Los personajes son de Meyer y Maya yo solo los tomo prestados para jugar con ellos con el permiso al menos de Maya.
Este capitulo esta dedicado a Paulina MP. Espero no romper ningun matrimonio, pero recuerdo que es ficción.
Universitarios por el mundo: Ecuador
Johanna y Dorian apenas habían aterrizado de su viaje de Texas, cuando Will les avisó cual sería su próximo entrevistado. Este chico residía en Ecuador. "Al menos no tenemos que cambiar de continente" pensó Dorian, a quien se le hacia pesado coger aviones, cada dos por tres, al menos cobrara por hacer este trabajo, pero no se quejaba, porque estaba viajando casi gratis y visitando lugares que puede que no visitara por motu proprio.
Solo les dieron semana y media para estar con su familia, arreglar algunos asuntos y preparar de nuevo las maletas con ropa adecuada para el país que iban a visitar. En la carpeta que le dieron a Johanna, dos billetes de avión con destino Latacunga e información del sujeto a quien iban a entrevistar, Félix Marshall.
Llegaron al aeropuerto internacional de Latacunga después de realizar una escala de vuelo en el aeropuerto El Dorado de Bogotá. Allí les estaba esperando Félix, vestido de negro, camiseta de manga corta y pantalones con las rodillas rasgadas del mismo color. Él los llevó hasta el Hostal Campo verde situado en la Avenida Héroes del Cenepa, dentro de la urbanización Campo Verde.
Félix fue el que hizo todo el tramite, puesto que el dueño del hostal solo hablaba español. Y así se lo hizo saber a los dos huéspedes. Se despidió de ellos, prometiendoles volver a la mañana siguiente. A las ocho de la mañana se presentó en el hostal, la habitación que les habían dado no era una para tirar cohetes, pero les servia para dormir y dejar sus cosas a buen recaudo.
Les llevó a desayunar al Super Coffee situado en la avenida Rio Amazonas. Cuando entraron al local buscaron una mesa apartada, querían estar tranquilos, no que a esas horas hubiera mucha gente, pero por si acaso. Los tres pidieron un desayuno súper americano, en la imagen del menú tenia buena pinta y por solo 4,50 dólares, se irían con energía donde fuera que Félix quisiera llevarles. El camarero volvió poco después, trayendo tres platos, que llevaban un sándwich de jamón de york y queso, dos huevos fritos, dos rodajas de tomate, bacon y una loncha de jamón de york cada uno, poco después volvió para dejar tres vasos de zumo y tres cafés. Johanna le pidió un poco de leche, no era aficionada al café solo.
– Félix ¿que te trajo a Ecuador?
– Vine por trabajo – dijo después de tragar el mordisco de sándwich que se había metido en la boca – estaba haciendo las practicas de carrera en la empresa que Bimbo tiene en Los Ángeles.
– Esto no es Estados Unidos – aporta Dorian, que ha puesto justo la cámara a grabar cuando Johanna esta terminando la pregunta.
– Esto no es Estados Unidos, pero estoy trabajado en Bimbo Ecuador, aquí hacia falta un director de Marketing, allí no les hacía falta, pero hice muy bien mi trabajo y según mi mentor de aquella empresa, que si no contrataban se iban a arrepentir.
Así que le contrataron de Bimbo Ecuador para poder retirar al director de marketing que llevaba años y se había desactualizado.
– Cuéntanos donde estamos
– Estamos en Latacunga, es la capital de la provincia de Cotopaxi.
– Uno cuando piensa en Ecuador piensa en ciudades como Quito o Guayaquil.
– Estuve viviendo en Quito los tres primeros meses de mi estancia en Ecuador, porque tenia que ir todos los días a la oficina. Alquilé un apartamento de concepto abierto que nada más entrabas por la puerta lo veías todo excepto el baño que era lo único que tenia puerta. Pagaba 700 dólares al mes, cuando me dieron la oportunidad de poder trabajar desde casa, porque ya era yo quien manejaba el departamento, como me agobiaba estar en una ciudad tan poblada, busqué alternativas con menos población y aquí estoy.
– Entonces siempre trabajas desde casa
– La mayor parte del tiempo sí, cuando voy a la empresa a alguna reunión o porque tengo que trabajar desde allí, estoy a una hora mas o menos de camino.
Félix les contó que la localidad se encontraba al centro–norte de la Región interandina del Ecuador, en la hoya del río Patate y atravesada por los ríos Cutuchi y Pumacunchi. La ciudad fue fundada en septiembre de 1534 por el primer encomendero español con el nombre de Asiento de San Vicente Mártir de Latacunga, pero no es hasta el 27 de octubre de 1584 que se efectuó la fundación definitiva de mano de Antonio de Clavijo llamándola San Vicente Mártir de la Tacunga y sus corregidores. El 11 de noviembre de 1820 consigue la independencia.
Cuando terminaron de desayunar, la cafetería ya se había llenado con más gente y Johanna y Dorian conocían un poco sobre la historia de la ciudad. Al salir el sol les dio en la cara, hacia una temperatura agradable.
– El clima es agradable – dijo Johanna subiéndose las mangas de su camisa.
– Es lo bueno que tiene Latacunga, un clima mediterráneo frio – Johanna se quedó mirando a Félix con cara de no entender lo que estaba diciendo, sabia lo que era el mediterráneo, un mar que bañaba las costas de Italia, España y África – se caracteriza por pequeñas oscilaciones térmicas diurnas. Un clima primaveral durante todo el año. Aquí solo hay dos estaciones un invierno con pocas lluvias y un verano seco y ligeramente más frio.
– ¿Que nos tienes preparado para hoy?
– Ayer os vi bastante cansados, así que hoy nos vamos a quedar por aquí, en la ciudad. Vamos a visitarla.
Lo primero que fueron a visitar fue la catedral, situada entre las calles General Maldonado y Quito. Fue construida a mitad del siglo XVI en la época colonial y destruida por un terremoto en 1768. La catedral era el edificio más representativo de Latacunga. Era de estilo románico y presentaba una amplia nave con un crucero y una cúpula octogonal. La nueva construcción a partir del terremoto, se configuró en una nueva base con dos cruceros y capilla, añadiéndose dos torres gemelas y una cúpula, copia de San Pedro de Roma. A finales del siglo XIX se añadió un torreón con arcos románicos y un remate islámico que la hace muy original.
Dorian ponía cara de fastidio, después de los museos otra cosa que no le gustaban eran iglesias, catedrales y ermitas. Johanna se descubrió pensando en Jasper y que él estaría disfrutando de la maravilla arquitectónica de ese lugar, no que a ella le gustara el rubio. En ese momento se le vino a la mente una pregunta.
– En la universidad mantenías una rivalidad con los chicos de la fraternidad Alpha, pero sin embargo eras amigo de Jasper – soltó Johanna mientras entraban al interior del edificio.
– La rivalidad era con el antecesor de Edward, yo quería ser miembro de la fraternidad por tradición familiar, me presenté a las pruebas, y él se empecinó que había fallado en una a pesar que no había fallado. – Félix no quiso seguir hablando de aquel episodio, recordar eso le hacia hervir la sangre, por ese imbécil su padre estuvo un año sin hablarle – y mi amistad por Jasper, era más pena lo que sentía por él. Venía con nosotros porque estaba liado con la hiedra venenosa, quiero decir Alice Cullen. Pero esa le tiraba la caña a todo el que podía y rajaba de Jasper lo que no está escrito.
– Me he perdido en le tiraba la caña – dijo Dorian poniendo cara de pez
– Que intentaba liarse con todo el que tuviera pene y que ponía verde a Jasper.
Se callaron cuando llegaron al interior, no veían correcto hablar de ciertos temas como esos dentro de un templo sagrado, aunque ellos no creyeran en esa religión. El altar que se encontraron estaba trabajado en piedra pómez, poseía obras artísticas e imágenes coloniales. En el torreón apreciaron un conjunto de campanarios que anunciaban las horas.
– El revestimiento de tejuelo y la morisquería son elementos del área geográfica en que se encuentra. El petril de artesanía popular es uno de los aportes del siglo XIX a la construcción – añadió Félix, mientras Dorian se cubría la boca para tapar un bostezo y Johanna miraba embobada – En la hornacina superior del retablo principal se encuentra un conjunto escultórico de la Trinidad, en la inferior la imagen de Cristo Crucificado. San José es el patrono de la catedral.
– ¿Te has hecho cristiano?
– No, no soy religioso, pero respeto a quien si lo es. Lo que observo es que estos edificios llevan más de doscientos años en pie en una tierra que no para de temblar. Por eso es admirable. Es cierto que les has hecho remodelaciones, pero en aquella época no tenían las facilidades de construcción que tenemos ahora.
– Hablando de facilidades, podemos comprobar que dominas sino perfectamente, casi perfectamente el español, ¿te resultó fácil?
– Por narices tuve que aprender español. Aquí en Latacunga hay poca gente que habla ingles, encuentras, pero es más normal que hablen en castellano. En Quito si es más común encontrar gente que hable ingles, de hecho en la empresa trabaja un estadounidense que fue el que me sirvió de interprete en los primeros meses, pero vi que así no podía seguir y me apunté a una academia
– Te fue bien por lo que veo
– Al principio fue complicado, el español tiene muchos verbos. Ellos dicen que el ingles es difícil, pero nosotros con el mismo verbo lo decimos todo, ellos conjugan todos los verbos para todas las personas. Tuve que pedir clases particulares.
Con esta charla amena, fueron recorriendo todas las iglesias que tenia Latacunga. La siguiente fue la Iglesia de San Agustín entre las calles Hermanas Páez y Quito. El edificio tenia influencia neoclasica, con columnas circulares de capitel jónico terminadas en cornisa. Las pilastras que soportaban los arcos en ambos pisos eran agilizadas por la piedra pómez.
– En 1820 el convento estuvo ocupado por fuerzas militares españolas, sirviendo de cuartel a una fracción del Batallón "Los Andes".
Entraron a su interior, pero salieron rápido porque estaban haciendo misa y no eran religiosos, pero les parecía de mala educación entrar en un templo cuando los fieles estaban orando a su Dios. Entre las calles Juan Abel Echevarria e Isla San Bartolomé, se encontraba la iglesia de San Sebastian, en la calle Josefa Calixto, con un alto valor histórico, su edificación fue constituida en el siglo XIX, en su plaza todos los sábados se podía encontrar una feria altamente comercial que se remontaba desde hace más de un siglo.
La siguiente fue El Salto, ubicada en las calles Juan Abel Echevarria y Antonio Clavijo, junto a la plaza El Salto. Era una edificación de una nave y torres gemelas, asentada de norte a sur y construida a finales del siglo XIX.
Pasaron por la Merced situada en las calles Juan Abel Echevarría y Quijano y Ordóñez. Construida sobre un plano de Cruz Latina, de una nave con dos cruceros realzando una artística cúpula. En 1949 el terremoto de Ambato causó la caída de la torre sobre la puerta principal, la reconstruyeron pero perdió su estructura original.
– Esta iglesia empezó como capilla en 1640, a un lado se encuentra la plaza mercado Pichincha todos los días esta abierta al publico y posee un convento del mismo nombre. En su interior se encuentra la santa patrona de la ciudad, La Virgen de las Mercedes que obtiene su celebración en septiembre.
– ¿Y por qué se celebra a una virgen?
– Pues existe un recuento que en la erupción de 1768 del Volcan Cotopaxi, los lutancagareños llevaron a la virgen consigo a una zona seguro de la erupción conocida como El Calvario, la virgen apaciguó la erupción del volcán y lo volvería hacer en la siguiente erupción en 1877.
Su siguiente parada fue la iglesia de San Francisco, que empezó a construirse en 1539 y se terminó en 1693. Estaba ubicada en las calle General Manuel Maldonado y Quijano Ordoñez
–Fue el primer centro religioso de la ciudad pero quedó en ruinas en 1698 por el terremoto de Ambato.
El estomago de Dorian rugió, no fue por el tedio que le producía estar viendo templos de la religión católica, desde luego el no era religioso, respetaba a los que si lo era, ¿pero construir todas las iglesias en la misma zona? ¿toda la gente de la ciudad vivía aquí? Agradecía a su estomago por interrumpir la visita a la casa del señor.
Félix los llevó a El Alabado restaurante & Grill, un restaurante Grill. Dorian se pidió una de las especialidades de la casa Cordero el Alabado, era carne de cordero a la parrilla sobre salsa de vino tinto, patatas en forma de cubo y verduras salteadas. Félix una Pechuga Rellena, que consistia en una pechuga de pollo rellena de queso y ciruelas con salsa de mostaza acompañado de graten de papas y ensalada de la casa. Y Johanna prefirió un plato de pasta, pidió Fusilli El Alabado, que venían en salsa Nilda hecha con Pollo, tocino, cebolla y Champiñones. Maridaron sus platos con Un Santa Julia Cabernet Sauvignon. La comida les salió por setenta dólares.
Con el estomago lleno terminaron con las tres iglesias que les quedaban. La primera fue la de Santo Domingo que se situaba en la calle Guayaquil y Fernando Sanches de Orellana. Esta poseía un convento con el mismo nombre. Era la Diócesis de Latacunga. Estaba considerada un lugar altamente histórico por su participación en la emancipación de la ciudad.
– En este lugar se proclamó la independencia, por eso se la considera un lugar histórico.
Félix se dirigió hasta el coche, con los tres acomodados condujo bordeando el Aeropuerto internacional Cotopaxi, hacia el Estadio de la Cocha, a cinco minutos al norte, en el Barrio Centro de la Parroquia San Buenaventura visitaron la iglesia tradicional, poseedora de una edificación a inicios del siglo XX, en su interior se cobijaba el santo patrón Dr. Buenaventura.
–En este sector todos los domingos se abre una feria gastronómica con platillos propios de la ciudad.
–¿Sueles venir?
–Algunos domingos sí, sobre todo si tengo compañía.
–¿Amigos, pareja?
–Amigos aquí pocos, más bien pareja.
Johanna que lo quería saber todos de sus entrevistados, se le pusieron los ojos de cachorrito cuando Félix dijo que tenia pareja. Tras visitar la iglesia, volvieron al coche, y en el trayecto hacia la ultima iglesia del día de hoy se propuso averiguar hasta el numero de calzado de la afortunada que conquistó a Félix.
– ¿Que nos puedes contar de ella?
–Que es una magnifica persona, vive aquí y tiene más paciencia que un santo conmigo.
–Pero no vivís juntos.
–Por supuesto que no. Por mi viviría con ella ya mismo, pero ella tiene sus creencias y yo las respeto, aunque no las entienda.
– No las entiendes porque no estas educado igual que ella.
–Eso esta claro, pero las personas evolucionamos, y las reglas están para romperlas.
–No todo el mundo es como tu – dice Johanna – unos necesitan un tiempo para acomodarse a los cambios. ¿La conoceremos antes de irnos?
– Supongo que si, le comenté que vendríais, pero es que tiene trabajo.
Llegaron por fin al suroeste de Latacunga, el barrio histórico de la ciudad, que controlaba el asiento de Pijilí en tiempos coloniales. Estacionaron frente a la iglesia de San Felipe construida en el siglo XIX.
– A tres minutos esta la Universidad Técnica de Cotopaxi. Además este sector es famoso por sus fiestas y gastronomía típica.
Para horror de Dorian la visita siguió por otros derroteros culturales. Los llevó a los Molinos de Montserrat, que fueron construidos en 1756, como un obraje colonial. Por su construcción y su contenido el edificio reunía diferentes tiempos históricos de la república como el Incaico, Colonial y Contemporáneo. La construcción de piedra caliza había resistido a las erupciones del Cotopaxi. En 1959 al pasar a manos del municipio, el gobierno lo adjudicó junto con los terrenos aledaños a la Casa de la Cultura Nucleo de Cotopaxi. El edificio funcionaba como parte operativa de la Casa de la Cultura con oficinas modernas y un teatro semicircular entre otros espacios. Se encontraba a 200 metros al sur de la plazoleta de El Salto, por lo que Dorian cuando se dio cuenta bufó, ya lo podían haber visitado antes.
– Fue construido por los Jesuitas en 1676, en su tiempo el molino aprovechaba el caudal del Rio Yanayacu, por eso se construyó aquí. Se construyeron además canales, acueductos y represas de piedra, diseñados estrictamente para su buen funcionamiento.
Se acercaron a la puerta, pero se la encontraron cerrada. Dorian lo agradeció puesto que en su interior estaba el Museo Etnográfico que albergaba tres salas: la de arte popular, arte arqueológico y folclore. También había una pinacoteca donde se exhibía y exponía permanentemente obras plásticas.
– En este edificio se encuentra la biblioteca con una importante colección bibliográfica. Se recuperaron unos chiflones inferiores que se destinaron a talleres de música, también posee un ágora. La parte norte esta dedicada a talleres para teatro, pintura, títeres, dibujo y cursos de modelaje.
– Bastante completito el complejo – advierte Johanna – pero nos puedes traducir que es un chiflón
– Una galería inclinada.
– Parece que estar aquí te esta enseñando algunas palabras – dice Dorian entre risas – dentro de nada te oiremos decir Concha de tu madre, Hijue puta o alguna cosas de esas.
– Parece que estas puesto tú en malas palabras latinas.
– Dicen que es lo primero que se aprende de un idioma diferente al tuyo – concluye Dorian con la conversación.
Pusieron rumbo hacia la casa de los marqueses de Miraflores, construida en la primera mitad del siglo XVIII. Era un conjunto de estilo Neoclásico construido con piedra pómez, material usado por los constructores y arquitectos latacungueños, pilares asentados en piedras basas, terrazas en estilo árabe y techos tipos bóvedas o cañón, además se apreciaban bóvedas talladas en piedra pómez con hermosos arabescos y mudéjares, se encontraba distribuida en dos plantas, un primer frontal cruzado por tres juegos de columnas y pasillos; y una segunda que conducía a un pequeño patio.
– La edificación data de 1710, inicialmente construida por Juan García de Granda, finalizada por los Marqueses de Miraflores. El marques de Maenza habitó en ella hasta su muerte, luego pasó a poder del gobierno, luego a manos del Colegio Vicente León y en 1888 se convierte en un refugio de huérfanos y personas pobres cuando las hermanas Bethlemitas se posesionan de la casa.
– ¿Sigue siendo un refugio?
– No, ahora que es propiedad del municipio funcionan en ella la dirección de Desarrollo Social, los museos de Numismática y Filatelia. En la parte posterior se encuentra la Hemeroteca, a disposición de los investigadores gracias al archivo de la Gobernación.
Por suerte para Dorian solo se quedaron en la puerta, Félix les quería mostrar el edificio y decirles lo que este contenía y las características del mismo. Luego se desplazaron a pie hasta el palacio municipal, fui inaugurado el 24 de mayo de 1918 a pesar que no estaba terminada la obra, en el se acomodaron las oficinas municipales. Estaba ubicado al lado del Parque Vicente León y considerado como una de las piezas arquitectónicas más importantes de la provincia, constituía un elemento fundamental del Centro Historio de la ciudad y era la casa del pueblo desde hace tiempos inmemoriales. El elemento principal de construcción era la piedra pómez, material propio de esa zona volcánica y que fue aprovechado como primerísimo material de construcción en edificaciones representativas. El edificio era de estilo neoclásico.
– Este edificio tiene muchos aspectos que detallar por ejemplo la carpintería tallada en puertas y ventanas, sus pisos de madera o piedra, los frescos…
– Son muchas cosas en las que fijarnos la verdad, quizás deberíamos venir con más tiempo para mirarlo con más calma – comentó Johanna.
– El terremoto que hubo en 1932 produjo varias alteraciones a la fachada principal, ya que destruyó el edificio y se perdieron bellos ornamentos del frontispicio superior que no se volvieron a reconstruir. Además se le añadió un balcón.
Volvieron al coche, que ya se habían olvidado donde estaba aparcado, y Félix condujo hasta la calle Honduras, donde visitaron la Hacienda de Tilipulo, que fue construida a partir de 1720, bajo la dirección del Hermano Marcos Guerra de la Compañía de Jesus. Lo llamó Monasterio de San Juan Bautista. Construyeron un importante obraje donde floreció la técnica de las vecinas hilanderas, conocedoras del textil además de dedicarse a sus actividades normales. La Hacienda de Tilipulo jugó un papel muy importante en la gesta libertaria de la ciudad albergando a los patriotas.
– En 1979 el municipio compró la propiedad.
Entraron a la visita guiada que había organizado Félix. Dentro pudieron ver el reloj de sol que servia para ver la hora representaba al padre, hijo y Espíritu Santo; el purificador de agua elaborado en piedra pómez, carbón y arena que servia para filtrar el agua; el calabozo construido en piedra pómez y puerta metálica, construido con la finalidad de castigar a esclavos e indígenas por sus faltas; el pozo también de piedra pómez y puerta metálica, con gradas que dirigían hacia un ojo de agua natural, además recogía agua de lluvia natural para abastecer la hacienda; el eucalipto aromático donado por Gabriel García Moreno; la iglesia santuario Miraflores La Maria terminada en 1772 con 245 metros cuadrados servia para la homilía, con capacidad para 490 personas, su construcción en bóveda de cañón corrido permitía ampliar el sonido; y el conversatorio o confesionario, un pasillo de piedra pómez en forma de T, cuya función era en el uso de las doncellas para conversar de manera intima, el sacerdote receptara las confesiones y el mayordomo controlara las actividades diarias de toda la Hacienda.
Los tres salieron de allí. Pararon en el primer supermercado que vieron, uno llamado Supermercado Santa Maria, donde Félix hizo la compra de manera rápida ante la atenta mirada de sus acompañantes que le estaban esperando en la puerta. Luego condujo hasta su casa. El chico se puso a cocinar y mientras Johanna le preguntaba.
– Cuéntanos algo sobre tu pareja, nos has hablado muy poco de ella.
– Bueno se llama Paula – Félix se sonroja – yo la llamo Paulina.
– Veo que estas enamorado. Eso es bueno.
–Si. Nos conocimos por casualidad. Cuando vivía en Quito asistía a una academia para aprender español, cuando le dije a mi profesor que me venia aquí pero que quería seguir perfeccionando el idioma, me dijo que me recomendaría una academia.
– ¿Tú profesora? – señaló Dorian
– No, ella es también una alumna, pero de ingles. Me equivoqué de clase y fue ella quien se dio cuenta. Estaba hablando con mi madre por teléfono y cuando colgué me dijo: "o eres el profesor o te has equivocado de clase, y me inclino por lo segundo porque ya conozco a la profesora"
Los tres se rieron del despiste que ocasionó que Félix encontrara su media naranja en esa ciudad. Mientras iban hablando él había terminado de cocinar un plato de Chugchucaras, carne de cerdo frito, mote, papas, plátanos fritos, empanadas, palomitas de maíz y cortezas de cerdos, acompañado de ají una salsa picante hecha con chiles, tomates, cilantro y cebolla. Terminada la cena Félix los acompañó de nuevo al hostal y les dijo que mañana pasaría temprano, les pidió que se pusieran ropa cómoda.
A la mañana siguiente después de desayunar Félix fue a recogerlos, se los encontró vestidos con ropa de deporte y zapatillas. Dio el visto bueno a su indumentaria y los los llevó hasta el coche. Condujo por la carretera Panamericana dirección Quito, salió por la salida de Gusegunago Bajo y siguió hasta el centro de recreación El Boliche.
– Estamos en El Boliche, es un área recreacional, ubicada a una altura entre los 3000 y 4000 metros sobre el nivel del mar en el cantón de Mulaló. Estamos junto al Parque Nacional Cotopaxi. El Área tiene una extensión de 1077 hectáreas, los recursos hídricos están representados por ríos de origen glaciar.
Félix les explicó que el 40% de la flora era un bosque de pino asociado con vegetación arbustiva. La fauna que podían ver eran curiquingues, quilico, guarros, conejos, lobos de páramo, chiciru y venados, estos últimos reintroducidos. El clima era frio en altura, pero en las mañanas soleadas era agradable, por estar enclavada en el nudo de Tiopullo soportaba abundantes vientos y constantes lloviznas.
Se prepararon mentalmente para subir el Parque Nacional Cotopaxi. Un área protegida de Ecuador que limitaba con las provincias de Pichincha, Cotopaxi y Napo. En su espacio se encontraba el Volcán Cotopaxi.
En su ecosistema se percibían varias especies arbóreas, que convertían el lugar en un sitio único. Y como fauna habitaban lobos, pumas, osos, venados, conejos, cóndores, caballos salvajes y zorros. Durante su paseo, Félix les mostró algunas lagunas naturales, les habló de senderos que él habia recorrido solo o en compañía de Paulina y cuando llegaron a la cima sin darse cuenta porque iban hablando pudieron tocar la nieve que allí se acumulaba.
– Hay varios senderos por recorrer y a lo largo de ellos os podéis encontrar cabañas, centros de alta montaña, centros de acampada, centros de viajeros, refugios de montañistas – enumeraba Félix – incluso ruinas de ciudadelas de los puruhaés.
– Pero para ver eso tenemos que venir más tiempo
– Exacto, yo hoy os he traído por la vía rápida
Los tres bajaron de nuevo hablando sobre los atractivos turísticos de Latacunga. Que no solo tenía el Parque Nacional de Cotopaxi, también estaba la reserva ecológica los Ilinizas, que estaba dividida en cuatro secciones, la más grande incluia un bloque al oeste del volcán Quilotoa, donde nacían las vertientes y riachuelos que alimentaban al rio Toachi. La segunda zona, se ubicaba al noreste y se encontraba los Ilinizas y el Corazón. El tercer bloque al suroccidente estaba separado de la sección más grande por la carretera Latacunga–La maná. El cuarto bloque era una especie de isla de ochocientas hectáreas rodeando la laguna del Quilatoa.
– Antes has dicho que el volcán se llama Cotopaxi y si no recuerdo mal, la provincia se llama igual – dijo Johanna cuando ya estaban en el coche volviendo a casa.
– Sí, eso es porque la provincia toma el nombre del volcán. Cotopaxi significa Cuello de Luna. Cotopaxi es una de las veinticuatro provincias que conforman Ecuador y esta situada en la región interandina.
– ¿Como se gana la vida los latacungueños? – preguntó Johanna después.
– Las principales actividades económicas son agricultura, ganadería, comercio al por mayor y menor e industrias manufactureras. Destaca nacional e internacionalmente por la producción de flores y brocoli de exportación.
– Un dato curioso, no sabía que exportaran brocoli.
– Igual que España exporta naranja y aceite de oliva. – Félix se ríe de las palabras de Dorian que parecía que ha nacido en otra galaxia – en cuanto al comercio destacan en la venta y distribución de alimentos, bebidas, venta de ropa y calzado, mantenimiento y reparación de vehículos, servicios de restaurante, venta de comida, entre otros. En 2013 se inauguró el Centro Comercial Malteria Plaza.
Félix terminó por hablarles de las empresas manufactureras que habían en la ciudad que eran productoras de alimentos y bebidas, empresas madereras, metalúrgicas, muebles, cementos y construcción, etc. Además del sector artesanal que había tenido un protagonismo en el desarrollo económico de la ciudad.
Antes de llevarlos al hostal Felix los llevó a cenar, pidieron Llapingachos un plato que consistía en patatas cocinadas, puré alrededor de un centro de queso servido con carne de cerdo al horno. Acompañado de aguacate, chorizo, huevo frito, tomate y lechuga.
A la mañana siguiente tras el desayuno, realizaron un paseo por la ciudad. Pudieron conocer a Paulina. Visitaron los parques que no habían visitado los primeros días. El parque Vicente León, Filantropía, Santo Domingo, Náutico Ignacio Flores, San Francisco, San Sebastian, San Felipe, El Ejido, El Polideportivo, Parque infantil Marta Bucaram de Roldós.
– Paulina, Félix nos ha hablado muy bien de ti, ahora nos gustaría que nos hablaras de él.
– Bueno no hay mucho que decir, me enamoré de él porque es un chico muy atento y maravilloso. Un poco despistado a veces.
– No sé si te habrá contado como fue en la universidad – dijo Dorian – porque desde luego el chico que nos estás describiendo no corresponde con el que conocimos allí.
– Todo el mundo puede cambiar, y si me lo ha contado – Paulina se rió – la etapa universitaria ya la ha dejado atrás. Ahora está en otra etapa.
– Eso es cierto – intervino Johanna, que miró mal a su compañero – cuéntanos que celebráis por aquí.
Paulina les habló de la festividad de la Mama Negra, que celebraran la independencia de Latacunga, hacían desfiles, eventos culturales y corridas de toros de pueblo, el once de noviembre por las calles de la ciudad. Del 28 de diciembre al seis de enero en el Parque Vicente León festejaban el baile de Inocentes con bailes, disfraces, mascaradas y comidas típicas. Fiesta de la Virgen de las Mercedes del 23 al 27 de septiembre por las calles de la ciudad donde hacían vísperas, mascaradas, bandas de pueblo, fuegos artificiales, misa de gallo, procesión religiosa y procesión de la Mama Negra. Durante el mes de septiembre fiesta en honor a la Santísima Cruz en el Barrio Joseguango Alto. El catorce de Julio se celebraba la santísima tragedia de la Mama Negra y la Capitanía con un desfile multicolor, en la fiesta en honor al Dr. San Buenaventura. A finales de noviembre celebraban la feria taurina San Isidro Labrador, a las que solo iban los que les apasionaba la tauromaquia, los que no se quedaban en su casa echando pestes o buscaban otra manera de entretenerse, lo que no podían negar era que estas corridas de toros fueron declaras Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco en 2012. También celebraban fiestas de Carnaval donde organizaban algunas desfiles como El Carnaval de las Rosas y el Mashcarnaval, o algunos eventos artísticos y culturales para alegrar a la población y a los turistas que llegaban en esas fechas.
– Por lo demás celebramos el día de difuntos, navidad, año viejo…
– Las fiestas populares que hace la mayoría – la cortó Dorian.
Johanna se sorprendió porque la ciudad estaba bien comunicada. Podían llegar en autobús hacia destinos nacionales como Quito, Ambato, Pujili, Quilotoa, Quevedo o La Maná. Podías utilizar el Tren Crucero que recorría que norte a sur la sierra de los Andes y tenía en Latacunga una de sus paradas más concurridas. Además que poseían buses urbanos que transportaban a las personas por toda la ciudad. Sin contar la infraestructura de carreteras y el aeropuerto que le sumaban atractivo, ahora entendía un poco porque Félix se había mudado allí.
– Se que es pronto, pero si tuvierais un hijo ¿como está la educación en el país? – preguntó Johanna al cabo de un rato?
– La infraestructura de educación es buena en la ciudad, tanto en el ámbito publico como el privado. La educación publica es gratuita hasta la universidad –dijo Paulina
– Lo que quiere decir que si en el hipotético caso que tuviéramos un hijo, estudiar aquí no estaría mal para él – añadió Félix.
Paulina y Félix hablaron de las universidades, en Latacunga y alrededores habían diversas, pero destacaba la Universidad Técnica de Cotopaxi. En relación a los deportes el futbol era el más popular y el de mayor convocatoria. En Latacunga situado en la avenida Luis de Anda y Calle Panzaleos estaba el Estadio Municipal La Cocha, inaugurado el 1 de abril de 1982 con capacidad para acoger a 15.000 espectadores fue sede de torneos internacionales de la Conmebol. Era usado mayoritariamente para la practica del futbol, allí jugaba como local el Club Independiente Juniors de la Primera Categoría B de la Liga Pro Ecuador, también varios clubes de segunda categoría de la Provincia de Cotopaxi.
La ultima noche que pasaron allí Félix y Paulina los llevaron a cenar a un restaurante. La especialidad de la cara era Cuy Asado, el cuy estaba adobado y asado al carbón, acompañado de papas cocidas con lechuga, tomate y zarza,
La mañana siguiente Félix fue a recogerlos, hizo todos los tramites con el dueño del hostal, en tres o cuatro días es difícil aprender español, a no ser que sean insultos. Los llevó al aeropuerto, tenían tiempo de sobra, el vuelo no salia hasta la tarde. Se acercaron a una cafetería y pidieron Helados de Salcedo elaborados a base del zumo de frutas frescas.
– Espero que la próxima vez vengáis con más tiempo – dijo Félix una vez tuvo delante su helado.
– La verdad que me ha quedado mucho por ver en este país – añadió Johanna.
– Ecuador no solo tiene la provincia de Cotopaxi, pero es cierto que incluso en esta provincia os habéis dejado mucho por ver.
–Antes de que nos llamen a embarcar – dijo Johanna mirando su reloj de pulsera y sorbiendo su helado – ¿te volveremos a ver en Los Angeles?
– Allí esta mi casa, así que algún día volveré, pero no sé cuando – respondió Félix – a visitar a mis padres seguro, pero de momento mi vida esta aquí.
– Te deseamos que seas muy feliz y que continúes avanzando en tu vida, y ya nos veremos en Estados Unidos aunque sea cuando vengas de visita.
Johanna y Dorian se despidieron de Félix y subieron al avión. En el camino de vuelta él se durmió, pero ella iba dando vueltas a la cabeza, se le había quedado mucho que ver en Ecuador, quería volver para explorar lo que no había explorado, como las Islas Galápagos o Quito, pero sobre todo, terminar de recorrer los rincones que no había visto de la provincia de Cotopaxi, porque Cotopaxi era mucho más que Latacunga. Cotopaxi estaba formada por siete cantones, La Maná, Latacunga, Pangua, Pujilí, Salcedo, Saquisilí y Sigchos, sin los siete no existiría la provincia de Cotopaxi.
Con ese pensamiento Johanna se quedó dormida el resto del viaje.
Bueno aquí tenemos al primero de los chicos del clan de Tanya viajando por el mundo. Se nos fue a Ecuador por trabajo y conoció el amor. Paulina ¿que le diste que se enamoró de ti? Este capitulo me ha costado un poquito más pero ya lo he terminado. Espero que hayais disfrutado de este viaje a la provincia interandina del Ecuador.
