30.

Ignorar a alguien que busca constantemente estar a tu alrededor es muy difícil.

Agradecía el hecho de que Jen hubiera estado en todo momento interponiéndose entre Liv y yo.

Ahora que la gira estaba próxima a finalizar, seguía considerando seriamente denunciar a esa chica, ya no me importaban los problemas que aquella acción me ocasionara con la discográfica.

La cálida madrugada estaba despejada, y en esos momentos estaba en Osaka. Me distraje observando el paisaje mientras trotaba a buen ritmo y me olvidaba del asunto de la acosadora que tenía en mi equipo de trabajo. Estaba emocionado, porque de algún modo había llegado la última fecha de la gira.

Recorriendo la zona en la que me alojaba por aquellos días, mi mente vagó a través de los bonitos recuerdos que cada rincón despertaba en mí, particularmente los relacionados al año anterior.

Afloraban con facilidad a mi memoria, precisamente un año antes, cuando las versiones finales de mis canciones solistas habían surgido y recordaba la noche en la que con la comida a punto de quemarse, había escuchado esa música aferrado a la cintura de Sora.

Era una sensación muy gratificante situarme en aquel entonces, cuando el amor aun no había vuelto a florecer del todo, cuando jugábamos sin miedo a quemarnos con ese fuego que yacía a escasa profundidad en nuestros corazones, rogando por salir y manifestarse libremente.

Me encantaba recordar aquella noche, recordaba el vino, el labial de Sora esparcido alrededor de su boca -y probablemente de la mía -los besos desenfrenados, nuestra ropa deslizándose por la piel hasta acabar en el sillón para resbalar por los almohadones de cuero y aterrizar en el piso con delicadeza.

El calor y la humedad de nuestros cuerpos, fusionándose, estallando en mil colores, sensaciones y gemidos.

Deseaba con todas mis fuerzas volver a una escena como esa.

Crear una nueva.

Recordé de inmediato la vida que habíamos empezado a construir poco tiempo después, en Tokio, con el hermoso Señor Jin en el piso que Sora tenía en la capital.

Último show. Y volvería a Tokio. A esperar a reunirme nuevamente con los chicos de Knife Of Day para planificar lo que siguiera - a excepción de Akira, quien me acompañaba en la gira de mi disco solista como artista invitado en algunas canciones – y pronto Sora terminaría con sus estudios en la beca y volvería a Japón.

Sí. Este trago amargo llamado Liv acabaría muy pronto y había logrado superarlo estoicamente, a veces intentando aparentar que me encontraba imperturbable.

Por eso creía ya haber terminado la peor parte.

Nada me preparó para el ataque final de la chica obsesionada. La jovencita de aspecto enfermizo y débil estaba a punto de jugar su carta final, intentando arrastrarme con ella en su situación desesperada.

Hubiera sido más responsable e inteligente de mi parte detener la situación al tener los primeros indicios de acoso, pero una vez más, mi soberbia (y una evidente vergüenza a quedar en ridículo por haber sobredimensionado los hechos) pudo más que enfrentar la situación engorrosa.

Mientras ingresaba al hall del hotel en el que me quedaba, aún sonriendo como un idiota mientras fantaseaba con los cambios del último año, salí con brusquedad de mi ensoñación cuando me sobresaltó el sonido de mi celular.

Una llamada entrante de mi representante.

-Jen – me situé de golpe en el presente. Me metí en el ascensor y marqué mi piso, sin prestar mucha atención a mi entorno y dándole la espalda al espejo.

-Yamato, disculpa que me comunique a esta hora ¿Podría hablar contigo? Es algo urgente.

-Eh… Sí. No te preocupes, solo había salido a trotar aprovechando la mañana agradable - reprimí un leve bostezo pensando en lo poco que había dormido aquella noche por la ansiedad del show final.

-Lo siento mucho, pero es urgente -repitió - Iré al grano. – hizo una breve pausa – Escucha, tengo un amigo que trabaja en una redacción muy conocida de prensa de espectáculos, y aparentemente alguien hizo llegar una serie de fotografías que te tomaron durante varias sesiones que has tenido los últimos meses. Además hay muchos registros fotográficos del backstage y momentos cotidianos y privados de la gira.

-Es Liv, ¿Cierto? – el vello de mi nuca se erizó con rapidez mientras un escalofríos recorría mi cuerpo -¿En qué contexto se han compartido las fotos?

-Mira, que aquí el problema en sí no son las fotos, sino la información que pretenden filtrar junto a ellas. -escuché a Jen suspirar ruidosamente al otro lado de la línea telefónica, frustrada – Me las acaban de enviar. Si ya estás en tu habitación, iré de inmediato a hablarte del asunto. La idiota de Liv está insinuando que eres su pareja y que ella te ha acompañado en la gira. Y lo peor, es que lo hizo creando un nuevo perfil en Instagram, de acceso público, sin dar a conocer fotos de su rostro, sin hacer alusión a su nombre, solo publicando algunas fotos tomadas a escondidas de ti. Y eso no es lo peor -Jenny estaba muy alterada, no sabía si a punto de matar a Liv o si de llorar de rabia – lo peor es que ha simulado un embarazo.

-¡¿Qué?!

-¡Eso mismo! ¡Es una desquiciada! Tomó un fotografía de su abdomen, parece algo hinchado pero creo que esto ya es demasiado grave.

-Bueno, supongo que eso es imposible de comprobar.

-¿Pero cómo puedes hacerle hacer saber a los medios de que es falso?

-¿Y si los ignoro?

-Entre las fotografías hay una preocupante. Creo que fue tomada hace un par de meses, durante las jornadas que se hicieron contra el cáncer de útero, en las que participaste como promotor junto a varios artistas, ¿lo recuerdas?

-¿Cómo es eso?

-Apareces sentado en la sala de espera del área de ginecología. Pero la historia que cuentan de ese fotografía, es que acompañabas a tu amante a una revisión y que ella está embarazada.

Se me heló la sangre. O me hirvió. Porque la ira que sentí estaba a niveles desconocidos y nunca experimentados para mí.

Estaba en shock, completamente inmóvil ante la puerta de mi habitación.

-¿Yamato? – la voz de Jen, preocupadísima al otro lado, titubeó - Hay más.

-¿En serio? ¿Qué puede ser peor que todo esto?

-Han filtrado la identidad de Sora, ahora todos saben que es tu novia. E irán a preguntarle sobre el asunto. Ya saben dónde está viviendo en Roma.

Nunca, en todos los años que llevaba siendo alguien reconocido, se habían metido así conmigo.

Podía entender que alguna vez pasara si cruzaba a alguien sin escrúpulos, pero meterse en mi relación con Sora, era un límite demasiado irrespetuoso.

Y cuando Jen me dio esa noticia, algo dentro mío se derrumbó. Y tuve miedo.

Ahora todo aquello por lo que había luchado el último año, podía perderse de un momento a otro.

Mi voz no salía, estaba realmente nervioso.

Afortunadamente, Jen y Akira no tardaron en aparecer en el pasillo de mi habitación. Aún me encontraba bastante aturdido por la catarata de noticias desagradables que había recibido y no me salían las palabras.

Tuvieron el sabio gesto de quitarme la tarjeta magnética de las manos y entrar conmigo al recinto donde había pasado las dos últimas noches.

Estaban mudos, no decían nada y solo aguardaban a que yo pudiera verbalizar algo de todo lo que pensaba.

-No me quedaré de brazos cruzados. - fue lo primero que pude decir, Akira jamás me había visto así, y lo evidenciaba su rostro, más pálido de lo usual, mientras Jen caminaba por la habitación contestando mensajes furiosa - ¿En dónde se hospeda esta idiota? -realmente aquello había llegado muy lejos. No era solo un rumor, pretendían publicar supuestas pruebas salidas de una mente obsesionada. Y definitivamente, se había metido en un terreno demasiado delicado para mí.

Y para Sora.

¿Y si la noticia llegaba a sus oídos antes de que yo la pusiera sobre aviso?

Podría desencadenar algo horrible.

De solo imaginarlo, el corazón se me encogió. El pasado volvió con fuerza. Sora consumiéndose por la depresión, culpándose, castigándose y odiándose a sí misma por haber perdido su embarazo. El dolor haciéndose parte de mí. Rompiéndome en mil pedazos mientras intentaba a duras penas rehacer mi vida. Era todo tan injusto.

No iba a permitirlo.

-La noticia saldrá en cuestión de horas y en varios medios.-Jen finalmente volvió a abrir la boca - Y dará que hablar porque es el día en el que cerrarás tu gira. Al parecer, inicialmente pidieron bastante dinero por la historia, pero al final parece que a esta idiota solo le interesaba tomar notoriedad. Quería avisarte de inmediato para que pongas en alerta a Sora. No quisiera que la imbécil de Liv se salga con la suya. ¿Quieres que nos comuniquemos con alguien más? ¿Tus abogados? Los despertaré si es preciso, a quienes sean.

-Ahora mismo tengo la cabeza hecha un lío, Jen. ¿Podré detenerla de algún modo? ¿Alguna cláusula del contrato?

-Lo estudiaré con mi abogado, extraoficialmente, pero debe haber algo al respecto.

-Gracias.

-Yamato, lamento mucho todo esto, no debería haber sido de este modo. -Akira finalmente podía hablar, y a juzgar por sus nervios, no sabía cómo actuar.

-Tranquilos, hablaré con Rin, la esposa de Taichi es mi abogada, estoy seguro de que de alguna manera la detendrá. Le avisaré a mi familia y a Sora. Jen, mantén esto en reserva hasta que tengamos más claro como actuar o qué pasos dar.

Me excusé ante ellos y tomé mi móvil para llamr de inmediato a Rin. Antes de comunicarme con alguien más, quería sentir que al menos ya alguien se estaría haciendo cargo legalmente de la situación. Debía darme prisa, sería cuestión de pocas horas.

Pensé con preocupación en Sora, que a esa hora, probablemente estaría durmiendo. Me enfurecía mucho la situación, y en especial que pudiera dañar nuestra relación, que con tanto esfuerzo manteníamos viva.

No iba a perdonar aquella falta de respeto.

¿Y si llamaba a la implicada directamente?

La idea de enfrentarla me parecía adecuada.

Pero, ¿Y si al hacerlo me grababa y filtraba esa comunicación privada a los medios? Si me comunicaba en esos momentos, mi autocontrol iba a pender de un hilo y podría perder los estribos ante cualquier tonta mentira de manera que todo acabara muy mal.

De inmediato volví a centrarme en la experimentada Rin Yagami.

La esposa de mi mejor amigo era una destacada abogada, especialmente en lo referido a demandas civiles.

Quería alertarlos a todos de inmediato, pero ahora mi prioridad era otra. Recordaba que ella solía madrugar, a diferencia de mi mejor amigo que gustaba de dormir hasta muy tarde.

Le escribí un mensaje corto.

Y me sorprendió gratamente recibir su llamada de inmediato.

Por el rabillo del ojo vi que Jen se retiraba de mi habitación procurando hacer silencio, Akira se quedó conmigo, con los brazos cruzados sobre el pecho y atento a cada uno de mis movimientos.

La voz jovial de Rin me hizo sentir un poco de alivio.

-Debes estar en serios problemas para solicitar mis servicios a esta hora, Yamato. -bromeó la joven.

-Rin, necesito tu ayuda.

El tono descontracturado de su voz se esfumó.

-Oh, Yamato, no me asustes. ¿Qué ocurre?

-Me están metiendo en un buen lío con la prensa, es grave. Tienen imágenes con las que quieren forzar una historia, no hay pruebas sólidas, pero quieren perjudicar mi imagen pública.

-¿Hablamos de difamación? - escuché los muchos papeles que movía a través del celular.

-Supongo. No sé nada de delitos o leyes. Pero han filtrado la identidad de Sora. Y lo que es peor, dónde vive en Roma.

El sonido al otro lado de la línea desapareció.

-Yamato. -hizo una pausa - Taichi está en Roma hace una semana. Viajó por trabajo y sé que ayer salió a cenar con Sora y que hoy pensaban ir a recorrer algunos museos, porque él volverá esta noche.

-¿Taichi está con ella? – suspiré y mis piernas se aflojaron, caí sobre una silla, sentía que temblaba.

-Sí. Tranquilo. Puedo avisarle a él todo el asunto para que se lo transmita a ella. – hubo otro silencio – mira, lo despertaré ahora mismo para que la noticia no tome desprevenida a Sora.

-No es necesario, es muy tarde allí.

-Cuanto antes lo sepa y se lo transmita, mejor podrá acompañarla y hablarte sobre el estado de ella.

Asentí.

-Además, también yo me quedaré más tranquila. Por otro lado, ¿Tienes el supuesto material que se filtrará?

-Jen, mi representante tiene todo.

-Pues envíenme todo cuanto antes, así comenzaré por elaborar un comunicado, y las acciones legales que correspondan. ¿Sabes quién fue el involucrado?

-Tenemos una sospecha de quien fue. Alguien de mi equipo, una tonta obsesiva, no creí que pudiera tomarla en serio.

-Pues envíame toda la información que tengas de ella. Si quiere jugar sucio, nosotros también.

Nunca había escuchado a Rin tan molesta. Sabía que se tomaba muy en serio su trabajo y era muy responsable, estaba en buenas manos.

-No tengo manera de agradecértelo, Rin, me estás salvando la vida - así lo sentía – por favor, hazme llegar tus honorarios de inmediato.

-Tranquilo, saldremos victoriosos, esa chica no sabe con quien se metió – parecía poseída por un espíritu de lucha que hasta ahora desconocía. Me pareció una persona increíblemente poderosa.

-Gracias.

-Solo envíenme toda la información cuanto antes. Y despreocúpate por ahora de Sora, está acompañada por la persona más adecuada para este momento. Estará bien. Avísale a tu familia, y concéntrate para ese show de esta noche, no permitas que esto afecte a tu trabajo ni todo aquello por lo que has luchado – hizo una breve pausa – Mañana podremos conversar sobre las medidas que tomaremos. Por favor, apaga el celular luego de dar aviso a todos, los medios van a buscarte con desesperación, si puedes, quédate en casa de tu padre cuando llegues a Tokio, será un lugar neutral al cual nadie podrá ir a molestarte, yo iré hasta allí. Y comunícame con tu representante, que elaboraremos un comunicado formal para la prensa.

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Esa tarde me la pasé en mi habitación, afortunadamente Akira no se separó de mí, escuchándome cuando yo tenía un breve estallido de ira en forma de insultos.

Jen se ocupó de enviar toda la información que Rin nos había solicitado, también nos llevó comida a la habitación y me alentó a escribirle a Sora en primer lugar, poniéndola sobre aviso respecto a las noticias que iban a esparcirse en pocas horas. Me sentía culpable de todo lo que tendría que atravesar a causa de alguien externo que nada tenía que ver con nosotros.

También dediqué un párrafo para disculparme con ella por todo esto, por haber dejado avanzar esta situación hasta ese punto.

Sabía que ella estaría próxima a iniciar sus vacaciones de verano - que indicaban su ajetreada vida previa a entregas y evaluaciones. No quería agregarle mayor estrés, pero prefería que lo supiera antes que nadie.

Le escribí a mi familia y de inmediato recibí la llamada de mi padre. Después de Rin, era la voz que más necesitaba oír.

-Yamato.

-Es demasiado -me lamenté sin siquiera saludarlo, estaba furioso.

-Anoche me sentí algo mal, por lo que me fui temprano a la cama, pero algunos de mis contactos de los medios me estuvieron avisando sobre las noticias que se filtrarían hoy. Lamento no haberlo visto antes.

-No hay motivos para que te disculpes. No ibas a poder evitar que esto saliera en las noticias.

-Ha sido de muy mal gusto lo del embarazo -mi padre lo dijo sin rodeos, pocas veces lo había escuchado tan cerca de perder los estribos.

-Rin dijo que iba a presentar una demanda contra eso también, por el daño moral.

-Me queda la tranquilidad de que estás en buenas manos. Solo te diré algo: Prioriza tu show hoy, comenzarán a llamarte de inmediato, apaga el móvil y no lo enciendas hasta que pase lo peor, que será entre hoy y mañana.

-Iré a quedarme contigo en Tokio.

-Así me gusta.

Me despedí con tristeza.

Apagué el celular de inmediato.

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Annavi21: muchas gracias por tu review, me disculpo por haber tenido tanto tiempo abandonada esta historia, algo que suele pasarme cuando escribo es que comienzo con líneas de tiempo y hechos concretos, y lo que más se me dificulta es unirlos todos para que queden coherentes. Muchas gracias por estar atenta a sus actualizaciones, lo valoro muchísimo, gracias por ayudarme a mantener viva la historia. No quiero comprometerme con tiempos, pero quiero que tengas la tranquilidad de saber que aunque avance con lentitud, el final de esta historia ya está escrito - con epílogo incluído - ya que como dice mi perfil, detesto que las historias queden inconclusas! así que por favor sigue acompañándome! beso!