tiempo esperándome?
–No te preocupes, yo también acabo de llegar. –le dije, en realidad, siempre quise decir eso, vaya… deseo concedido.
Nos tomamos de la mano y comenzamos a caminar. Después de eso, fuimos a diferentes lugares, primero recorrimos diferentes tipos de tiendas, recorrido en el cual aprendí más de moda, que todo lo que había aprendido en toda mi vida. Todo eso mientras conversábamos de cualquier cosa que saliera al aire, mientras disfrutaba de nuestra cita.
Cuando nos dio hambre, fuimos a almorzar a un restaurante familiar, donde comimos un almuerzo ligero, y de postre, Yuuma-chan ordenó un Parfait de chocolate, y yo ordene un Browne con cubierta de helado de fresa.
Mientras tanto, también la miraba, tenía que admitir que ella era realmente hermosa, y mientras estaba concentrada en disfrutar de su postre, le daba un encanto extra. Ahora entiendo como otros adolescentes se sienten cuando van a una cita. Realmente era un sentimiento genial.
Luego de almorzar, fuimos a un pequeño parque de diversiones y nos subimos a algunas atracciones, fue bastante divertido, tomamos una merienda, y nos pusimos a pasear.
Y así es como llegamos al presente.
Estábamos en un parque que se encontraba lejos de la ciudad. El cielo estaba oscureciendo, y el lugar estaba vació. Nos habíamos quedado en silencio por un buen rato, mientras que Yuuma-chan ya estaba lejos de mí, de pie delante de la fuente.
–Hoy fue bastante divertido, y lo digo enserio.
Eso es lo que me dijo, mientras sonreía y se sentaba con gracia en el muro de la fuente.
Maldita sea, ella es realmente linda, solo unas pocas palabras suyas, y logró levantar un buen ambiente.
–Hey, Issei-kun.
–¿Qué sucede, Yuuma-chan?
–Hay algo que quiero hacer para conmemorar nuestra primera cita.
Oh, vaya, ¿realmente vamos a llegar tan lejos?
–¿Y qué es lo que deseas hacer?
Le pregunte con voz serena, algo más profunda de lo que debería, seguramente debe de saber el doble sentido que cargan mis palabras.
Ella se rio un poco, mientras se cubría la boca con una mano, antes de decir: –¿Podrías acercarte un poco? –dijo mientras hacia un ademan con su mano.
–Ok
Yo me acerque a ella a paso natural, mientras fijaba mi total atención en ella, sin dejar que se me escapara ni el más mínimo movimiento, o el más sutil de sus gestos, los cambios en su bello rostro, o la luz de su mirada.
Una vez que estuve a menos de un metro me detuve, ella me sonrío de una manera muy cálida y amorosa.
–Por cierto, antes de continuar, déjame darte un consejo… hay muchas cosas allá afuera, cosas que están atentas a cualquier humano fuera de lo ordinario, seres que se toman la moleta tarea de rectificar la veracidad de su anormalidad, y muchas veces sus objetivos terminan por desaparecer, ya sea que se confirme su anormalidad o no, ya que no siempre nos gustan las pérdidas de tiempo… y tú, te has salvado porque realmente disfrute de la cita, de no ser así, estarías muerto…
Esas fueron sus palabras, dichas con un tono tan dulce, que fácilmente te distraería del tema en cuestión.
Al final puse una cara de confundido, mientras decía:
–No entiendo de que est… -empecé a decir, pero fui interrumpido rápidamente. Yuuma-chan levantó su mano derecha mientras sonreía de manera maliciosa, y me dio un golpecito con su dedo medio.
Dicho golpecito llevaba tal fuerza que no solo me aturdió, sino que me levanto del suelo y me lanzó a volar a varios metros sobre el aire, antes de chocar pesadamente contra el suelo.
Luego de caer, acompase mi respiración y fingí que me había desmayado, ya que, con la fuerza del golpe, cualquier persona normal quedaría noqueado.
En eso volvió a escucharse la suave risita de Yuuma-chan, la cual se notaba con un tono mucho más madura y maliciosa que antes.
–Pobrecito, este mocoso estuvo a punto de morir, y ni siquiera podría darse cuenta, bueno… lo bueno es que ni siquiera podrá recordarme… a pesar de tener aquella infantil fama del "rey pervertido", no parece serlo, o al menos, se contiene correctamente, tuvo suerte de ser agradable, ya estoy harta de esperar la llegada de la mocosa santa, y quería desquitarme con este humano, aunque la cita me termino por quitar algo del estrés que he acumulado…
Hablaba para sí misma, mientras se acercaba a paso lento, se agachó a mi lado y metió una de sus manos en mi bolsillo, sacando el sombrío papel que me habían dado.
–…solo pierden su tiempo, este chico no podría ser más ordinario, y al final nunca lo hubieran conseguido, no conmigo por la zona, jejeje…
Se escuchó el sonido de una hoja rasgándose, antes de que se palmeara las manos, sentí como se erguía y se alejaba en dirección a la fuente, antes de subirse sobre el muro.
–Bueno…será mejor que Amano Yuuma desaparezca… -dijo mientras parecía romper algo sólido con su mano, seguramente un talismán mágico.
En ese momento sentí como una bruma invadía mi mente, pero antes de que pudiera hacer algo, una presencia que solo podría describir como inmensa y dominante, se hizo presente en mi interior, destrozando en pedazos aquella bruma invasiva.
Al mismo tiempo, de la espada de Yuuma-chan, se extendieron unas protuberancias, que empezaron a aletear. Supongo que debían de ser alas con plumaje de color negro.
Esas alas aletearon y la figura de aquella chica despego de suelo, mientras se alejaba volando por los aires, en pocos segundos deje de escuchar el aleteo de sus alas, y el silencio domino todos los alrededores, durante varios segundos.
Nos siento ninguna presencia en las cercanías, ¿y tú, amigo?
[Ninguna, compañero… estamos solos]
Me levante lentamente, mientras me sobaba la cabeza, aquel golpe realmente me había dolido.
[Tal parece que la situación no paso a mayores, podremos conservar nuestra tranquilidad un poco más] dijo la presencia en mi interior, la cual se llamaba Ddraig, el Dragón Galés, unos de los dos dragones celestiales del mundo.
Él era la razón por la que yo no soy un humano normal, y también es la causa de la llegada de "Yuuma".
Lo conozco desde los 11 años, y conocerlo fue realmente un trauma. Enterarte de golpe que el mundo en el que vives no es tan normal como creías, sino que hay todo un mundo sobrenatural en las sombras.
Toda historia, relato, mito o leyenda existente eran reales, exageradas, pero reales en su gran mayoría.
Incluso las religiones del mundo eran, en concepto, verdaderas, con la mayoría de sus historias siendo verídicas y, disputándose la hegemonía, el control de la fe y creencias de los humanos, pero eso es una historia para otro momento.
El punto es que el hecho de tener a Ddraig sellado en mi interior me hacía un individuo con el potencial de agitar el balance del orden del mundo sobrenatural, razón por la que podría ser temido y odiado, a la vez que valioso y deseado.
Razón por la cual me mantengo oculto, lo más que puedo.
Ddraig, el ser que aborrecí al inicio, pero que, con el tiempo, nos convertimos en buenos amigos; siempre me ha dicho que no podía huir de mi destino, que una vez pisas el mundo sobrenatural, no es fácil salir de él.
Algo que ya había entendido perfectamente con los años, aun así, deseaba conservar esta normalidad por unos años más, al menos hasta que terminara la preparatoria, ahí podría decidir qué hacer con mi vida.
-Sí, esa Caída no tiene ningún signo de delicadeza, pudo haber usado magia para desmayarme, no había necesidad de noquearme, tch… –murmuré con fastidio.
[Mírale el lado positivo, eso te sacara de la mira de los Demonios de tu escuela]
Sí, esa es la única buena noticia…
Me limpié el polvo de la ropa, y me dispuse a irme a casa.
Life 1. No soy un humano ordinario.
¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep!
–Ummmm.
El molesto despertador empezó, y continuo, sonando por unos minutos hasta que decidí pararme de la cama y apagarlo. Una vez fuera de la cama, me estiré y desperecé, por unos segundos hasta quitarme el sueño, al menos lo suficiente para irme directo al baño.
Así comenzó mi rutina matutina, bañarme, vestirme y acomodar los implementos escolares, y una vez que tuve todo listo, bajé a desayunar.
–¡Buenos días Mamá!
–Buenos días, Ise… tu comida esta lista…
Dijo ella mientras señalaba varios platos de comida, suficientes para qu personas queden satisfechos, pero… que puedo decir, tengo un gran apetito, tanto así que, no me queda de otra que conseguir algunos trabajos en Internet, ya que me da pena andar gastando la mayoría de la comida, sin que yo reponga nada.
Me senté a comer, o más bien, tragar la comida, lo suficientemente lento para disfrutarla, pero, lo suficientemente rápido como para no demorarme demasiado. Mientras terminaba de comer, mamá me puso dos conjuntos grandes de almuerzo y un termo grande.
–Tu almuerzo… –me dijo con una sonrisa.
–¡Gracias, Mamá! ¡Y gracias por la comida!
―○●○―
–Me voy.
Salí de casa, medio bostezando.
Me quede parado en la entrada, parado con una postura recta, mientras inhalaba una gran bocanada de aire, hasta llenarme al tope, lo retenía unos segundos, antes de soltarlo con una lenta exhalación, repitiendo el mismo proceso, una y otra vez, sintiendo la calidez y energía que fluía por mi cuerpo; al mismo tiempo, mis sentidos se expandieron exponencialmente, los olores y sonidos a mi alrededor se volvieron más intensos y fáciles de detectar, o más bien, mejoró mi capacidad de reaccionar a ellos, a su vez, podía percibir y leer con mayor claridad el flujo y las vibraciones en el aire, usando mí piel, incluso a través de la ropa ligera, como mi uniforme escolar, o pesada, como mis zapatos.
Abrí mis ojos, y volví a experimentar aquel espectáculo, que era casi imposible de describir, lo único que podía hacer era explicar su origen, el cual era, que mis ojos, o mi visión eran más sensitivos a la luz, y no solo al rango visual común de un humano, sino que también, más allá de eso, lo que se llamaría todo, o casi todo el espectro visual, era algo grandioso y confuso a la vez, pero ya estaba acostumbrado.
Todo en este mundo está en constante movimiento, por lo que, todo lo que se mueva es algo que soy capaz de percibir.
Al igual que el flujo de la energía natural a mí alrededor, que entraba y salía con mis constantes respiraciones, vitalizando mí cuerpo, y a veces, también el de mí anfitrión, yo era su medio de respiración, inhalaba la energía natural, que fluía a través de mi cuerpo, hasta donde estaba contenida Ddraig, el cual también "inhalaba" dicha energía, y luego la "exhalaba" hacia mí cuerpo, junto con su poder, aura y vitalidad, la cual fluía por todo mi cuerpo, nutriendo, antes de exhalar los residuos de la energía natural, un proceso similar al de respirar oxígeno, y soltar dióxido de carbono.
Esto es algo que llevo haciendo desde hace años, es lo que me ha vuelto sobrenaturalmente fuerte, y también es lo que ha aumentado mi apetito. Nutrir tu cuerpo con la esencia de un Dragón, y una de alto nivel como el Dragón Celestial Gales, trae muchos beneficios, pero dichos beneficios también tienen un precio, puede que mi vitalidad y vida útil hayan crecido exponencialmente, pero eso me vuelve cada vez menos humano, y por ahora estoy en el límite de la humanidad, avanzar más significa dejar por completo aspectos humanos, a la vez que obtendré verdaderos aspectos draconicos.
Mi opinión sobre eso es bastante neutral, si tengo que sacrificar algo para poder sobrevivir, entonces eso haré.
Con mi última exhalación, di por concluida mi "rutinaria matutina de meditación", aislando y calmando aquella calidez interior, parcialmente, a la vez que mis capacidades sensoriales disminuían su eficiencia, volviendo mi estado en una falsa normalidad, similar a un estado de reposo o de bajo consumo.
Durante el camino a la escuela, repasé mentalmente los temas y asignaturas más importantes, algunas cosas que debía de recordar para después de la escuela e, inevitablemente, recordé los acontecimientos de hace unos días, mientras me recordaba cual era la mejor manera de actuar.
―○●○―
Como mencione anteriormente, la escuela a la que asisto se llama Academia Kuou. Una recién convertida escuela mixta, anteriormente, una escuela femenina.
Así que te preguntaras, ¿qué hago aquí?
Y la respuesta es sencilla.
Primero, tiene un alto prestigio y un alto nivel académico, la mejor academia de la ciudad, y con diferencia, así que, lograr entrar y graduarme de aquí enorgullecería mucho a mis padres, es más, solo de recordar sus miradas de asombro y felicidad cuando logré entrar, me hizo muy feliz, así que decidí seguir con eso; en ese tiempo, me mostraba igual que mis amigos, siendo un pervertido sin remedio, con aspecto de tonto, por lo que la sorpresa de mis padres fue mayúscula, por decir lo menos, y les quitó un peso de encima, algo que yo quería que pasara.
Y hablando de mi perversión, esa fue mi segunda razón, con tantas chicas estudiando aquí, se puede decir era un paraíso para la gente como yo.
¡¿Qué hay de malo en eso?! ¡¿Es tan malo ser un pervertido?! ¡pues no, esta es mi vida! ¡Nadie tiene el derecho a decirme como debo vivirla! Al fin y al cabo, mi sueño de aquel entonces era el de construirme un harem, y ese aun es mi sueño.
¡Voy a construirme un harem, iniciando por esta escuela! Esa era mi meta en aquel entonces, y aunque las cosas han cambiado, y soy más precavido en la escuela, ya que entiendo que tratar a las mujeres como objetos es algo estúpido, y no me llevara a nada.
Sigo queriendo tener un Harem, aunque ahora prefiero avanzar lentamente, paso a paso, no quiero tener un montón de mujeres, solo por tenerlas, prefiero construir relaciones más genuinas, que tener un montón de amoríos vacíos.
Aunque bueno, eso son mis ideas actuales, en aquel entonces me di cuenta de lo equivocado que estaba, y de lo tontas que fueron mis ilusiones. Solo un grupo de chicos son populares entre las chicas de esta academia, eso son los chicos guapos, eso, sumado a mi baja reputación, me convierte en alguien ignorado o incluso repudiado, la mayoría de las chicas me miraban de la misma manera en la que mirarían a la basura tirada en el suelo. Ese fue el cruel, pero obvio resultado.
¿Cuáles eran mis planes de aquel entonces? Mhmm…
Según recuerdo, me iba a conseguir una novia inmediatamente después de entrar a la escuela. Después de eso, habría terminado con ella y comenzaría a salir con una chica nueva, y así sucesivamente. Y en el momento en que me graduara, un montón de chicas se pelearían por mí en un Battle Royal…
Lo sé, es una idiotez de proporciones bíblicas, ninguna chica normal, en sus cabales, se comportaría como yo esperaba, a menos que fuera jodida y sobrenaturalmente guapo, hasta el punto de freírles las neuronas con mi belleza e, incluso con eso, aun sería imposibles, las mujeres no son así, para nada son tontas y, en su inmensa mayoría, no se fijan solo en lo físico, eso solo es la cartilla de presentación, el envoltorio de un regalo, entre más bello, más interés generará, pero si el interior es horrible, bueno, todo se derrumbará.
Una suerte que no tenga esa belleza, porque si no, ni yo me imagino las cochinadas y estupideces que hubiese cometido. Como relata el abuelo Ben, en Spiderman, "Un Gran Poder, conlleva una Gran Responsabilidad".
Llegué a mi salón de clases, mientras soltaba un gran suspiro, y me senté en mi silla.
–Oye, amigo. ¿Cómo te encuentras? Te vez algo decaído, ¿no crees?
El chico que vino a hablar conmigo tiene una cabeza calva y es uno de mis amigos: Matsuda. A primera vista parece un deportista experimentado y lo es, en cierto sentido, pero él también es un pervertido que dice diariamente comentarios que rozan el acoso sexual. Durante la escuela media, era un gran deportista que fijó varios récords, pero ahora, esta en el Club de Fotografía. Le gusta obtener fotos de chicas desde todos los ángulos, por lo que es apodado "Calvo Pervertido" y "Paparazzi del Acoso Sexual", aunque nadie puede negar su talento con la cámara y la fotografía, de las pocas fotos sin ninguna adición subida de tono, todas pueden ser consideradas como impecables.
–Mhmm… Matsuda tiene razón, pareces decaído, ¿dormiste bien anoche…?
El chico de lente que acababa de hablar, mientras ponía una postura de chico genial era mi otro amigo: Motohama. Tenía el peculiar talento o capacidad de poder obtener y medir el valor numérico de las medidas de las chicas, con una sola mirada. Su apodo es "Pervertido de los Lentes" y "Calculador de BCC (Busto, Cintura, Caderas)".
Estos son mis amigos, y juntos podemos ser considerados el trío de perdedores/pervertidos.
Bueno… al menos parece que no han olvidado mi consejo.
–No me pasa nada, solo tuve una noche pesada, eso es todo… –les respondí, con un tono de cansancio –Veo que están siguiendo mi consejo, chicos… –comenté con naturalidad, mientras los sondeaba.
Ambos miraron a todos lados del salón, observando las pocas miradas de disgustos de la mayoría de las chicas, y la indiferencia del resto.
–Sí, tienes razón, si seguimos así, no conseguiremos nuestra primera novia en lo que nos queda de escuela…
Dijo Matsuda, soltando un pesado suspiro.
"Conseguiremos, eh" parece que no recuerdan nada del incidente de Amano Yuuma, bueno, era de esperarse, ellos no dejan rastros.
–Tienes razón, casi se podría decir que estamos vetados de por vida por las chicas, no confían en nosotros, e incluso nos odian… –dijo Motohama, con pesar, y algo de desespero.
–Y con razón, no es como si nuestra reputación estuviera fundamentada sin hechos reales… somos lo que ellas ven, y si no cambiamos eso, por no hablar de una novia, jamás podremos conseguir siquiera una amiga…
Los dos estuvieron a punto de decir algo, pero los interrumpí.
–¡Ella no cuenta! Es demasiado parecida a nosotros para odiarnos, pero eso no significa que le agrademos del todo.
Ambos volvieron a suspirar con pesadez.
Fue entonces cuando sucedió. Mientras me planteaba hacer un plan para la tarde, había un color rojo carmesí que llamo mi atención. Desde la ventana del aula, mire a cierta chica que estaba en la cancha de la escuela. Era incapaz de apartar los ojos de esa chica, que estaba caminando hacia el edificio de la escuela. Tenía un pelo de color rojo carmesí, y su belleza no era la de un ser humano. Su delgada proporción no era la de una japonesa. Obviamente que no es japonesa, la gente dice que ella es del norte de Europa.
Cualquier persona tendría su corazón tomado por ella después de atestiguar su belleza. Su nombre es Rías Gremory, la Idol de la Academia. Ella es una estudiante de tercer año, y por lo tanto mi superior. Me di cuenta de que todo el mundo la miraba, chicos y chicas. Matsuda y Motohama también estaban mirando.
Esto ocurre todos los días.
Todo el mundo la mira cuando camina por delante de ellos. Algunas personas dejan de caminar, mientras que algunos dejan de hablar solo para verla caminar por delante de ellos. El viento sopla suavemente por su cabello mientras todo el mundo la está mirando. Su cabello descendió a sus caderas y luego volvió a volar por el viento. Parece que la vista a su alrededor también se ve de color rojo, al igual que su color de pelo. Su piel hermosa, que era blanca como la nieve, era notable.
Hermosa, es la única palabra que podría usarse para describirla en solo una palabra. Esa es la única palabra que necesitabas para describirla. Siempre dejaba de trabajar cada vez que pasaba, solo para la mirarla. Pero desde hace tiempo, la forma en que la miró cambio.
Ella es hermosa, pero ella era demasiado hermosa. Su belleza asusta, y estaba un poco asustado de su presencia, y también de su identidad.
Entonces, sus ojos se movieron hacia nuestro edificio y me capturaron. Sentí como si su mirada quisiera ver a través de mis verdades ocultas, pero la intensidad había disminuido desde el incidente de Yuuma. Sus ojos azules cambiaron y su boca sonreía un poco.
¿Fue dirigido hacia mí?
Vaya, nunca he hablado con ella antes, pero aun con todo lo que ha pasado, aún tiene su vista puesta en mí, parece que la intuición femenina es realmente aguda. Mientras seguía contemplando, ella ya estaba fuera de mi vista.
Luego de todo ese revuelo, el docente llego y empezó a impartir las clases, y así las clases prosiguieron con normalidad, hasta que llego el recreo, y viendo que mis dos amigos tenían sus narices pegadas a sus cuadernos, pareciendo absortos en estudiar, yo me levanté y salí del salón.
Durante toda mi caminata, la mayoría de la gente me evitaba, en especial las chicas, las cuales me trataban como si fuera una plaga a la cual evitar, o un depredador del cual debían huir, eso dependía de quien me viera.
Había muy pocas excepciones con eso, entre ellos estaba los miembros del Consejo Estudiantil, los cuales, para mi agrado, habían dejado de prestarme atención desde el incidente de Yuuma, todo lo contrario, a cierta pelirroja.
Pero… bueno, ya estaba acostumbrado, por lo que continúe caminado con tranquilidad, subí por las escaleras, hasta llegar a la azotea… sí, el cliché del solitario en el techo de la escuela, un recurso muy gastado en los animes, pero que puedo decir, por algo existe dicho cliché, y a mí me gusta las vistas desde el techo, y el aire libre que puedo respirar, eso sumado a que es el ambiente más tranquilo para comer.
Mientras esperaba que mi suerte fuera buena, y no viniera nadie del Consejo Estudiantil a molestarme, abrí la puerta que comunicaba con la azotea, busque mí habitual sitio, saque mi almuerzo y me dispuse a comer.
–Itadakimatsu.
Después de decir esas palabras, comencé a comer, o como dirían mis padres, tragarme la comida.
En cuestión de minutos, mis dos envases de comida quedaron vacíos. Ya dándome por satisfecho, me recosté en el duro suelo, mientras acompasaba mi respiración, y extendía mis sentidos, en especial el oído y el tacto.
Mientras disfrutaba del natural sonido del viento, y los sonidos que llevaba con él. Me tome la libertad de expandir mi olfato, para tratar de percibir y diferenciar los olores y efluvios que fluían a través del aire.
Mientras contaba y clasificaba mentalmente, los tipos de olores y sonidos que percibía, detecte el sonido de unos pasos muy ligeros, que se acercaban poco a poco desde las escaleras.
Fui capaz de reconocer el sonido y patrón de dichos pasos, resulta que pertenecen al otro visitante, aunque mucho menos frecuente, de esta azotea.
Con el sonido de las viejas bisagras anunciando la apertura de la puerta, dicha persona entro sin detenerse, camino a un punto a varios metros de mí, y se sentó, permaneció en silencio, salvo su suave respiración.
Sentía su mirada clavada en mí, lo cual era algo molesto, aunque ya me había acostumbrado un poco a su presencia.
Saqué un paquete de dulces de chocolate, y se lo arroje en su dirección, escuche como lo atrapaba con facilidad, y parecía inspeccionarlo.
–¿Qué es esto?
Pregunto una voz femenina, la cual cargaba una extraña vacío y somnolencia.
–Los dulces que tanto te gustan…
Le respondí, con un tono relajado.
–¿Por qué?
–Mhmm… bueno, considérelo un agradecimiento por hacerme compañía de vez en cuando…
–…Gracias…
–No hay de que…
Escuche como ella abría el envoltorio, y comenzaba a comérselos uno a uno, lentamente, como si quisiera degustarlos lo máximo posible.
De esa manera, pasaron varios minutos de relativo silencio, hasta que el final de recreo estuvo cerca, y recordando que quería ir al baño, decidí levantarme.
Mientras lo hacía, abrí los ojos y le lancé una mirada, y nuestros ojos de encontraron.
–Nos vemos en otra ocasión. –le dije, con tranquilidad, dándome la vuelta, y retirándome hacia la salida.
–Adiós –fue lo único que me respondió la chica de pequeña complexión.
Esa chica es de 1er año, y se llama Toujou Koneko.
A pesar de ser una chica de 1er año, tiene el rostro infantil y el pequeño cuerpo de una niña de la escuela primaria.
Aun así, ella es muy popular entre determinado grupo de chicos. También es muy popular entre las chicas y es tratada como una mascota por ser linda.
Siempre tiene una expresión de somnolencia, y no muestra ninguna emoción.
Al menos no delante de mí, claro eso sin contar su gusto y deleite por los dulces, pero eso no cuenta.
Además, no suele hablar mucho, al menos no delante mío, siempre ha sido muy puntual con las palabras, a pesar de siempre centrar su atención en mi sin disimularlo ni un poco.
Pero, bueno… que se le va a hacer, ella parece ser del tipo de persona que es dolorosamente directa.
Y con esos pensamientos en mi cabeza empecé a bajar por las escaleras.
Luego de eso el día continuo sin ningún otro incidente de importancia.
―○●○―
–Dios, pero que día tan agotador…
Se quejó Matsuda, mientras hacía ejercicios de estiramiento.
–Sí, no creo poder resistir por más tiempo…
Concordó Motohama, con un tono de sufrimiento exagero.
Yo solo rodé mis ojos ante aquello, llevaban días diciendo lo mismo, pero no eran más que palabras vacías, estaban completamente comprometidos con mantener su nueva actitud, así que no me moleste en darles palabras de ánimos, no las necesitaban.
En su lugar, solo levanté una mano, y dije:
–Vale… nos vemos mañana, no se duerman hasta tarde…
Pocos minutos después de separarme de mis amigos, empecé a deambular por las calles, sin rumbo fijo, una costumbre de hace unos pocos años. Mientras paseaba por las calles lograba escuchar algunas de las cosas que sucedían en las casas, aunque no les prestaba mucha atención.
Pero, había algo a lo que, si le presté atención, y era al individuo que me andaba siguiendo.
Me seguía desde que salí de la escuela, en realidad, lo habían estado haciendo desde hace un tiempo.
Al principio eran dos o tres individuos, pero desde lo de Yuuma, ese grupo se había acortado a uno, y me podía imaginar quien lo envió.
Y así, termino por oscurecer, mientras yo seguía deambulando por las calles, tratando de ignorar a esa moleta adición, al menos hasta que pude sentir algo más, otra presencia que se sumaba, lo cual me sorprendió.
Sin saber que esperar, acomode mi respiración, mientras despertaba aquella calidez interna que fluía por todo mi cuerpo, al mismo tiempo que mis sentidos entraban en vigor, y se extendían más allá de lo normal.
Hubo dos sonidos que pude distinguir, el primero era el de los suaves pasos de varias decenas de metros a mis espaldas, y el segundo era el del constante aleteo de unas alas por sobre mi cabeza.
Si tuviera que adivinar, lo que estaba pasando, seguramente sería así.
Un Demonio, en solitario, estaba siguiendo a un humano que deambulaba solo en la oscuridad de la noche y, por error, salieron del dominio de los demonios, entrando en el perímetro de un Caído.
La riña sería entre el Demonio y el Caído, pero yo, que estaba en el medio, era un objeto de curiosidad para ambos.
Solté mi fastidio con un suspiro, miré a mi alrededor, y me dirigí a una pequeña tienda de conveniencia.
Cuando entré por la puerta, pude escuchar como los pasos se detenían, y algo aterrizando en el techo.
Examiné la tienda con detenimiento, viendo que estaba vacía, salvo a la cajera, la cual tenía su nariz pegada a su celular, apenas reaccionando cuando entré.
Sin perder el tiempo, fui a buscar lo que quería, una bolsa de frituras y una botella de refresco de un litro.
Lo llevé al cajero, y lo puse en el mostrador, junto con el monto exacto.
–Buenas Noches, señorita, aquí tiene…
La chica levanto su mirada y me observó ligeramente, luego procedió a escanear los productos, contó el dinero, asintió levemente, y lo puso en la caja registradora, puso los productos en la bolsa, y me los entregó.
–Aquí tiene…
Me dijo, con una expresión de cansancio.
No me imagino cuánto tiempo lleva aquí, o cuando termina su turno.
–Muchas Gracias, que tenga un Buena Noche…
Le respondí con una ligera sonrisa, pero ella ni reaccionó, solo me ignoró si siguió con lo suyo.
Yo solo suspire con pesar, pensando en que, si fuera un chico guapo, no me habría ignorado tanto.
Salí del local, mientras abría mis frituras, y comenzaba a comer.
Pase por un parque, el cual se encontraba algo desolado, pero que era un atajo hacia una zona de la ciudad, más habitada.
Para cuando salí de dicho parque, sentí como mis dos acompañantes se quedaban en él, dejaron de seguirme.
Podía intuir más o menos lo que ocurriría, pero sinceramente, no me interesaba.
Oye Ddraig, ¿No crees que el número de Caídos y gente extraña ha subido durante este último mes?
[Yo diría que sí, ha estado en aumento, puede que, signifique que algo importante va a ocurrir por aquí]
Recuerdo que Yuuma dijo "ya estoy harta de esperar la llegada de la mocosa santa", así que me imagino que esperan a que alguien llegue, ¿qué tan grande crees que sea el asunto?
[No ha de ser gran cosa, seguramente es una reunión privada, y están usando este lugar, el territorio de unos Demonios, como cobertura]
Bueno… si es así, no tengo porque preocuparme, no es mi problema…
[Aun así, sería mejor que no bajaras la guardia, no se sabe cómo pueden escalar las cosas]
Dijo Ddraig, instándome a mantenerme precavido.
–De acuerdo.
Life 2. La Monja Extranjera.
–¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep!
[¡Muy Bien, compañero, es hora de despertar!]
–Ummm…
Rezongué, mientras me revolvía entre mis sabanas, decidido a no despegarme de mi descanso.
[Chico, recuerda que, en tu situación actual, como un humano siempre debes de mantenerte en óptimas condiciones, si no, no serás capaz de reaccionar y actuar correctamente cuando el peligro llegue, y el peligro a tus alrededores ha subido un poco últimamente…]
–Ya desperté… ya desperté…
Le respondí a Ddraig, con desgana, mientras me desperezaba y empezaba a levantarme. Luego de levantarme, apague la alarma mientras veía la hora, eran la 4:45am, mucho más temprano que los días de semana, lo cual era inevitable.
Después de que termine mi rutina matutina, me vestí con una franela gris, un mono azul oscuro y unos zapatos deportivos negros con blanco; y una vez acomodado cogí una mochila que había preparado la noche anterior, antes de salir de casa.
Mi primer objetivo fue una parada de autobuses, el cual tardo cerca de media hora en llegar a mi destino, una zona boscosa, con terreno irregular, en pocas palabras, una parcela natural. Sin demorarme mucho, entré en el bosque, y mientras más me adentraba en él, más iba despertando mis sentidos, empece a usar mi técnica de respiración y a extender mi percepción.
Bueno… ya estamos aquí, y no siento la presencia de nadie cerca… ¿qué hay de ti, Ddraig?
[No te preocupes. No hay presencias siguendote, estamos solos.]
-Bien…
Tomé una gran bocanada de aire y la solté, mientras me agazapaba, para luego salir disparado del suelo. De un momento al otro, mi velocidad alcanzo un nivel inhumano, mientras corría entre los árboles y arbustos. Cuando llegue a un saliente, salte y empece a saltar por sobre las ramas de los árboles, mantuve mi respiración constante, mientras absorbía energía natural con cada inhalación, siguiendo el mismo proceso antes de soltarla con una exhalación.
Esa es mi Técnica de Respiración: Aire del Dragón, es algo similar al senjutsu, un método que te permite hacer uso de la energía natural, pero eso no era todo; la técnica de respiración se usaba en conjunto con un método, llamado Método de Circulación Interna: Fuerza del Dragón, el cual en un método o técnica que me permite controlar el flujo de mi fuerza interna, fuerza vital o "Ki", algo básico en las artes marciales tradicionales (las antiguas que ahora son celosamente guardadas por familias antiguas o facciones orientales).
En mi caso, la Técnica de Respiración: Aire del Dragón me permite absorber energía natural, tanto para mí, como para Ddraig, el cual digiere la mayor parte, y me la regresa como aura y vitalidad de Dragón, que yo digiero junto con un poco de energía natural y mi Ki natural, con el Método de Circulación Interna: Fuerza del Dragón, el cual da como resultado una fuerza vital más fuerte, muy similar al de los dragones reales, pero aun en el rango humano. En pocas palabras, llevo años "cultivando" esta fuerza vital, como una base solida para mi cuerpo; esta es la preparación para lo que nosotros llamamos "el despertar".
Después de saltar de árbol en árbol por un buen rato, llegué a un claro del bosque, en el cual me detuve, quedándome parado en el centro, con los ojos cerrados, luego de unos segundo, una aura invisible empezó a envolver todo mi cuerpo, como una membrana o una segunda piel.
Controlar mi fuerza interna, aparte de mejorar mis sentidos, no me hace más fuerte, ya que el Método de Circulación Interna: Fuerza del Dragón solo me ayuda a controlar el flujo de energía dentro de mi cuerpo, lo cual se usaba en la antigüedad para mejorar la resistencia y sentidos de una persona a la hora de pelear. Así que, para hacerte más fuerte, se requiere de otra técnica llamada Touki (Aura de Batalla), la cual consiste en usar mi Ki, para recubrir todo mi cuerpo, lo cual me permite aumentar mi fuerza, defensa y velocidad a limites sobrenaturales.
Y así, empece mi entrenamiento, o más bien mi calentamiento. Empece a moverme, practicando todo tipo de movimientos de diversas artes marciales, manteniendo una completa concentración en mi flujo de energía interna y en la forma y cambios de mi Touki.
No seguía un estilo particular, sino que agarraba los fundamentos de diversos métodos de lucha y artes marciales para aplicarlos a mi propio estilo de pelea; aun era un novato en esto de mi propio estilo, pero me sentía más comodo con esto que practicando rígidamente estilos ajenos.
Poco a poco, iba subiendo el ritmo, aumentando la cantidad de Ki que utilizaba y la calidad de mi Touki, lo cual hacia que mis movimientos fueran mas veloces, que la fuerza de mis golpes fuera mayor y mi resistencia a la fricción aumentara. Debido a esto, cada lugar por donde pasaba era seguido por una ráfaga de aire, y cada golpe que daba al aire generaba un sonido más fuerte.
Luego de pasar un rato así, probando distintas formas y técnicas, me detuve; mi respiración seguía siendo constante. Volví al centro del claro y me senté con las piernas cruzadas, en una postura de meditación.
Esta vez, controle mi Ki de otra forma, emitiéndolo de mi cuerpo y de mi Touki, mientras lo armonizaba con la energía natural a mi alrededor, luego de lograr eso, moldee esta energía en forma de hilos que salían y se extendían a mi alrededor, atándose a la hierva y al pasto, y moviéndolo con sutileza y suavidad.
Al mismo tiempo, mi percepción mejoró exponencialmente dentro del área que estos hilos de energía abarcaban.
Después de pasar lo que me pareció al menos una o dos horas, di por terminada la practica de control suave, así que, con un solo pensamiento, toda la hierva y pasto a mi alrededor fueron cortadas en picadillos, para que luego sus residuos flotaran en círculos por el aire a mi alrededor, antes de ser voladas con brusquedad a una gran distancia.
A esto lo llamaba Shi, y era una técnica propia que yo mismo había creado, con la ayuda y guía de Ddraig, claro esta; consistía en un método alterno al senjutsu, utiliza bases similares, como la capacidad de controlar la energía natural, pero en esencia, eran dos cosa distintas, ya que esta técnica me permitía extender mi Ki mucho más allá de mi cuerpo y del Touki, armonizando con la energía natural, lo cual me permitía un rango de percepción de extrema claridad y un control a distancia muy bueno, dentro de un área determinada.
Abrí mis ojos, luego de soltar un profundo suspiro, mientras me levantaba del suelo.
-Creo que con esto esta bien…
Levante la cabeza para ver el cielo, el cual ya era mucho más claro que cuando salí de casa, o cuando llegué.
-Creo que ya van a ser las 8 de la mañana, y tengo hambre.
[Si, esta bien… de todas maneras, un entrenamiento suave cada fin de semana es lo mejor para ti en estos momentos…]
Ddraig me respondió mientras caminaba hacia un árbol donde había dejado mi mochila, saque de una botella de agua y me tomé casi todo su contenido.
-Haaaa…
Tienes razón… actualmente he llegado a mi limite…
[Si, y por eso lo mejor que puedes hacer es pulir tus bases y técnicas, sera muy útil en el futuro]
-Futuro, jeh… ni siquiera se lo que me deparará el futuro…
Si, y eso es lo que más me preocupaba.
[Ese momento llegará, tarde o temprano, pero, llegará]
Yo no le respondí nada, solo me limite a correr de regreso a la salida del bosque.
―○●○―
Después un otro largo viaje, volví a la ciudad de Kuou, después de bajarme del autobús, empece a caminar distraídamente mientras me debatía en mi cabeza dónde y qué iba a comer.
No sabía si era mejor un desayuno común, comida tradicional, pizza, hamburguesa, perro caliente…
Ahhh… ¿por qué es tan difícil decidirme por algo tan sencillo?
—¡Hawaau!
¿Hmm? Una repentina voz.
Al mismo tiempo que escuché una voz de tras de mí, un sonido de algo cayéndose al piso se escuchó.
Cuando me di la vuelta, había una monja en el piso.
Ella está abriendo sus brazos de par en par y tiene su cara en el piso. Esa es ciertamente una torpe manera de caerse.
—¿…E-Estás bien?
Me acerco a la monja y le doy mi mano, para que ella se puede levantar.
—Auu. Por qué sigo tropezando… Oh, lo siento. Muchas gracias~.
Juzgando por su voz, es joven. ¿Tiene ella la misma edad que yo?
Tomo su mano y la levanto. En ese momento el viento sopla y el velo de la Hermana se vuela por el aire.
Su cabello rubio, que se esconde debajo, cae sobre sus hombros. Su genuino cabello rubio está brillando con luz debido a la luz del sol.
Luego mis ojos se mueven hacia su cara.
¡—!
Mi corazón es tomado por ella inmediatamente.
Una Bishoujo de cabello rubio está parada frente a mí.
Sus dos ojos de color verdes son tan hermosos que siento que seré succionado por ellos… …
… … … …
Por un tiempo, la miré fijamente.
—¿U-Umm… hay algo mal…?
La Hermana me mira fijamente a la cara con una preocupada expresión.
—Ah. L-Lo siento. Umm…
No lo puedo decir.
No hay manera de que yo pueda decirle que estaba fascinado por ella.
Más bien, esta chica es…
¡Ella luce exactamente como mi chica ideal (Versión Bishoujo rubia)! ¡Por supuesto que estaría atraído por ella!
¡Se siente como si necesitara seguir hablándole!
Entonces las maletas que está cargando en su hombro aparecen en mi vista. Si pienso en ello, es muy raro el ver a una monja en una ciudad. Es mi primera vez viendo una.
Antes de eso, necesito recoger su velo. Por suerte, cayó cerca.
—¿De viaje?
Le preguntó mientas voy a recoger su velo.
—¿No, no es eso. Fui asignada a la iglesia de esta ciudad… tú debes ser un residente de esta ciudad. Es un placer conocerte.
Ella inclina su cabeza.
Hmmm. Asignada a la Iglesia de esta ciudad. ¿Reasignación de Personal? Parece que la Iglesia está teniendo un duro momento.
—He estado en problemas desde que llegué. Ummm… No puedo hablar japonés tan bien… me perdí y otras personas no podían entender lo que trataba de decir…
Ella sujeta sus manos juntas en su pecho y parece muy triste.
Eso significa que esta persona no puede hablar japonés.
La verdad, pasé eso por alto, pero la razón por la cual puedo entenderla es por un "talismán mágico" con el kanji "Lenguaje" escrito en el, lo cual me permite entender, comprender y comunicarme por cualquier idioma… por ejemplo: si un americano me hablará, yo lo escucharía en japones, mientras que si yo le hablará, el me escucharía en ingles.
Aun así, esto solo se limita al sonido, el vocabulario y las palabras no cambian en absoluto. Razón por la cual me esfuerzo mucho con los idiomas, y soy particularmente decente en el ingles, incluso sin el talismán.
Realmente es una habilidad algo útil.
Volviendo a enfocarme en la chica, la cual se encontraba con un aura de chica perdida, le dije sin pensar.
—Creo que sé dónde está la Iglesia.
Creo que hay una vieja Iglesia a las afueras de esta ciudad. Creo que eso es una Iglesia, ¿pero esa Iglesia siquiera sigue en uso?
—¿L-Lo sabes? ¡G-Gracias~! ¡Todo esto es gracias a Dios!
Ella me sonríe con lágrimas saliendo de sus ojos. Esta chica es realmente linda.
Realmente no puedo dejar esta una chica en problemas sola, no se el por qué, pero simplemente no puedo, el aura "adorable", por así decirlo, de está chica es demasiado fuerte. Así que, decidí llevar a la Hermana a la Iglesia primero, mi desayuno podría esperar.
De camino a la Iglesia, pasamanos un parque.
—¡Uwaaaaah!
Lo que oí fue el llanto de un niño, el cual se había caído y se había hecho un raspón.
—¿Estás bien? ¿Yosh-chan?
Él estará bien ya que esta con su mamá. No parece ser nada grave, un poco de alcohol y un adhesivo para cubrir la herida y ya esta.
Pero de repente, la Hermana que me estaba detrás de mí siguiéndome, se dirigió corriendo hacia el parque.
—Hey.
La Hermana entró al parque y se dirigió hacia el chico que estaba sentado en el suelo y llorando. Yo también seguí a la Hermana, con curiosidad de ver que quería hacer… ¿Tal vez tenia un equipo sencillo de primeros auxilios guardado en una de esas maletas?
—¿Te encuentras bien? Los niños no deberían llorar por una pequeña herida así.
La monja acarició la cabeza del niño gentilmente.
El niño probablemente no entendió lo que estaba diciendo. Pero la Hermana tiene una expresión muy amable. La Hermana puso su palma donde el niño tenía el raspón.
Al siguiente momento, me quede en shock. Un orbe de luz verde apareció desde la palma de la Hermana y parpadeó hacia la rodilla del niño.
¿Qué es eso? ¿Magia?
Cuando miro cuidadosamente, la herida del niño comienza a desaparecer.
¿Está la luz de su mano curando la herida del niño?
[Eso es Sacred Gear, compañero… vaya suerte la tuya, encontrarte con otro usuario de Sacred Gear es realmente una rareza en tu situación actual]
Un poder especial que es otorgado a ciertas personas. Vaya coincidencia que ha ocurrido.
Yo, de alguna manera siento un poco anonadado. Mirar a la luz hace que me palpite el brazo izquierdo.
¿Está respondiendo a él?
Cuando miro otra vez, la lesión del niño desapareció sin dejas rastro.
Increíble.
Este también es el poder de un Sacred Gear… hay tantos tipos diferentes de Sacred Gears.
La madre del niño también está en shock. Cualquiera que viera cosas inimaginables tendría una reacción similar.
—Listo, tus heridas están curadas. El dolor debe haberse ido ahora.
La Hermana acaricia la cabeza del niño y me mira.
—Lo siento. Pero tenía que hacerlo.
Se ríe mientras saca su lengua. ¿Por qué se disculpa?
La madre del niño, que estaba en shock antes, sacudió su cabeza y tomó la mano del niño para poder irse rápidamente.
—¡Gracias, Onee-chan!
Dijo el niño en voz alta. Palabras de Gratitud.
—Él dijo, gracias Onee-chan
Ella sonríe felizmente después de que se lo tradujera.
—…Ese poder…
—Sí, es el poder de sanar. Es un maravilloso poder que Dios me dio.
Ella parece un poco triste, a pesar de estar sonriendo. De alguna forma parece que tiene un pasado oscuro o algo parecido.
Probablemente no debería indagar mucho.
No es un atmósfera donde pueda decir "En realidad, yo también tengo un Sacred Gear". Es un poder inusual, y es casi seguro que algunas personas cercanas a mi sufrirán por ello.
Ni siquiera yo estaba feliz cuando descubrí la existencia de mi Sacred Gear.
La conversación terminó ahí, y continuamos caminando hacia la Iglesia. Llegamos a la vieja Iglesia después de caminar unos minutos.
Sí, la única Iglesia que conozco es esta. Es tan vieja como recuerdo.
Nunca escuché que este lugar estaba todavía siendo usado, pero puedo ver la luz dentro de la Iglesia, eso significa que hay personas dentro.
—¡Sí, este es el lugar! Estoy tan contenta.
La Hermana muestra un suspiro de alivio después de comparar nuestra locación con el mapa que tiene.
Oh, así que este es el lugar correcto. Eso es bueno.
No debería quedarme aquí mucho tiempo. Debería irme.
Es un desperdicio el despedirse de una Hermosura como ella, pero siendo alguien que se esconde del mundo sobrenatural y ella una monja con un Sacred Gear…
Incluso sin pensar en lo romántico, solo estar cerca de ella y de esta iglesia es algo riesgoso.
—Entonces, me iré por mi camino.
—¡Por favor espera!
Me despido y trato de irme, pero las palabras de la Hermana me detienen.
—Me gustaría preparar un poco de té en gratitud por traerme aquí.
—Oh, pero estoy apurado, así que me tengo que ir.
—…Pero, eso es…
Ella parece afligida.
Probablemente ella quiere prepararme té para mostrarme su gratitud, pero tomar té aquí sería peligroso. Es una lástima, pero me tengo que rehusar.
—Mi nombre es Hyoudou Issei. Todo el mundo me llama Ise. Así que puedes llamarme Ise también. ¿Cuál es tu nombre?
Cuando le digo mi nombre, ella responde con una sonrisa.
—¡Mi nombre es Asia Argento! ¡Por favor llámame Asia!
—Entonces, Hermana Asia, reunámonos otra vez.
—¡Si, Ise-san! ¡Definitivamente iré a verte!
Asia inclina su cabeza abajo.
Dejé el lugar después de agitar mis manos hacia ella. Ella me miró hasta que estuve fuera de su alcance.
Entendí que ella es una buena chica.
[Tomaste la decisión correcta.]
¿Uhmm? ¿A qué se debe eso?
[Me refiero a que en la iglesia, siento la presencia de muchas personas, y además también hay varios Ángeles Caídos, entre ellos, tu ex-novia]
¿Yuuma-chan esta en esa iglesia? ¿Y también hay más Ángeles Caídos con ella?
[Si… y supongo que el resto son exorcistas renegados]
¿Qué rayos hace ese montón de gente peligrosa ahí? ¿Y por qué la Hermana Asia fue a un lugar así?
De repente, recordé eso que Yuuma-chan había dicho en aquella ocasión: "ya estoy harta de esperar la llegada de la mocosa santa".
La Hermana Asia es la "mocosa santa" que Yuuma-chan menciono, ella estaba esperando la llegada de una usuaria de Sacred Gear…
[Exactamente, desde ese punto de vista, no resulta ser nada raro.]
Pero… ¿cuál es su objetivo? ¿qué es lo que quieren lograr?
[Quién sabe, a lo mejor solo quería pasarla de un lugar a otro de manera oculta… con este tipo de cosas uno nunca sabe.]
—Mhmm…
Life 3. Una Nueva Amiga.
—Haa…
Mediodía.
Me salté las clases hoy, y estoy actualmente sentado en un banco en un parque para niños mientras suspiro.
Las cosas se han estado tornando más extrañas desde la llegada de la Hermana Asia, antes de eso, no había visto ningún exorcista renegado caminando por las calles.
Pero, ahora era distinto, ya había visto varios de esos individuos vagando por las calles en la noches; no solo eso, había estado encontrando pistas de desapariciones misteriosas.
Claro esta, que nadie los recordaba, pero fue una casualidad que hace unas noche pasé por una zona conocida y me encontré con un exorcista renegado particularmente tenebroso.
Era un hombre joven con cabello blanco y tez algo pálida. Parecía ser un extranjero y todavía podía considerárselo un adolescente. Estaba vestido como un sacerdote, y a pesar de poder ser considerado un Bishounen, su expresión ocultaba una malicia y locura que le pondría lo pelos de punta a cualquiera.
Pero lo particularmente alarmante es que una persona que vivía por ahí, estaba desaparecido.
Fue una coincidencia que fuera una zona que transito regularmente, así que pude notar la falta de esa persona, y eso sin agregar el fuerte olor a sangre que ese lunático arrastraba consigo.
—...Bueno, no hay nada que yo pueda hacer…
Mientras estaba refunfuñando, sentí mi estomago rugir.
—Jhe… parece que ya es hora de comer…
Mientras me levanto del banco con algo de pereza, notó una cabellera dorada pasar por el rabillo de mis ojos. Cuando miro cuidadosamente, resultó ser una chica de cabello rubio con la que estoy familiarizado.
Ella también me reconoce. Ambos estamos sorprendidos de este reencuentro.
—¿…Hermana Asia?
—¿…Ise-san?
―○●○―
—…Auu.
Esto realmente es una extraña vista. Una Hermana se encuentra completamente confundida frente a la camarera.
—¿Q-Qué es lo que te gustaría ordenar…?
Pregunta la camarera, con un tono de voz entre confundido y conciliador, con una expresión que me resulta de lo más graciosa. Ni siquiera el empleado sabía cómo manejar esta situación.
Como era hora de comer y tenía hambre, lleve a Asia a un restaurante de comida rápida en el distrito comercial.
Al parecer Asia nunca ha ido a este tipo de lugar antes, sumado al hecho de que aun no maneja bien el japones, resulta en que está pasando un mal momento eligiendo su comida.
Le ofrecí mi ayuda, pero ella dijo orgullosamente, —Está bien, me las arreglaré de alguna forma —así que la he estado viendo todo este tiempo…
Pensándolo detenidamente, ya que no puede hablar japonés, puedo tomar esto como una oportunidad, así que me decido a ayudarla.
—Lo siento. Ella va a ordenar lo mismo que yo.
—Vale.
El empleado no deja ir esta salida fácil y me toma la orden. Asia, por otra parte, está sorprendida.
—Auu, estoy avergonzada. No puedo ni siquiera comprar una hamburguesa por mí misma…
—B-Bueno, primero necesitas acostumbrarte al japonés.
Nos dirigimos hacia una mesa vacía tan pronto como recibimos nuestra comida mientras hago lo que puedo para animar a Asia, que se sentía algo deprimida. Mientras nos movemos dentro del restaurante, la mayoría de los clientes masculinos se le quedaban mirando a Asia, con caras de sorprendido o embobados.
Es debido a que es una monja, pero también porque es realmente muy linda.
Bueno, cualquier chico la miraría y quedaría sorprendido si la viera en la calle.
Nos sentamos uno frente al otro, pero Asia se queda mirando fijamente su hamburguesa, pero no la está comiendo. Pensándolo bien, ¿ella sabe realmente cómo comerla?
Wow, este es un extraño desarrollo. Jejeje…
—Princesa, puedes comer esto quitando el envoltorio, así.
Le mostré cómo hacerlo, mientras le esbozaba una sonrisa que no sabría decir si era sincera o burlona.
—¿¡En realidad hay una forma de comer así!? ¡Impresionante!
…Que nueva reacción, se comporta como una niña de menos 7 años que conoce por primera vez algo nuevo y asombroso, parecía un angelito (o al menos eso me pareció con esa vestimenta de monja) puro e inocente. Esa fue una reacción realmente linda y adorable, Asia.
—También puedes comer las papas fritas así.
—¡Oh dios!
Asia me está mirando comer con ojos muy agudos.
—No, no, también come, Asia.
—S-Sí.
Ella asiente varias veces con la cabeza, toma su hamburguesa con sus manos y le da una pequeña mordida. Por un momento, sus ojos parecen brillar como estrellas, su cara paso de reflejar curiosidad y una de entusiasmo y alegría en un instante, entonces ella comienza a comer su hamburguesa con rapidez y algo de voracidad, pero sin dejar de lado algo de sutileza decoro, ¿creo?
—¡Q-Qué Delicia! ¡Esta hamburguesa está muy deliciosa!
Esta chica lo está diciendo en voz baja y entusiasta mientras sus ojos siguen brillando. ¿Qué es lo que normalmente come?
—¿Nunca antes comiste una hamburguesa?
—No. La he visto varias veces en la televisión, pero es mi primera vez comiendo una de estás. ¡Estoy tan conmovida! ¡Está realmente deliciosa!
—Oh. ¿Así que, qué comes normalmente?
—Principalmente pan y sopa. También como vegetales y pastas.
Que comida tan simple. ¿Se que los exorcistas renegados son algo insipientes, pero es tan así?
—¿Es eso cierto? Entonces come tranquilamente, así puedes recordar el sabor.
—Sí. Lo comeré con alegría.
Asia continua a comiendo su hamburguesa con una expresión de total disfrute. Pero, sigo preguntándome, ¿qué estaba haciendo en el parque? ¿y por qué no había nadie con ella? Siendo una usuaria de Sacred Gear, deberían vigilar la como un valioso recurso que no puede perderse, especialmente en este territorio que ni siquiera es de su propiedad.
Ella dijo que tenía un tiempo libre, pero es fácil notar que esta mintiendo, parece que está escapando de algo, o más bien, de "ellos".
Cuando me vio, parecía algo aliviada.
Le quiero volver preguntar, pero esa puede ser una pregunta demasiado desconsiderada. Probablemente debería esperar a que se sienta mejor, para que puede decírmelo con más calma.
Aunque no se porque ando tan interesado en algo que no me compete, no puedo decir que la ayudaré en cualquier momento. Es simplemente demasiado para mi, el riesgo de quedar expuesto es demasiado grande como para arriesgarme a tomar una decisión tan tonta.
Ésto es tan irritante, realmente odio los dilemas que a veces me monto yo solo.
Oh bueno, dado que está disfrutando el comer su primera hamburguesa, me siento mal que preguntar algo la haga volver a sentirse deprimida.
Sí, eso es. Sólo por un rato, deberíamos dejar todo eso de lado, y disfrutar del momento.
Esa es la única respuesta que pude obtener.
—Asia.
—S-Sí.
—Vamos a divertirnos ahora.
—¿Eh?
—Vayamos a un centro de juegos.
―○●○―
—¡Je-Je-je! ¡El legendario conductor más rápido en cuesta abajo, Ise!
¡Booooom!
¡Pisé con mi pie el acelerador, y rápidamente cambié de marcha cerca de la curva!
Y, luego, adelanté a ambos autos.
—¡Rápido! ¡Eres muy rápido, Ise-san!
Fufufu, ¿Me estás mirando Asia? ¡Ahora, puedes enamorarte de mí técnica de manejo!
De esta forma, estaba jugando un juego de carreras en el centro de juegos.
Aun cuando luzco así, debido a que nunca me he unido a ningún club de la escuela, tenía mucho tiempo libre después de clases. Nosotros tres, Motohama, Matsuda y yo, pasamos por todos los centros de juego cercanos.
Juegos de carrera o no, ¡Puedo ganar en cualquier juego!
[¡GANADOR!]
El símbolo que muestra mi victoria aparece en mi pantalla.
Sí, parece que hice un nuevo récord de carrera otra vez… Justo así, me estaba yendo muy bien por mí mismo.
Fue entonces que me dí cuenta de que había perdido de vista a Asia. Cuando miré por todos lados, la encontré rápidamente, ella estaba parada en frente de un juego de grúa.
—¿Qué sucede?
—¡Hau! N-No… no es nada.
Cuando le pregunto, ella trata de esconderlo. Realmente no perece ser muy buena mintiendo, es más sus ojos aun se posan en un peluche en especifico.
—¿Hay algo que quieras?
Cuando vuelvo a mirar dentro del juego de grúa, observó con más detenimiento lo que ella estaba mirando, un peluche de Rache-chan que se encontraba entre varios otros peluches. Es una linda mascota basada en un ratón. Si recuerdo correctamente, este personaje provino de Japón pero es popular en todo el mundo. Así que es por eso que Asia también lo conocía.
—Asia, ¿Te gusta Rache-chan?
—¿Eh? N-No, Uhmm… E-Eso es…
La cara de Asia se pone colorada, y asiente con su cabeza tímidamente.
—¡Bien, conseguiré uno para ti!
Afirmó son una sonrisa confiada… realmente no puedo dejar pasar esta increíble oportunidad
—¿Eh? ¡P—Pero… …!
—Está bien, lo conseguiré.
Vuelvo a repetirle, mientras me enfoco enteramente en el juego de la grúa. Golpea el hierro mientras aun está caliente, ese es un muy buen dicho. Puse la moneda dentro inmediatamente y comencé a controlar la grúa.
Aunque ahora me veo así, soy muy bueno en juegos de grúas, ¿sabes?
Bueno, eso es lo que pensé, pero resultó ser todo lo contrario, tuve un mal momento obteniéndolo.
En mi primer intento, dejé caer el muñeco en un buen lugar, y mi segundo intento, erré totalmente.
En mi tercer y cuarto intento, volví a fallar también, pero cuando Asia se empezaba a preocupar, tuve suerte en mi quinto intento, ¡finalmente logré obtenerlo!
—¡Sí!
Exclame de alegría, mientras hacia una pose de victoria y tomé a Rache-chan que acababa de obtener. Y se lo di a Asia.
—Aquí tienes, Asia.
Asia se puso tan feliz que sostuvo el muñeco en su pecho.
—Muchas gracias, Ise-san. Cuidaré mucho a este muñeco.
—Hey, hey, si un muñeco como ese te hace feliz, entonces la próxima vez te conseguiré más.
Eso es lo que le dije, pero realmente no creo volver a tener la misma suerte que tuve en esta ocasión, aún así, ella sacudió su cabeza.
—No, este Rache-chan que tú me diste representa el maravilloso día en que te conocí, y el más divertido que he tenido. Puesto que hoy es el único día en que te encontré, cuidaré muy bien de este muñeco.
…Sus palabras me hacen sentir un poco tímido. Sinceramente, no se como responder.
Pero, a pesar de que son unas palabras muy directas, cuando esta chica lo dice, realmente parece natural.
¡Bueno, no importa!
—¡Ok! ¡Y aún estamos comenzado! ¡Asia, jugaremos hoy por el resto del día! ¡Sígueme!
—¡S-Sí!
Tomé la mano de Asia y nos adentramos más en el centro de juegos.
―○●○―
—Ah, jugamos mucho hoy.
—S-Sí… estoy un poco cansada…
Estamos caminando por la calle mientras nos reímos.
Ya es tarde.
Jajaja, me he saltado las clases hoy, cosa que no he hecho en mucho tiempo y me he divertido mucho hasta el anochecer.
Tuvimos mucha suerte de no ser atrapados por la policía. Si lo hubiéramos sido, entonces habría sido tomado en custodia en el momento.
Al final terminamos estando muy cansados. Ambos, Asia y yo.
Fue divertido ver la reacción de Asia cuando fuimos al centro de juegos y otras tiendas. Parecía una niña que entraba por primera vez al país de las hadas.
Mejor dicho, siento que el plan de cita que hice para Yuuma-chan ha probado ser muy bueno. Vaya, en realidad, no puedes decir que te va a pasar en la vida, yo nunca esperé me volviera a ser de utilidad.
Aún así todo lo bueno siempre acaba, y sinceramente, creo que ya va siendo hora de volver a la realidad, nos guste o no.
—Por cierto, eres increíble, Asia. Ese poder de sanación que mostraste en aquella ocasión fue genial, jamas había visto algo como eso, ¿es un increíble poder… o una especie de don especia, cierto?
Ella se puso tensa por un instante, pero se recompuso rápidamente, su cara de satisfacción pasó a una de más tranquila y parecía haber algo de resignación.
—Sí, algo así… eso es un Sacred Gear.
Justo como pensábamos.
—¿Sacred Gear? ¿Qué es eso, una especie de herramienta sagrada?
Asia pone una cara pensativa después de oír mi pregunta.
—¿Ise-san, crees en lo sobrenatural?
—Mhmm, ¿te refieres a eso de los ángeles y demonios, o de los Jokai, que son de aquí de japón?
Ella asiente con la cabeza.
—Bueno, no puedo decir que lo creo al 100%, pero no lo descarto, y con lo que vi de tus poderes, estoy más abierto a nuevos descubrimientos, además, es realmente increíble que puedas curar cualquier ser vivo, realmente va con tu personalidad, me imagino que algunas personas te llamarían santa, creo recordar que la iglesia nombraba...
En ese momento, me di cuenta de algo, la lágrima que empezó a caer de sus ojos, seguido de más lágrimas que comenzaron a caer de sus ojos.
Ella entonces, no lo soportó más y se puso a llorar.
No sabía qué hacer, sabía que me había pasado un poco con mis palabras, pero no esperaba una reacción tan drástica, así que la lleve a un lugar donde nos pudiéramos sentar.
Nos sentamos en un banco a la orilla del camino.
Entonces, ella me dijo una historia acerca de una chica que fue llamada una vez, Santa Doncella.
En cierta región de Europa, había una chica que fue abandonada por sus padres, ella fue criada en una Iglesia cercana por una monja junto con otros huérfanos. La chica que era una fuerte seguidora de la Iglesia recibió un poder especial a la edad de 8 años.
Ella curó a un cachorro herido, y una persona de la Iglesia Católica lo presenció por accidente.
Desde entonces, su vida cambio.
La chica fue llevada a Iglesia Católica principal y fue simbolizada por muchos como Santa Doncella debido a su poder de sanación, ella usó su poder para curar a muchos creyentes y se les fue dicho que era el poder de la divina protección.
Los rumores atrajeron a más rumores y fue respetada como una verdadera Santa Doncella.
Incluso sin su aprobación.
A ella no le disgustaba como la trataban y cómo era tratada, las personas de la Iglesia eran amables y ella no odiaba el curar a las personas. En su lugar, ella estaba feliz de que su poder fuera de útil.
La chica estaba agradecida por su poder que le fue otorgado por Dios. Pero estaba un poco sola, ella no tenía ningún amigo con quien poder abrirse. Todo el mundo la trataba amablemente y eran buenos con ella. Pero no había nadie dispuesto a convertirse en su amigo.
Ella entendió el por qué, ella sabía que estaban mirando su poder como algo irregular, ellos no la miraban con una humana, sino como a una criatura pura y santa que nació para poder curar humanos.
Pero un día, eso cambió.
Por coincidencia, había un Demonio cerca y ella lo curó. A pesar de que sabía que era Demonio, cuando lo vio herido, siendo tan parecido a un humano y en estado tan miserable. La chica no pudo ignorarlo.
Ella pensó que incluso si era un Demonio, ella tenía que curarlo si estaba herido. Esa era ella, y fue su bondad la que le hizo tomar esa acción.
Pero eso cambió su vida para siempre.
Una de las personas de la Iglesia vio el incidente y lo notificó a otros de la Iglesia. Los ministros de la Iglesia estaban muy sorprendidos y alarmados por ello.
—¿¡Un poder que puede sanar Demonios!?
—¡Algo tan absurdo como eso no puede pasar!
—¡El poder de sanar sólo puede curar a seguidores de Dios!
Sí, ella sabía que había muchas más personas que poseían el poder de sanar, como ella. Pero el poder para sanar Demonios estaba fuera de sus capacidades, y era algo más que anormal para la Iglesia. Las personas de la Iglesia pensaron que era de sentido común que el poder de sanar no funcionaría en los Ángeles Caídos y Demonios, sino solo en los humanos, y en especial, en los creyentes de Dios.
Pero aparentemente, un incidente similar había ocurrió en el pasado.
El poder de sanar Ángeles Caídos y Demonios que no estaban protegidos por Dios, así que eso era catalogado como el poder de una Bruja.
Y así las personas que alguna vez la vieron como una Santa Doncella, ahora la repudiaban y la trataban como una Hereje.
—¡Maldita bruja que cura Demonios!
La chica que una vez fue respetada como "Doncella Santa" y ahora era temida como una Bruja, fue abandonada por la Iglesia Católica y totalmente expulsada, y eso ya era un buen resultado, pudo haber acabado peor.
Ella no tenía a donde ir y la organización de Exorcistas Renegados la recogió, en otras palabras, ella tenía que obtener la divina protección de los Ángeles Caídos o de los Demonios.
Pero la chica nunca se olvidó de rezarle a Dios. Tampoco se olvidó de agradecerle a Dios.
Incluso así, una chica tan pura y bondadosa como ella fue abandonada. Dios no la salvó.
Lo que más la sorprendió fue que no había ni una persona en la Iglesia dispuesta a defenderla.
No había nadie que se preocupara por ella.
—…Es porque no recé lo suficiente… Es porque soy torpe o porque soy tan estúpida que ni siquiera puedo comer una Hamburguesa por mí misma.
La chica, Asia, se limpia sus lágrimas mientras ríe de si misma.
No sabía qué decirle. No sabía qué decir después de enterarme de su devastador pasado.
Pero eso sí, estaba realmente indignado y enojado, no puedo creer que esos creyentes de Dios sean tan hipócritas.
[Si supieras que la iglesia no esta exenta de fallas… hay mucha oscuridad en todos lados, la Iglesia Católica no es la excepción]
No me lo recuerdes, sinceramente tengo ganas de darles un buen regaño…
[Como estas ahora, eso sería imposible… eres solo una hormiga queriendo golpear a un gigante, tal y como te lo he dicho antes, sin poder, no hay derecho que cuente en este mundo…]
Lo se...
—Esto es también una prueba que me puso el Señor. Dado que soy torpe, el Señor me dio esta prueba. Así que tengo que soportarlo.
Ella se estaba riendo y actuá como si estuviera hablando consigo misma.
—No tienes que decir nada más, nada de eso fue tu culpa…
—Estoy bien… seguro que un día tendré un montón de amigos. Tengo ese sueño. Quiero ir a comprar flores con un amigo, comprar libros… conversar… y-yo…
Ella está llena de lágrimas. Casi parece al borde del llanto.
Ya no puedo seguir mirándola. Ella debe de haber estado soportándolo en silencio todo este tiempo.
Ella ha estado esperando a que Dios la salvara todo este tiempo y ha estado ocultando sus sentimientos desde el principio.
Hey.
¡Hey Dios!
¿¡Cuál es el significado de esto!? ¿¡Por qué no salvas a esta chica!? ¿¡No se suponía que eras todo "amor y bondad", donde quedo todo eso!?
¡Ella ha estado anhelando por tu ayuda! ¡Ella ha estado respetándote más que muchos otros que solo tienen creencias vaciás!
¿¡Que estás haciendo allá arriba!? ¿¡Por qué no estás haciendo nada, ella y muchos otras persones que realmente merecen tú atención, viven sufriendo mientras tú no haces nada!?
No sé absolutamente nada de ti y tampoco creo o tengo fe en ninguna religión.
¿No eres tú aquel que nos dio los Sacred Gears?
¡Esto! ¡Esto está mal!
Ah, ya sé. ¡Esto es lo que voy a hacer! ¡Mírame, Dios! Ya que tu no haces nada, entonces yo lo haré.
Tomé su mano. Y le digo a ella mientras la miro directamente a sus ojos que están empapados con sus lágrimas.
—Asia, yo seré tu amigo. No, nosotros ya somos amigos.
Asia está quieta ahí confundida.
—Soy una persona que realmente no tiene fe en ninguna religión, pero está bien. ¡No importa si le salvate la vida a un Demonio, Asia… se supone que toda vida es preciosa y esa bondad que tienes es realmente admirable! ¡Puedes llamarme en cualquier momento que quieras! Ah, y también te daré mi número de celular.
Coloque mi mano dentro de mi bolsillo y tomo mi celular.
—¿…Por qué?
—¡No es por qué! ¿Asia, tu jugaste conmigo todo el día, cierto? ¿Conversamos, cierto? ¿No reímos juntos, cierto? ¡Entonces tú y yo somos amigos! ¡Ahora yo soy tu primer amigo, nada más que eso importa! ¡Nosotros somos amigos, y no me importa que seas una Santa o una Bruja, para mi solo eres Asia!
—¿…E-Eso… eso esta bien para ti?
—¡Claro que sí! ¡Asia y yo nos vamos a convertir realmente en amigos! ¡Pondremos todo lo demás a un lado! ¡Conversaremos cuando queramos, jugaremos cuando queramos, y sí, también iré de compras contigo! ¡Lo que sea, libros o flores, iremos a comprar tanto como quieras! ¿Ok?
Incluso yo pienso que apesto en conversaciones. No es ni siquiera romántico. Ese Principito Guapo de Kiba probablemente sabe bien que hay que decir en una situación así.
Pero aun así, Asia tapa su boca con sus manos, y otra vez comienzan a caer lágrimas.
Aunque, esta vez, sus lágrimas no parecían de tristeza.
—…Ise-san. No tengo sentido común.
—¡Podemos aprender paseando por la ciudad! Si vas alrededor mirando diferentes cosas, aprenderás eventualmente.
—…No puedo hablar japonés. Tampoco sé sobre su cultura.
—¡Yo te enseñaré! ¡Incluso te haré hablar usando proverbios! ¡Déjamelo a mí! ¡Incluso podemos ir al museo para mirar El Tesoro Nacional Japonés! ¡Samuráis! ¡Sushi, Geishas y mucho más!
—Tampoco sé de qué hablar con un amigo.
Sostengo firmemente la mano de Asia.
—Me has estado hablando normalmente durante todo el día. Eso está bien. Ya estamos hablando como amigos.
—¿…R-Realmente te convertirás en mi amigo?
—Sí, así que llevémonos bien de ahora en adelante, Asia.
Ella asiente con su cabeza y sonríe.
Sí, con esto está bien.
¡Asia y yo somos amigos! Pero la situación en serio me hace sonrojar.
Probablemente me voy a estremecer de vergüenza una vez esté en la cama después de esto. Pero no importa.
Si Asia va a estar feliz y puede sonreír, entonces está bien. El incidente de su triste pasado. No sé cuan doloroso fue.
¡Pero estoy seguro que puedo hacerla sonreír de ahora en adelante!
Definitivamente voy a verla como una amiga de ahora en adelante. ¡No voy a dejar que nadie se interponga en nuestro camino!
¡Yo protegeré a Asia! Bueno, tampoco creo que tenga que llegar a eso extremos.
O eso creía yo.
—¡Es imposible!
Esa solo voz rechazó todos mis pensamientos. Y puedo reconocer perfectamente esa voz.
Cuando miro en la dirección de donde provino, me quedo sin palabras.
Eso es porque una persona que conozco esta parada ahí, una delgada chica con un sedoso cabello negro.
Amano Yuuma-chan está ahí.
—T-Tu…
Aprieto mis dientes, en un intento de no llamarla por ese nombre.
—¿¡Tu quién rayos eres!?
Le pregunté con un tono desafiante, poniéndome entre Asia y Yuuma-chan.
Ella se ríe de diversión cuando escucha mi pregunta, me mira un una expresión de diversión que seguramente sea un chiste para ella sola.
—Heh. Que divertido es volver a encontrarme contigo.
A pesar de decir eso, su voz no es la linda voz de Yuuma-chan, y suena más como la de una adulta cautivadora.
—…Reynalle-sama…
Asia la llama por su nombre.
¿Reynalle? Así que ese es su verdadero nombre. Amano Yuuma es solo el alias que uso para engañarme, Reynalle es el verdadero nombre como un Ángel Caído.
—¿…Quién eres… Y qué es lo que quieres tú de ella?
Ella se burla cuando le digo eso a ella.
—Ese no es tu problema, mocoso entrometido.
Ella me mira a mí como si estuviera viendo algo muy pequeño e insignificante, pero a la vez gracioso y divertido.
—Asia, eres nuestra pertenecía personal. ¿Realmente quieres hacernos perder el tiempo? ¿Ya debes saber que es inútil el escapar?
¿Escapar? ¿Así qué realmente se escapo?
—…¡No! ¡No quiero volver a esa Iglesia! No quiero volver con las personas que matan otras personas… también, ustedes me hicieron cosas… ustedes hicieron cosas terribles…
Asia responde con una mezcla de enojo, disgusto y miedo.
¿Así que realmente ha estado matando gente, eh? ¿Qué sucede dentro de esa Iglesia?
—Por favor no digas eso, Asia. Tu Sacred Gear es esencial para nuestro plan. Así que por favor, regresa conmigo. También me tomé el tiempo de buscarte. No me causes problemas.
Reynalle se acerca. Asia se esconde detrás de mí. Su cuerpo está temblando de miedo.
Doy un paso adelante para protegerla.
—Espere señorita. ¿No puedes ver que ella no quiere ir contigo? Reynalle-san, ¿Qué es lo que vas a hacer con ella después de regresar?
—Jejeje, así que realmente te gusta hacerte el héroe al proteger a la damisela en apuros… que tierno. Para ser un simple humano, realmente tienes agallas para llamarme por mi nombre… Si no fuera por mi amabilidad, ya estarías muerto. Lo que sucede entre nosotros no tiene nada que ver contigo. Si no te vas rápido de este lugar, vas a morir, ¡sabes?
Dijo Reynalle, con un tono de voz burlón, pero sin hacer nada más.
—Discúlpeme, pero…
En es momento, ella se movió, y en unos instantes ya estaba en frente de mí, alagando su mano hacia mi cuello, su intención era clara, y su velocidad suficiente para que ningún humano común pudiera reaccionar en respuesta, aunque para mi si era posible, pero no lo hice. No sentí ninguna intención asesina viniendo de ella, solo parecía estar jugando conmigo.
¿Ddraig, puedo acabar con ella y a salir de aquí?
[No te lo recomiendo, compañero… hay más persona a nuestro alrededor.]
Mientras era agarrado del cuello por Reynalle, expandí mis sentido y me di cuenta de que había varias personas oculta a nuestro alrededor, también escuche el distintivo sonido de alas aleteando en el aire.
Vaya reunión de anormales, ¿por qué tanta gente vino para buscar a una niña?
[Están en el territorio de los Demonios, y si ellos la descubrieran, seguramente querrían poseela para ellos… esa es la razón por la que vinieron preparado para un buena pelea.]
Tch…
Después de agarrarme por el cuello, Reynalle me levanto del suelo como si no pesara nada, mientras me apretaba levemente la garganta, lo suficiente para obstruir mi respiración, pero para ahorcarme.
—Lo siento Ise-kun, pero para mí, eres solo una hormiga.
Me dijo ella, con un falso tono de disculpa, y un aire de desdén. Mientras lo hacía, pude notar que a varios metros detrás de ella se encontraba aquel sacerdote lunático de pelo blanco.
—Asia. Si no quieres a que este mocoso sea asesinado, ven conmigo. Tu Sacred Gear es esencial para nuestro plan. Tu poder, el [Twilight Healing], es un raro Sacred Gear. Si no vienes conmigo, tendré que matarlo.
Reynalle le da una cruel orden, sin ningún tipo de contemplación o compasión.
¿¡Soy un rehén!? ¡Y una mierda que lo soy! ¡Maldita seas!
—¡C-Cá-lla-te! ¡Asia c-co-rre…!
—Sí, entiendo.
Sin escucharme, Asia acepta la orden del Ángel Caído.
Ella camina hacia Reynalle, y se pará detrás de ella, al ver eso, Reynalle me suelta como a un saco de papas.
Después de toser un poco, giro mi mirada hacia ellas.
—¡Asia!
—Ise-san. Gracias por lo de hoy. Fue realmente divertido.
Ella muestra una gran sonrisa. Pero se le notaba triste y resignada.
—Buena chica, Asia. Eso es. Problema resuelto. Con el ritual de hoy, serás liberada de tu sufrimiento.
Mientras decía esto, Reynalle puso una cara algo lasciva y codiciosa.
¡Mierda! ¡Ella no se parece en nada a la Yuuma-chan que conocí!
¿Además, a qué se refiere con ritual? ¡Suena como algo malo!
Entonces, debido a la rabia y a la impotencia que estaba sintiendo, le grité a Asia.
—¡Asia! ¡Espera! ¿¡Somos amigos, cierto!?
—Sí. Gracias por ser amigo de alguien como yo.
Si somos amigos, debería poder potegerlar, debo proteger a Asia. Pero, ¿Por qué no lo hago?
—¡Asia…!
—¡Oh! ¡Ya callate!
Protestó Reynalle, dándome una patada en la frente, la cual me mando para el suelo.
—¡Ise-san!
Asia gritó, pareció querer correr hacia mí, pero Reynalle la detuvo.
—¡Olvidalo! No le paso nada, solo esta inconsciente, despertará en un rato.
¡Que mentirosa! ¡Si no hubiera reaccionado a tiempo, pudo haberme roto el cráneo, o como mínimo, se hubiera roto mi cuello!
—¡Vamonos!
Después de decir eso, tomó a Asia por la fuerza, mientras que extendía su alas y emprendía el vuelo.
Poco después, las personas a mi alrededor se retiraron, con algo de prisa.
[Compañero, todo el mundo se fue…]
…
[¿Compañero, estas bien?]
Ddraig… quiero salvarla.
[Suspiro Ya me lo imaginaba… pero con tantas personas, no podrás hacer mucho, especialmente con el numero de Ángeles Caídos, sin mencionar el riesgo de quedar expuesto.]
Lo se, lo se, pero aun así… aun así quiero hacerlo, no pudo quedarme de brazos cruzados sin hacer nada, mientras que Asia esta… Suspiro... Me siento como un inútil…
[Aquel que es débil se sentirá como un inútil]
…
Duré un rato así, sin decir nada, mientras me martillaba la cabeza para hallar una solución. Después de un rato, por fin di con una solución.
—Creo que tengo una idea.
Life 4. Punto de Inflexión.
Me encontraba cerca de las afueras de la ciudad, vestido con una camisa, un mono y unos zapatos oscuros, junto con un suéter con capuchas de color gris oscuro, también llevaba puesto una Máscara Kitsune de color blanco con detalles rojos, que había conseguido en un viaje a Kioto hace unos años.
Estaba utilizando la capucha y máscara para ocultar mi cabeza, y mis facciones, además que estaba usando el Método de Circulación Interna: Fuerza del Dragón para alterar mi aura de tal manera que pareciera salvaje y desenfrenada, así se les haría difícil reconocerme.
Mientras tanto, estaba esperando a ver si mi plan funcionaría, ya que si no funcionaba, realmente no tendría muchas oportunidades de lograr nada.
Ddraig, ¿hay alguna novedad?
[Mhmmm… sí, ya están empezando a moverse, vienen en camino…]
¡Genial! Con ellos aquí, las cosas serán más sencillas.
[Ten cuidado, no es tan fácil jugar con los Demonios, las cosas pueden truncarse en cualquier momento.]
Entiendo…
Mientras hablábamos, me estaba preparando, ya había empezado a usa mi técnica de respiración, mientras me preparaba mentalmente para esto.
[Compañero, ellos ya llegaron.]
Bien, es hora...
Después unos minutos de espera, por fin llegó el momento de actuar.
Puedo ver como cuatro figuras se acercan a la vieja iglesia, y mientras lo hacen, dos de ellas se separan y van al bosque, mientras las otras dos se adentran en el edificio.
Esperó unos segundo, antes de avanzar.
—Aquí vamos…
Sin perder más tiempo, avanzó rápidamente en dirección al edificio. Se que esos dos Demonios entraron directo por la puerta, así que, usando mis sentidos al extremo, logró ubicar la distancia entre ellos y yo.
También entró por las puertas, con el mayor sigilo que puedo realizar, al entrar por la puerta y mientras me ocultaba entre las sombras y las paredes, pude observar con mayor detenimiento el santuario. Había un altar y sillas largas. Parecía un santuario común y corriente. Las velas y lámparas iluminaban el interior del santuario.
Oh, había algo que parecía anormal… La escultura del hombre en la cruz tenía la cabeza destruida.
Qué lugar tan tenebroso.
CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP.
Un aplauso resonó por el santuario.
Aquel lunático de pelo blanco con apariencia de sacerdote, apareció desde atrás de un pilar.
Cuando miré su rostro, instintivamente me sentí asqueado.
—¡Vaya! ¡Qué sorpresa! ¡Qué emoción me da el tener visitas!
—¡Bueno! Déjenme presentarme: Mi nombre es Freed Zelzan. Pertenezco a cierta organización de Exorcistas. Ah, sólo por el hecho de que me haya presentado, no significa que ustedes deban hacerlo. No quiero recordar tu nombre en mi memoria, así que por favor no lo hagas. Está bien, puesto que van a morir pronto. Me aseguraré de ello, y puede que duela al principio, pero después te sentirás tan bien que llorarás. Ahora, abramos la nueva puerta —Ze!
Dijo alegre y confiadamente, mientras sacaba una espada sin hoja, y una pistola.
BROOOM.
El sonido vibra en el aire.
La espada que sólo tiene la empuñadura se convierte en algo como un sable de luz, se parece a un sable de luz del Gundam. Si un Demonio es cortado por esa espada sería problemático, también la pistola puede ser algo desagradable para ellos.
Por suerte para los Demonios, esta era una batalla de 2 contra 1.
Y hablando Demonios, ambos aludidos los reconocía muy bien.
Uno de ellos era un chico rubio muy guapo, el Príncipe número 1 de nuestra escuela, Kiba Yuuto. El capturó el corazón de las chicas de nuestra escuela con esa sonrisa suya. Por cierto, él está en el mismo año que yo. Pero es de una clase diferente.
El otro era Toujou Koneko-chan, la chica de primer año que a veces iba a la azotea de la escuela.
—Encantado de conocerte, Exorcista Renegado, por favor, ¿serías tan amable de decirnos donde esta la chica con el [Twilight Healing]?
—¿¡Eh!? Ustedes han venido a por Asia-tan, ¿Cierto? ¡Hahaha! ¡Vaya, los Demonios-samas tienen una muy buena red de inteligencia para poder enterarse de la existencia de una perra como esa que sería capaz de sanar Demonios! ¡Bueno, bueno! Me gustaría saber, ¿cómo lograron enterarse de ella?
—Solo puedo decir que un tercero ajeno a nosotros nos lo divulgo, puede que sea uno de los suyos, ¿se te ocurre alguien?
Le respondió Kiba.
—¡Oh! No lo se, y tampoco me importa mucho...¡Bueno, para una Bruja que puede cura a los Demonios, la muerte es lo mejor!
¿Morir? ¿A qué se refiere? ¿Tiene qué ver algo con lo de ese ritual?
—Volviendo al tema principal, ¿donde está la Monja? —volvió a preguntar Kiba.
—Pues hay unas escaleras escondidas detrás del altar. De ahí puedes ir al lugar donde están llevando a
cabo un ritual.
Ese tipo soltó el lugar del sótano oculto al apuntar hacia el altar. ¿Sabe que tiene que detenerlos? ¿O lo dijo porque está seguro que no importa siempre y cuando los mate?
En ese mismo momento, Kiba desenfundó una Espada Europea y Koneko-chan…
¡Koneko-chan lanzó las bancas hacia el sacerdote! ¡Súper Chica, ese era un inesperado modo de
ataque!
—¡Wow! ¡Oh sí!
El sacerdote se dio la libertad de hacer un pequeño baile y cortó las bancas por la mitad con su espada de luz. Las bancas que fueron cortadas en dos golpearon el piso.
—Ahí.
SWIFT.
Kiba, que se había adelantado, pero ya había desaparecido ¡Era tan rápido que ningún humano normal alcanzaría a siquiera ver su sombra!
KATCHING.
Salían chispas entre la espada de Kiba y la espada de luz del Sacerdote. ¿La espada de luz es sólida?
Ambos blandían sus espadas con rapidez y habilidad, se podía escuchar el sonido de dos metales golpeándose entre ellos.
—¡Hmmm! ¡Hmmm! ¡Que molestia! ¿Por qué son tan ruidosos? ¡Lamento hablar en un lenguaje muerto! ¡Discúlpenme después de que mueran! —farfullaba incoherencias el lunático, mientras disparaba con su pistola balas de luz hacia Kiba.
Kiba esquivó las silenciosas balas con sus orgullosas piernas, pero no detuvo sus ataques. Kiba era impresionante, estaba esquivando todos los ataques del Sacerdote. Pero el sacerdote también tenía lo suyo, podía pelear a la par contra un Demonio.
Koneko-chan estaba levantando las largas bancas que eran mucho más grandes que ella.
—...Aplástate.
Ambos esquivaron ese banco con tanta facilidad, que parecía que ni se percataron de su caída.
¡El hombre una vez más detuvo los espadazos de Kiba! Así que esa mierda de Sacerdote no es un oponente tan debil como aparenta. Kiba y el Sacerdote empezaron su batalla de frente. Ambos se lanzaban miradas amenazantes.
—I… impresionante. Eres fuerte. —le alagó Kiba, con caballerosidad.
—¡Ajajajaja! ¡Tú también! ¿¡Un "Caballero", eh!? ¡Ni un solo punto ciego! ¡Esto es grandioso! Sí, sí. Eso es ¡Últimamente no he tenido una batalla como esta! ¡Y estaba a punto de enloquecer por ello! ¡Hmmmm! ¡Hmmmm! ¡Voy a matarte!
—Entonces pelearé en serio por un rato.
¿Pelear en serio? ¿Qué es lo que hará?
—Cómete esto.
Una voz de tono grave, no podía creer que fuera la voz de Kiba, por la intensidad que tenía. Entonces algo negro comenzó a salir de la espada de Kiba. Esa cosa cubrió por completo la espada.
Oscuridad. Si lo fuera a describir, eso es lo único que es.
La oscuridad cubrió la espada.
No, era más bien como si la oscuridad le diera forma a la espada de Kiba. La espada oscura que chocaba contra la espada de luz del Sacerdote empezó a devorar la espada de luz.
—¿¡Q-qué diablos es esto!?
El Sacerdote parecía confundido.
—Esta es "Holy-Eraser", una espada oscura que devora la luz.
—¿¡Tú también eres un poseedor de Sacred Gear!?
¡Sacred Gear! ¿¡Kiba también tiene uno!? ¡Digo, esa espada de oscuridad se ve asombrosa! ¡Diablos!
[Siendo el "sirviente" de un Demonio de Clase Alta, eso no es una sorpresa...]
¿¡Así que el tipo que se ve bien obtiene un arma que se ve bien también!?
La espada de luz del sacerdote se encontraba completamente envuelta por la espada de Kiba, su luz ya había desaparecido y había perdido su forma.
¡Ahora! ¡Esta es la oportunidad! ¡Active mi Touki y salté hacia el techo a máxima velocidad!
El sonido ocasionado cuando atravesé el techo de madera viejo llamó la atención de todos, mientras que yo me impulsaba por la pared y los soportes del techo, mi objetivo era el pasaje detrás del altar. El sacerdote se percató de mi movimiento.
—¿¡Y tú quién rayos eres!?
Apuntó su pistola cargada con balas de luz hacia mí. Las balas fueron disparadas sin ningún sonido de disparo.
Resoplé, mientras movía mi brazo para interceptar la bala de luz, a la vez que intensifique la intensidad de mi Touki en ese brazo.
PAP
La bala de luz desapareció luego de no poder atravesarme.
—¿¡Qué rayos!?
El Sacerdote parecía realmente sorprendido.
Pero yo no les preste mucha atención y me fui directo hacia la escalera oculta detrás del altar.
Bajé corriendo las escaleras bajo el altar. Las lámparas del sótano también estaban encendidas, después de las escaleras había un solo pasillo que llevaba al fondo.
—Posiblemente al final del pasillo… Porque este olor es el de ella…
Eso es lo que me dije para mi mismo, mientras observaba el final del pasillo. Así que Asia está aquí. De repente empecé a motivarme. Asia, espera por mí. ¡Pronto estaré allí! Al ir más adentro, me encontré una gran puerta, y podía sentir la presencia de varias personas detrás de ella.
¿Es aquí?
[Es posible. Estoy seguro de que hay grupos de Exorcistas y un Ángel Caído adentro. ¿Estás listo?]
Yo asentí con la cabeza a la pregunta de Ddraig.
—Muy bien. Entonces abriré la puerta…
Cuando yo estaba a punto de abrirla, la puerta se abrió por sí misma. Mientras hacia un gran ruido, el interior del lugar para el ritual se volvió visible.
—Demonios, Bienvenidos ¿Oh...? No, parece que me he equivocado.
Reynalle, el Ángel Caído habló desde el final de la habitación. La habitación se encontraba llena de sacerdotes, todos ellos llevaban empuñaduras que creaban espadas de luz en sus manos. Miré a la chica atada a una cruz.
¡Asiaaaaa!
Realmente hice un gran esfuerzo por no gritar en ese momento.
—¿Quién eres tú? ¿Un aliado de los Demonios? —me preguntó Reynalle, con curiosidad.
—¡Así es! ¡He venido a llevarme a esa Monja! —le respondí con frialdad, mi voz era mucho más grave y ronca, lo cual era para encubrir mi identidad.
La miré mientras decía eso, estaba cabizbaja, con una mirada perdida y con lágrimas cayendo de su ojos.
—Vaya, realmente me sorprende que se hallan enterado de esto y que además actuaran tan rápido, pero es demasiado tarde. El ritual está por terminar justo ahora.
¿El ritual acabó? ¿A qué se refiere…? De pronto el cuerpo de Asia comenzó a brillar.
—¡…Aaaaaah, noooooooo!
Asia gritó dolorosamente.
—¡Para!
Traté de avanza pero los sacerdotes se interpusieron en mi camino.
—¡No te dejaré interferir!
—¡Yo te destruiré aliado de los Demonio!
—Muévanse, ¡montón de mierdas! ¡No tengo tiempo que perder con ustedes!
¡BANG!
Un fuerte sonido, arremetí contra todos ellos a una velocidad inhumana, y sin darles tiempo a reaccionar, los golpee a todos en cuestión de segundos con mucha fuerza.
El sonido de huesos rompiéndose, gritos ahogados y alaridos de dolor fue todo lo que se pudo escuchar de ese altercado.
—¡Noooooo… Aaaaaaaaaaaaaah…!
Al mismo tiempo una gran luz salió del cuerpo de Asia. Reynalle la tomó con su mano.
—¡Este es! ¡El poder que por tanto tiempo he deseado! ¡Sacred Gear! ¡Con esto finalmente seré amada!
Mientras ella gritaba extasiada y bailaba en el aire, yo corrí hacia la Cruz. Asia, que estaba atada a dicha cruz, se encontraba pálida y parecía casi sin vida.
¡No, aún está bien!
Desaté sus brazos y piernas, y la tome entre mis brazos.
Mientras que, con una expresión de éxtasis, Reynalle abrazó la luz. Entonces la brillante luz envolvió la habitación del ritual. Cuando la luz se detuvo, ahí estaba un Ángel Caído emanando una luz verde de su cuerpo.
—Fufufu ¡Ahahahaha! ¡Finalmente lo obtuve! ¡El poder supremo! ¡Con esto…! ¡Con esto me convertiré en un Ángel Caído supremo! ¡Con esto todos aquellos que me despreciaron me las pagaran!
El Ángel Caído soltó una gran carcajada. No le preste atención, estaba completamente concentrado en Asia, mientras le colocaba mi mano sobre su pecho.
Podía sentir las fluctuaciones de su fuerza vital, y era todo un caos, un revoltijo que se desvanecía a cada segundo.
¡Tenía que hacer algo! A este paso, ella moriría en segundos.
Empece a susurrar un Mantra, y junto con el Aire del Dragón y la Fuerza del Dragón, armonice mi fuerza interna con la energía natural a mi alrededor, mientras tratada de conectarme e influenciar la fuerza vital de Asia. Tratando, en vano, de reestablecer el orden en su interior, para así poder salvarla.
[Compañero…]
¡No te atrevas a decirme que esto es inútil!
—…I…I-se-sa-n… —susurró ella, con la mirada completamente perdida.
Su voz me tomó por sorpresa, e incluso termine por interrumpir mi Mantra, pero rápidamente volví en si, y seguí cantando en mi mente.
—Asia, ya vine… resiste, vas a recuperarte. —de susurré mientras me enfocaba completamente en intentar salvarla.
—…sí…sí… —susurró ella en respuesta, con una voz cada vez más débil.
¡Hey! ¡Hey! ¿Debería estar bien, puede resistir, cierto?
[Ella no podrá… y lo sabes…]
—Es inútil.
Reynalle hizo una mueca mientras rechazaba mis pensamientos una vez más.—A los poseedores de Sacred Gear que se les son arrebatados terminan muriendo. Esa chica pronto morirá.
—¡...Entonces devuélveme el Sacred Gear!
Le grité, pero ella sólo se rió.
—No hay forma de que lo devuelva. Incluso mentí ante mis superiores para apoderarme de esto. Y los mataré a todos para eliminar toda evidencia.
—¡…Maldita seas!
Al escuchar eso comenzó a reír a todo pulmón.
—Fufufu, que divertido, Issei-kun.
Parece que al final, ella me descubrió.
—…Tú… no puedo creer que alguien como tú haya sido mi primera novia.
—Sí, era lindo observarte. Es divertido jugar con chicos que no tienen experiencia con las mujeres.
—…En serio, a pesar de que sabía lo que eras e intuía que buscabas, realmente me llegaste a gustar, ¿sabes? …Me aseguré de planear cuidadosamente nuestra primera cita. Para asegurar que fuera una grandiosa cita, y que ambos la pasáramos bien.
—Fufufu, vaya, que sorpresa. Entonces lo sabías todo, y aun así me seguiste la corriente… ¡Ajajaja! ¡y sí, tienes razón! ¡Fue una majestuosa cita! ¡Gracias a eso, no estuve tan aburrida y pude liberar algo del estrés que tuve acumulado!
—...
—Y como agradecimiento, decidí no asesinarte al atardecer. ¿Hermoso cierto? ¿Pero qué crees Ise-chan?
Mi furia había superado su límite. Y exhalé mi rabia hacia ella:
—¡Reynalleeee!
—¡Ajajaja! ¡No quiero que un mocoso humano como tú diga mi nombre!
Reynalle se estaba burlando. Tenía tanto rencor dentro de mí, que mis intestinos se tornaban negros. En toda mi vida jamás había conocido a alguien tan despreciable como ella. Era a la única que conocía que podría llamar un verdadero demonio.
—…Ise-san… —me llamó Asia, con una voz débil y entre cortada. Ella estaba muy mal, su cara se estaba tornando azul, y su fuerza vital estaba en sus ultimas, como una vela a punto de apagarse.
—¡Espera sólo un momento! ¡Pronto serás libre Asia! ¡Podrás jugar conmigo de ahora en adelante! —le dije, volviendo a concentrarme enteramente en ella.
Asia sonrió ante mis palabras. Tomó mi mano. No pude sentir fuerza ni calor desde su mano.
—…Yo… fui… feliz… de haber tenido…un amigo…aunque… haya sido por un corto tiempo…
Asia sonreía a pesar de lo mucho que estaba sufriendo.
—…Si volviera a nacer… ¿serías una vez más mi amigo…?
—¿¡Qué estás diciendo…!? ¡No digas eso! ¡Estarás bien e iremos a algún lugar para divertirnos! ¡Te llevaré aunque no quieras! ¡Iremos al karaoke! ¡Al centro de videojuegos! ¡También a los bolos! ¡Y otros lugares! ¡A aquel lugar también! ¡Y a ese otro…!
No podía detener mis lágrimas. Se suponía que debía de hablarle con una sonrisa, pero no podía parar de llorar. Lo sabía. Ya lo había comprendido, hace mucho. Esta chica iba morir. Moriría y no podría hacer nada para evitarlo. Aun así quería negarlo. Esto… tiene que ser una broma…
—¡Somos amigos! ¡Siempre! ¡Claro! ¡Te presentaré a Motohama y Matsuda! ¡Son un poco pervertidos, pero ambos son buenos chicos! ¡Definitivamente serán tus amigos! ¡Definitivamente! ¡Nos lo pasaremos bien juntos! ¡Nos divertiremos cuanto podamos!
—…Si hubiera nacido en este país…y fuera a la misma escuela que tú…
—¡Vayamos! ¡Ven a nuestra escuela!
La mano de Asia acariciaba mi mejilla.
—…Incluso puedes llorar por alguien como yo… ahora… podré…
Su mano que acariciaba mi mejilla lentamente cayó.
—…Gracias…
Esas fueron sus últimas palabras.
Ella murió sonriendo. Perdí mis fuerzas y mi mente quedo en blanco. Me quedé ahí arrodillado mirando su rostro. Mis lágrimas no paraban de caer.
¿Por qué? ¿Por qué esta chica tenía que morir?
Era una linda chica. Era una chica bondadosa que curaba a cualquier herido.
¿Cómo es que nadie se volvió su amigo? ¿Cómo es posible que nunca estuvieran a su lado?
—¿¡Hey Dios!? ¿¡Dios estás ahí no!? ¿¡Los Ángeles y Demonios existen así que tú también, cierto Dios!? ¿¡Estás mirando cierto!? ¿¡Viste todo esto, no!?
Grité a la nada. Sabía que nadie me escucharía o me contestaría. Pero solo podía gritar al cielo de la rabia y la impotencia.
—¿¡Por favor no te lleves a esta chica!? ¡Por favor! ¡Te lo suplico! ¡Ella no hizo nada! ¡Sólo quería un
amigo! ¡Seré su amigo por siempre! ¡Así que por favor! ¡Quiero que ella sonría para siempre! ¡Hey por favor! ¡Dios!
Aunque grité fuertemente hacia el Cielo, sabía nadie que me contestaría.
—¿Pasó esto porque no me tomé las cosas enserio? Todo esto es mi culpa ¿verdad?
Apreté los dientes con remordimiento. No tenía poder. Ni tampoco ninguna resolución para poder hacer nada en absoluto. Si tuviera más fuerza, pude haberlos vencido a todos antes de que se la llevaran, tampoco habría tenido que tardar tanto en buscar la intervención de los Demonios… Si al menos tuviera menos miedo del mundo real, y hubiera actuado con resolución…
Aunque lo lamente ahora, ya es tarde. Esta muerta, ella nunca volverá a sonreír.
—¿Eh? ¿Te estas arrepintiendo? Es muy apropiado en un lugar como este, ¿no crees? ¿O estabas deseando algo?
La voz que escuché detrás de mí pertenecía a Reynalle. Cuando mire atrás, allí estaba el Ángel Caído mofándose de mí.
—Mira esto.
Reynalle uso su uña para hacerse una herida en la palma de la mano, y luego, puso esa misma mano sobre la herida. La leve luz verde comenzó a sanar su herida.
—Mira. Maravilloso, no es así. Puedo sanar cualquier herida. Para nosotros los Ángeles Caídos que
perdimos la protección de Dios, el Sacred Gear de esa chiquilla es un regalo especial.
Hey. Esa luz le pertenece a Asia. ¿Cómo la puede estar usando?
[Ese era su objetivo todo este tiempo, el obtener un Sacred Gear para si misma…]
—Un Ángel Caído que puede curar a otros Ángeles Caídos. Mi estatus subirá. Podría ser de ayuda para esos dos. ¡Para el gran Azazel-sama y Shemhaza-sama! ¡No hay nada más maravilloso que esto! Aaaah, Azazel-sama… mi poder es sólo para ti… —dijo ella, jubilosa y completamente ensimismada en su propia fantasía.
—Como si me importara.
Miré a Reynalle con un odio y furia que estaba a punto de explotar.
—A mí no me importa eso. Ángeles Caídos, Dios, Demonios… Nada de eso tiene que ver con esta chica.
—No, tiene que ver. Ella era una humana elegida como poseedora de Sacred Gear.
—…Aun así. Ella podría haber vivido tranquilamente. ¡Podría haber tenido una vida normal!
—No habría podido. Aquellos con un Sacred Gear irregular serian excluidos de grupos y el mundo en general. Porque poseen una gran capacidad. Porque tienen un poder diferente a otros. Incluso tú deberías saber que los humanos odian esas cosas, ¿cierto? Aun siendo un poder tan maravilloso como este.
—Bien… ya que no pude protegerla, lo mínimo que puedo hacer es vengarla… —dije eso, arrastrando cada palabra con lentitud, mientras trataba de estabilizar mi respiración y el flujo Ki en mi cuerpo.
—¿Tu…? ¿En serio? No me hagas reír, admito que eres muy fuerte, más que esos inservibles Exorcistas, pero el solo hecho de que los puedas vencer no significa que eres más fuerte que yo… —afirmó ella con un tono arrogante, mientras desplegaba sus alas —¡La diferencia entre tu y yo aun es muy grande!
Después de decir eso, se abalanzó sobre mi, pero esta vez, no me deje golpear.
Llevé mis sentidos y mi Touki al limite, logré esquivar su golpe, y le lancé un puñetazo directo a su estomago.
Ella se sorprendió por mi repentino movimiento al ultimo segundo, pero pudo bloquearlo, aunque fue mandada a volar a una buena distancia.
—Créeme… la diferencia no es mucha, y si no fuera por el resto de Ángeles Caídos, y la gran cantidad de Exorcistas… habría venido yo solo… —le dijo, mientras avanzaba hacia ella, completamente concentrado y enfocado en el momento en cuestión.
Ddraig me había dicho muchas veces que no siempre era bueno dejarse llevar por las emociones, mucho menos en una pelea.
—¡Tú…! ¡Maldito mocoso! —farfulló ella, mientra materializaba una lanza de luz y la arrojaba.
Su velocidad era asombrosa, pero aun así, yo estaba preparado, por lo que me fue posible esquivarla.
Mientras tanto ella volaba a mi alrededor, arrojándome otras tres lanzas de luz de diferentes direcciones. Yo la esquivé todas, a la vez que escucha el sonido del aire siendo cortado detrás de mí, y no necesitaba voltearme para ver qué era, ni tenía tiempo para eso.
Así que me agaché, esquivando por poco el ser ensartado por esa lanza de luz, mientras me apoyaba completamente de mis manos, usándolos para impulsarme y lanzado una patada con mis dos piernas hacía el abdomen desprotegido de Reynalle.
Esta vez, si logre asestarle el golpea, sacándole el aire y mandándola a volar hacia el techo del sótano.
Sin perder el tiempo, salté directamente hacia ella, dispuesto a continuar con el asalto. Pero, ella se recompuso rápidamente y se alejó, mientras me arrojaba otra lanza de luz, en el momento justo, ya que estaba en el aire y sin apoyo.
Sabiendo esto, enfoqué mis sentidos en la lanza y concentre una buena cantidad de Ki en mi brazo derecho, aumentando la intensidad de mi Touki, y con ella, golpee la lanza de luz entre la punta y la base, para desviarla.
¡Y funciono, la lanza se desvió!
Pero la parte de mi piel, con la que la toque se quemó, y era una quemadura horrenda, creo que de tercer grado, y dolía bastante. Tengo que tener cuidado con esa cosa, mi defensa no es lo suficientemente fuerte como para detenerla de lleno.
Cuando volví a pisar el suelo, vi que Reynalle jadeaba, mientras ponía su mano sobre su abdomen y se curaba con la luz verde.
Parece que su defensa no es muy fuerte, pero su velocidad y esa capacidad de auto-curación serán un problema.
[No parece ser una experta en magia, solo en combate cuerpo a cuerpo y ataques furtivos… lo mejor será que acabes esto rápido y en un solo golpe.]
¡Ok…!
—…Imposible. ¿Qué es esto? ¿Por qué…? Eres un simple humano sin un Sacred Gear… ¿Por qué tus capacidades son tan cercanas a las mías…?
Bueno, eso se debe al entrenamiento que llevó haciendo desde hace años, mis niveles de fuerza interna o Ki son anormalmente altos para los estándares humanos, en cierto sentido, se puede decir que mi fuerza es equiparable o superior a algunas criaturas sobrenaturales de Clase Baja.
No soy más débil que Kiba o Koneko.
—¡Patrañas! ¡Estas son puras patrañas! ¡Soy el Ángel Caído que tiene el poder definitivo de sanción! ¡Me he convertido en un ser supremo al obtener este "Twilight Healing"! ¡He recibido el derecho de ser amada por Azazel-sama y Shemhaza-sama! ¡No pienso perder ante un debilucho como tú…!
Reynalle una vez más sostuvo Lanzas de Luz en ambas manos, aleteó con sus alas negras y empezó a volar a altas velocidades alrededor de mí.
Yo me preparé, Ddraig tenía razón, esta batalla tenía que acabar con un solo golpe. Así que, con eso en mente, desplegué mi Shi por primera vez en un batalla.
Gracias a eso, obtuve una percepción extrema de los 5m de radio a mi alrededor, al mismo tiempo, usé la Fuerza del Dragón para aumentar la velocidad de circulación de mi fuerza interna, preparándome para un todo o nada.
Mientras tanto, que Reynalle estaba acumulando velocidad, a pesar del reducido espacio que tenía disponible, me arrojó una de sus lanzas de luz.
Esta vez era mucho más rápida que antes, pero gracias a mí Shi, pude evadirla a tiempo. Pero justo cuando me moví, y como sabiendo a donde me movería, ella atacó.
Dobló en un instante la velocidad que había acumulado, y me atacó por la espalda. En un instante, su lanza estaba a centímetros me perforarme el pecho, justo donde el corazón.
Aun así, yo también estaba preparado, ya me estaba inclinado levemente y girando hacía la derecha, mientras concentraba la mayor cantidad de Ki que podía reunir en mi mano derecha. Por lo que, al mismo tiempo que evadía ese golpe mortal, estaba usando el impulso de mi giro, para golpear con fuerza a Reynalle en la cara, entre la oreja y la quijada.
PAP
CRACK
El nítido sonido de mi puño derecho chocando contra su cara y el inconfundible sonido de los huesos de su quijada rompiéndose resonaron por todo el sótano, seguido de un grito ahogado cuando el cuerpo del Ángel Caído salió disparado a chocar contra la pared.
A pesar de todo eso, ocurrió en un instante, yo no me atreví a perder el tiempo y la oportunidad, así que la perseguí, y cuando ella chocó contra la pared, ya yo la había alcanzado, y sin ninguna compasión, le di un puñetazo directo al estomago.
Ella no pudo haces nada mas que soltar todo el aire que tenía en un grito ahogado, mientras se derrumbaba en el suelo, pero yo, aun no dándome por satisfecho, seguí golpeando con rabia.
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!
El sonido de los huesos de Reynalle rompiéndose una y otra vez, volvió a resonar por todo el sótano, y yo no me di por satisfecho hasta que estuve seguro de que no podría volver a moverse.
Es más, creo que esta inconsciente.
[Ya esta, compañero… a perdido el conocimiento…]
Ddraig me lo confirmó, pero yo sinceramente, no le presté mucha atención.
Me sentía vació, mis ganas de matarla simplemente se habían esfumado en la nada, no había rabia, odio o enojo, solo sentía un incomodo vacío y una creciente tristeza, y junto con ella, mis lagrimas comenzaron a caer, de nuevo.
—…Asia…
Ella jamás volvería a sonreír.
―○●○―
Pasaron varios minutos desde que finalizo la pelea.
Me encontraba sentado cerca del cadáver de Asia… sinceramente, no sabía que hacer o como sentirme, solo sabía que ella se había ido y que nunca más volvería…
También sabía que esto era mi culpa, mi miedo y necedad por mantenerme a salvo fueron la razón principal por la que ella murió.
Si tan solo hubiera sido más decidido, ella no…
—Soy un asco…
—Ara ara… ¿Realmente piensas eso? —se escucho una voz desde la entrada del sótano.
Cuando me giré hacia allá vi a cuatro personas, tres chicas y un chico. De entre ellos, la que había hablado antes era una hermosa chica, de un cabello negro en una cola de caballo y con una hermosa cara, que está siempre sonriendo.
¡La persona con una atmósfera Japonesa! ¡La que es una Yamato Nadeshiko aunque es una estudiante, y también una de las Idols de la escuela, Himejima Akeno!
¡La persona que se dice que es una de las "Dos Grandes Onee-sama" junto con Rias-senpai!
Junto a ella, medio paso más adelante, se encontraba la anteriormente mencionada Rias Gremory. Y detrás de ellas estaba Kiba y Koneko, los cuales se encontraba bastante bien, solo tenía la ropa un poco sucias.
—¿Hace cuánto que están ahí? —les pregunté con desgana y sin un ápice de sorpresa.
—Acabamos de llegar. —me respondió esta vez Rias Gremory, la cual tenía una expresión neutral, pero una mirada cargada de curiosidad.
[Desde que comenzó tu combate con Reynalle… por cierto, ella ya esta consiente.] me dijo Ddraig, revelando una mentira bastante obvia.
Gracias Ddraig…
[Te aconsejo que escuches seriamente los que ella tiene que decir, puede que te interese…]
A pesar de que no tenía ganas de prestarle atención a nada en este sótano, le tome la palabra y seguí observando a esos cuatro Demonios.
—Veo que has hecho un desastre aquí, Hyoudou Issei… y ahora que estas más tranquilo, me gustaría hablar contigo.
No me sorprendió en nada, el hecho de que supiera quién soy… yo mismo arruiné mi tapadera y Reynalle lo descubrió, ella, que también vio todo eso también debería haberlo descubierto.
Ya sintiéndome algo sofocado, decidí quitarme la máscara y la capucha. Al fin y al cabo, ya no me servían de nada.
—¿Qué es lo que quiere? —le pregunté a ella, con tono cortante.
Ella fijó sus ojos en mí por un buen rato, mientras yo le mantenía la mirada, hasta que ella la retiro, y se giro hacía el cuerpo de Asia.
Yo entrecerré mis ojos en respuesta.
—Por ahora, podemos dejar de lado lo de tu pequeño mensaje… me gustaría hacer un trato contigo… —dijo ella en un tono profesional, mientras se acercaba al centro del lugar.
Yo simplemente le resople en respuesta, antes de decir:
—¿Un trato? ¿Desde cuando es una buena idea hacer un trato con los Demonios? —le pregunté con sarcasmo.
—¿Y que pasaría si el trato tuviera que ver con traer a esa chica de vuelta a la vida? —me respondió Rias, con una pequeña sonrisa en sus labios.
—¿Revivir a los muertos, eso siquiera es posible?
—Si lo es…
[No revivir… reencarnar, ella quiere reencarnar a la chica como Demonio, como una de sus sirvientas…]
—Entonces… ¿lo que quieres es convertir a Asia, una ex-Monja de la Iglesia Católica en un Demonio, y para la cereza del pastel, también en uno de tus Siervos? Que cruel…
Rias se sorprendió cuando escucho lo que dijo, pero se recompuso rápidamente.
—Así también sabes sobre eso, bien… así las cosas serán más fáciles… —dijo ella con tranquilidad —Sí, tienes razón, puedo reencarnar a esa chica como un Demonio, y traerla de vuelta…
-...como una de tus Siervos… —la interrumpí —Entonces dime, ¿cuales son tus condiciones? ¿Quieres que yo también sea tu Siervo?
—No, claro que no… —negó ella rápidamente, sorprendida por el repentino cambio de tono —...pero, tienes razón con lo de las condiciones, tengo dos condiciones para ti… si prometes cumplirlas, la traeré de vuelta.
—En serio… —dije sin mucho interés —¿Y cuales son esas condiciones que yo debo cumplir?
—Son bastante sencillas, primero, no puedes aceptar convertirte en Siervo de ningún otro Demonio, que no sea yo… no te obligaré a convertirte en mi Sirvo, pero sí quiero que me prometas eso…
—Ya veo, me quieres tener reservado, para cuando surja la oportunidad… —le insinué, a lo que ella no reacciono, solo continuó.
—…segundo, quiero que te unas a mi club en la escuela.
Y también quiere atarme y tenerme cerca.
—Y como pudo confiar en que no la trataras mal ni abusaras de ella, no dejaré que la traigas de vuelta solo para que tenga que volver a sufrir, eso sobre mí cadáver… —le pregunté con un tono más gélido y amenazante, a lo cual sus compañeros fruncieron el ceño, y pude distinguir que era de molestia.
Rias también frunció el ceño, e inclusa más que sus Siervos.
—Yo Rias Gremory, juro por mi honor como la heredera de la Casa Gremory y por el honor de mi familia, que jamás he tratado injustamente a ninguno de mis Siervos… —proclamó ella con orgullo y vehemencia.
Como si proclamar algo signifiqué que sea verdad…
Aunque pienso eso, la verdad es que estoy realmente tentado en aceptarlo, pero sería demasiado egoísta de mi parte hacerle eso a Asia, traerla de vuelta, no solo como un Demonio, sino también como la Sierva de otro Demonio, que solo Dios sabe como es, o cual es su carácter.
[Puedes confiar en ella…]
¿Eh? Ddraig, ¿a qué te refieres?
[Ella es de la Casa Gremory, los cuales son muy conocidos por su amor incondicional a sus Siervos… definitivamente están entre las mejores Familias de Demonios de Alta Clase a las cuales puedes afiliarte, con ella como su antecedente, Asia estará muy segura… es más, este trato es también muy beneficioso para ti, con tener una relación con ella, estarás mucho más seguro. Ella no quiere obligarte a ser su Siervo porque sabe que así no ganará tu lealtad, pero con Asia de por medio, ella puede mostrarte los beneficias de seguirla a ella… esa es su inversión y también su apuesta.]
¿Entonces, quieres que acepte sus condiciones?
[Sí… cree en mi y no dudes más…]
Después de decir eso, Ddraig se quedo en silencio, al igual que Rias.
Era mi decisión al fina… y sabía que no podía volver a dudar, esta podría ser una ultima oportunidad de reparar mi error.
Miré el cuerpo inmóvil de Asia, sabía que a pesar de ser Cristiana, no sentía ninguna repulsión hacia los Demonios, si no, jamás hubiera curado uno de ellos.
Con eso en mente, tomé mi decisión
—Lo siento, Asia… realmente siento ser tan egoísta, prometo que te lo compensaré. —susurré más para mi mismo, que para ella, luego me gire hacia Rias antes de decir —Acepto tus Condiciones… Por Favor, Tráela de Vuelta.
—Bien. —eso fue todo lo que dijo, no perdió más el tiempo —Akeno, despertémosla.
—Sí.
Akeno-san levanto su mano y en el aire apareció agua. ¿Es esto un poder mágico? Akeno-san dejo caer
el agua sobre Reynalle.
SPLASH.
—¡Cough! ¡Cough!
Reynalle tosió luego de ser empapada por el agua. El Ángel Caído despertó y abrió los ojos. Rias bajó la mirada hacia ella.
—¿Cómo se encuentra, Ángel Caído Reynalle?
—¿…Tú eres la hija de la Casa Gremory…?
—Hola, mi nombre es Rias Gremory. Soy la siguiente heredera de la Casa Gremory. Será por un corto tiempo, pero gusto en conocerte.
Rias la saludó con una sonrisa, pero Reynalle solo le lanzo una feroz mirada. Pero, después de unos segundos, soltó una carcajada.
—…Piensan que me tienes en tus manos, pero lo lamento. Puede que este plan fuera un secreto ante los altos mandos, pero hay otros Ángeles Caídos conmigo. Si me encuentro en peligro, ellos…
—No vendrán a ayudarte.
Rias lo dijo claramente, rechazando las palabras de Reynalle.
—Eso es porque ya he eliminado a los tres Ángeles Caídos, Calawana, Donnashik y Mitelt.
—¡Mentirosa!
Reynalle negó lo que Rias decía mientras se sentaba derecha. Rias sacó tres plumas negras.
—Estas son las plumas de esos tres. Puedes diferenciarlas ya que eres del mismo tipo que ellos, ¿cierto?
Reynalle perdió toda esperanza luego de ver las plumas. Parecía que Rias había dicho la verdad.
Fueron mucho más efectivos de lo que esperaba, parece que su fuerza no es nada que se deba despreciar…
[Ese es el estándar más bajo que un Demonio de Clase Alta, debe tener.]
—Luego de conocer a Donnashik, el Ángel Caído que atacó a Kiba, supe que había unos cuantas Ángeles Caídos planeando algo en esta ciudad. Pero lo ignoré porque supuse que era un plan que involucraba a todo un grupo de Ángeles Caídos. Ni si quiera yo soy tan tonta como para enfrentar a todos los Ángeles Caídos. Entonces fue que recibí un mensaje de que había una usuaria del Sacred Gear [Twilight Healing] que los Ángeles Caídos movían en secreto, así que fui con Akeno a hablar con ellos. Cuando los vi en persona, bruscamente dijeron que era su propio plan. Dijeron que al ayudarte ellos subirían su estatus. Sin vergüenzas que se mueven en secreto usualmente alardean sobre sus planes.
Rias le sonrió, mientras Reynalle frustrada, apretaba la quijada.
—Nos menospreciaron, porque éramos tan solo dos chicas las que se les acercaron. Así que les pregunté como un regalo de despedida. Fufufu, hablaron sin darse cuenta de quién iba a morir. Unos Ángeles Caídos tan estúpidos. Y dado que estaban dispuestos a ayudar en tu patético plan, ellos sin duda eran unos pobres diablos.
—Ser golpeado por un disparo no dejará ni un rastro. La princesa del Duque quien posee el poder de la "destrucción". Rias es una poderosa Demonio llamada un genio dentro del grupo de los jóvenes Demonios.
Kiba hizo un comentario sobre su ama.
—Uno de sus apodos es "Ruin Princess Scarlet", ¿sabes? Esa es a quien te enfrentas.
Akeno-san lo dijo sonriendo.
Princesa de la Destrucción… Que apodo tan aterrador…
[Tengo una idea de porque se llama así…]
¿Por qué?
[Te lo diré después… no lo he confirmado todavía… pero si puedo decirte, que si tengo razón, ella es bastante fuerte…]
Entiendo…
Los ojos de Rias se volvieron fríos e intensos. Rias se acercó a Reynalle; El Ángel Caído se
asustó.
—Te haré desaparecer, Ángel Caído-san.
Su tono frio y lleno una fuerte instinto asesina, muy diferente a su aptitud anterior.
—Claro, también recuperaré ese Sacred Gear.
—¿¡No lo puedes decir en serio!? Este poder curativo es para Azazel-sama y Shemhaza-sama…
—Vivir por amor es hermoso. Pero has sido manchada con demasiada suciedad. No tienes elegancia. Y eso no lo permitiré en mi presencia.
Rias apuntó su mano hacia Reynalle. Parecía que la acabaría de un golpe.
—Yo, estoy aquí.
Entonces, una sombra apareció cerca de la gran puerta. Era el Sacerdote Freed Zelzan.
—¿Qué hace ese Lunático aquí? Pensé que también lo habían matado. —pregunté, mientras miraba hacía Kiba y Koneko, los cuales se encogieron de hombros.
—Escapó antes de que Buchou llegará, y ahora regresó… —dijo Kiba con indiferencia, como si eso fuera la cosa más normal del mundo.
¡Que tipos más poco confiables! Mira que dejar a un lunático como ese suelto por ahí puede ser un problema.
—¡Wow! ¡Mi superior está en serio peligro! ¿¡Entonces que pasará ahora!?
Reynalle gritó ante la presencia del Sacerdote:
—¡Sálvame! ¡Si lo haces, te daré un premio o algo!
Freed pusó una sonrisa sádica al escuchar esas palabras.
—Hmmm. Hmmmm. Recibí una hermosa orden de un Ángel. ¿Eh? ¿Así que podré tener sexo contigo? Para mí, tener relaciones con un Ángel es un gran honor. Me daría un gran estatus social.
—¡Ku….No estés jugando y sálvame!
El rostro del Ángel Caído se tornó furioso. Parecía tener prisa. No, tenía prisa. Es posible que pensara que un simple humano jamás la traicionaría o algo parecido.
—Ararararara, sabes que lo digo en serio…Digo, algo sin importancia como eso debería estar bien. ¿No es así, Ángel-sama? ¿Es un no? ¿Así que es así? Entonces, ahora me iré. No importa como lo mires, estoy en desventaja, así que simplemente me iré.
Freed lo dijo en un tono gracioso mientras enroscaba su cuerpo.
—¿¡Eres un Sacerdote, o no!? ¡Se supone que debes salvarme! ¡Soy un Ángel Caído todo poderoso! Yo…
—No necesito un superior que pierde contra basura, contra Demonios. Eres linda, pero te hace falta planear y eres necia. La única cosa para lo que eres útil es para masturbarse. Así que ya muérete. Bueno, un Ángel Caído que fue abandonado por Dios no irá ni al Cielo ni al Infierno sino a la nada. ¿Tal vez la experiencia de desaparecer será útil? Oh, eso es imposible, porque no quedara nada. Es imposible, hahahaha… Así que namusan… Espera, eso es Budismo. ¡Cierto, era un Cristiano! ¡Soy un chico tan travieso! ¡Hahahahaha!
Después de decirlo movió su mirada a otro lugar, como si perdiera el interés en Reynalle. Con eso la expresión de Reynalle estaba llena de desesperación. Se veía desdichada. ¿Era esté el mismo Ángel Caído que estaba reuniendo poder y haciendo un alboroto? Freed puso una gran sonrisa hacia mí. ¿Eh? ¿Yo?
—Hey, el lacayo demonio de ahí… ¿Cual era tu nombre?
—Ese no es tu problema...
—Jejejeje… A pesar de ser un humano, tienes la habilidad de vapulear a esa perra. Estoy interesándome en ti. ¡Eres tan digno de asesinar! Y tu también, "Caballero"-kun, definitivamente estás en mi lista "Top 5 de los Demonios a matar", así que prepárense, ¿okay? La próxima vez que nos veamos, tengamos una romántica batalla a muerte, ¿okay?
Sentí algo frio recorrer mi espalda. Ese tipo sonreía pero tenía un instinto asesino extremo. Un desafío dirigido a mí. No, una notificación adelantada para asesinarme.
Sabía que este lunático se volvería un problema…
—¡Nos vemos! ¡Bye—bye! ¡Recuerda cepillarte los dientes!
Freed desapareció inmediatamente del lugar luego de agitar su mano en forma de despedida. Era veloz.
Se fue justo así. Pero de alguna manera sentí que lo volvería a ver. No era una premonición sino algo más extraño.
—Ahora, el Ángel Caído Reynalle quien fue abandonada por su propio sirviente. Patético.
Rias no mostró ni la más mínima simpatía en su tono. Reynalle comenzó a templar. Tal vez me sentía un poco mal por ella, tal vez porque era mi ex novia "Yuuma-chan". Bueno eso también era parte de su retorcido plan. Entonces Reynalle me miró. Puso una afligida mirada hacia a mí.
—¡Ise-chan! ¡Por favor sálvame!
Su voz era la de Yuuma-chan, cuando solía ser mi novia.
—¡Este Demonio intenta asesinarme! ¡Te amo! ¡Te amo tanto! ¡Por eso, derrotemos a este Demonio juntos!
Reynalle actuó de nuevo como Yuuma-chan y suplico mi ayuda mientras lloraba. Realmente soy un estúpido por sentir lastima de ti, Yuuma-chan… pero Yuuma-chan no existe, solo eres un Ángel Caído que le gusta manipular a la gente.
—Adiós, Reynalle… realmente lamentó haber sido tan iluso contigo. Rias, estoy al límite… has lo que debas…
Después de escuchar eso, el Ángel Caído se quedó inmóvil.
—…No deberías intentar coquetear con aquellos a los has engañado… Desaparece.
¡BANG!
Una esfera mágica, de color purpura oscuro, salió disparada de la mano de Rias y en cuestión de segundos, no dejó nada del Ángel Caído. Lo único que quedaba era la sensación misteriosa que tenía y las plumas negras flotando alrededor de la iglesia.
―○●○―
Había una luz verde flotando en el santuario. Era el Sacred Gear de Asia que fue liberado al morir Reynalle. La cálida luz brillo y flotó lentamente hacia mí, pero Rias puso su mano en la luz, y la atrapó sin mucha dificultad.
—Ahora, vamos a regresar le esto a Asia Argento-san.
—Bien…
—Hyoudou-kun, ¿qué crees que es esto?
Rias tomó algo de su bolsillo. Es rojo… Rojo como la sangre. Era una pieza de ajedrez del mismo color que el cabello de Rias.
—Eso parece ser una pieza de ajedrez, un [Alfil]… pero, ¿qué es eso exactamente?
—¿Oh?
Ella solo se reacciono levemente ante mi respuesta, solo sonrió, pero no me respondió, luego caminó rumbo a Asia mientras sostenía la pieza roja de ajedrez en su mano y lo colocó en el pecho de Asia.
Un flujo carmesí de poder mágico rodeó el cuerpo de Rias.
—Te ordeno, en nombre de Rias Gremory. A ti, Asia Argento. Te resucitaré en esta tierra como mi sirviente y serás reencarnada como un Demonio. A ti, mi [Alfil], con una nueva vida, ¡disfrútala!
La pieza roja de ajedrez comenzó a brillar y se metió dentro del cuerpo de Asia. Al mismo tiempo el Sacred Gear de Asia regresó a su cuerpo. Rias detuvo su magia luego de confirmar que la pieza de ajedrez y el Sacred Gear se encontraban dentro del cuerpo de Asia.
Entonces Rias suspiró. La miré aturdido. Después de un momento, sentí un cambio en el aura de Asia, y en ese momento, ella abrió los ojos. No podía detener mis lágrimas luego de verla.
—¿Eh?
La voz de Asia. Esa voz que pensé jamás volvería a escuchar. Rias le mostró una cálida sonrisa.
—La resucité porque quería el poder que puede curar incluso a un Demonio. Fufufu, Hyodou-kun, de ahora en adelante, la protegeré.
Yo no le presté mucha atención a las palabras de Rias. Asia levantó el torso. Miró alrededor y me encontró.
—¿…Ise-san?
Abracé a Asia, que puso una mirada desconcertada.
—Bienvenida de vuelta, Asia… lo siento mucho…
New Life.
¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep! ¡Beep-Beep!
Me levanté de la cama luego de ser despertado por la alarma del reloj. Lo puse una hora antes de lo normal. Necesitaba ir al cuarto del club ¡aunque fuera tallándome los ojos! Dejé mi habitación después de ponerme el uniforme.
―○●○―
—Oh, viniste.
Cuando llegué al cuarto del club, sólo Rias, o como ahora tenía que llamarla, Buchou, estaba presente. Las clases aún no habían empezado.
Llegué temprano porque el día de ayer, me dijo que tendría una reunión conmigo por la mañana. Buchou se encontraba sentada en el sofá bebiendo té verde.
—Buenos días, Buchou.
—Buen día. Pareces algo cansado.
—Sí, gracias a ti. —le dije con sarcasmo.
Entonces miró a mi mano derecha.
—¿Cómo está la herida que te hizo el Ángel Caído?
Mi mano derecha fue quemada por una lanza de luz durante la batalla del día anterior.
—Sí, ya ha sanado gracias a su poder curativo.
Respondí con una sonrisa.
—¿Así que es eso? El poder curativo de esa chica es impresionante. Puedo ver porque un Ángel Caído lo querría, aun manteniéndolo en secreto de sus superiores.
Me senté en una silla opuesta a Buchou. Había unas cuantas cosas que quería preguntarle.
—¿Entonce, Buchou, de qué querías hablar conmigo? —fui directo al grano.
—No mucho en realidad, solo me gustaría conocerte un poco más… —me respondió ella con simpleza —Tal y como deberías saber, este es un territorio que le pertenece a la Facción de los Demonios, y que tanto yo como Sona-Kaichou administramos.
—Si, lo se… Este es un territorio que obtuvieron hace mucho tiempo gracias a una "negociación" con algún Alto Mando de la Facción Sintoista, y que hace poco se los delegaron ha ustedes, ¿no es así?
—Correcto. —me confirmó ella, luego le dio un sorbo a su té, antes de continuar —¿Eres parte de alguna de las Facciones Sintoistas?
—No.
—¿Entonce, cómo sabes sobre nosotros y la historia de este lugar?
—Tengo un buen amigo que pertenece a una de esas facciones… —le respondí.
—¡Oh! ¿Y me podrías decir de cual facción estamos hablando? —me preguntó ella, con creciente interés.
—No.
Ella me volvió a mirar fijamente, perforándome con eso ojos azules suyos. Yo le mantuve la mirada, completamente tranquilo, y tratando de mantener una expresión neutral.
—Parece que no llegaremos mucho más lejos con este tema así que te haré una sola pregunta más… —dijo ella, volviendo a tomar otro sorbo de su té, con una postura bastante elegante, debo decir —¿Por qué, conociendo lo básico del mundo sobrenatural, y teniendo contacto con una facción cercano, sigues manteniéndote como un solitario?
Solo pude suspirar al escuchar esa pregunta.
—No es una respuesta muy complicada de entender… —dije, mientras me reclinaba de mi asiento —Simplemente me gusta la tranquilidad, y como tu dices, sin una facción que te respaldé es muy difícil si quiera sobrevivir, así que la mejor opción que tuve fue ocultarme y pasar desapercibido…
—Lo entiendo… —dijo ella, suspirando también —...entiendo a lo que te refieres, pero hay cosas de las que no podemos escapar, no importa cuanto lo intentemos…
Cuando dijo eso, su expresión se crispó por unos instantes, y por un momento sentí que la figura del Demonio de Alta Clase que ella llevaba, desaparecía y era remplazada por la de una chica normal, cansada, pero ordinaria. Aunque, ella rápidamente recupero la compostura.
—Bueno… por otro lado… —volvió a hablar ella, mientras cambiaba de tema —Tengo otra pegunta para ti…
—¿Cuál es?
—¿Cuál es tu mayor Deseo, o cual es la meta que más deseas alcanzar?
—¡Eh! —Esa pregunta me tomo por sorpresa —Si soy honesto, no tengo ningún deseo que quiera ver cumplido con desesperación o alguna meta para futuro que resalté…
—¿En serio? ¿Realmente no tienes ningún deseo o algo que quieras tener?
¿A qué quiere llegar con esto?
—Mhmmm… bueno, tal vez si tenga un deseo o meta, en realidad… —divagué mientras me rascaba la barbilla, luego vi la Buchou mirame con interés, esperando a que continuara —Deseo poder formar un Harem. —dije con un tono neutro y casi desinteresado.
Buchou se me quedó mirando por un rato largo, antes de comenzar a reírse a carcajadas.
—Jajajajajaja…
—¿Qué es tan gracioso? —le pregunté con un tono algo hosco.
—Jejeje… lo siento, lo siento, no pude evitarlo… —dijo ella, secándose una lagrima, mientras trataba de apagar su risa —…y yo aquí pensando que esa reputación tuya del "Rey de los Pervertidos", era una tontería, pero parece si había algo verdad en ese rumor, jejeje…
—Vale, si, muy gracioso y todo, pero, ¿a qué quieres llegar con eso? —le pregunté, aun con un tono hosco.
Ella me miró mientras sonreía, no con una sonrisa de burla, sino con una sonrisa más ¿seductora? ¿o provocativa?
—¿Y qué pasaría si te dijera que puedo a hacer realidad tu sueño? —dije ella en voz baja, y con un tono increíblemente seductor.
Por un momento, mi mente se quedó en blanco, mientras apenas asimilaba lo que me había.
—Si te conviertes en un Demonio, podrás tener tus propias Siervas, con ellas podrías formar tu propio Harem, y podrás hacer lo que quieras con ellas… —mientras ella decía eso, se inclinaba un poco más hacia mi, y yo también me inclinaba hacia ella. Y mientras más se acercaba su voz se hacía cada vez más baja, y más seductora, casi como un susurró lleno de tentaciones.
—¿En serio? —le pregunté yo, cuando ya estábamos muy cerca el uno del otro.
—Claro, incluso podrías… —pero antes de que pudiera, yo le soplé en un poco en la cara, ella que no se lo esperaba, cerró sus ojos, y yo aproveché ese momento para tocarle suavemente la nariz a modo de broma.
—Jejejeje… lo siento Buchou, pero eso no funcionara conmigo. —le dije, con un tono burlón, mientras me reía y me alejaba de ella.
Ella también se alejo, reclinándose en su asiento, aquella elegancia y provocación se había desvanecido, ahora se hallaba con un leve sonrojo y una expresión que oscilaba entre el agravio y un puchero, mientras me lanzaba una mirada acusadora.
—Dime algo, eso del Harem era mentira ¿verdad? —dijo, seguramente haciéndose la idea de que la acababa de engañar.
—Jejeje… no, para nada, hablaba en serio…
—Entonces, ¿no estas interesado? ¿ni siquiera un poco? —me preguntó ella, ya un poco más tranquila.
—Mentiría si dijera que no… —le dije con simpleza, a la vez que ella me miraba con interés —…pero creo que tomaré el camino largo…
—Vale… —dijo ella, mientras suspiraba —…pero recuerda que aun tienes esa opción… y también tienes que cumplir con la promesa que me hicisteis…
—Vale, vale… cumpliré mi Promesa, Buchou —le aseguré.
—Sinceramente, me sorprendió un poco tu respuesta… —dijo ella de repente, algo más tranquila y animada.
—¿Uhm? ¿A qué te refieres? —le pregunté, con algo de curiosidad.
—No pareces ser del tipo de persona codiciosa que le pediría algo a un Demonio, así que pensaba que no me dirías nada. Por lo que, cuando me dijiste que querías formar un Harem, traté de aprovechar la oportunidad… jejeje —me dijo ella, mientras se reía un poco de si misma —Bueno, normalmente la gente codiciosa pide cosas como: poder, riqueza, fama, gloria, entre otras cosas…
—Oh, entiendo… pero la el poder no es algo que me atraiga mucho, además de que eso lo puedo conseguir por mi propia cuanta… —le dije, mientras me acomodaba un poco más en mi asiento —...siempre pensé que la riqueza esta sobrevalorada, la fama me pondría en el ojo de todos y la gloria es al que uno debe ganarse por si mismo… por eso tu propuesta no es muy interesante para mí.
—Bueno, con eso me doy por satisfecha, así que será mejor que te deje tranquilo… La chica nueva se pondrá celosa de mí.
¿Celos? ¿De qué habla?
—¿Ise-san…?
Una voz vino detrás de mí. Yo conocía esa voz. Cuando di la vuelta, ahí se encontraba una chica rubia, Asia, quien intentaba sonreír.
—¿A…Asia?
¿Eh? ¿Está enfadada? ¿Por qué?
—Tiene que ser… Rias-buchou es realmente hermosa, así que aun Ise… ¡No, no! ¡No puedo pensar así! Oh Dios. Por favor perdona a mi corazón pecador.
Asia rezó, pero entonces dio un grito —Ouch.
—Me duele la cabeza.
—Por supuesto. Si un demonio le reza a Dios es natural que reciba daño. —Buchou le dijo tranquilamente.
—Es cierto… Me convertí en un Demonio. Ya no puedo encarar a Dios.
Asia parecía un poco preocupada. Asia, por favor no pongas esa cara triste.
—¿Lo lamentas? —Buchou le preguntó a Asia y ella negó con la cabeza.
—No, muchas gracias. Soy feliz siempre y cuando esté con Ise-san, así que estoy bien aunque sea una persona diferente.
Mi rostro empezó a tornarse rojo por su respuesta un tanto embarazosa.
Ummm, algo como esto me hace feliz. Para un chico es el mayor alago. Después de escuchar eso, Buchou sonrió.
—En ese caso, está bien. De ahora en adelante serás mi sirviente y te haré trabajar junto con los demás.
—¡Sí! ¡Daré lo mejor de mí!
Asia contestó enérgicamente. Primero ella tendría que entregar volantes, creo, pero me preguntaba si estaría bien, me sentí intranquilo, entonces me percaté de la diferencia en Asia. ¿Por qué no me había dado cuenta hasta ahora?
—Asia, ese uniforme…
Sí, Asia llevaba puesto el uniforme de la escuela a la que voy. El uniforme de chicas de la Academia Kuou.
—¿Me sienta bien?
Me preguntó tímidamente. ¡Claro! ¡Otra diosa ha descendió a nuestra escuela! Ya podía escuchar a los chicos de nuestra escuela hablando sobre ella. ¡Te ves genial!
—¡Es de lo mejor! Tomémonos una foto nosotros 2. —se lo dije, con una gran sonrisa en mi rostro.
—Ummm, sí.
Ella no sabía cómo reaccionar, pero era cierto que se veía linda en él. Aaaaah, ¡Mi vida escolar se esta volviendo un poco más interesante!
—Hice que Asia asistiera a nuestra escuela y ya que es de la misma edad que tú, ella también estará en 2do año. Ya que hice que la transfirieran desde el primer día, asegúrate de cuidarla.
—Buchou, si me lo dices así ¿significa es que ella estará en mi clase?
—Si, fue ella la que me lo pidió, así que será mejor que se estés agradecida… —dijo Buchou, con cierto aire elegante.
Entonces, Muchas Gracias, Buchou…
—Estaré a tu cuidado, Ise-san.
Asia inclinó su cabeza. Ya me imagino presentar a Asia con Matsuda y Motohama. No podía parar de reír al pensar en lo celosos que se pondrían.
—Sí, te presentare a mis dos amigos.
—Lo espero con ansias.
Fufufu, Matsuda y Motohama, parece ser que estoy más cerca que ustedes en convertirme en adulto. Lo siento, amigos míos, ¡mi vida como chico impopular ha acabado!
Mientras imaginaba eso, Kiba, Koneko-chan y Akeno-san entraron al cuarto.
—Buenos días, Buchou, Ise-kun, Asia-san.
—…Buenos días, Buchou, Ise-senpai, Asia-senpai.
—¿Cómo se encuentran, Buchou, Ise-chan, Asia-san?
Todos nos saludaron. Todos me llamaron "Ise" y nos reconocieron a mi y a Asia como un miembro. Es grandioso.
Buchou se levantó.
—Ya que todos se encuentran aquí, ¿por que no empezamos con unas presentaciones? —dijo Buchou, mientras se giraba hacía Kiba. —Déjame introducir a todos de nuevo. Yuuto.
Kiba nos sonríe después de que Buchou lo llamará por su nombre.
—Mi nombre es Kiba Yuuto. Como ustedes ya saben, estoy en segundo año como tú, Hyodou Issei-kun. Umm, soy un demonio también. Mucho gusto.
—…Primer año… Toujou Koneko. Un gusto el conocerte… soy también un demonio.
Toujou Koneko-chan baja su cabeza.
—Mi nombre es Himejima Akeno, y estoy en Tercer año. También soy la Vice-presidenta del club de Investigación de lo Oculto. Mucho Gusto. Aunque estoy así, yo también soy un demonio. Ufufu.
Himejima-senpai baja su cabeza cortésmente.
Al final, esta Buchou. Ella mueve su cabello carmesí y dice directamente.
—Y yo soy la Presidenta del club de Investigación de lo Oculto, como también soy un demonio de la Casa de Gremory, Rias Gremory. Mi casa posee el rango de Duque. Vamos a llevarnos bien de ahora en adelante, Ise-kun, Asia-chan. —habló Buchou con una "sonrisa de Bienvenida" en su rostro —Ya que todo esta dicho y hecho, ¿comenzamos la fiesta?
Luego de decir eso Buchou hizo un sonido con los dedos. Entonces, apareció un gran pastel en la mesa. ¿Esto también es magia?
—Sería bueno reunirnos por las mañanas para hacer este tipo de cosas, ¿cierto? Ya que tenemos nuevos miembros, hice un pastel, así que todos, ¡a comer!
Buchou lo dijo tímidamente. Pero ¡Un pastel hecho a mano por una de las Idols de la escuela! ¡Gustoso lo comeré!
Siendo sincero, no se que me deparará el futuro, ni si estar con ellos sera una buena decisión. Pero, no parecen ser malas personas, así que, sería bueno que les diera una oportunidad, y disfrutara del momento. Lo demás vendrá después.
