Sorpresa.

Tercer capitulo y continuación de la continuación. Si tienen nombres diferentes y cada uno en blanco, pero todos están plasmados en el mismo día y por lo tanto es un súper capitulo. Eso digo yo.

La primera vez que subi esta historia fueron 3, en el aniversario no podría ser diferente. Lamento la espera que les he provocado y las semanas que no publique. Véanlo así 52 semanas por año, 53 capítulos. Todos los que han llegado hasta aquí y me han regalado una palabra, de verdad se han agradado y esta es mi forma de decírselos. No con una palabra, más bien con todas las plasmadas en este aniversario. Pero nunca esta de decir una vez mas

Gracias.

Todos los derechos de los personajes de J. K. Rowling

Capitulo 53.- Un Juramento eterno del caos

Formas oscuras aparecieron, bloqueando el camino de la izquierda y luego de la derecha, los ojos brillaban bajo las capuchas, una docena de varitas encendidas apuntando directamente a los corazones de todos ellos. Ginny soltó un pequeño grito

-Dámela, Potter- repitió lentamente la voz de Lucius Malfoy, mientras extendía su mano oscurecida por las sombras.

Harry simplemente sonrió mirando directo a los ojos de Lucius, sostuvo la profecía con una mano y su varita con la otra. Estaban atrapados y superados en números de dos por uno, pero no podía mostrar labilidad si queríamos todos los salieras de ahí.

-Dámela- ordeno Malfoy una vez mas.

-Buenas noches, Lucius, veo que te va bien ... por cierto ¿Como esta tu hijo? - dijo Harry recordando lo dicho por Ron, si malayo aun así en Hogwarts y en la enfermería se podía creer intimidar a Lucios.- ¿O es que? aun no sabes que paso? -

Todos los mortifagos parecieron tensos cuando una de las sombras oscuras aparecen delante de ellos. Una mujer que tenia la voz áspera.

-Esta mintiendo Lucius, Draco ha de estar bien-

-¿Segura? Lo ultimo que supe de lo que es un maleficio, no estoy seguro si era un imperdonable. Harry sonriendo un poco más malévolo. Decíamos que es lo más precioso que hay.

-Calle Potter, y dámela- dijo Lucius que parecía mas nervioso.

La mujer de la izquierda se acercó un poco, algo que otros mortifagos también de forma amenazadora y Harry giro la esfera de cristal directo al suelo. Los mortifagos dieron un paso hacia atrás.

-Así que ¿Quieren esto? - dijo Harry mostrándose algo consternado-Bien podemos hacer un trato-

-Podemos hacer un trato- imitar a la mujer de la izquierda con una voz cortada.

Enseguida Harry la baja rápidamente imitando lanzar algo, pero frenando en el ultimo segundo y girando la esfera de cristal para arriba. Todos saltaron asustados. Pero la esfera nunca dejo su mano. No puede romperla, ellos atacarían inmediatamente después.

-Segura que quieres jugar a eso- dijo Harry nuevamente haciendo la esfera-Si Voldemort se enteró de que sus fieles mortifagos hicieron que la profecía fuera destruida, seguro se enojara mucho-

-Ho el bebe tiene agallas, el lindo niño no sabe de su poder, el bebito necesita unas nalgadas para que entienda quien manda- dijo la horrible mujer, imitando la voz de un bebe.

-Ho la homúnculo tiene voz de bebita, la horrible homúnculo no conoce mi poder, la homúnculito tiene ganas de una patada en el trasero- imito Harry haciendo su voz cada vez mas gruesa- Aunque prefiero hacer esto-

Movió la esfera contra el metal de los estantes, el vidrio restregado contra el metal resonó por todo el lugar y el cristal comenzó a rayarse. La mujer pareció furiosa.

Harry sintió como sus amigos estaban alerta, con las varitas listos, ninguno se movía demasiado, pero lo suficiente para ponerse protegidos.

-Estas aquí por Black ¿No?- dijo Lucius que parecía mas pálido a cada segundo, pero se intentaba mostrar mas firme.- Dámela y lo tendrás-

-A si mi padrino- dijo Harry chasqueando la lengua- No. Se que Sirius esta a salvo, nunca creí que lo tuvieran. Así que seguimos igual, yo tengo algo que quieren y ustedes no tienen nada para mi-

La mujer rio soltando una carcajada.

-Y la vida de ellos- dijo la mujer señalando a su espalda.

Harry simplemente se mordió el labio internamente y miro con desprecio a aquella mujer, si bien ellos eran fuertes tampoco podía menospreciar los números. Los mortifagos eran muchos mas y sobre todos mas experimentados, los únicos que tenían batallas reales y peligros de muerte era el, un poco Ron y Hermione. Aunque los demás tenían entrenamiento no resistirían la presión de una pelea contra tantos. A su izquierda Hermione se movió tocando su pie.

-Todavía no- dijo Harry suavemente- Aguarden a mi señal-

-Das instrucciones como si ustedes pudieran ganar- dijo Lucius apretando la varita.

-Lo olvidan, si ustedes o ellos se mueven yo podría tirar esto accidentalmente- dijo Harry lentamente lanzando la esfera un par de centímetros al aire y tomándola rápido.

Veía como todos los ojos seguir la trayectoria de la esfera. Incluso sus amigos, lo que le preocupaba. ¿Sabrían que hacer al momento?

-Bien Potter, dámela y dejare ir a todos aquí- dijo Lucius tratando de sonreír- entregala y nade morirá-

-Eso lo puedes apostar, ninguno de ellos morirá hoy- dijo Harry enseguida lanzo la profecía con todas sus fuerzas hacia arriba, apunto a Lucius -AHORA-

Entonces las cinco varitas de Hermione, Ron, Neville, Ginny, Luna, Sofí y Theo aparecieron a su lado.

-Desmaius- grito Harry enseguida una ráfaga de luz roja salio de su varita.

Lucius apenas y logro girarse al momento que el hechizo pasaba rosando le. Harry miro hacia arriba apunto con la varita.

-Accio- y nuevamente la esfera la tenia entre sus manos.- Reduc...-

-No-grito lucios casi con desesperación.

-Alguien quiere mucho esto- dijo Harry burlón, mientras agitaba la profecía- Es muy entretenido-

-Maldito- grito la bruja que aprecia estar desquiciada.-baubill...-

-Atabranquium- dijo Hermione, a sus espalda, al segundo escucho algo caer al suelo, al momento Harry acumulo magia -expulso- enseguida la mujer salio disparada hacia atrás.

Golpeo la repisa y la capucha se le callo, era la mujer que se escapo de azkaban, Bellatrix Lestrange, aprecia esquelética, pero tenia la cara roja y los ojos saltones. El tiempo en la prisión se le notaba y de sobra.

Harry sintió como los medas se pagaban enseguida rodearon a Sofí, la menor del grupo y la cual apuntaba sobre su cabeza. De verdad que estaban en algunos aprietos.

-Ahora Voldemort esta muy enojado, tanto que alguno de ustedes morirá. ¿Quieren saber quien?-dijo Harry con al voz malévola que le salia al conectarse con Voldemort. Intentando distraerlos en lo que su plan tomaba mas forma.

-CALLATE- grito Bellatrix- ¿Como te atreves a pronuncia su nombre con tus labios de sangre sucia?-

-Voldemort es un sangre sucia también- dijo Harry sonriendo y viendo una salida a su problema- Si, por si no lo saben su madre era una bruja y su padre un muggle... ¿Acaso Voldy no les ha contado su vida? ¿No les tiene confianza?-

-Desmaius -grito Bellatrix loca de ira, una luz roja salio de su varita.

-Salvio hexia- grito Harry acumulando tanta magia como podía enseguida una capa protectora apareció alrededor de todos. El hechizo revoto dando en una profecía a la cual exploto dejando una luz cegadora.

-MIENTES- grito Bellatrix lanzando otros dos maleficio que nuevamente revotaron-SANGRE SUCIA

-Preguntale a Voldy, el se enojara mucho, por que el es como tu dices. Voldemort es un sangre sucia- dijo Harry dando una mirada rápida a sus amigos, que se mantenían en formación, los mortifagos se acercaban por todos lados. Luego miro a Hermione que miraba concentrada a Bellatrix y Lucius, el cual parecía mas pálido que de costumbre- Lucius lo sabe ¿Por que no le preguntas a el?-

Bellatrix enseguida miro a Lucius encolerizada, y este abrió los ojos como platos intento decir algo entre balbuceos.

-Oigan Idiotas-llamo la atención de todos, lanzo la esfera tan alto que se perdió un segundo entre todas las demás que estaban muy arriba de su cabeza. Vio como el humo de la esfera formaba el rostro de Voldemort, luego el suyo y la cicatriz que cubría su frente.

-reducto- dijo Hardy salio disparada una luz plateada directo a la profecía.

-NOOOOOOOOOOOOO- Grito Bellatrix, Lucius y un montón de mortifagos mas.

-Chicos los grupos de dos. A la salida, cuídense y... cierren los ojos-susurro Harry antes de desperecer la barrera.-lucent genialibus-

La esfera cocho con el hechizo de Harry y esta estallo en miles de trozos al mismo memento que una luz plateada intensa y cubría todo el lugar, dejando un destello tan potente que incluso con los parpados cerrados se notaba.

-Maldito… mi ojos… mis ojos- gemía Bellatrix mientras se restregaba los ojos.

Un hechizo que solo desprendía una luz tan potente para cegar. Bastante infantil pero útil. Todo aquel que la vio estaría cegado y les daría algunos minutos de ventaja.

-Máxima Bombarda-dijeron dos voces, la de Theo y Ron.

Los estantes de la izquierda y de la derecha salieron volando.

-Corran- grito Harry, al momento que todos abrieron los ojos.

Cinco voces diferentes gritaron apuntando en todas direcciones.-Reducto-

Las estanterías, se hicieron polvo al igual que las profecías, creando otra tanda de luces segadoras. Agarro la mano de Hermione y tiro de ella, apunto su varita hacia atrás y concentrándose creo una barrera protectora. Un Mortifago apareció delante de ellos entre el humo y el escombro, sus ojos eran como de un animal y su cuerpo era casi del triple que de Harry. Greyback estaba enfrente de ellos, pero en lugar de retroceder el simplemente soltó a Hermione dio un leve salto golpeando y golpeo rostro del hombre lobo. El cual se tambaleo, lo suficiente para abrir camino. Gracias a Merlín que Hermione tenia mas experiencia, ni siquiera freno al soltarla continuo su camino después de que Harry le abriera paso.

-Sigue corriendo- grito Harry apuntando con su varita a Greyback- Vete, te alcanzo en un segundo-

Hermione pareció un solo segundo estar evaluando la situación pero enseguida unos gritos y algún llanto de dolor cruzo el aire, una estantería callo impidiendo que ella pudiera oponerse a su plan.

-Valiente muchachito- dijo Greyback mostrando sus dientes que parecían realmente afilados-o muy idiota-

-Prefiero el termino, temerario sin limites-dijo Harry sintiendo el hedor del aliento de su contrincante.-hagg... no quieres una menta, por que el aliento te apesta-

La sonrisa de Greyback desaprecio y rugió de furia.

-De verdad huele fatal… te recomendaría un par de dentistas muy buenos. Pero no aceptan a gente de tu calaña- continuo Harry teniendo en cuenta que el que se enoja pierde.- Ahora con o sin tu permiso me tengo que ir. Mañana tengo un examen de estudios muggles-

Greyback mas que humano parecía una bestia realmente, lanzo un manotazo contra Harry, el cual simplemente retrocedió para que no lo tocara y quedando pegado a la recién estantería caída. El hombre lobo alzo su varita, Harry también pero haciéndose a un lado a tiempo que un hechizo reducto golpeaba la estantería y abría un oyó lo suficientemente grande.

-Incarcerous- al segundo unas cadenas bastantes gruesas salieron de la varitas y ataron a Greyback fuertemente. El hombre lobo gimió, Harry enseguida pateo la varita de su mano y la partió con el pie.

-Dale las gracias a Dolores Jane Umbridge,utilizo recientemente este hechizo. Es muy útil-dijo Harry, viendo como Greyback se retorcía dolorosamente.

harre siguió su camino corriendo, encontrado que mas de un estante estaba derrumbado, y entre todos encontró un pequeño pasillo. Después de correr un largo pasillo vio a Ron, Ginny y Luna adelantan te de el. Se cubrían las cabezas con las manos ya que las profecías seguían cayendo en todas direcciones. Escucho gritar en algún lado a Hermione.

-Desmaius-

La busco rápidamente su parecencia mágica, con tantas profecías aun a su alrededor le era imposible y mas que la magia se comenzaba a disipar y parecer neblina para su detección. Ya estaba cerca de alcanzar el final del pasillo y solo le faltaba girar a la derecha. Como lo habían hecho Ron, Ginny y Luna delante de el, podía escuchar como Hermione apuraba a Neville en algún lugar, justo a un pasillo lateral.

En el pasillo se topo con otros tres mortifagos, uno termino noqueado y los otros dos sin la varita antes de que se dieran cuenta. Ademas de un golpe en la cara a cada uno.

Al llegar al final, Ron sostenida la puerta por la que habían entrado antes.

-¡Solo entra!- grito Harry, escuchando una explosión en algún lado.

Ron cruzo sin cerrar la puerta seguido de Ginny y Luna. Harry se paro giro al escuchar pasos y vio como de unos estantes mas alejados venia Hermione y Neville seguidos de Sofí y Theo. Neville tenia un golpe en la cara aun peor que antes, Hermione tenia un labio partido, Sofi parecia ilesa y Theo solo jadeaba.

Se sintió mas tranquilo al verlo

-Entren-dijo señalando a la puerta.

Harry dejo entrar a Neville, al parecer no solo era la cara ya que en una pierna tenia un corte, luego Sofí y Theo que estaban pálidos. Hermione le echo un ultimo vistazo a Harry y entro, el cruzo y cerro de un portazo la puerta.

- abscondamportus - dijo Hermione y la puerta se sello con ruidos extraños.

-¿Donde están los demás?-pregunto Neville que parecía asustado. Seguramente por Luna.

-Entraron antes que tu- dijo Harry mirando el pasillo que se encontraba completamente vació.

-Escuchen- dijo Hermione.

El eco de pasos, gritos y sobre todo explosiones se encontraban al otro lado de la puerta que se acababa de sellar. Harry escucho decir algo a Bellatrix.

-Nott Deja a ese estúpido de Greyback. Atrapemos a ese estúpido niño-

-¿Que hacemos?-pregunto Hermione a Harry, ella se escuchaba temerosa pero mantenía firme su mano.

Miro a todos, Neville sangraba, Sofí temblaba mucho. Theo ya tenia la piel tan blanca como la leche y Harry entendía bien. Su padre se encontraba ahí, luchando con los mortifagos, mientras que el estaba a su lado y seguro su lealtad comenzaba a titilar del miedo. Quería decirle algo, tal vez que se ocultara de su padre que ya no se preocupara por ellos y hiciera lo mejor para el. No podía con todos mirándole y menos cuando el tiempo se terminaba.

-Tenemos que seguir- dijo Hardy tomando a Hermione de la mano y a Sofí del hombro- Esperemos que Ron, Ginny y Luna hayan ido directamente a la salida-

Corrieron lo mas silenciosamente posible, pasando el pasillo rápidamente y llegando al elevador, un botón estaba Encendido. Sin pensar Harry lo apretó y el elevador funciono.

-Esto es un locura- dijo Neville pareciendo mas nervioso que nunca- y que pasara si Ron, Ginny y Luna siguen abajo-

-Los dejare arriba- dijo Harry con la voz adolorida, su espalda dolía mas que nunca, también su cicatriz y sin contar que su costilla parecía estar partiéndose en varios pedazos.- Regresare a ver si ellos...-

-No Harry- dijo Hermione viéndolo directamente.- Si no están arriba regresaremos todos por ellos-

-Theo ¿Seguro que quieres continuar?-pregunto Harry al ver que se mantenía callado y su expresión aterrada.- Se que...-

-Mi padre esta aquí y… es un Mortifago. Yo soy un Pendragon y nosotros no cedemos ante mortifagos. Esa es la realidad y me apegare a ella- dijo mientras su mirada se aclaraba un poco.

Harry no podía decir nada mas el dolor de las costillas y espalda casi lo estaban doblegando en su totalidad. Por lo que simplemente asintió. Enseguida el elevador se abrió mostrando un salón redondo, y un par de figuras mas aya de ellos, casi al instante los reconoció eran Ron y las chicas. Estos lo miraron asustados, pero al percatarse que no eran mortifagos o un enemigo sonrieron.

-¿Estas bien Harry?-dijo Ron acercándose- Ese estúpido elevador no dice a donde se va. Apenas y lo toque y nos trajo aquí-

-¿Donde estamos?-pregunto Neville mirando el pasillo y que había varias puertas a su alrededor.

-Es la sala donde venían para las condenas a muerte- dijo Ron mirando las puertas con asco- Me lo dijo mi padre el día que venimos a la audiencia, alguna de estas puertas lleva al velo de la muerte-

-¿La muerte tiene un velo?-pregunto Ginny pareciendo mas que curiosa.

Harry se sentía mareado y extraño, como sumergido en vapor caliente que lo hacia sudar y sus sentidos los descontrolaba. Aquello que lo llamaba estaba cerca realmente cerca. Solo un poco mas lejos, unos pasos mas y el estaría ahí. Era como estar en un trance, hipnotizado por la sensación, su corazón latía rápidamente y su tatuaje en el pecho se calentaba.

-Tenemos que irnos Harry- dijo Hermione deteniéndolo. Inconscientemente cruzo la mitad del pasillo y se dirigida directo a la puerta donde se encontraba el velo.

-¿Estas bien?-pregunto Ron también mirándolo.

No hubo tiempo de abrir la boca, el sonido de nuevo elevador subiendo se escucho. Sin decir nada todos salieron corriendo en dirección de alguna puerta y entraron. Adentro de ella se encontraba muchas mesas cubiertas con telas de de colores oscuros, polvorientas y desgastadas. Algo era seguro nadie entro ahí desde hacia mucho tiempo.

-La cámara donde le daban la ultima comida a los que llevarían al...- empezó a decir Ron, cuando una de las puertas fue golpeada con fuerza.

-Oí algo por aquí- dijo una voz desconocida.

Todos tomaron alguna mesa y se escondieron detrás de ella o debajo como Sofí. Vieron de un momento a otro como la puerta se abría con lentitud, los pasos resonando el lugar y al final se vieron dos túnicas acercándose.

-Y si fueron directo a la entrada sin hacer paradas- dijo una voz grave.

-Viste el elevador, el botón de este piso estaba encendido- dijo la voz que había hablando antes- Ve debajo de la mesas-

Vio las rodillas de un Mortifago, la varita apunto por debajo de la mesa. De un movimiento el la tomo apuntándola hacia arriba, saco la suya directo a la cara del sujeto y grito -Desmaius-

Un disparo de luz roja golpeo al Mortifago mientras Harry aplastaba la rompía en tres pedazos, el segundo Mortifago sin embargo aparto la mesa de un manotazo y esta choco con el hechizo que recién había enviado Hermione, que se mantenía agachada debajo de una de ellas.

-Avada...-

Harry en un movimiento rápido golpeo a su enemigo en el estomago. Pero el levantarse tan rápido le repercutió en la espalda, sintió su columna arder como fuego y pequeños tronidos por toda ella.

-Expeliarmus- grito la voz de Neville y el Mortifago lo desvió directo a el.

Al siguiente segundo la varita de Harry salia volando en dirección contraria.

- Expeliarmus- dijo el Mortifago la varita de Neville voló hasta el Mortifago en un movimiento la atrapo y la trozo a la mitad. El Mortifago gruño y lo apunto. Intento quitarse moverse o cualquier cosa, pero su espalda estaba a punto de dejarlo caer.

-Desmaius- dijo Hermione mucho antes de que el Mortifago lograra abrir la boca, cuando el hechizo lo alcanzo este callo con un golpe sordo al suelo.

-La varita- gimió Harry recargándose en otra mesa.

Busco dentro de su bolsa de pociones y tomando una reparadora de Huesos, otra para recuperar su salud. Al ultimo saco agua y dejo que se resbalara por su espalda. Para cuando ya se curaba nuevamente la espalda, Ron tomaba la varita y al igual que la de Neville la partió.

-Harry ¿Estas bien?-pregunto Sofi que se acercaba a Harry preocupada.

-Si, solo...- empezó a decir Harry al siguiente segundo sintió la mano de Hermione apretando en su espalda. -AGGHHH- gimió

-MENTIROSO-grito Hermione iracunda-Tienes la espalda muy lastimada- Siguió inspeccionándolo asta que llego a su costilla y igual Harry no pudo evitar quejarse del intenso dolor.- Genial. También la costilla-

-Un poquito- dijo Harry con la frente llena de sudor y sonriendo algo torpe.

-¿POQUITO?- grito Hermione y sus ojos se movieron a los lugares donde le dolía y sus ojos se expandieron, sus pupilas se dilataron- ¡Los centauros ellos... yo... cuando me protegiste!-

Todos se quedo en silencio, no parecía que nadie mas que ellos dos estuvieran en esa sala. Ella con la expresión endurecida y la mirada fija, pidiendo una explicación. El solo pudo sonreír mientras que elevaba su mano y le tomaba el rostro.

-Tenia que hacerlo, por que… te amo- dijo Harry simplemente mientras la miraba parecer mas enojada.

-Salgamos de aquí y te curaremos, para que yo pueda matarte por entrar en tal estado a la batalla-dijo Hermione volteándose enojada -Accio-

La varita de Harry salio de un rincón. Ella la tomo con una mano y se la coloco en la mano con brusquedad. Harry dejo salir una leve risita, esa era su Hermione, enojándose cuando tenia que enojarse y regañándolo cuando tenia que regañar lo. Ginny le lanzo una mirada de enojo a Harry justo después Luna también lo hizo, Sofí se acerco y le lanzo una sonrisita de entendimiento y al siguiente segundo caminaban detrás de su novia.

-¿Crees que alguna ves no querrá matarte?-dijo Ron acercándose y sonriendo un poco.

-Si hasta yo quiero matarte- dijo Theo negando con la cabeza- ¿Que pensabas Potter?-

-No lo se, pero por lo menos no ha intentado hacerlo ahora- dijo Harry apretándose el costado para revisar su costilla.- Si salimos de esta, tendré que huir a Estados Unidos o tendré la ira de mi novia encima por el siguiente año escolar-

-No creo que tanto tiempo- dijo Neville acercándose también, le palmeo un poco la espalda, haciéndolo gemir- Lo siento-

-No importa, vayámonos- dijo Harry pensando que si no salia en ese momento Hermione de verdad lo dejaría a merced de todos los Mortifagos -No creo que tarden mucho en volvernos a encontrar-

Caminaron a donde estaban las chicas, que parecían igual de molestas que Hermione.

-Lamento ininterrumpido su enfado grupal y en apoyo a mi preciosa novia, pero es hora de salir de aquí- dijo Harry intentando sonar lo mas normal aunque la riada de Hermione parecía querer dejarlo inconsciente.- Saldremos así. Yo iré adelante, los demás cuidaran los lados y Ron tu por detrás.-

-Yo detrás, ¿Por que?-pregunto Ron sorprendido.

-No confiaría la espalda de todos a nadie mas- dijo Harry serio.- Entonces adelante.-

Salieron caminando despacio lentamente se acercaron al elevador, después de asegurarse que estuviera vació sin ningún hechizo oculto, mortifagos desilusionados o capa de invisibilidad, entraron y apretaron el botón de la salida.

-Ha pasado mucho tiempo desde que estuvimos con ellos en las profecías, seguramente nos esperaran en los pisos superiores- dijo Hermione mirando el techo- Debemos hacer un plan para resistir, ¿Alguna idea?-

-Salir con mucho cuidado- dijeron Ron y Theo al mismo tiempo.

-Valla estrategas tenemos- dijo Ginny con la voz sarcástica.

-No entienden. Es muy sencilla la situación- dijo Theo negando con la cabeza.- No tenemos idea de cuantos son ellos, no tenemos idea de si nos esperan arriba o siguen buscándonos abajo, no tenemos idea si somos suficientemente fuertes para combatirlos, ni siquiera podemos hacer un plan bueno para enterarnos y si contamos con que ahí mucho espacio entre el elevador y la salida para invitados...-

-La posibilidad de salir de aquí rápido y sin heridas se reduce a… muy poco- dijo Ron pensando.

-Ese muy poco es. ¿Poco poco? ¿ Casi nada de poco? ¿MUY MUY POCO? O ¿QUE?- Dijo Sofí algo asustada.

-¿Mi amor?-pregunto Harry a Hermione, que ni siquiera lo miraba.

Ella le lanzo una mirada de furia desde su lugar con las manos cruzadas, suspiro y movió sus ojos pensando tan rápido como podía hacerlo. Un par de segundos después asintió.

-La posibilidad de salir sin problemas es de 0.000003%, la posibilidad de salir aunque sea lastimados es d % -asevero Hermione seria.

-¿Y la posibilidad de salir muertos?-pregunto Luna como si no fuera nada importante.

Un silencio y algunos tragaron duro mientras Hermione hacia una mueca de desagrado.

-15 %-susurro en voz tan baja que heló el aire.

-Ron ¿Que necesitarías para que salgamos del ministerio?-pregunto Harry.

Los sacaría a todos de ahí, sin importarle el que tendría que hacer.

-Un corredor directo a afuera- dijo Ron seguro y mirándolo como si fuera imposible.

-Un corredor...no podre ponerle techo así que manténgase alerta- dijo Harry tronándose los dedos y tratando de aflojar los músculos de su espalda.

-Ni se te ocurra...-comenzó Hermione con la voz molesta.

El sonido indicando que estaban en el piso superior la interrumpió y no solo eso, muchos hechizos volaron en su dirección. Harry convoco un Hechizo protector mientras que sus demás amigos lanzaban contra maldiciones. Un gemido de dentro del elevador le indico que algún maleficio logro llegar antes de convoco su escudo. Quería voltear a ver que paso, pero envió su escudo hacia enfrente y apunto al Mortifago mas cercano.

-Desmaius- dijo y una ola roja surgió de su varita directo hacia enfrente, golpeando a 4 mortifagos que se desvanecieron directamente. Uniéndose a la docena de cuerpos tirados.

Harry giro temiendo lo peor. Ginny se sostenía el tobillo, Ron le escurrida un hilo de sangre desde la cabeza hasta la barbilla, Neville tenia un rasguño en su mejilla, Theo tenia cortado parte de su camisa a la altura de su hombro y Sofí estaba enfrente de el como si ella fuera la que lo protegió. Hermione y Luna eran las únicas que parecían no estar lastimadas.

-¿Como están?- dijo Harry para asegurarse.

-Tranquilo, solo fue mi tobillo- dijo Ginny levantándose y cojeando un poco.

-Si bueno, logramos defendernos. eso es lo importante- dijo Ron intentando sonreír, pero un hilillo de sangre escurrilo por su labio.

-Estas bien, el golpe fue demasiado duro- dijo Luna acercándose- Tienes una muy buena cortada-

-Cedo que di- dijo Neville un poco raro. Ahora que lo veía mejor, parecía tener la quijada un poco ladeada.

Harry se limpio el sudor, pero al mirar su manga vio que era color carmesí. Salieron al pasillo que los conectaba directamente con el recibidor del ministerio. Hermione echo una mirada y supo todo lo que pensaba, si sus posibilidades eran malas, en ese nuevo escenario eran nulas y no tenia salida.

-Demonios... no debí haberlos traído...-dijo Harry cerrando los puños.

-No nos trajiste, nosotros venimos por que queríamos- dijo Ron dando unos pasos y pateando a los mortifagos- ademas Tu eres el que se ve peor que todos, a comparación de ti yo estoy en perfectas condiciones-

-Claro, sin los músculos y esa mirada de guerrero experimentado-dijo Luna sonriendo un poco- Pero en perfectas condiciones-

-Lo que me faltaba en este momento- gruño Ron.

Harry suspiro largamente no podía calmar sus sentimiento de que los tenia que proteger, no lo demostraban pero se les veía el miedo de lo que les esperaba y si no fuera por esos pequeños momentos de paz estarían comenzando a perder la cabeza. Lo único que les impedía salir eran como 150 metros, una cabina telefónica y podrían volar de regreso a Hogwarts. Pero su magia le indicaba de las parecencias y todas ellas listas para cuando salieran. No los dejarían ir tan fácil.

-Escúchenme un momento -Comenzó Harry viéndolos de frente y todos pusieron muecas- Creo que soy afortunado. Si me dieran a escoger de entre miembros de aurores, la orden o cualquier otro mago entrenado, yo los escogería a ustedes. Confió en ustedes y se que si mi espalda esta desprotegida ustedes estarán ahí, al igual que les prometo que yo haré eso mismo. Gracias por venir conmigo. -

-Siempre Hermano, siempre- dijo Ron sonriendo.

-No lo haría por nadie mas Potter- dijo Theo asintiendo.

-No empecemos con cosas cursi- dijo Hermione aun enfadada- Ya tienes un plan ¿No?-

-Entrare a ahí, abriré un camino, corran lo mas rápido posible a la cabina. Hermione, Luna y Theo son los mejores en el Bombarda, despejen la cabina y el cubo que sube si es necesario. Ron convoca tu escoba en cuanto puedan ver la abierta y sal con alguno en cuanto puedas.- dijo Harry seguro- En cuanto estés afuera llama a Dobby y pídele que saque a todos por la cabina. Y si en ese momento ya esta reunidos directo a Hogwarts.-

-Sabemos que planeas, Harry- dijo Ginny intentando caminar pero cojeo al hacerlo.

Hermione le miro y negó. Le advertía que ni si le ocurriera, lo que obviamente se le ocurrió.

-Yo iré detrás de ustedes todo el tiempo- dijo Harry sonriendo un poco- créanme es lo único que se puede hacer-

Sofí, Neville, Luna y Ginny vieron a Ron, Theo y Hermione. Buscando una opción secundara algo mas, o un solo indicio de que no era el plan a seguir. Ninguno de los tres pudieron pensar un plan mejor, al final asintieron. Sin decir nada mas se giro y camino por el pasillo directo a la puerta que daba a la recepción. A. Pero a la siguiente era preocupante, mas de un centenar de señales mágicas. Harry la encaro y extendió los brazos, en señal de que pararan. Se concentro, de su brazo izquierdo el aire comenzó a remolinarse como un pequeño tornado, en el derecha creo una pequeña bola de fuego comprimida en la punta de la varita.

-¿Esto aumentara nuestras probabilidades?-pregunto Harry con una sonrisa a Hermione mientras acumulaba mas magia, creando un vendaval en el pasillo y que se calentaba con la pelota de fuego que ya tenia en la varita.

-50 a 50-contesto Hermione algo feliz.

-¿Por que no comenzaste con eso?-preguntaron molestos.

-EN CUANTO SE ABRA EL PASILLO, CORRAN CON TODAS SUS FUERZAS- GRITO Harry para hacerse escuchar.

Uno… pensó… dos… que esto funcione… tres. Lanzo la bola de fuego a la puerta. La atrezo como un cuchillo caliente en mantequilla, y después de un montón de gritos el calor comenzó a quemar la puerta. Con el brazo conteniendo el aire, dio un potente puñetazo a la puerta. Se desprendió sin ningún problema, el aire agito todo a su alrededor y no pudieron ver nada. Harry llevo su manos al suelo con todo y varita. Un muro de tierra y de lo que estaba echo el piso se crearon a cada lado de la puerta tan alta como podía, que era un poco mas arriba de su cabeza.

-AHORA-grito Harry y vio como todos comenzaban a correr.

Siguió a los demás, mientras escuchaba a muchos lanzar maleficios contra el muro, pero algunos simplemente levantaban polvo y tierra, otros explotaban el muro pero ya en la parte trasera. Vio a un Mortifago que intento saltar el muro y acorralarlos en frente, pero Luna fue mas rápida y el Mortifago callo en el pasillo inerte.

-Reducto- gritaron muchos al mismo tiempo.

Y Harry vio como se detenían todos, mientras los muros del pasillo en la parte de enfrente se reducción a polvo y como poco a poco la parte delantera era desintegrada. A su derecha la fuente resonaba y a su izquierda se veían las chimeneas apagadas. No lo lograrían, apenas y avanzaron la mitad. Adelante muchos mortifagos y en la parte trasera muchos mas comenzaban a encerrarlos.

- Chicos...-

Una nueva explosión, mucho mas alejada y potente. En la entrada a visitantes ya no existía la cabina telefónica, en su lugar era como una chimenea de tierra. A lo mejor alguno logro llegar y ahora estaban a punto de salir. Entonces un par de nubes blancas entraron por el hueco. El centenar de personas se quedo quieta durante un segundo.

-Ventus- aprovecho el momento Harry combinando el hechizo y la magia de viento arrojando potentes ráfagas que dañaría a cualquiera en la parte trasera y luego corrió a la delantera, pasando a todos y quitando a Luna para ver el frente. Un segundo después el aire a presión expulso a todos los mortifagos que comenzaron a entrar al pasillo.-Defodio- Igualmente que con la magia elemental de viento, combino el hechizo excavador con la de tierra para aplanar el lugar. Liberando todo el recibidor de los muros y dejando dos senderos llenos de tierra y ver todo su campo si quería pelear bien.

Sobretodo frente a esas cosas nuevas que se acercaban. No fue necesario las nubes cayeron rodeando a sus amigos y a el. Antes de que pudiera pensar en algo o hacer algo a las nubes, estas expulsaron a los mortifagos mas cercanos. Al momento Harry vio como las nubes se disipaban mostrando a, Sirius, Lupin, Moody, Tonks, Kingsley, el señor y señora Weasley, Charlie, Fred, George, Bill incluso Fleur y Cedricc.

Fue entonces cuando su concentración cedió un poco y su cuerpo se debilito, su magia casi abandono su cuerpo mientras que cada musculo dolía. Estaba realmente cansado, hacer todo con la espalda y la costilla lastimada estaba cobrándole muy caro. Ni siquiera su magia sensorial estaba activa ya. Lo que evito que viera a Lucius. Apareció de un lado listo para lanzar un maleficio, pero Tonks ya avanzaba hacia ellos lanzando un hechizo expulsor, que lo golpeo y lo lanzo muy lejos.

-¿Como estas?-pregunto Tonks sin detenerse de proteger y contra atacar.

Todos los mortifagos peleaban duramente, pero Moody parecía todo un guerrero agitando su varita lanzando hechizos a diestra y siniestra, mientras su ojo giraba en 360 a una velocidad desquiciada.

-¡PERO QUE HUEVOS MUCHACHO! ¿POR QUE CARAJOS ESTAS AQUÍ?-Pregunto Moody realmente molesto. El contesto gimiendo, su espalda ya le impedía caminar o hacer algo.

Lupin aunque parecía mas enojado que nunca estaba combatiendo a 3 sin ayuda de nadie, Kingsley era tan fiero como Moody aunque este parecía planear sus ataques y evitar que se acercaran a sus amigos. Los señores Weasley no eran tan diestros pero cuidaban sus espaldas, Fred y George, ya tenían a Ginny a su lado mientras Ron les cuidaba la espalada, soltaban algunos artilugios Weasley y a la menos apertura de la boca de los mortifagos metían dulces sangrantes o vomitivos haciéndolos dar arcadas, mientras sus otros dos hermanos se apuraban a inmovilizar o desvanecer a sus atacantes. Charlie parecía completamente tranquilo, al tratar con dragones. Harry supuso que eso era como una fiesta para el, sin en cambio Bill se lucia peleando con maldiciones egipcias algunas que enterraban a sus enemigos y convirtiendo el escombro en escarabajos que atacaban a los Mortifagos. Fleur tenia lo de princesa lo que Moody de amable, nada. Lanzaba su aura veela a los mas cercanos que se distraigan para luego dejarlos comiendo el polvo. Y Cedricc sobrevolaba todo con giros y movimientos de quidditch atacando a todos aquellos que no se percataban de el.

-Harry esta herido, no puede continuar peleando- informo Hermione a las espaldas de la señor Weasley repeliendo un hechizo morado.- Sáquenlo de aquí-

- Toma mi mano Harry, ya que Neville no pude pelear ira contigo-grito Tonks a su lado, mientras el otro estaba Neville intentando hacer algo ya sea aventando piedras o quitando a alguno de dirección de los maleficios.

-No- gimió Harry intentando enderezarse, lo que le nublo la vista y casi lo derriba nuevamente.

-VE CON ELLA. MOCOSO IMPRUDENTE- grito Moddy justo cuando un hechizo rosaba su cabeza, al siguiente segundo lanzaba un hechizo hacia su atacante.

-¿Que hacen qui?-pregunto Harry lanzando un hechizo sin siquiera mover su mano contra al Mortifago mas cercano. Aun tenia su control de magia para atacar. Aunque eso significaba menos magia para curarse.

-Tus elfos-dijo la señora Weasley que le cubría la espalda su voz casi totalmente enojada.-Te desobedecieron. Nos dijeron a donde te dirigías con tal de protegerte, fue tan...-

-Demonios Dobby...- grito Harry sintiéndose traicionado.

-No es momento de que te enojes- dijo Sirius excitado por la batalla al momento que empezaba a abrir un espacio entre los mortifagos para que todos comenzaran a avanzar.

-Si no fuera por ellos, estarías enfrentándote solo a todos estos- dijo Lupin que mantenía una leve sonrisa en sus labios, al parecer extrañaba las batallas. Sobretodo a lado de sus amigos.-Ahora entiendes por que…-

No pudo terminar de rio a Lupin, una cuerda se ato a su torso lastimando le mas la espalda y la costilla. Tonks se dio cuenta y estiro su mano, tal vez para desaparecer, no lo hizo a tiempo.

-¡HARRY!- escucho gritar a varios entre ellos a Hermione.

El ya era alzado del suelo y salio volando pasando rápidamente entre los mortifagos e intentando sostenerse a algo. Incluso a la cara de un feo Mortifago el cual termino siendo arrastrado por un tramo. Pero al final llego a las manos de un rubio con la mirada de loco y la frente sangrante, Lucius lo sostenía por el cuello y apretaba su garganta evitando que respirara.

-Gracias por el truco, Draco me contó como lo golpeaste el año pasado, una muy buena forma de acercar objetivos lejanos ¿No Potter?-dijo Lucius pareciendo desquiciado.

Apenas podía escuchar los gritos a través de el tumulto, algunos ya se lanzaban en su dirección. Su respiración era cortada totalmente, pero pudo ver por un instante, como Sirius parecía totalmente enojado lanzando una gran explosión delante de el hiriendo a dos o mas mortifagos. Kingsley se enfrentaba a tres al mismo tiempo, Bellatrix empezaba a tacar a Ginny y Luna las cuales juntas las estaban metiendo en problemas, sobretodo por que no veía a Sofí que las protegía de cualquier daño directo. Y fue entonces cuando sintió que algo se caria de su bolsa de pociones. El seguro fue completamente arrancado dejando que se desplegara por su pierna y algunos frascos cayeran, estrellándose en el suelo y derramando todo. Pero una bolita negra sonó al caer como si estuviera echa de acero y rodó unos centímetros. No podía perder la, seria fatal. Estiro la mano sin su varita directo a la barbilla de Lucius.

-¿Que piensas hacer?-se burlo Lucius.

Al siguiente segundo su cara se alzo completamente hacia arriba, una sola ráfaga de viento concentrado. Como Revé y Griffin le hicieron entrenar asta el cansancio con la vela. Tosio fuerte al sentir que su garganta ya no era presionada. Se lanzo al suelo para tomar la bolita, pero fue pateada por Lucius y el apenas tuvo tiempo para quitarse de la trayectoria de su siguiente patada.

-Accio- dijo Harry apuntando a la bolita mientras flotaban en el aire. Y giro para ir directo a el, ya la esperaba cuando Lucius lo empujo con el hombro y caía nuevamente, directo en su espalda y haciendo que se encogiera por el dolor intenso que cruzaba su cuerpo.

Al alzar la vista vio a Lucius sosteniendo la bolita y sonriendo con malicia. Como si pensara que eso era algo muy valioso.

-¿Que es esto Potter?, acaso el secreto detrás de tu poder- dijo Lucius llevándoselo a la boca.

-NO. LUCIUS NO LO HAGAS. ESO ES...-grito Harry intentando levantarse, y mil agujas cruzaron por su columna vertebral. Apenas y se pudo concentrar para ver como mordía un poco.-no-

Lucius se tambaleo y parpadeo varias veces. Su cuerpo se ilumino de un color azul blanquecino y de sus labios salio vaho. Sonrió mostrando todos sus dientes, mientras su rostro demostraba la seguridad de que el poder entraba en su cuerpo. El resto de la bolita callo pero como un polvo que regreso al cuerpo de Lucius y se introdujo a través de su piel.

Alguien lo tomo de los brazos y comenzó a arrastrarlo hacia atrás. Giro la vista lo suficiente para ver a Theo escupiendo sangre y intentando alejarlo lo mas posible de los mortifagos.

-¿Puedes levantarte? ¿Que fue lo que se comió?-cuestiono con la voz jadeante y adolorida.

-No- dijo mientras volvía su mirada- El… el… ingirió la enfermedad de los gigantes azules-

-Experliarmus- dijo Theo lanzando a otros dos mortifagos lejos y sentándolo a las orillas de la fuente.-¿Que es esa enfermedad?-

-Una enfermedad que te por al ocupar la magia de Utgar al 100% sin que tu cuerpo este preparado- dijo Harry mirando a Lucius que avanzaba enfriando a todo a su paso y dejando huellas congeladas- Una enfermedad que expulsa la magia de tu cuerpo creando un poder abrumador...-

Lucius llego muy cerca de ellos, Theo lanzo un feroz ataque de hechizos que repelió con un solo manotazo. El aura azul aun lo cubría.

-...y después te destroza desde adentro- termino.

Desde que logro curarse de ella, el ni siquiera pensó en perder de vista esa bolita, que era una masa de energía maligna y una enfermedad en todo su cuerpo comprimida y encerrada en una protección ligera. Si alguien tan solo la aplastaba con la mano esta entraría en su cuerpo, sin importar si una fracción lo roso o no. Y como era indestructible al fuego o de otras formas, lo mas seguro era resguardara la , por eso Harry la traía siempre consigo. No espero que un idiota como Mortifago pensara que era para comer y menos que lo mordiera sin saber que era.

Lucius Malfoy paro de repente, mientras Theo ya lo tenia a un metro de distancia. Se llevo una mano al estomago demostrando su dolor, su cara se lleno de sudor y los dientes comenzaron a castañear. Se tambaleo, gimió de dolor mientras en su piel se comenzaban a crear moretones de colores exóticos, quedando como si alguien le hubiera dejado debajo de una espray de pintura de todos los tipos de colores. Y después de unos segundos comenzó a retorcerse, cayo al suelo convulsionando, despidiendo espuma por la boca y los ojos llenos de liquido azul.

Quito su vista de la horrible escena al igual que Theo, solo para encontrarse que todos avanzaban lentamente hacia ellos dos. Entonces Harry escucho la fuente a sus espaldas… el agua que había utilizado no fue la suficiente para curarse, pero si tenia toda la fuente…

-THODORE TRAIDOR, INMUNDO, EMBUSTERO, HIPOCRITA, DESLEAL-Le gritaba un hombre a su amigo.

Y al ver quien era, vio que era el padre de Theo.

-Padre...- dejo salir Theo con dolor en la voz y palideció de golpe.

-Maldito traidor, tendrás tu merecido en cuanto te entregue a mi señor- dijo el padre de Theo con enojo. Lanzo una serie de Maleficios sin siquiera importarle si era su hijo o no.

-Para padre...- dijo Theo desviando los hechizos y pareciendo a punto de soltarse a llorar.

Harry se incorporo un poco y se acerco a la fuente.

-Por eso mate a tu madre, a esa traidora ara que tu no la sugieras y … -dijo el padre de Theo bastante enloquecido.

-¿Eras tu?- pregunto Theo desconcertado y bajando la varita. Vio como la cara de su amigo se ensombrecía y temblaba, dejando caer sus lagrimas contenidas.- ¿Mataste a …?-

-Sectu...- comenzó su padre pero Harry ya tenia una mano dentro de la fuente y el agua comenzaba a rodear lo.

-Lo lamento Theo- dijo Harry por su siguiente movimiento.

Estiro la mano y un chorro de agua golpeo al padre de Theo, alzándolo y enviándolo directo al techo, se golpeo la cabeza y el agua lo arrastro de igual forma mientras era golpeado una y otra vez con las diferentes secciones. Hasta que la fuerza de Harry flaqueo dejándolo caer en medio de una llovizna de gotas.

-Theo- llamo Harry mirando a su amigo temblar.- De verdad lo lamento-

-No- dijo Theo girándose su rostro furioso- Yo soy el que lamento tener a ese monstruo como padre.-

-No tienes que...- comenzó Harry dejándose caer en la orilla.

Una nueva tanda de Mortifagos aparecieron…

-desmauis- dijo Theo apuntando al Mortifago que ahora lo atacaba.- Dejate de disculpar. Maldita sea Harry, tu eres el único que me dio una familia… una verdadera familia. Los Pendragon. Así que cuando salgamos, alcemos la escuela sin importar que o quien se nos interponga. ¿De acuerdo?-

Harry asintió. Antes de siguiera voltear supo que todos ya habían llegado a donde ellos dos estaban y los rodeaban. Sintió a Hermione a su lado ayudándolo a levantarse. No tuvo mucho tiempo de curarse nuevamente pero por lo menos podía pararse.

-Bien echo muchacho, aguantaron excelente. Ahora todos a afuera- dijo Moody lanzando un Mortifago a metros de distancia. Su ojo parecía no parar y comenzaba a lanzar una fina linea de humo de el.

-Esto no egs bueno- dijo Fleur pareciendo totalmente nerviosa.

Harry entendió, viendo que los Mortifagos caídos eran levantados por otros y algunos heridos seguían lanzando maldiciones a ellos. Aun con todos ellos la situación seguía siendo precaria.

-La caballería esta por llegar, hermosa- dijo Bill, justo después de hacer que un Mortifago terminara colgando del techo.

Tonks callo de rodillas, un hechizo le daño pierna y no podía culpar a la metamorfamaga, todos a su alrededor jadeaban y parecían a punto de rendirse. Harry levanto la varita y miro la dirección, la causante fue Bellatrix quien se reía a carcajada limpia. Miro a Hermione que le daba la espalda protegiéndolo y como todos se encontraban encerrándolo en un circulo.

Se sintió un inútil y al apretar la varita sus nudillos tronaron. Escucho aun como la fuente se encontraba detrás de el y giro. No debía dudar si quería salir. Y de un chapuzon entro.

-¿Que haces Harry?- pregunto Sirius gruñendo y enseñando sus filosos colmillos.- No es momento de jugar-

-AL contrario- dijo Harry sentándose en posición de meditación. El agua le llegaba a la mitad del pecho.- Es hora de hacer olas-

Acumulo magia casi al borde de sentirse sin un gramo de ella, cerro los ojos y imagino que la magia rodeaba a todos y cada uno de los que estaban peleando a su lado. Como su magia se arremolinaba entre el agua y el aire y como tomaba un color grisáceo en cada gota y abrió los ojos. Toda el agua brillaba de color gris.

Con todas su fuerzas el agua creo una ola, que eludió a todos ellos, que se asustaron, pero estaban bien en cúpulas de aire. El agua dirigida a los mortifagos los obligaba a correr, retroceder, ser golpeados o intentar protegerse. Algo era seguro, solo era una medida para retrasarlos. Al segundo un gran numero de mortifagos se paralizo y cayeron al suelo incluido Greyback que parecía recién regresar de el cuarto de las profecías.

-Bastante bueno- Grito Sirius sorprendido y impresionado.

Nuevamente se reanudaron los hechizos, algunos muy lejanos. Pero el agua sobre ya se desperdigaba por todo el recibidor y la fuente ya no funcionaba. Jadeaba del esfuerzo, el aire parecía no querer ingresar a sus pulmones mientras uno de sus ojos ya tenia un ligero temblor.

- ¿Y la profecía Harry?- pregunto Lupin entrando en la fuente y levantándolo de un solo movimiento. Sin consideración por su espalda.

-Destruida, Voldemort jamas la obtendrá- dijo Harry lanzando a un Mortifago que estaba atacando a Hermione a mas de 10 metros de distancia de un solo movimiento de varita. Su magia ya no respondía como deseaba, el quería aturdirlo.

-Creí que querías escucharla- dijo Lupin sonando algo feliz- pero veo que has aprendido algo-

-No he aprendido nada, mira el lio que he armado- dijo harre sintiéndose mas que culpable.

-Toma a los demás y vete, Lupin- dijo Moody pareciendo mas concentrado a cada segundo- No creo que podamos con todos.-

-Dumbledore- dijo Hermione con voz cansada y las piernas temblando.

-No sabemos donde esta- grito Ron a su lado.

-NO- grito de regreso Hermione y señalo a otro lado - Dumbledore-

Harry se giro no hacia donde apuntaba su chica, se veía muy enojada pero al notar su mirada le dio una ligera sonrisa. Harry casi sintió alivio y mas que alegría por que Hermione estuviera bien prepara para pelear. Volteo a ver donde estaba señalando, justo en la entrada donde estaba el hueco a la salida, estaba Albus Dumbledore.

Alzando su varita, su rostro blanco y lleno de furia. Harry sintió una descarga eléctrica a través de cada partícula de su cuerpo que si no mejoro sus heridas por lo menos le dio energía renovada… tenían una coraje. Un odio profundo y sin medida. No era suya.

Dumbledore blandía su varita, lanzando mortifagos por el aire, aturdiendo a otros, Protegiéndose y sobre todo tratando de llegar a donde ellos estaban. Uno de los mortifagos se movió rápidamente corriendo hacia el intentando utilizar fuerza en lugar de magia pero Dumbledore con el movimiento de la varita giro al mago que salio girando y golpeando el muro.

-Esta aquí...- comenzó Harry intentando llamar la atención.

Ron asintió sonriendo de lado a lado,pero Harry no se refería a Dumbledore.

Nadie se dio cuenta de la nube negra que se trasportaba directo a ellos. No directo a el. De un empujo quito a Lupin tirándolo a la poca agua. La ráfaga de color negro lo arrastro lejos de todo. Ardió de verdad, cada musculo de su cuerpo fue bombardeado con dolor y sobre todo en la frente. Voló a través de la sala no solo un par de metros sino hasta el otro lado justo al lado del salón. Golpeando la pared y dejando que cayera sentado, exhausto y adolorido. En aquel lugar se veía la fuente completa, al mago, la bruja, el centauro y el elfo domestico parados encima de una fuente sin agua. Se sentía aturdido adolorido, pero sobre todo le ardía la frente tanto que se llevo la mano a la frente.

Una gran explosión sonó, vio como Dumbledore acorralaba a casi el resto de los mortifagos, ojoloco sostenía en su hombro a Tonks inconsciente. Kingsley peleaba con Bellatrix y otro hombre con cara malvada. Neville se alejaba de la pelea protegiendo a Hermione, Luna y Ginny que parecía estar cojeando mucho mas ademas de que una parte de su cabello estaba mucho mas corto de lo común. Theo y Ron, peleaban espalda con espalda contra un grupo menor de mortifagos que sin siquiera darse cuenta estaban siendo reducidos. Sofí estaba con los Gemelos que parecían ya no tener ni un sortilegio a la mano.

El alma de Voldemort se revolvió en su interior con vigor dentro de el casi tanto que por un segundo pareció verse a si mismo desde un punto a lado.

-Hola, Potter- dijo una voz alta y fría que heló la sangre a Harry.

Giro su cabeza un poco viéndolo bien, alto, flaco, con un túnica negra, su cara de serpiente, blanca y demacrada y con sus ojos amoratados y pupila en forma de rendija mirándolo fijamente. Lord Voldemort estaba parado frente a el, Harry utilizo toda su fuerza para tomar su varita, pero Voldemort fue mas rápido y lanzo su varita mucho mas lejos de lo que podía ver.

-Entonces, escuche que explotaste nuestra profecía- mascullo Voldemort despacio y la voz tranquila mientras esos ojos despiadados se enfocaban en el- Veo que has crecido en este año y que aun intentas oponerte a la conexión que se hizo con tu sangre. meses de preparación, esfuerzo... y- giro a ver la batalla que aun se realizaba a su espalda-...mortifagos, como dejaron que frustraras mis planes otra vez...-

-Amo, lo siento-dijo una voz chillona a lado.

Algo muy parecido a una rata estaba temblando, tenia una mano de plata y parecía mas golpeado que nunca, la escuálida imagen de Peter Pettigrew estaba a lado de Voldemort.

-Callate, colagusano -contesto Voldemort peligrosamente -En un momento veremos que hacer con esos-

-pero amo el... el esta qui- dijo Peter.

Valdemoro no le presto atención. Y mejor se sostenía con fuerza la cicatriz, mientras ocupaba todas su fuerzas en no ceder paso al alma dentro de el. Pero en cuanto lograba levantar una barrera mental era destrozada. Ya no tenia su magia y el poder de Merlín no sabia controlar ni ocupar lo… bueno ni siquiera terminaba de entender como estaba dentro de su cuerpo

-Me fastidias Potter- dijo rápidamente Voldemort- Me has fastidiado por mucho tiempo, has estado evitando mi control ademas de que ahora has destruido una profecía que podría darme la ventaja en la batalla ahora morirás. "Avada kedavr..."_

Harry suspiro lentamente, dejo de crear barreras mentales y se olvido de sus dolores, girando para tomar su varita pero al segundo una gran fuente de agua golpeo a Voldemort desde la espalda. Aprovecho para gatear un par de metros y tomar su varita.

-pietrotum locomota- grito una voz muy furiosa.

Enseguida la dorada estatua del elfo cobro vida y se movió, después el centauro, pero una pierna ya la tenia destruida por lo cual callo al suelo haciéndose piezas mucho mas pequeñas. Con la mitad del cuerpo bien y intentando arrastrare con las manos.

-¿Quien demo...?-grito Voldemort, librándose del agua y viendo al dorado elfo lanzando un manotazo, separando a Voldemort y Harry.

Voldemort levanto su varita y otro destello salio de ella pero no en su dirección, si no en dirección de Dumbledore que miraba la escena. Al instante Dumbledore levanto un montón de escombro el cual golpeo el hechizo y desapareció en los pequeños trozos. Una vez mas el profesor movió su varita reviviendo esta ves al mago y la bruja que se alzaron y empezaron a atacar a Voldemort, el resto de mortifagos atacaban a las estatuas olvidándose de los demás. Al verse apartado de la batalla se reagruparon a la salida junto a la cabina.

Harry echo un ultimo vistazo, todos parecían heridos pero lo suficientemente fuertes para estar de pie, incluso Tonks era cargada por Lupin pero ya tenia los ojos abiertos. Miro a Hermione la cual era retenida por la señora Weasley y Fleur de ir en su dirección. Y eso le alivio, estaba fuera de peligro.

La gran mano del elfo protegió a Harry al segundo cuando que un hechizo se dirigida a el. Rebusco algo que pudiera utilizar ya que su magia estaba casi agotada, solo encontró que los frascos de pociones que le quedaban no le ayudarían en nada. Lo de su monedero no ayudaría. Pero si lograba acumular magia encontraría un arma mejor.

-Fue una tontería venir aquí esta noche, Tom- dijo Dumbledore con calma pero sus ojos llenos de ira- he llamado a todos los del ministerio, no tardaran en llegar-

-Para entonces ya me habré retirado, usted y Potter estarán muertos- escupió Voldemort, envió otra maldicion asesina directo al profesor.

El cual solo se quito de su camino y le dio al piso revotando directo al techo donde se desprendió una lampara. Dumbledore agito su varita y creo una enorme fuerte aura de magia que Harry casi sentía peligrosa al estar a esa distancia. Voldemort se vio obligado a crear un escudo plateado y brillante de fino aire para reflejarlo. Y un sonido de electricidad chocando comenzó a sonar a pesar de que tanto Dumbledore como Voldemort estaban quietos.

-No puedes matarme Dumbledore- dijo Voldemort sonriendo-¿A su edad eso es imposible?-

-La edad es lo de menos Tom. Y ambos sabemos que hay maneras de destruir algo que se dice indestructible- replico Dumbledore calmadamente, mientras caminaba hacia Voldemort, como si no hubiera nada que temer, como si solo fuera un paseo por el recibidor- El tomar tu vida no me satisface. No me agrada nada ¿Lo entiendes?, Tom-

-No hay nada peor que la muerte, Dumbledore- gruño Voldemort.

-Te equivocas- dijo Dumbledore, acercándose mas. Harry seguía intentando calmar todo el dolor y ardor que sentía al mismo tiempo que intentaba recuperar magia.- Tu miedo a la muerte siempre a sido tu mayor debilidad-

Una gran ráfaga de luz verde fue directo a Dumbledore fue el mago de piedra que se puso enfrente de soledumbre recibiendo el hechizo quedando destruido al instante. Pero antes de que los fragmentos tocaran el piso Dumbledore agito su varita como látigo y una flama surgió de ella, delgada y ardiente se enrosco alrededor de Voldemort, pero el escudo se expendio protegiéndolo de la llama. La ardiente cuerda se volvió una serpiente que aflojo de inmediato la atadura de Voldemort y se volteo siseando directo Dumbledore.

-vipera ivanesca- dijo Harry justo cuando el animal abría las fauces para atacar a Dumbledore, al segundo la serpiente se desvaneció. Dumbledore miro a Harry que seguía en el suelo, sosteniéndose con una mano la cicatriz he intentado acumular magia.

Voldemort desapareció, y cuando apareció estaba directo a la espalda del profesor, un estallido de fuego surgió de la boca de Voldemort, Dumbledore se movió a tiempo y el agua de la fuente creo un escudo, el fuego se consumió al igual que el agua dejando el ambiente caliente y con vapor por todos lados. La ráfaga de luces y colores salían de todos lados aunque, no se veía a medio metro mas aya.

-Ventus- dijo Harry, al siguiente instante el aire creció y expulso toda la neblina hacia arriba.

La vista podía fallarle pero Voldemort estaba parado en la fuente y Dumbledore a poca distancia de el atrapado en algo que parecía cristal. Al instante reacciono. Por primera vez Dumbledore parecía asustado dentro de su prisión de cristal. Harry se levanto con todo lo que le quedaba y preparaba el resto de su magia para darle aunque fuera una mínima oportunidad a Dumbledore. Lo ayudaría sin importar si su cuerpo se rompía una vez mas.

-Finite incatatem-

El vidrio se quebró y Dumbledore estaba liberado, al segundo creo una enorme corriente de vidrio que salia volando alrededor de Voldemort.

-Harry, no me ayudes-dijo Dumbledore con tono de autoridad.-La necesitas-

Voldemort hizo que el cristal de hiciera arena y pareció explotar lanzando un torbellino de aire que golpeo en todas direcciones. El estaba anonadado. Solo quedaba el, Dumbledore y a lo lejos el grupo de sus amigos y la orden.

-¿Donde est...- comenzó Harry caminando lentamente.

-No te muevas, Harry- dijo Dumbledore alzando su mano.

Sintió un poco molesto, luego enojado y al ultimo una furia incontrolable subía por sus venas. La arena combinada con el agua se deslizaba por su pierna y no parecía arena común era negra. La cicatriz ardió mas al punto que ya gritaba desesperado, sin darse cuenta. Tomándose la herida mágica con fuerza he intentando arrancarla, la sangre comenzó a escurrir por su frente y las manos se le llenaron de color carmesí. Un dolor insoportable le obligo a caer de rodillas y verse en el reflejo del agua, sus ojos eran completamente color sangre, su cara tenia lineas dibujadas de color negro y a su piel se sentía llena de arena. Era la arena en que exploto Voldemort, estaba pegado a su piel, marcando la mitad de su cara con un diseño de serpientes. Su cuerpo dolía como nunca y su mente estaba bañada en ácido. Aun así se levanto lentamente, a cada movimiento sentía una gran descarga de dolor por cada nervio.

-Siempre tan mandón ¿Verdad?- dijo Harry con la voz de alguien mas, Voldemort se apoderaba de el.

Harry movió la varita un poco, al segundo el elfo doméstico de piedra corrió agitando sus brazos en dirección de Dumbledore, la bruja salto enfrente y ambos se golpearon dejando un montón de piedras doradas esparcidas por doquier

-Siempre ocultándome cosas, siempre haciendo todo por un bien mayor, siempre haciéndome sufrir-dijo Harry mientras se sentía como muriendo.

Cada parte de el rogaba morir, se sentía usado y casi temía lo que venia. Escucho una voz desde la lejanía, la voz de Hermione que gritaba.

-NO… HARRY… DESPIERTA HARRY-

Fue suficiente para que una parte de el regresara.

-Mata me ahora Dumbledore- dijo Harry con su voz, mientras caía de rodillas nuevamente e intentaba sacarlo-Se… se apodera...de -

-Si la muerte no es nada, mata al chico...- dijo Voldemort que parecía salir de su propia boca.

-Escucha Harry, tenemos que hablar, pero...-

-SILENCIO- Grito Harry con su voz combinada con la de Voldemort. Alzo la varita y el agua se alzo, creando lanzas de hielo que volaron directo a Dumbledore.

El profesor lanzo un hechizo que convirtió todas las lazas en gotas de lluvia fina.

-SIEMPRE HACIENDO LO QUE USTED CREE MEJOR, SIN CONSIDERAR A LOS DEMÁS, SIN PENSAR EN EL DAÑO Y SUFRIMIENTO QUE ME HA ECHO PASAR- Grito mientras su visión cambiaba a rojo.-¿QUIEN LE DIO DERECHO A DECIDIR EN MI VIDA? POR SI NO LO RECUERDA MIS PADRES MURIERON. NO TIENE NINGÚN DERECHO SOBRE MI-

-Escucha Harry no eres tu- comenzó Dumbledore dando pasos despacio y miedo en sus ojos.

-CLARO QUE SOY YO VEGETE-continuo gritando mientras tenia que hacer un esfuerzo por que su mente no se nublara- CREAME QUE EL QUE DICE TODO SOY YO. ¿COMO SE ATREVE A ENCERRARME EN PRIVET DRIVE? ¿POR QUE INTENTO ALEJARME DE HERMIONE? ME TRAICIONO, DUMBLEDORE. ME DEJO SOLO, INCOMUNICADO Y AFERRÁNDOME A MIS DESESPERACIÓN.-

-Yo...-

-PUSISTE EN PELIGRO A DAPHNE- interumpio Harry chirriando los dientes-¿Por que?-

-Necesitaba saber si protegerías a todos los que aceptaron entrar en Pendragon- dijo Dumbledore con la voz paternal que lo solía caracterizar- Y admito que has sorprendido al proteger no solo a los Pendragon y a la señorita Granger, al salvar a Gabrille Delacour supe… que veía al gran mago de este siglo.-

-¿Y POR QUE ME ENCERRÓ EN PRIVET DRIVE? Quería que su arma se mantuviera a salvo ¿no?- dijo Harry tronándose el cuello, Voldemort no se quedaba tranquilo, peleaba por el control de su mano.

-Al escuchar tu historia entendí que tu conexión con Voldemort se amplificaría. Creí que al estar cerca de la sangre de tu madre, tu tía, la conexión se debilitaría un poco. El contacto con la magia podría interrumpir...-

-LA PROTECCIÓN DE MI MADRE SE PERDIÓ. EL ME PUDO TOCAR Y SU MENTE ME HA ATORMENTADO POR MESES-grito Harry inclinándose u comenzando a Jadear Voldemort ganaba terreno.- Y EL QUE ME EXCLUYERA… YO… LO ADMIRABA. CONFIABA Y...-

El corazón de Harry se lleno de emoción, algo dentro de el se reía, o mas bien alguien estaba riéndose en la realidad, era el. Se reía a carcajadas, pareciendo que algo muy divertido pasaba. Se escuchaban los gritos llamándolo de todos, pero no podía discernir que realmente decían, era imposible escucharlos, el dolor subía desde sus piernas hasta su cabeza lentamente destrozando una y otra ves cada tramo de su ser. Cuando alzo la vista Dumbledore se encontraba frente de el.

-¿Harry, puedes escucharme?-

-Es su única oportunidad- contesto Harry, su dolor ya lo superaba, sus músculos parecían estar siendo invadidos por descargas eléctricas que despedazaban con precisión milimétrica cada arte de su ser.- Mate me...-

-No Harry… no puedo, por que yo te aprecio-

-Entonces… a ganado- dijo Harry sin poder sostener su voluntad un segundo mas.

Callo en la mas profunda oscuridad, totalmente encogido y temblando. No tenia a donde ir o por que salir de ahí. Las sombras le acogían protegiéndolo de la luz que solo desgarraban su piel y lo hacían sufrir mucho. Esa oscuridad era parte suya y el era parte de ella. Pero algo le lastimaba los ojos e intento abrirlos, las imágenes flotaron sobre su mente.

Sus tíos, golpeándolo por tirar la comida sin querer a los 4 años, luego en la escuela donde Piers y el grupito de Dudley lo sostenian mientras su primo lanzaba un golpe a su estomago haciendo que le doliera su estomago y que escupiera algo de saliva. La ves que había incendiado la cocina por que un poco de aceite callo y el se asusto, tío Vernon le tiro del pelo y lo lanzo dentro de la alacena, donde la oscuridad, las arañas y los bichos eran su única compañía por días. La tristeza y dolor le invadían, la imágenes se repetían con los años, cada ves mas entre crecía dejaba de sentir, ya no importaban los golpes, ya no importaba los gritos o el que lo encerraran. Ya no importaba si vivía. Lo único que dolía de verdad era seguir viendo como Dudley caminaba tomado de la mano de su padre y su madre, los tres felices mientras que el estaba solo en su mundo.

-Lo ves ni en tu infancia te querían, eras solo un estorbo, una basura que se guarda en el lugar mas sucio de la casa. Un sirviente que debe obedecer a su amo- dijo Voldemort que estaba parado junto, tenia una sonrisa malvada.- Eres tan poco Potter-

Ahora estaba en al sala de Drive Drive, donde Vernon quemaba sus cartas de Hogwarts mientras sonreía ampliamente y el no podía hacer nada. Solo en el piso de tierra de una helada y lejana cabaña, dibujando un pastel que ponía "Feliz cumpleaños Harry", el viento afuera azota y pensaba que si se cayera el techo el podría dejar esa vida por fin e ir junto a sus padres. La imagen se disolvió ahora estaba siguiendo a McGonagall, quería decir que lo hizo por algo bueno, pero la mirada iracunda de la profesora le daba miedo.

Intentar cerrar los ojos no funcionaba, las imágenes seguían fluyendo cortando un poco mas de su alma y dejando que sangrara lenta y dolorosamente.

La mirada cambio ya no era la de McGonagall era la de Snape y el odio dentó de sus ojos, el solo quería no seguir sufriendo, no quería seguir siendo el lastre que era. Sentía como ahora estaba solo en la enfermería con el brazo roto sintiendo como sus huesos crecían, el sentimiento era igual a agujas picando dentro de su hueso mientras dejaba caer gruesas lagrimas al intentar no hacer ningún ruido. Y ahí estaba la cueva sucia y oscuro con un colmillo clavado en el brazo y sintiendo el ardiente veneno acabando con su vida. Lo peor es que no le importaba morir, solo quería descansar un poco de todas esas miradas de odio y miedo que le daban los alumnos de Hogwarts, quería que su corazón ya no estuviera lleno de tinieblas.

-Luchando, sin que nadie supiera el dolor y sufrimiento que sentías a cada paso. Cada que intentabas salvar el mundo, pensabas, que si lo lograbas dejarías de sangrar y podrías vivir. -rio Voldemort colocando un frio pie encima de su cara y el ni siquiera se movió. - Es inútil, tu alma y corazón sangraran por siempre. No importa a donde vallas seguirás siendo a quien todos odien-

Estaba sentado en una roca fría, lleno de arboles tapizados de nieve blanca y nadie podía verlo llorar por la fina tela que lo cubría. Estaba frio y desolado, tal vez si encontraba a Black podría vengar a sus padres y liberar esa oscuridad que rasgaba su alma por salir. O ahí en medio del aire con su escoba, el viento azotando lo, su cuerpo congelado mientras el terror sembrado en su corazón lo empujaba hacia la tierra, desplomándose, para de una vez por todas acabar con esa desesperación. En medio de la lluvia con cada gota golpeándolo y el aire corriendo a su alrededor dejándolo mas frio que un tempano de hielo, solo pensaba que esa oscuridad dentro del lo llevo a la locura absoluta. O ahí solo en el pasillo sin que nadie del castillo le creyera, el no puso su nombre en el cáliz. Pero como siempre nadie le creía.

-Solo, no importa lo que hagas o a quien salves, tu estas solo. Lo mas venebolo que pueden hacer por ti es terminar con tu sufrimiento- dijo Voldemort mientras que lo pateaba, el dolor fue intenso, pero termino en esa oscuridad con todas las extremidades extendidas y completamente congelado.

-¿Quien querría tu amistad?- dijo Dudley mirándolo desde arriba y listo para golpearlo.

- Eres una aberración de la naturaleza, un fenómeno -Grito su tío Vernon escupiendo saliva en su cara.

-Un anormal- secundo su Tía Petunia con una mueca de asco dirigida a el.

-La fama no lo es todo-dijo Snape arrastrando las palabras y con odio.- Ni siquiera ha abierto un solo libro-

-Harry Potter, creí que Gryffindor significaba algo para ti. Es una decepción-dijo McGonagall con la voz furiosa, mientras le daba la espalda

-HARRY TOMASTE EL AUTO SIN PERMISO, ESTOY MUY DISGUSTADA, NO PUEDO CREER QUE PUSIERAS LA VIDA DE MI HIJO EN RIESGO- Grito la señora Weasley apuntándolo con el dedo.

-Alejate de mi, no me toques, puede ser el heredero de Slytherin- dijeron varias voces que no reconocía.

-Es culpa de sus padres. SI tiene algo mal la perra, algo tendrán mal los cachorritos-dijo la vieja bruja de Margue mientras le hacia burla.

-Tus padres dieron su vida para salvarte y tu les pagas de esta forma. Estas muy mal, de verdad mal Harry- dijo la voz de Lupin decepcionado y moviendo el mapa del merodeador en su dirección como si lo acusara.

-Sogo eges un niño- dijo Fleur dándole una mirada de asco.

-No te ganaras la simpatía de nadie así- dijo Krum con la mirada de superioridad.

-Potter… apestas- dijo Cedricc negando con la cabeza.

-Es esto es por tu seguridad, Harry- dijo Lupin levantando y sosteniéndolo por los brazos, luego Sirius se le acerco.

-Lamento eso Harry- dijo Sirius con una sonrisa enorme, alzo su puño y golpeo su costado repetidas veces.- Lo siento, es por tu bien cachorro-

-Debemos proteger te.- dijo Lupin con una risita.

-Basta...-gimió Harry adolorido.

-Así que el gran Harry Potter, ya no le gusta Hogwarts, claro como siempre sintiéndose mejor que todos-dijo Ron con las facciones desencajadas y dándole un puñetazo en la cara.

La marca que le dejo en la cara era como si el puño fuera hierro al rojo vivo, ardía como las llamas del mismo infierno.

-Siempre siendo acusado, siempre siendo manipulado, siempre peleando por personas que te hacen daño. Siempre el que se sacrifica por un mundo que le da la espalda- dijo la voz de Voldemort apareciendo entre las sombras, Sonrió con una mirada fría.

-No mas… no… mas… por favor- pidió Gimiendo Harry con las cara empapada en lagrimas y aun en las manos de Lupin y Sirius, mientras que otro golpe de Ron la daba en la cara.- Ya no...lo soporto-

{Harry, no lo escuches} grito una voz cosida pero ¿De donde venia?, ¿Quien era?….Revé, era su maestra.

{Vamos mi niño, no dejes que sus engaños te controlen} secundo una voz. Tardo algo pero la reconoció como Sly.

{No seas tonto, Harry, el solo quiere que tu voluntad seda} dijo alguien con voz de niña…. O si cierto Huffy.

{Muchacho, levantate nuevamente, tu puedes. Nosotros lo sabemos} gruño una voz furiosa. Solo podía ser de Griffin.

{Tienes mucho por lo que vivir. Mi Rey de los magos} dijo la voz acuática de Nimue.{Aun no pude morir el Rey de los dragones}

-Estas solo, triste. Tu sufrimiento es suficiente, tu alma y cuerpo ya no pueden mas.¿Deseas la muerte?-dijo nuevamente Voldemort mientras se hacia a un lado, revelando una figura femenina que caminaba con paso delicado.

Su pelo ensortijado y castaño, sus ojos miel, aquellos labios y esa mirada de asco y repulsión, apagaron todas las demás voces en su cabeza. Hermione sostenía una daga esmeralda y llegaba apuntando directamente a su Hombro.

-Entonces Harry ¿Que deseas?-pregunto con la voz fuerte y mirándolo aun con esa mirada de asco.

-Yo...-comenzó sintiendo la punta de la daga clavarse en su piel y rasgándola poco a poco bajándola, dolorosa y lentamente. Cada tramo que marcaba era tan doloroso que ni siquiera supo cuanto tiempo paso.

Dejo de rasgar a la altura de su corazón. El odio en esos ojos era incluso mucho mas doloroso que el corte en si, pero al verla ella se acerco su oído y susurro.

-Te odio-

Las palabras las continuo repitiendo, mientras la daga comenzaba a penetrar su pecho. Prefería morir antes de que Hermione siguiera.

-Adelante- dijo Harry ya sin nada de temor.

Todos sonrieron y acercaron mas. Hermione saco la daga y lamió las gotas de sangre salpicadas en la esmeralda. Luego de limpiarla alzo la daga y estaba solo a un golpe de terminar todo.

{¡¿HARRY?!} grito la voz de Hermione en su cabeza, era una muy enfadada y llorosa. Pero la que esta delante de el pareció titilar {RESISTE. NO DEJES QUE TE CONTROLE, NO PERMITIRÉ QUE TE POSEA}

La Hermione delante de el siguió bajando su daga pero a una velocidad lentísima. Entonces el Voldemort de atrás pareció hacer fuerza.

{Vamos Harry, lo se… se que jamas olvidaras tus cicatrices, pero no dependes de ellas. Siempre continuas aunque tu ya no puedas.}continuo la voz de Hermione aun llorosa.

En la penumbra todo se comenzó a aclarar, una luz dorada, cálida y que al tocar su cara se sintió bien. Era tan suave que se dejo llevar por esa sensación.

-¿Que poderosa magia es esta?-pregunto la Voz de Voldemort.

{Recuerda lo, recuerda esos momentos. Tus momentos de mayor alegría} grito la voz de Hermione dentro de su mente.

Se dejo llevar. Y apareció Hagrid, caminando en dirección a un sillón viejo y feo, sentándose mientras Dudley corría despavorido. Unos pequeños Ron y Hermione entrando al expresso de Hogwarts, mirándole de forma cariñosa. La madriguera y todos los Weasley abriéndole los brazos para tomarlo como parte de su familia. En el puente colgante junto con Lupin mientras miraban la blanca nieve que cubría los arboles y le contaba cosas de sus padres. Sirius y el parados en los terrenos observando el cielo estrellado, mientras le proponía ir a vivir junto con el. Con Ron turnándose para montar su saeta de fuego. Hermione abrazado a su cuerpo volando en Buckbeak. Todos los Pendragon reunidos, celebrando, platicando y conviviendo sin mirar de donde venían o de que casa provenían.

Ahí sentado en las piernas de sus madre, con su padre a un lado, jugando con el y sonriendo le. No era mas que un bebe pero comprendía cuando lo amaban y que los amaba de verdad.

-Largate de mi cabeza- dijo Harry bastante convencido. - Deja de meterte en mis recuerdos-

Todas la imágenes dolorosas se desaparecieron en la luz dorada.

Fue como si la neblina frente a sus ojos se disipara, pero no vio nada mas que esos dos Hermosos que se materializaron enfrente de la suyos. Lo primero que vio fueron esos hermosos ojos, del mismo color de la miel y llenos de amor.

-Hola...- dijo Harry con una voz que daba pena.

-Hola amor- respondió Hermione con una sonrisa de alivio.

Estaba delante de ella con el puño apretado y contra algo duro. Eso lo asusto ¿Acaso pensó en pegarle?. Pero lo de atrás de ella lo asusto aun mas. Dumbledore incrustado en la pared, la ropa; quemada, rasgada, sucia y ensangrentada, un hilo de sangre escurría desde su cuero cabelludo por su mejilla derecha y se perdía en su hombro. Los miraba con la respiración agitada mientras daba una débil sonrisa.

Aquello que los protegía era un escudo muy fuerte y poderoso, que parecía cristal balístico, aunque este era mágico. Tenia a grietas y golpes por todos lado, en donde descansaba su puño había una araña de grietas y cristal roto.

Bajo la mano lentamente y concentro, evitando que Voldemort lo volviera a meter en esa ilusión malvada. La visión se le volvió otra vez roja y la ira incremento.

-Escuchame atentamente Harry -dijo Hermione sin apartarse del hechizo y con las manos pegadas a la protección, como si quisiera tocarlo- Pelea, no dejes que utilice tus emociones en tu contra.

-Una pregunta- dijo Harry intentando no ceder por sus emociones.

-¿Cual?-pregunto Hermione seria.

-¿Me odias?-pregunto Harry temiendo la respuesta.

Hermione lo miro como si estuviera loco. Luego dejo salir un suspiro y una mirada tierna.

-Jamas, aunque termináramos nuestra relación. Jamas te odiare, por que me has dado lo mejor de mi vida- dijo Hermione sonriendo y eso le aclaro la mirada.

Harry sonrió y sintió como la arena sobre su rostro seguía adherida, como si tuviera pegamento. Intento buscando su varita, pero no la encontraba, ni los anillos de Escallibur. Incluso su chamarra estaba desaparecida, su playera estaba rasgada en los brazos y sus Jeans igual de rotos, con sangre, agua, tierra y un montón de otras cosas que no podía descifrarlas. En cuanto a sus accesorios, la hombrera estaba totalmente desaparecida, al igual que una de sus muñequeras, gracias a Merlín la bolsa de los grimorios y pociones seguían pegadas a su pierna y cintura. No tenia armas, pero tampoco podía dejar que Voldemort siguiera

-Sal de mi cabeza. Ahora.- ordeno Harry en a Voldemort

-Nadie se resiste a mi poder- dijo Voldemort, lanzando una nueva tanda de imágenes dolorosas a Harry, esta ves inventadas por el, donde la mayoría del dolor se lo provocaba sus amigos, también sus seres queridos y lo peor Hermione. Esta vez no se dejo llevar por ellos el los dejo pasar, por que entendía que no eran recuerdos.

-Tienes ira, rencor y miedo- dijo Harry llevando su mano a la cara y tirando de la arena, mientras esta parecía no querer ceder - Tu no sientes ni cariño, amabilidad, comprensión y sobre todo, No sientes amor-

Voldemort lanzo una nueva imagen. Esta vez Harry simplemente contraataco y vio a un pequeño en un cuarto oscuro y por la ventana se leía un letrero de "Orfanato". Al regresar a la realidad Voldemort ya estaba fuera de su mente, se tambaleo y por un segundo se vio confundido. Terminaron frente a frente, con Hermione y Dumbledore a su espalda.

Voldemort iba a decir algo, parecía muy enojado, pero el eco de las voces sonaba desde el vestíbulo, mas voces delas que debía haber. Harry volteo a su izquierda, solo para ver a cientos de personas que surgían de las chimeneas al ver la escena todas abrían la boca. Harry sintió como Voldemort enfurecía.

-¿Y ahora que?-Pregunto intentando buscar alguna arma- Ya todos te han visto, todos sabrán que has vuelto-

El señor oscuro sonrió, y detrás de el justo donde debía estar la fuente surgieron un montón de figuras encapuchadas con mascaras. Lanzaron hechizos que crearon una barrera azul entre ellos, la orden, los Pendragon y los recién llegados. Estaba solo con todos esos encapuchados.

-Harry- gritaron algunos, otros pegaron un grito.

-Vete Harry, largate ahora- grito Hermione a su espalda mientras golpeaba la protección e incluso utilizaba la varita. Solo que no podía ceder de alguna forma.

-No eres el único que trajo refuerzos, Potter- dijo Voldemort sonriendo- Si, me han atrapado, pero por lo menos puedo eliminarte-

Harry vio como muchos alzaron su varita, el busco la suya por inercia aunque sabia que no la tenia a la mano. -Accio varita- dijo proyectando su magia a todos lados.

-avada kedavra- grito Voldemort, una ráfaga de luz verde salio de su varita, un cuerpo salio de la nada y apareció frente a Harry.

Una figura pequeña con orejas de murciélago y un uniforme de Pendragon pulcro y limpio.

-¡NOOOOOOOOOOOOOOOO!-grito Harry viendo a Dobby alzando la mano para protegerlo. Otro elfo salio de un lugar que no vio y empujo a Dobby que callo al suelo.

El pequeño cuerpo brillo de color verde y miro a Harry con sus ojos azules y cansados. Kreacher le sonrió con la mirada mientras decía - Gracias, Harry- el elfo dejo caer su cuerpo. Harry apenas tuvo tiempo de tomarlo antes de que se golpeara en el suelo.

-Elfo demente- dijo Voldemort casi en una carcajada y sonriendo- Parece que y estaba senil la criatura-

Harry ahí arrodillado en el suelo y con Kreacher entre sus brazos vio que su mano, tenia la su varita ya sujeta. Sus ojos se llenaron de lagrimas y apretando la mandíbula mientras le chirriaron todos sus dientes. La imagen de su madre en el suelo, el sonido de su padre caer, el cuerpo de Amiji cayendo en una ráfaga verde y ahora el cuerpo del Kreacher. No podía ser mas injusto.

-Amo, perdón- dijo la voz de Dobby a su lado, aunque el no lo veía.

Kreacher solo llevaba menos de un año libre del jugo de su antigua familia. El pobre nunca tuvo nada, ni siquiera la posibilidad de negarse a alguna orden. Y ahí estaba protegiéndolo de lo que seguro lo mataría. ¿Por que? Nunca lo sabría a ciencia cierta, aquel que le daría esa respuesta no podría decir nada nunca mas.

-Gracias por todo Kreacher- dijo Harry llorando por todos. Por sus padres, su amiga y ahora el viejo elfo. Cerro sus ojos mientras que lo depositaba en los brazos de Dobby con suavidad.

-Miren al bebito, llorando por el senil elfo-dijo La voz de Bellatrix mientras se carcajeaba.

-Observa bien lo que has provocado Potter- dijo Voldemort riéndose con frialdad.

Harry se levanto y Dobby camino con el cuerpo de Kreacher acercándose a Hermione y Dumbledore. El no se movió ni un centímetro.

-Dobby lleva a Mione, Dumbledore y Kreacher del otro lado de la barrera- dijo en voz baja. Hermione solo lloro y supo que ella entendía que lo aria. El se levanto dispuesto a dar pelea a Voldemort.

El lugar de verdad era un desastre de proporciones descomunales, era una destrucción como nunca antes vista. La fuente sin sus estatuas y los pedazos esparcido por doquier, el suelo echo escombro y con senderos de tierra y piedra que estaban muy marcados, el techo destrozado, una pared lucia con una enorme raíz saliendo de la mitad, mientras charcos reflejaban la luz que irradiaban diferentes fuegos que había en todos lados.

Todos los mortifagos se dirigían en su dirección, comandados por Voldemort que tenia a Bellatrix de un lado y del otro a el hombre feo que peleo con Kingsley, Greyback gruñía mas a la derecha y el señor Nott a la izquierda. Dolohov, McNair y montón mas de tipos feos, listos para matarlo.

-Magia de Utgar tomare toda la fuerza- susurro muy bajo, mientras que comenzaba a resplandecer de amarillo y negro. No tenia idea de donde venían las palabras, pero en su mente eran claras- Magias elementales de fuego, viento, agua y aire respondan a mi llamado. Poder de Merlín despierta-

Sintió sus dos tatuajes encenderse quemando un poco su ropa, también como su magia comenzaba a salirse de control. Al aura amarilla y negra, se le adjuntaron una roja, verde, azul y una dorada. Cada musculo se le tenso y su vista se aclaro tanto que podía ver todos los detalles y con mucha mas lentitud.

Todos pararon cuando lo vieron mirar directo a ellos. Estaba iracundo por que todo temblaba, el agua, fuego la tierra y el aire se arremolinaban a su alrededor mientras que su aura seguía desprendiéndose de su cuerpo. Los lentes rotos le molestaron y se los quito, para después dejarlos caer, la verdad ya no los necesitaba, lo veía mas claro que nunca. Reforzó su espalda con parte de los escombros y curando la con el agua que atraída.

-Ataquen- grito Voldemort y todos levantaron la varita.

Seguía teniendo a Dobby, Dumbledore y Hermione detrás y esa barrera extraña no resistiría mas. En ese momento se sentía tan concentrado y poderoso que giro y de un solo movimiento la barrera que lo separaba de ellos se desvaneció. Dobby toco a Hermione y Dumbledore, listo para trasportarse. Los maleficios ya zumbaban en el aire.

-Protegerlos, es una orden- dijo Harry mirando a Hermione y ella negó, pero un pop después y estaba solo.

Regreso su mirada en dirección de los mortifagos. Una lluvia de maleficios y hechizos asesinos se dirigían a el. Un metro, medio metro, 10 centímetros y… Se comenzó a mover tan rápido esquivando cada hechizo que incluso el polvo se levantaba, avanzaba mientras esquivaba, un pie a la derecha evitando un maleficio dorado, un brazo arriba para evitar otro, mover su cabeza hacia adelante. Tenia todas las instrucciones en su mente para avanzar y eludir los Hechizos que salina disparados como rafas de una ametralladora. Era tan la cantidad que parecía no tener salida, aunque el podía ver un sendero por el cual pasar sin problemas. Los maleficios pararon ya que los mortifagos estaban cansados y asombrados. El seguía avanzando con paso lento directo a Voldemort.

-IMPOSIBLE-Grito Voldemort con rabia- AVADA KEDAVRA-

Un rayo verde cruzo los pocos metros que ya los separaba, el solo movió la cabeza un centímetro y el hechizo no lo alcanzo. Atrás escucho la explosión con la piedra.

-Muy lento- dijo Harry preparándose para saltar hacia adelante y incendiando sus manos.- Les enseñare como se hace-

Salto directo a Voldemort a una velocidad diez veces mayor que un hechizo, impulsado cada vez mas rápido por las flamas que salían feroces de sus manos y varios se interpusieron. Lastima que el no estaba para juegos, giro las piernas en el aire dando a uno en la cara con el pie y al otro con la rodilla. Y entonces ahí lo tenia en directo frente a su cara. Alzo uno de sus puño que parecía muy raro ya que estaba reforzado con la magia de Tierra. Voldemort sin embargo ya estaba protegido en una protección que parecía una esfera de azul eléctrico. Soltó un puñetazo tan potente que continuo avanzado, soltando tierra, polvo y aventando a todos los mortifagos en diferentes direcciones. El aire a su alrededor se remolinaba con fiereza, provocando un estruendo ensordecedor y terminaron chocaron adentro del ascensor que daba a pisos inferiores. Cuando el polvo y tierra se despejo Harry vio que la esfera de Voldemort estaba agrietada y su puño logro penetrarla, pero el no se quedo a esperar algún movimiento del loco asesino, coloco sus piernas en la parte superior del ascensor en un movimiento.

Se preparo para otro ataque, coloco sus manos juntas con la varita en medio de ellas como en un rezo. Convoco toda su magia de fuego y pensó en Amiji.

{Una vez mas Amiji.} suplico Harry dentro de su mente.

Una llama de color rojo oscuro apareció en la punta de su varita. Voldemort deshizo el encantamiento protector, pero para cuando se dio cuenta donde estaba el, ya era tarde.

-DUAL BOMBARDA MÁXIMA- Grito Harry antes de que todo se sintiera caliente y lo cegara.

Una ráfaga de fuego altamente poderosa y a presión, directo a la carota sin nariz de Voldemort. El elevador no resistió y se desfondo, la ráfaga siguió avanzando mientra que Harry era empujado contra el techo destruyéndolo también. El hechizo termino y pudo observar toda la destrucción. Ya no era un elevador, era un túnel rojo como lava, lleno de fuego. Tan ancho como un Graphorn y profundo que no le veía fin.

La sensación de tirón apareció nuevamente en su estomago.

-Muchacho, dejáselo a los Aurores- grito la voz de Fudge alterada y corriendo hacia donde el estaba.

Los mortifagos estaban desapareciendo y algunos siendo apresados. La barrera que los separaba ya no existía, tal vez la había roto al matar a Voldemort. No. La presencia de Voldemort estaba muy por debajo de el.

-Callate idiota- dijo Harry su voz fue amplificada.

Nuevamente se impulso y comenzó a caer por el ardiente agujero, la velocidad del aire se mezclo con el fuego creando lenguas de fuego que aumentaban el calor, pero el ni siquiera lo sentía. El túnel no cambio de color o de temperatura, pero la presencia de Voldemort se alejaba a la derecha, por un túnel. Se impulso por la pared quemando sus tenis y de paso dejando algunos rastros humeantes en su pantalón. Al caer en el túnel vio que era mas bien el pasillo, Voldemort estaba ahí con la túnica quemada y una cara de preocupacion. Comenzó a hacerse niebla negra.

-Eso si que no - dijo Harry y con una ráfaga de viento lo alcanzo tomándolo del cuello y llevándolo mas adentro. Atravesaron una puerta y cayeron ambos por unas gradas directo a piedra solida, donde rodaron por el suelo.

Harry en una de sus tantas vueltas, le dio un puñetazo en el rostro que lo mando directo a un objeto enfrente de ellos. Voldemort no encontró como detenerse, golpeo la piedra desprendiendo una gran parte de ella para después estrellarse contra el muro.

Los murmullos comenzaron por todos lados. Harry se levanto tembloroso, la fuerza que tenia se perdía rápido, su magia no duraba y su cuerpo comenzaba a caer. Pero lo que le llamo la atención fue algo dentro de el, reacciono al ver aquel arco de roca semi destruido, la tela fina y… la sombra detrás de ella.

{Es hora. Estas listo. Mi Rey} dijo la voz ancestral desde tras del arco.

Su furia fue remplazada por esa sensación de que tenia que ir hacia ella. Algo llamo su atención Voldemort lanzo un potente maleficio, que si no fuera por sus reflejos le hubiera dado en medio de los ojos. Voldemort estaba ahí con una moretón en su mejilla y los ojos inyectados en sangre.

-No puedo creer que un crio me obligue a esto- gruño Voldemort.- tenebris CREPITUS-

Las sombras comenzaron a levantarse, formando formas oscuras y que comenzaron a atacarlo. Harry saltaba de un lado a otro intentando alejarse, pero inconscientemente se acercaba al arco.

-Incarcerous- grito lanzando cadenas que Voldemort también esquivaba, los hechizos chocaban entre chispas y explosiones.

Podría ser que el tiempo con la magia se le acabo, o que su cuerpo no estuviera apto para aguantar tal nivel de magia, por que de un momento a otro le dio un bajón que casi hace que se desmaye. Se intento recuperar pero su aura ya estaba perdida y el refuerzo en su columna estaba deshaciéndose. Solo escucho un maleficio asesino directo a su dirección, pero cuando intento saltar para evitarlo una sombra lo tenia agarrado del tobillo.

-Expeliarmus- susurro intentando protegerse.

Los hechizos se conectaron muy cerca de su cuerpo, creando una onda de choque que lo envió directo al arco. Pero no al velo a la cima del arco de piedra, directo al mismo sitio donde Voldemort choco. Lo primero en hacer contacto fue su estomago y sintió que era aplastado por completo, si hubiera tenido algo dentro lo vomitaba seguro.

Se sentía aturdido y tan cansado que tardo darse cuenta que tenia enfrente. Una correa antigua encima de la columna, como si dentro de la roca maciza hubiera un cofre enterrado pero esa sensación en estomago era mucho mas fuerte. No la de ser aplastado, si no ese tirón, era como si no que estuviera ahí fuera la solución a su problema. Tomo la correa y sintió el sentimiento mucho mas definido. También sintió como su tobillo era apretado por algo. Una cadena muy gruesa la sujetaba.

-VEN MOCOSO DE MIERDA- Grito Voldemort y tiro de la cadena.

La fuerza empleada fue tanta que no solo lo atrajo a la parte de abajo, si no que también desprendió aquella cosa enterrada creando escombro del arco. Giro en medio del aire y apunto su varita directo a la cadena, solo tenia un segundo para acumular magia antes de llegar a Voldemort.

-Difindo -dijo Harry directo a la cara de su enemigo.

Voldemort solo levanto la varita desviando el hechizo y lanzo un hechizo explosivo. Harry se cubrió con lo que fuera que tenia en la mano. La explosión lo lanzo a 5 metros de lejos, intento rodar para evitar mas daño. Al caer se golpeo la cabeza con uno de los pilares de piedra. Los susurros se agitaron dentro de su cabeza, mientras que el intentaba quitarse el aturdimiento. Aquella cosa estaba destruida sobre su pecho, resbalo por su torso y monstruo dos objetos. Uno era un objeto pequeño y con una circunferencia, el otro un cuadrado grueso y muy sucio. Tomo los dos al mismo tiempo, preguntándose ¿Que carajos eran?

Un segundo después recupero su visión y se sorprendió tanto que se petrifico. En su mano derecha tenia un anillo platinado liso pero con tunas que decía "Excalibur" y en la otra un grimorio negro con un dragón blanco, pero tan sucio y feo que parecía tener mas de 3 mil años o mas. Pasos se escucharon y el intento pararse pero sus piernas ya no respondían como debía. Como medida rápida tomo el anillo y se loco en la mano, y el grimorio estaba a punto de meterlo en su bolsa cuando se lo intentaron arrebatar. Una mano blanca y muy fea.

-Así que este es el secreto de tu poder Potter- dijo Voldemort con la voz agitada su ojo ya hinchado y un hilo de sangre escurriendo de su labio.-Un grimorio-

Harry tiro tan fuerte, que Voldemort se inclino para luego también tirar, no fue lo mas listo y parecían dos niños peleando por un juguete. De un momento a otro sonó un sonido.

Rasshh

Y el callo de lado, con el libro en la mano… bueno casi todo. Voldemort tenia unas cuantas hojas en su poder.

-Tal vez ya no necesite la profecía, dame ese libro Harry -ordeno Voldemort levantando la varita.

Estaba acabado, sin poderse parar, sin mas magia y ni siquiera se le ocurría otra forma de...escapar. Todo por su furia y idiotez. Antes de bajar la varita para lanzar un hechizo asesino algo paso, sorprendiendo a ambos. Una pequeña figura verde salto de algún lado cayendo en la cabeza de Voldemort y clavándole las garras en su piel e intentando sacarle los ojos.

-MALDITA CRIATURA-grito Voldemort dando un manotazo y lanzando a Marlow lejos.

Harry ni siquiera entendía que hacia el pequeñajo ahí, no se suponía que… Había estado todo el tiempo dentro de su chamarra pero al ser piel de dragón los maleficios no le afectaban, pero si la chamarra la perdió eso incluía su billetera y a Marlow. El pequeño callo casi sobre su regazo, se veía cansado y una Hoja quemada. Tomo el grimorio y a Malow, para guardarlos dentro de la bolsa, esperaba que Marlow no estuviera mal herido y que si tenia habre no quisiera comer libros antiguos y poderosos.

-Avada...-

-CARPE RETRACTUM- grito la voz de Hermione.

Una soga se enredo en su cuerpo y de un tiro salio volando, fue atrapado por un cuerpo mas pequeño que gimió al sostenerlo e inmediatamente se le uni otro mucho mas grande y que le ayudo a no caer. Hermione estaba a su lado y Ron del otro. Ambos mirando a Voldemort con un odio profundo. Ella tenia la chaqueta quemada, el pantalón rasgado, una mejilla sangrando ademas del cabello mal cortado. Ron, ni siquiera sabia por donde empezar, sangraba por ambos lados del rostro, un ojo ya morado, el labio partido, su barbilla llena de sangre, su ropa mas sucia y rota que incluso la suya, mientras que sus brazos parecían algo quemados.

-Pudiste pensar un poco antes de lanzarte así.- gruño Ron sin mirarlo.- Uno a uno con todo tu poder, podrías ganar. Uno a uno con tu poder tan bajo era seguro una perdida-

No pudo evitar reírse un poco mientras se sostenía solo de pie.

-Soy un idiota lo admito. Pero encontraran interesante lo que descubrí- dijo mientras miraba a Hermione quien parecía estar decidiendo si matarlo a el o matar a Voldemort.

-¿Estas bien verdad?- dijo Hermione en una voz que daba miedo.

-No. Ahora que estamos los tres, lo estaré- dijo con total honestidad.- Ahora, Ron tu...-

La tierra se sacudió, mientras que algo pasaba con el velo. Los cuatro en la habitación lo observaron. Los susurros pararon, la tela ya no ondulaba y las grietas en las columnas comenzaban a dejar caer piedras. Fue unos segundos donde todos se quedaron callados viendo lo anormal de esa quietud.

-Esto esta mal- dijo Harry sintiendo la magia distorsionarse en la tela.- Tenemos que ...-

BAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAM!

El arco se desmorono creando un segundo temblor que casi los derriba.

-¿Que demonios sucede?- pregunto Ron pálido.

Voldemort no espero mas, se convirtió en neblina negra y comenzó a trasportarse por la habitación, arremolinándose en el polvo para cubrirse. Paso junto a ellos como un ráfaga desapareciendo por la entrada. Y como no existía ya puerta lo pudo ver seguir de frente y subir, despareciendo de su visión. Seguramente lograría escapar. No cualquier auror podría detenerlo en esa trasformación en neblina.

Como una enorme aspiradora el polvo y todo comenzó a ser tragado por algo que estaba en lugar del arco, un circulo que giraba todo el interior lleno de negrura mientras que la circunferencia era un montón de chispas de color doradas.

-Tenemos que irnos.-dijo Ron tomándolo y lo arrastro por el pasillo.

Pero Harry lo escuchaba claro y Hermione también lo escuchaba.

{Ya has superado casi todo el camino a tu ascensión} dijo la voz ancestral y esta ves no era del arco, era de el anillo.{ La ultima prueba esta cruzando… cruza a este lado mi rey. Ven por la ultima pieza de este rompecabezas}

-¿De que estaba hablando Harry?-pregunto Hermione asustada de verdad.

Harry la miro, luego a su anillo, por ultimo miro el agujero en medio de la habitación. Podría ser su imaginación, pero juraría que veía a alguien estirándole la mano e invitando a pasar por el. Claro que parecía que todo lo que cruzara ese lugar era convertido en polvo. Todo el salón estaba comenzando a desaparecer desde lo mas pequeño hasta las gradas que eran enormes. En medio del pasillo donde se encontraban el viento y la succión era muy poderosas.

{Es la única oportunidad que tendrás. Decide ahora o nunca} repitió la voz.

-¿QUE LES PASA? VAYÁMONOS- Grito Ron a su lado.

-Es como un trampilla, solo que esta vez tengo que ir solo-dijo Harry entendiendo que eso era lo que tanto le llama del arco de piedra. No era el velo en si, era el poder del anillo y grimorio para empezar, pero lo que realmente quería que hiciera era llegar al otro lado.

Era como en la torre flotante, pero mucho mas antigua y…. peligrosa.

-NO, no lo harás Harry. NO puedes ir- dijo Hermione desesperada – Era el velo de la muerte, si cruzas morirás-

-Ya lo escuchaste Hermione. Es la única oportunidad. Y...- comenzó pero ella lo tomo de la camisa rompiéndola mas mientras lo acercaba a sus ojos.

-No te perderé. No después de todo lo que hemos pasado juntos- medio grito a la vez que le suplicaba con los ojos.

Ron tal vez comprendió que quería ir a hacia aquella cosa que succionaba todo, por que se interpuso y negó con la cabeza.

-Y yo no perderé a mi mejor amigo, a mi hermano de armas y aventuras- dijo Ron con los ojos en lagrimas.

Harry presintió que ese portal o lo que fuera, no duraría mucho tiempo y que solo tenia unos minutos para acercarse. La verdad es que el no sabia si ir o no y con ellos dos ahí enfrente le costaba mucho mas.

-Tienen razón, no puedo escoger solo esta vez. - Dijo Harry abrazando a Hermione y Ron al mismo tiempo- Ahí cosas que no conocen y que no tengo tiempo de contarles, pero entiendan que he estado tratando con entidades muy superiores a notros y… si no perderé la oportunidad de obtener algo muy importante. Un poder muy antiguo, algo que nos sera de gran ayuda en un futuro-

Los soltó viendo los bien, ya no tenia sus barreras de Oclumancia activas así que podía enseñarle a Hermione. La acerco y junto su frente con la de ella y dejo que sus recuerdos de Nimue, sus maestros y todo lo importante fuera vaciado en su mente. Lo bueno que era rápido ya que no tenían tiempo. Sus ojos fueron abriéndose hasta que termino su ultimo recuerdo, de obtener el ultimo anillo excalibur.

-NO ES JUSTO- dijo Hermione apretando su pecho en abrazo enorme- Por que tu, por que siempre tu. Esta bien, iré contigo-

{No hay de otra manera, cualquiera que intente pasar por ese lugar sin ser elegido, terminara muerto}dijo la voz ancestral

-No, no, no, no, no y no- dijo Hermione pateando una piedra que se perdió dentro del vórtice.

-Es lo correcto Hermione. Entiendes ¿verdad?-dijo Harry sonriendo por que ella pareciera entender que no es que quiera, mas bien que debía hacerlo.

-Yo no… ¿Que pasa?-pregunto Ron harto y furioso.

-Si Harry no va… perderá la oportunidad de hacerse mas fuerte- dijo Hermione ya llorando. -Pero… y ¿si te pierdo?-

Harry pensó y apretó lo que tenia en su bolsillo del pantalón, ahí seguía gracias a Merlín y también su billetera de alguna forma, tal vez al no tener bolsillos en la camisa o una chaqueta decidió entrar a su pantalón. Saco ese pequeño objeto.

-Hermione ahí algo que he querido preguntarte desde esta tarde y… nunca escojo los mejores momentos-dijo Harry al ver que aquel agujero tenia un cráter bastante grande para cubrir dos tercios del salón.- Ya sabes pedirte que fueras mi novia en ese bosque tenebroso y… pues ahora en este lugar. Pero tengo que ir y espero que lo entiendan. Por eso tengo que preguntarte esto, aquí con Ron como nuestro mejor amigo y ahora nuestro testigo-

Tomo la mano izquierda de Hermione con suavidad y en la otra el pequeño objeto, puso una rodilla en el suelo sin quitarle los ojos de Hermione. Ella entre abrió la boca sorprendida y su llanto paro, los ojos los agrando y un musculo de su labio salto. Ron tenia la boca completamente abierta y la mandíbula le caía muy raro.

-Hermione Granger, te amo desde que me seguiste para encontrar a un asesino que al final no era un asesino y resulto ser mi padrino. Me has ayudado desde mucho antes y...ni siquiera puedo recordar cuantos días hemos pasados juntos. Eres mi mejor amiga, mi amante, mi novia y ahora quiero pedirte algo. ¿Quieres ser mi esposa?-dijo Harry tan convencido que ni siquiera tartamudeo o lo dijo nervoso.

Levanto su mano derecha mostrando el anillo que los comprometería. Era simple con dos piedras de color rojo y rosa, pero en el depositaria su amor y futuro junto a Hermione. A ella le temblaron las piernas y se dejo caer quedando a su altura, lo abrazo con fuerza por el cuello mientras que el lo aceptaba y apretaba.

-Cuando regreses-susurro a su oído- Cuando regreses vuelve lo a preguntar y te responderé como quisiera hacerlo ahora-

El se separo, sonrió y la beso. La conocía tan bien que sabia que no le diría que si, a pesar que ella se lo propuso muchos meses atrás, ella le estaba dando una razón para regresar. Un motivo para que no muriera con lo que fuera ese circulo que se agrandaba por minutos y destruía la sala. Se separaron, el con sabor de los labios de Hermione y ella con el rostro empapado.

-Regresare. Este anillo simbolizara eso, el juramento de que solo me iré por un tiempo- dijo Harry colocándole el anillo en anular de la mano derecha.

Si, era la mano incorrecta, pero ella no le dio una respuesta y el no podría tomar el dedo que tenia la vena amoris, la vena del amor que conectaba con el corazón de su novia. No hasta que regresara. Ella no se opuso y sonrió un poco, una sonrisa llena de tristeza y algo de desesperación.

-Regresare, sin importar si eso me lleva directo a las narices de la muerte misma. Lo tendré que chantajear o pelear con el. Pero algo es seguro, regresare para hacerte mi esposa, para que tu vida y la miá estén conectadas para siempre-dijo Harry volviendo la a besar, una y otra vez, sin importar que Ron estuviera ahí.- Ademas tenemos que pensar que nombres ponerles a nuestros hijos-

-Mas te vale volver, idiota-dijo Hermione con el ceño fruncido y los labios apretados- Si no, cuando yo te encuentre me las apagaras. No me importara que ambos estemos muertos-

Harry asintió, conociendo a su novia no descansaría hasta re matarlo, si es que moría de verdad.

-Ron, eres mi Hermano y nadie lo puede negar… yo...-

-Solo has lo que dijo Hermione. No quiero soportarla de mal humor todo el tiempo-dijo Ron asintiendo- Ademas lo cursi, no va con nosotros dos-

-Gracias- dijo Harry a su amigo entendiendo que ambos no necesitaban muchas palabras, solo confiar en el otro- No importa si es una hora, un día, un semana, un mes, un año. Regresare a su lado e intentare que sea lo antes posible. Cuida a Hermione okey-

-Si se deja- dijo Ron riéndose un poco histérico.

-Mione, no lo atosigues con las tareas. Pero evita que Daphne le pegue sus mañas-

-Heee-

-Protejan a Pendragon juntos y denles un mensaje de mi parte- dijo Harry dándoles otro abrazo apretado.- Los dragones siempre tienen que viajar en manada, pero si uno se separa al final siempre regresara al nido-

Beso por ultima vez a Hermione, disfrutando de sus labios de su cuerpo, incluso de su rostro húmedo y de que le clavara las uñas en su nuca. Le dolió separarse de ella y sonreír. Ron tomo a Hermione de los hombros y la retiro un poco. Harry le agradeció por que el no podría dar un paso mas lejos si ella seguía viéndolo de esa forma, suplicándole que no se alejara. ¿Que les diría por despedida?, no se le ocurrió nada mas que estirar su puño. Entendieron también estirando el suyo y chocandolos. Asintieron, demostrándole que entendían. Giro sobre sus talones y miro el vórtice, ya tenia un diámetro de mas de 15 metros y el salón estaba completamente perdido.

Miro por su hombro por ultima vez. Les sonrió a sus familia y alzo su mano mostrando un símbolo de amor y paz. Corrió por el pequeño tramo de piedra y salto, el aire lo llevo hacia adentro del vórtice en un segundo y lo atravesó. La oscuridad mas absoluta lo engullo.

¿Que le depararía el futuro? Como siempre era un misterio. Y lo afrontaría todo con tal de regresar junto a Hermione.