Primero una pregunta ¿Desean saber que paso en las otras dos audiencias?, si es así déjenmelo en los Reviews.

Segunda Tal vez haga algo en el siguiente capítulo, algo que según la Historia original no se puede y de todas formas tratare de darle sentido.

Por Ultimo sé que muchos esperaban una reacción diferente de Harry pero es lo que me salió al escribir y no se preocupe en la Historia se dirán todo lo que se guardan.

Capítulo 33.- Audiencias

A la siguiente mañana Harry se despertó a las cuatro de la mañana, no por que estuviera nervioso o porque se fueran muy temprano. Su pesadilla lo había despertado como otros días, así que decidió tomar un buen baño, vestirse y bajar a desayunar y así lo hiso. Sin despertar a Ron, salió se dirigió al baño donde paso la siguiente hora duchándose y dejando que el agua lo relajara. Al regresar a su habitación, la señora Weasley había puesto un pantalón negro completamente limpio y sin una ruga, una camisa blanca y bien planchada, una corbata de color rojo y dorado además de un saco. Harry se vistió tranquilamente, al final se calzo los zapatos que parecían recién lustrados, se intentó peinar el cabello hacia atrás, pero este regresaba a su estado común tan rápido que decidió dejo tal cual, metió su varita dentro del saco y se acomodó los anillos pues la corbata le hacía daño. Aun sentía un poco de aprensión a que sus maestros no le hablaran tanto como antes, pero de alguna forma savia que no era algo que ellos quisieran.

Empezó a bajar las escaleras cuando escucho pasos y voces en la parte de abajo Harry vio el reloj que se compró para la estancia antes de bajar a la cocina la cual eran las 5:30. Cando abrió la puerta vio al señor y señora Weasley, Sirius, Lupin y Tonks sentados allí casi como si lo estuvieran esperando. Sirius tenía un aspecto muy similar al de Harry pero su ropa le quedaba más holgada, tenía el cabello bien peinado y la corbata era de un tono azul con plata. Lupin estaba como siempre sonriéndole a Sirius y dándole ánimos, Tonks tenía su traje de auror y el señor Weasley parecía tan normal que Harry se sintió tonto con esa ropa. Aunque la señora Weasley tenía una bata color purpura puesta algo que le quito ese sentimiento.

-buenos días, Harry- bostezo Tonks. Su pelo era rubio y rizado en esta mañana-¿Dormiste bien?-

-Si- mintió Harry.

-Yo he estado levantada toda la noche,-dijo ella, con otro bostezo- Ven siéntate hoy tienes que desayunar-

Harry se sentó junto a ella, no savia si Ron se pararía pronto o se Hermione ya estaba levantada pero no se preocuparía por eso. Así que un desayuno completo le vendiera muy bien.

-¿qué quieres Harry?-le pregunto la señora Weasley-¿gachas?, ¿panecillos?, ¿salmones curados?, ¿tocinos y huevos? O ¿tostadas?-

-Tocinos con huevo, unas cuatro tostadas y si pudiera darme un panecillo, se lo agradecería-dijo Harry relamiéndose ante la idea del desayuno.

-¿dónde te entra tanta comida?-dijo Tonks mirándolo soñolienta.

-No sé, pero es bueno tener algo más que tostadas y agua para desayunar-dijo Harry mirando como la señora Weasley le traía lo que había pedido.

La señora Weasley puso un plato con un montón de tocino, otro con un plato con dos huevos, una cesta de panecillo y en otra tostadas, le paso la mermelada de fresa y durazno. Dejo un vaso limpio y una jarra de jugo de calabaza.

-Es bueno ser joven-dijo Sirius que mantenía una tostada en su mano a medio acabar- llevo media hora intentando acabarme esto-

-Bueno pero es que estas nervioso-dijo Harry llenando dos tostadas con mermelada y dándole un mordisco a un pedazo de tocino-Yo no-

-Una vez que regresemos de las audiencias, pasaremos toda la tarde y el día de mañana libres-dijo el señor Arthur guiñándole un ojo a Harry-verdad Tonks, se me ocurrió que podrías tener un partido de cartas explosivas o probar las nuevas invenciones de los gemelos-

-Genial me encanta sus inventos de tus hijos, aunque tal vez pase toda la primera mañana dormida, me deben demasiadas horas de sueño-dijo Tonks casi irritada.

En ese momento se abrió la puerta, y Hermione entraba llevaba un vestido amarillo que le quedaba hasta las rodillas unas zapatillas muy lindas que combinaban. Tenía el pelo amarrado en una elegante coleta con un pequeño moño del mismo color y si no supiera que era un poco de magia Harry estaría seguro que se había maquillado.

-Bue...nos dais-dijo Hermione mientras parecía tener los ojos cerrado, aunque claramente los tenia entre abiertos.

-buenos días-dijeron los demás, pero Harry le sonrió.

{Buenos días bella durmiente} dijo Harry con dulzura {te ver hermosa hoy mi amor}

-Adulador, estas también muy guapo-dijo Hermione en voz alta se sentó en la silla y abrió lo ojos grandes al darse cuente que todos la miraba-¿qué?-

-¿Quién es adulador?-pregunto Lupin.

{¿Lo dije o lo pensé?}Pregunto Hermione a Harry.

{Lo dijiste, estas aun medio dormida} contesto Harry pasándole un tocino que mordió Hermione y se labio los labios algo avergonzada.

-Lo siento estaba medio dormida-se disculpó Hermione. Todos se veían confundidos no parecían entender por qué le había dicho eso a Harry y menos cuando él no había dicho ni una sola palabra.

-¿quién será la interrogadora esta vez?-dijo Tonks desviando la atención.

-Amelia Bones, Ella es la jefa del departamento de aplicación de ley mágica, interrogara a Sirius, y por ultimo a Harry-dijo el señor Weasley extendiendo un periódico para leer.- Fudge será el interrogador de Ron-

-Es una excelente noticia-dijo Tonks con alegría ya no se veía tan cansada-Es justa, todo saldrá genial-

Harry sonrió tomando un poco de jugo de calabaza, Hermione que tomo un poco más de su tocino, y un panecillo.

-Recuerden no pierdan temple-dijo Lupin mirando a Sirius y luego a Harry-sean cortes y concéntrense en los hechos- Harry asintió con Sirius aunque tenía otros planes.

-La ley está de su lado-dijo la señora Weasley-Este día puede que celebremos varias cosas-

En ese momento la señora Weasley se acercaba con un peine mojado.

-Ya lo he intentado, créame solo será una pérdida de tiempo-dijo Harry terminándose la tostada con mermelada y Hermione tomaba jugo de calabaza del único vaso que había entre ellos dos. Aun así la señora Weasley intento peinarlo con los mismos resultados que el obtuvo su pelo parecía tener mente propia y se desarreglaba en cuanto la señora Weasley le quitaba la vista.

-Deberíamos irnos pronto, es temprano pero más vale ya que tenemos que meter a Sirius-dijo el señor Weasley mirando primero su reloj y luego a su alrededor.- ¿Dónde está Ron?-

-aquí- dijo su voz entrando a la cocina con un aspecto igual al de Harry aunque este tenía una corbata con el símbolo Pendragon-¿Porque tan temprano?, la audiencia comienza a las 12:00 exactamente, apenas darán las 7:00-

-tardaremos en llegar ya verás-dijo el señor Weasley, Ron tomo el plato que tenía la señora Weasley y comenzó a comer rápidamente. Al terminar el, Hermione, Ron, Sirius y el señor Weasley, se pararon.

-Bien los veo en un rato-dijo Tonks sonriéndoles.

-Buena suerte, todo saldrá bien-dijo Lupin dándole unas palmaditas a Sirius.

-Todos te deseamos la mejor suerte-dijo la señora Weasley abrazando a Harry y mirando a los demás.

Hermione cruzo su brazo con el de Harry y le acaricio la palma de la mano, le sonrió firmemente. Subieron la escalera, cuando llegaron a la salida de la puerta, Sirius se trasformó en perro, y el señor Arthur abrió la puerta el aire frio de la mañana le dio de golpe a todos. Harry no podía creer que llevara ya dos semanas en Grimmauld place y ninguna día hubiera salido nuevamente.

-Usted no va caminando al trabajo habitualmente ¿verdad?-le pregunto Harry, mientras todos salían y comenzaba a caminar.

-No, yo generalmente utilizo la red flu o me aparezco cerca en una zona para empleados- continuo el señor Weasley-Aunque llevar a todos por apariciones, sería muy cansado, además de que tengo prohibido aparecer con alguien que no autorizado, eso me metería en muchos problemas-

Mientras caminaban Harry se dio cuenta que Hermione tenía un ligero en la pierna derecha y que en ella se hallaba su varita, en los pantalones Ron también podía observar su varita, el señor Weasley apretaba fuertemente algo dentro de su chaqueta y Sirius veía a todos lados mientras se adelantaba un poco olfateando. Harry sintió como dentro de su saco reposaba su varita aunque si algo pasaba no se detendría a pensar en las consecuencias y atacaría sin dudar. Las calles permanecían desiertas, pero cuando llegaron al subterráneo la encontraron llena con madrugadores viajeros. Siempre que el señor Weasley veía algún aparato muggles se emocionaba bastante. Ron hacia preguntas por todo.

-Simplemente fabuloso-susurro, indicando las máquinas automáticas de boletos- Maravillosamente ingeniosos-

-Está fuera de servicio-dijo Harry, señalando el letrero.

-¿cómo funcionan estas cosas, aparecen como un traslador?-dijo Ron mirando la maquina también curioso.

-No Ron, es atreves de un mecanismo complicado-dijo Hermione que se le subieron los colores al rostro al ver como una trabajadora le echa una mirada de incredulidad.

Harry y Hermione fueron a comprar los boletos al taquillero que parecía más dormido que despierto mientras el señor Weasley se fascinaba con otra cosa muggle. Cinco minutos después abordaron el subterráneo que se dirigía al centro de Londres. En el camino el señor Weasley re comprobaba una y otra vez el mapa de arriba indicando la parada en el centro de Londres.

-cuatro parada más, Harry... ahora faltan tres paradas-decía cada vez que anunciaban la siguiente.

Un señor de aspecto osco y alcalizado paso delante de ellos, mirando intensamente a Hermione la vio de arriba abajo y luego sonrió. Se acercó lentamente mientras Harry se ponía de mal humor.

-linda no... Quisieras estar con un...verdadero hombre-dijo mientras su aliento a alcohol golpeaba la nariz de la chica. Hermione solo apretando con fuerza el brazo de Harry, mientras ambos le mandaban una mirada furiosa. – Deja a este...crio...vamos a divertirnos...tu y yo-dijo hipando por el alcohol, Harry sintió como la sangre le hervía pero Hermione simplemente no le contesto.

-mire señor si no se larga ahora, tendremos muchos problemas-dijo Harry mirándolo fríamente asustando a algunos pasajeros.

-O muy gallito el mocoso este-dijo mirando por primera vez a Harry.

-Harry aquí es la salida-dijo Hermione y se paró jalándolo del brazo pues él se había plantado en su asiento pero el borracho se lo impidió el paso a Hermione, rápidamente Harry se paró frente a ella alejándolo de aquel sujeto.

-¿a donde crees que vas?-dijo soltando todo su aliento a alcohol directo en el rostro de Harry.

Sirius que había permanecido muy tranquilo sentado sobre las patas de perro menando la cola, gruño y ladro mostrando sus afilados colmillos, algunos pasajeros saltaron otros simplemente se alejaron.

-Quieto canuto esto lo arreglo yo-dijo Harry mirando como todos veían la escena. Tenía que evitar a cualquier costa tener problemas pero como siempre los problemas venían a él.

-Por favor déjenos ir o tendré que quitarlo-dijo Harry mirando como Ron y el señor Weasley lo veían sin saber qué hacer.

-Educado el mocoso… y estúpido, deja a este idiota dulzura-dijo mirando a su alrededor como si la gente lo fuera a apoyar.

-usted lo pidió-dijo Harry poniendo su mano sobre el cuello del borracho apretó fuertemente sobre una arteria, enseguida se puso pálido y cayó al suelo pesadamente. Muchos en el bajón comenzaron a aplaudir, otros lo felicitaban algunos más parecían hacer como que no habían visto nada.

-bien echo muchacho-dijeron algunos

-¡Harry!-dijo Hermione casi enojada.

-lo siento, se lo pedí amablemente.-dijo Harry señalando impacientemente al sujeto inconsciente.

-Es mejor que continuemos-dijo el señor Weasley seguramente pensando que podía evitar que Hermione empezara a regáñalo aunque ya lo hacía mentalmente.

Bajaron en una estación en el corazón de Londres, y se alejaron del tren, entre más caminaba más tranquilo se sentía y Hermione se calmaba más. Subieron por las escaleras automáticas, pasaron por las barreras (el señor Weasley quedo encantado de cómo se tragaban su boleto), y emergieron en una amplia calle con edificios de líneas imponentes y ya llena de tráfico.

-¿dónde estamos?-pregunto el señor Weasley volteando a todos lados.

-el centro de Londres-dijeron Harry y Hermione algo exasperados.

-ah sí... por aquí-y los condujo hasta una calle lateral.-lo siento, pero jamás he venido en tren. Es más jamás he ocupado la entrada de visitantes-

Caminaron un largo, pasando de edificios imponentes a unos simples edificios, hasta que llegaron a una calle que contenías cantinas y bares. Harry casi se ríe al ver que poco a poco se adentraban a una zona no muy llamativa él había esperado que el ministerio de magia estuviera en un lugar más impresionante.

- Ya llegamos- declaró el señor Weasley muy contento, señalando hacia una vieja cabina de teléfono roja que tenía como fondo un montón de grafitis- Tendremos que ir de dos por viajes. Primero será Hermione y tu Harry-

Ella abrió la puerta y entro a la cabina de teléfono seguido de Harry, estaban bastante bien y aun así sus cuerpos estaban demasiados juntos, pero ninguno de los dos dijo nada aunque Harry supuso que no le molestaba, estaban frente a frente viéndose. Durante un segundo miro la mirada coqueta de su novia.

-ahora tomen esa cosa que cuelga y presionen los números...seis...dos…. cuatro... otro cuatro y otro dos-dijo el señor Weasley desde afuera Hermione tomo el receptor y se lo coloco en la oreja y comenzó a apretar los números. Mientras el disco giraba zumbando suavemente al regresar a su lugar, una fresca voz femenina sonó dentro de la cabina telefónica; no era del receptor, si no que se escuchaba en toda la cabina.

-bienvenidos al ministerio de magia, indiquen su nombre, ocupación o asunto-dijo la voz

-Harry Potter, audiencia disciplinaria-dijo Hermione claramente-Hermione Granger, audiencia Pendragon-

-Gracias-dijo la voz femenina-Tomen la insignia y colóquense en la ropa-

Se escuchó como algo bajaba por donde generalmente entregaba las monedas, lo recogió; era una placa cuadrada plateada con la inscripción "Harry Potter audiencia disciplinaria" y en la otra "Hermione Granger, audiencia Pendragon". Ayudo a Hermione a engancharse su placa y ella la suya pues se encontraban uno enfrente del otro.

-Visitante del ministerio, se le solicita que se someta a un reconocimiento y presente su varita para registrarla en el mostrador de seguridad que está situada al final de patio- El suelo se estremeció. Se hundían lentamente en la tierra, Harry vio como desaparecía todo mientras bajaban

-Bonita forma de entrar-dijo Hermione acomodándose un poco.

-Ahora veo por qué el señor Weasley me mando contigo-dijo Harry sonriéndole a Hermione.

-¿Así?-dijo Hermione coquetamente.- ¿Por qué?-

-Nadie esta tan cerca de ti a menos que sea yo -dijo Harry acercándose y dándole un beso en el cuello.

-Harry basta-dijo Hermione riéndose-me haces cosquillas-

-Estos también son míos ¿Verdad?-dijo Harry subiendo hasta besar sus labios. Hermione le pasó los brazos por la nuca, hasta que les falto un poco el aire.

-Solo si los tuyo son míos-dijo Hermione haciendo una mirada coqueta.

-Por supuesto amor, tuyos y de nadie más-contesto Harry, una luz ilumino la cabina, y Harry sintió como se detenía la cabina.

-El ministerio de magia le desea un día agradable-concluyo la voz de la mujer.

Enseguida salieron de la cabina, estaban parados en un pasillo extremadamente largo y ancho, era esplendido, con suelos de madera oscura muy pulida. El techo de azul pavo real tenía destellantes símbolos dorados que se movían. En el lado izquierdo había filas de personas esperando llegar a las chimeneas para salir por ellas del lado derecho llegaban personas por las chimeneas. En medio del pasillo había una fuente. Un grupo de estatuas de oro, más grandes que el tamaño natural, colocadas en el centro del estanque circular. La más alta era un mago con la varita alzada apuntando al aire a su lado una bruja muy guapa, alrededor del mago había un centauro, un elfo doméstico y un duende. Los últimos tres miraban con adoración al mago y la bruja.

Harry miro con desprecio la estatua.

-Lo sé, es horrible-dijo Hermione a su lado con la misma mirada.

Atrás de ellos se escucharon las voces del señor Weasley y de Ron, claramente incomodos en la cabina. –Es por aquí-dijo el señor Weasley.

Se unieron a la muchedumbre, donde se abrieron camino entre los trabajadores que llevaban carpetas y otras pilas de pergaminos. Al pasar la fuente Harry vio destellos en el agua y en un cartel que pudo leer: "Todos los ingresos a la fuente de la hermandad mágica serán donados al hospital San Mungo para enfermedades y lesiones mágicas".

- Es aquí- dijo el señor Weasley cuando salieron de la corriente de empleados y se adentraron en una puerta color doradas. Delante de ellos había un escritorio, un nuevo cartel que decía "Seguridad" y un mago mal afeitado con un traje azul pavorreal, levanto la vista y vio a Harry insistentemente.

-Estoy escoltando a los visitantes-dijo el señor Weasley, señalando a los tres.

-Caminen hasta aquí-ordeno el mago su voz sonaba aburrida.

Los tres se aproximaron y el mago tomo una barra de oro larga, delgada y flexible como una antena de coche, y la paso de arriba a abajo a cada uno, desde enfrente hasta atrás. -varitas- gruño el mago de seguridad, Harry y Ron dieron la suyas inmediatamente. Hemiono se levantó un poco la falda y saco la suya.

-¿Porque la tenías ahí?-dijo Ron con cara de incredulidad.

-No es nada cómodo ponerte un vestido y estos no tienen bolsillo-dijo Hermione irritada-Fue la única forma que la podía traer-

El mago metió cada una en un aparato de cobre, que tenía un solo platillo y otro arriba se cerró por un segundo y de una ranura salió un pergamino.

-Once pulgadas, núcleo de pluma de fénix, más de cuatro años de uso. ¿Correcto?-

-Si- contesto Harry impresionado.

-Vid 10, 3/4 de pulgadas, nervio de corazón de dragón-dijo el mago, tomando la de Hermione- más de cuatro años de uso.-

-Correcto-dijo Hermione sonriendo.

El último fue Ron, parecía muy nervioso.

-Sauce 35,5 cm, pelo de cola de unicornio, ¿Dos años de uso?-dijo el Mago alzando una ceja y mirando a Ron.

-Fue un accidente con un sauce boxeador-dijo Ron mirando un poco irritado al mago.

-Sí, con accidente se refiere a que estrello un Ford Anglia modificado para volar en aquel pobre árbol -dijo Harry sonriéndole a su amigo, Ron gruño.

-Yo guardare los datos-declaro el mago, guardando el trozo de pergamino en un cofre de color amarillo- Tomen su varita-

Tomaron las varitas y salieron rápidamente de nuevo al inundando vestíbulo, siguieron caminando hasta entrar a un pasillo mucho más pequeño, había por lo menos veinte ascensores, tomaron el que estaba más lleno de gente.

-¿Todo bien, Arthur?-pregunto un mago cerca de ellos, que tenía una caja de cartón que emitía ásperos ruidos.

-¿Qué tienes ahí, Bob?-pregunto el señor Weasley, mirando la caja.

-No estamos seguros- contesto el mago con seriedad-pensamos que era un gallo común hasta que empezó a respirar fuego. Me parece una clara violación de la prohibición de crianza experimental.-

-¿Seguro que no es un "Basan"?, He leído que el "Basan" es un pájaro muy raro que vivió en los bosques de bambú de las montañas de Ehime, en la isla de Shikkoku. Son completamente nocturnos, así que poco se sabe de su comportamiento. Construyen sus hogares en bosques de bambú, muy lejos de la actividad humana, y su alimentación consiste en madera chamuscada y ascuas; hasta el punto que se les ha avistado merodeando aldeas humanas por la noche para alimentarse de los restos de alguna hoguera o de carbón. – Dijo Hermione rápidamente inspeccionando la caja.

-No tengo ni idea- Dijo Bob tan confundido.

-Me permite-dijo Harry intentando aclarar todo el misterio. El hombre pareció no estar de acuerdo del todo pero le extendió la caja, el abrió un poco la caja y observo a la creatura. Tenía unas plumas de brillantes colores, aunque pequeño parecía ya muy fiero, tenía una cresta muy llamativa pues parecía una lengua de fuego.- En efecto es un Basan, No fue crianza experimental, supongo que encontraron sin querer a una antigua creatura-

-¿Seguro?-Pregunto Bob con clara dudas.

-Revise el tomo "Creaturas o Yokai antiguos de oriente" de Hiyami Yatou-dijo Harry y le entrego la caja.

Harry miro la caja recordando a su vieja amiga, ella si había sido un experimento de crianza pero había sido una creatura increíble a pesar de todo y ¿Qué había ganado? que Voldemort la matara. Su recuerdos viajaron unos segundos desde el cementerio hasta las pesadillas que lo atormentaban, Hermione noto su mirada y solo le apretó con fuerza obligándolo a sonreír para su novia. El ascensor siguió bajando pero en cada parada la gente subía y otra baja, la voz femenina decía cada piso en el que se encontraban y a qué departamento pertenecía. - Nivel Siete, Departamento de Juegos y Deportes Mágicos, incluidos los Cuarteles Generales de las Ligas Británica e Irlandesa de Quidditch, el Club Oficial de Gobstones y la Oficina de Patentes Absurdas.-

-¿Patentes absurdas?-pregunto Hermione.

-Es un lugar donde toda aquella patente de algún objeto mágico que sea inútil o simplemente sirva muy poco, se procesa y se cancela o se permite su venta-dijo el señor Weasley.

-Seguro las galletas de canario de Fred y George entran dentro de lo absurdo-dijo Ron sonriendo mucho.

Siguieron bajando más y más hasta llegar al nivel dos, donde el señor Weasley les indico que salieran, Harry vio como de una de las tantas puertas que estaba abierta vio que luz del sol entraba.

-¿Un encantamiento climático?- pregunto Harry rápidamente.

-O si, les parece aburrido ver tierra por las ventanas-dijo el señor Weasley- los de mantenimiento mágico deciden qué tiempo tendremos. La última vez que pidieron aumento de suelto, tuvimos huracanes azotando las ventanas-

Torcieron los cuatro y atravesaron un par de puestas de roble y apareció una desordenada área abierta dividida en cubículos más pequeños. Entre los cubículos pasaban aviones de papel volando y aterrizaban de diferentes partes, otros rezumbaban por sus cabezas y salían a los elevadores. Siguieron caminando viendo un montón de magos haciendo diversas tareas, a lo lejos se veía a Kingsley, platicaba con una bruja de cabello negro y corto, se podía distinguir su traje elegante con el emblema de Gringotts y al girar un poco la cabeza Harry se percató que tenía los ojos grises pero en uno de ellos tenía un parche, al percatarse de ellos cuatro la bruja solo dijo unas palabras a Kingsley y se fue por otro lado, el auror camino rápidamente a ellos.

-Buenos días, Weasley-saludo Kingsley con mirada inexpresiva- llevo un tiempo queriendo hablar usted ¿tiene un segundo?-

-Sí, si realmente es un segundo, tengo muchísima prisa-replico el señor Wesley pareciendo irritado.

Ron comenzó a abrir la boca pero Harry le dio un codazo en las costillas, seguido de un pisotón de su padre.

-Auch-dijo Ron mirando enojado a Harry.

-¿Algún problema?, jovencito-dijo Kingsley mirando fuertemente a Ron.

-No hay ningún problema-dijo Ron gruñendo.

Siguieron a Kingsley directo a su oficina , al entrar Harry vio que por todas partes se veía la cara de Sirius. Recortes de revista, periódicos, fotos viejas, incluso una donde él era padrino de bodas de sus padres, enseguida quiso quedarse con la imagen se veían sus padres tan jóvenes y radiantes. El único lugar donde no se encontraba su rostro era donde se mostraba un mapa grande del mundo justamente señalando con un círculo mágico donde estaba el Tíbet.

Kingsley al llegar le guiño un ojo a Harry cerró la puerta y dijo algo que relajo el ambiente -Canuto esta en tu oficina- El señor Weasley y el Auror se vieron por primera vez directamente a la cara y ambos se sonrieron.-Tonks llego hace un momento debe estar en su oficina, ira a recogerlo antes de la audiencia, está lista para trasportarlo.-

El señor Weasley también bajo la voz-Gracias, si todo sale bien salte antes de las siete, Molly está haciendo albóndigas y si Las audiencias son un éxito estoy seguro que nos deleitara con otros mangares-

-No puedo esperar-dijo Kingsley pareciendo emocionado- Me encanta lo que cocina Molly-

-¿Llego el defensor de Sirius?-Pregunto Harry.

-O si, aquella bruja con la que hablaba hace un momento su nombre es Tamara HallWhite enviada del Gringotss no parecia muy contenta de que la enviaran a defenderlo pero bueno supongo que le ira bien a Sirius-Dijo Kingsley antes de que Harry preguntara su preocupación el auror continuo-Ya tenemos listo todo por si algo sale mal y tiene que huir-

-Gracias por todo, la Familia Potter siempre se lo deberá-dijo Harry tranquilamente e hiso una inclinación.

-Que va muchacho, nosotros te debemos mucho más a ti-dijo Kingsley algo nervioso y aun con su tez noto que se sonrojaba.

Enseguida salieron no sin antes aparentar una pequeña discusión entre ambos adultos, caminaron hasta llegar al fin de los cubículos donde había un pasillo algo estrecho, llegaron una desviación tomaron a la izquierda y luego a la derecha donde se hallaba una pequeña puerta, la cruzaron y encontraron una habitación que era apenas más grande que un armario de escobas. Con dos escritorios adentro y apenas había ahí una silla, tenía una columna de papeles que casi tocaba el techo y en la repisa descansaba los hobbies del señor Weasley, tenía un montón de artefacto de automóviles; baterías viejas, volantes, luces, un pedal algo torcido, y lo que parecía ser una caja de cambios, incluso un diagrama perfecto de una bujía.

Las fotos de todos sus hijos y su esposa estaban sobre su escritorio cada una haciendo un ademan diferente mientras la señora Weasley le mandaba un beso, Ginny se sonrojaba y se tapaba un poco la cara, Fred y George ambos en la misma foto riéndose y sacando algo parecido a un montón de explosivos, Charlie se mostraba más joven sin tanto musculo, claramente sin cicatrices sonriendo y cruzando los brazos como usualmente hacía, Bill estaba sentado y ponía las manos en la nuca mientras alzaba las cejas, Percy se mostraba leyendo miraba un segundo y regresaba la vista a su libro por ultimo Ron era un par de años menor se encontraba jugando con lo que parecía una pelotita que daba saltos . Enseguida Sirius les sonrió desde detrás de la pila de papeleo.

-Bonito lugar, es muy cómodo -dijo Sirius sonriéndoles.

-¿Verdad que si?, aunque no tiene ventanas-comento el señor Weasley sonrojándose un poco.

-No importa, es muy linda Señor Weasley-dijo Hermione que veía entusiasmada viendo unos papeles encima de su escritorio.

-¿Retretes regurgitadores?-pregunto Sirius casi entre risas agitando un papel.

-Unos bromistas han estado jugando con los muggles, se la pasan encantado retretes para que cuando ellos tiren de la cadena y en lugar de que desaparezca todo...bien, ya se imaginan. Los pobres se ven precisando a llamar a los plumeros, creo que así se llaman, tu sabes, esos que arreglan las cañerías y esas cosas-Explico el señor Weasley frunciendo el entrecejo y mirando a Harry luego a Hermione para verificar su había dicho todo bien.

-Se llaman plomeros-corrigió Hermione gentilmente.

-Perdón , por supuesto los plu...plomeros no saben que lo causa hemos enviado a un grupo para que arregle todo el estropicio e intente detener a los detractoras-dijo el señor Weasley, cruzando veloz mente apareció un avión que termino en mano del señor Weasley, miro su reloj y soltó un gruñido.

-Ron y Hermione, La audiencia comienza en 15 minutos, ahí que irnos-dijo el señor Weasley .

-¿Tan temprano?-pregunto Ron nervioso.

-han cambiado la hora de las audiencias para que la audiencia de Harry se acomode- Dijo el señor Weasley tomando un par de papeles de su escritorio.

-Entonces regreso Sirius-dijo Harry pero el Señor Weasley lo paro con la mano.

-No Harry, como estas bajo escrutinio no puedes asistir a las demás audiencias-Continuo el Señor Weasley tomando a Ron por el brazo- Lo siento pero tundras que esperar a después de tu audiencia.-

-Bien-dijo Harry suspirando pesadamente lo sabía solo esperaba salirse con la suya.

-Bien entonces nos vemos chicos-dijo Sirius también lucia nervioso.

-Recuerden, vendrá Tonks por Sirius-dijo el señor Weasley, dirigiendo a su hijo y Hermione a la salida.

{Te contare todo lo que pase}dijo Hermione claramente antes de salir.

La siguiente media hora estuvo platicando con Sirius de cómo comportarse y le entrego copias de los documentos que entregaría tanto de los testamentos de sus padres como de los sellos de valides de Gringotts además de una botella pequeña y de color negro.

-Por si las cosa si no te creen-dijo Harry al ver la expresión de Sirius.

-¿Dónde conseguiste Veritacerum?- pregunto su padrino incrédulo.

-Esta se la robe a Cedricc, pero a él se la dio Barty Crouch jr para dársela a Cho y revelar donde estaba Pendragon-dijo Harry sin prestar mucha atención la expresión de incredulidad de Sirius, veía el papeleo del señor Weasley no era muy difícil pero si era una labor muy larga.

-¿Crees que me exoneren de todo?-pregunto Sirius poniéndose totalmente serio.

-Por supuesto-dijo Harry por último, su padrino solo vio la botella y los papeles un buen rato sin siquiera moverse.

Hermione le pasaba algunas palabras mentalmente como {todo va mal, Ron se ha puesto nervioso}, {Nos tienen contra las cuerdas, Ron ha metido a la pata}, {No podremos contratacar, otra vez nos han dicho que somos muy jóvenes}.Después de un rato termino diciéndole {Han dado el fallo, perdimos el caso. Pendragon ha sido cerrado}

Después de unos minutos tocaron la puerta.

-Soy yo Tonks-dijo la aurora mientras Harry abría la puerta-Es hora de irnos Sirius- Entro con su uniforme y luciendo un cabello totalmente negro con ojos cafés, dándole un toque muy normal para la sorpresa de Harry.

-Te veo al rato Harry-dijo Sirius despidiéndose y abrazándolo fuertemente-Gracias por darme esta oportunidad-

-Esta oportunidad te la debe el destino-dijo Harry dándole unas palmaditas.- La siguiente vez que te vea serás un hombre libre, te lo juro-

-Canuto, se nos hace tarde-dijo Tonks mirando por la puerta-Es ahora o nunca-

Sirius tomo su forma de perro meneo la cola y desapareció por la puerta.

-Te veo en la noche Harry, Ya me imagino el banquete que darán-dijo Tonks guiñándole un ojo y saliendo por la puerta dejándolo solo.

Los minutos pasaban y de algún modo sabía que todo saldría bien aunque se aburría y empezó a revisar varios documentos del señor Weasley, sin darse cuenta tomo una pluma y un tintero, lleno algunos papeles con indicaciones. Otros eran informes, leía el caso y llenaba el informe rápidamente, ponía indicaciones y seguía con el siguiente papel sin darse cuenta que avanzaba rápidamente, los siguiente hora paso rápido estaba metido de lleno en el trabajo. {¿Cómo va todo por allá?} Dijo Harry saliendo del trabajo que hacía.

{Estamos esperando afuera de la sala, Sirius está adentro hubo mucho escalando al principio, incluso pararon para revisar que Sirius no traía varita pero parece que las cosas van mejor} dijo Hermione su voz parecía algo rara.

{¿Por qué suenas así?} Pregunto Harry rápidamente al escuchar su voz.

{Es Dumbledore acaba de llegar esta muy molesto}Dijo Hermione sonando algo irritada.

{Infórmame si algo sale mal} dijo Harry rápidamente.

El silencio siguió por lo cual continuo su labor, pasaron muchos minutos en los cuales solo se perdía en la pila de papeles, la pluma y la tinta.

-¿Harry que haces?-dijo la voz del señor Weasley de repente.

Harry alzando la vista y vio al Hombre muy pálido mirando que la pila de papeles había bajado la mitad y estaba puesta en diferentes pilas cada una dependiendo de que fuera.

-Harry es mi trabajo, no deberías estar haciendo eso-dijo el señor Weasley su voz sonaba algo espantada, tomo los papeles que Harry había llenado.

-Lo siento estaba aburrido y bueno solo quería leer algo, una cosa me llevo a otra y… de verdad lo siento-dijo Harry rápidamente dejando la pluma y parándose del lugar del señor Weasley.

-¿Lo has llenado tú?-dijo el señor Weasley con tono de sorpresa.

-Si-dijo Harry sintiendo que había metido la pata, aunque supiera lo que hacía no era trabajo suyo nadie le dio permiso de tocarlo-lo siento de verdad-

-Esto me ahorro mucho trabajo-dijo el señor Weasley sonriendo-Está muy bien llenado, creo que has incluso solucionado este caso que me había llevado un par de meses, ¿Cómo?...pero de que hablo tenemos que irnos ahora, tu audiencia comienza en 10 minutos-

-¿Cómo salió el caso de Sirius?-pregunto Harry rápidamente mientras salían.

-Ni idea yo no estaba ahí, además de que no podían verme cerca de el-dijo el señor Weasley algo agitado, se veía que llevaba demasiado tiempo pasando de un lugar a otro.

El señor Weasley entro al ascensor apretujándose con los demás Harry lo siguió hasta apretujarse entre una señora rechoncha y un mago muy nervioso, en el tablero donde deberían ir números observaban botones de diferentes formas y colores, algunos con alguna runa encima o como otros con letras raras.

-Las salas del tribunal a donde vamos no se han usado en años-comento el señor Weasley enojado y apretando un botón-no entiendo por qué están habiendo tu audiencia allí abajo...a menos que...pero no creo...-

El ascensor empezó a bajar poco a poco, las paradas se hacían continuamente, bajando magos y brujas, poco a poco quedo el ascensor casi vacío pero parecía que seguían bajando mucho más, se preguntó si era incluso más profundo que el mismo Gringotts, hasta que las puertas se abrieron y ambos echaron a caminar rápidamente por un pasillo que era muy diferente a todos los demás sin ventanas con dos puertas, una negra con un picaporte blanco, la otra blanca con una pequeña ventanita. Pensó que pasaría por alguna de las dos pero fue arrastrado hacia la izquierda por el señor Weasley, donde las escalinatas estaban dirigiéndose hacia abajo, Llegaron al fondo y aun tuvieron que correr por otro pasillo que tenía un gran parecido con el que llevaba el calabozo de Snape en Hogwarts, con paredes de piedra ásperas y antorchas en anaqueles. Las puertas que pasaban eran de madera gruesa con cerrojos y cerraduras de hierro, en algunas se podía observar daños considerables.

-La sal de tribunal diez, hay te esperan todos.-dijo el señor Weasley parándose ante la puerta con un número diez pequeñito sobre la puerta.

- ¿Dónde están Hermione, Ron y Sirius?-dijo Harry volteando a ver a todos lados.-Esperaba ver a ambos-

-Sus salas de tribunal están arriba -dijo el señor Weasley sonriendo-Buena suerte-

Harry dio un largo suspiro antes de entrar por la puerta era una larga mazmorra en la que había entrado, le era horriblemente familiar, no solo la había visto antes, la recordaba vívidamente de sus pesadillas pues era el lugar que habían apresado a Barty Crouch jr dentro de los recuerdos del señor Crouch. Las paredes estaban hechas de piedra oscura, débilmente iluminada por antorchas. Encima de su cabeza en gradas Había muchas figuras oscuras, Hablando en voz baja pero cuando la pesada puerta se cerró detrás de Harry todos guardaron un profundo silencio.

Una fría voz masculina sonó atreves de la sala-Señor Potter un placer que nos acompañe hoy-

-Es un gusto estar aquí con ustedes-dijo Harry sonriendo-Aunque preferiría estar en otras condiciones-

-Eso no es la culpa del Wizengamot-dijo una voz conocida- Se te requiere aquí por faltas a la ley mágica. Toma asiento.-

Harry vio una silla que se encontraba en el centro de la habitación, cuyos brazos tenían cadenas. Se preguntó si en la audiencia de Sirius habían utilizado unas parecidas. Camino decididamente hacia ellas sus pasos hicieron eco. Cuando se sentó en la silla, las cadenas tintinearon, Había aproximadamente 50 de ellos sentados en los bancos superiores, todos, por lo que podía ver vestían ropas color ciruela con una W bordada en plata y la mayoría con expresiones austeras a otros no podía observaban bien sus rostros pero años en Hogwarts le decía que eran variadas desde asombro, miedo, irritados y algunos más curioso. En el centro de la fila, estaba Cornelius Fudge, el ministro de magia, una bruja de mandíbula cuadrada con el pelo gris muy corto se sentaba a la izquierda de él; tenía un monóculo y mirada imponente. A la derecha de Fudge otra bruja, pero estaba sentada muy atrás del banco y su rostro quedaba en la sombra, aunque por su presencia mágica Harry sabía que no era alguien confiable mucho menos amigable.

-Muy bien-dijo Fudge sonando alegre- El acusado está presente. Podemos empezar ¿Estás preparado?-

-Siempre-dijo la voz que Harry conocía bien. Percy, estaba sentado al final del banco. Harry miro a Percy, buscando alguna señal de complicidad, enseguida vio un pequeño brillo en los ojos del pelirrojo que desapareció tan pronto como lo vio. Este lo miro con furia intentando darle algunos puntos con Fudge y supo que había funcionado pues el ministro sonrió con mucha amplitud.

-Audiencia disciplinaria del 12 de agosto-dijo Fudge con voz tintineante-Dentro del comité de delitos del decreto para la moderada limitación de la brujería en menores de edad y de la confederación internacional del estatuto del secreto de brujos para Harry Potter, residente del número 4 de Privet Drive, Little Whinging, Surrey. Interrogan: Cornelius Oswald Fudge, ministro de magia; Amelia Sussan Bones, directora del departamento de cumplimiento de la magia; Dolores Jane Umbridge, viceministra y copista del tribunal, Percy Ignatius Weasley...-

-¿De verdad se llama Oswald?-pregunto Harry con auténtica sorpresa.

-El acusado debe guardar silencio-dilo la bruja que estaba al otro lado de Fudge oculta por la sombras, a la que llamaron Umbridge.

-Valla que humor, seguro es soltera y sin novio-dijo Harry sentándose y cruzando los brazos, algunas débiles risas se escucharon.

-Que guardes silencio-dijo la voz chillona de Umbridge enojada. Entonces Harry lo supo no le caía nada bien aquella bruja.

-Como testigo para la defensa, Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore-dijo una voz tranquila detrás de Harry, que giro la cabeza casi instantáneamente y vio al profesor Dumbledore que se mantenía sentado en una silla alejada y veía a Fudge. Harry se paró de golpe sorprendiendo a todos, su magia comenzaba a salir de su cuerpo dando un ambiente feroz, tenía mucho que decirle al director y otras tantas para gritarle pero suspiro largamente hasta que se calmó, no era momento ni el lugar de todo lo que le gritaría al viejo anciano.

-No necesito su ayuda, ¿Qué no le quedo claro?-dijo Harry mirando al profesor que tenía una túnica color azul y su rostro parecía estar en calmado, si no fuera por la capacidad de detectar magia Harry no hubiera notado el sobresalto y preocupación del profesor, sin en cambió se paró y comenzó a caminar a Harry.-Le recuerdo que ahora estoy emancipado y puedo defenderme, como un miembro más de Wizengamot -Una carcajada salió de boca de algún mago Harry dejo su vista del profesor y vio a Fudge.

-Si bueno con respecto a eso nadie aquí aun lo ve como parte del Wizengamot y además de que….-comenzó Fudge.

- Aun así estoy emancipado, al menos de una forma soy un adulto y aunque en su estupidez no lo vea, a mí no me importa-dijo Harry amenazadoramente y lanzando la feroz magia en dirección de Fudge que palideció.

Al segundo enmudecieron todos pues el ambiente se había vuelto pesado apenas y podían quitar la mirada de Harry, eran como presas esperando que un depredador hiciera el primer movimiento.

-Si el acusado no mantiene la boca cerrada. Se dará el fallo en su contra-dijo la mujer en las sombras sin ver a Harry más bien veía a Dumbledore.

-No crean que soy tonto o estúpido como alguien en esta sala, un fallo no se puede dar sin escuchar al acusado y menos sin pruebas, si solo quiere meterme miedo le informo que no le temo a nadie en esta sala-dijo Harry mientras todos lo miraban con curiosidad, pero sus ojos regresaron a Dumbledore el cual evitaba su mirada a toda costa-Y como verán estoy preparado por lo cual exijo el derecho de autodefensa, como el caso de Bramted Sing, del año 1850, el cual no tubo defensor por desfavorables circunstancias y el mismo estuvo que auto representarse- todos lo miraron incluso Dumbledore pareció sorprendido.

Los miembros del wizengamot se quedaron mudos. Todos los ojos estaban ahora clavados en Dumbledore. Algunos miradas insistentes, otros simplemente helados en sus asientos. Harry quito su mirada de Dumbledore, no le importaba aquel anciano en ese momento, lo principal era salir ahí con su varita completa y después tal vez partirle una pierna.

-¿Qué?-dijo Fudge, miraba a Harry completamente desconcertado- Señor Potter, es imposible que se defienda usted mismo, si es que ya tienes a Dumbledore como defensor-

-Bueno, en el caso contra MacGrein, del año 1965 si no me equivoco. Tuvo dos defensores-dijo el profesor Dumbledore son su voz neutra y aun así Harry noto un tono de alivio en su voz.-Quien precedió el juicio y acepto los defensores fue usted o ¿Me equivoco?-

-Sí, bien supongo que podemos aceptar-dijo Fudge después de unos segundos-otra silla por favor Weasley-

-No se preocupe-dijo Dumbledore amablemente, saco su varita, hizo un remolino con la mano y la silla en la que estuvo sentado se acercó y se colocó a un meto de Harry, Dumbledore se sentó y puso las puntas de sus dedos junta y miro Fudge.

-Yo llevare toda mi defensa, no intervenga a menos que sea requerido-dijo Harry a Dumbledore como orden Dumbledore no dijo nada, pero Harry sintió su tencion.

El wizengamot quedo mudo y nadie decía nada, cuando Fudge hablo otra vez parecía calmarse.

-Bien-dijo Fudge, barajeo todas su notas que tenía en las manos- Bien entonces, pues... los cargos contra el acusado son los siguientes: Utilización deliberada de magia y con plena conciencia de la ilegalidad de su acción, habiendo recibido un escrito previo del ministerio de magia por un cargo similar, formulo el hechizo patronus en un área habitada por muggles en presencia de un muggle, el 25 de julio a las 9 horas con 23 minutos de la noche, es un delito registrado en el artículo tercero del decreto para la moderación de la brujería a menores de edad, 1875, así como la sección decimotercera de la confederación internacional del estatuto del secreto de brujos. ¿Eres tu Harry James Potter, del número 4 de Privet Drive, Little Whinging, Surrey?-tomos miraron a Harry.

-Si la cicatriz no los convence, puedo mostrarles un lunar que tengo en mi trasero-dijo Harry Tranquilamente.

-Conteste correctamente, no estamos para sus tonterías-dijo Fudge que realmente apretaba los labios.

-Yo he contestado correctamente, y la verdad no me agradaría bajarle los pantalones enfrente del todo el Wizengamot por lo cual tendrá que conformarse con la cicatriz- dijo Harry con tono aburrido.

-Usted es Harry Potter ¿sí o no?-pregunto Umbridge que seguía oculta por la sombra se inclinó y Harry pudo verla. Pensó que era bastante encogida, tenía una ancha y flácida cara, un pequeño cuello semejante al de Vernon y una gran boca. Sus ojos eran grandes, redondos y ligeramente saltones. Incluso tenía el pequeño lazo negro de terciopelo que llevaba en lo alto de su pelo corto a Harry le recobraba a una mosca que estuviera a punto de ser comida por una legua pegajosa. La bruja halo con voz agitada ya aguda, como de niña pequeña la voz chillona aunque Harry al principio pensó que croaría.

-Por supuesto que soy Harry Potter-Respondió revisándose las uñas como si fuera más importante que estar en frente del mismo ministro y todo el Wizengamot

-¿Recibiste un aviso oficial del ministerio por usar magia ilegal hace tres años?, ¿As así?-Continuo Fudge.

-No-dijo Harry indiferente.

-¿No?-dijeron muchos sorprendidos.

-No recibí un aviso, recibí un vociferador-dijo Harry que tenía ganas de carcajearse-Además yo no hice la magia-

-¿convocaste un patronus en la noche del 2 agosto?-pregunto Fudge molesto.

-¿Patronus?, yo lo describirá como hechizo de defensa contra algo que me quiera chupar el alma-dijo Harry algunos se rieron sin importarles las miradas que les dirigía el ministro y la buja de la voz chillona.

-Se le ha dicho en varias ocasiones que conteste correctamente-dijo Umbridge su voz chillona desesperaba a Harry.

-y le he dicho varias ocasiones que no me importa pero si lo convoque-dijo Harry tranquilamente

-¿Sabiendo que no te estaba permitido hacer magia fuera de la escuela mientras tuvieras menos de 17 años?-Pregunto Fudge apretando sus notas con fuerza.

-Solo tenía una noción-dijo Harry viendo que empezaba a ver los magos irritados un poco más animados.

-¿Sabiendo que estabas en un área repleta de muggles?-continúo Fudge.

-No estaba repleta de muggles-dijo Harry tranquilamente.

-¿entonces esa área es de magos?-dijo Fudge con voz sarcástica.

-Bueno si por repleta se refiera a dos simples personas, Diría que en esta sala estábamos con sobrepoblación.-dijo Harry con voz elocuente y muchos se rieron.

-Conteste bien-Chillo nuevamente Umbridge más furiosa.

-Repito que contestare lo que a mí me plazca-dijo Harry mirando como Dumbledore parecía inquieto con sus contestaciones pero no estaba dispuesto a complacer a nadie.- pero esta vez contestare completamente bien, tienen razón estaba en un callejón donde muy pocos pasan y solo estaba mi primo y yo- dando una explicación concreta ya que Fudge solo le hacía preguntas de sí o no.

-Admites que estabas cerca de un muggle común es ese momento-dijo Fudge apuntándolo con un dedo.

-No- dijo Harry rápidamente, los ojos se abrieron de Fudge apretó tanto las notas que las arrugo.

-¿no?-repitió Fudge con enojo.

-No era un muggle común y corriente, era mi primo y el ya savia que yo era mago desde hacía 5 años-dijo Harry y Dumbledore se le perfilo una sonrisa por su boca, quería quitársela ya sea a gritos o a golpes pero esperaría un poco más.- Así que el que viera una energía plateada con forma de dragón saliendo de mi varita era algo que….-

La bruja con el monóculo le corto con un estallido de voz.

-¿Hiciste un patronus completo?-Pregunto Amelia Bones que había estado muy callada solo mirándolo.

-Por supuesto-dijo Harry sonriéndole a la bruja-¿Porque lo pregunta?-

-¿Un patronus corpóreo?-preguntaron otras voces- Con forma animal-

-Sí, mi patronus tiene forma corpórea aunque al principio era un ciervo pero ahora es un dragón-dijo Harry recordando porque su patronus había cambiado y sonrió verdaderamente.

-¿Al principio?, ¿Has hecho más de una vez el patronus corpóreo?-dijo Madame Bones sorprendida aún más fue tan rápido que Fudge se quedó con la boca abierta apenas intentando decir algo.

-Precisamente Madame- dijo Harry con voz dulce, pues estaba feliz de que alguien más se interesara en su patronus era parte de su estrategia- En tercer curso lo tuve que aprender ya que los dementores que rondaban el colegio me perseguían mucho, incluso me caí de la escoba en un partido de quidditch-

-Tenías 13 años ¿no?, ¿Cuánto tiempo tardaste en hacerlo corpóreo?-dijo otro brujo sorprendido.

-Mi edad exacta era 13 años y algunos meses -dijo Harry firme.-menos de medio año.-

-Impresionante-dijo madame Bones mirándolo con interés-Un verdadero patronus a esa edad... es muy impresionante-

-Y hubiera visto como participo en el torneo el año pasado fue el mejor de todos, logre ver las dos primeras pruebas-dijo un brujo casi con alegría.- lo de los dragones me quito el aliento más de una vez-

Magos y brujas murmuraban, algunos parecían sorprendidos otros que habían estado muy callados comenzaron a hablar entre ellos.

-La cuestión no es si es un mago impresionante-dijo Fudge con voz irritada-de hecho, lo más impresionante es lo temerario que fue en Little Whinging ¿Pues el joven lo hizo a plena vista de un muggle?-

-Lo hice por protección de mi primo además de por supuesto de auto defensa de los dementores que aparecieron en dicha locación-dijo Harry fuertemente, antes de que alguien más hablara.

Esperaba silencio, pero este fue un silencio sepulcral, ni las respiraciones se escuchaban.

-¿Dementores?-dijo Madame Bones después de un momento con sus ojos marrones mirándolo-¿Qué quieres decir, chico?-

-Quiero decir que había más de dos dementores en el callejón y fueron a atacarme y de paso mi primo quedo en medio de todo el asunto, aunque no tenía nada que ver -dijo Harry con un tono neutro en respuesta a la mirada.

-Ah-dijo Fudge, con una sonrisa complacida mientras miraba a todo el Wizengamot, como si fuera una broma-sí, sí, creo que eso ya hemos oído algo como eso-

-¿Dementores en Little Whinging?-dijo madame Bones sorprendida-No lo entiendo-

-¿de verdad, Amelia?-dijo Fudge, aun con su sonrisa- déjame que te explique. Él ha estado pensando mucho y se dio cuenta que los dementores son una buena excusa, muy buena en efecto. Los muggles no pueden ver a los dementores ¿verdad chico? muy conveniente, muy conveniente... pero es su palabra y no tiene testigos...-

-En primer lugar, yo no estuve pensando en ninguna excusa ya que no la necesito porque eso sucedió realmente. Y en segundo, no es necesario que los vean los muggles el sentimiento y la conmoción que crean es igual sean magos, muggles, creatura mágica o lo que sea usted ministro-dijo Harry irritado, muchos soltaron gemidos de asombro alguna que otra bruja se tapó la boca en el intento de no reír y solo uno se rio abiertamente. Harry lo miro bien Había mechones grises en su melena de pelo rojizo y sus pobladas cejas, tenía ojos amarillentos penetrantes detrás de un par de gafas de montura metálica y una cierta gracia a pesar de que caminaba con una leve cojera. Hubo una impresión inmediata de astucia y tenacidad.

-Rufus guarda compostura-dijo Fudge irritado, pero el mago solo miro a Harry con una sonrisa y no presto atención a Fudge. EL cual tenía una mirada de enojo por un segundo los magos se vieron y estuvo seguro que se retaban con la mirada, para después regresar la vista- Ciento interrumpirte pero eso cualquiera lo sabe-

-¿Podrías explicarnos a detalle que fue lo que paso?-dijo madame Bones sin mirar a Fudge que pareció casi mirarla con ira.

-Todo se oscureció como si cada luz del planeta se hubiera apagada, luego el sonido de las casas y personas también se silenciaron, se sintió frio como si fuera un invierno muy crudo, el miedo embargo cada poro de mi cuerpo y los vi estaban enfrente de mi con sus túnicas mugrosas, su bocas sin dientes, y su aliento pútrido como las alcantarillas-dijo Harry seriamente el simple recuerdo le helo la sangre- y...-

-o cállate-dijo Fudge todos lo voltearon a ver-esa historia está muy bien ensayada-

Dumbledore se aclaró la garganta por primera vez. El wizengamot guardo silencio y Harry esperaba que fuera algo bueno si no le cerraría la boca por el resto de la audiencia.

-Realmente hay otro testigo presencial de los dementores-dijo Dumbledore tranquilamente-bueno otro parte de Dudley Dursley, quiero decir-

La cara de Fudge se puso pálida y sombría como si hubieran traído al mismo Dementor que había atacado a Harry.

-No tenemos tiempo para tonterías Dumbledore, lo siento pero quiero acabar con esto antes. Las dos anteriores audiencias fueron cansadas.-dijo Fudge haciendo mueca de enojo.

-¿Qué paso con mi padrino?-dijo Harry sin pensarlo mucho.

-¿Hablas de Sirius Black?-dijo uno de los magos-¿Es tu padrino?-

-De quien más-dijo Harry como si fuera lo más obvio del mundo- él fue el mejor amigo de mi padre, es mi padrino y mi amigo también– se sintió orgulloso de poder llamarlo así enfrente de todos.

-Las pruebas que presento, el hecho de que diera declaración con veritacerum y el que Gringotts lo respalde no nos dejaron dudas a muchos de aquí presentes, Es libre de todo cargo y tendrá que pagar una multa de mil galeones por escapar de azkaban y estar prófugo por dos años, además de otra multa de 500 sicklet ser un animago no registrado-dijo Amelia Bones rápidamente.

-Amelia esa información es clasificada-dijo Umbridge alarmada.

-Lo que significa que mañana estará en el profeta a primera hora y de todas formas saliendo de esta sala me enterare inmediatamente por la boca de mi Padrino, así que si no es mucha molestia Dolores, Cállese -dijo Harry sonriendo como si hubiera ganado ya la audiencia. Umbridge con la cara roja y los ojos mucho más saltones abrió la boca.

-Bueno ya, a lo que estamos-dijo Fudge antes que Umbridge, está verdaderamente rojo y enojado-lo ciento Dumbledore pero tu testigo no podrá pasar-

-Bajo el capítulo del wizengamot, el acusado puede presentar un testigo para su caso. ¿No es esa la política del departamento de cumplimiento de ley mágica, madame Bones?-dijo Dumbledore amablemente, Harry sintió que si no fuera por el Wizengamot Fudge ya estaría apuntándole con la varita.

-Además de que el capítulo 15, subsección 3 párrafo 5 de la ley de cumplimiento mágica actual dice y cito textualmente "las audiencia que tengan una fecha establecida, pueden y deben durar tanto como testigos y prueban haya, ya que el acusado tiene derecho a defenderse y el ministerio tiene que escuchar atentamente, siendo totalmente imparcial". Escrito por el puño y letra de Cornelius Oswald Fudge aunque en el libro dice Cornelius Fudge-agrego Harry viendo como Fudge se ponía más rojo de ira.

-¿Cómo sabes que dice eso?-pregunto Fudge casi con furia.

-¿Uno no puede leer un libro leyes mágicas sin ser delito?, acaso el ministerio quiere ser una dictadura y quitar el libre albedrio de magos y brujas de esta nación -dijo Harry serio y muchos magos del Wizengamot voltearon a ver a Fudge con mala cara y el solo se encogió mientras hacia una mueca de desagrado, por alguna razón era hacia Dumbledore.

-El Joven Potter tiene razón, el ministerio no puede quitar el libre albedrio y menos incumplir la ley mágica-dijo madame Bones seria - Los dos tienen completamente la razón-

-Muy bien, Muy bien-dijo Fudge totalmente rojo-¿Dónde está el testigo?-

-Lo he traído conmigo-dijo Dumbledore- Está justo detrás de la puerta ¿puedo ir a?-

-No. Weasley, ve tú...-dijo Fudge a Percy, que se levantó rápidamente, bajo las escaleras del balcón de jueces y corrió pasando a lado de Dumbledore y Harry sin mirarlos. Un momento más tarde, Percy volvió, seguido por la señora Figg. Parecía asustada aunque estaba mejor vestida y bien arreglada, casi ya no parecía loca. Dumbledore hiso aparecer otra silla al otro lado de Harry, y la señora Figg la tomo inmediatamente.

-¿Nombre completo?-dijo Fudge cuando la señora Figg se acomodó.

-Arabela Doreen Figg-dijo con voz calmada.

-¿quién es usted exactamente?-pregunto Fudge con voz casi aburrida.

-Soy una residente de Little Whinging, vivo en la casa de enfrente de Harry Potter-contesto un poco más nerviosa.

-no recuerdo que ningún mago o buja viva ahí además del señor Potter-dijo madame Bones-Ese lugar ha estado siempre altamente controlado.-

-Soy una squib-dijo la señora Figg-Bueno… lo fui… no podía hacer magia por lo cual no estoy registrada-se veía nerviosa.

-¿cómo que era una squib y ahora no lo es?-dijo Fudge mirándola fijamente-Eso es imposible-

Harry trago saliva, esperaba que la señora Figg no contara que el había liberado su magia.

-hee Podía hacer magia de niña, poca realmente, intente ser una mejor bruja pero jamás pude-dijo la señora Figg con tristeza-pero Últimamente he sentido magia correr por mí y estoy segura que ahora soy buena haciendo hechizos-

Harry se alivió y envió una sincera sonrisa a la señora Figg, ella se la regreso.

-demuéstrelo-dijo Madame Bones.

La señora figg saco de su bolsillo una varita, parecía vieja y casi sin usar para ser de alguien tan mayor.

-¿qué hago?-dijo la señora Figg mirando a Madame Bones.

-haga un hechizo sencillo tal vez de chispas-dijo la bruja mientras se acomodaba el monóculo.

-¿cuál era el hechizo?-dijo murmurando y cerrando los ojos para recordar.

-"Vericulum"-dijo Harry rápidamente.

-así gracias Harry-dijo sonriéndole -"Vericulum"-

De la punta de su varita salió una gran cantidad de chispas amarillas que recorrió la sala hasta el techo. Seguramente si hubiera ido a Hogwarts hubiera sido parte de la casa de Hufflepuff, pero nadie le quitaba lo valiente que era al unirse a la Orden del fénix.

-Segura que no era una bruja y no una squib-dijo Fudge que parecía sonreír un poco-se investigara su historia y si no cuadra se meterá en líos con el ministerio-

-Claro que era una squib, los Mcmilan siempre me decían squib en el colegio-dijo mirando a alguien en la audiencia el hombre se levantó parecía de la misma edad que la señora Figg.

-Yo doy fe y testimonio que ella era una squib-dijo el hombre pareciendo sorprendido y avergonzado-¿cómo lograste hacer magia?-

Harry trago saliva nuevamente.

-No lo sé-dijo la señora Figg despreocupadamente aunque volteo a ver a Harry un momento, él sabía bien que si decía que él era el causante harían muchas preguntas y nunca acabaría-solo sucedió un día-

-bien muy -dijo Amelia Bones amablemente-¿Cuál es su historia sobre el caso?-

-Había salido a comprar comida para gatos a la tienda de la esquina de Wisteria Walk, ya que tengo muchos, crio gatos medio-kneazle, eran alrededor de las nueve en punto de la tarde del 2 de agosto- dijo la Sra. Figg tranquilamente -Regresaba de la compra ya que mis gatitos tenían mucha hambre, Cuando oí un ruido en el callejón entre Magnolia Crescent Y Wisteria Walk. Al acercarme al callejón vi a los dementores custodiando el callejón, vi a Harry y a su primo, Harry protegía al pobre de Dudley mientras era atrapado entre dos dementores-

-¿Cómo eran ellos?-dijo Madame Bones, curiosa.

-Pues uno era grande parecía boxeador y el otro más flaco aunque tenía buenos músculos, se podría decir que era mucho más fuerte que su primo-dijo La señora Figg con amabilidad.

-no, no-dijo impaciente madame Bones -no Harry y su primo, los dementores-

-Ha eran grandes y alargados, flotaban, tenían capas raídas y muy maltratadas, tenían la cabeza bien cubierta y solo se les veía un poco la boca que parecía carne en mal estado.-dijo la señora Figg sonrojándose por su comentario anterior.

-o ya veo-rápido madama Bones, mientras Fudge resoplaba un poco-¿alguna cosa más?-

-frio mucho frio, segundos antes tenía un calor infernal pero cuando los vi el frio invadió mi cuerpo, las luces parecieron debilitar, recordé algunos recuerdos dolorosos, muy dolores -su voz se agito un poco como si lo volviera a recordar y miro el suelo con tristeza.

Los ojos de madame Bones se abrieron mucho y sonrieron.- ¿que hicieron los dementores?-pregunto.

Harry le sonrió un poco a ella, aunque no la concia sus acciones les gustaban.

-tomaban a Harry acercándolo a su cara, el protegía con su cuerpo a Dudley, su primo. Este le paga a Harry desesperadamente queriendo escapar, Harry intento hacer un patronus pero no pudo ni la primera ni la segunda vez, vi una pequeña luz empezando a salir de la boca de Harry casi imperceptible, luego él dijo el hechizo casi sin algún sonido simplemente moviendo los labios, creo el patronus que enfurecido tomo a los dementores y los destruyo en un abrir y cerrar de ojos, fue tras los que huían pero los alcanzo y también los destrozo-dijo firme y segura agitando con fuerza sus manos haciendo el ademan de que algo se rompía por ellas.

Madame Bones miro a la señora Figg durante segundo en silencio, Fudge no la miraba, pero estaba poniéndose nervioso y no hacía más que mover sus papeles. Finalmente Fudge dijo bastante agresivamente-¿eso es lo que usted vio?-

-eso es lo que paso-repitió la señora Figg segura de sí.

-muy bien-dijo Fudge- puede marcharse-

-Y le ruego que pase a la oficina de registros para que le guíen apropiadamente para instaurarla como bruja oficial-Dijo Madame Bones.

-Por supuesto-dijo el señor Figg alegre y sonrió a Madame Bones. Enseguida miro con odio a Fudge se levantó y se encamino a la puerta.

-adiós señora Figg, espero comer de sus galletas otro día-dijo Harry agitándole la mano.

-cuando quieras Harry, te las preparare gustosa-dijo la señora Figg saliendo de la sala.

-veo que conoces muy bien a la testigo-dijo Fudge a Harry.

-De niño me dejaban con ella y comía sus galletas-dijo Harry sonriéndole a Fudge.

-No es una testigo muy convincente- dijo Fudge mirándole amenazadoramente.

-Ho no lo sé-dijo Madame Bones, con su voz atronadora-ella describió muy bien a los dementores y los efectos que este provoca. Y no puedo imaginar como uno describiría el beso del Dementor si no lo viera en persona-

-Muy cierto, además de que ella ha demostrado ser capaz de ver dementores gracias al uso de su magia-agrego Harry, nuevamente todos lo vieron algunos aprensivamente otros algo dudosos.

-pero ¿dementores paseándose por un barrio muggle que por casualidad y que se topan con un mago?-dijo Fudge enojado- ni Bagman apostaría por eso-

-No se crea ministro, aposto a que yo ganaría en el torneo y todos pensaba que estaba loco y que solo quería llamar la atención-dijo Harry sonriéndole fríamente a Fudge este casi explota de coraje.

-además mi querido Cornelius no creo que fuera una coincidencia-dijo Dumbledore tranquilamente.- ya te he dado mi opinión sobre el tema-

- Si ya lo hiciste-dijo Fudge energéticamente-y yo tengo razones para no hacerte caso-

-entonces-dijo Dumbledore en voz baja-debemos preguntarnos si alguien envió con o sin permiso del ministro a los dementores ese día el 2 de agosto-

-Estoy segura que le he entendido mal, profesor Dumbledore-dijo Umbridge.-Seré tonta, pero eso ha sonado a que estuviera sugiriendo que el ministerio de magia ha ordenado un ataque sobre este chico-rio de manera que Harry quiso levantarse y gritarle que se callara. Incluso vio a muchos magos del wizengamot querer hacer lo mismo.

-Sí, puede que suene loco, pero los dementores atacaron a Harry y a suprimo hace unas semana, eso lógicamente es por una orden o un fallo grande del ministerio-dijo Dumbledore tranquilamente.

-También puede ser que los dementores sirvan a alguien más aparte del ministerio-completo Harry queriendole callar la boca a esa cara de sapo.

-No hay dementores que sirvan a alguien más-chillo Fudge que nuevamente parecía rojo.

-Entonces ¿por qué me atacaron?, ¿porque estamos aquí discutiendo que paso? Si no están fuera de control o sirven a alguien más, ¿porque estuve a punto de perder mi alma?-dijo Harry suavemente y con la voz tan fría que helo la habitación.- Error del ministerio o alguien más amenaza el mundo mágico nuevamente-

-El ministerio debería averiguar que ha pasado con esos dementores-dijo Dumbledore rápidamente.

-No es cosa tuya decidir que hace o no el ministerio-dijo Fudge ahora tenía un matiz magenta del que Vernon seguramente estaría orgulloso.

-por supuesto que no lo es-dijo Dumbledore sonriendo.

-Ese es su trabajo, su decisión y parece que no sabe ni hacer preguntas esenciales, no tiene ni idea de lo que es ser un buen ministro, ni como ser un líder confiable-Grito Harry sin pensar levantándose del asiento.- Y si cree que pondré mi vida o la de alguien en sus manos está verdaderamente estúpido-

-Quiero recordar a todos que estamos aquí para juzgar las acciones de Harry Potter contra el derecho de la modera limitación de la brujería en menores de edad y no de lo que hacen los dementores o yo- grito Fudge mucho más alto que Harry.-desde luego pensando que realmente paso y no solo son invenciones de la loca mente de este niño-

-Bien, quiere oír locuras pues entonces prepárese, le recuerdo que la cláusula 7 del decreto dice que "la magia puede ser usada ante muggles en excepcionales circunstancias y esas circunstancias incluyen situaciones que pongan en riesgo la vida del mago o bruja, o de cualquier otro mago o bruja incluyendo a los muggles presentes en ese momento"-dijo Harry sentándose de golpe- Desde luego que también pensando que no hice magia enfrente de un muggle desconocido si no que era mi primo y les recuerdo a todos que conocía muy bien mi estado de mago, ya que este lo sabe desde que tengo once años, además de que él es parte de mi familia-

-conocemos la cláusula 7, muchas gracias-dijo Fudge enojado.

-Parece que no-dijo Harry lentamente-ahora que si al conoce estará de acuerdo que estoy dentro de los límites establecidos-

-si había dementores que dudo-gruño Fudge

-ya ha oído la declaración de un testigo ocular-interrumpió Dumbledore- ha visto que Harry tiene las bases y conocimiento suficiente para saber que es bueno y malo, si tiene alguna duda sobre los hechos llamen a la testigo y pregunte todo lo que quieran. Estoy seguro que no se negara-

-No-bramo Fudge, moviendo los papeles de un lado a otro-Esto es... quiero acabar con esto hoy Dumbledore-

-Naturalmente esto es un serio error judicial-dijo Dumbledore mirando a todos y no a Fudge.-

-¿serio error judicial?-dijo Fudge casi bufándose-¿te has puesto a contar todas las mentiras que ha dicho este chico ocultando sus escándalos y abusos de poder fuera de la escuela Dumbledore?, supongo que no habrás olvidado el hechizo levitatorio que uso hace tres años-

-Mi elfo domestico lo hiso, puede declarar cuando quiera-dio Harry con un poco más de calma.

-¿lo ves?-rugió Fudge, señalando de más a Harry- Un elfo doméstico en casa muggle. Y el teniendo a un estúpido elfo, es una locura-

-Si pero yo soy mago, no importa la casa si un elfo de mi familia-dijo Harry enojado porque insulto a su amigo.-Él ahora es mi elfo en ese tiempo vino a mí para ayudarme, le tome afecto y él ahora es mi amigo y le prohíbo que vuelva a insultar a Dobby porque si lo hace le juro que me importara poco que este aquí todo el Wizengamot, lo enviare San mungo y créame no saldrá nunca-

La habitación no solo se puso fría y realmente pesada, parte de las túnicas se elevaron algún mago tuvo que sostener su sombrero para que no se fuera flotando, y más de media docena de magos y brujas gritaron del asombro. Harry miro como el mago Rufus saco su varita y vio cierto temblor en su mano. Harry suspiro y todo cambio, el ambiente se tranquilizó las cosas dejaron de flotar, pero muchos estaban pálidos.

- puedo traer aquí en un instante para que el declare-dijo Harry mirando a Dumbledore se había aguantado las ganas de llamar a Dobby y darle la instrucción que destruyera las barreras que se lo impedían pero en ese momento estaba dispuesto a todo.

-No tengo tiempo para elfos domésticos, además hinchaste a su tía ¡por el amor de dios!-chillo Fudge, golpeando el banco y tirando una botella de tinta la cual se rego por todo el suelo.

-y usted, recuerdo bien fue el que me dijo, "los accidentes pasan Harry, no te preocupes por pequeñeces. Nadie te va a enviar a azkaban por hinchar a tu tía"-dijo Harry recordando- son las palabras exactas y si no me cree pregúntenle a Tom el tabernero de el caldero chorreante él estaba ahí o podrían traer un pensador incluso acepto el uso de veritacerum. Lo que guste.-

-y todo lo del colegio-dijo Fudge mirando con odio a Harry.

-El ministerio no tiene autoridad para castigar a los estudiantes de Hogwarts por fechorías en la escuela. El comportamiento dentro del colegio no es relevante para la audiencia-dijo Dumbledore con aire enojado, con un tono de frialdad nadie le hubiera contestado. A excepción de Harry.

-Dejando la escuela de lado, tengo una pregunta para el Wizengamot-dijo Harry mirando a todo el tribunal.

-¿cuál?-dijo Madame Bones que limpiaba su monóculo.

-¿Porque llevo un juicio criminal para una simple problema de magia con menores de edad?-dijo Harry mirando a Madame Bones.-Antes solo les quitaban la varita un mes y los dejaban en el colegio sin ella, ahora las destruyen y expulsan al alumno, eso es demasiado exagerado, que será lo siguiente enviarme a azkaban, que los dementores me den el beso-

Unos cuantos magos por encima de ellos se movieron en su sitio incómodamente. Umbridge simplemente miro a Harry fijamente, su cara demostró ira pero sonrió como chiquilla.

-Solo opino-continuo Harry devolviendo la mirada de odio a Umbridge pero sonriendo a todos los demás-que están exagerando, piensen un poco ¿qué hechizo ocupe?-

-un patronus por lo...-dijo Fudge

-exacto-dijo Harry interrumpiéndole y enseguida le sonrió-Un patronus y ¿para qué sirve este hechizo?-

-Convoca un escudo que sirve de protección contra dementores es una energía pura que estas creaturas no soportan-dijo amablemente Madame Bones.

-¿ha provocado algún daño a magos o a muggles en algún punto de la historia?-dijo Harry mirando a todos.

-Nunca desde su creación solo es para protección, algunas veces como mensajeros-dijo Madame Bones sus ojos se movieron de un lado a otro y su voz pareció comprender algo.

-ya lo vieron o todavía no-dijo Harry mirando como Fudge se ponía pálido.

Hubo un murmullo general donde todos compartían ideas y algunos sacaban conclusiones. Harry se alegró de que muchos magos no fueran tan tontos como Fudge aunque la cara de sapo se puso de color rojo intenso.

-has convocado el patronus para protegerte o proteger a tu primo-dijo Madame Bones viendo que algunos seguían confundidos.

-para que yo quisiera convocar un patronus, para presumir a Dudley-dijo Harry bufando-Para eso le muestro mi escoba o las fotos que se mueven con eso se queda fascinado incluso simplemente le doy un par de diablillos de pimienta-

-Tiene razón-dijo un mago a sus espaldas haciéndolo sonreír.

-Ya lo ha dicho-dijo Dumbledore sonriéndole a Harry pero el solo hiso una mueca-Él ha sido acusado de convocar un patronus en un lugar muggle enfrente de un muggle. Y ha presentado su defensa. Todo lo que podríamos decir se ha dicho-

-Ahora que todos son conscientes de los cargos y la defensa que he presentado. El profesor Dumbledore y yo les agradeceríamos que deliberen, puedo esperar su veredicto sintiendo que tomaran la mejor decisión-dijo Harry cortes mente hiso una inclinación a Fudge y se sentó.

Harry se sintió orgullo de que pudiera defenderse tan bien y sobre todo se sintió mas aliviado de que el profesor Dumbledore estuviera ahí porque tenía muchas cosas en contra del profesor y en ese momento podría decirlas antes de ir a Hogwarts. Savia que los argumentos dichos nadie podría negarlos y sobretodo que habían plantado la semilla de la duda sobre los dementores y Voldemort. Esperaba algún mago se diera cuenta que ellos ya estaban del lado de Voldemort, aunque no savia que tiempo llevaban ahí adentro supuso que sería un largo rato ya que muchos parecían cansados. Fudge miraba Harry y luego Dumbledore, como queriendo decidir quién era peor y contra quien la tomaría, quien de los dos era más peligroso. A lo que Harry simplemente se puso a juguetear con las cadenas en su reposabrazos, Fudge agito la cabeza y miro directamente a Dumbledore. Los cuchicheos eran intensos pero casi al minuto pararon. Harry miro a los jueces sonriendo ampliamente.

-¿quién está a favor de que el acusado quede limpio de cargos?-dijo Madame Bones, cuando se comenzaron a levantar las manos Harry se alegró demasiado más de 75% tenía las manos levantadas-y ¿quién está a favor de condena?-

Fudge alzo su mano, seguido de la bruja con cara de sapo, Percy también lo hiso un pequeño guiño salió de sus ojos y Dumbledore sonrió por la comisura de los labios, pero ningún otro alzo la mano. Fudge miro a todos los presente, como si estuvieran locos, entonces bajo su mano. Dio varios suspiros largos, con la voz llena de rabia dijo-muy bien... Harry Potter que limpio de todo cargo-

-excelente-dijeron Harry al mismo tiempo, salto de la silla y lo miro directamente a todos. -Les agradezco que todos me escucharan y de verdad tengo una enorme alegría al saber que el ministerio cuenta con un wizengamot justo, lamento todo exabrupto de mi parte-dijo Harry haciendo una reverencia-Espero todos tengan un excelente día y que sus familias estén bien-

Cuando Harry se dio la vuelta para decirle a Dumbledore que necesitaban hablar ya había desaparecido de la mazmorra. El Wizengamot se ponían todos de pie, hablando, recogiendo sus papeles y guardados.

-¿ahora ya puedo hacer magia o tengo que esperar un tiempo para hacerlo?-pregunto Harry viendo a Madame Bones, pero el que contesto fue la Fudge.

-De preferencia espere hasta el colegio-dijo Fudge sin mirarlo.

A lo que Harry tomo como el final de la audiencia, camino tranquilamente hasta la puerta por la que había entrado, tirando del manillar de la puerta y enseguida salió al pasillo, intento ver donde estaba el señor Weasley, sin en cambio no vio más que el largo pasillo lo recorrió, subió las escaleras y vio ambas puertas, su curiosidad le gano se acero a la blanca y abrió lentamente.

Adentro había una gran cámara resonante, tenuemente iluminada y rectangular, y en cuyo centro se encontraba sobre un estrado de piedra en un enorme foso rocoso de unos veinte pies de profundidad, con bancos alrededor de la habitación y descendiendo en los escalones como en un anfiteatro y rodeado por un aire frio y una quietud total se erguía un alto arco de piedra talla que parecía muy antiguo, agrietado y de aspecto ruinoso era increíble se mantuviese en pie (sobre todo porque no estaba apoyado en ningún muro), y del arco colgaba el velo, que parecía una cortina que ondeaba suavemente y se balanceaba ligeramente, como si alguien reciente la tocara . Harry sintió que había alguien del otro lado, por un segundo la vio detenidamente le pareció ver una sombra de alguien con un sombrero de copa, se acercó un poco murmullos y susurros agitaban su corazón.

-Ven-dijo un susurro leve, casi inaudible.

-No-dijo Harry sin saber por qué- Aun no-

Regreso rápidamente, cerró la puerta y camino hasta el ascensor que se encontraba completamente vacío. Espero unos minutos respirando rápidamente, cerro sus ojos concentrándose ese velo era el de la muerte y por alguna razón lo había llamado, ¿Por qué había contestado? ¿Aún no?, que le había pasado, solo quería olvidarse del incidente, la puerta del ascensor agresivamente y vio los botones nuevamente. ¿Cómo haría para saber cuál apretar? Los vio durante unos segundos, no ¿cómo sabría cual apretar? Intentando adivinar cual lo llevaba al piso de la oficina del señor Weasley, subió la vista y volvió a ver la puerta, no quería estar ahí, apretó el que parecía un pequeño reloj de bolsillo con un color rosado, pensando que tal vez lo llevaría por ser un aparato muggle. El elevador se sacudió y empezó a descender en lugar de subir, intento apretar otro botón pero este parecía no dejar que apretara ningún otro.

{Creo que estoy perdido ¿Dónde estás?}Pregunto a Harry a Hermione, pero algo que le impedía contactarse con ella, así que simplemente decidió esperar a que el elevador se detuviera e intentar regresar a la superficie. El elevador traqueteo dio un giro brusco y comenzó a avanzar rápidamente como si fuera en una pista de carreras, Se detuvo de sopetón golpeando su nariz contra el frio metal del elevador.

-Genial-dijo Harry a sí mismo sobándose la nariz.

-Área inefable, Cámara del amor, cámara del tiempo, sala de cerebros-dijo la voz femenina de la cabina telefónica.

-¿cámara del amor?, ¿cámara del tiempo?, ¿sala de cerebros?-dijo Harry sabiendo que nadie le respondería.

{Godric Gryffindor trabajo fue uno de los principales inefables estaba en la cámara del tiempo, Rowena Ravenclaw en el departamento de cerebros, así se conocieron esos dos} dijo Sly.

Harry se sobresaltó un poco, Sly hace días que no hablaba, no savia si era porque estaba enojado con él o si había alguna otra cuestión en medio pero escucharlo de repente lo tomo por sorpresa. Se preguntó si sus maestros podrían hablarles juntos.

{Maestro ¿porque hasta hora?}Pregunto Harry viendo atreves del ascensor había cuatro puertas cada una con una placa hasta arriba indicando el nombre de la sala.

{Mi niño hemos estado impidiendo que entre en tu mente y aun así no podemos evitarlo del todo} dijo Revé con voz cansada.

Harry salió del ascensor y empezó a caminar viendo las puertas la cuarta a la derecha, tenía una entrado con doble puerta, era negra y se veía muy pesada. A pesar de todo Harry se encamino con cuidado a esta.

{¿Hablas de ..?}Comenzó Harry

{Voldemort, ha intentado entrar a tu mente, es muy poderoso en esto, la conexión que tenían ha incrementado con las gotas de sangre que el utilizo} dijo Griffin firmemente.{ Lamentablemente por tu sangre se perdieron las protecciones de tu madre}

{Una lástima eran muy poderosas} dijo Huffy bastante gruñona.

Harry casi se sintió corrompido, se había sentido raro todo el verano como si no fuera el, como si algo lo controlara, ahora entendía el porqué. Aun así sintió miedo de que el pudiera entrar en su mente.

{¿Hay otra alguna forma de evitar que entre a mi mente?}Pregunto Harry casi conmocionado, dejando de avanzar.

{Cerrar tu mente por completo} contesto Sly con un tono raro.

El retrocedió un poco como si le presentaran una idea horrible.

{Eso significa cerrar mi conexión con Mione, y con ustedes} dijo Harry con voz dolida.

{Lo se mi niño pero necesitamos evitar que el entre a tu mente, si se da cuenta que tienes un Horrocrux o lo que planean contra el será muy tarde vendrá por ti} dijo Sly con tristeza y todos sus maestros parecieron también estar muy tristes.

{Puedo poner más barreras con oclumancia} dijo Harry esperanzado de que pudiera ser una solución.

{No es posible todas tus defensas mentales son fuertes pero Voldemort no está solo afuera esta también adentro, Nosotros podemos suprimir un poco a la parte que está adentro pero a la que está afuera solo tú puedes evitar que entre, las conexiones que tienes con nosotros evitan que podamos detener del todo el alma de Voldemort y tu otra conexión con Hermione evita que tu mente se cierre por completo del externo, si continuas con esas conexiones abiertas le das la oportunidad de entrar.} Explico Revé un poco fuerte para su gusto de Harry, la conocía lo suficiente para saber que no era una broma.

{Entonces...debo de evitar que ustedes o ella entren en mi mente} dijo Harry sabiendo bien lo que se ponía en juego. Harry dio un largo suspiro enseguida empezó a regresar al ascensor y alzo su mano para tocar un botón, pero por lo que más quería no se decidía si hacerlo o no. Sentía que algo le oprimía el cuello, así que se aflojo la corbata. {¿Cómo seguiré entrenando?, ¿Quién me guiara a partir de ahora?}

{Lo siento mi niño} dijo Sly bastante dolido {Es necesario, una vez que consigas mi bóveda en Gringotts, encontraras algo que notifique como reloj biblioteca, ahí encontraras todo para lo que has pensado y también algunas guías que serán útiles, estúdialas}

{¿Estarán viendo todo lo que hago?}Pregunto Harry esperanzado de que si él estaba a punto de meter la pata pudieran decirle algo.

{Siempre lo hacemos} dijeron los cuatros.

{Confiamos en ti y tus habilidades} dijo Revé con el tono maternal que la caracterizaba.

{Tu valentía solo se compara con la mía no dudo en que lo logres} dijo Griffin riéndose como siempre.

{Bueno tu trabajo y dedicación me encantan, y sé que no eres un tonto} dijo Huffy con su voz de niña mientras se reía por lo bajo.

{Habrá días muy malos y feos por delante, mantén tu templanza y cree en ti, mi niño} dijo Sly su voz sabia tranquilizo a Harry.

{Gracias Maestros, lamento si dije o echo algo malo y les prometo que are todo en contra de Voldemort} dijo Harry apretando un botón de color verde y que se encontraba hasta arriba de todos.

{Recuerda que siempre estaremos ahí, aunque no puedas escucharnos, nosotros a ti si} dijo Griffin con su voz calmada.

El elevador se agito comenzó a regresar rápidamente luego freno y subió traqueteando todo el camino, Harry cerro su conexión con sus maestros y Hermione, sintiendo un pequeño vacío por hacerlo, el elevador paro en el piso que había sido su audiencia pero Harry no bajo, así que siguió subiendo. En varias paradas se subieron mucho magos y brujas, en otras se bajaban y subían Harry solo se preguntaba cómo le diría a Hermione las cosas que habían pasado. Veía cada piso antes de decidir si bajarse o no, hasta que vio el pasillo por el que había entrado a los asesores después de la revisión de su varita. Salió esperando solo encontrar a todos ahí, aunque suponía que se burlarían al enterarse que se perdió. Se encamino por el pasillo hasta ver unos bancos y se sentó a esperar, escuchando la clásica música que ponen en esos lugares. Veía entrar a muchos magos y brujas, otros salían, gritaban, hablaban, reían, unos parecían muy enojados, otros eran inexpresivos, algunos con prisas y solo muy pocos con mucha calma.

-¡Harry!-dijo la voz Hermione y del señor Weasley que habían salido del ascensor.

-¡Harry, al fin te encontramos!-dijo la voz de Sirius que también salía del ascensor, muchos magos se alejaron de el con la boca abierta.

-Lo siento, no vi a nadie cuando salí, intente subir pero... me perdí-dijo Harry tratando de parecer lo más normal. Hermione se acercó rápidamente preocupada, pero fuera de eso seguía tan hermosa con su vestido amarillo. Lo abrazo fuertemente y susurro.

-Harry, ¿todo en orden?-dijo Hermione en su oído.- no podía comunicarme contigo, ¿qué paso?-

-He tenido que cerrar la conexión por completo, no porque quisiera, hay mucho que explicar-dijo Harry rápidamente en su oído bajando la voz lo más que podía-He hablado mis maestros al fin, ellos me dijeron el por qué no me hablaban y por qué era necesario-

-Entiendo-dijo Hermione separándose un poco y sonriéndole-Pero me debes toda la historia-

-Si-dijo Harry besandola, mientras Sirius, el señor Weasley se acercaban.

-Lo sentimos Harry, tuvimos que salir a dar la notificación que le dieron a Sirius, a registrarlo nuevamente y a que lo sacaran de la lista de búsquedas-dijo el señor Weasley sonriendo.-Estuvo fantástico, tuvo que utilizar la poción veritacerum pero solo tiene una multa que ya está pagada-

-Si lo sé-dijo Harry abrazando a su padrino-Felicidades, ya eres un hombre libre-

Sirius le sonrió con una alegría nunca antes vista en él y sus ojos se enrojecieron.

-sí, es un sueño para mí-dijo Sirius con voz alegre.

Enseguida Hermione le dio unas palmaditas y tomo por el brazo a Harry.

-y ¿cuál fue el fallo?-dijo Hermione mostrándose preocupada.

-Libre de todos los cargos-exclamo Harry alegre.

-Lo escuche hace rato-dijo el señor Weasley mirando a su alrededor-Te enfrentaste a todo el Wizengamot, te defendiste muy bien además de poner en ridículo a Fudge-

-¿de verdad?-dijo Hermione casi sorprendida.

-solo hice lo que había planeado-dijo Harry Nervioso de que se supiera que había amenazado al ministro de magia.

Uno o dos magos pasaban viendo a Sirius curiosos cuando se daban cuenta quien era casi salían corriendo, otros parecían notificar a alguien. Otros más regresaban al elevador para salir hacia otro piso.

-Es mejor que regresemos, tenemos muy buenas noticias para todos-dijo haciendo señas a todos para que lo siguieran,- Aunque tendré que ir a resolver ese asunto sobre los retretes regurgitadores, aun hechizado otros dos en Londres-

-¿y Ron?-dijo Harry observando que faltaba.

-Lo enviamos a cuidar la salida de visitantes por si te aparecías por ahí-dijo Sirius mientras un mago salía corriendo por oír su voz.

-Aun no puedo aparecerme-dijo Harry rápidamente.

-Sabes a que me refiero cachorro-dijo Sirius dando una risita.

Enseguida se encaminaron pero antes una voz perturbo la paz que había obtenido Harry.

-Así que un patronus, he Potter-dijo Lucios Malfoy a su espalda.

A Harry le falto el aliento y en su pecho se acumuló presión, La última vez que había escuchado esa voz había sido en un bosque huyendo de Voldemort, diciendo que lo capturaría y lanzándole maldiciones. Quiso voltear y encararlo pero sus piernas parecían no quererlo obedecer. Lucios era un mortífago había estado presente en el cementerio, tenía que encararlo pero sus recuerdos regresaron golpeándolo nuevamente haciendo que sudara frio y que un escalofrió le recorriera la espalda.

-¿Qué hace ese asesino aquí?-dijo Lucios Malfoy mientras Sirius se volteaba para encararlo.

-Entérate Lucios, estoy exonerado-dijo Sirius con voz calmada.

-ha si, astas causando un revuelo en todo el ministerio, al igual que Potter-dijo Lucios con voz mordaz.

Hermione le acaricio la mano y enseguida le susurro a su oído. -todo está bien Harry. Ahora todos estamos aquí-su voz cálida inundo su cuerpo de calor y las piernas le reaccionaron. Dejándole dar la vuelta muy despacio.

-Usted cree-dijo Harry su tono fue algo titubeante, pero enseguida se mostró calmado-A mí me parece que estamos haciendo un poco de justicia-

-¿Justicia?-pregunto el Lucios-El liberar a un asesino y aun delincuente es justicia-

-Harry no es ningún delincuente y Sirius no es ningún asesino-dijo Hermione con su voz enojada algo que hiso que el Lucios-Solo conozco a un asesino aquí-mientras lo veía fijamente, Lucios la vio con asco.

-Quien te hablo a ti sangre suc...-

Harry avanzo rápidamente soltándose del agarre de Hermione incluso de Sirius que intento tomarlo por los hombros pero se escapó, no podía creer que hubiera estado aterrado de Lucios, su enojo fue tal que la cicatriz ardía, enseguida llego enfrente del mortífago y se paró enfrente justo mirando sus ojos.

-¡Le advierto si dice una palabra más me veré obligado a callarlo!-Grito Harry alzando la voz para que todo mago presente lo escuchara-¡No dejare que insulte a mi novia y créame no necesitare magia para cerrar le esa boca y espero que este dispuesto incluso a tener un duelo a muerte!-

Todo mago y bruja se congelo al oír las palabras de Harry pues bien sabía que el último duelo a muerte había sido entre Dumbledore y Grindewald, Lucios enseguida se puso pálido e intento sonreír fríamente con poco tino.

-Eres un…-comenzó Lucios.

-Me importa un bledo usted y lo que pueda pensar de mí, pero créame ahora que sé a quién sigue no dudare en enviarlo a donde pertenece y tal vez a donde no pueda regresar- grito Harry mientras veía como Lucios tomaba su bastón.

-¿Que sucede aquí?-dijo la voz de Umbridge que se acercaba a zancadas y mostraba su cara de sapo.

-Nada-dijo Lucios arrastrando su voz lo más que pudo. Enseguida se separó de Harry y se dirigió a la bruja con cara de rana.

-Un gusto en verte Umbridge-dijo Lucios con voz alegre-Tenia algunos asuntos que tratar contigo-

-Será mejor que bajemos a mi oficina-dijo Umbridge mirando a Harry a lo que el simplemente le sonrió fríamente, esperaba que la bruja le diera más motivos para enviarla a lado de Rita.

Se alejaron juntos, hablando en voz baja. El señor Weasley tomo el hombro de Harry, Hermione lo tomo del brazo y Sirius se paró frente de él.

-Tranquilos, no pienso seguirlo-dijo Harry mirándolos detenidamente todos tenían cara de preocupación, aunque Hermione parecía tener el rostro más rosa de lo común. Al entrar a donde se encontraba el mago-guardia, estaba escondido tras un ejemplar del profeta enseguida se dirigieron a la cabina para salir de regreso a Londres pero Harry recordó algo.

-Esperen... mione me prestas la bolsita del banco-dijo Harry mirando la cadena de plata que le colgaba del cuello.

-Claro-dijo su novia e inmediatamente saco la bolsa del banco.

Harry se dirigió a la fuente pasando a varios magos y brujas, se paró enfrente de la fuente, con ayuda de Hermione convoco 5 mil galeones, los vacío en la fuente ante la mirada de muchos magos que se paralizaron y abrieron los ojos al ver la cantidad de dinero, otros parecieron querer regañarlo pero Hermione sonreía grandemente al igual que Sirius.

-Ahí que retribuir algo ¿no?-dijo Harry después de terminar de dejar las monedas en la fuente.