¿Cómo han estado?
He visto sus comentarios y se que ya les explique en los comentarios, pero creo que en necesario decir que esta en mi tirada ahora.
Todo aparir de ahora sera un salto entre Hermione y Harry. Algunas veces veremos que hace Harry y otras que hace Hermione. He pasado varios días pensando en una forma de hacerlo mas transitorio para ustedes. Así que lo veré poco a poco. Ademas de que estoy seguro que les gustara las dos lineas de tiempo que llevare, una con Harry y la otra con Hermione. Y algunos de ustedes me querrán matar por lo que viene, cuando imagine este fic (De eso hace mas de un año) lo imagine con esto y creo que no seria conveniente quitarlo. De todas formas seguirá la misma forma que mis demás capítulos.
"Conocen mis métodos" Sherlock Holmes.
La mayoria de los personajes principales son de J. K. Rowling.
Capitulo 55.- Los secretos del Héroe.
Ninguno de los dos quito la vista de donde desapareció Harry. Aun cuando varias personas se colocaron a sus lados y tampoco cuando Dumbledore los tomo de los hombros, alejándolos de la habitación vaciá y alejándolos de la habitación destrozada.
-¿Donde esta Harry?-pregunto el director con la cara preocupada.
Los dos negaron con la cabeza y con la mirada baja. Aunque respondieran con toda la verdad ¿Quien les creería?, lo mas sencillo era callar y confiar en Harry. Hermione dejo salir su frustración en un largo suspiro luego miro a todos y dijo con calma.
-No sabemos. Ya no estaba cuando llegamos- Mintió Hermione mientras miraba a Ron advirtiéndole que le siguiera la corriente.
-Solo esto- continuo Ron con la mirada triste- Un lugar vació-
-¿Pero…?-comenzó a preguntar Fudge.- Vimos a Voldemort salir y desaparecer… el señor Potter...-
-¿Ahora si es señor Potter?-pregunto enojada Hermione, lanzándole una mirada furiosa a Fudge.- ¿Ya no es un detractor y mentiroso?-
-Yo…-
-¿Donde esta Harry?-interrumpio Sirius llegando corriendo por el hueco formado por el hueco de Harry, que parecía ya menos caliente. Al ver que nadie contesto se vio el miedo y su cara palideció. -No el, no, no…-
-Tranquilo Sirius- dijo Hermione acercándose a el y abrazándolo. El hombre la miro y ella se sintió algo avergonzada. No pudo hacer nada. La verdad era que aunque hubiera podido, no lo hubiera echo. Harry se veía decidido a ir.
El silencio continuo por algunos minutos, hasta que se sintió la magia pesada y amenazante de Dumbledore. El Director temblaba mirada con ojos furiosos a Fudge el cual palideció, si es que se podía mas y comenzó a retirarse.
- Te lo dije Cornelius- dijo Dumbledore con una poderosa voz que le salia- Hace solamente unos minutos tu viste la prueba, con tus propios ojos, de que te he estado diciendo la verdad durante un año. Lord Voldemort ha vuelto, tu has estado persiguiendo al hombre equivocado durante doce meses, y ya es tiempo de que escuches a la razón-
-Yo… no… bueno -dijo colérico Funge, mirando alrededor como si esperara que alguien le dijera qué hacer. Al contrario encontró miradas molestas y furiosas de muchos otros, como la de Hermione o la de Ron. Incluso algunos aurores que no conocía Hermione.
-Muy bien, ¡Dawlish! ¡Williamson! Vayan abajo al Departamento de Misterios y vean… Dumbledore, tu… tu necesitarás decirme exactamente… la fuente de La Hermandad Mágica, el recibidor, el ascensor… y nada mas mira, ¡Ya no existe el velo de la muerte!… Todo el daño al ministerio... ¿Qué sucedió?- Agregó en una especie de gemido, mirando alrededor fijamente.
-Eso lo podremos discutir después de que haya enviado a mis alumnos de vuelta a Hogwarts- dijo Dumbledore ayudando a caminar a ambos, ni Ron ni ella quería moverse del lugar.
-Pero si ellos están implicados, deben responder ante el Ministerio- dijo Fudge intentando sonar autoritario.
-Yo responderé por todos ellos- dijo Dumbledore con la voz mucho mas firme que la de Fudge y este casi se atraganta.- Chicos…. Vallamos por sus compañero-
El viaje al recibidor estuvo lleno de miradas. Miradas de odio hacia Fudge, de tristeza entre Sirius y Ron, miradas de los aurores a ellos dos, como si los quisieran encerrar en azkaban y por ultimo las miradas de Hermione que parecían querer matar a todos ellos de una sola vez.
En el túnel, donde antes existió el elevador, se notaba que seguía caliente. Pero no tanto como antes, la roca ya era oscura y lineas de la lava descendiendo se notaban solidas. Subieron siendo ayudados por el hechizo Difodio, mientras lo ocupaban en las paredes para formar una escalera ascendente. Tardaron un buen rato. Los sonidos de los pasos y el hechizo actuando en la piedra era lo único que se escuchaba, ademas de los gruñidos de Fudge.
Al final del túnel, las voces acaloradas y gente moviéndose los trajeron de regreso de lo recién pasado abajo. El recibidor era un desastre y aun así la gente iba y venia hablando, discutiendo y señalando a todos los daños. Bueno otros señalando a Dumbledore y Fudge. Ya que varios pasaron de largo cuando estaban cerca y fueron a los magos. Los Weasley no esperaron ni un minuto en cuanto vieron a Ron se abalanzaron sobre de el, la primera en llegar fue la señora Weasley, luego el señor Weasley, los gemelos, Bill y Charlie que cargaban a Ginny por su tobillo.
-Gracias a Merlín- dijo la señora Weasley con el rostro empapado y apretando tanto a Ron que se puso morado.
-Mamá, ya basta mamá… estoy bien… de verdad que estoy bien- dijo Ron aunque seguían abrazándolo, palmeando le la espalda y revisando si estaba completo.
-Hermione, que bien que estés ilesa-dijo el señor Weasley sonriendo le y después le cayó el abrazo de los gemelos, Bill y Charlie.
Y antes de darse cuenta Luna, Sofí y Neville la tenían en un muy apretado abrazo, soltando un respiro de alivio.
-Que bueno que están bien, es genial-dijo Neville separándose y sujetando a Luna para que no la ahogara con su abrazo en el cuello.
-¿Y Harry?-pregunto Sofí mirando detrás de ella y de Ron, como si Harry se escondiera para darles una sorpresa.
Ron y Hermione cruzaron miradas luego con ellos. Intentaron sonreír, ninguno lo logro y las pocas sonrisas que habían se esfumaron por completo. Las lagrimas comenzaron a brotar y los miraban pidiendo explicaciones. El silencio fue desastroso. Ni siquiera se inmutaron en verse entre ellos, solo vieron el piso. Hermione miro que Neville tenia en una mano el collar de Harry con los cuatro anillos Pendragon, Sofí su chamarra bien doblada, una de las muñequeras de Harry la tenia Luna en la mano y en la otra tenia algunos frascos de pociones.
-Gracias chicos por recoger las cosas de Harry- dijo Hermione sonriendo un poco.
-Son muy importantes para el.- dijo Neville estirando los anillos. Ahora que lo veía bien su mandíbula ya parecía mejor.- Alguna vez me dijo que te los diera si...-
-En la segunda prueba, cuando pensó que corría riegos. Lo se. El me lo dijo- contesto Hermione tomando los anillos y mirándolos, parecían fríos y sin algo de color. ¿Seria que los maestros de Harry también estaban tristes?
Sofí le paso la chamarra de Harry por los hombros, el olor a el me cubrió por completo y mis piernas temblaron a punto de dejarme caer. Estaba a punto de ponerme a llorar, pero Luna se acerco y me tendió la muñequera, era exactamente la que contenía el reloj biblioteca. Aferre mi mano a la muñequera y le sonreí a mi amiga. Me la coloque en una de mis manos, se notaba que era mucho mas delgada que la de Harry, coloco los anillos en su cuello a lado del guardapelo con forma de corazón regalado por su novio y...
-Hermi, yo… nosotros… ¿Qué paso?- dijo Luna con voz baja.
-Ahora no- dijo Hermione fijándose en un par de aurores que intentaban levantar algo del suelo pero apenas y podían entre tres. Camino lo mas rápido posible a ellos y miro que sostenían la hombrera de Harry.
-Eso es de Harry- dijo Hermione cuando llego.
-Es evidencia, sera confiscado...-
No espero Hermione la respuesta completa, se acerco al centro donde la runa marcaba un ocho y la incremento hasta 10, al siguiente segundo los hombres cayeron golpeándose el suelo, machucándose los dedos y gimiendo de dolor.
-¿Decían?-pregunto con la mirada mas dura que tenia en su arsenal.
-Es parte del atentado y...-comenzó uno de los aurores rubio, ojos negros, musculoso y cara de idiota.
-¡Blaise!, Deja que se lo lleve- dijo Kingsley acercándose y lanzándole una mirada dura al tal Blaise.
-Tu no eres mi jefe Shacklebolt- dijo Blaise acercándose a Hermione y intentando intimidarla. Eso no lo lograría.
-Kingsley a dicho que dejes que se lo lleve- dijo Ruffus Scremengour acercándose y con la voz afilada- Ademas recuerda que no eres quien para decidir que hacer y que no hacer en este departamento. Después de lo de tu acoso a compañeras auroras, estas en la mira, un movimiento en falso y despídete de tu empleo-
Al tal Blaise le dio un ligero tic en el ojo, asintió y se alejo gruñendo. Hermione se agacho y cambio la runa a cero. Inmediatamente la hombrera dejo de pesar y fue tan ligera que parecía una pluma. Vio a los dos hombres ahí parados y solo sonrió un poco como agradecimiento.
-Tiene que ir a descansar señorita- dijo Ruffus con una mirada entre la preocupación y la simpatía.- Cualquier otra cosa que encontremos del señor Potter, no dude en que se la aremos regresar-
Asintió apretando los anillos, la muñequera, la hombrera e incluso la chamarra de dragón. Miro que los demás ya estaban listos para irse, solo la esperaban a ella. Dio unos cuantos pasos y al estar cerca escucho un "crack" y algo cristalino siendo rasguñado. Bajo la vista, dos pares de lineas metálicas y redondas, con cristales rotos debajo de su pie. Las gafas de Harry estaban ahí, rotas, destrozadas y sin su dueño. Se puso en cuclillas y las recogió. El metal totalmente destrozado y los cristales sin algunos pedazos.
-Oculus reparo- susurro Hermione apuntando los lentes. De inmediato estaban como nuevo.
Se levanto y por un poco de curiosidad se coloco los lentes. El mundo fue mas grande de lo que era, su visión se distorsiono y se sintió algo mareada. ¿Harry tenia la visión tan mal? Se las quito y las metió en la chaqueta, sintió el objeto cuadrado y voluminoso del detector. Un poco mas abajo el Taboo. ¿Debía regresar los al ministro? Tenia la responsabilidad de… No, Harry sufrió mucho por conseguirlos y mas aun ella se separo de su novio. Dejo los lentes ahí junto a esos dos objetos poderosos, como si fuera uno mas de ellos.
-Lista señorita Granger- dijo el profesor Dumbledore sosteniendo un pedazo del elfo de piedra que brillaba de color azul cielo.
Jamas estaría lista para regresar a Hogwarts sin Harry a su lado, ¿Pero que le quedaba? Quedarse en el ministerio hasta que el viniera a recogerla era exagerado. Asintió con la cabeza mientras tocaba la piedra al igual que los demás.
-Fudge -llamo Dumbledore directo al ministro que estaba a la distancia evaluando los destrozos provocados por Harry.- Darás la orden para sacar a Dolores Umbridge de Hogwarts. Dirás a tus Aurores que dejen de buscar a mi Profesor de Cuidado De Criaturas Mágicas de modo que pueda volver al trabajo. Te daré... - el profesor saco de su bolsillo un reloj con doce manecillas y lo examinó. - Media hora de mi tiempo, la cual supongo, será más que suficiente para cubrir los puntos importantes de lo qué ha sucedido aquí. Después de eso, dejaras en paz a mi escuela. Si necesitas más de mi ayuda para detener a Voldemort cuenta conmigo, para cualquier otro asunto evita me la molestia de regresar tu lechuza.-
Funge tenia la boca abierta y la cara redonda creció se sonrojo debajo de su despeinado pelo gris.
- Yo … tu… esto -
Dumbledore le dio la espalda tan rápido y sin siquiera escuchar cualquier sonido que hiciera. Todos esperaban su indicación, Hermione suponía que iría directo a Hogsmeade y de ahí a Hogwarts. Después de todo la noche fue muy larga y la mayoría estaba a punto de terminar dormidos.
Sintió la familiar sensación de tirón y luego de que sus pies eran elevados, girando sobre el el eje que era el pedazo de piedra, tan rápido y furioso que el estomago se le revolvió. Todo lo que la rodeaba se desvaneció, sus amigos iban a sus lados igual que la mayoría de los Weasley e incluso Sirius y Lupin. El torbellino de color y sonido le recordó un poco al portal que atravesó Harry. ¿Estaría bien? ¿Donde estaría en ese momento? ¿Cuanto tiempo tardaría en regresar?
Los pies de Hermione pegaron en el solido suelo otra vez. Sus rodillas se doblaron un poco y el pedazo de piedra cayo con una sonido entre acero y piedra. Miro a su alrededor, estaban en la oficina del profesor Dumbledore. Cada uno se fue a un lugar e incluso intentaron salir de ahí, pero la puerta no los dejo. Los retratos de los directores estaban dormidos y por el gran balcón se miraba todo Hogwarts y parte de los terrenos; oscuros y llenos de arboles. Pero a la lejanía, justo en el horizonte se divisaba un morado oscuro.
Comenzaron platicas de lo que sucedió y que es lo que realmente paso mientras los de la orden no aparecían, incluso algunos regaños de parte de la señora Weasley a sus hijos, o de Lupin a Neville y Luna. Sirius intento acercarse a Hermione, pero ella abrió la puerta de acero que daba directo al balcón y se recargo en la barandilla viendo los terrenos.
El amanecer se estaba acercando. Deseaba calma y silencio para poder pensar claramente, pero… era una mentira. Quería estar sola para poder llorar un poco, soltar su angustia y maldecir a todo pulmón por que la alejaran nuevamente de Harry. Le era insoportable saber que estaba en Hogwarts y el en algún lugar, lejos de ella.
-¡Hermione!- dijo la voz atronadora de la señora Weasley a su espalda.
-Mamá ahora no, dejala...-comenzó Ron que parecía forcejear con su madre.
-¡QUE LA DEJE, COMO NO DETUVO A HARRY! ¡SI ELLA HUBIERA ECHO LO QUE DEBÍA….-
-Si no quiere que sea grosera con usted, que suelte toda mi frustración y enojo en su persona, es mejor que me deje en paz-Dijo Hermione sin voltearse mientras su voz denotaba el verdadero enojo y frustración que sentia.
-Pero...-
-¡¿Quiere saber por que Harry fue solo?!- pregunto Hermione dándose la vuelta y mirando a Molly Weasley a la cara; La tenia roja, llorosa y consternada.
Atrás de ella todos los Weasley presentes; Ginny, Ron, El señor Weasley, Fred, George y Charlie. Cada uno de ellos mirándola al igual que todos los demás, desde Lupin hasta Sofí que aun era consolada por Luna.
-Harry no confiá en nadie- dijo Hermione mirando a la señora Weasley directo a los ojos- Desde que tiene memoria, Harry, a sufrido: Abuso infantil, abuso escolar, golpes, acusaciones y maltrato psicológico. Todo por personas que se decían llamar "su familia". Luego llego a Hogwarts y fue un nuevo comienzo para el, un mundo donde podría… alejarse de ellos. ¿Que recibió a cambio? Que todos lo presionaran para ser aun mejor. Con ser "el niño que vivió", con enfrentarse a su doloroso pasado, buscando el evitar ser presa de Voldemort. Nunca tuvo algo para el mismo… y no me refiero a algo material-
-Una familia- dijo Ron apretando los puños a su costado.
-El amor verdadero que solo una persona le entrego. Lily Evans.- dijo Hermione soltando las lagrimas que se acumulaban en sus ojos y apretaban en su pecho, tan solo recordar los pequeños datos de sufrimiento que le provocaron a Harry tanto dolor.- A los casi doce años, Harry no sabia responder a un abrazo, no tenia ni idea de por que Ron y yo eramos su amigos. Y siempre intentaba hacer todo solo. Y aun años después con la única que se sentía cómodo era conmigo, pero solo por que yo no lo juzgue, por que yo intentaba entender y por que siempre… siempre lo amare. Pero ¿Usted lo intento? Señora Weasley. No. Solo basto una orden de Dumbledore y lo dejo que se hundiera en su propia oscuridad, dejo que su alma solitaria se carcomiera y debilitara aun mas. Lo dejaron solo, lo abandonamos cuando mas nos necesitaba-
-Yo no tenia idea-
-¿Acaso le pregunto?, No. Harry quiso huir de esto, dejar que Voldemort hiciera lo que quisiera y largarse, me pido… casi me suplico que nos fuéramos juntos y viviéramos solos. No lo deje, le dije que no podía dejar Hogwarts, que no debía dejar que Voldemort hiciera de las suyas. Lo anime para continuar… Viendo como se comportan aun cuando el dio casi toda su vida para salvarnos… Creo que fue un error.-
El silencio se incremento, y las respiraciones cesaron. Hermione giro, se recargo en la barandilla y volvió a ver como el morado del amanecer se trasformaba en un naranja oscuro.
-Debí irme dejarlo huir e irme con el- susurro, con ese silencio fue suficiente para que la escucharan. Miro su mano, directo al anillo de compromiso, lucia hermoso y resplandeciente, pero se sentía aun extraño en su mano derecha.
El dolor la debilitaba mas y mas, quería llegar a una cama tumbarse y dormir, por una parte descansaría y por otra soñaría con Harry. Y eso quería, eso es lo que deseaba mas que nada en ese momento. El verlo nuevamente con sus ojos esmeralda, su cabello azabache y esa sonrisa que la enloquecía.
Quería culpar a alguien de que Harry se fuera, quería ir y golpear a alguien para que se lo regresara.(Nota caos: No me pegues Hermione, yo te juro que no lo… bueno si lo hice yo.) Lamentablemente no había una existencia corpórea con la cual desquitarse. No a menos que fuera con Dumbledore y le gritara por un buen rato, pero eso ya no ayudaría a Harry y tampoco lo traerían de regreso.
Existía un hueco dentro de ella que le indicaba que algo le faltaba, pero no uno que le dijera que perdió a Harry, seguía vivo. "Lejos, pero vivo". Se repetía una y otra vez, sin cesar para calmarse a si misma.
Comenzaron a entrar en la oficina nuevamente, ella siguió ahí intentando descifrar que aria Harry en su situación. Se le ocurrieron miles de cosas, desde crear un gran alboroto, hasta tomarlo con calma. Necesitaba dormir, su mente era un revoltijo y sus parpados comenzaban a cerrarse. Cerro los ojos.
Durante un poco de tiempo o lo que le pareció unos minutos, lo vio. Harry corría a paso apresurado, en un lugar completamente lleno de oscuridad, sobre un sendero blanco y que lo llevaba lejos muy lejos. Se veía tan mal como hacia menos de una Hora, con su bolsa de los grimorios en a pierna, seguida de la de pociones aun abierta y sin el seguro puesto, con su bolsillo del pantalón apretado por la cartera y jadeando.
-¿Qué tan largo es ?-pregunto Harry en voz baja y jadeando.
Hermione quiso decirle algo, no podía. Cuando abrió los ojos nuevamente, parecía que solo fue una fracción de segundo, la mañana seguía levantándose, pero no era muy distinto a lo que vio antes de cerrar sus ojos.
-Hermione- dijo la voz de Sofí aun un poco llorosa.- Llego el profesor Dumbledore-
-Ya voy- dijo Hermione pensando que le quedaba otra buena discusión por delante.
Antes de entrar vio a Sofí que tenia los ojos hinchados y rojos, una mueca de tristeza profunda y no dejaba de ver el suelo. Recordaba la primera vez que la vio, eso fue el segundo año, cuando Harry y Ron llegaron a Hogwarts en un auto volador, una niña cualquiera y muy nerviosa. Después fue cuando Harry tomo una poción multijugos con el cabello de la chiquilla, no es que le llamara la atención. Pero cuando la presento y la unió a Pendragon, sintió que se volvería parte de la familia y no tardo mucho en pasar. Su novio la cuidaba como una hermana pequeña y…
-¿Puedo ayudarte en algo Hermione?-pregunto Sofí al ver que la miro por un largo tiempo.
-Si, pero no ahora.- dijo Hermione sonriendo le y entrando.
En la habitación la forma del profesor Dumbledore estaba en su escritorio dejando un par de cosas, mientras los retratos ya despiertos le daban la bienvenida. Se adentro un poco mas viendo a todos los adultos en diferentes lugares de la oficina, pero un solo sillón vació a lado de Ron. Como si los únicos interrogados fueran Ron y ella. Se dirigió al sofá y se sentó, sin bajar la mirada y sin dejarse intimidar. No defraudaría a Harry como anteriores veces, ahora ellos cargaban con el peso de su novio y no lo dejarían caer por muy pesado que fuera.
-Bueno, chicos- comenzó Dumbledore mirando directamente a los menores implicados. -Debo de informarles que ninguno de ustedes van a sufrir represalias por los acontecimientos de esta noche-
Nadie lo interrumpió, pero el profesor los miro individualmente y mando una sola mirada, recordando les todo el daño causado por ellos… aunque técnicamente fueron Harry, Voldemort y el mismo Dumbledore. El profesor no parecía querer dejar esa mirada acusadora y como estaba intimidando a los Pendragon ella comenzó a pensar. ¿Que haría Harry?… o mejor dicho ¿Que haría ella?
-Nosotros solo causamos daños en la sección de profecías. En el recibidor fue Harry, Voldemort y Usted. Según recuerdo-dijo Hermione intentando poner su mejor cara de seriedad. No se dejaría llevar por nadie mas.
-Hermione- advirtió Lupin.
-¿Estoy equivocada profesor?-pregunto Hermione dando una ligera sonrisa, algo forzada por su cansancio y dolor.
Dumbledore la miro directo a los ojos. No encontraría ni una pizca de vergüenza, tampoco de incomodidad. Si buscaba alguna emoción que no fuera confianza y decisión, no lo encontraría en ella.
-No se equivoca, señorita Granger- dijo Dumbledore dejándose caer en su asiento detrás del escritorio. -Madame Pomfrey los esperara en la enfermería una vez que terminemos aquí -continuo - También les tengo que informar que Nymphadora Tonks pasara una semana en San Mungo, la Herida en su pierna fue grave-
Lupin pareció preocupado, cruzo los brazo y comenzó a mover la pierna nervioso.
-Con respecto a… Harry. Quisiera saber ¿Que le paso?-pregunto Dumbledore con la voz calmada pero de orden.
Ron giro a verme, yo no retire mi mirada.
-Desapareció- dijo intentando sonar calmada, no funciono muy bien.
-¿Desapareció?-Preguntaron varios, entre ellos Theo, Sirius y Sofí.
-Cuando llegamos a la habitación, en lugar de el velo de la muerte, estaba un circulo que se ingería todo- dijo Ron sentándose erguido y cruzándose de brazos.
Hermione quería decirle que aprendiera a mentir mejor, pero ella estaba igual que el. Todos parecieron creerle. Tal vez era que se conocían tanto que entendía muy bien cuando mentía.
-¿Debería suponer que ustedes saben a donde desapareció?-pregunto Dumbledore escudriñándonos con la mirada.
-Eso desearíamos saber nosotros- dijo Ron y Hermione al mismo tiempo.
-¿Por que fueron, si sabían que era una trampa?-esta vez pregunto Lupin intentando sonar tranquilo.
-Voldemort nos convenció de que tenia a Sirius- dijo Ron seguro y levanto los hombros. Hermione entendió que ella era la que veía las mentiras de su amigo, bueno lo conocía desde hace tanto y habían mentido tanto que era normal.
-Y los elfos- dijo la señora Weasley con la voz baja- ¿Por que nos protegieron si...-
-Harry quería estar seguro de que todos en la orden estaban a salvo. A pesar de que ustedes lo dejaron solo- dijo Hermione mas fuerte de lo que espero y con un tono severo.
-¿Harry esta muerto?-pregunto Sirius mirando aun mas intenso a Hermione.
Guardaron silencio como si esa era la pregunta que todos se hacían y que nadie quería formular.
-No esta muerto- dijo Hermione segura.- Si eso fuera...-acaricio su anillo de compromiso y su corazón salto- Lo sentiría-
Sofí casi salta de alegría, Theo dejo salir mucho aire como si lo hubiera contenido por horas, Luna abrazo a Neville y este simplemente se rio un poco nervioso, como si estuviera aliviado.
-¿Cómo?-pregunto Charlie casi dormido en una esquina.
-Eso no importa- dijo Ron con el mismo tono de seguridad- Yo también lo siento, Harry sigue vivo-
-Si atravesó el velo es imposible- dijo Dumbledore cambiando su semblante a uno triste.
-¿Nuevamente desconfiara de Harry?- dijo Hermione sorprendiéndose.-Después de que le ha demostrado una y otra vez que el es mejor que cualquier mago en esta habitación. Por merlín Harry pudo evitar una posesión completa por parte de Voldemort y el que casi los derrotara a ambos magos mas poderosos de este siglo. ¿Seguirá desconfiando de el?-
-No es lo mismo, señorita Granger. EL velo...-comenzó Dumbledore inclinándose sobre su escritorio.
-NO, USTED ESCÚCHEME BIEN, PROFESOR DUMBLEDORE- Grito Hermione levantándose y azotando ambas manos en el escritorio del profesor.- HARRY ESTA VIVO. NO ES SOLO UN PRESENTIMIENTO O UNA CREENCIA. ESTA VIVO Y PUNTO. ¿ENTIENDE?-
Miraban a Hermione como si hubiera enloquecido. Excepto los Pendragon Presentes. Fred y George que estuvieron en un rincón sin demostrar sus sonrisas de bromistas, se rieron un poco al ser sorprendidos por el grito.
-Tiene mas vida que un gato- dijo Fred pasando los brazos por encima de George y dirigiéndose a donde Hermione estaba con Dumbledore.
-Cuanta razón Hermano. Tiene una suerte de la patada, pero como queremos que tenga suerte si siempre la gasta toda en momentos de vida o muerte.- dijo George y le paso el brazo a Ron que también se paro con una sonrisa y se pararon junto a Hermione.
-Por años llevo preguntándome como le hacia. Y parece que ustedes dos lo acaban de encontrar la respuesta- dijo Ron riéndose un poco.
-Son los troposoplos, de seguro le ayudan cuando mas problemas tienen- dijo Luna a lado de Neville y a su vez a lado de los Hermanos Weasley.
-Amor, nadie conoce los troposoplos. Seguro tiene un trébol de cuatro hojas que le dio un lepruchan- dijo Neville riéndose como si eso hubiera sido un chiste o tal vez estaba muy feliz de saber que Harry seguía vivo.
-Es mucho mas simple, es muy fuerte- dijo Sofí enseñando una sonrisa muy amplia, como si nunca hubiera existido la chiquilla que consolaba Luna.
-Escuchen chicos...-
-NO-Dijeron todos los Pendragon.
-Escúchenos ustedes a nosotros. -dijo Hermione señalando a sus lados, donde los Pendragon se apoyaban unos a otros.-Creyó que Harry no podría, creyó que el seria débil, pero no. Nosotros estamos con el y el esta con nosotros. No importa donde, por que nosotros somos Pendragon-
-Pendragon no solo es una escuela que creo Harry. Ha sido el hogar de muchos de nosotros- dijo Sofí apoyándose en el Hombro de Hermione y ella le paso la mano por los hombros- Donde encontramos Hermanos y Hermanas-
-Donde aprendimos que incluso el mas débil, puede ser tan fuerte como su espíritu lo crea-dijo Neville apretando a Luna por su cintura.
-Un lugar donde los mas raros encajamos y podemos confiar en que nos verán por quienes somos-dijo Luna sonrojándose.
-El santuario donde personas asustadas y queriendo escapar pueden llegar, le extenderán la mano, le regalaran una sonrisa e intentaran protegerlo -dijo Theo poniendo la mano encima del hombro libre de Sofí.
-Puede que no seamos los mejores en casi todo, puede que seamos in apropiados para la mayoría de cosas. Pero no te dejan solo, nos ayudamos entre todos, nos superamos e incrementamos lo mejor de nosotros. Sea lo sea, juntos podemos enfrentarlo- dijo Ron medio riéndose.
-Pendragon son lo mejor de cada uno, combinado lo mejor de todos los demás. Pendragon es el nido donde nosotros nos reunimos y ayudamos entre todos. No somo tejones, águilas, serpientes o leones. Nosotros somos...-dijo Hermione sonriendo.
-DRAGONES-gritaron todos.
-Puede quitarnos el lugar donde nos reunimos, alejarnos o incluso encerrarnos. Pero Harry nos enseño, que todos los dragones vuelan juntos y si uno se separa siempre regresara al nido.- dijo Ron con la voz calmada, dando el mensaje de Harry- Nosotros no dejaremos de ser Pendragon y estamos seguro que Harry regresara, ya que es el Dragón mas fuerte del mundo-
Asintieron como una sola persona.
Dumbledore los miraba atónito. Y no era el único, Sirius, Lupin, Los señores Weasley, Charlie y Bill. Ginny no podía decir nada, estaba atrapada entre su madre y padre y aun así asentía mientras parecía hacer fuerza con la señora Weasley.
-Jamas creí ver a alumnos de todas las casas apoyándose y menos a Gryffindor y Slytherin -Dijo Dumbledore con calma y una sonrisa en la boca- Harry hizo lo que yo no he podido en… cincuenta años. Tampoco creí que alguien fuera tan malo para maltratar a un niño huérfano, que unos niños de primero cruzara pruebas echas por profesores, que rompiera reglas y matara una criatura de cientos de años, salvar a inocentes, pelar solo e intentar cambiar el futuro de no solo uno, si no de todos. Equivocación tras equivocación, tras equivocación y siempre por el mismo chico- dijo Dumbledore con su voz de abuelo, sonriendo y dejando caer lagrimas- Nunca he estado mas feliz de equivocarme, ya que si eso significa que Harry regresara, no me importaría equivocarme mil veces mas-
-Y aun así, usted es el culpable de mucho del sufrimiento de Harry- dijo Hermione sin intención de herir, pero era el momento de que el profesor abriera los ojos.
-¡No es momento...-comenzó nuevamente la señora Weasley.
-No Molly- la detuvo Dumbledore avergonzado- Pueden salir, todos… menos ustedes dos-
Señalo a Ron y Hermione.
-¿Profesor?-dijo Lupin abriendo los ojos.
-Ya ha pasado lo que tuvo que pasar y no podemos regresar el tiempo para evitarlo. Solo queda confiar en ellos… como no lo hicimos en Harry.- continuo Dumbledore con la voz calmada- Es hora de que diga lo que debí decirle a Harry-
Nadie se movió.
-Vallan con Poppy, estoy segura que estará muy enojada de que no han entrado en la enfermería- continuo Dumbledore con su mirada a todos.
La oficina se abrió y comenzaron a abajar, uno seguido de otro. Cuando fue el turno de los Pendragon miraron primero a Hermione y luego a Ron, ambos movieron la cabeza y salieron del despacho. Una vez solos, se volvieron a sentar y se miraron.
-¿Que quiere hablar con nosotros?-pregunto Hermione.
- Tienen que saberlo. Son su amigo mas cercano y la novia de Harry y tienen que saberlo-
-¿Saber que?-pregunto Ron.
- La explicación -Continuo Dumbledore -La explicación del los errores de este hombre viejo. Ahora que veo lo que he provocado y los daños que he echo, de todas las heridas que tiene un chico de su edad. Un chico que todos ustedes aprecian y en el que creyeron mas que este espíritu erosionado por la edad. Los jóvenes no pueden saber cómo con la edad se piensa y se siente. Pero los hombres viejos son culpables si olvidan lo que era ser joven... y yo parezco haberlo olvidado recientemente...-
La luz de un nuevo día se perfilaba por las ventanas, el naranja brillante bañando el despacho y al profesor que se vio cien años mas viejo y eso que tenia 150 años… mas o menos. Las arrugas ya no solo eran de edad, parecieron heridas que se le acumulaban una sobre otra, cada cana parecía el recuerdo de cada día, unos mas malos que otro y algunos fuera de lugar.
- Hace quince años- dijo Dumbledore- Cuando vi la cicatriz en su frente, lo que esta podría significar. Supuse que podría ser la señal de una conexión forjada entre Harry y Voldemort-
-Lo sabemos de sobra- dijo Ron gruñendo un poco.
-Sí - dijo Dumbledore excusándose - Sí, pero verá señor Weasley... es necesario empezar con su cicatriz. Para que llegara a ser aparente, poco después de que Harry regresara al mundo mágico, que yo estaba en lo cierto, su cicatriz estuvo dándole advertencias de cuando Voldemort estaba cerca o cuando se sentía lleno de poder.-
-Eso lo sabemos. Harry nos dijo todo- continuo Hermione ya cansada de verdad.
-Y llego un momento, después de verlo regresar del laberinto que creí que… esa conexión era mas fuerte y resistente. Casi imposible de romper-
Ron y Hermione ya no se molestaron en decirle que lo sabían.
-Voldemort se daría tarde o temprano cuenta de que la conexión que existía entre ellos dos le daba poder sobre Harry, y se preocupo de que eso pasara. Por eso nos recluto para vigilar lo, por eso la orden lo mantenía en su visión, por eso lo encerró en casa de su tía… para que la protección de sangre debilitara un poco esa conexión-continuo Hermione para apurar a Dumbledore.
-¿Hicieron todas esas conjeturas solos?-pregunto Dumbledore.
-También sabemos que el alma de Voldemort en Harry lo hace tan vulnerable que por eso podía ser poseído, en el momento en que los sentimientos de ellos dos se sincronizaban y que a pesar de todo eso Harry peleo día y noche para mantener a raya esa entrada de Voldemort- anexo Ron.
Dumbledore abrió la boca.
-¿Y la profecía?-pregunto Dumbledore.
-Ya… Harry el elegido, nada nuevo. Solo que el tuviera que matar a Voldemort- dijo Ron alzando los hombros.
-y que también pudo ser Neville- continuo Hermione asintiendo.
-¿Se los contaba todo?-pregunto Dumbledore anonadado.
-Antes de que sintiera traicionado por usted-dijo Hermione soltando un suspiro y recordando como Harry le contaba todo sobre lo que le pasaba.-Después escondió algunas cosas-
No era completamente cierto, las escondió por que tenia que engañar a todos y evitar que se enterara de su enorme ejercito. De los anillos excalibur y del poder de merlín no hablaría nada. Aunque debía admitir que Harry fue muy lindo al enseñarle todos sus secretos por medio de su conexión mental.
-Lo que no entiendo del todo esto es ¿Porque encerró a Harry? ¿Porque no lo acerco a usted para protegerlo?- pregunto Ron de repente.
-Un error de hombres viejos...olvidando lo que se siente ser joven- dijo Dumbledore cansado-… También un poco de miedo, el miedo de que Harry fuera consumido por el poder que demostraba-
-Harry jamas se dejaría llevar por el poder- dijo Hermione enojada con el profesor-Ese poder es algo que consiguió con su esfuerzo y esmero, ademas de que el siempre lo a equilibrado con su bondad y comprensión. Como ha demostrado, no cualquiera puede corromperlo.-
-Lo he visto esta noche y como he mencionado, fue un error fatal el pensarlo- dijo Dumbledore bajando la vista.
-¿Por que intento alejarnos de el? ¿Por que casi me hace jurar el dejarlo?-pregunto Hermione ya de verdad harta, solo quería saber eso e irse a dormir.
Dumbledore hizo una pausa.
Hermione miró la luz del sol, que estaba deslizándose lentamente por la brillante superficie del escritorio de Dumbledore, iluminando un bote de tinta plateado y una magnífica pluma roja. Los retratos alrededor de ellos estaban despiertos y escuchando absortos la explicación de Dumbledore; podía escuchar el movimiento de las ropas, el ligero aclarar de una garganta.
-No intente alejarlos, simplemente intente ver que tan fuerte era su unión a el. Nunca evitaría que estuvieras con Harry, si te acuerdas solo lo dije, pero jamas tuve la varita en mano- dijo Dumbledore de nuevo con vergüenza en los ojos.
Hermione hizo memoria, era cierto, Dumbledore no tenia varita en ese momento y tampoco insistió mucho en ello después, salvo en la audiencia de Sirius. También recordaba que el profesor nunca dio una explicación buena a que lo apartara de el. Excepto el que revolviera las emociones de Harry.
-Creía que lo mio con Harry lo haría enojar mas veces en el año y que eso desencadenaría mas momentos en que Voldemort y el se conectaran ¿Verdad?-dijo Hermione al comprender un poco mas.
-No puedo ocultar les nada. Harry les enseño bien, aun recuerdo que esa habilidad de trasmitir su modo de ver las cosas la tenia desde el primer curso-dijo Dumbledore con una leve sonrisa.- Pero lo que vi hoy en el ministerio, la forma en que lo paraste, el que lo trajeras de regreso y que el peleara para sacar a Voldemort de su cuerpo y mente. Me aclaro un poco mis dudas entre ustedes dos. Se que es tarde para pedir perdón y que todo esto se lo tendría que decir a Harry, pero…-
Hermione se rio un poco y apretó la chaqueta contra su cuerpo.
-Sabe que diría Harry ¿Verdad?-comento Hermione aspirando un poco del aroma.
Dumbledore lo pensó un segundo e incluso Ron, después ambos sonrieron.
-Siempre existen las segundas oportunidades- dijo Dumbledore al mismo tiempo que Ron.
-Aunque para mi es la tercera- dijo Dumbledore aun medio apenado.
-No importa… el no quería que usted se sintiera mal. El solo pediría que era momento de ver al mismo lado y que nos enfocáramos en "pararle los pies a Voldemort"- dijo Hermione aun sintiendo el detector y el Taboo en la chamarra. En cuanto pudiera los guardaría en su monedero.
-Tiene razón, señorita Granger- dijo Dumbledore mirando a un lado.
Directo a lo que parecía ser un armario que tenia algo grabado, unas runas de cerradura. ¿Que guardaría ahí?
-Bien- dijo Ron asintiendo- Creo que deberíamos preguntar ¿Que pasara a partir de ahora?-
-No lo se-dijo Dumbledore casi de la misma forma que Harry lo decía.
-Tenemos dos Horrocrux -dijo Hermione de repente y Dumbledore alzo la cabeza.
-¿Dos?-pregunto con una sorpresa mucho mayor de la enterarse de que sabían todo con respecto a la profecía y los Horrocrux.-¿Cómo es posible que encontraran dos?-
-Suerte, supongo- dijo Ron alzando los hombros.- Técnicamente no fuimos nosotros, si no Harry… era algo así como que sentina el alma dentro de los objetos-
-Entiendo- dijo Dumbledore caminando a su ropero rápidamente moviendo la mano y quitando las runas que la protegían.
Abrió el ropero y saco una caja de color negro, con el símbolo de serpientes. La coloco en la mesa y la abrió mostrando el contenido. Un anillo plateado con dos serpientes sosteniendo una gema negra grisácea y con un ligero símbolo adentro que no se veía bien.
-¿Ustedes saben identificarlos?-pregunto Dumbledore algo rápido.
-Solo Harry…¿Crees que aun puedas? Como con el guardapelo o la diadema-dijo Ron mirando la con esperanza en los ojos.
-Ni idea, las anteriores veces sentí el alma por que Harry estaba presente- dijo Hermione también sorprendida.
-¿Eran un guardapelo y una diadema?-pregunto Dumbledore acercando mas en anillo.
-Si- dijo Hermione y acerco su mano, incluso toco el anillo por un segundo… pero nada sucedió, ningún sentimiento como las anteriores veces.- Nada de nada… no tengo ni idea. ¿Cree que es un Horrocrux?-
-Si, lo he conseguido en una cabaña. -dijo Dumbledore cerrando la caja- Estos meses que he estado afuera de Hogwarts los dedique en la búsqueda de esa cabaña, al encontrarla pase por varios… problemas para obtenerlo-
-¿Una cabaña?- preguntaron Hermione y Ron asombrados. Podía ser que la suerte estuviera de su parte.
(Nota caos: No lo puse por los juegos del Hambre… esta bien me atraparon.)
-Si. ¿Por que?-pregunto Dumbledore cerrando la caja y dejándola a un lado.
-Harry logro sacar información de Voldemort, una de esas tantas veces que el intento adentrarse en su mente- dijo Hermione reflexionando todo lo aprendido.- Donde se supone que están los Horrocruxes-
-Una cueva y en Gringgots, son los lugares donde podría estar el ultimo- dijo Ron pasándose una mano por la frente que estaba perlada de sudor.
Hermione estaba igual. Harry se iba y Dumbledore tenia el tercero, sin contar con Naggini y el diario practicante tenían todos. Su novio si que contaba con la peor suerte del mundo.
-¿Donde están los otros dos?-pregunto Dumbledore de un momento a otro.
-Los tiene Harry, guardados en una cartera expandida e in detectable -dijo Hermione comenzando a pensar.
Miraba las posibilidades de encontrar el ultimo, eran altas y si estaba en Gringgots… con la alianza con los duendes podía decirse que los tenían todos. Solo faltaba que regresara Harry y que realizaran los rituales… matar a Naggini y Voldemort podría ser otro problema. Seguro que Ron ya estaba haciendo un plan para eso y lo podía saber por como movía los ojos.
-El diario esta destruido, el guardapelo y diadema los tiene Harry- comenzó Dumbledore con una mirada mas clara. Seguro que era para darse confianza a si mismo y a ellos dos.
-Usted tiene el anillo. Con eso serian cuatro horrocrux- dijo Ron ayudando a Dumbledore.
-Falta uno que esta en una cueva o en Gringgots, Naggini y Voldemort- termino Hermione dejando salir un respiro, si que era mucho y eso que no contaba que Harry busco cinco anillos, leyó (aprendió) 4 grimorios, ademas de los dos partes que tenia Merlin. Y que tenia que conseguir la ultima pieza de los anillos excalibur… eso si era pesado.
-¿Y las reliquias de la muerte? Les dijo algo de eso-Dijo Dumbledore y ellos dos se vieron.
-De eso no sabemos nada- dijo Ron de un momento a otro.
-Bueno, si lo sabemos. Pero hemos estado tan concentrados en los horrocrux y en el entrenamiento que se nos ha pasado- dijo Hermione para a completar mas la información.
-Por pura casualidad ¿Harry se llevo su capa?-pregunto Dumbledore con unos ojos mas abiertos
-SI-
-Perfecto- Continuo Dumbledore sin pararse a que ellos le preguntaran el porque preguntaba.- En cuanto regrese… si eso… cuando regrese el, se los daré-
-¿Que dará a Harry?-pregunto Hermione algo sorprendida.
Dumbledore guardo silencio, se levanto para guardar la caja nuevamente y los miro.
-Todavía ahí cosas que no me han dicho ¿Verdad?-pregunto Dumbledore sonriendo como antes de toda esa odisea. Como ninguno de los dos respondió el continuo- Yo aun tengo un secreto, pero no se los diré a ustedes y ustedes no me dirán los secretos que tienen de Harry, así que confiaremos en que cuando regrese todo caiga por su propio peso-
-Aun tenemos que ver si los duendes nos dejan sacar el Horrocrux y si no esta ahí, tenemos que ir a buscar una cueva...- comenzó Ron pero fue interrumpido.
-Eso puede esperar por ahora señor Weasley. Creo que hoy hicimos un avance monumental… creía que solo tenia uno en poder y resulta que Harry avanzo a donde yo no podría… es magnifico- dijo Dumbledore sonriendo- Por ahora les recomendaría descansar mucho e ir con Poppy, seguro me regañara por mantenerlos todo este tiempo en mi oficina-
-Bien profesor- dijo Hermione levantándose, estaba tan cansada que no podía ponerle criticas a una cama suave y a cerrar los ojos.- Nos vemos pronto y recuerde… esta es la ultima oportunidad que le damos para demostrar que esta con Harry-
-Siempre tan lista y defendiendo en lo que cree ¿verdad?-dijo Dumbledore mirando sobre sus lentes y lanzando una mirada medio alegre con esos ojos azules.
-Hasta luego profesor- dijo Hermione y Ron para después salir.
Caminaron sin hablar hasta la enfermería, los pasillos se les hicieron eternos y extraños, como si en mas de un siglo no hubieran estado ahí, el silencio por la mañana fue algo bueno. No tenían que aguantar miradas ni a los demás alumnos. Hermione en ese momento le dolía todo y se sentía tan cansada que no le importaba arrastrar los pies por todos lados y evitaba mirar a cualquier dirección que no fuera enfrente. Miro una vez a Ron que el se veía igual y no parecía nada feliz de caminar.
Llegaron a la enfermería minutos después. Madame Pomfrey estaba a punto de regañar los, pero al verlos tan cansados y en mal estado decidió dejarlo. Entre la ayuda de Sirius y los demás adultos los curaron, luego la señora Weasley, Ginny y Luna la ayudaron a cambiarse de ropa, Sofí hubiera ayudado, claro que ya estaba durmiendo en ese momento. Se acostó con una venda en los brazos, varios parches en las piernas, también una gran gasa en la mejilla que golpeo Lucius. Ron estaba igual solo que tenia una venda que le cubría toda la frente. Los demás ya estaban acostados. Y ella se recostó en la camilla contigua a la de Daphne que estaba muy dormida, no lucia nada mal, solo una pequeña venda en su mano izquierda.
Nadie hablo, solo los veían. Sirius se sentó a su lado, como si eso lo acercara mas a Harry y ella sintió que así era, Lupin ya no estaba al igual que Charlie y Bill. Los señores Weasley con Ron y Ginny, Luna y Neville no dejaban de verse. Theo estaba sentado y leyendo un libro, parecía que no dormiría y quien lo juzgaría después de pelear con su padre. Hermione miro las cosas de Harry, debía guardar el Detector o el Taboo pero estaba tan cansada que en cuando lo pensó sus ojos se cerraron. El sueño empezó donde lo dejo.
Harry corría por ese lugar oscuro y en el sendero blanco, jadeaba y a menor velocidad que la anterior. Dos detalles que no noto antes, la primera era que su novio si tenia puesto uno de sus dos muñequeras pero esa era la que tenia pergaminos, la segunda es que en su mano tenia un anillo color platino y runas negras. Y sorprendió a Hermione que Harry comenzó a caminar, estaba recuperando el aire y su color de rostro le indico que estaba a punto de caer desmayado.
-Un poco mas, Solo necesitas seguir avanzando. Vamos no te detengas. Por Mione- se animo Harry para seguir corriendo. Antes de continuar cerro los ojos.
La imagen frente a Hermione se disolvió, estaba debajo de un árbol sentada y admirando el paisaje, era extraño el árbol, no media mas de dos metros, las ramas apenas y salina del metro y medio. Y sin siquiera pasto o nada, era como si flotara en el cielo azul claro. Ahí enfrente estaba Harry, sin sus lentes con la ropa rasgada y mirándola.
-¿Regresaras pronto?- dijo Hermione mirándole y sintiendo ganas de tocarlo.
-No lo se- contesto Harry acercándose e inclinándose para quedar a su altura, sus ojos tan verdes la incitaban a besarlo. Al contrario que todos sus demás sueños en este no pudo moverse.
-Dumbledore...-comenzó Hermione intentando trasmitirle lo que recién había pasado.
-Olvida todo el mundo, en este momento solo somos notros- dijo Harry intentando tocar sus mejillas, sus manos cruzaron su piel y pareció disolverse un poco su imagen.-¿Estas bien?-
-Lo estaría, si estuvieras aquí conmigo- dijo Hermione un poco molesta.
-Perdón.-dijo Harry con una mirada triste.- Tenia que... yo...-
-Lo se- dijo Hermione no queriendo arruinar ese pequeño momento, pero es que estaba muy molesta- Solo has lo mejor que puedas he intenta regresar. Te amo y sin ti yo… no podría ser feliz-
-También te amo, no sabes cuanto- dijo Harry acercándose mas, sus ojos ya era lo único que veía- Estaremos juntos en cuanto regrese y jamas me alejare de ti. No importa si tu te enojas conmigo, estaré pegado a ti durante meses, años, durante las noches, los días, llueva, truene o se destruya el mundo; Cuando regrese seremos solo nosotros dos-
-Eres… eres...tan...- dijo Hermione llorando y pudiéndose mover, intento tocar la cara de Harry pero nuevamente estas lo traspasaron.- Estarás solo y no podre estar ahí… por favor… por favor. Amor, se fuerte-
-Lo soy por que tu me amas- dijo Harry antes de sonreír y todo se disolviera en luz blanca.
Despertó con un par de ojos verdes viéndola desde arriba. Pero no los de Harry estos eran muy diferentes. Por un segundo pensó que seguía dormida luego vio la sonrisa burlona de su amiga.
-He la come libros, vive- dijo Daphne con su voz chillona.
-Callate Greengrass- dijo Hermione dándose vuelta y vio a Sirius sin dormir y cruzado de brazos.
No quería ver ahora al padrino de Harry, se sentó y vio que varios ya estaban despiertos. Luna leyendo el Quisquilloso, claro que desde un angulo extraño, luego a Neville que juntaba dos trozos de varitas con cinta americana (Nota caos: De donde la saco no me pregunten), Theo estaba dormido y Sofí se dedicaba a picar algo del desayuno que puso Madame Pomfrey frente de ella.
-¿Que hora es?-pregunto Hermione restregándose los ojos.
-Cerca del medio día. Te la pasaste babeando y hablando dormida toda la mañana- dijo Daphne pasando le su desayuno, almuerzo.
-Yo no hablo dormida- dijo Hermione comenzando a comer.
-¿No niegas el babeo?-pregunto Daphne riéndose.
-¿Como es que te aguanto?-dijo Hermione mordiendo una tostada.
-Por que soy divina amiga, ademas de la novia de uno de tus mejores amigos y la que te guarda los sucios secretos- dijo Daphne mientras se giraba a la cama contigua.-¿Verdad amor?-
-A mi no me metan- dijo Ron ingiriendo todo lo que le dejo Madame Pomfrey como aspiradora, claro que ella no lo veía por que Daphne le tapaba la vista hasta entonces.
-Come mejor Ronald- ordeno Daphne con voz suave y Ron se detuvo.
-Pero tengo Hambre- dijo Ron limpiándose la boca con la servilleta.
Daphne se rio un poquito y luego regreso a verla.
-Hablando de oscuros secretos. Siento lo de Harry- dijo Daphne con un tono triste y los ojos sombríos.
-¿Ya te enteraste?-
-Aquí no se puede guardar nada, estas en Hogwarts ¿Recuerdas?- dijo Daphne con un periódico en la mano.- Toma te conseguí el periódico-
-Si conseguir es eufemismo de quitar a la fuerza, claro que lo conseguiste tu sola- gruño Sirius que bostezo mientras se estiraba en su silla.- Yo lo conseguí y ademas de que lo traje, ni me lo dejaste leer niña latosa-
-Parece que el Asesino buscado y exonerado es un niño llorón- se burlo Daphne de Sirius.
Sirius gruño como perro antes de levantarse y estrujarse las cara con ambas manos.
-Bueno ya que estas despierta Hermione, voy a ver en que pudo ayudar al ministerio, le echare un ojo a Lupin en San Mungo para evitar que pervierta a mi sobrina y de paso voy a ver si McGonagall esta mejor, a y claro que de paso tengo que ir a identificar el cuerpo de Kreacher -dijo Sirius con un poco de tristeza en su voz. Lo cual hizo el ambiente un poco mas deprimente.- Su pongo que tendré que enterrar lo adecuadamente, después de todo salvo a mi ahijado-
-Traelo aquí, yo se donde enterrarlo- dijo Hermione pensando en el prado donde Amiji y Natsu descansaban juntos.
Asintió para luego ver a Neville que seguía intentando unir su varita.
-No funciona así niño planta, que Augusta te compre una nueva- dijo Sirius mientras salia de la habitación- Adiós niña rara, enana, no vemos luego abusona-
-¡Sirius Black!- grito Sofí a punto de lanzar le una manzana que tenia para su almuerzo. En cuanto lo vio Sirius corrió. No sin antes meter la cabeza de nuevo en la enfermería y le regalo una sonrisa a Hermione.
-Nos vemos luego Ahijada- Sirius desapareció después de unos momentos.
Hermione tomo el Profeta, y comenzó a leer. Con en titulo a toda pagina.
"El que no debe ser nombrado a vuelto"
Las letras de tamaño colosal y al fondo una pequeña foto de Fudge. Se pregunto que mentiras o cosas absurdas escribirían esta vez. Giro la pagina y leyó el siguiente titulo aun bastante grande.
"Las mentiras al descubierto.
En un fugaz discurso en la mañana, el Ministro de Magia Cornelius Fudge confirmo que ÉL Que No Debe Ser Nombrado ha regresado a este país y está otra vez activo.
-Estoy con un gran arrepentimiento tanto que debo confirmar que el Mago que se hace llamar Lord ... bueno, saben lo que quiero decir esta vivo, y entre nosotros otra vez,- dijo Fudge cansado y aturdido como los periodistas a los cual se dirigía. - Lamentamos la rebelión en masa de los Dementores de Azkaban, quienes se muestran adversos a continuar como empleados del Ministerio. Creemos que los Dementores actualmente están tomando camino hacia el Lord.-
Según varios avistamientos muggles y de magos de todo el país, los Dementores sobre vuelan todo el país. ¿A donde se dirigen? ¿Por que el Ministerio no hizo nada ante tal problema? Estas preguntas se realizaron durante dicha entrevista, las preguntas fueron contestadas con un -No puedo comentar nada de los procedimientos que ha hecho el ministerio- Cosa que nos hizo surgir mas dudas. ¿Que procedimientos realizo el ministerio? Y ¿Por que no comenta una mínima cantidad de información para calmar a su conciudadanos?
Todo el departamento de reporteros en el profeta, duda de que El ministro Fudge se haya percatado del extraño comportamiento de los dementores "
-Ese idiota de Fudge fue advertido por Harry enfrente de todo el Winzengamot ¿Que cree que ganara con decir que hizo algo? ¿Simpatía?- dijo Hermione algo enojada.
-Nadie lo cree, sobretodo por que parecía muy asustado en cuanto se entero- dijo Luna desde el otro lado- Según las palabras mi papá "Fudge casi se mea en medio de las entrevistas"-
Le sonrió a Luna y continuo.
"-Incitamos a la población de Magos a permanecer alerta. El Ministerio actualmente esta publicando guías básicas para la defensa personal y del hogar las cuales van a ser entregadas gratuitamente a todas las casa de Magos dentro de el próximo mes.-
Las declaraciones del Ministerio fueron tomadas con abatimiento y alerta por parte de la comunidad Mágica, ya que recientemente el miércoles pasado se declaro y convenció a todo el Wizengamot de que: Y se cita textual -Los rumores persistentes de que Ya Saben Quien esta entre nosotros otra vez, es Falso. Al igual que el cuento del niño que mintió a hecho que publique el Profeta, solo es un adolescente problemático. No tienen nada de que preocuparse-
Los detalles de los eventos que se llevaron a cabo en el Ministerio fueron censurados y no serán publicados aunque se cree que Él que no debe ser nombrado y un grupo de sus seguidores, conocidos como Mortifagos, lograron entrar al Ministerio de Magia en la tarde del jueves.
Albus Dumbledore, que hoy fue reintegrado como director del colegio Hogwarts de Magia y Hechicería renombrado miembro de la Confederación Internacional de Magos, y renombrado Jefe del Wizengamot en el Ministerio, ha estado hasta ahora sin pronunciar un comentario. Él director ha insistido durante el ultimo año que el que no debe ser nombrado no estaba muerto, como se creía, sino que esta reclutando una vez más a sus seguidores. Vaya que tenia razón.
Entre tanto, el chico que vivió..."
-Ya apareció Harry, sabia que ellos lo iban a mencionar de algún modo- dijo Hermione mirando la fotografiá de Harry, era de la audiencia disciplinaria. Claramente no tenían una actual por que era el tercer articulo en la que ponían la misma foto.
- Ya es el chico que vivió otra vez- Dijo Ron gruñendo mientras se acercaba a Daphne.
-Sí, ellos son muy halagadores ahora con Harry. Claro que después de que les abriera los ojos con pinzas industriales- dijo Hermione tan molesta como Ron.
-¿Pinzas industriales?- pregunto Daphne desconcertada.
-Olvidado- dijo Hermione continuando con leyendo.
"...una solitaria voz de la verdad que nos indicaba el regreso de quien ustedes saben. Vos que dejaron a un lado por su carácter explosivo, su imagen casi desequilibrada y los rumores de sus continuos rompimientos de reglas, abuso de poder y las mentiras que le adjudicaron. Harry Potter nunca vacilo en su historia, siempre intentando gritar la verdad a todos los sordos que no querían escucharlo. Soportando el ridículo y la calumnia que sufrió por todo el año por parte de nuestros temores.
Los movimientos de Quien ustedes saben, pagina dos del periódico.
Lo que el Ministerio nos debería haber contado, pagina cinco.
Porque Nadie Escuchó a Albus Dumbledore, paginas seis a ocho.
Entrevista exclusiva con Harry Potter, pagina nueve a Doce… "
-¿Cual entrevista?-pregunto Hermione abriendo la boca y sorprendida.
-Es su historia que publicaron hace meses. No dicen nada mas de los Pendragon o incluso de que a pasado en el Ministerio- dijo Daphne limpiando las migajas de la cama de Ron.
-Reutilizar una historia de esa forma, el publico vera que el profeta solo quiso llenar sus paginas-dijo Luna girando la pagina del Quisquilloso, luego sonrió y se la lanzo a Daphne, que la atrapo entre sus manos.- Lean esto-
El Quisquilloso era una revista algo extraña, sus titulares eran algunas cosas locas y el papá de Luna era el dueño. Por eso siempre su amiga la leía a conciencia e enviaba sus notas al señor Lovegood de como le quedo. Daphne y Ron se juntaron a Hermione para poderlo leer a voz alta.
"Harry Potter, nuestro Héroe, salva al ministerio del Innombrable"
-¿Como?-preguntaron los tres directo a Luna.
-Mi papá se entero de que los de la orden iban directo al Ministerio. Su nuevo reportero llego después de Fudge, parece que se escondió para ver todo y consiguió la primicia, la historia… casi completa, algunas fotos y muchas cosas mas que se entero después de que nos fuéramos. Me envió el segundo tomo que imprimió, según su carta de hace media hora se le acabo el primer tiraje en cuestion de una hora, ha pedido algunos favores, hizo otros 8 tirajes completos y se terminaron. Ha ganado lo del año en solo un día.- comento Luna viendo como Neville seguía intentando arreglar su varita.- Creo que quiere hacer una expedición este verano, para ver si podemos capturar un Snorkack de cuernos arrugados de Suecia-
Hermione tuvo que batallar con sigo misma durante unos segundos para no decirle que esa criatura no existía. No lo creyó prudente.
-Eso es muy bueno- dijo Hermione para continuar con la revista.
En doble pagina una imagen de un Harry sin sus lentes con la sangre, suciedad y apuntando a un montón de Mortifagos mientras que Voldemort se reía. Incluso en la imagen se podía ver a Dumbledore, Dobby, el cuerpo de Kreacher y ella protegidos por las barreras. De alguna forma la imagen a todo color lo hacia mucho mas llamativo, pero para Hermione los ojos esmeralda puro de Harry eran lo atractivo. Giro la pagina para poder leer.
"Hoy cerca de las 4 de la madrugada, una alarma sonó dentro del ministerio de magia e inmediatamente fue desechada por que se apago de inmediato. No se le presto mucha atención, pero cuando un grupo de magos se movió para ir directo al ministerio la duda y sospecha entro en nuestro nuevo reportero Andrew Cannor, antiguo corresponsal del Profeta. Inmediatamente se dirigió al Ministerio, donde no solo se dirigieron el grupo de magos, si no también Aurores y empleados directamente relacionados con el ministro de magia Fudge.
Al llegar la primera impresión fue que una guerra se desato en el recibidor, lo cual no estaba equivocado. Chimeneas destruidas, la fuente de la hermandad destrozada, el suelo, techo y paredes dañadas. Nada parecía intacto. Y lo mas impresionante de todo era la escena que trascurría delante de sus ojos.
Si magos y brujas de todo gran bretaña. El Innombrable esta de regreso y enfrentando al niño que vivió. (Fotografiá a doble portada en la primera y segunda pagina).
Lo siguiente fue una verdadera lucha entre dos magos poderosos y capases de destruir todo el ministerio. Harry Potter plantando le cara al Innombrable, un poderoso movimiento no solo destrozo lo que apenas y quedaba del ministerio, también destruyo un ascensor y muy posiblemente los pisos inferiores de las instalaciones. Después de unos minutos de tumulto, en lo que los Aurores atrapaban a los mortifagos y de que fuertes temblores sacudieran todo el lugar; enviaron a dos personas a ver que sucedía en la parte inferior del ministerio. Inmediatamente todo se calmo. Pero lamentablemente la mayoría de Mortifagos escaparon e eso incluye al Innombrable.
¿Que es lo que paso? ¿Por que esa batalla? ¿Quienes fueron el grupo que se dirigió a la ayuda del Ministerio?
Según nuestras fuentes de alta confiabilidad. Lo que paso fue que Voldemort entro en el área de profecías para hacerse de objetos poderosos y subyugar el poder del ministerio. Lamento decirle que por lo que se cree, su cometido a sido realizado con un éxito casi rotundo. Y por ende llegamos a la conclusión de que dicha batalla fue provocada al proteger los artículos de gran valor para el ministerio "
-Ni tan cierto, ni tan falso- dijo Ron medio sonriendo.
-Silencio Ron, continua Hermione- dijo Neville que al escuchar las palabras se acerco lo mas rápido posible.
"Lo único que no logramos descifrar es ese grupo que intervino e intento evitar que Voldemort consiguiera sus planes. O mejor dicho, no tenemos ni idea que grupo de estudiantes intervino y ayudo a nuestro Héroe para intentar salva guardar los recursos del Ministerio. La entrevistada dada por Fudge solo fue una tapadera para mantener su puesto como Ministro y evitar decir que su cuerpo de aurores dirigidos por Ruffus Scremengour no ha logrado ni capturar a 30 mortifagos. De los cuales el nombre mas destacado es Lucius Malfoy.
Malfoy ahora se encuentra en San Mungo, siendo atendido por una enfermedad muy extraña que pone su piel azul y que le causa un dolor terrible. Sus gritos y gemidos, no lo dejan hablar. Pero por la marca en su brazo izquierdo se señala como un Mortifago consumado.
Las noticias de hoy han sido las que nadie quería escuchar y se entiende por el miedo provocado en la anterior Guerra. Cerrar sus ojos no los ayudara, mejor escuchen a aquel muchacho que dio la cara por todos una vez mas, tengamos la esperanza de que una vez mas nuestro Héroe venga a ayudarnos"
-Héroe- dijo Hermione y dejándolo el quisquilloso aun lado sin leer los demás artículos.- A si que ahora Harry es un Héroe-
-Eso no le gustaría- dijo Ron sentándose en la orilla de la cama y acomodándose le jersey que traía.
-Seguro que estaría diciendo que el no lo es- dijo Sofí sentándose a un lado de Hermione- ¿Y que aremos sin el?-
-Asegurarnos que el camino le sea mas fácil a Harry cuando regrese. -dijo Neville por primera vez con conviccion - Cuando regrese le pateara tan fuerte la cara a Voldemort que puede que se le hinche la nariz y parezca que tiene una propia-
Por unos segundos todos se miraron como si Neville hubieran en enloquecido, luego se sonrieron y Daphne se soltó a carcajada limpia contagiando a los demás, no se calmaron hasta un poco después.
-Tienes razón Neville. Pero comencemos con lo básico ¿Que pasa en Hogwarts?-pregunto Hermione sonriendo un poco, aun no se sentía capas de sonreír bien.
-Todas las bromas que dejaron los gemelos ya han sido limpiados -dijo Luna acercándose también a la cama.- Ya han pasado todos los problemas ahora que volvió Dumbledore-
-Supongo que Filch esta decepcionado de guardar las cadenas- dijo Ron cruzándose de brazos.- Pobre, tanta ilusión que le hacia colgarnos de los talones. ¿A donde vas?-
-Tengo que darle la noticia a Dobby y Hagrid- dijo Hermione colocándose la chamarra encima de su camisa y los tenis con la pijama.- Ustedes saben, los dos son muy amigos de Harry-
-Si, sera duro- dijo Ron y pareciendo también muy decaído.-¿Quieres ayuda?-
-No, estaré bien- dijo Hermione aprisa.
-Saludalos de nuestra parte- dijo Daphne regalando le una sonrisa de apoyo.
Hermione asintió, esperando no tener que ver derrumbarse a Dobby y mucho menos a Hagrid. Dejo el dormitorio. La calma en castillo era debido a que todos estaban en los terrenos, disfrutando del sol y el final de los exámenes. Camino por el solitario corredor, mirando por las ventanas mientras veía el campo de quidditch y un grupo de estudiantes nadando en el lago, acompañados del calamar gigante.
Subió las escaleras de mármol directo a la escalera que la llevaría al patio y de ahí podría comunicarse con Dobby, sin embargo se encontró con tres personas indeseables, Malfoy, Crabbe y Goyle surgieron de la puerta derecha que daba directo a la sala común de Slytherin. Hermione no se detuvo, no quería ni cruzar miradas con ellos. Camino unos metros antes de tener que voltear.
-Potter esta muerto- medio grito Malfoy desde atrás y eso la enojo mucho.
Hermione levanto sus cejas y frunció los labios.
-Pensé que estarías mas preocupado por tu padre.-dijo Hermione intentando sacar de sus cabales a Malfoy.
-¿Mi padre?-pregunto Malfoy furioso.
-Esta en San Mungo, casi muerto- dijo Hermione volviéndose por el pasillo y continuando caminando.
-Mientes- grito Malfoy acercándose con pasos sonoros.
Hermione giro y apunto con su varita.
-Lee el quisquilloso- dijo Hermione antes de mover la varita.
Malfoy salio volando por el pasillo, siendo arrastrado por la roca y terminando al final del pasillo. Miro a Crabbe y Goyle amenazándolos.
-¿Quien quiere ser el siguiente?-
Negaron con la cabeza antes de tomar a Malfoy por lo hombros y comenzarlo a llevar hacia atrás.
-DÉJENME…DEJAME CRABBE... ME LAS VAS A PAGAR… ESCUCHAME SANGRE SUCIA, ME LAS PAGARAS- Grito Malfoy mientras era arrastrado por sus mastodontes.
Se alejaron con Malfoy aun gritando cosas hirientes, pero que a ella ya ni la molestaban. Inmediatamente giro y fue al patio. Pero nuevamente se topo con problemas, esta vez fue Snape que al verla con la varita en la mano le lanzo una mirada furiosa, como esas que le daba a Harry. Podría ser que fuera un profesor, para ella era un idiota que trataba mal a su novio sin razón alguna.
-¿Que estas haciendo, Granger?- dijo Snape, tan fríamente como siempre cuando estuvo cerca.
-Acabo de lanzar a Malfoy un par de metros en el aire, por decir que mataría a Harry y ademas me llamo sangre sucia- dijo Hermione sin dudas.
Snape lo miro fijamente.
-Guarde esa varita, ahora- dijo Snape Brusco- Diez puntos menos para Gryffind… a ahora recuerdo Gryffindor ya no tiene puntos- El torno de burla denoto mucho. - En ese caso, Granger, tendremos que... -
-Agregar algunos- dijo otra voz.
La profesora McGonagall caminaba con paso firme directo a ellos; estaba cargando un bolso de viaje de tartán en una mano y se inclinaba pesadamente en un bastón de viaje en la otra, pero por otro lado parecía bastante bien.
-¡Profesora McGonagall!- Dijo Snape caminando hacia delante.-¡La han dejado salir de San Mungo!-
-Acaso no me ve aquí, profesor Snape- dijo la profesora McGonagall con el mismo tono de burla-Estoy tan bien como nueva.-
Snape le dio una sonrisa cordial y asintio.
-Corrijamos entonces este des afortunado estado-dijo la profesora con media sonrisa- Que le parece que sean 50 puntos por cada uno de los que fueron al ministerio, ya que nos alertaron de que el que quien usted sabe esta de regreso. Y 100 puntos mas para Harry Potter por tan magnifica pelea que dio. Eso nos deja con 300 puntos para Gryffindor, 50 para Ravenclaw, 50 para Hufflepuff y 50 para Slytherin. Considerando que el señor Malfoy ha insultado a dos de ellos creo que le bajare 200 puntos a Slytherin y contando todos los abusos de poder vistos por los de su casa yo considero que sus puntos se reduzcan a la mitad.-
-¿Que?-Medio Grito Snape sobresaltado y abriendo la boca. Hermione se preguntaba lo mismo, tal cantidad de puntos dados de golpe y al mismo tiempo quitando le tantos puntos a una sola casa.
-Me ha escuchado. Ahora señorita Granger, podría ayudarme para ir a la Oficina del Director-dijo McGonagall estirando su brazo, Hermione lo tomo y comenzaron a regresar al castillo.
Caminaron un buen tramo, dejando a Snape paralizado en su lugar. McGonagall llego a la mitad del camino y se paro.
-¿Y Harry?-pregunto sin mirarla.-Me dijeron lo que paso, no mencionaron que Harry...-
-No se como explicarlo-dijo Hermione parándose enfrente de la profesora.
Su mirada triste, el cansancio en su cara y los ojos cristalinos, le indicaron cuanto quería a Harry.
-No es ta muerto, eso se lo aseguro- dijo Hermione con la misma convicción que las demás veces.- Se lo aseguro el...-
-Confió en tu palabra. Si usted puede aceptar que Harry esta vivo yo también puedo-dijo McGonagall quitándose algunas lagrimas.-Creo que tengo que ir a explicarle a Dumbledore que los puntos cambiaran tan rápido y Hermione te dejo libre para que hagas lo que tengas que hacer-
-Profesora ¿Como es que salio tan rápido de San Mungo? Harry dijo que estaría ahí por lo menos unas semanas-
-Pues resulta señorita, que su novio es muy poderoso solo necesite descansar y estaba como nueva-dijo McGonagall sonriendo un poco- Anda ve a descansar-
Hermione asintió para después recorrer el camino nuevamente de regreso a los campos, paso por el caliente sol que le golpeaba mientras caminaba a través del césped hacia la cabaña de Hagrid. Los estudiantes yacían alrededor sobre el pasto tomando sol, hablando, leyendo el Profeta del Domingo, y comiendo golosinas, mirándola mientras pasaban. Hermione no le hizo caso a ninguno.
Cuando el golpeo la puerta de la cabaña de Hagrid pensó que él podía estar fuera, pero al ver que la puerta abría, recordó que tal vez seguiría con los Gigantes. Entro en la cabaña, sola y abandonada. Tomo un tiempo para darse valor. El estar sola la confortaba un poco, sin tener que hablar, sin tener que repetir que Harry estaba vivo, sin tener que ver las expresiones de todos los alumnos. ¿Como es que Harry soportaba todo eso?
Dejo que su mascara de tranquilidad y confianza cayera, demostrando una verdadera tristeza profunda y temor en sus ojos. Paso como una media hora intentando despejar su mente y ponerla en blanco un rato. Quería evitar pensar, por que al pensar eso la llevaba una y otra vez a Harry, en ese momento recordarlo le hacia sentir mucho dolor.
-Dobby- dijo Hermione en un susurro para apurar lo que venia.
El pequeño elfo apareció tan pronto como termino su nombre, con sus grandes ojos rojos, sorbiendo su nariz su traje lucia sucio, su cara muy cansada y parecía a punto de desmayarse. Sus grandes ojos derramaban lagrimas gruesas. Hermione salto y abrazo a Dobby, dejándose llevar por el sentimiento.
-No llores, Harry esta bien te lo aseguro. -
-Dobby es el culpable, Dobby no debió decirle al señor Sirius que el amo corría directo al ministerio-dijo el elfo mientras abrazaba a Hermione- Por culpa de Dobby Kreacher esta muerto-
-No Dobby, tu no tienes nada de culpa- repitió Hermione aun sin soltarlo.-Escuchame bien. Kreacher hizo lo que creyó mejor, no fue culpa de nadie y Harry esta vivo-
-Dobby lo ha buscado, Dobby ha estado...-
-No es culpa tuya-repitio Hermione ya severa- Escuchame Dobby, recuerdas las reglas de Harry ¿verdad?-
Dobby asintió.
-Nada de infligirte castigos, eso incluye mentales también. Deja de culparte y mejor ayudame, para que cuando Harry regrese el pueda derrotar fácilmente a Voldemort- dijo Hermione cargando al elfo y sentándolo en el sofá. Dobby asintió ferviente y sus ojos se mostraron mas claros.- Entonces ¿Me prestaras toda tu ayuda?-
-Dobby ayudara a la dulce ama- dijo Dobby saltando y listo para comenzar.-¿Cuales son sus ordenes?-
Tenia mucho que pensar, técnicamente todo cambio y eso le obligaba a cambiar todo el plan de acción que tenia Harry pensado. Y no es que fuera un súper plan o que supiera concretamente lo que estaba asciendo Harry, a su parecer, su novio simplemente tomaba caminos largos y planes a corto tiempo. En teoría su plan era así: Conseguir a los duendes, hacer varitas, conseguir a los gigantes, conseguir a los centauros, terminar las pruebas excalibur… y a ver que pasa. Hermione se sobaba el cuello pensando en todo e incluso pensando en las posibles repercusiones. Al finalizar vio a Dobby que seguía esperándolo.
Lo principal era tener una base de operaciones. Grimmauld Place es la base de la Orden del Fénix, sin embargo Pendragon siempre había trabajado, estudiado y reuniéndose en la sala de Menesteres siendo el parte de Hogwarts. Técnicamente los Pendragon solo estaban ahí por ser estudiantes, necesitaban un lugar propio, un lugar donde todos los Dragones pudieran ir.
-De las propiedades de Harry ¿Cuales son las propiedades mas cercanas o en Londres?-pregunto Hermione al elfo.
- Dobby cree que la mas cercana es una casa a las fueras de la cuidad, entre Dobby y los demás elfos normalmente se le llama la casa Peverell- dijo Dobby inclinándose un poco y rebuscando entre su ropa, como si de un momento a otro se acordara que algo le picaba dentro de los bolsillos.
-Pon al corriente todo en la casa; Medidas de protección, comida para semanas o meses, también todos los cuartos y asegurate de pueda albergar a todos los Pendragon sin problemas. Dobby… ¿Dobby?….¿Estas prestándome atención Dobby?- pregunto Hermione al ver que el elfo seguía buscando dentro de su pequeña chamarra, aunque ya se la había quitado y estaba girándole de un lado para otro.
-Si dulce ama. Dobby pondrá todo en orden como ha indicado.- dijo Dobby sustrayendo un par de cosas al fin. Solo distinguió un par de pergaminos así como el emblema de Gringgots y otra sin sellar, ni cerrar.
-¿Que es eso?-pregunto Hermione con curiosidad, por algo era tan importante en esos momentos para Dobby.
El elfo las vio unos segundo y acaricio una de las cartas. Luego las monstruo a Hermione, invitándola a tomarlas.
-El amo se las dio a Dobby, Dobby siguió las indicaciones del amo, entregárselo a la dulce ama cuando el amo no regresara-dijo Dobby sonriendo un poco mientras le temblaba la mano- Dobby la ha guardado desde entonces, siempre a mi lado. La otra la trajo el ave del amo, pero al no encontrar al amo ni usted dulce ama, me la entrego a mi-
Hermione se paralizo, una carta de Harry ¿Cuando y como le dio tiempo de escribirla? No podría ser que supiera lo que pasaría ¿O si? Extendió la mano, mucho mas temblorosa que la de Dobby y mas pálida, en cuanto sus yemas tocaron la carta sintió un cosquilleo, y una sensación cálida que venia dentro de ese sobre sin sellar. Se mordió el labio al recordar que era de Harry ¿Cual seria su contenido? ¿Por que le dejo una carta para esa situación?, por un minuto quiso no abrirla. Podría contener la despedida de Harry o algo parecido y ella no viviría con esas palabras en su corazón. Dobby rompió el silencio.
-Dobby se retira dulce ama, si necesita a Dobby solo llame me y aquí estaré. Tendré todo preparado cuando lo necesite-dijo el elfo y un "puf" después desapareció.
Se quedo en silencio. Sola en la cabaña de Hagrid, con un par de cartas y una sensación de impotencia. Luego de un minuto reacciono, sentándose donde antes estuvo Dobby y abriendo lentamente el sobre, con las manos temblorosas y el corazón acelerado. La carta temblaba al ser sostenida entre sus manos, pero en cuanto la desdoblo se calmaron. La letra irregular de Harry, sus marcas profundas y la primera linea la calmo.
"Mi amor :"
Hermione dejo salir un suspiro antes de continuar leyendo.
"¿Te preguntaras por que te escribo? En este momento quisiera tenerte enfrente por que no se si volveré a verte, escucharte, tocarte o besarte. La cruel realidad es que en menos de veinticuatro horas estaré enfrentando a uno de los mayores retos de mi vida, la primera prueba, enfrentarme a un dragón."
Entonces Hermione comprendió que Harry la escribió antes del torneo, se llevo una mano a la boca y sus ojos se llenaron de lagrimas. Recordó que su novio no se enfrento a un dragón, bueno si, pero en su lugar fueron cuatro. Continuo antes de que sus ojos se llenaran de lagrimas.
"Si lees esto, estoy muerto, en peligro de muerte o simplemente me vaporice en fuego de dragón. No quiero que nuestras ultimas palabras sean las pronunciadas de la enfermería.
La verdad, no tengo ni idea de que escribirte. Supongo que estarás muy enojada conmigo por un lado, por el otro estarás cuestionándote lo que paso el día en que fue la selección de los campeones. Lo primero, quiero decirte que el terminar contigo fue lo mas doloroso de mi vida y créeme he pasado por cosas muy dolorosas, solo diré que el veneno de basilisco recorriendo tu cuerpo es como fuego dentro de las venas y que sentir tu piel arder no es un juego. Pero en ese momento sentí que mi corazón era arrancado de mi cuerpo y mi alma era sustraída por los dementores.
Te amo con todo mi coraron y mi alma siempre sera tuya.
Eso lo resume todo. Te amare todos los días de mi vida y mas aya de la muerte. ¿Por que termine contigo? No estoy del todo seguro al día de hoy. Creo que fue el saber que Voldemort estaba detrás de mi y no podía evitarlo, el que todos me odiaran, el entender que mi vida seria un infierno sin importar quien o que estuviera a mi lado y sobre todo el quererte mantener a salvo. No solo de Voldemort, también de todo lo que significa ser yo, de los peligros que correrías a mi lado.
He pensado por días hasta desmayarme, he intentado entender por que esta pasando todo esto y solo encuentro una respuesta. Es por que soy un idiota. Tenerte y luego hacer esa estupidez de terminar es lo peor que pude hacer en el mundo, es peor que me expulsaran de Hogwarts o que me mataran. Sin ti es como estar muerto en vida. Nada tiene sentido y no me importa nada.
Como hace un par de horas, luego de verte con Viktor Krum hice una estupidez, por poco muero y… Creo que lo importante es decir que tu eres mi conciencia, la única que da luz a mi lúgubre mundo y lo que evitan que me maten.
Lo he dicho y lo volveré a decir : Soy un idiota por dejarte.
Perdoname.
Si salgo vivo de esta, juro que hablare todo esto contigo, que intentare solucionar todo. Si no salgo vivo, por lo menos quiero dejarte en la mejor posición de todas. Por eso he escrito esto. El futuro del mundo mágico queda en tus manos, confió en que Ron, Neville, Luna y los gemelos te ayuden a lograrlo. Si yo estoy muerto, Voldemort estará confiado en que ya no ahí peligro y regresara. Solo sigue los pasos de Priscob y lo lograras.
Te amo Mione y lo siento.
Tu idiota favorito, Harry"
Hermione termino de leer con una media sonrisa y los ojos cristalinos. Su novio podría ser tan emotivo al mismo tiempo que gracioso y no pudo evitar reírse. Aun recordaba como el peleo feroz contra los dragones, como en el cielo volaba trazando un vuelo perfecto e incluso como al terminar el simplemente seguía intentando ponerse de pie. Se limpio los ojos con la manga de su blusa y releyó la carta. Era como si los sucesos de hacia mas de un año recién pasaran, cada palabra parecía coincidir con lo que afrontaba Hermione en este momento. Harry no estaba, pero aun si se las ingenio para repetirle que la amaba, explicarle el porque lo hacia y de paso aliviar su alma un poco. La releyó una vez mas, antes de darse cuenta que otro sobre venia anexo.
Se dispuso a guardar la carta en su guardapelo con forma de corazón, el cual quito de su cadena junto a los anillos y maestros de Harry. Al Abrirlo pudo ver adentro las palabras que Harry grabo "Para mi mejor amiga, mi novia y mi vida". Sus lagrimas volvieron a asomarse esta vez de alegría. ¿Cuantas veces en el día podía recordar le cuanto la amaba? Y eso que no estaba presente. En el otro lado vio la foto. Una que tomo Collin, la primera foto que Harry se dejo tomar voluntariamente. Ellos dos, Harry sentado debajo de donde bailaron en navidad del cuarto curso, y ella entre sus piernas, con las manos entrelazadas y sonrientes, al principio ambos sonreía como si no pudieran ser mas felices, luego ella giraba la cabeza para ver a Harry bien, el aprovecho el momento para besarla fugazmente y ambos se reían después.
Lo recordaba tan bien, sobretodo por que Collin saltaba mas que nunca al ver que Harry se la pedía, luego la risa por ver como Collin inmediatamente corría a revelarla. Ese día en conciso parecía tan lejos que se sintió cansada y algo nostálgica. Guardo la carta miniaturizada en el guardapelo y lo regreso a su fino collar. Rasgo el sobre con el sello de Gringgots y vio dos pergaminos, tomo el primero y leyó.
"Yo Harry James Potter hijo de James Potter y Lilian Potter de soltera Evans, en perfecta salud mental y física, dejo todas mis pertenencias al amor de mi vida Hermione Granger. Lo que poseo y mas voloro, desde el dinero en la bóveda de Gringgots hasta la mas misera prenda de ropa que tenga, es para mi mejor amiga.
A Ronald Billius Weasley, Frederick Weasley, George Weasley, Neville Longbottom y Luna Lovegood les dejo mi isla por partes iguales y todo lo que encuentre en ella.
Nadie mas puede reclamar mis pertenencias. A menos que Hermione quiera repartirlas y se que si escoge la ultima opción ella sabrá como hacerlo correctamente. Dejo el control de mis empleados duendes a Dobby, el sabrá si conseguir un nuevo empleador o quedarse a lado de Hermione y mis amigos.
Estos son mis últimos deseos, Espero se respete y se cumplan al pie de la letra"
Nuevamente Harry la sorprendía. ¿Testamento? ¿Cuando lo hizo? Entonces vio el sello en el fondo de la hoja. El símbolo de Gringgots, la firma mágica de un duende y la fecha. Era entre clases, tal vez Harry la pidió a Apahtio y esta era la contestación. Aparto el testamento al ver el otro pergamino, uno mucho mas formal y lleno de datos. El titulo decía.
"Documento de adopción"
Leyó la información, no se creía todo los tecnicismos y montones de datos que contenía. AL ver el nombre de quien adoptaba y a quien, Hermione se quedo asombrada. Reviso que todo fuera legar y exactamente todo lo era. Pues en la parte de abajo ponían el sello de Gringgots y del ministerio. Así como también indicaba que todos los papeles muggles estaban en el banco. Reviso nuevamente creyendo que le engañaban sus ojos. Al ver que tenia una pequeña nota pegada en la parte de atrás leyó.
"Estimado Harry:
Aquí mi respuesta a su petición. Ya he completado en el lado muggle y mágico (aunque costo un poco de ambos lados. Con la ayuda de Támara lo he logrado). Espero sepa que esta haciendo, esto es una responsabilidad mayor. Para cualquier asunto puede contactarme.
Su servidor Apathio"
Inmediatamente guardo los papeles y salio de la cabaña; afuera ante la luz del sol otra vez se cubrió un poco los ojos, camino con toda prisa atravesó los terrenos. Los alumnos seguían viéndola, era mas importante lo que pasaba. Se detuvo en seco al escucharlos en su mente.
{Espera Hermione}dijo la voz de Revé con un dejo de dolor.{Mejor espera, los sentimientos de todos están alterados. Esto solo creara mas complicaciones. Disfruta de este momento de descanso}
Hermione llevo su mano a dentro de la túnica sacando los anillos excalibur dentro lucían algo opacos, pero al quererse comunicar con ellos, estos solo dieron una frase.
{Aun estamos recuperando poder}
Pensó un rato y entendió que dar tales noticias a todos en esos momentos, era como echar mas fuego a la pólvora, su animo era algo decaído y si se entraban se volvería caótico. Tenia que pensar y asimilar lo que recién pasaron antes de saber mas. Al ser honesta con sigo misma ella tenia que terminar de pensar en lo que pasaba, en como continuaría y que problemas tendrían en el futuro. Era incierto todo desde ese punto, pero poco a poco Hermione y todos los demás lograrían hacer lo que Harry se proponía.
Camino un corto camino alrededor del lago, se sentó en la orilla, protegida de las miradas de los que pasaban detrás del enredo de unos arbustos, clavo sus ojos en el agua brillante, pensando… una y otra vez lo mismo. Todavía sentada en la orilla del lago, con el terrible pesar que arrastraba, las palabras de Harry le daban una idea, una idea que le dolería aplicarla, significaba negar lo dicho.
Estaba soleado, y los campos alrededor estaban llenos de personas riendo, y aun cuando ella se sentía distante de ellos como si perteneciera a otra raza, era difícil de creer como su vida debía dar un giro de 180°. Se quedo por un largo tiempo, mirando fijamente el agua, tratando de no pensar en Harry o recordar que el estaba enfrente de peligros inimaginables y cosas desconocidas. Era como si lo viera en el agua, sus ojos verdes, su pelo negro alborotado, esa herida en su frente y su sonrisa algo conciliadora… no, no eran imaginaciones lo veía, solo que en cuanto se dio cuenta se difumino mostrando le su reflejo. Se quedo observando el lago mucho tiempo, y el sol se empezaba ocultar antes de que se diera cuenta que tenia frío.
Se levanto y dio un ultimo vistazo al lago pensando que a lo mejor fueron imaginaciones suyas, luego volvió al castillo, secándose las lagrimas que derramo mientras caminaba.
