TODO LO QUE NO NOS DIJIMOS

CAPÍTULO 6

TU PROSTITUTO PARTICULAR

Pese a que Andrew se había prometido fingir que lo que ocurrió con Makoto Sanjoi nunca sucedió, cuando ella se lanzó a sus brazos y lo besó, no pudo resistirse ante sus encantos, y se dejó arrastrar por la pasión, abriéndose paso entre sus labios para tener un poco más de ella, mientras sus manos acariciaban las curvas de su cuerpo por encima de la tela de aquel vestido que aún la cubría; sin embargo, mientras compartía aquel momento apasionado con ella, se percató de que Makoto estaba bajo el influjo del alcohol, así que por mucho que deseara volver a tenerla en su lecho tuvo que frenar sus propios deseos, así que puso fin a aquel beso.

¡Esto no está bien!— Exclamó más para sí mismo

¿Por qué no?— Le cuestionó Makoto con coquetería— ¿Crees que no me daba cuenta de cómo me mirabas toda la noche?— Se burló Makoto

¡Señora Sanjoi, usted ha bebido demasiado hoy y además, usted es la esposa de…

¡ Al demonio con el idiota de mi marido!, y además ¡No bebí tanto como para no saber lo que quiero y lo que deseo!— Exclamó Makoto, quien después dirigió su mirada a la entrepierna de Andrew, donde ya era evidente que ella había despertado nuevamente sus pasiones.

¡Y por lo visto, lo que usted quiere y desea es lo mismo que yo!— Agregó de manera burlona mientras se abría el vestido, el cual finalmente cayó a sus pies, mostrándo su cuerpo que estaba cubierto solamente por fina y diminuta lencería de encaje en color negro.

Al ver de nuevo la grácil figura de Makoto; Andrew se olvidó de su relación fraternal con Masato y de que se encontraba en Sanjoi Resorts, así que siguiendo sus instintos, rompió la distancia que lo separaba de Makoto y sus labios se unieron en un beso desesperado.

Cuando la falta de aire los obligó a poner distancia, el sostén de ella ya había caído al piso, seguido de la camisa y el pantalón de él; entonces, él la levantó en vilo, y la dejó de espaldas sobre la cama, donde la recorrió por completo. Primero con su mirada, deleitándose al ver su exquisita figura femenina. Después con sus dedos y sus labios, que acariciaron y besaron los puntos sensibles de su cuerpo, hasta llegar a sus generosos senos, donde se detuvo un momento para acariciar y besar aquellos pezones rosados necesitados de caricias.

Poco después, una de sus manos se deslizó por la cintura y las caderas de Makoto, hasta llegar a su centro de placer femenino, donde ante la primera caricia, Makoto gimió débilmente; sin embargo, él quería escucharla gritar, así que hundió dos de sus dedos en su húmeda feminidad; y aunque ella no lo dijo explícitamente; poco después sintió los músculos de Makoto tensarse y dosbordarse sobre él.

¿Aún quieres seguir?— Le preguntó el con coquetería.

Makoto, que aún seguía jadeando, no respondió; sin embargo, él no necesito respuesta para tumbarse sobre su cuerpo; y entonces, los brazos de ella enredándose alrededor de su torso fueron más que suficiente.

Antes de hundirse dentro de ella, Andrew la miró a los ojos, como buscando su aprobación; y entonces, la sonrisa que se formó en sus labios rosados y su mirada le dieron la respuesta; así que finalmente entró lentamente en su intimidad.

Mientras Andrew la embestía, escucharon un golpe en la puerta al que ambos hicieron caso omiso, aunque después de eso, para sorpresa de ambos escucharon la voz del mismísimo Masato Sanjoi preguntando desde afuera y con cierto tono de angustia en su voz "Andrew. ¿Estás ahí?"

¡Maldijo hijo de puta!— Susurró Andrew creyendo que a Makoto se le bajaría la libido y le pediría detenerse; pero para su sorpresa, de los labios de ella salió un "No te detengas", y sus manos femeninas lo apretujaron en donde la espalda pierde su nombre, incitandolo a seguir.

Andrew, que en ese momento parecía incapaz de guiarse por la razón, arreció sus embestidas; y por un momento, cuando sintió las uñas de ella encajarse en su espalda pensó que quizá la estaba lastimando; sin embargo, cuando su mirada se encontró con los ojos esmeraldas de su amante, notó como ella le exigía seguir; así que continuó hasta que ella se desbordó de nuevo sobre él y él se vació por completo dentro de ella.

Tras el estallido de placer, Andrew se tumbó sobre el cuerpo ella, hasta que poco a poco la calma volvió, y entonces, fue ella quien rompió el silencio.

¿Podrías no decir nada de lo que ha ocurrido entre nosotros esta noche y aquella vez que estuve en tu departamento?— Preguntó Makoto

Andrew se apoyó en sus antebrazos para levantarse un poco, y entonces, cuando de nuevo sus miradas se encontraron, él la miró extrañado. ¿Cómo por qué se suponía que iba a decir algo?

Te voy a pagar muy bien por tu silencio— Agregó Makoto

No pensaba decirle a nadie ni tampoco pensaba cobrarte por mi silencio— Dijo Andrew riendo ante la ocurrencia de Makoto

¿No?— Cuestionó Makoto

Andrew se tumbó a su lado lado, y mientras la miraba a los ojos respondió.

¿Por qué crees que tendría interés en que se enteren?— Cuestionó Andrew— Esto causaría disputas familiares entre los Sanjoi, los Chiba y los Furuhata. Pondría a mis tíos y a mi primo Darien en una decisión muy incómoda si tienen que elegir entre su sobrino Masato o yo que también soy sobrino de ellos.

No es algo que esté bien— Agregó Andrew tras un momento de silencio.

Makoto sonrió ante el comentario de Andrew

¿Y si estaba bien que Masato me engañara?

Andrew cayó en cuenta de que quizá Makoto se había sentido juzgada por su comentario, así que trato de explicarse.

No estoy hablando de ti— Respondió él — Hablaba por mis propias acciones, no por las tuyas.

Una pena que sientas remordimiento— Comentó Makoto mientras se sentaba sobre la cama— Me hubiera gustado repetirlo, pero si no quieres no. Ahora, si me lo permites, usaré la ducha de esta habitación antes de irme para volver a fingir de nuevo que nunca nada paso.

Makoto se puso de pie, y mientras caminaba totalmente desnuda rumbo al cuarto de baño, Andrew sintió de nuevo una erección qué no se podría bajar el mismo.

-0-0-0-

La habitación del Sanjoi Resorts que Masato había asignado para Andrew, era de las más lujosas, y como tal, el amplio cuarto de baño no podía ser la excepción, pues además de los finos muebles tenía ventanales desde los que se podía apreciar la playa de Shyotenko durante las mañanas, o en las noches como esa, la luz de la luna y las estrellas que la iluminaban.

¡Vaya que Masato tenía algo de aprecio por Andrew! No por nada estaba siendo muy espléndido con él; y por tanto, para Makoto no había habido mejor manera de vengarse de Masato que acostándose con Andrew.

Sin embargo, mientras el jacuzzi se llenaba, a la mente de Makoto venían una y otra vez los recuerdos de los momentos de pasión que acababa de vivir con Andrew; y se lamentaba de que él no quisiera volver a repetirlo, pues esta segunda vez había sido mucho mejor que la primera vez que estuvieron juntos; y eso que en aquella ocasión también había quedado satisfecha.

Mientras el jacuzzi se llenaba, caminó hacia el enorme espejo empotrado en la pared, y al mirar su desnudez, comenzó a acariciar uno de sus senos y entrecerró sus ojos deseando que fuera Andrew quien la estuviera acariciando; pero entonces, para su sorpresa, sintió unos brazos masculinos rodeando su estrecha cintura, y poco después, su propia mano que acariciaba uno de sus senos, fue sustituida por una de las grandes manos de Andrew que acariciaron aquel pezón mientras los labios masculinos lamían el lóbulo de uno de sus oídos.

¿Aún puedo cobrarte por mi silencio?— Le susurró Andrew con coquetería, provocando que la piel de Makoto se erizara.

Ella abrió los ojos, encontrándose con su propio reflejo y el reflejo de Andrew tras ella.

¿Qué quieres por pago?— Cuestionó ella con lujuria en su voz.

Andrew la obligó a darse media vuelta y recargó su cuerpo desnudo contra el frio mármol.

Hacerte mía — Le susurró él — Ser tu prostituto personal si tu quieres y hasta que tú quieras.

Makoto no respondió con palabras, pero se alzó de punta sobre sus pies, y Andrew se inclinó apenas un poco para que sus labios una vez mas se encontraran en un ardiente y desesperado beso que sería el inicio de otra sesión de sexo, pero ahora teniendo de escenario la amplia habitación de baño de aquella suite de Sanjoi Resorts

-0-0-0-

Cuando las primeras luces del alba aparecieron en el firmamento, Andrew y Makoto aun seguían en el jacuzzi, pero ahora descansando abrazados el uno al otro después de darle rienda suelta a la pasión contenida. Fue entonces que Makoto tomó la decisión de retirarse, pues debía salir de la habitación de Andrew antes de que hubiera más movimiento en el hotel, y por suerte, cuando salió, el pasillo estaba completamente solo, y dado que la suite donde se había estado hospedando con Masato no estaba muy lejos, pronto llegó .

La idea de encontrarse con Masato no era algo que le agradara, y no porque sintiera remordimiento alguno, sino porque haberlo escuchado decir que nunca lo amó y el hecho de que hubiera escogido irse con Naru era algo que todavía dolía, aunque de momento era como si haberse acostado con Andrew hubiera anestesiado su herido corazón; pero por suerte, al entrar a la suite no estaba ahí Masato, pero sí una nota de su puño y letra que había dejado sobre la cama.

Makoto, por favor comunícate conmigo tan pronto como veas esta nota.

Dado que Makoto lo había escuchado decir la noche anterior que le pediría el divorcio, ya no tenía caso tener consideraciones con él, así que por toda respuesta rompió la nota y dejó los restos de papel en la cama. Después, se quitó el vestido de fiesta que había utilizado para la boda de Rei y con el cual había salido de la habitacion de Andrew y rápidamente se vistió con un vestido casual en color amarillo, sandalias doradas y empacó las pocas cosas con las que había llegado para irse por su cuenta, porque por supuesto no pensaba regresar a Tokio en el mismo auto donde había subido a Naru.

-0-0-0-

Tan pronto como Makoto se retiró, Andrew decidió vestirse para retirarse de Sanjoi Resorts; y es que aunque se había desvelado con Makoto, no tenía sueño; y de cualquier manera, aunque no se arrepentida de haberle propuesto ser su "prostituto personal", lo cierto era que seguir hospedado en una de las propiedades de los Sanjoi le parecía demasiado descaro pese a que nadie supiera de su aventura con Makoto.

Cuando estuvo listo para retirarse, tomó su maleta, entregó las llaves de la habitación en la recepción, y después salió rumbo al estacionamiento donde se encontró con Masato bajando de su auto, y entonces recordó que la madrugada anterior había llamado a su puerta mientras lo traicionaba haciendo suya a la que era su mujer.

Supongo que has dormido como un tronco. ¿Verdad?— Cuestionó Masato cuando lo vio

Andrew por un momento titubeó , pero finalmente respondió lo que supuso debía decir.

Pues sí. Dormí mucho. ¿Y tú?

¡Ni sabes!— Exclamó Masato mientras se recargaba en su auto

Pero puedes contarme— Dijo Andrew

Ayer poco antes de que se acabara la fiesta Naru vino al hotel

¿En serio?— Preguntó Andrew genuinamente sorprendido— No la vi

¡Es que no entró al hotel!— Exclamó Masato— Me llamó pidiéndome que saliera al estacionamiento para hablar o sino armaría un escándalo para que todo mundo se entere de que está embarazada. Comenzamos a reclamarnos cosas, y en algún punto salieron a relucir los verdaderos motivos por los que me casé con Makoto; pero lo que no me imaginé es que Makoto me hubiera seguido y hubiera estado escuchando.

¿Cuáles eran esos motivos?— Preguntó Andrew genuinamente interesado.

Masato guardó silencio un momento, hasta que entonces se atrevió a hablar.

Necesitaba un heredero legítimo, pero no podía embarazar a cualquiera— Dijo Masato— Debía casarme con alguna mujer para engendrar a un heredero dentro del matrimonio.

¿Es en serio?— Preguntó Andrew desconcertado

Sí— Respondió Masato— Mi primera opcion era Naru, pero ella quería esperar hasta terminar su carrera universitaria y viajar; pero yo no podía esperar, así que la terminé. Me sentía presionado por casarme para tener ese heredero, y bien pude haberle propuesto matrimonio a alguna chica guapa de mi círculo social que sin dudarlo me hubiera aceptado; pero al mismo tiempo, ya había visto a Makoto en una cafetería que frecuentaba en la que ella trabajaba de mesera. No era ni siquiera mi segunda opción para casarme porque no pertenece a mi círculo social, pero me atraía mucho físicamente y quería llevarmela a la cama, así que decidí endulzarle el oído y rápido se enamoró.

Andrew, se sintió asqueado al escuchar la manera en que Masato hablaba de su propia esposa; y no es como que el fuera un santo, pues había iniciado su vida sexual en la adolescencia e incluso Makoto no era la primer mujer casada con la que se acostaba, pero al menos nunca había prometido más de lo que podía dar.

¿Y luego?

Le propuse ser mi novia y aceptó. Empecé a hablarle de planes a futuro para llevármela a la cama; pero un día me dijo que pensaba llegar virgen al matrimonio; y bueno, aunque tenía otras opciones de mejor estatus económico, yo estaba encaprichado con Makoto, así que le propuse matrimonio porque sólo así se acostaría conmigo, y de cualquier manera el testamento del abuelo sólo menciona que los hijos nacidos fuera del matrimonio no cuentan, pero no dice nada de que la madre del primogénito tenga que ser de cierta clase social.

¿Eso significa que si no tenías un heredero legitimo te quedarías sin herencia?— Cuestionó Andrew

Masato tomó una bocanada de aire

Como sabes, mi difunto abuelo paterno tiene tres hijos— Dijo Masato— Uno es mi padre, otro es mi tío Yamato y la otra es mi tía Chihiro. Pues bien, cuando falleció dejó una cantidad de dinero y una propiedad a cada uno de sus tres hijos; pero dejó estipulado que el primero de sus bisnietos nacido dentro de un matrimonio legitimos será el heredero de Sanjoi Resorts y del resto de sus propiedades, y evidentemente, el padre de ese bisnieto será el albacea en tanto ese bisnieto alcance la edad para poder administrar la herencia.

Bueno, pero hasta donde sé tu único primo varón por parte de los Sanjoi tiene menos de quince años. No creo que Kentaro tenga planes de embarazar a una mujer en este momento de su vida para quedarse con la herencia, así que aún puedes tener a ese hijo varón legítimo.

¡El problema no es mi primo Kentaro!— Respondió Masato— Sino mis primas y mi hermana que están en edad de casarse. El abuelo no especificó que el primer bisnieto que sea procreado por uno de sus nietos varones ni que el bisnieto tiene que ser varón; así que si una de mis primas tiene al primer bisnieto la herencia pasa automáticamente a su hijo, incluso aunque el recién nacido fuera una niña

ÉPOCA ACTUAL

Pese a que Andrew no esperaba que su hija lo aceptara tan pronto como lo conociera, que la pequeña hubiera salido corriendo nada más verlo y sin que los hubiera presentado, lo hizo sentirse miserable y culpable por no haber estado con ella durante sus primeros años de vida.

Había deseado ir tras ella y decirle que en adelante la protegería pasara lo que pasara; sin embargo, sabía que sólo lograría asustar más a la pequeña, así que se quedó junto a Darien mientras la niñera se llevaba a Aries y Hanabi y de paso averiguaba qué pasaba con Andressa; sin embargo, pronto Rei entró en la sala, y tras un saludo que no fue efusivo, porque no había nada que celebrar y ambos estaban preocupados tanto por Makoto como por Andressa, Rei comenzó a narrarle los pormenores de la vida de su hija; y por boca de ella se enteró de que la pequeña no sólo había vivido con la indiferencia de Masato, sino que además, había vivido violencia física y psicológica por parte de la madre y la hermana de Masato, lo cual lo llenó de rencor y ganas de venganza contra aquellas dos mujeres.

—¿Cómo pudo permitir eso Makoto?— Cuestionó molesto

—Porque ella no sabía — Respondió Rei defendiendo a su amiga— Andressa nunca le dijo a Makoto que mientras ella estuvo internada esas viejas brujas la maltrataron.

—La indiferencia de los Sanjoi era suficiente violencia como para que no hiciera algo.

—Makoto no podía hacer nada. Ni siquiera se podía acercar a mi porque Masato la tenía amenazada con quitarle a la niña.

De pronto, el timbre de la puerta se escuchó sonar, y Darien se puso de pie; sin embargo, sus palabras asustaron tanto a Andrew como a Rei.

Son mis tios Sanjoi

Rei se llevó los dedos a los labios, pidiéndoles guardar silencio; pues quería ganar tiempo para ir a presentar formalmente una denuncia ante las autoridades pertinentes para evitar que se llavaran a la pequeña.

Querido sobrino, mas te vale que nos abras y me entregues a mi nieta, porque sino lo haces abriré la puerta por la fuerza. Traigo la orden de un juez que me permite hacerlo, además de dos policías y a un cerrajero. Si tú y tu mujer no quieren problemas, más te vale lo hagas.

Empeoraremos las cosas si no abres— Dijo Rei

¡No, por favor!— Suplicó Andrew

Sin embargo, sabía que no podía pedirle a Darien y Rei que se arriesgaran de esa manera.

Darien llevó la mano al picaporte; pero entonces, los tres adultos escucharon a alguien llorando, y después una voz infantil suplicando "¡No abran!"

Andrew volteó hacia el lugar de donde provenía aquella voz, y entonces miró a su hija temblando, mientras de sus ojos verdes que eran idénticos a los de Makoto brotaban lágrimas de miedo al saber que los Sanjoi estaban ahí para llevársela aunque fuera por la fuerza.

¡Hola!

¿Pues qué tal? ¿Cómo les va?

Había tenido tiempo para escribir este capítulo, pero no tenía inspiración. ¡Estaba verdaderamente bloqueada y lo borré varias veces!, pero al fin quedó listo y me gustó mucho.

Hospitaller Knight, Vientoaguamarina; muchas gracias a las dos por sus reviews.

Jahayra, también muchas gracias a ti que sé que lo estás leyendo.

Lectores anónimos ¿Qué les pareció? ¡Anímense a comentar! Les juro que no muerdo.

En fin, por lo pronto me despido, y pues espero actualizar pronto.

¡Saludos!