Capítulo 3.- Revelaciones

A las doce del día siguiente, ya con las cosas de Harry en la entrada y con unos dursley irritados, esperaban la llegada de la familia de magos para llevarlo a la madriguera.

-¡Espero que le hayas dicho a esa gente que venga adecuadamente!- gruño iracundo el tío vernon –Eh visto cómo van. Deberían tener la decencia de ponerse ropa normal-

Harry le invadió la ira, pero se calmó de inmediato, tratando de aguantar sus ganas por gritarle a su tío que no tenía ningún derecho de decir nada ya que los Weasley era la única familia real que conocía.

Aunque siendo sinceros Harry savia que los hijos generalmente utilizaban ropa muggle, pero los padres siempre iban de túnicas largas, así que suspiro y solo dedico a mirar un punto lejos en la pared.

Su tío vernon se puso su mejor traje, claro que eso no sería para demostrar que los trataba bien si no todo lo contrario quería mostrarse superior ante aquellas personas que pensaba que no eran normales.

Tía petunia estaba entrando a la sala, con una charola llena de queso fresco y apio rallado, seguramente para dudley más que para los Weasley, también le serviría para que pensaran que trataban bien a Harry.

Este la miro por un segundo sintiendo su odio por ocultarle las cartas de sus padres, más que los regalos, el atesoraba aquellas letras que iban para él, su tía la volteo a ver y le clavo la mirada, pero por un segundo se vio pena, tristeza, tal vez preocupación, después aparto la vista y se fue a sentar junto a su esposo,

-Vendrán en coche, espero- Dijo a voces tío vernon desde el otro lado de la sala.

-He.. y eso que importa-NO supo que contestar, pue desde que el viejo Ford anglia se había escapado al bosque prohibido de Hogwarts, los Weasley pedían prestado un coche al ministerio de magia, el año anterior lo hicieron para poder llevar a Harry, ya que este estaba en peligro por sirius aunque este solo quisiera atrapar a colagusano, así que no savia si esta ves también lo harían.

Eran 4:55 y aun tenían que esperar otros minutos junto aquella clase de familia, aunque savia que si tía petunia y tío vernon, le ocultaron todo y le mintieron, dudley solo había sido malo con él por culpa de estos, así que trataba de no mirarlo con odio o incluso trataba de ser cordial con él.

Harry salió de la habitación sin decir nada, se fue al recibidor y se sentó a las escaleras, con ojos fijos en el reloj y el corazón latiéndole muy rápido por la emoción y los nervios.

El reloj marco las 5 y entonces tío vernon gruño desde la sala -Se retrasan-

-ya lo sé- gruño Harry de regreso- A lo mejor hay problemas de tráfico, yo que sé- contesto un poco molesto.

-Espero que no piensen llegar tarde y quedarse a cenar-Grito tío vernon desde el otro lado de la sala, a lo cual Harry solo se rio, -Solo te recogen y se largan de inmediato. Ok, que ni crean que se entretendrán aquí, además de que de seguro no conocen la puntualidad. O bien su coche ha de ser una carcacha que se les averió...ahhhhhhhhhh-

Harry pego un salto. Del otro lado de la puerta de la sale le llego un ruido que hacían los dursley moviéndose aterrorizados, por lo cual Harry saco su varita y corrió a la sala, apuntando por cualquier intrusion que no fuera los Weasley.

Al entrar vio a dudley total mente blanco agarrado al sillón como si este fuera su vida, a tío vernon lo más lejos que podía de la habitación seguido de su esposa, Harry voto a ver que veían, era la chinea de los dursley que tenían empotrada una estufa eléctrica, se oían golpes y rasguños.

-¿Qué es esto?-Pregunto una muy asustada tía petunia-¿Que es vernon?-

Harry savia que tío vernon no tenía ni idea, pues el único mago de aquella casa era él y a tía petunia se le ocurrió preguntarle al que aborrecía ese tipo de cosas.

Enseguida se escuchó una voz dentro de la chimenea.

-AY no Fred.. Vuelve, vuelve. Regresa y dile a George, que no... ay no George no hay espacio, regresa enseguida dile a Ron...-

-a lo mejor Harry nos puede oír papá... a lo mejor nos ayuda a salir...-

-Harry, Harry ¿nos oyes?- seguido de varios golpes

-¿Qué es esto?-gruño con furia el tío vernon acercándose un poco a Harry.

Harry suspiro y contesto-Han intentado llegar con polvos flu- Explico Harry. Conteniendo unas ganas locas de reírse -Pueden viajar de una chimenea a otra.. Pero no se imaginaban que la chimenea estaría obstruida. Un momento...-

Harry se fue en dirección a la chimenea -Señor Weasley, ¿me oye?- y el martilleo paro, alguien de adentro hiso -ssssshh-

-la chimenea está cerrada, no podrá pasar por aquí- grito Harry esperando que ellos entendieran.

-Maldita sea- dijo la voz del señor Weasley- ¿Par que diablos taparon la chimenea?-

-Tienen una estufa eléctrica-Explico Harry

-¿Deberás?-Grito un emocionado el señor Weasley-¿Ha dicho ecletrica?¿Con enchufe ?¡Santo dios!¡Esto tengo que verlo! Pensemos... ¡A Ronald!-

La voz de ron se unió a la de los otros arrebatándole una sonrisa a Harry.

-¿Que hacemos aquí?, ¿Algo ha ido mal?-

-No ron que va- dijo sarcástico la voz de Fred- este es exactamente el sitio al que queríamos venir-

-Sí, no la estamos pasando en grande - Añadió George cuya voz sonaba extrañamente cavernosa.-

-Harry échate hacia atrás- grito el señor Weasley- ¡Es el Único modo!-

Harry se retiró hacia un lado, pero el tío vernon dio unos pasos adelante.

-Esperen un momento- bramo en dirección a la chimenea- ¿Qué es lo que pretende?-

¡BAMMMMM!

La estufa salió disparada hasta el otro extremo, luego una nube de polvo cubrió toda la estancia para finalizar con la caída de 4 cuerpos, las tablas que tapiaban la chimenea estaban botadas en todas partes, tía petunia se llevó una mano a la frente y acto seguido cayo de espalda a punto de caer sobre la mesita de café. Tío vernon la sostuvo a tiempo para que no se golpeara.

Mientras, el señor Weasley, Fred, George y ron se levantaban tío vernon los miraba boquiabierto, tratando de decir alguna palabra la cual no salía.

-Así está mejor-dijo el señor Weasley, jadeante, sacudiéndose el polvo de la larga túnica verde y colocándose sus gafas- ah Ustedes deben ser los tíos de Harry-

Se dirigió inmediatamente a tío vernon y le tendió la mano, haciendo que el retrocediera como si oliera algo fétido, arrastrando un poco a tía petunia. Estaba cubierto de escombro y además de eso no podía pronunciar ninguna palabra.

-eh.. Bueno disculpe por el destrozo-Dijo con una sonrisa el señor Weasley- Ha sido culpa mía, no pensé que estuviera sesgada, además debo decirles que he conectado su chimenea con la red mágica solo por hoy, y el ministerio me ha dado permiso así que no se preocupen.- le comentaba tío vernon el cual sus colores empezaban a subir más y más hasta ser un rojo intenso-Deje encender el fuego los muchachos se irán, yo reparare todo esto y luego desapareceré yo mismo.

Harry savia que su tío solo estaba a un par de palabras para que explotara, así que agradeció que el señor Weasley, se volteara directamente a él.

-Hola Harry-saludo alegremente el señor Weasley-¿Tienes listo el baúl?-

-Está en el pasillo cerca de la puerta-respondió Harry, respondiendo su sonrisa, encaminándose para ir por él y salir de esa casa lo más rápido.

-Nosotros vamos por el Harry- dijo Fred con una sonrisa y dirigiéndose a donde señalo Harry -Como nos veríamos si nuestro invitado, cargara sus cosas y más siendo el salvador del mundo mágico -finalizo George y en un momento repentino le guiño un ojo, dándole a entender que lo dijo no por el sino para que los dursley terminaran con la boca abierta, y cuando vi a dudley, supo que avían logrado su cometido.

Ron se acercó después de que sus hermanos salieran, le paso el brazo sobre los hombros de su amigo y dijo-Hace mucho tiempo que no te veo, hermano, ya te echaba de menos, y prepárate mañana estaremos en los mundiales ¿puedes creerlo?-

-Ustedes tienen una casa muy bonita- dijo el señor Weasley tratando de ser lo más cortes posible, aunque la casa en ese momento estaba toda echa un desastre lo cual tío vernon consideraría lo peor que pudo decir tal circunstancia.

El señor Weasley volteo a ver a todos lados observando cada tramo y las diferentes aparatos en la sala-Funcionan con eclectricidad ¿verdad?- dijo con un tono entretenido-a si ya veo los enchuffes- añadió dirigiéndose a tío vernon- y también pilas, tengo una buena cantidad en casa, aunque mi esposa molly, cree que estoy chiflado-

Evidentemente tío vernon pensaba lo mismo que la señora Weasley, en ese momento entraron Fred y George cargando todo incluyendo la jaula de hedwig, boletaron a mirar a dudley que seguía en el sillón pero esta vez tenia las uñas clavadas dejando un poco amoratadas las manos.

-o ¿este es tu primo no Harry?- dijo George curioso, se dirigió a él y le tendió la mano -Harry nos ha contado mucho sobre ti- dijo con cierto tono de malicia.

-si - dijo Harry- es dudley.-

En ese momento se encendió un fuego verde en la chimenea, que se apagó casi al momento, todos dirigieron su mirada al agujero en la pared, y cuando Harry se dio cuenta quien era, su sonrisa no tardó en llegar a su cara, ahi estaba ella, su pelo castaño claro, largo y enmarañado caían sin que nada lo sujetara, su piel estaba tiznada por el viaje, y esos ojos color ámbar, era Hermione.

-¡Harry!- grito inmediatamente y corrió a abrazarlo, el cual recibió gustoso el abrazo sin importa que su tío estaba más enojado por haber presenciado la aparición de alguien más por medio de magia -hace mucho que no te veía, ¡de verdad te he extrañado mucho! - para sorpresa de todos incluyéndolo, le dio un beso en la mejilla, sonrojándose un poco al separarse.

Vio a dudley tenía la boca abierta y los ojos casi se le salían al ver a Hermione, el verano le había sentado muy bien su figura era cada vez más atractiva, mientras el tiempo más pasaba se acentuaban su figura.

Harry decidió devolverle el beso en la meguilla no solo por dudley si no porque él tenía muchas ganas de hacerlo -yo también mione, te he extrañado mucho y además te ves hermosa- Hermione se sonrojo y el también casi al instante, sintió las miradas de todos así que decidió que era hora de terminar sus asuntos con los dursley.

-Bueno es hora de irnos - Harry tomo a Hermione de la mano y a ron le paso el brazo por los hombro como él lo saludo, dirigiéndose a la chimenea, no llego cuando escucho un grito a sus espalda.

-¡A donde crees que vas... tu...tu...Potter!- La voz del tío vernon no solo asusto a Hermione si no también a ron los cuales voltearon inmediatamente vieron con miedo al tío vernon y con preocupación a Harry.

El solo se limitó a dar un pequeño vistazo y siguió su camino, tratando de que ron y Hermione lo siguieran pero estos solo esperaron en su lugar viendo Harry marcharse, el tío vernon soltó a su mujer que cayó como piedra al suelo, camino hacia Harry, lo tomo de la camisa y tirando de ella para voltearlo,-A no muchacho, a mí no me dejaras en ridículo, te he aguantado todo el verano estos desplantes, pero ahora no-

Para sorpresa de todos, Harry lo miraba con un odio, algo que nunca lo habían visto, su rostro rojo, no tardo ni un segundo para que Harry levantara su varita apuntando a la cara de su tío, que dio su grito ahogado, inmediatamente lo soltó y cayó de espaldas.

-¡Yo no soy de tu familia, tu nunca te has preocupado por mí, y ahora tratas de que yo te obedezca como un perro fiel, alejándome de los únicos que hasta ahora me han dado un lugar al cual quiero regresar, un lugar el cual llamar hogar, pues permíteme decirte que mis padres jamás me hubieran dejado contigo y con tía petunia, 13 años he sido solo un lastre para usted, pues ahora me voy vernon dursley, se feliz, porque ya no volveré ¡- Deseaba hechizarlo, hacer que se arrepintiera de tratarlo como lo hiso pero no podía la letra de su madre le venía a la mente "aun así es familia", bajo la varita de inmediato.

-Harry-susurro Hermione, apenas audible en tono de sorpresa, mientras ron estaba atónito por las palabras de su mejor amigo.

-Sé que tenías las cartas de mis padres, las dejaste a botadas como si fueran basura, en aquel desvían sucio y frio. Eran mías nada más que mías, no tenías el derecho de quitármelas- Dijo suavemente mientras lo miraba palidecer de un momento a otro -Te hubiera perdonado que me gritaras, que me trataras como un sirviente, que no me trataras como familia, pero alejarme de algo de mis padres, eso no te lo puedo perdonar.-dijo mientras unas lágrimas salían de sus ojos.

-hoo Harry- dijo Inmediatamente Hermione, ella y ron se colocaron a su lado, el los observo apenado por su arrebato de ira hacia aquella persona, Hermione tenía los ojos rojos, por el otro lado ron tenía la cara roja, tan roja que se confundía con su pelo, que estarían pensando, no lo savia, solo quería que le dijera algo que hicieran algo para saberlo. Sintió la mano de Hermione tomando la suya desde la derecha, mientras ron ponía su mano en el hombro izquierdo, entonces supo que tenía los mejores amigos del mundo.-Lo siento chicos, perdón por...-no pudo acabar la frase ya que los dos lo abrazaron.

Sintió el calor del cuerpo de Hermione, mientras que sentía unas palmadas de ron es su espaldas.

-Bueno... creo que es mejor que nos vallamos chicos- Dijo el señor Weasley, seguido de un movimiento de varita -Incendio- exclamo el señor Weasley, apunto con su varita al orificio detrás de ellos.

De inmediato aparecieron las llamas en la chimenea crepitando como si llevara horas encendida, el señor Weasley se encamino y saco un bolsito con un monto de polvos color verde, se la paso a Harry el cual la tomo con cuidado.

-Tu primero Harry- dijeron Hermione y ron asintio, Harry observo los polvos verdes y negó con la cabeza.

-No, ustedes primero, yo iré detrás de todos, no quiero dejar a ninguno junto a estos muggles.-ofreciéndole los polvos a los gemelos, Fred se encamino con la cosas de Harry, seguido de George, los cuales se veían interesados por el nuevo Harry que avían visto

-Me agrada el nuevo Harry- susurraron los dos al mismo tiempo, sacándole una sonrisa.

Se fueron a la chimenea, arrojaron los polvos y desaparecieron por aquí hueco, volteo a ver a los dursley por última vez, fue entonces cuando vio que tía petunia estaba otra vez de pie, con las manos en la boca, soltando una que otra lagrima, por primera vez Harry veía que su tía lo miraba como cuando dudley se lastimaba o estaba enfermo, como si su mundo se fuera acabar, como si lo único que importara fuera él.

-¿Por qué?-Pregunto Harry sin proponérselo, sabiendo que tal vez no le gustaría la respuesta, pero necesitaba saber.

-Cuando naciste, mi hermana te trajo para que te conociera, eras idéntico a tu padre... yo te vi como a cualquier otro niño, un niño que era diferente a nosotros por tu sangre …mágica, pero cuando despertaste y vi esos ojos-Dijo tía petunia mientras le sostenía la mirada a Harry, que por primera vez no se sintió despreciado por ella, sin en cambio se sintió algo querido -vi a Lily, a tu madre, aunque no éramos iguales ella era mi hermana y la quería, aunque su defor... las diferencias nos separó-

Harry suspiro pesadamente, no era la primera vez que le decían que sus ojos eran igualitos a los de su madre, aun así a él no le molestaba le encantaba que sus ojos fueran igual, así cuando se viera al espejo, la vería a ella.

-Cuando te encontré en la puerta hace 13 años, estaba asustada por mi hermana, así que la llame he incluso le envié una carta por medio de una lechuza, ella me había enseñado a hacerlo... días después me entere de la muerte de mi hermana...-Se llevó sus manos a su cara- a pesar de que tu padre me era indiferente, de que tú eras diferente, mi hermana era mi familia, yo solo quería que ella regresara...Vernon quería que mandarte a un orfanato, botarte solo en la vida, pero yo le roge, le suplique que te dejara vivir aquí. Al final el acepto, diciendo que en cuanto supiera algo de la magia, te echaría lo más lejos, pase años asustada por tus repentinos brotes de magia tratando de que vernon no los notara...-

Vernon se paró, corrió hacia su mujer, preparándose para propinar una buena bofetada, harry al sentir la ira del hombre se movió, pero antes de llegar, dudley por primera vez desde que los Weasley llegaron salto del sillón, parando la mano de su padre en seco.

-¡A mi madre no le pondrás una mano encima!- Grito dudley , dejando pasmados a sus padres, tío vernon se veía rojo casi al borde de la locura -Ahora aléjate de ella- Finalizo dudley.

El señor Weasley, estaba disimulando que veía el televisor, pero estaba atento por si el ocurría algo y tendría que intervenir, pero al ver aquel arrebato del hombre se colocó junto a harry y los dos jóvenes que parecían totalmente fuera de sí, ron apretaba los puños, mientras mione torcía sus labios, sacando la varita y dispuesta a paralizar al hombre si era necesario.

Harry continuo observando a vernon dursley bajando su mano y tratando de calmar su mal carácter, cuando abrió la boca.-Lo siento petunia, dudley, yo verdad lo siento-

Deseaba continuar escuchando la historia de tía petunia, pero creía que no lo conseguiría asi que retrocedió rumbo a la chimenea.

-Espera- la voz de tía petunia se escuchó -Deja que termine, aún hay historia por delante-

Tía petunia abrazada a su hijo, harry asintió y apenas entre un quejido y un susurro continuo la historia.

-Trate de verdad que amarte tanto como mi hermana, como si fueras mi hijo, pero tu forma de ser era la de tu padre, no lo soportaba, no deseaba hacerte ningún mal. Pero sin pensarlo sucedía, poco a poco te parecías más a él, al causante de la muerte de mi hermana- chillo petunia

-Era un niño-dijo Hermione lentamente y apretó la mano de harry.

-Lo único que me hacía que no pudiera echarle eran los ojos de Lily, amaba esos ojos. Pasaron los años, antes de que cumplieras 11 llego una lechuza grande y fornida, se presentó junto con varias cartas de Hogwarts, ese día tu pensaste que era otra pero a decir verdad vernon intento quemarla pero era imposible siempre apagaba las llamas-mientras alzaba las manos.-continuo tía petunia sin prestarle atención a Hermione.

-Un hechizo de protección, "protejo objitus" ,su pongo por la explicación-Dijo Hermione mientras razonaba los acontecimientos.

-y que más da- Gruño tío vernon desde el pequeño sofá que se había sentado con las manos apretadas entre ellas, poniendo los nudillos en blanco.

-Si le vuelves a hablar así vernon dursley, te juro que te coseré la boca... literalmente-Le contesto fríamente harry, mientras le apuntaba.

-Cuando vi las letras de Lily entendí que eran para ti, incluso las tire en el bote de la basura, pero regresaban a la casa, estaba tan arto que vernon casi te echa de la casa... pero no lo hiso, así decidí esconderlas en el desván, las subí y se quedaron ahi, iba seguido a solo ver la letra de mi hermana, las escondí abajo de una caja llena de cachivaches savia que vernon no las quería ver, cuando te mande a arreglarlo no creí que las encontrarías,...yo...trate de abrirlas varias veces pero nunca pude...siempre terminaba con la mente en blanco y después estaba en el supermercado...o en el parque .. ¿Lily dijo algo sobre mí?- dijo al final, con ojos suplicantes.

Harry pensó un momento, su tía avía rogado para que se quedara, tratado de amarlo, ella quería a su madre, el odio que sintió se desvaneció, no lo entendía todo pero lo acepto que el ya no odiaba a su tía, en cambio surgió un sentimiento de simpatía, el savia lo que era estar con personas que no soportabas ver, se le vino a la mente un rubio, mal encarado de slytherin.

Se acercó un poco,-Ella dijo que te quería y que familia seria familia siempre sin importa que- Su vos sonaba tranquila lo cual lo sorprendió y luego le tendió la mano a su tía, ella la tomo y le dio una leve caricia en la mano.

-Te enviare una foto de mamá que puedas ver cuando quieras-concluyo harry, vernon se mostró algo irritado, pero seguía callado por su reacción anterior.-Sera normal de las que no se mueven- Concluyo para que su vernon se tranquilizara

-Pero de ahora en adelante ya no viviré aquí, encontrare otro lugar, espero que si necesito algún papel para que me dejen quedarme en cualquier otro lado ustedes me ayuden y den su consentimiento. Los visitare si y solo si ustedes lo desean, también si tienen algún problema podrán contar con migo ya sea económico o para resolver cualquier cosa -Se dirigió a los tres pero enseguida se volteo vernon dursley.

-Tendrás que tratar a mi tía mejor, al igual que a dudley, si llegase a ocurrir cualquier cosa a su persona, tendrás que responderme ante mí, vernon- Dijo mientras vernon dursley lo miraba con ira pero también asentía con la cabeza.

-Por ultimo dudley, cuidaras de mi tía petunia, también la respetaras y obedecerás, me gustaría que nuestra relación mejore, somos primos y espero que si algún día tengas hijo y yo también, ellos tengan una mejor relación que nosotros -dudley asintió y le dedico una sonrisa algo rara pero al fin de cuentas era algo que dudley jamás hubiera hecho antes.

-Harry, espero te valla bien, lamento lo que te hice y espero algún día podamos ser amigos-Dijo mientras le tendía la mano, harry savia que parte era por Hermione desde que la vio él se quedó extasiado, pero no le importo le estrecho la mano.

-Claro primo-Contesto harry volteando a las persona que no tenían nada que ver en aquel asunto, el señor Weasley al ver los ánimos más calmados siguió continuando revisando la estufa eléctrica. La televisión, estéreo, etc.

-Señor Weasley, lamento mucho todo lo que ha pasado en esta sala, yo lo aprecio mucho espero pueda perdonar mi arrebato-Dijo mientras se dirigía a el mostrándole una sonrisa y tendiéndole la mano.

-harry, no hay nada que perdonar- Dijo tomando su mano y jalándolo para abrazarlo como si aquel muchacho fuera uno de sus hijos también.-Por las barbas de merlín mira qué hora es, llevamos media hora aquí hay que irnos si queremos que todo esté listo para los mundiales-

Con todo lo anterior pasado harry ya ni recordaba el hecho de que la copa estaba a la vuelta de la esquina, se alegró de saber, que por primera vez iría a ver un partido de quidditch y con sus mejores amigos.

Ofreciéndole la bolsita ha Hermione, la cual lo miro un momento tratando de descifrar si este se encontraba bien -lo siento mione, yo..- dijo con la voz más suave que pudo, Hermione le sonrió le dio un beso nuevamente en la mejilla y ella tomo los polvos.

Se dirigió a la chimenea, soltó los polvos -¡la madriguera!- dijo fuerte y firme, enseguida el fuego se puso verde y entro, mientras esta desaparecía por ella, harry le paso los polvos a ron el cual lo miro con una sonrisa y tomo los polvos fue a la chimenea repitiendo el proceso, desapareciendo por ella.

Se dio la vuelta paso la mano por la bolsa que aun sostenía, harry voltio una última ves-Bueno, pues... adiós, espero verlos de nuevo-

-Adiós... primo, ve con cuidado-La vos de dudley gruesa rasposa y algo tonta resonó mientras el lanzaba al fuego los polvos él siempre le decía harry, tonto o alguna otra forma pero primo jamás lo había dicho primo eso le saco una pequeña sonrisa.

-¡la madriguera!- dijo y se adentró al fuego, lo último que alcanzo a ver, fue a su primo agitando su mano en forma de despedida, a su tía llorando en el hombro de dudley, a vernon suspirando y al señor Weasley sonriendo como si viera crecer a uno de sus hijos, con cariño y amor.

Un instante después harry giraba muy rápido. La sala de estar de los dursley se perdió entre llamas de color esmeralda. Seguía girando en ese torbellino de llamas esmeraldas, pego los codos al cuerpo, el último viaje en polvos flu le dejo muy claro que si no se protegía terminarían doliéndole por lo menos unas horas, vio miles de chimeneas pasar por sus ojos y cerró los ojos, se estaba mareando.

Justo cuando la velocidad aminoro, estiro los brazos, a tiempo para evitar de darse de bruces contra el suelo y salir de la chimenea.

-¿Estas bien harry?- Pregunto una dulce voz de Hermione desde algún punto de la cocina de los Weasley, varios pares de manos le tendían la mano para ayudarlo a levantarse

-si- Respondió harry poniéndose de pie-Perdón por el mal rato chicos-

-No importa hermano, siempre estamos ahi para poder ayudarte incluso delante de unos muggles-Dijo ron que estaba a su izquierda tomando un pan de la mesa, con una mirada sincera.

-Ahora entiendo todas tus caras con tantos sentimientos negativos hacia tus tíos, harry- le dijo la dulce voz de Hermione tomando su mano entre la de ella estaba preocupada pero feliz de que el estubiera al fin en la madriguera.

-Aún hay mucho para explicar- dijo cansado harry, no solo había enfrentado a vernon dursley, también echo las paces con su tía petunia y su primo dudley, ahora el número 4 de prive drive ya no era su hogar, se sentía triste, algo vacío, ¿qué le depararía el futuro?.

-Bueno tendremos tiempo hasta que la señora Weasley nos mande a dormir- dijo mientras se dirigían al sillón de la estancia, y lo obligaba a sentarse.

-harry estuviste incluible poniendo a ese brabucón en su sitio, yo no sé qué piensen pero para mí eres mi nuevo ídolo-Dijo Fred a sus hermanos, que recién ingresaba a la sala con un par de vasos lleno de algo naranja, Hermione, ron y el tomaron los va estaban ofreciéndoles, detrás de ellos entro George, percy, Bill y Charlie.

-claro que sí, harry de ahora en adelante nuestro respeto es todo tuyo-Concluyo George, haciendo el ademan de quitarse el sombrero lo cual le hiso reír.

Enseguida se escuchó un estallido un pequeño estallido y el señor Weasley apareció de pronto al lado de George.

-Ya estoy en casa chicos y espero no interroguen a harry -Dijo con la voz de mando que tenía el señor Weasley para sus hijos, todos incluso Charlie y Bill contestaron ascendiendo la cabeza.

-No se preocupe señor Weasley, estoy bien tal vez mejor que en años, pero quisiera ir por mis cosas necesito revisar si no he olvidado nada- decidió harry, no savia porque pero ahora creía que estaban demasiadas personas para contarles a sus mejores amigos, además quería solo descansar un momento, entonces escucho una vos estrepitosa.

-¡AH hola, harry, cariño!-Dijo la señora Weasley, sonriéndole al advertir que estaba allí, luego se dirigió al señor Weasley.-Bienvenido, ¿qué hablaremos en la cena?-

Solo entonces apareció en la puerta de la cocina, detrás de la señora Weasley: una menuda y pelirroja ginny, la hermana pequeña de ron. Le sonrió a harry, el cual devolvió la sonrisa solo por cortesía. Lo cual provoco un sonrojo pues le había gustado harry desde la primera visita a la madriguera.

-Solo espero que por amor de merlín no tenga nada que ver con los "sortilegios Weasley"-casi fulminando con la mirada a los gemelos.

-Nada de eso molly, esta vez ellos estuvieron tranquilos, para variar- dijo el señor Weasley calmando a su esposa.

-claro que si mama, si nosotros no pensábamos darle un caramelo longilunguo o nada parecido a ese abusón, primito de harry-Dijo Fred guiñándole un ojo a harry, lo cual si no fuera por lo acabado de suceder, en otro momento le hubiera dado una risa incluso le agradaría la idea de que su primo sufriera una de la bromas de los gemelos.

La señora Weasley, estaba a punto de reprender a los gemelos por la simple idea que había propuesto, cuando fue interrumpidita por el mismo harry -ahora solo deseo hablar con ron y Hermione, ¿podríamos ir a tu habitación ron?-dijo levantándose aun sosteniendo la mano de Hermione, no quería soltarla por más raro que le pareciese, quería seguir teniéndola ahi para él, el vacío que se quedó en el por dejar la casa de los dursley se llenó cuando ella y ron estaban junto a él.

-Claro que si harry, hablaremos más tarde-Dijo el señor Weasley, deteniendo a su esposa de cometer alguna imprudencia.

Tomo su vaso y lo dejo en la mesa agradeciéndoles a los gemelos.

Ron se levantó, y Hermione que aun seguía tomada de la mano a harry se dirigieron a arriba, mientras una muy celosa ginny seguía la mirada a la ojimiel, preguntándose que había pasado para que ellos no se soltaran ni un segundo, mientras subían harry pregunto-¿Sortilegios Weasley que es?- Ron se rio tan fuerte que de seguro en las toda su casa se ello pero Hermione hiso una mueca de disgusto.

-Mi madre ha encontrado un montón de cupones de pedido cuando limpiaba la habitación de ellos- Explico ron en voz baja-largas listas de precios de las cosas que han inventado. Ya sabes varitas de broma, diferentes caramelos con truco, montones de cosas. Es estupendo, nunca imagine que tuvieran tanto ingenio.-dijo ron con una sonrisa en su boca -también ha habido pleito ya que mama quiere que entren en el ministerio de magia como nuestro padre y percy, pero ellos le han dicho que lo único que quieren es abrir una tienda de artículos de broma-

-Conociéndolos, les iría mejor-dijo harry sin pensar

Al entrar en la habitación donde dormía ron en la buhardilla de la casa estaba casi igual que el verano anterior: los mismos poster del equipo de quidditch favorito de ron, los chudley cannons, que daban vueltas y saludaban con la mano desde las paredes y el techo inclinado; y la pecera en el alfeizar de la ventana que antes contenía huevas de rana, había una rana enorme. Ya no estaba scabbers, la vieja rata de ron, pero en su lugar la ocupaba una lechuza pequeña, la misma que había llevado la carta de ron a privet drive para entrégasela a harry. Estaba más inquieta que cuando harry la vio por primera vez.

-¡cállate, pig!-Le dijo ron, abriéndose paso entre dos de las cuatro camas que apenas cabían en la habitación- Fred y George duermen con nosotros porque Bill y Charlie ocupan su cuarto-Le explico a harry.

-¿porque le llamas pig a la lechuza?-Le pregunto harry a ron

-Su nombre completo es pigwidgeon-dijo ron arrastrando las palabras-Si es que ginny lo bautizo. Le parece adorable. -Dijo mientras rodaba los ojos de forma irónica-yo lo intente cambiar pero, era demasiado tarde. Así que ahora se le ha quedado pig. Tengo que tenerlo aquí porque a errol y a Hermes le molesta que este haya con ellos.-Lo miro un segundo dar la vuelta a la habitación-En realidad a mi también me molesta.-

Harry conocía demasiado a ron para tomar enserio sus palabras: siempre se había quejado de su vieja rata scabbers, pero cuando creyo que crookshanks, el gato de Hermione, se la había comido, se disgustó muchísimo.

-y a todo esto ¿dónde está crookshanks?-Pregunto harry tratando de que Hermione dijera algo desde que se sentaron en el sillón, no había pronunciado palabra.

-Fuera en el jardín, supongo. Le gusta perseguir a los gnomos; nunca los había visto.- su voz era como un trago de agua en medio del desierto. -Entonces harry, que es lo que nos quieres contar- continuo Hermione tratando de que su vos sonara lo más consoladora posible, como era que su mejor amiga supiera, que el aun tenia cosas que contar.

harry suspiro, savia que tendría que contarle todo, quería contarles todo, aviaria lo del sueños con Hermione, pero de lo demás del anillo, también la caja de madera que resguardaba los secretos de sus padres aunque ron tal vez quisiera que él lo sacara y abrir la caja pero su padre le había dicho que esperara a los duendes de gringgots, el lo abriría cuando llegara el momento pero por ahora, tendría que ser firme con su amigo, en cuanto a Hermione, no había bruja más lista de su edad, si alguien podía darle consejo y esperar al mismo tiempo a que llegaran a gringgots era ella.

Empezó con el relato, comenzando por el desván, el encuentro de las cartas. Dando un breve repaso a lo que le decían, contando como salieron el collar y el anillo de la carta y de la pequeña caja de madera. Mientras le contaba todo esto, ron cada vez habría más la boca, y sus ojos se enrojecieron, mientras que Hermione se abrazó harry colocando su cabeza en su hombro. Cuando termino el silencio reino, en la habitación, solo se escuchaba el suspirar de Hermione.

-Entonces hay que ir a gringgots lo más pronto-Dijo ron.

-Si- contesto harry

De repente llego ginny miro a harry y Hermione, entonces se puso roja de ira, miro a su hermano vio que tenía una cara rara -mamá pregunta si tú y Hermione ¿pueden ayudar a poner la mesa?- dijo con tono de enfado. Ron miro a harry y vio que la tenía a Hermione sujeta como si no quisiera que se fuera, entonces le sonrió y sin que ginny se diera cuenta le guiño un ojo.

-Deja que Hermione ayude a harry a desempacar y a ver que llevara a los mundiales, nosotros podemos hacerlo, además ellos son invitados, no deberían trabajar-dijo ron mientras se levantaba.

La idea no le pareció para nada a ginny que empezó a protestar, por el número de personas en la casa eran 11 además de los diversos platillos que preparo su madre, ron solo la escucho mientras salía y cerraba la puerta detrás de él. Harry no entendió por qué su amigo había giñado el ojo o porque lo dejaba solo con Hermione, pero no perdería la maravillosa oportunidad que le dio para contarle sobre el resto de la historia.-mi..mione..-dijo con un poco de cautela.

Enseguida Hermione lo vio a los ojos, estaban rojos de llorar y aun así no se perdía lo linda que estaba.

-si harry que sucede...- dijo con voz dulce- al ver que no contestaba continúo ella.

-Si es por el dolor de la cicatriz he estado investigando, en muchos libros que tengo además de consultando los muggles, pero no he encontrado nada. Supongo que llegando a Hogwarts tendremos que consultar la librería, he incluso la sección prohibida- declaro aun algo preocupada, harry sintió un enorme deseo de abrazarla y nunca soltarla, desde que entro a Hogwarts era la única aparte de ron que había vivido aventuras innumerables con el, además de que si no fuera por su conocimiento, hubiera muerto en la pruebas antes de conseguir la piedra filosofal, no saber que en la cámara de los secretos había un basilisco, como entrar a esta, aun cuanto esta estaba petrificada y el año anterior su padrino sirius black habría muerto junto a Buckbeak por razones que no eran correctas, pero como siempre ella salvaba la situación.

Y ahora a pesar de haberlo visto en una de sus peores formas, no le recriminaba nada, tampoco lo juzgaba, y se preocupaba por cosas que no le afectaban a ella sino solo a él, de verdad ella era la mejor amiga que se podría pedir.

-No es eso, suponía que no habría avances hasta entrado a la escuela, tienes que ver esto- dijo por fin, dejando a una Hermione algo sorprendida, sin más que decir se paró, y la soltó no supo cómo describirlo pero casi de inmediato quería regresar a tomarla de la mano pero contuvo esa emoción y fue a su baúl que ya estaba al pie de donde dormiría, abrió este y saco con cuidado el libro donde guardo las cartas, seguida de la pequeña caja de madera, regreso y se sentó justo donde estaba antes. No supo si tomarla de nuevo o no pero mostro los objetos.

Tomo un respiro y Le paso las cartas para que las leyera, esta miro a harry como si este le estuviera entregando su vida y ella se sintiera aterrada con la idea de poder lastimarlo.

-Tranquila yo quiero que las leas a lo mejor entiendes algo que yo no, ya sabes que no soy tan listo como tú- le dijo sonriendo.

Ella lo leyó hasta que sus lágrimas salieron a borbotones, entonces lo miro,-Ho, harry son hermosas, se notan que te amaban más que a nada- concluyo Hermione, harry le paso la pequeña caja y ella se dedicó a examinarla, cuando acabado ella lo miro.-Bueno no es una caja normal, no sé ni de qué tipo de madera es esta echa, aunque me recuerda a algo, además la cerradura es extraña no creo que encontremos la llave así de fácil harry-

Harry se rio un poco mirando la inocencia de su amiga. enseguida tomo el collar con el anillo y se lo mostro, ante este Hermione abrió los ojos, el anillo brillaba con los hermosos colores de dorado y rojo, harry al ver que ella estaba deslumbrada por el acabado y lo bonito, se lo puso en las manos, lo observo y como anterior mente lo examino, cuando llego a la parte interna y leyó el grabado, lo dijo en voz alta -En vida y después de la muerte Te amaremos H.J.P-, ella le sonrió y se lo entrego a su dueño.

-Entonces solo queda esperar a ir a gringgots después del campeonato-Dijo Hermione -Además según tu padre en este también hay secretos de estos objeto y del mapa del merodeador así que esperaremos a que los duendes nos echen una mano ¿no Harry?. Este no contesto, por primera vez percato lo que conllevaba estar en el cuarto con los hermanos de ron, se cambiaría en ese cuarto frente a ellos o en cualquier momento le verían la cadena así que no podía traer el anillo con el tendría que guardarlo, pero si revisaban sus cosas buscando cualquier cosa como veranos pasador encontrarían el anillo, la caja le podría decir cualquier mentira, se la encontró en el mundo muggle pero olvido la llave en casa de los dursley, o que solo era un cachivache encontrado.

Pensó un segundo, y solo llego a la conclusión más coherente.

-¿Harry todo está bien?-Miro a su amiga con una sonrisa

-Mione, no puedo andar en la madriguera o enfrente de los hermanos de ron no puedo dejarlos aquí mientras estamos en los mundiales, así que solo queda una opción- dijo harry mientras la miraba esperanzado.

-Separar el anillo y la caja-Concluyo Hermione, como habría previsto harry.

-si- tomo la cadena y se la paso por el cuello a Hermione, la cual quedo sorprendida y se ruborizo de inmediato.

-¡no!, Harry será mejor que yo tenga la caja, este anillo es más valioso-

Harry negó con la cabeza en señal de que estaba equivocada, por primera vez, aunque era muy raro, su amiga nunca se equivocaba.

-Si la ven los gemelos, querrán examinarla y se darán cuenta de que es algo más, ya sabes ellos llevan toda su vida en el mundo mágico y ahora con los sortilegios Weasley tal vez sepan más de artículos hechizados, pero si es a ti no se atreverán ni a preguntarte por ella. Ya que los golpearías- explico harry a lo cual Hermione dio un par de suspiros y lo volteo a ver.

Pasaron unos segundos, en lo que Hermione pensó que tal vez su amigo tendría razón y que era la única forma.

-Ok harry, pero en cuanto lo quieras de regreso me lo pedirás, es algo muy valioso para ti-Finalizo Hermione mientras esta acariciaba el anillo, al tacto de ella la cadena brillo y se ajustó a su cuello, y también se volvió un más fina, le quedo perfecto a Hermione.

Los dos estaban sorprendidos, pero lo único que se le ocurrió a harry decir fue -Ya ves asta a ellos se dan cuenta de que eres hermosa, estas muy linda- Mientras sonreía como bobo.

Hermione se sonrojo y le dio un pequeño golpecito en el hombro -ahi está el caballero de harry Potter siempre haciendo sentir bien a todo el mundo-.

-¡Es verdad mione, te quedan hermosos!-se acercó y le dio un beso en la frente algo que con nadie más aria pero ella era diferente, siempre ayudándolo, cargando pesos que no debía, siempre con él.

-Creo que tenemos que bajar harry llevamos mucho tiempo y se preguntaran dónde estamos-Dijo Hermione mientras se dirigía a la puerta, harry se recrimino por haber echo eso, aunque a decir verdad estaba en lo correcto era hora de bajar, aunque la verdad es que ella se paró para evitar que harry la viera con el sonrojo del beso.

Harry se paró, guardo las cartas en el libro las coloco con cuidado en el baúl y después la caja en el pantalón, se dirigió con Hermione a la puerta este no noto cuando ella le quito los lentes, solo hasta que ella le hablo -Harry tienes los lentes hechos un desastre, no puede pasar un mes sin que los tires verdad- Suspiro y lanzo el hechizo oculus reparo, estos se limpiaron, aclararon y parecían recién salido de la tienda se los pudo de inmediato dedicándole una sonrisa a su amigo.

EL sonrió y le dijo -No has pensado en poner una óptica en el mundo muggle te iría bien, yo sería el cliente más frecuente-

Hermione se rio de su idea, lo cual le dio una alegría en ese pequeño mar de tormentas, secretos y tristezas que empezó a ahogarlo en ese día.

-No seas bobo, si les dijera eso a mis padres de seguro me desheredan, acuérdate que son dentistas-Dijo Hermione alegremente, tomo la mano del el -Nunca cambies harry-dijo mientras lo arrastraba hasta la puerta.