Todos los derechos de Harry Potter son de J. K. Rowling

Respondiendo comentarios:

RoseAllyWhitPotter17: Gracias por tus palabras, se que tengo errores de ortografía espero puedas perdonarme. Ya veras lo que les espera a esa pareja un poco de suspense y dramatismo. Espero este siendo de tu agrado a donde la encamino.

Nixfire: Ya pensaba que habías abandonado esta historia, te agradezco todos tus comentarios. En cuanto a la cucaracha (Rita) ya aparecerá y en que forma. El mapa nunca miente o ¿si?. Gracias por todo.

lenknyn: Gracias, aun faltan muchas sorpresas por cierto lo de hermione y harry es otra cosa.

Kira Potter Jackson :Gracias y eso que apenas no comienza lo realmente interesante.

Melodiosa: Gracias tambien he leido tu historia de fairy tail me gusto mucho.

Y perdón por hacerlos esperar aquí esta el capitulo. Disfruten

Capítulo 12.- Los campeones del cáliz

Todos los de cuarto curso se dirigieron a las siguiente clase que era transfiguración con la profesora Mcgonagall, pero Harry aún se preguntaba porque Hermione pudo leer sus pensamientos o acaso la maldición de Moody lo había hecho posible, aun así sus preocupaciones fueron arrojadas a un lado cuando la cantidad del trabajo para aquel día aumento radicalmente con la profesora.

-Están entrando en una fase muy importante de su educación mágica-declaro Mcgonagall mientras la mayoría se quejaba del trabajo que les esperaba-Se acercan los exámenes para el T.I.M.O-

-¡Pero si no tendremos T.I.M.O hasta el quinto curso!-dijo Ron alterado por la lista de trabajos pendientes al final de la clase.

-Es verdad, Ronald, pero créeme. Tienen que estar lo mejor preparados posibles, la señorita Granger sigue siendo la única persona de la clase que ha logrado convertir un erizo en un alfiletero como dios manda, permíteme recordarte que su erizo se hace pelota cada vez que alguien se acerca con un alfiler-dijo la profesora Mcgonagall, mientras Hermione se ruborizo, aunque Harry supuso que estaba satisfecha de sí misma.

Cuando terminaron las clases, Hermione se despidió de ellos, Harry le dijo a Ron que tenía que hablar con Mcgonagall que llegaría un poco tarde a la clase de adivinación y que si no llegaba que entregara su trabajo, a lo cual Ron lo miro un poco y después salió con su pergamino sin preguntar nada.

-¿ahora que pasa Harry?-dijo la profesora mientras guardaba un montón de avecitas, que ocuparon para convertir en sacudidores, aunque el de Harry le seguían saliendo plumas cuando la convertía.-alguna duda sobre la clase-

-No profesora-dijo Harry mirándola seriamente, desde que la vio el primer en la escalinata del vestíbulo decidió que esa charla se daría, pero no se había encontrado el momento, ahora el tenia valor para hacerlo-¿Usted savia que mis padres la dejaron a cargo de mi tutela, si mi padrino Sirius Black no podía?-

La profesora Mcgonagall abrió mucho los ojos casi al punto que parecía asustada del todo y más perpleja que cuando en el primer curso Harry le dijo que savia de la piedra philosofal.

-¿Que dices Harry?-dijo mientras tomaba asiento casi con cara pálida y parpadeando como si pensara que era un sueño -¿yo...cómo es posible?-

-es una larga historia-dijo Harry mirándola atentamente y casi intentando adivinar como reaccionaria- ¿Desea escucharla?-

-Por supuesto Harry, ¿Por qué no quisiera escucharla?-Dijo Mcgonagall mirando atentamente su expresión era de sorpresa.

Harry le conto el descubrimiento de las cartas de sus padres y después la lectura del testamento en Gringotts, mientras mas avanzaba ella abría mas la boca y los ojos se le enrojecían. Cuando llego al punto donde sus padres mencionaban que ella fuera su tutora simplemente dejo caer sus lágrimas tapándose los ojos.

-Harry de verdad yo no tenía ni idea, si lo hubiera sabido, te hubiera cuidado... perdóname…Por favor perdóname. Jamás pensé que no te habían dejado a tutela de los muggles... de tus tíos-dijo Mcgonagall mientras en su rostro surcaban unas grandes lagrimas.-Pero ¿quién fue el que hiso que la lectura del testamento de Lily y James no fuera revelada?, ¿Quién te alejo de mi lado?-

-No lo sé profesora, solo sé que tiene que contestar muchas preguntas. También le aviso que he empezado los trámites para limpiar el nombre de mi padrino Sirius ya que he mantenido contacto con él desde antes de que lo capturaran aquí en Hogwarts y sé que no ha cometido ningún crimen. Buscare al culpable de tantos años de abusos en la casa de los Dursley así que espero su apoyo-dijo Harry tratando de contener la ira que lo embargaba cada vez que recordaba que alguien había sellado los testamentos-Mis padres me emanciparon por lo cual no regresare a ese lugar si lo puedo evitar -

-!ooh¡ Harry si yo te hubiera tenido a mi cuidado-dijo Mcgonagall mientras lo veía y el solo le regalo una sonrisa, sus padres tenían razón ella estaría feliz de cuidarlo. El saber que aquella profesora de verdad lo pudo haber criado aumento un poco más su coraje hacia aquella persona que era responsable de estar tantos años siendo maltratado.-Pero de ahora en adelante , si gustas puedes venir conmigo a mi casa, también te ayudare en lo que quieras Harry yo...-

No aguantaba más las ganas y abrazo a la profesora, ella le devolvió el abrazo de forma tan tierna que se preguntó si así se sentía el tener una madre el saber que había una figura materna que te apoyaba y te quería, se le salieron un par de lágrimas.

-No se preocupe, los Waesley también me han ofrecido su casa para vivir con ellos, así que se puede decir que no estoy sin casa aun así le agradezco por todo, maestra y considerare su propuesta-dijo Harry mientras se limpiaba las lágrimas.

-Bien Harry, aun así puedes contar con migo para lo que sea, como maestra y si se pudiera como tutora-dijo mientras esbozaba una sonrisa que casi hasta ese momento era poco frecuente en la cara de su maestra.

-La verdad profesora... hay un favor que pudiera pedirle para mañana, así como también tengo que hacerle un par de peticiones y preguntas-Dijo Harry mientras pensaba que tal vez ahora tendría más oportunidad de continuar su entrenamiento gracias a la maestra.

-Lo que quieras Harry-dijo la profesora, y al instante reapareció la Mcgonagall de siempre-Pero mientras este dentro de las reglas de la institución-

-A si sobre de eso….puede que rompa más de una regla, tal vez todas-dijo Harry intentando sonar lo más calmado, pero se sintió en problemas al ver la cara de seriedad de su maestra favorita.

Después de un par de regaños y de que Harry le contara lo de la servidumbre de la casa de los Potter, y para terminar diciéndole que tenía un poco más de dinero que antes claramente ocultando que si en ese momento quería podía incluso dejar sus estudios. Así que le pregunto si era posible que Dobby estuviera apareciendo y desapareciendo dentro del colegio, ella se mostró sorprendida en gran medida, para después decir que mientras Harry no saliera del castillo, el elfo podría ir y venir.

-Profesora, ¿Sería posible si usted me prestara un aula mañana y llamara a Hermione antes del desayuno?-dijo Harry y ella lo miro con cara de confusión.

Aun así Harry savia que el enojo de la profesora aumentaría al escuchar su petición completa. El simple hecho de hacerle su pedido provoco una serie de regaños y de discusiones a lo cual él tuvo que hacer diferentes propuestas cada una más difícil que la anterior al final termino ganando solo por promesas que le llevarían mucho cumplirlas.

También le pregunto de algún lugar donde el pudiera practicar encantamientos sin que nadie se enterara, a lo cual la profesora pensó por un buen rato pero solo termino por decir que casi toda la escuela estaba ocupada por estudiantes y sería muy difícil. Y lo corrió pues faltaba casi 15 minutos de adivinación y si no la profesora Trelawney se enfadaría, así que puso su disculpa para la profesora en el papel y Harry salió corriendo feliz de que la profesora aceptara al final la mayoría de su petición.

Cuando llego a clase de adivinación, la profesora Trelawney ni se mostró sorprendida solo tomo la nota y sonrío diciendo que lo tenía previsto, así que calificaría sus deberes, a lo cual Ron le entrego la hoja de los futuros desastres de Harry. Al parecer Ron había tenido una buena adivinación pues saco un sobre saliente, y en el mismo pergamino puso, "Empieza a abrir su ojo interno", después de la clase Harry se carcajeaba con ron sobre su nota en adivinación.

En la clase de historia, el profesor Binns les mando un resumen de las revuelta de los duendes en el siglo XVIII, Harry pensó que si se comunicaba con Priscob de seguro le contaría todo con lujo de detalle incluso algunas cosas que ni profesor Binns savia.

Como siempre en clase de Snape los obligaba a descubrir antídotos, y amenazo con que envenenaría a uno de ellos antes de octubre para asegurarse que sus deberes estuvieran perfectos, Harry simplemente suspiro pesadamente, él era el blanco obvio incluso la mayoría de la clase lo miro cuando dijo esto. Y si no fuera porque el profesor acostumbraba a mandarle miradas de desprecio de vez en cuando estaría seguro que ya lo había marcado.

El profesor Flitwick les dijo que leyeran dos capítulos completos del libro de encantamientos 4° curso, a lo que Harry se preguntó si Hermione se lo sabría de memoria y estaría dispuesta a platicarle cada uno de los capítulos mientras él hacia un resumen rápido. Al final del día estaba muy cansado, pero supuso que al día siguiente se la pasaría genial en compañía de Hermione. Ya en la sala común de Gryffindor se encontraba leyendo un libro de Aritmancia y escribiendo en un largo pergamino, el cual le llegaba a los pies.

-¿Aritmancia?-dijo Hermione cuando se acercó después de atravesar el retrato de la señora gorda.

-Si-dijo Harry sonriéndole y regresando a su pergamino.

-Pero si no llevas esa materia. ¿Para que la estas estudiando?-pregunto mientras se sentaba y recogía el pergamino leyendo la primera parte.

-Solo me dio por estudiarla un poco-mintió Harry tratando de sonar normal.

-¿Poco?-dijo Hermione sorprendida-Esto es un estudio profundo para los que recién inician en la materia-

-Bueno, es que tenías razón. Me gustó mucho la materia.-Dijo Harry empezando a guardar el libro ya que no podía concentrarse más en eso. Después de que Hermione lo ayudara con el mandato del profesor Flitwick y de Binns, se fueron a dormir los dos contentos de pasar un tiempo a solas y estudiando ya que Ron se fue a dormir de inmediato.

A la mañana siguiente Harry se levantó más temprano que lo de siempre, se vistió pero esta vez de forma normal y solo colocándose la túnica por pura apariencia, escribió una carta dirigida a Apahtio preguntándole sobre el caso de Sirius y de los testamentos, también una a su padrino en la cual le decía que había encontrado pruebas de su inocencia y que pronto tendría respuesta que no hiciera nada loco, hato a la pata de hedwing que parecía estar contenta de que saliera por fin y salió volando por la ventana.

Harry bajo lo más rápido al aula prestada por la profesora Mcgonagall, llamo a Dobby el cual apareció justo para ayudarlo, pero como era mucho trabajo llamo a otros elfos los cuales hacían reverencias muy pronunciadas a él, les dio indicaciones exactas y terminaron tan rápido que casi a la hora y media hora, reviso todo y subió como alma que llevaba el diablo a la torre de Gryffindor.

Al entrar a la torre vio a una Hermione, con las mejillas coloradas-¿Dónde has estado?-pregunto Hermione mientras golpeaba el suelo con el pie.-he bajado a estar en tu entrenamiento y no estabas incluso Hagrid dijo que no te había visto-

-Solo di una vuelta por el castillo, hacer lo mismo me aburre-dijo indiferente Harry, tratando de ocultar sus emociones, algo que no le pareció a Hermione ya que se sentó en un sillón para leer un poco y Harry se puso a lado de ella.-Y ¿qué leeremos hoy?-

-Yo voy a leer un poco sobre los cangrejos de fuego-dijo mientras le daba un poco la espalda a Harry, este casi le dieron ganas de decirle que pasaba pero en muy poco ella lo sabría, así que se puso a su lado apoyo la espalda de Hermione en su hombro y así paso el rato hasta que empezaron a bajar más alumnos y ellos subieron a cambiarse para ir a desayunar aunque Harry fue a hablar con Ron él estaba soñoliento y cuando le dijo su plan se quedó con la boca abierta pero acepto y enseguida tomo la capa de invisibilidad y bajo escuchando como despertaba a Neville.

Salió rápido al gran comedor, casi sale disparado de bruces contra el suelo cuando peeves le dio un empujón para saltar casi la mitad de las escaleras, se alejó riéndose de él y gritando como siempre. Espero ansiosamente a Hermione. Cuando la vio cruzar las puertas y estaba por sentarse a lado, llego luna y le susurro algo a Hermione esta se disculpó con Harry mostrándose más irritada que en la mañana y salió a toda prisa.

-Listo Harry como me dijo la profesora Mcgonagall-dijo Luna guiñándole un ojo.

-¿Neville y Ron están listos? Ve con ellos y esperen a Dobby cerca de la cabaña Hagrid-Dijo Harry levantándose rápidamente.

-¿Qué pasa Harry?-pregunto luna mientras caminaba un poco rápido.

-Ron te lo dirá-dijo Harry antes de salir rápidamente.

Tomo rumbo a donde había citado a Hermione y en un pasillo sin nadie se puso la capa y corrió rumbo al aula prestada, incluso saltándose más escalones de los que peeves le había hecho saltar antes, al parecer su rutina diaria le estaba dando frutos ya que aunque tomo la ruta menos obvia había llegado antes que Hermione, entro a la habitación se quitó la capa y espero la llegada de su novia.

Al entrar ella, se sorprendió mucho mirándolo entre sorprendida confusa y queriendo golpearlo.

-¿Harry...?, ¿No estabas en el gran comedor?-dijo Hermione mientras cerraba la puerta, enseguida se encendieron un montón de fuegos flotantes de color azul en toda la habitación un par de libros cayeron al suelo, se abrieron y comenzaron a soltar tinta que fue tomando forma flotando en el aire colocando un "Feliz cumpleaños" para después convertirse en un corazón, la tinta se desvaneció. Un montón de libros del tamaño de colores saliendo por todos lados abriendo sus páginas que brillaban con colores claros e iluminando el salón por completo, y por ultimo apareciendo una tarta de cumpleaños en el centro donde había puesto la mesa de los maestros. Hermione se lanzó a Harry, el cual la abrazo y le dio un beso que duro varios segundos.

-Esto no me lo esperaba, así que esto hiciste en la mañana. ¿Cómo pudiste, es magia avanzada?-dijo Hermione después de separarse y verlo a los ojos.

-Me ayudaron los elfos domésticos, y en cuanto al aula me costó de convencer a la profesora Mcgonagall, sobretodo del resto del día. Casi me hace limpiar calderos cuando se lo propuse-dijo Harry mientras tomaba un paquete cuadrado envuelto con papel de color rojo y dorado, de la mesa y se lo paso.

-¿Qué resto del día?-dijo mientras veía la caja con mucha alegría-¿Es para mí Harry?-

-Si es para ti y no te preocupes por eso, ya verás lo que nos espera-dijo Harry observando a Hermione mientras abría el paquete, adentro estaba un collar de cadena fina la cual se auto ajustaba igual la de Harry, pero a diferencia esta suya tenía un corazón pequeñito en el centro el cual se podía retirar y crecía.

-Es precioso Harry, ¿Pero cuando?-dijo Hermione mirándolo atónita.

-Al parecer le perteneció a la mi tátara abuela por parte de mi padre-dijo Harry poniéndoselo en el cuello este se a chico solo un poco y el corazón lucio de un rojo escarlata intenso.-Así que solo lo saque de la bóveda-

-No puedo aceptarlo, es de tu familia-dijo Hermione mirando como lucia el corazón-Y yo solo soy…-

-Lo que más amo-finalizo Harry callándola con un dedo,-Retira el corazón te llevaras otra sorpresa-

Hermione tiro del corazón sin tanta fuerza se desprendió y crecido hasta tener el tamaño justo para la mano de mione, era un guardapelo, al abrirlo vio que de un lado decía, "Para mi mejor amiga, mi novia y mi vida" y en el otro lado había un espacio para una foto, la cual aún no estaba en su lugar.

-Harry, ¿Que hice para merecer al mejor novio del mundo?-mientras se le escapa una lagrima de sus ojos.-Es lo mejor que me han regalado.-

-Y espero sea el primero de muchos-dijo Harry dándole un beso que duro un par de minutos-Ahora a celebrar, Dobby- enseguida aparecieron cerca de unos 20 elfos que saltaban y gritaban "Feliz cumpleaños dulce ama", además de que venían de la mano de Ron, Neville y Luna que se acercaron a felicitar a Hermione.

Harry le presento a los que había conocido por la mañana y a los demás que no los presento Dobby, casi todos en la habitación vestían ropa aunque algunos todavía tenían un trapo en forma de toga.

Dobby repartió el pastel, al principio solo les pasó un pedazo de tarta a todos los magos. Ellos se los pasaron a los elfos más cercanos ya que parecían que no entendían, les dijeron que era mucho para ellos y que serían felices de que los ayudaran. Así que casi todos comieron, felices de tener algo dulce en la mañana, para cuando acabaron sonó la campana de inicio de clases.

-¡Hay apurarnos, todos!-dijo Hermione jalando a su Harry para salir a toda prisa, pero Harry solo se mantuvo ahí-¿Qué haces llegaremos tarde?-

-Veras mione he convencido a la profesora Mcgonagall que nos disculpe con todos los profesores de hoy y que pida que nos pase nuestro deberes para mañana ya que hoy es tu cumpleaños y debemos celebrarlo como se debe. Así que elige a dónde quieres ir-dijo Harry, mientras Dobby desaparecía todas las decoraciones y el pastel, para dejar el aula limpia como estaba. Una veintena de ojos cayeron en Hermione.

-¿De qué hablas?-pregunto nuevamente confusa.

-Hermione-dijo Ron mientras aún tenía un pedazo de pastel en la mano-Veras Harry nos convenció para esto. Incluso ayer apenas era una idea-

-A mí no me desagradaría perderme pociones hoy-dijo Neville un poco nervioso-Creo que si no envenena a Harry será a mí-

-Vamos Hermi, es un gesto muy lindo de Harry-dijo Luna acercándose a su amiga y tratando de conversarla -además de que el tendrá mucho que hacer cuando regrese-

-¡Luna!-dijo Harry mirándola casi enojado.

-Tarde o temprano se enterara-dijo Luna sin prestarle atención a su enojo-Ella es muy observadora-

-¿Por eso ayer estabas con Aritmancia?-pregunto Hermione viendo a Harry y acercándose lentamente.

-Bueno…si-Dijo Harry sabiendo que Luna tenía la razón. –Solo es la punta de iceberg, deberías ver lo que le prometí a la profesora Mcgonagall para que pudiéramos salir del castillo. Literalmente tengo que ser uno de los mejores de Hogwarts para el final del mes-Continuo aun sonriente-Tendré que aprender mucho de trasfiguraciones, así como de historia, Aritmancia y no quiero pensar en lo de pociones-

Hermione pensó un momento.

-Así que nos dejaran salir del castillo para ir a Hogsmeade-

-No- dijo Harry mientras se quitaba la túnica y se la pasaba a Dobby, seguido de todos sus amigos - Nos dejara ir a donde queramos, al callejón Diagon o a Londres incluso a París si lo deseas-Claro que tendremos hora de llegada y podremos salir solo con la ayuda de Dobby. Además creo que mantendrá a alguien vigilándonos. No me preguntes como-

-¿Que de verdad?-dijo sorprendida Hermione-¿Pero de donde sacaremos...?-

-Dinero-dijo Harry, casi cortante-Pues de aquí- señalo la tarjeta de obsidiana que tenía en su bolsillo.

-Por favor Hermione, tanto ha hecho Harry. Simplemente deberías aceptar-dijo Ron, mientras observaba un elfo y este le hacia una reverencia.

Hermione simplemente se quedó parada mientras se mordía el labio, como siempre que se debatía entre sus pensamientos.

-Bien, pero será solo a Londres-dijo Hermione, seguido de un beso a Harry el cual se quedó atónito, ya que de todos los presente solo Ron sabia de su relación. Aun así volteo a ver a los otros dos, el único tenían la boca abierta era Neville.

-mione creo que...-dijo Harry, mientras esperaba que dijeran algo.

-Al parecer Luna nos descubrió por cómo me mirabas y no creo que Neville diga algo o ¿sí?- dijo Hermione mirando al chico suplicante. Neville salto un poco, Harry savia que desde que en el primer curso lo había petrificado le tenía cierto temor a ella.

-¿Lo mantienen en secreto?... no diré nada... es más los felicito hacen buena pareja-dijo Neville mientras le palmeaba la espalda a Harry y Hermione agradecía de que los apoyara.

-Además Harry, no soportaría todo el día sin demostrarte lo mucho que te amo por esta hermosa sorpresa- dijo pasando sus manos por su cuello y le acariciaba la nuca y le daba un segundo beso.

-O por favor, no aguantaremos esto todo el día. Mejor vámonos a Londres- dijo Ron tapándose los ojos y haciendo que incluso Neville se riera a carcajadas.

- Y a todo esto ¿por qué no vinieron Ginny y los gemelos?-dijo Neville, tratando de cambiar la conversación.

-Ginny es de tercer curso y solo me dio permiso de alumnos de cuarto curso en adelante, como los gemelos están el año de sus T.I.M.O fue una negativa rotunda, así que solo le di su nombres-dijo Harry seguro, mientras tomaba la mano de Dobby.-Pero es hora de irnos-

Los elfos desaparecieron dejando solos a Harry, Hermione, Ron, Luna y Neville los cuales se tomaron de las manos, con un puf desaparecieron del aula y aparecieron en la parte trasera del caldero chorreante. Harry se sintió algo mareado y pudo observar por la cara de Neville, Hermione y Ron que ellos querían casi vomitar en cuanto a Luna simplemente se agacho como si esperara que el estar más en contacto con la tierra su malestar se fuera.

-Bien de aquí será fácil llegar a todos lados-dijo Harry soltando a Dobby el cual enseguida pregunto a todos si estaban bien.-Una cosa más todos lo de la taberna trataran de saber porque estamos aquí ya que somos menores de edad y…pues deberíamos estar en el castillo, así que Dobby pararas a todos solo un minuto en lo que salimos y te vernos aquí a las 7 antes de la campanada de la cena en Hogwarts. La hora límite de la profesora-

Todos estuvieron de acuerdo, unos minutos después se encontraban recorriendo las calles de Londres felices. Pasaron a comprar en Subway algunos bocadillos y como había Hermione, Ron se había acabado el primero antes de salir de la tienda. Después se dispusieron a visitar muchos sitios interesantes en su caminaron visitando tiendas, incluso algunos lugares como el Tower Bridge, en el cual Ron y Neville preguntaron cómo funcionaba y la única que pudo explicarlo fue Hermione. Harry también se lo había preguntado pero a él le daba más vergüenza por haber vivido tanto tiempo en el mundo muggle.

Por petición de Hermione visitaron el museo británico y pasaron demasiado tiempo viendo diferentes cosas ya que cada tanto se asombraban por las cosas que podían hacer los muggles sin magia, a Hermione le gustó mucho tanto que casi pasaron toda la mañana en ella, lo cual a Harry le pareció fascinante nunca pudo tener una mañana en un museo así mucho menos con sus más preciados amigos, menos con una novia. Hermione le daba un montón de datos de cada obra de arte, igual que los instrumentos incluso historia de ellos el simplemente escuchaba preguntando un poco ver fascinada era lo mejor que veía en ese lugar y al salir ya tenían un hambre muy grande.

Harry se dirigió al restaurante más cercano. En el cual casi los corren por pensar que solo les estaban haciendo una broma a los meseros, pero cuando Harry les mostro la tarjeta de obsidiana parecieron que entendieron y les acomodaron una mesa para ellos incluso parecieron darles exclusivamente dos meseros para atenderlos. Todos parecían apenados con Harry ya que el pagaría todo, simplemente les dijo que pidieran lo que gustaran que no importara el precio.

Todos comieron muy ajusto aunque los platillos fueron de los excéntricos para Ron, Neville y Luna ya que muy pocas veces habían visto un restaurante y menos uno cinco estrellas como después descubrió Harry entre charlas de los comensales. Tuvieron divertidas conversaciones, cuando iniciaron a contarle a Neville la copa mundial.

-Fue impresionante, las técnicas de los irlandeses. –dijo Ron emocionado mientras terminaba el plato.

-Lo que más me impresiono fue el amago de wrosky-dijo Harry recordando que lo debía intentar a la primera que se subiera a una escoba.

-Lo malo fue el pobre de Lynch, quedo echo un desastre-dijo Hermione apoyándose en el hombro de Harry.

-Me hubiera encantado ir pero mi abuela no quiso ir. Podía conseguir boletos pero al parecer no le agrada tanto el quidditch.-dijo Neville con cara de pena.

-Yo lo tengo grabado en mis omniculares. Después te los presto para que lo veas.-dijo Harry sonriéndole-Te van a encantar, todavía no los reviso pero vi que tenían grabado mucho-

Harry giro un segundo y se dio cuenta que casi todo el restaurante los miraba como si estuvieran locos. Y cambio de tema ya que si provocaba un problema con el ministerio seguramente iría directamente a azkaban sin contar con los problemas dados a Mcgonagall.

Al llegar la cuenta casi se salieron los ojos a todos ya que la cuenta era exorbitante incluso aquellos que no sabían de libras se daban cuentas que era demasiado. Harry que solo fue a pagar, los meseros se vieron sorprendido que el pagara todo y se vieron felices cuando Harry les dio un 30% de propina. Aun así escucho murmullos sobre de que fuera una estafa, Harry simplemente tomo a Hermione de la mano sin el menor atisbo de remordimiento ya que savia que Gringotts lo avalaba, salieron a seguir su recorrido, a Harry se le ocurrió ir al London eye, ya que siempre lo vio de lejos en sus viajes a Londres pero jamás pudo siquiera acercarse y todos se mostraron interesados.

Cuando llegaron, se veía más esplendorosa de lo que habían creído, tomaron un solo compartimiento para ellos y mientras subían lentamente veían el hermoso atardecer caer, algo que hiso que todos estuvieran en silencio por un buen rato.

-Es grandioso-dijo Hermione sonriente mientras Harry la abrazaba por atrás y ella lo tomaba de las manos.-Demasiado hermoso para ser verdad-

-Igual a ti, mione-dijo Harry besándole la mejilla.

-Gracias. Es el mejor cumpleaños de toda mi vida-dijo Hermione girándose un poco para besarlo.

-No otra vez-Dijo Ron con voz algo fingida-Si lo hacen nuevamente me tiro desde esta altura-

-Adelante-dijo Harry besando nuevamente a su novia-Te atraparía antes de que llegases al suelo-

-Sí, Harry es un jugador estrella-dijo Luna guiñándole el ojo a Harry-Aunque dudo que pueda sostener tu peso-

-No peso tanto-dijo Ron mirándose por todos lados-¿o si?-

-Harry se refería al hechizo "Aresto mometum"-dijo Hermione sonriendo grandemente.

Casi era hora de regresar a sí que como estaban bastante lejos del caldero chorreante, Hermione llamo a un taxi y el resto del camino pasaron hablando del divertido día. Harry esperaba escuchar a su novia quejándose del montón de deberes que tendrían por delante pero simplemente se reía de las bromas de Ron y Neville.

Cuando entraron al caldero chorreante, la mayoría se sorprendieron pero no les prestaron atención ya que dentro de unos minutos estarían en el castillo, así que esperaron a Dobby el cual se mostró puntual y desaparecieron de regreso al castillo, dejándolos justo a las afueras del gran comedor donde no había nadie y entrego sus túnicas a todos. Se las pusieron y entraron al gran comedor la mayoría se mostró interesado de donde habían estado, pero solo debían deicir que Mcgonagall les encomendó un trabajo el cual habían acabado recién. Aun así nadie podía no decir que se la habían pasado genial.

-¡Veo que la pasaron bien todos juntos!-dijo Mcgonagall acercándose a ellos mientras sonreía-Pero Harry te recomiendo que sigan guardando su relación en secreto con la señorita Granger-

Ha Harry y Hermione casi se le cae la cara al piso por lo dicho por la profesora-¿cómo?-empezó Harry

-Por merlín Harry, nadie suplica y se compromete a tanto por un cumpleaños, menos si no tiene una relación como la de ustedes. Eso y el hecho de que no se sueltan las manos me dio la pista-dijo Mcgonagall mientras señalaba a sus manos.

Se soltaron con lentitud como si les hiciera daño dejar la mano del otro y trataron de ocultar la pena que después de que todo el estuvieran sin recatos enfrente de sus amigos se les olvidara que nadie más savia.

-Lo sentimos profesora-dijo Hermione mientras se ruborizaba.

-No importa señorita Granger, Aun así les advierto nada de escenitas románticas en Hogwarts. A si aquí están sus deberes de este día.-le paso una lista a Hermione que solo constaba de un par de cosas, pero el de Harry le cayó hasta los pies y solamente eran la mitad ya que el rollo giro un par de metros más.-

-No me diga que el mío es así de grande también-Dijo Ron sorprendido y tan preocupado como cuando Ginny había sido secuestrada en la cámara de los secretos.

-No señor Waesley, solo el de Harry. Son los deberes que me prometió por la salida de ustedes 5-dijo mientras daba las listas a los demás ninguna tan grande como la de él, de echo parecían nada comparada con la lista que intentaba enrollar sin éxito.

-Harry, de verdad tantos-dijo Hermione que lo miraba un poco sorprendida y Harry detecto que en alguna parte dentro de ella quería decirle cuanto la amaba.-No creo que puedas terminarlos esta semana, ni en el mes-

-No es nada con tal de celebrar tu cumpleaños mione-dijo Harry sin ningún arrepentimiento aunque la verdad estaba empezando a planear como aria todo y cada una de las cosa, incluso pensaba ocupar los descansos para hacer alguna cosa en especial.

Después de la cena que casi no tomaron nada ya que estaban muy llenos por la salida se dirigió a la torre de Gryffindor, Neville dijo que llevaría a Luna a su piso cerca de su sala común y desaparecieron, Ron al llegar subió de inmediato a las habitaciones seguido de Hermione que también subió agradeciéndole a Harry todo el día dándole un pequeño beso antes de que alguien los viera pero Harry saco todas sus casas y se dispuso a comenzar, para tratar de avanzar lo más pronto. Cerca de las 2:00 am era el único que continuaba en la sala común, mientras se partía la cabeza pensando alguna forma de que los diferentes elementos de pociones dieran un antídoto funcional ya que estaba casi seguro que Snape lo envenenaría a toda costa por perderse una clase.

Cuando escucho una voz en la escalera de las chicas.

-¿Todavía sigues aquí? O ¿Acabas de despertarte?-Hermione se veía soñolienta y se frotaba los ojos.-deberías dormir-con un gran bostezo.

-Necesito avanzar lo más posible si no todo se juntara más, ningún maestro me perdonara algún deber-dijo Harry regresando a su libro de pociones, tenía que casi terminarlo de leer si quería conseguir un avance.-Maldito Snape, solo no voy una clase y me pone casi medio libro por estudiar en sus deberes-

Hermione se acomodó junto a él y recostó su cabeza en su hombro, cerca de las 3:00 Harry decidió que era hora de dormir, pero al girar a decirle que se fueran a dormir vio a su novia dormida, así que la acomodo en su hombro la abrazo y se quedó dormido.

Harry se asustó mucho al despertar, pues Hermione lo sacudía.

-Harry nos quedamos dormidos, alguien puede vernos es mejor que nos vallamos a nuestras camas-

Asintió y salió a su cuarto pero reviso la hora, estaba a punto de amanecer y si no salía a hacer su rutina se quedaría dormido el resto del día, así que se vistió de mala gana y bajo a continuar con su día como siempre aunque savia que esta ves Hermione no aparecería en su entrenamiento.

Así transcurrió el resto de la semana, Harry acostándose tan tarde que terminaba dormido sobre sus deberes, Hermione despertándolo para ir a continuar con las indicaciones de Priscob, después iban a casa de Hagrid donde sus Escregutos casi estaban cerca del medio metro. El de Hermione desde que decidió cuidarlo bien, alcanzo al de Harry a velocidad de vértigo y pasaban casi todo el tiempo tratando de enseñarle nuevas cosas, a amiji aprendió innumerables trucos rápidamente, respondía más a silbidos de Harry que a sus órdenes, mientras que el de Hermione era atreves de palmadas. Cuando los dejaban iban al desayuno donde más de una vez Harry terminaba con la cara dentro del cereal y los de Slytherin se burlaban. Los deberes aumentaban en lugar de disminuir pero cerca del final del mes casi los tenía terminados, solo faltándole convertir un gato en una silla, a lo cual le pido a Hermione a Crookshanks para práctica, no ayudo mucho ya que se le lanzaba con las garras por delante cada que lo intentaba pero al final termino siendo una silla preciosa aunque aún le quedaba rastros del pelo naranja de Crookshanks. Lo que lo volvía loco era encontrar un antídoto para que Snape no lo envenenara ya que más de una ocasión había estado evitando tomar cualquier cosa que se viera rara.

Harry justo había terminado todo y se disponía a buscar el antídoto definitivo aunque no durmiera cuando llegaron al vestíbulo encontraron una nota pegada que decía.

"Torneo de los tres magos

Los representantes de Beaxbatons y Durmstrang llegaran a las seis en punto del viernes 30 de octubre. Las clases se interrumpirán una hora antes."

-¡Genial!-grito Harry, mientras Hermione lo miraba con sobresalto -¡Snape no me matara el viernes!-

Todos sus amigos se comenzaron a reír, incluso algunos que estaban cerca de él.

-Si solo falta 2 días- dijo Ron feliz pero no tanto como Harry ya que por fin podía descansar un poco de todo ese trabajo.

-Creen que Cedricc participe-dijo Harry mientras entraban para cenar.-Solo dijo que él es mayor no y parece saber mucho de magia-

-No es idiota. Es un torneo peligroso además de que tendrán un montón de deberes y si entra también tendrá que prepararse para el torneo-dijo Hermione comenzando a comer.-Aunque si participa tiene grandes posibilidades de ser el campeón de Hogwarts-

-Ese, campeón de Hogwarts-dijo Ron algo enfadado-Pero si es un idiota-

-Solo estas molesto porque nos ganaron el año pasado en el quidditch-dijo Hermione-he oído que es un estudiante sobresaliente y es prefecto-.

-¿Perfecto? Solo gusta porque es guapo-dijo Ron mordazmente.

-Perdona, a mí no me gusta el y además no solo me fijo en el físico de la gente. Ronald-dijo Hermione mirándolo con casi ira.

Pero Ron tosió algo así que sonó a "Lockhart" y Hermione le lanzó una mirada aún más amenazante y enseguida volteo a ver a Harry. Solo le sonrío a Hermione en señal de que en ese momento le importaba un comino todo lo demás. Un par de minutos después volvió a sentir la cara golpeando su plato de comida, al parecer la falta de sueño le pasaba la factura y esta no era tan fácil de pagar.

Los siguientes dos días, Harry paso a ser uno de los mejores informados en la clase así como también a el más dormilón durante clases, incluso en la clase de la profesora Mcgonagall en lugar de hacer un encantamiento permutado a un cactus, le dio un par de orejas que se dio cuenta que eran las de Neville, al instante la profesora lo reparo pero le aconsejo que no bostezara en medio de un hechizo y menos que cerrara los ojos mientras apuntaba a su objetivo. Aun así la profesora parecía mirarlo diferente también le hablaba con más cariño aunque solamente a solas ya que frente a todos seguía siendo la subdirectora del colegio.

El día 30 de octubre Harry despertó después de la hora que hacia ejercicio ya que hedwing no estaba presente por enviarle cartas a Sirius y Apahtio. Bajo a la sala común, Hermione lo esperaba vestida como siempre con su túnica del colegio pero él se disculpó y ella solo le dijo que era lógico después de estar tantos días sin dormir bien. Al llegar gran comedor donde encontraron la decoración para la llegada ese día, los cuatro estandartes de cada casa relación esplendorosos en los muros pero eran acompañados por otros dos que supuso Harry eran los de Beaxbatons y de Durmstrang.

A la cabeza de la mesa de los profesores estaba el escudo de la escuela completa, desayunaron mientras Ron, Fred y George aún se preguntaban qué juez seria y si tal vez tenían una posibilidad de entrar, a decir verdad Harry estaba harto de escuchar la misma plática por todo el castillo.

-Y a todo esto, ¿quién juzgara cada prueba?-dijo Harry tratando que dejan la entrada al torneo aparte.

-Bueno los directores de cada colegio forman parte del tribunal y algún enviado del ministerio -dijo Hermione, mientras todos volteaban a verla sorprendidos-por qué los tres resultaron heridos durante el torneo de mil setecientos noventa y dos, cuando se soltó un basilisco que tenían que atrapar los campeones-

Ella advirtió la mirada de todos, y mostro la impaciencia de que solo al parecer ella había leído algo tan básico.

-Toda esta en historia de Hogwarts. Aunque desde luego ese libro ya no es de muy de fiar. Un título más adecuado sería "la historia de Hogwarts censurada". No cuentan lo de -fue interrumpida por Harry.

-Los elfos domésticos ¿verdad?-dijo Harry mirando a su novia mientras se ponía cada vez más roja.-ya lo cambiaremos Hermione todavía nos falta mucho ya tienes a 120 en la p.e.d.d.o., sin contar con los que está convenciendo Dobby, nuestros amigos y nosotros-

Todos miraron a Harry sin comprender excepto Ron, Hermione le sonrío dándole las gracias de apoyarla y recordándose que no todo iba tan mal como ella creía, pero a decir verdad Neville parecía intimidado por la determinación de Hermione y Luna parecía que no tenía idea a lo que se había metido.

Pero antes de que le cayeran un sin fin de preguntas, aparecieron las lechuzas mensajeras.

Harry levanto la vista y vio a hedwing, que volaba hacia él, Hermione y Ron lo miraron nerviosamente pues de seguro traía la contestación de Apahtio y de Sirius.

Hedwing se posó en el hombro de Harry, pego las alas y le dio un picotazo en la cabeza en señal de cansancio, Harry tomo un trozo de tocino que estaba comiendo y se la dio a hedwing el cual la picoteo un par de veces y estiro su pata con pesadez. Desprendió la carta y mientras revisaba que todos estuvieran en su plática del torneo junto con Hermione y Ron la leyeron la primera.

"Querido señor Potter:

Le informo que sobre el caso de Sirius Black, las autoridades ya han leído el testamento y están formando la investigación correspondiente, ya que se dieron cuenta que a su padrino jamás tuvo un juicio justo solo fue encarcelado en cuanto lo atraparon, aun así llevara mucho tiempo para que decidan algo conciso. Aun así aún tiene que declarar su podrido por la muerte de esos 20 muggles en aquel día.

También quisiera decirle que sus pertenencia ya se encuentran en sus bóvedas, solo hace falta veneno de acromantula que al parecer no se ha visto una desde hace años, así que me disculpo por no a completar su pedido.

En el caso de los testamentos de sus padres, estos también ya están sobre averiguación y a lo que han llegado es que fue alguien de Hogwarts ya que ninguna autoridad de ese tiempo tiene idea de porque paso desapercibido, solo queda la autoridad del colegio en juego pero podría ser desde un maestro hasta el mismo Albus Dumbledore director actual de la misma. Y lamentablemente han decidido cerrar el caso por falta de pruebas. Si tuviera alguna información nueva sobre el tema podría ser de utilidad.

Seguiré en contacto con usted.

Atentamente: Su servidor Apahtio"

Harry no estaba del todo convencido por lo de Sirius pero con respecto a lo del testamento de sus padres, supuso que el investigaría con la ayuda de la profesora Mcgonagall, lo que le sorprendió fue que ya tenían todo para el ritual de los horrocruxes solo les faltaba veneno de acromantula, a lo cual Harry miro a Ron ya que tenía la cara desencajada.

-No Harry-dijo alejándose de la carta-Yo no regreso a ver esas cosas aun que quien tu sabes me obligara-

-Iremos nosotros Ron-dijo Hermione viendo la expresión de su amigo-Tal vez podamos llegar a un acuerdo-

-No lo creo-dijo Harry recordando el ataque que sufrió hace 2 años -pero después discutiremos eso veamos que dice la otra carta.

"Mi querido cachorro.

Eso te honra más, El conseguir pruebas de mi inocencia y comenzar a tratar de que yo sea libre me da nuevas esperanzas Harry, así como también saber que estas bien y te aviso que estaré tratando de comunicarme contigo, quisiera verte pero aun así no puedo salir de donde estoy, si no sería fácilmente apresado, he estado oyendo rumores con respecto al torneo de los tres magos, no me da muy buena espina incluso tu padre no quería que se reviviera, ten cuidado. Siempre mantente alerta y de verdad Gracia por todo.

Sirius"

Harry tomo la cartas y las guardo, preguntándose si estaba más preocupado o menos con relación al torneo. Lo que menos le agrado era la idea de ver a Aragón de nuevo pero tenía que conseguir veneno de acromantula a como diera lugar.

-Gracias hedwing-le acaricio el pico y la cabeza, le dio Harry un poco de su jugo de naranja y salió volando directo a la lechuceria.

Aquel día fue un total ambiente de impaciencia. Nadie estuvo muy contento de las clases, pero a Harry le alegro que al fin en clase de trasfiguraciones pudiera convertir un gato en una silla, sin dejarle cola o bigotes en el asiento, aunque al pasar por el salón de Snape este les dijo que pospondría el envenenamiento hasta el otra clase, casi le da un ataque de nervios porque aún no encontraba alguna cura para el veneno de Snape.

Y en clase de defensa contra las artes obscuras, el profesor Moody, le dio a Harry 30 puntos, por salir de inmediato a la maldición imperius, aunque fue porque engaño al profesor Moody aparentando estar hechizado y en la menor oportunidad le quito la varita y lo apunto con la suya.

-¡Alerta permanente!, ¿no?-dijo Harry mientras, el profesor Moody se carcajeaba y le daba puntos extra por su ocurrencia.

Al terminar salieron a la torre de Gryffindor dejaron sus cosas y volvieron al gran comedor.

Los jefes de las casas colocaron a todos en diferentes posiciones para recibir a las escuelas, bajaron al lago para recibir a los invitados, pero al parecer esperarían un poco más y recordó las palabras del señor Waesley, " siempre igual. No podemos resistirnos a la ostentación cada vez que nos juntamos" al parecer tratarían de hacer una entrada espectacular.

-ahí están Harry-dijo Hermione señalando el cielo.

Algo largo, más largo que tal vez cien escobas, se acercó al castillo por el cielo azul, haciéndose cada vez más grande.

-¿es un dragón?-dijo uno de los de primero emocionado.

-No seas idiota... es una casa volante-le dijo otro alumno al parecer de sexto.

Harry al acercarse se dio cuenta de que un carruaje colosal, de color azul pálido y del tamaño de una casa de 4 pisos, iba directo a ellos conducido por un montón de caballos alados de color tostado pero con la crin y la cola blancas, cada uno del tamaño de un elefante.

Las filas delanteras de los alumnos se echaron para atrás cuando el carruaje aterrizo con un golpe sordo y todos los cascos de los caballos golpearon la tierra, algunos incluso gritaron de sorpresa y otros como Neville dieron un paso hacia atrás pisando a un alumno de Slytherin.

Antes de que se abrieran las puertas Harry vio el escudo que era al igual que el del gran comedor un par de varitas cruzadas de color dorado, y de las puntas salían estrellas.

Cuando se abrió la puerta Harry vio a la mujer más grande que avía visto en toda su vida, enseguida las dimensiones del carruaje quedaron explicadas, solo había visto una persona tan grande en toda su vida y ese era Hagrid. Le parecieron exactamente igual de estatura, pero aun así aquella mujer le pareció extrañamente grande, al acercarse más la mujer se dio cuenta de que era muy bonita con un rostro de piel morena, uno ojos cristalinos grandes y negros, y una nariz afilada. Llevaba el pelo recogido en una coleta y un moño reluciente.

Dumbledore salió a su encuentro aplaudiendo, así que todo el mundo imito, y ella le extendió la mano, a lo cual Dumbledore beso pero apenas inclinándose por su estatura.

-¡Mi querida madame Máxime!-dijo -¡Bienvenidos a Hogwarts!-

-'dumbledog'- repuso madame Máxime, con voz profunda-'espego' que este bien-

-En excelente forma, gracias-respondió Dumbledore.

-Mis alumnos.-dijo madame máxime señalando a una docena de alumnos y alumnas, chicos y chicas, todos los cuales parecían hallarse cerca de los veinte años, salían del carruaje tiritando, su ropa parecía muy ligera y además algunos tenían bufandas o gorras de lana pero aun así tiritaban.

-¿ha llegado ya 'kagkagov'?-pregunto madame máxime.

-Lamentablemente no. Desea esperarlo aquí o entrar a calentarse un poco-dijo Dumbledore en tono dulce.

-Lo segundo me 'paguese' -respondió madame máxime-'pego' mis caballos han volado desde muy lejos-

-No se preocupe nuestro maestro de cuidado de criaturas mágicas los atenderá como si fueran de oro-dijo Dumbledore-Aunque ahora está atendiendo una emergencia-

-Con los Escregutos-le susurro Ron a Harry.

-Ya te he Dicho que son amigables-dijo Harry mientras gruñía a su amigo.

-Será contigo y Hermione pero el mío no quiere dejar de explotar cada rato-dijo Ron irritado.

-Es porque no le has puesto demasiada atención y un nombre. Se sienten más identificados con el nombre-dijo mientras callaba a su amigo

-¿Que nombre le puedo poner a una cosa así?-dijo ron

-dígale a ese 'pgofesog haggid' que estos caballos solamente beben whisky de malta 'pugo'-dijo madame máxime a Albus y dirigiéndose al castillo

Después de unos minutos todos tiritaban de frio esperando la llegada de Durmstrang, y sin previo aviso desde el lago salían burbujas que incrementaran su tamaño hasta que las olas que provocaban llegaban a la orilla golpeando violentamente, primer salió un mástil, poco a poco emergió un barco, este parecía años hundido debajo del agua y ahora estaba emergiendo, después de unos minutos el barco paro cerca de la orilla y un ancla golpeo el agua.

A los segundos unos botes se acercaban, todos llevaban grandes capas gruesas de piel, el único que resaltaba era un hombre que tenía una piel de distinto tipo, lisa y plateada como su cabello.

-Dumbledore- grito efusivamente mientras subía la ladera-¿cómo estas, mi viejo compañero, como estas?-

-Estupendamente. Gracias, profesor Karkarov -respondió Dumbledore. Estrechándole la mano a Karkarov.

-El viejo Hogwarts, es bueno estar aquí, es estupendo...Viktor esto es Hogwarts-dijo mientras tomaba a buscador del equipo de Bulgaria.

-¡Harry es Viktor Krum!-dijo Ron mientras subían con la comitiva de Durmstrang-¡Krum, lo ves Harry!

-¡Ron por dios, no es más que solo otro jugador de quidditch!-dijo Hermione irritada ya que parecía un niño viendo un superhéroe.

-¡Nada más un jugador!-dijo Ron sin creer lo que dijo su amiga-¡Es el mejor buscador del mundo Hermione!-

Hermione rodo los ojos y puso una mueca de incredulidad.

Al entrar al gran comedor, se dieron cuenta de que los de Beaxbatons se encontraban en la mesa de Ravenclaw mientras que los de Durmstrang seguían amontonados en la puerta no sabiendo donde sentarse, al final decidió ir a la de Slytherin la cual se mostró feliz de tener a la estrella de quidditch en su mesa.

-¿Por qué tanto alboroto por una persona?-dijo Hermione irritada después de que Ron estuviera todo el rato tratando de convencer a Harry para ir a pedirle un autógrafo incluso ofrecerle dormir en la torre de Gryffindor.

Habiendo entrado a todos los alumnos en el gran comedor y una vez sentados a las mesas de sus respectivas casas, colocados todos los de Durmstrang y Beaxbatons y los profesores. Los tres directores de los colegios se pararon.

- Buenas noches, damas y caballeros, fantasmas y, muy especialmente, buenas noches a nuestros huéspedes-dijo Dumbledore, dirigiendo una sonrisa a los estudiantes extranjeros-es para mí un placer darles la bienvenida a Hogwarts. Deseo que su estancia aquí sea de lo más confortable y placentera, y confió en que así sea.-

Al otro lado una de las chicas de Beaxbatons, que seguía aferrada a la bufanda con la que se tapaba el cuello, profirió una risita despectiva.

-Nadie te obliga a quedarte-susurro Hermione, irritada con ella.

Harry bajo su mano y tomo la de ella tratando de tranquilizar a su novia.

-El torneo quedara oficialmente abierto después del banquete-explico Dumbledore-Ahora los invito a todos a comer, beber y a disfrutar como si estuvieran en su casa-

Se sentaron los tres directores, y Harry vio como empezaba a hablar con Karkarov, para después aparecer como de costumbre, las fuentes que tenían delante se llenaron den comida. Harry nunca había visto tal cantidad de variedad de platos, incluso algunos que jamás hubiera visto.

-¿Qué es esto?-dijo Ron señalando una larga sopera llena de una especie de guiso con marisco que había a lado de un familiar pastel de carne y riñones.

-Bullabesa-repuso Hermione

-Por si acaso, la tuya- dijo Ron oliendo el guiso.

-No seas tonto, es un plato francés-explico Hermione mirándolo con enojo-Lo probé las vacaciones anteriores, es muy rico-

-Te creo sin necesidad de probarla, pero mejor bueno por conocido que malo por conocer- dijo Ron sirviéndose pastel.

-¿Cuándo aprendiste refranes?-dijo harry incrédulo.

-Lo leí cuando fuimos a Londres, en el restaurante, esos muggles se inventan cada cosa-dijo Ron mirándolo sonriente.

-'pegdonad' , ¿no 'quequeis' bouillabaisse?- dijo una alumna de Beaxbatons tenía una larga cortina de pelo rubio plateado que le caía hasta la cintura, los ojos muy azules y los dientes blancos y regulares.

Ron se puso muy colorado, mientras Harry abría un poco la boca, lo cual no le pareció a Hermione ya que le dio un pisotón.

-Puedes llevártela-dijo Harry rápidamente para que Hermione dejara de pisarle con fuerza, y le acerco la sopera.

-¿Habeigs 'tegminado' con ella?- dijo sonriéndole a Harry y el dolor incremento en el pie de Harry.

-Si- repuso Ron sin aliento-Es deliciosa.-

La chica tomo la sopera y se la llevo con cuidado a la mesa de Ravenclaw. Ron seguía mirándola con ojos desorbitados, como si nunca hubiera visto a una chica. Hermione dejo de pisar a Harry pero se encontraba muy roja.

-Es una veela-dijo Ron con aire soñador a Harry mientras el se sobaba el pie.

-Por supuesto que no lo es- repuso Hermione ásperamente- Solo ustedes dos son los únicos que la ven como idiotas-mientras un segundo pisotón le caía a Harry.

-ouch-se quejó, como podía tener tanta fuerza Hermione pensó Harry, así que se acercó a su oído.

-Pero recuerda que yo solo te amo a ti, el que me impresionara no significa nada mione-dijo Harry tratando de controlar el dolor de su pie.

Al aparecer Hermione se tranquilizó aun así le dio un tercer pisotón y le tomo la mano bruscamente a Harry aunque se la apretaba con fuerza.

-En Hogwarts no están tan bien-dijo Ron aun embobado mirando a la chica.

-En Hogwarts están muy bien-respondió Harry, pues en ese momento Hermione le apretó la mano con más fuerza, y terminado su frase Hermione lo miro un poco irritada.

Pasaron unos minutos en los que Hermione no dijo nada y Harry evito ver en cualquier dirección que no fuera su plato de comida, temiendo que su ira le causara daños irreparables a su pie.

-Cuando apartes la vista de tu plato Harry-dijo Hermione- podrías notar quien cava de entrar- el tono no fue tan normal pero le aprecio mejor que recibir otro pisotón.

Vio la mesa de los profesores, junto a madame máxime se encontraba Ludo Bagman y del otro lado a lado del profesor Karkarov, se encontraba Crouch el jefe de Percy de inmediato Harry sintió un pequeño desagrado por Crouch por lo que le hiso a su elfina y además de lo sucedido en el bosque después de la copa de quidditch.

-¿Qué hace ese aquí?-dijo Harry con un tono de enojo.

-Son los que han organizado el torneo de los tres magos, ¿no?-repuso Hermione mirándolo mejor-supongo que querían estar presentes en la inauguración.-

Cuando los postres llegaron, Harry tomo lo que parecía una especie de crema pálida, estaba deliciosa incluso se atrevió a darle un poco a Hermione, la cual lo acepto, aunque él pensó que lo rechazaría por su enojo de lo pasado con la chica de Beaxbatons.

Una vez limpios los platos de oro, Dumbledore se levantó, todos el gran comedor se callaron.

- ha llegado el momento-anuncio Dumbledore, sonriendo a todos- el torneo de los tres magos da comienzo... me gustaría pronunciar algunas palabras para explicar algunas cosas antes de que traigan el cofre... solo para aclarar en qué consiste el procedimiento que vamos a seguir. Pero antes para aquellos que no lo conocen, permítanme presentarle al señor Bartemius Crouch, director del departamento de cooperación mágica internacional.- hubo un asomo de aplauso cortos- y el señor Ludo Bagman, director del departamento de deportes y juegos mágicos-esta vez hubo más aplausos que en la anterior-los señores Bagman y Crouch han trabajado sin descanso durante los últimos meses en los preparativos del torneo-continuo Dumbledore- estarán, con el profesor Karkarov, madame máxime y por supuesto con migo en el tribunal que juzgara los esfuerzos de los campeones.-

A la mención de la palabra campeones, la atención de los alumnos aumento incluso Hermione que hasta ese momento parecía indiferente concentro su atención en Dumbledore, el señor Filch se acercó y entrego a Dumbledore un una gran caja de madera con joyas incrustada.

-Los señores Crouch y Bagman han examinado ya las instrucciones para las pruebas que los campeones tendrán que afrontar-dijo Dumbledore mientras colocaba el cofre en la mesa enfrente de el- y han dispuesto todos los preparativos necesarios para ellas. Habrá 3 pruebas esparcidas por todo el curso escolar, que medirán a los campeones en aspectos diferentes: sus habilidades mágicas, físicas, su valentía, lógica, deducción, y la capacidad de enfrentarse al peligro. Como todos saben, en el torneo compiten tres campeones-continuo Dumbledore con tranquilidad- uno por cada colegio participante. Se apuntara la perfección con que se lleva a cabo cada una de las pruebas, se le dará una serie de puntos dependiendo de esto y el campeón que después de la última prueba tenga más puntaje alzara la copa de los tres magos. Los campeones serán escogidos por un juez imparcial, uno que fue creado para este torneo en especial, tan antiguo y poderoso que solo el más hábil podría engañarla: El cáliz de fuego-

Enseguida golpeo la caja con la varita, esta se abrió y empezó a brotar de ella algo parecido a líquido pero de color metálico, al principio no tenía forma pero después de unos segundos se formó un enorme cáliz que tenía fuego de color blanco lleno hasta el borde.

-Todo el que quiera proponerse para campeón tiene que escribir su nombre y el de su colegio en un trozo de pergamino con letra bien clara y echarlo en el cáliz-explico Dumbledore-los aspirantes a campeones disponen de veinticuatro horas para hacerlo. Mañana, festividad de Halloween, por la noche el cáliz nos devolverá los nombres de los tres campeones a los que considera más dignos de representar a sus colegios. Esta misma noche el cáliz quedara expuesto en el vestíbulo accesible a todos aquellos que quieran competir, para asegurarme de que ningún estudiante menor de edad sucumba a la tentación- prosiguió Dumbledore-trazare una raya alrededor del cáliz de fuego una vez que este colocado en el vestíbulo. No podrá cruzar la línea nadie que no haya cumplido los diecisiete años. Por último, quiero recalcar a todos los que estén pensando en competir que hay más peligro del que se muestra a simple vista, así que cuando el cáliz de fuego haya tomado a alguien como campeón. Él o ella estarán obligados a continuar en el torneo hasta el final. Al echar su nombre en el cáliz estarán firmando un contrato mágico de tipo vinculante. Una vez escogido campeón, no hay vuelta a otras, peligro acechara en su vida, incluso los más capases magos estarán en problemas en el torneo, así que recuerden este torneo no es solo un juego.- Dio una mirada a cada uno del salón y continuo- y como ya es hora de ir a dormir, buenas noches a todos-

-ha una raya de edad- dijo Fred-Seguramente una poción de envejecimiento alcanzara.-

-Pero no creo que nadie menor a diecisiete años tenga alguna posibilidad- objeto Hermione-No hemos aprendido bastante.-

-Habla por ti-dijo George-Tú lo intentaras ¿no Harry?-

Hermione le lanzo una mirada entre sorpresa y miedo, pero Harry solo quería pasar el menor tiempo con problemas bastante tenia buscando un lugar para entrenar la lista de Priscob, los horrocruxes, y los otros 2 anillos de excalibur, para meterse en una estúpida competencia que lo podía matar.

-No, la verdad no me importa-dijo Harry mientras lo miraban sorprendidos

-¿Donde esta Krum?-dijo Ron tratando de saltar para ver mejor, pero su pregunta fue respondida cuando llegaron a la puerta y se encontraron cediéndole el paso.

-Gracias-dijo Karkarov despreocupadamente, echándole una mirada y justo detrás de él estaba Krum el cual paso después vio a Harry, pero lo molesto fue la mirada que le dio a Hermione no era una mirada como la de compañeros él se mostró interesado, pero así como lo mostró se fue.

Pasando la puerta vio un par de alemanas de Durmstrang que cuchicheaban y decían.

-Si es Harry Potter -mientras lo miraban de forma rara, lo cual no le pareció tampoco a Hermione que lo jalo nuevamente con más fuerza.

Al siguiente día como era sábado, lo normal sería que la mayoría de los alumnos bajan tarde a desayunar. Casi todo el colegio se encontraba despierto muy temprano, lo cual dificulto a Harry bajar a continuar su rutina, pero decidió posponerla un día no aria daño.

El gran comedor, se encontraron que la copa estaba situada en medio de las mesas y tenía un círculo de color azul marino flotando en el aire, este por lo menos tenía 3 metros de radio.

Lavender le conto a Ron que todos los de Durmstrang y Beaxbatons ya habían colocado su nombre dentro de la copa temprano, así que solo quedaban los de Hogwarts, Harry solo pensó que si él fuera de la edad jamás lo hubiera metido aunque le dieran otra bóveda de dinero más grande de la que ya tenía, aun así sentía curiosidad de saber qué es lo que pasaría, Se repitió que bastante tenía ya siendo famoso por la Voldemort. Así que solo fue a desayunar junto a Hermione.

Al pasar el rato, aparecieron Fred y George que tenían una pócima de envejecimiento.

-No les funcionara-dijo Hermione viéndolos con enojo.

-¿Por qué no?-Dijeron los gemelos al unísono.

-Esa línea la dibujo Dumbledore-dijo Hermione como si fuera lo más simple del mundo.

-¿Y?-dijeron los gemelos incluso Ron.

-A un mago tan poderoso como Dumbledore no pueden ganarle unos simples niños -contesto bastante divertidos como si hubiera sido un chiste.

-Por eso funcionara, es tan simple que no lo verán venir-dijo Fred y se fueron a lado de la línea.

Se la tomaron y entraron al círculo este, casi por un segundo Harry pensó que lo habían logrado, pero al siguiente salieron expulsados por rayos dorados dejándolos con barbas bastantes largas incluso tan larga como la de Dumbledore, todos se carcajearon ante la situación, pero llego Mcgonagall que les dijo que se fueran a la enfermería junto a Fawcett de Ravenclaw y de Summers de Hufflepuff que habían intentado lo mismo.

Fred y George salieron acompañados de Ron que iba tratando de no carcajearse de sus hermanos, a medio día empezó a decorar el gran comedor para Halloween incluso Harry se puso a estudiar con Hermione pasiones, ya que aún tenían la advertencia de Snape.

Muchos alumnos pasaron a dejar su nombre en la copa, aunque los más celebrados fueron Warrington de Slytherin y Cedricc de Hufflepuff, incluso Angelina que apenas tenía cumplidos años la semana pasada.

-Lástima que no tienes dos años más Hermione-dijo Harry mientras terminaba de releer el libro de pociones-Serias la campeona indiscutiblemente-

-Claro que no Harry-dijo Hermione-Tengo 15 años, pero aunque tuviera 30 no pondría mi nombre aunque me pagaran-

Después de un rato se aburrieron y fueron a ver a Hagrid el cual se mostró contento pero atareado con los caballos de madame máxime, Harry se acercó a uno y con mucha dificultad lo acaricio, el caballo no pereció feliz, pero en cuanto le dio un terrón de asurcar este se volvió loco por Harry, a tal punto que incluso pudo tocarle las alas, algo que Hagrid le dijo que era difícil incluso para un mago experimentado.

Amiji también había crecido bastante tenía casi un metro de ancho y ya llegaba a las rodillas, el jugaba con el lanzándole ramas y el explotándolas, Natsu no se quedaba a tras era listo, estaba con mione realizando algunos puzles que le trajo Hermione y al terminar alguno ella le daba una gran porción de hueva de hormiga que era su favorita aunque con el tamaño que tenían ya no era nada para sus estómagos.

Harry le pregunto a Hagrid porque le quedaban menos Escregutos, pero este se mostró triste diciendo que se mataban entre ellos, lo cual asusto a Harry y Hermione por los suyos, los tranquilizo diciéndole que los suyos eran fuertes y que siempre se apoyaban los dos por si algún otro los atacaba.

Hermione trato de afiliar a Hagrid a la p.e.d.d.o pero este se negó diciendo que eso era lo que los elfos hacían y ninguno le gustaría ser pagado, a lo cual Hermione le conto lo de los elfos que trabajaban para Harry el cual solo asintió sin poder decirle a Hermione que Hagrid no savia nada.

Hagrid entre la sorpresa y el desconcierto, acepto a regañadientes, dejando a Hermione un tanto enojada y tristona.

Cuando regresaban al gran comedor observaron a lo de Durmstrang entrando al gran comedor, y ellos entraron detrás estaba tan abarrotado que se preguntaron si aun había asientos libres, lo cual fue contestado por Ron que los llamo señalando dos lugares en su mesa.

Estos llegaron y se sentaron para no perder el lugar que les aparto Ron, enseguida apareció el boquete de Halloween que les pareció eterno. Quizá porque era el segundo boquete en dos días, Harry no lo disfruto tanto, todos estaban nerviosos por la selección de campeones incluso él y Hermione no aguantaban las ganas por saber quién los representaría.

Por fin los tres directores se pararon, los platos se limpiaron, todos estaban tensos, mientras algunos sonreían de emoción otros simplemente veían a los directores.

-Bien el cáliz ha tomado su decisión-dijo Dumbledore mientras avanzaba a este- de un minuto a otro, cunado diga el nombre de un campeón, les ruego vengan a esta parte del gran comedor, pase por la mesa de los profesores y entre a la sala de alado- indico la puerta que había detrás de su mesa- ahí recibirán sus primeras instrucciones y se aclararan dudas.-

Las luces se atenuaron dejando más viva la del cáliz de fuego el cual daba un toque dramático al evento, de pronto las llamas del cáliz se volvieron color café y empezaron a salir chispas. A continuación broto en el aire una lengua de fuego y arrojo un pedazo de papel de papel el cual Dumbledore lo tomo en el aire.

-El campeón de Durmstrang -leyó con vos alta y clara-será Viktor Krum-

-Era de esperar-grito Ron aplaudiendo, junto con una enorme ovación de casi todo el gran salón. Viktor Krum se levantó de la mesa de Slytherin y fue saludo a los directores y salió por la puerta indicada.

Se apagaron los aplausos incluso los comentarios, cuando la copa volvió a encenderse en un color azul pálido y expulsaba el siguiente pergamino.

-La campeona de Beaxbatons-dijo Dumbledore-es ¡Fleur Delacour!-

La chica que la noche anterior le pido el guiso se levantó y camino como Krum rumbo a los directores y después paso detrás de la puerta, mientras todos gritaban y chiflaban en su dirección, pero Harry solo aplaudió un poco por si Hermione le daba algún ataque de celos, pero parecía indiferente.

El silencio reino nuevamente, pero era tan tenso que casi se podía sentir la respiración de los que estaban en el gran comedor, el fuego se tornó amarillo y expulso el pergamino.

-El campeón de Hogwarts- anuncio Dumbledore con una sonrisa en su boca-es ¡Cedricc Diggory!-

La mesa de Hufflepuff estallo en vítores y gritos, añadiendo unos pocos más de las otras mesas, mientras Cedricc se dirigió a los profesores los saludo y luego se fue por la puerta.

-Estupendo-dijo Dumbledore en voz alta y muy contento cuando se apagaron los aplausos-Bueno ya tenemos a nuestros campeones, le pido a todo el mundo que apoyen en los eventos a cada uno así como...-

El cáliz de fuego se incendió nuevamente con un fuego rojo intenso y algunas llamas doradas que se alzaban hasta el techo y girando de forma estrepitosa, lanzo un pergamino al aire tan alto que todo el mundo quedo esperando unos segundos a que Dumbledore lo tomara, su expresión al leerlo casi le consterno a Harry, después de una larga pausa que todo el mundo considero eterna lo leyó en voz alta. Primero fue un susurro pero él lo hubiera escuchado incluso desde lo más alto de la torre de astronomía.

-Harry Potter-

En ese instante el reloj de la madriguera cambio la manecilla de Harry de 'Escuela' a 'Peligro mortal' sin regresar a su posición original.

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Gracias a cada uno que dio a Favoritos.

Gracias por seguir esta historia, aunque los personajes no sean de mi propiedad y tenga muchas referencias a los libros espero les guste.

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