HOLA. Muy buenas, estamos de regreso con el siguiente capitulo de esta historia. Algo diferente y que espero que me quedara bien, desde hace mucho quería hacer esto, solo que no encontré el momento adecuado y ahora me pareció perfecto, aunque debo de admitir que tal pude hacerlo mejor. Y como los dos anteriores fueron de Hermione, ya era hora que pusiera uno de Harry, solo espero les guste por que no tuve mucho animo para escribir, cosas de mi vida diaria.

Para quien se lo pregunte, si, el siguiente sera de Hermione y veremos algunos sucesos de la linea de tiempo original. Y espero que entintan que aun estoy haciendo la introducción a la tercera parte ya que… pues seria como el tercer libro… por asi decirlo.

No mas escritura( iba a decir palabrería pero no estoy hablando) y los dejo continuar.

Lean, Disfruten y dejen su Reviews.


Guest : Puedes tenerlo, solo necesitas cerrar tus ojitos y esperar a que el venga. Si no lo tienes, pues imaginate lo que es lo mismo.


EL derecho de los personajes son de J. K. Rowling


Capitulo 61.- Los recuerdos olvidados.

¿Por que demonios todo lo que le hacia fuerte le dolía? ¿Por que los malos siempre tenían las cosas mas fáciles? Era su forma de pensar mientras que dibujaba un circulo mágico con su propia sangre. Y no es que fuera muy complicado, pero si demasiado extenso.

En si circulo era poco para describirlo, era una serie de 9 círculos que contenían diferentes imágenes, una con tres puntos girando entre si, un sol, algo parecido a un ojo, un pentágono, un remolino, uno pequeño con un punto y picos, otro con dos remolinos creando un circulo y medas. Enfilados en un triangulo isósceles, y con lineas girando entre todos ellos, el ultimo conectando con el penúltimo, el penúltimo con el segundo, el segundo con el de en medio, el de en medio con el ultimo, el ultimo con el segundo, etc.

Viéndolo desde las alturas parecía mas un circulo conectado a un triangulo, y a una fila de diferentes tamaños de círculos, todos ellos conectados por un remolino de lineas que no llevaba de uno a otro sin excepción. Las únicas runas estaban en la lineas que las conectaban. Fe, felicidad, valentía, optimismo, tranquilidad, gratitud, respeto, comprensión, amistad, admiración, fuerza, gratificación y altruismo eran las runas que mas se repetían. Sin en cambio en el centro justo en el centro de todo la runa que predominaba era una runa que conocía, pero que aun no podía darle significado. Era la misma runa que vio cuando su madre le beso la frente, aquella que brillo y se introdujo dentro de su frente, no era tan extraño que la encontrara de nuevo pero al verla se sintió nostálgico. Quería preguntar que significaba a Nimue y Merlín, solo que estaban tan ocupados discutiendo que no le prestaron atención.

La verdad empezaba a sentirse cansado, no por esos dos, mas bien por la perdida de sangre. Dibujar ese enorme circulo era muy complicado sin magia. Lo único que que lo salvaba de desmayarse era la poción de sangre que tomaba cada que se sentía débil y se sentía mejor, con el paso de su perdida continua se mareaba mas rápido.

Cuando termino se sentó esperando mas indicaciones de esos dos. Claro que sus discusiones sobre "el método era mas rápido" se veía para largo. Se tomo el resto de la poción recuperadora de sangre y se recostó junto a una palmera. A lo lejos se escuchaba el batir del oleaje contra la playa, el aire moviendo el follaje y sobre todo los gritos de esos dos le dieron sueño.

No podía evitar pensar en que aquellos mismos fueran magos de antaño, seguía pensando que aun parecían una vieja pareja de cazados. ¿Como fue a meterse ahí? Pues comenzó con esa frase que aun le retumbaba en la mente.

-En hacer que Renazcas- dijo Nimue con una sonrisa enorme.

Harry alzo una ceja, ¿A que se refería con Renacer? Se pregunto mientras Merlín aun parecía enojado por decir que su trasero era vanagloriado.

-No es lo que tu crees mocoso- dijo Merlín sobando se el cuello- Hay muchas formas de renacer, no es exactamente el volver a salir del útero de tu madre. Podríamos decir que tuviste un renacimiento mental si tu forma de pensar cambia, que tus acciones pasen de buenas a malas también puede ser un renacimiento e incluso que tu alma cambie de forma. Creo la mayoría de ellas ya las has experimentado de alguna forma. Pero en el tipo que pensamos en mas en un renacimiento Mágico-

-Entiendo- dijo Harry asintiendo.

-No entendiste nada ¿Verdad?- dijo Nimue soltando mucho aire.

-Nada de nada-dijo Harry algo avergonzado- Es que no logro comprender como mi magia renacerá-

-Síguenos- dijo Nimue caminando por la gruesa rama, seguido de Merlín que le lanzo una mirada rápida.

-No te quedes atrás-

-Ya voy- dijo Harry casi corriendo detrás de ellos.

Antes de que el pudiera reaccionar Merlín y Nimue saltaron de la rama directo al suelo, seria cosa fácil si estuviera en un árbol común, un par de metros, sin en cambio ese árbol era enorme y sin varita la única forma de caer a salvo era la magia de Utgar.

-¿Que esperas?-preguntaron ambos alzando la vista.

-Claro, dejen al mortal atrás, como si yo fuera un ser echo de pura magia- refunfuño Harry activando la magia de Utgar saltando.

Segundos después cayó al suelo, sus piernas apenas se doblaron, pero no tuvo tiempo de felicitarse por hacer lo mismo que esos dos. Ellos ya se alejaban. ¿Como podían alejarse de el? Se suponía que el tenia en su cuerpo ambos contenedores, tanto de Nimue como de Merlín. ¡¿Magia?! Supuso.

-Deprisa Slowol- dijo Nimue riéndose.

Harry corría a toda prisa detrás de ellos, movía sus piernas tan rápido como podía además de ser impulsado por magia, pero para esos dos apenas daban ligeros saltos y avanzaban una barbaridad, antes de que se diera cuenta ya estaban en la orilla de la isla de Gulliver, y sin mirarlo saltaron a la isla de los polidrupedos. No pudo dejar de pensar que Merlín y Nimue solo querían hacerlo pasar un mal rato, pero salto. El aire corría por sus oídos acariciaba su rostro y lo único que podía pensar era en que estaba una buena escoba para volar. Saltar de isla en isla era divertido, se podría decir que hasta fácil cuando le tomabas el truco. Pero volar era una sensación diferente, el caer te hacia sentir que eras controlado y al volar tu tenias el control.

Al llegar al suelo, Nimue freno en pleno aire y levito hasta caer con gracia en el suelo, Merlín por otra parte se estrello de lleno contra un árbol, solo que pareció que atravesaba aire ni un sola marca en un lugar. Harry por otra parte creo un pequeño cráter, sus piernas temblaron y la tierra le lleno la cara. Escupió polvo durante unos segundos, esperando ver las burlas de Merlín y Nimue riéndose. Pero ellos ya se alejaban de nuevo, después de sacudirse y alcanzaros con mucha dificultad dijo.

-¿A donde vamos?-

-A donde la magia no este tan concentrada- respodio Nimue.

-Solo síguenos- ordeno Merlín.

-Claro dejen al corpóreo seguir corriendo como loco-dijo Harry medio enojado.

-Estamos cerca, solo tenemos que bajar- dijo Nimue girándose y aun avanzando con un leve salto hacia atrás, claro que traspaso a uno de esos animales grises y que parecían hipopótamo, el tuvo que saltar y evitar un furioso embiste.

-¿Pueden explicarme por que corren, si solo pueden esperar a que yo llegue?-pregunto Harry muy curioso.

-Primera, mantenernos activos. Segundo, me gusta ver el paisaje y por ultimo, creo que es relajante volver a hacer lo.- dijo Nimue otra vez cayendo por la orilla.

-Si- corroboro Merlín con una sonrisa genuina. Le recordaba a alguien.

-¿Ustedes paseaban así cuando eran pareja?-pregunto Harry haciendo que ambos se sonrojaran.

-Como si tu no pasearas con esa tal Hermine -dijo Merlín.

-Hermione- gruño Harry haciendo que Merlín lo viera- Su nombre es HERMIONE-

Sonrío antes de caer, por alguna razón esta vez ambos frenaron en antes de caer mientras Harry logro caer inclinando mas las rodillas y bajando el torso hasta tener su centro de gravedad mas cerca del suelo. Nimue y Merlín lo miraron, ella con precaución, el con una mueca de desagrado. Durante un segundo lo vieron.

-Tienes que olvidarla- dijo Merlín sin un solo sentimiento en su voz.

Las palabras le cayeron como un balde de agua fría, solo que en vez que la sangre se le enfriara su rostro se calentó y los dientes le chirriaron. Miro a Nimue, esperaba que ella lo apoyara, solo que al contrario asentía.

-¿Ustedes…?-

-Escucha, el entrenamiento sera muy duro, cada minuto desde que comencemos el entrenamiento sera un infierno. No puedes permitirte distracciones- dijo Nimue como si fuera algo simple.

-Ella puede ser un buen impulso para soportar todo, pero a la hora de intentar concentrarte solo sera un estorb...-

-Termina esa frase Merlín, y en cuanto obtenga tu poder te pateare tan fuerte que me dolerá el pie por toda la eternidad-dijo Harry mirando esos ojos rojos y que no demostraban ninguna emoción.

-No, tu entiende. El amor es una sentimiento que da poder, pero en cuanto al entrenamiento es un estor… un obstáculo- dijo Merlín serio, mientras Nimue giraba la cabeza de un lugar para otro como si no supiera de que lado ponerse.

Harry lo miro e intento comprender su punto, solo que la sangre le hervía de solo pensar que incluso un antiguo y poderoso poder, como Merlín y Nimue, le pedía que se olvidara de ella. ¿Acaso todo el mundo estaba en contra de su relación?

-No lo haré- dijo Harry por toda contestación.

Merlín lo vio con el ceño fruncido. De un segundo a otro pareció a tan solo a centímetros de el. Su mirada era retadora, como si hubiera corregido a un viejo profesor. Tenia experiencia en eso, sobre todo con el amargado de Snape, un poco con Binns y sobre todo en su antigua escuela a Hogwarts, valla si ahí los maestros no les gustaba que supiera mas. Sin embargo como siempre le sostuvo la mirada. Sin en cambio Merlín se retiro, soltó un leve suspiro que se sintió como una ráfaga de aire frío a su alrededor.

-Como tu quiera mocoso, solo no te quejes cuando falles- dijo Merlín dándose la vuelta.

-¿De verdad eres Merlín?-pregunto Nimue sorprendida- El que conozco le hubiera enterrado hasta el cuello y dejando una cuerda ardiente a su alrededor que estarían sujetas a una estaca de hielo directo a su frente.-

-Que bonita forma era esa de convencer a los demás, pero creo que ya es vieja-dijo Merlín subiendo una mano para rascarse la nuca- Lo dejare pasar por ahora, después de todo estoy de buen humor-

-¿Eso es bueno?-pregunto Harry dejando pasar su enojo, después de todo si Merlín podía ¿Por que el no?

-Algo, eso quiere decir que durmió bien. Además de que le agradas, aunque sea un poco- dijo Nimue con una leve sonrisa.

-¿Por que entre todos los personajes de la historia mágica caí con ellos dos?-Pregunto Harry sobando se el punte de la nariz.

-No ahí dos mejores que nosotros mocoso- gruño Merlín buscando entre las plantas.- Si querías aprender los secretos de la mas antigua magia que jamas salieron a la luz, estas con los mas sabios-

-Como siempre, tan modesto- dijo Nimue con la voz tan sarcástica, apoyándose e un árbol y también revisando el lugar.

-¿Que haces?-pregunto Harry al verlo rebuscar entre la maleza.

-Consiguiendo esto- dijo Merlín alzando la mano para que se acercara.

Harry lo hizo, miro que en el suelo, se alzaba una sección de pequeñas flores color amarilla, tal vez manzanillas.

-Es para Nimue- dijo Harry intentando codear lo, solo que le asustaba pensar que le haría.

-NI SE TE OCURRA-grito Nimue roja, pero girando el rostro.

-No es eso- dijo Merlín rodando los ojos- Es para que necesito para la demostración, servirá bien, ¿Quieres explicar Nim?-

-Me dices Nim una vez mas y te juro que haré que no hables el resto de tu existencia-dijo Nimue haciendo que ambos temblaran, tal vez por el tono de su voz, la mirada fiera o esa aura asesina alrededor de ella.-Pero esta bien yo le explico-

-Ahora recuerdo por que no quise cazarme- susurro Merlín tragando duro.

Nimue se acerco y miro a Harry, por la expresión le recordó a McGonagall justo antes de dar una clase muy larga y muy pesada.

-¿Ya conoces lo contenedores mágicos y como funcionan?-pregunto.

-Creo que si- respondió Harry tomando haciendo eso iba para un buen rato.

-Sabrás que todos los seres tienen un contenedor para magia, solo que algunos no lo pueden utilizar. Eso quiere decir que es inservible en esos seres- dijo Nimue arrodillándose a lado de la pequeña flor-¿Entonces para que lo tienen? La respuesta es...-

- Todos ser vivo tiene algo de magia, por muy minúscula que sea y eso permite que sean quienes son… como decirlo… una especie de energía que diferencia a cada uno de los seres vivo -dijo Harry asintiendo.

-Correcto. Solo que esta energía es finita, pero refrenable- dijo Nimue alzando su dedo- El limite de cada uno esta diseñado para alcanzar un máximo potencial desde su nacimiento, solo que muy pocos lo llegan a notar y solo unos cuantos lo aprovechan del todo. Pero la pregunta es ¿Que pasa si rompes ese limitador?-

-Te mueres- respondió Merlín para recostarse con las manos como almohadas y mirando el cielo.- ¡Mira esa tiene forma de un cordero asado!-

-CÁLLATE- Dijo Nimue pateando la tierra, creando un hueco, a cada minuto que pasaba Harry creía que ella era la tatara tatara, y los demás tatara, abuela de Hermione.- Aunque esta en lo correcto, si rompes tu limitador, mueres.-

-Y supongo que ha eso se refieren con que renazca- dijo Harry también mirando el cielo, comprendió el porque Merlín lo miraba las nubes flotando, la tranquilidad le hacia sentirse bien.

-Si, una vez que tu contenedor se rompa, la magia se filtrara por tu cuerpo, y ahí es donde comienza la trasmutación, la magia se combinara con tu cuerpo y eso puede hacer que desaparezcas de este mundo. -continuo explicando Nimue- Comenzaras a morir si tu cuerpo no lo soporta, tu voluntad flaquea y no puedes controlarla. -

-Entiendo-

-Otra de las cosas que hace el contenedor mágico es que la magia natural que esta a tu alrededor no entre a tu cuerpo y haga que se rompa. Es un sello semi hermético. Ese es el real problema, la magia aquí es tan fuerte que sera como si te ahogaras al instante. Imagínate una burbuja de aire en el fondo del mar, si se explota el agua entrara de golpe y la burbuja dejara de existir-

-¿En el mar?-pregunto Merlín viéndola- Es mas como en una laguna, el mar seria si fuera cerca de mi báculo...-

-Para el tema es lo mismo- dijo Nimue con una mirada exasperada- Ese es el real problema, tu concentración debe estar divida en dos. La primera parte en contener tu magia, mientras el otro debe evitar que entre mas magia y te inunde por completo-

-Nadie puede dividir su concentración en dos, es mas todos solo pueden concentrarse en una cosa- dijo Harry mirándola sorprendido.

-Y por eso se dice que es imposible acabar este ritual- dijo Merlín – Puedes concentrarte un rato en una y luego en la otra, pero si no equilibras el tiempo simplemente tu camino llegara a su fin. Como lo que te trajo aquí, no importo que tanto corrieras al final tu energía se agoto y caíste-

Harry lo pensó por unos momentos.

-¿Y que tiene que ver con esa flor?-pregunto Harry.

-Antes de continuar, necesitas ver los efectos- dijo Merlín señalando la planta- Observa con cuidado-

Acerco su dedo y del tallo salio un poco de sabia, apenas una gota que fue suficiente para ver que Merlín la manipulaba por medio de magia. La sabia realizo un circulo mágico alrededor de ella, Harry lo miro un segundo pero por las runas y la forma algo extraña, supo que contenía mas que una simple magia. Merlín sonrío, el circulo hecho de sabia se introdujo dentro de la flor, al siguiente segundo la flor comenzaba a marchitarse tan rápido que lucia como si lo viera a macara rápida, al siguiente segundo era nada mas que un montón de plantas secas.

-Eso es lo que le pasa a quien se le elimina su contener mágico- dijo Merlín mirando la planta- Es muy rápido el efecto por el nivel de magia concentrada en esta isla-

-Pero eso no es todo lo que puede pasar-dijo Nimue señalando otra, haciendo el mismo circulo mágico.

La flor comenzó a marchitarse de igual rapidez que la otra, casi al punto de estar seca, y antes de que muriera Nimue creo una especie de barrera a su alrededor. Harry podía no percibir del todo la magia en la isla, pero le llamo la atención que alrededor de esa especie de barrera no existiera nada de magia, o no alrededor de la flor, en su interior la magia giraba y se arremolinaba en el pequeño cuerpo. Al siguiente parpadeo la flor crecía, y crecía como un árbol, arrojando pequeñas flores de un color dorado puro. Finalizo con un esplendido albor dorado.

-Así es- dijo Merlín al ver la boca abierta de Harry- Si la magia te inunda, morirás mágicamente, renacerás como un ser mas poderoso-

-Mi cuerpo ¿Cambiara?-pregunto Harry viendo como los pétalos de aquel árbol parecían de oro puro.

-Bueno… eso pasa con seres que su contenedor no tiene mucha magia. En nosotros es diferente- dijo Nimue rascando su mejilla- Al contrario, nuestro cuerpo dejo de crecer mientras hacemos el ritual y un poco después de terminarlo, tal vez eso sea bueno, ya que pasaras un año con el encima.-

-y ¿Por que confiare en su palabra?-pregunto Harry girando para mirar a ambos.- Me dejaron 4 meses solo. No preguntare que personas hacen eso… creo que he visto que no son personas normales.-

-Mocoso, nosotros ya hemos pasado por tu lugar, y sabemos que tienes...-

-Miedo… si lo tengo- dijo Harry acercándose al árbol recién crecido- Pero ahí algo que mas me da miedo, el no volverla a ver, el fallarle y no poder hacer una familia junto a ella. No me importa si es todo un reto, si es imposible, si las cosas pueden matarme o si no tengo magia por todo ese tiempo. Solo quiero saber ¿De verdad pueden ustedes ayudarme a llegar a casa?-

-Responderé, solo si tu respondes a esto ¿Terminaras el ritual que ningún mago o bruja a logrado completar?- pregunto Merlín mirándolo con reto en sus ojos.

-Lo terminare- aseguro Harry sin titubeos.

-Si lo a completas, te enseñare la forma final de la magia, aquel hechizo mágico que no pude completar yo- dijo Merlín, levantándose de golpe, lo miro con una sonrisa enorme.- Te enseñare todos los secretos que tengo en mi mente-

-Y yo prometo que aprenderás a utilizarla magia de forma que o desperdicies nada- dijo Nimue con una sonrisa.- Utilizar cada elemento mágico como si fuera la mas apegada a ti-

-¿Que necesitan de mi para hacer el ritual?-pregunto Harry mirándolos.

-Has el circulo con tu sangre, párate en medio y deja que nosotros rompamos tu contenedor- dijo Merlín con una sonrisa que paso de maliciosa a sádica e nada de tiempo.

-Suena sencillo-

-Sentirás que te cortan en trocitos y luego te metieran pinchos dentro del estomago- dijo Nimue soltando un suspiro.- En términos sencillos, sentirás la mas cruel y cruda muerte-

Sintió a Marlow ronco en su bolsillo trajeándolo al presente. Ellos dos ahora estaban haciendo que su magia fluyera por el circulo creado de su sangre y este brillaba de un blanco y negro girando de tal forma que parecía un torbellino de ambos colores.

-Se ve diferente a lo que hicieron con la flor- dijo Harry levantándose.

-Claro que es diferente- dijo Merlín sentado en la posición de loto y con los ojos cerrados- Tu eres un mago con mucha magia, un contenedor mas grande y que opondrá resistencia para evitar eliminar su contenedor, no podemos andar por las ramas-

El circulo que era plano y perpendicular al suelo, se elevo de la tierra, se comprimió hasta formar un circulo del tamaño de un ser humano. De un momento a otro giro en todas direcciones pasando de ser un circulo a una esfera, si bien recordaba sus clases de figuras geométricas en primaria. Lanzaba destellos dorados, platas, ámbar y muchos mas que le llamarían la atención si no fuera por que aquellos dos seres lucían muy concentrados para hablar.

-Harry entra. En cuanto comencemos el ritual tu cuerpo sufrirá los peores dolores que has sentido, pero no sufrirás daño alguno, intenta resistirlo- dijo Nimue señalando la esfera.

Dejo al pequeño de Marlow en el suelo, aun dormía y parecía incomodo por estar lejos de el.

-Okey- dijo Harry avanzando con paso tembloroso, sus manos sudaban y la boca la tenia seca- Quedo en sus manos-

Con un paso mas aquella esfera le cubrió todo el cuerpo. Se sentía como si entrara en material muy viscoso, apenas y se movía, sentía su cuerpo húmedo y pegadizo. Las palabras fueron opacadas por aquel lugar, pero sin lugar a dudas Merlín y Nimue comenzaron un cántico. Y lo sabia, por que su cuerpo se puso tieso, sintió electricidad recorriendo su cuerpo, como desgarraban su cuerpo desde adentro, su piel ardiendo y miles de vidrios por su piel. Si intentaba moverse era miles de veces peor. Al primer segundo su mente se perdió, estaba a punto de desmayarse.

-¿Que tanto vez, Harry?-pregunto Ron a su espalda.

Se encontraba mirando el lago congelado desde su ventana en la torre de Griffyndor. La ultima hora se encontró en la misma posición, solo mirando la nieve caer, como alumnos salían a divertirse. Abrió la boca haciendo que el vaho de su aliento manchara la ventana.

-No lo se, me gusta la nieve- respondió Harry inclinando la vista para observar otro ángulo.

-Entonces vamos afuera- dijo Ron descolocase a su lado -Juguemos con los gemelos a una guerra de bolas de nieve.-

Torció el gesto, no quería salir, por mucho que le gustara la idea simplemente no quería salir. No cuando todos lo mirarían como el heredero de Salazar Slytherin, odiaba que lo miraran de esa forma.

-Ve, yo te alcanzo en la comida- dijo Harry esperando estar un rato mas mirando.

-Vamos Harry, sera divertido. Que no te importe todos los demás zopencos- dijo Ron palmeando su hombro.- Ya veraz, en cuanto la poción Multijugos este completa sabremos que Malfoy es el heredero y lo expulsaran de Hogwarts-

-No es eso- mintió un poco Harry.- Simplemente no estoy de ánimos, creo además que Hermione estará terminando sus deberes en la biblioteca, le haré compañía-

-¿Deberes?-pregunto Ron con cara de asco.- Si apenas salimos ayer, no puede ser que ya este terminándolos-

-¿La conoces?-pregunto Harry levantándose para tomar sus cosas he ir con su amiga.- Seguro que desde ayer estaba ansiosa por terminarlas-

-O vamos, tenemos todas las vacaciones- dijo Ron sobando se la cien.- y no tendremos un día tan despejado como hoy-

-Te alcanzo, solo tengo que terminar lo de Snape, es lo único que me importa realmente, si no me bajara puntos… mas puntos- dijo Harry ya con su libro de pociones.

-Lo admito- dijo Ron asintiendo -Snape te tiene el mayor odio que a los demás alumnos-

Bajaron la escalera en dirección de la biblioteca, pero la única esperanza de Harry de estar un rato a solas se perdió al ver a Hermione a lado de la chimenea y con mas de media docena de libros acumulados a su lado. Parecía muy inmersa en sus deberes, tanto que Ron trago saliva.

-Te veo después- le susurro y antes de que Hermione le viera salio por el hueco del retrato de la señora gorda.

Ojala y el retrato fuera mas silencioso, sobre todo por que al momento Hermione giro la cabeza. Y sus ojos fueron directo a sus libro de pociones.

-¡Harry! ¡¿Venias ha hacer los deberes?!- dijo Hermione sorprendida.

-Algo así- respondió.

-Siéntate- dijo Hermione con una sonrisa enorme- Creo que es grandioso que empieces ahora, tendremos todas las vacaciones libres para pasear por los campos. Además de que el profesor Snape no podrá decir que no lo has intentado siquiera-

-Eso lo siria aunque me viera aquí sentado todas las vacaciones- dijo Harry sentándose en el sillón libre y enfrente de la chimenea.

Abrió el libro e intento leerlo, solo que la misma linea una y otra vez, era como si cada letra fuera desconocida para sus ojos, como si su cerebro no lograra procesar el contenido y una vez que terminara la linea esta fuera borrada automáticamente, incluso Hermione podría preguntarle que decia y el no lo recordaría.

-No querías hacer los deberes ¿verdad?-dijo Hermione mientras seguía escribiendo en su pergamino.

La miro, ella ya llevaba casi un pergamino y medio, mientras el aun sostenía una pluma, con la tinta ya seca y una pequeña mancha en el pergamino.

-Hacer que Ron te de un tiempo a solas es difícil -dijo Harry como toda respuesta.

-No para mi- dijo Hermione con una leve risa- Solo le digo que voy a estudiar y hasta parece que es experto en desaparición-

Durante el siguiente rato, miro las llamas de la chimenea, sin que Hermione dijera nada o sin que le preguntara mas. Incluso se le hacia raro, pero al poco tiempo disfrutaba de que ella estuviera ahí, solo compartiendo el rasguño de su pluma y el pasar de las hojas por minutos y minutos. Le impresionaba el auto control de Hermione al ver que el solo estaban sus cosas en la mesa, sin ni un avance en sus deberes, se preguntaba que le pasaba por la mente. La observo, viendo sus risos caer por su rostro, como mantenía casi toda la nariz metida entre las paginas del libro, sus ojos pasando por las lineas una y otra vez. Era tan pacifico verla.

-¿Crees que soy el heredero de Slytherin?-pregunto Harry de un momento a otro sin poder contenerse.

Hermione freno la pluma, saco la nariz del libro y le miro, unos segundos pareció confundida, luego inclino su cabeza y el tuvo una rara sensación el la boca del estomago. ¿Acaso ya seria hora de la cena?

-¿La verdad?-pregunto ella dejando la pluma con cuidado y cerrando el tintero.

-Como siempre- dijo Harry intentando contener esa preocupación que lo consumía.

-Creo que podrías ser descendiente de Salazar Slytherin, mas no creo que tu estés atacando a los hijos de muggle- dijo Hermione cerrando su libro, algo que incluso lo exalto.

-¿Pero por que?-pregunto Harry intentando no verla, no sabia por que pero se sentía raro.

-Bueno… por lo que he leído, los Potter tienen un árbol genealógico largisimo que nadie sabe donde empezó, lo cual podría ser un echo refutable que tus orígenes son desde los fundadores o antes- dijo Hermione sentándose a su lado.- Podrías ser tatara nieto de Salazar o de Griffyndor.-

-Entonces… podría ser que pertenezca a Slytherin -dijo mirando como el fuego crepitaba.

-No- dijo Hermione atrayendo su mirada- No he visto a nadie mas valiente que tu, he incluso observe como consideraste el estado de Ron y mi propia seguridad antes de llegar a la piedra.-

-Yo… no me siento valiente- dijo Harry mirando las manos de Hermione que estaban sobre su rodillas.- Temo que todos me vean como el siguiente Voldemort-

Hermione se llevo una mano a la boca, Harry siguió su acción y la vio con una sonrisa, los ojos llorosos y aguantando las ganas de reír. Se desconcertó tanto que Hermione no resistió y comenzó a carcajearse.

-Lo lamento… de verdad lo lamento-decía Hermione mientras intentaba respirar- Pero ¿Es en serio? ¿Tu el siguiente Voldemort?-

-¿Que tiene?-

-No puedo creerlo, es absurdo- dijo Hermione sosteniéndose el estomago.

-Sabes que no tuve una infancia feliz, puede que mi pasado haga que quiera seguir el rumbo de Voldemort- dijo Harry sintiendo la cara roja por la risa que tenia Hermione.

-No lo creo- repitió mas tranquila.- Eres incapaz de ver la ideología de Voldemort como un camino a seguir-

-No lo se- dijo Harry mirando el piso.- Me siento apartado de todos, me siento solo-

Sintió las manos de ella sobre su rostro, y con algo de fuerza se la alzo hasta que quedo mirando sus ojos. Ese brillo, como lo miraba demostrando su inteligencia, era sombroso e incluso podía ver como le sonreía sin ver sus labios.

-Yo estoy aquí, no me iré- dijo Hermione- Confía en mi-

-Lo hago- dijo Harry sintiendo como otra vez raro su estomago, pero la presión de su pecho desapareció- Gracias-

Ella cerro su libro, enrojo su vacío pergamino, para después tomarlo de la mano y tirar de el.

-Vamos a cenar, ya es tarde- dijo Hermione con una sonrisa amplia.

-Bien- respondió Harry mas seguro de ver a lo demás, después de todo tenia a Ron y Hermione que no lo verían de esa forma.- Desde hace rato mi estomago esta raro, creo que es de hambre-

Jadeaba intentar tomar aire, mientras sentía el duro suelo, sus manos se sentían extrañas, como si nunca las hubiera utilizado. Y esa sensación de magia constante que había tenido desde su llegada a la isla se perdió.

-¿Que sucede?-pregunto agitando la cabeza intentando aclararla.

-Se acabo- dijo Nimue acercándose lo suficiente para verla.-¿Cómo estas?-

-Sediento-dijo Harry con la boca mas seca que nunca.- Quiero ag...-

-El sol se oculta- interrumpió Merlín- Mocoso tienes que ir a un lugar seguro, en la noche puede pasarte algo-

-¿Crees que llegue en este estado?-pregunto Nimue mientras el se para, se sentía como gelatina.

-Si no lo hace, estará en peligro- dijo Merlín mirándolo directo a los ojos-¿Puedes mocoso?-

-Claro- dijo Harry dando un paso tembloroso, y pensó que tal vez no, pero no lo diría.- Solo que... tardare un poco-

-Bien, vámonos- dijo Merlín, y Nimue comenzando a caminar.

-Marlow- dijo Harry al ver que algo trepaba su pierna.- Que bueno… que estas... despierto... amigito-

Les siguió el paso. Caminaba torpemente, sus pies apenas y se movían, y su cuerpo se sentía como en un temblor, todo se agitaba en círculos. Labios secos, frente sudorosa, ardor de ojos e incluso debilidad eran los síntomas que Harry estaba experimentando. No estaba enfermo… o no una enfermedad común.

Toda su vida tuvo una salud excepcional, pocas veces se enfermo, como cuando Dudley lo saco afuera de su casa mientras sus tíos estaban afuera y llovía con toda la fuerza posible. Recordaba como la lluvia seso y se quedo ahí en el pórtico abrazando sus piernas y escondiendo la cara en el hueco, intentando mitigar el frío que le calaba hasta los huesos. Tardaron hasta muy tarde en llegar sus tíos, y enseguida fueron los regaños seguido de enviarlo a su alacena sin siquiera tomar una ducha caliente. A pesar de haberse cambiado la ropa y taparse con todo lo que pudo, al siguiente día no podía ni abrir los ojos sin que le doliera la cabeza.

Su tía le grito que se levantara, también aporreo la puerta e incluso tuvieron que abrirla a la fuerza, todo fue muy borroso y recordaba muy poco, solo supo que alguien le pasaba algo fresco por la frente y una sonrisa torcida. Un día después despertó como si nada, se levanto con una pijama limpia, una gruesa cobija y un desayuno bastante bueno. No tenia idea si fue su tía o Dudley, pero algo era seguro, no parecían quererlo enfermo.

También estaba el casi reciente enfermedad de los gigantes azules, claro que esa enfermedad fue muy difícil de llevar con todos sus deberes, sus ocupaciones y sin saber que hace, y mucho mas difícil fue curarse. Ahora no era como esas veces, los síntomas lo atacaron de un momento a otro, casi al punto de que lo hizo desvanecerse.

Piso una roca en el camino, se des-balanceo y cayo al suelo, tenia la mejilla dolorida, las hiervas silvestres sobre crecidas picándole toda la cara, sus piernas sin poderse mover mas y jadeando como loco. Se sentía tan caliente que no lo soportaba, el aire que entraba a sus pulmones era como si fuera una bocanada de fuego, y al contrario su cuerpo se sentía empapado y tan pesado como roca solida.

-No puedes quedarte aquí, es peligroso, llega a la cueva-dijo la voz de Nimue a su lado. ¿De donde? No importaba.

Intentaba obtener aire fresco para sus pulmones, tranquilizar sus temblores en el cuerpo, forzar todos sus músculos para levantarse y mantenerse consciente. Pero sentía como si todo a su periferia se perdiera en bruma negra, mientras la poca vegetación que veía bailaba burlándose de el.

-¿Puedes levitar lo con aire?-

-Esto no funcionara, tenemos que parar el renacimiento- dijo Nimue, sus ojos azules sobresalían entre todo ese verde-¡Trasmutara, permanentemente!-

-No… lo… paren- jadeo Harry intentando otra vez levantarse, como resultado su frente choco contra el suelo y su cuerpo quedo tendido boca abajo.- Yo… puedo-

-Nunca vimos que alguien reaccionara tan rápido- dijo Merlín aunque aprecia no dirigido a el. -Solo cuatro seres mágicos lo hemos intentando y de ellas dos murieron, tu estuviste a punto y yo no lo termine… ¿El va por un camino peor que nosotros?-

-NO- intento gritar Harry, haciendo fuerza con los brazos, pero era como si fueran simples adornos, ya no sentía ni los dedos.

-Aun esta consciente- dijo Nimue con voz plana- Eso es algo nuevo, incluyo tu perdiste la conciencia de inmediato y despertaste en un estado lamentable-

-Deja que continué, aun no sabremos si esta sobre reaccionando a toda la magia que lo rodea- dijo Merlín como si no fuera nada.- El mocoso llego hasta aquí solo, tal vez pueda...-

-Lo que esta diciendo puede ser un indicio de que su cuerpo no lo soporta- dijo Nimue enojada- ¿Quieres que Harry muera de verdad?-

Harry no supo ni como logro sentarse en medio de ese camino lleno de plantas, ni como soportaba que todo girara a su alrededor mientras que vea a Nimue con una mirada furiosa, enfrentando a Merlín que por primera vez le sostenía la mirada.

-Estoy bien- dijo Harry apoyándose en un tronco para levantarse, sentía pinchazos en el cuello, no entendida si era otro síntoma o Marlow, pero no voltearía la cabeza o se marearía mucho mas de lo que ya estaba.-Falta poco-

Su siguiente paso casi lo derriba de nuevo, si no fuera por que una ráfaga de aire le empujo en la dirección opuesta. Las décimas de segundo que uno tarda en dar un paso, se convirtieron en minutos para Harry que a cada paso se sentía peor. ¿En que momento había decidido aguantar esa tortura? Su vista se perdió en el camino un segundo.

Hacer el ritual no le fue el problema, incluso soporto todo el dolor que le causo, que como dijo Nimue fue pero que lo cortaran trozo a trozo o que le metieran pinchos el estomago, era mas como vidrios rasgando todo su interior. Incluso pensó que de verdad lo querían matar. Ahora solo quería llegar a la cueva acostarse y dejar salir todo el dolor que le carcomía el cuerpo. Pronto llegaría, solo tenia que seguir poniendo un pie frente a otro. Aunque su mente no estaba del todo bien, el dolor, la sed, incluso su ardor era capas de hacer que flaqueara, solo necesitaba… ¿Que necesitaba? Ya no lo recordaba, ya ni siquiera sabia quien era el mismo, el verde esmeralda le tranquilizaba. Pero ¿Por que estaba solo?

Harry corría a toda prisa, podía ser pequeño y tan flaco que la enfermera de la escuela se preocupaba por su salud, era rápido y de todas formas el no corría por que quisiera. Dudley y su grupito lo perseguía, para que otra cosa si no darle la golpista matutina, aunque como siempre el intentaba evitarlo. Solo lo intentaba. No siempre lograba evitar recibir un puñetazo en el estomago o que le rompieran, de nueva cuenta, los lentes. Sin embargo no podía rendirse y solo dejarse golpear ¿Cierto?

-¡Harry cuidado al cruzar la calle!- grito la señora Figg una señora algo rara, pero que lo trataba mejor que nadie-¡Ten un buen día en la escuela!-

No contesto, escuchaba al grupo de Dudley acercándose.

-¡Dudley Dursley le diré a tu madre que de nuevo has perseguido a Harry!- grito la señora Figg al verlos pasar por su lado.

Para lo que serviría su advertencia, eso solo provocaría mas a Dudley que lo golpearía de nuevo y con mas fuerza, claro que su tía no le diría nada a su primo y solo le dejaría un leve castigo. Sin embargo para el eran horas de soportar los moretones o las raspaduras que se llevaría si era alcanzado. No entendía por que les gustaba tanto cazarlo, tal vez era por que no se los ponía fácil, incluso cuando estaba acorralado siempre encontraba la forma de escabullirse o en el peor de los casos enfrentarlos, claro que eran muchos mas que solo su primo y el menso de Piers.

Estaba a solo una esquina de la escuela, donde podría esconderse de Dudley hasta que tocaran para ir a clase y de alguna forma el podría salvarse, temporalmente, de esos mastodontes que le querían alcanzar. Pero de la nada la puerta de un auto se abrió.

-¡Cuidado niño!- grito un hombre que estaba saliendo de un auto algo viejo y que obligo a Harry a frenar en seco para no estrellarse contra la puerta.

A tio Vernon le hubiera dado un ataque de ansias al ver tal vehículo de esa forma, se le veía la pintura algo corroída, y sonaba algo mal. Sin embargo el hombre era joven, con ese pelo negro, pero unos ojos ámbar bastante llamativos y a su derecha, en el asiento de copiloto estaba una mujer de mucho cabello castaño y rizado.

-¡¿Estas bien chiquillo?!-pregunto la señora que lo acompañaba.

-Lo lamento mucho- dijo Harry observando a los dos adultos, eran algo extraños. ¿Por que se preocupaban por el? Su mirada fue atraída por otra cabellera, mucho menor y risada pero que apenas y se veía por la ventana.

-¡No corras Anormal!- grito la voz de Dudley a la distancia.

Harry no espero mas, paso la puerta y continuo corriendo directo a la escuela, tenia que alcanzar la puerta e intentar mantenerse lo mas lejos de Dudley hasta que comenzaran las clases. Al fin vio un poco de esperanza, cuando encontró a todos esos niños caminando con su uniformes su mochila al hombre y de las manos de sus padres. Un pequeño dolor le cruzo por el pecho. ¿Acaso estaría enfermo?

-¡No empujes niño!- dijo un hombre

-¡Me a pisado!- grito un niño al pasar a su lado

-¡Mama ese niño esta muy sucio!- dijo una niña haciendo una mueca.

La verdad es que siempre le pasaba lo mismo, no importaba a donde fuera siempre tenia que armar alboroto, mas aun cuando estaba apurado y necesitaba esconderse de Dudley. Cruzo la puerta sin ver a nadie en especial y sin detenerse, ni aun cuando los vigilantes le gritaron y le pidieron que parara. No le importaba todo lo que quería era estar a salvo.

-¡Dudley deja a Harry!- dijo uno de los vigilantes indicándole que Dudley le seguía el paso y estaba mas cerca de lo que pensaba.

-¡Primo ven que solo quiero hablar!- grito Dudley fingiendo como siempre que algún adulto miraba, era exasperante que todos a su alrededor se lo creyeran.

No freno, continuo pasando el patio y directo a los salones que estaban detonados para los de su grado. Solo que no entraría en su aula, si conocía a su maestro el también lo reprendería por llegar sudado y lleno de tierra. Por que Dudley le tenia que aventar tierra en cuanto tía petunia se volteara o tirarlo y hacer que se ensuciara. No, primero tenia que limpiarse un poco. Lo único bueno de que no tengas con quien jugar en los recesos es que te dedicas a curiosear por todo el colegio y encuentras lugares que muy pocos conocen, como el grifo que esta detrás de los salones.

Giro a ver que Dudley no lo siguiera. En efecto estaba plantado en la entrada hablando con el vigilante, y luciendo como si estuviera muy preocupado. Harry bufo mostrando una mueca de enojo. Eso le traería otro regaño mas. Fue directo al grifo esperando poder limpiar su ropa, también refrescarse y de paso tomar agua que ya estaba jadeando. No tardo en encontrarlo, sabia muy bien donde se encontraba, se sentó y saco de su pequeña mochila remendada un trapo viejo, mas bien una camisa vieja de Dudley que le dio su tía para usar, pero como era mas grande y casi rota lo ocupaba para esas ocasiones. Mojo el trapo, se limpio lo mejor que pudo el uniforme, se limpio la frente llena de sudor que desprendió en su carrera, también tomo un trago de agua y se sentó medio oculto en la hierva esperando a la campana.

Odiaba a Dudley y su grupito, odiaba a sus tíos, odiaba a los maestros, odiaba a sus compañeros y sobre todo odiaba al mundo que lo maltrataba día a día. Quería ser como cualquier otro niño, pero la verdad es que pasaban cosas raras a su alrededor, y había días que solo quería huir de todo eso. Estaba muy enojado con sus padres, ¿Por que lo dejaron solo? ¿Por que murieron en ese accidente de auto? ¿Acaso era cierto que era un borracho y desempleado su padre? ¿Que su madre era una anormal y loca como el? ¿Acaso no lo amaron?

Las lágrimas presionaron sus ojos, mas no las dejo escapar, no lloraría nunca mas por sus papás, esos que lo dejaron a su suerte y que le hicieron estar con sus tíos que lo trataban como un animal y con Dudley que lo trataba como un saco de boxeo. Metió la cabeza entre sus piernas y las abrazo, esperando así ocultarse de todo el mal que le asechara en el mundo.

-¡DUDLEY AQUÍ ESTA!-grito Piers haciendo que Harry alzara la vista.

Dudley se acercaba junto con Malcom, Gordon sonriendo y chocando su puño contra la otra mano. No dudo se levanto y corrió en dirección contraria, en esa dirección pasaría por los salones de los alumnos mas grandes, también por la oficinas y las cancha de fútbol donde casi nadie lo vería ser golpeado. Mas no le quedaba de otra. Corrió con toda su fuerza esperando tener un buen espacio entre ellos y primo. Cuando llego a los salones vio a unos chicos mayores que de seguro no lo ayudarían, los paso de largo y fue directo a donde se escuchaba bullicio. Se pregunto que había en la escuela y de repente recordó que en ese día se haría una competencia académica, algunos chicos listos de Surrey contra otros de Liverpool o algo así.

La verdad es que le hubiera interesado entrar si no fuera por que Dudley intento participar y si el era seleccionado su primo lo golpearía toda la semana sin descanso, así que desistió por el bien de su salud física. Solo tenia que pasar por la solitaria biblioteca, girar en la esquina y estaría entre un montón de gente. Dudley no se atrevería a golpearlo entre tantas personas.

Lo que no esperaba es que una cabellera risada y castaña se le interpusiera, primero intento frenar, solo que no pudo sus pies derraparon.

PAAAF

Fue lo que escucho al chocar, cayo de sentó y se llevo una mano a la frente, dolía y mucho. Se sintió desorientado, hasta que escucho algo, un leve gemido de una niña. Abrió un ojo. Encontró a una niña de mas o menos su edad, con el cabello alborotado, los ojos ambar llorosos y una mueca de enojo. Lucia otro uniforme que no era de su escuela, también aprecia que estaba en la biblioteca pues dos libros algo gruesos estaban en el suelo. Harry se asusto, la niña saldría llorando he iría con sus padre y le darían no solo un regaño, tambien lo llevarían con su maestro o director, y le enviarían una nota a sus tíos los cuales se encargarían de encerrarlo en su alacena por un mes o mas.

-¡TONTO!- grito la niña pasándose las manos por los ojos, intentando aguantar el llanto.- ¡Fíjate por donde corres! ¡Me dolio!-

-Yo… lo lamen- comenzó pero los gritos de Dudley llamándolo lo alertaron.

Se levanto viendo a la niña, con los ojos brillando le y aun en el suelo, lucia desconcertada y… tierna. Correría sin importarle nada, solo que ella estaba ahí y no sabia Dudley pasaría de ella para ir detrás de el, tal vez incluso podría pegarle tambien.

-¿Que pasa?-pregunto con voz chillona, Harry se percato que los dientes frontales los tenia un poco mas grandes, solo un poco.

Harry no supo por que, solo que su cuerpo reacciono, tomo los libros de la niña, luego tomo su mano y tiro de ella.

-Ven conmigo- dio Harry haciendo que se levantara.

-Pero no te conozco y mis papás están en la biblioteca, se molestaran me dijeron que solo fuera a preguntar cuando comienza la competencia-chillo la niña luciendo molesta.

-Diles que fue mi culpa- dijo Harry casi arrastrarla por el pasillo.

Cuando llego al final y se asomo se dio cuenta de su gran equivocación, Dennis y Malcom se acercaban, sus dos amigos de Dudley custodiaban la salida y su salvación. Tambien se dio cuenta que en la biblioteca estaban los padres de aquella niña y que Dudley evitaría pegarle enfrente de ellos, pero ya era demasiado tarde. Solo tenia unos segundos para pensar, estaba atrapado en un pasillo en el cual solo era una biblioteca de un lado y del otro un muro lleno de casilleros cerrados, no existía salvación. Lo extraño era que no le preocupaba ya ser golpeado, le preocupaba que esa niña fuera también herida por Dudley, la sola imagen de su primo poniendo una mano en ella lo enojo. Tenia que salvarla.

Un leve chirrido le llamo su atención, uno de los casilleros estaba abierto, y era lo suficientemente grande para ocultar a uno de ellos. Jalo a la niña que intentaba zafarse de su agarre.

-¿Que te pasa?-

-Entra ahí- ordeno Harry abriendo el casillero.

-No- dijo ella.- ¿Eres también un abusivo? Suéltame, no me agradan las personas que se aprovechan de los demás-

-NO- Grito Harry alterándola, su mirada era temerosa y aun los ojos los tenia cristalinos.- Escúchame, por favor, Solo entra y no salgas.-

-Estaré sola- dijo ella preocupada.

-Yo estoy aquí, no me iré.-dijo Harry sonriendo le para que ganara confianza la niña.- Confía en mi-

Dudo un solo momento, y justo después sus ojos se encontraron con los de ella. Asintió y entro, Harry solo medio cerro la puerta para que no se asustara. Sintió un mano tomando su nuca y estrellándola contra el metal. Por suerte grito al mismo tiempo que ella.

-Valla dejaste de correr anormal- dijo Dudley a su lado, seguramente quien le sostenía la cabeza era Piers.- Me canse de correr detrás de ti. Sujétenlo bien-

Harry por primera vez no peleo para que lo soltara, mas bien se quedo tranquilo con Piers sosteniéndole los brazos y los otros dos detrás de Dudley.

-¿Por que no peleas igual que siempre?-pregunto desconcertado.

El mismo se lo preguntaba, tal vez era que estaba de verdad cansado de correr, pero no podía despegar la vista de Dudley al mismo tiempo que su oído estaba atento al sonido de los casilleros.

-Bueno no importa, me las pagaras- dijo Dudley antes de mover su manito regordeta y asestar un fuerte golpe en la boca de su estomago.

Harry grito, al mismo tiempo que soltaba un poco de saliva y como el dolor se acumulaba de golpe en su torso. El segundo y tercero fueron peores, incluso sus piernas dejaron de sostenerse y cayo al suelo, no tardaron en patearlo entre todos. Chirrío los dientes, apretó los puños y sintió cada musculo tentarse, quería pararse y repartir puñetazos, quería ver a todos ellos heridos, quería que se pusieran a sus pies. En cuanto creciera ya se las pagarían.

Un fuerte golpe metálico sonó, seguido de un golpe sordo. Lo dejaron de patear y ahí enfrente de todos ellos estaba esa chica, parecía que hubiera pateado el suelo, tenia las manos en las caderas y el ceño fruncido, incluso su cabello alborotado parecía flotar.

-Dejen lo-dijo con enojo.

-¿Eres su amiga?-preguntaron los chicos retirándose.

-Le diré a sus maestros y a mis padres, ustedes estarán castigados-dijo lanzando una mirada molesta.

-No se te hago callar- dijo Dudley levantando el puño.

Harry se levanto poniéndose enfrente de ella, por que su cuerpo hacia todo eso sin que siquiera lo pensara, le dolía el cuerpo pero aun así la protegía.

-Déjala en paz Duddy- dijo Harry con mas valentía de la que sentía, demonios ese mote era por el cual se había metido en problemas con su primo y se atrevía a repetirlo en la peor ocasión, de verdad quería llamar la atención de Dudley. Los chicos avanzaron mientras el intentaba evitar que la vieran, pero ella era mas alta y el muy enano.

-Tu y tu amigita me las pagaran...-

-¡Hija, ¿Que haces?!-pregunto un hombre, Harry sintió un cosquilleo esa voz la escucho hace poco.- Ven tenemos que irnos-

Dudley no dudo giro sobre sus talones al igual que sus amigos y corrieron en dirección contraria, se perdieron en la esquina, mientras el se recargaba en los casillero, esperando que lo peor hubiera pasado.

-Pero papá sos niños están...-

-Mi amor, va a empezar la competencia- dijo la madre de ella, solo que Harry no se atrevía a voltear, si lo hacia verían que estaba golpeado y por alguna extraña razón no quería tener mas problemas.- Ven luego platicas con tu amigito-

-¡Pero…!-

-¡Hermione obedece a tu madre!- dijo su padre.

La niña no discutió, al contrario dio unos pasos para quedar enfrente de el. Seguro le gritaría y le pediría que no se acercara mas a ella, pero bueno eso es lo que todos hacían y ya estaba acostumbrado. La niña le vio con esos ojos ámbar, dio una ligera sonrisa y de un momento a otro le abrazo-

-Gracias- susurro mientras la besaba la mejilla y salia corriendo en dirección de sus padres. Segundos después escucho como se alejaban por el quedo ahí parado, atónito, no tenia ni idea que paso ni porque aquella niña le beso. Solo que se llevo una mano a la mejilla, sintiendo la tibieza que se quedo implantada, al igual que una pequeña humedad. Cuando el silencio se hizo, sus piernas no aguantaron y se tuvo que sentar con la espalda a los casilleros. Estaba apunto de llorar, nadie en su corta vida ni siquiera lo había abrazado, menos besado en la mejilla y esa niña lo hizo. Por primera vez sintió que el mundo no era tan malo como el creía y estaba seguro que cuando volviera a ver a esa niña la protegería con todo su cuerpo si fuera necesario.

La campana sonó, mientras el estaba un gemido, se le hacia tarde y tenia que cruzar media escuela para llegar a clases. Se levanto y troto mientras una ligera sonrisa se dibujaba en su rostro. Ahora que lo pensaba mejor ¿Como la llamo su madre? Eni, Jermon, Hemin, o algo así. Tenia que poner mas atención en esos pequeños detalles. Bueno ella tampoco sabia su nombre, solo que era un enano con mucho pelo negro y desordenado que se cubría la frente con un flequillo. Esperaba encontrarla al salir del colegio.

Lamentablemente jamas llego ese momento, la competencia termino antes de que saliera del aula, luego la busco por todos lados, pero no encontró nada. Solo recordaba de ella que era muy valiente, muy lista para estar en la competencia y sobre todo que era linda.

Tenia algo por lo en reflexionar por una vez en su vida, ya no solo era crecer siendo maltratado por sus tíos, tampoco ser el saco de boxeo personal de Dudley. Ahora entendía que una simple acción como un beso en la mejilla de dos niños, podían cambiar el pensamiento, ahora pasaba los días pensando en un mundo aya fuera del suyo, un lugar donde alguien le regalaría una sonrisa, un abrazo y un simple beso. Sonreía sabiendo que en el mundo existía tanto bien como mal, y que a pesar de lo que le pasara el encontraría esa parte buena en su alma. Tenia apenas 7 años. Podía pasar muchas cosas antes de que fuera un adulto, antes de que encontrara eso que le hiciera continuar peleando.

Harry despertó jadeando, mientras intentaba moverse, su cuerpo era sostenido por algo. Miro a su alrededor Nimue y Merlín le veían desde la entrada de la cueva ¿Cuando llego? Se veían preocupados, con Nimue casi trasparente y Merlín sosteniéndose de la pared que lucia como lava.

-Recupero la conciencia- dijo Nimue acercándose- Escucha Harry, conserva la calma tienes que concentrarte-

-Es mas simple, terminemos esto- dijo Merlín avanzando.

-Déjalo decidir- ordeno Nimue deteniéndolo.

El observo su cuerpo ya que no podía moverse, su mano derecha era envuelta de puro fuego, mientras que la izquierda un remolino de aire que agitaba todo a su alrededor, sus piernas ni las veía pero suponía que eran algo parecido, tal vez una de pierda y otra de agua o algo así por el gorgoteo. Su cuerpo comenzaba a trasmutarse.

-Dinos mocoso ¿Quieres continuar? Solo llevamos un par de horas y tu ya estas en este estado, no aguantaras mas- dijo Merlín muy cerca. Alzo la mano haciendo el mismo circulo mágico pero a la inversa.

Jadeo sintiendo que su magia ya ni siquiera estaba en su cuerpo, se derramaba de el como si fuera sangre fluyendo de su cuerpo sin control. Pronto estaría ¿Desmagificado? … bueno trasmutado. Respiro varias veces intentando aclarar su mente necesitaba tiempo para pensar con cuidado. El reciente sueño se llevo su atención haciendo que los elementos que estaban consumiéndolo fueran mas fuertes.

-Paremos esto ya- dijo Merlín.- No lo soporta-

-Denme un minuto- dijo Harry cerrando los ojos.

Lo olvido por completo, la primera vez que conoció a Hermione, o bueno esperaba que fuera ella, la verdad es que el nombre podía ser igual, incluso tener pelo castaño y ojos ámbar. Pero de verdad no le importaba. Ese fue su comienzo, ahora el estaba con Hermione, la amaba y tenia que regresar de alguna forma con ella lo que significaba que no se daría por vencido. Esta vez pelearía. Intento sentir su magia, bueno no era una normal, mas bien era un remolino de magia dentro de su cuerpo el cual empezaba a destrozarlo físicamente. Necesitaba controlarlo, frenarlo y…

{Me lo juro} Sonó la voz de Hermione dentro de su cabeza sonaba triste incluso enojada, pero el se concentro en su voz.{Me prometió que el regresaría, que regresaría para…}

-Formar una familia- termino Harry abriendo los ojos.

Obligo a su magia a contenerse en su piel, mientras intentaba no absorber magia del exterior. Pasaron segundos, minutos, tal vez una hora. Pero entre mas tiempo pasaba su cuerpo era recuperado, cuando al fin tuvo sus piernas y manos sin fuego o aire consumiéndola pudo hablar. Ya no era un torbellino dentro de su persona era mas un montón de agua golpeando su cuerpo a un ritmo constante.

-Creo que continuo- Dijo Harry soltando una leve sonrisa.

-Que sorpresa, el mocoso creció un poco mas- dijo Merlín mirándolo de cerca- Creo que empiezas a agradarme-

-Si bueno, creo que descubrí el secreto para controlar toda la magia que me golpeo de de repente- dijo Harry recostándose nuevamente intentando descansar los ojos que le ardían, aunque no sabia paso ese tiempo con los ojos abiertos.

-Es interesante-dijo Nimue sentándose a un lado de el- Estas mejor que nosotros, y eso que pasaste por un momento muy aterrador, por un poco y te perdemos-

-¿Que fue lo que hiciste?-pregunto Merlín con malicia.

-Hice lo que me dijiste que no hiciera- dijo Harry con la misma malicia.

-¿Te dejaste llevar por la magia?-pregunto el mago.

-Mas bien me concentre en lo que me hace vivir, en mi propósito final- dijo Harry sonriendo.

-Y ¿Cual es?- preguntaron ambos.

-Hermione- dijo Harry volteando se en su dura cama, mirando la imagen que estaba junto a el- Ella me recordó que no hay que concentrarse en todo lo malo, mas bien en lo bueno, en un simple gesto que pueda cambiarte el pensamiento-

-¿He?-dijeron ambos.

-Lo entenderán cuando sean grandes- dijo Harry cerrando los ojos- Tengo mucho sueño, por ahora quisiera descansar-

Tardo mucho en dormirse, por que el dolor de su cuerpo aun perduraba, pero parecía que incluso cuando perdía su conciencia parte de el seguía controlando el gran cumulo de magia que le golpeaba una y otra vez. Solo que eso ya no le preocupaba tanto estaba seguro que podía si solo se concentraba en lo que mas le importaba, regresar a casa y cumplir su promesa.

Cuando al fin se durmió, soñó que estaba parado en un hermoso pastizal, rodeado de un largo y increíblemente extenso, la vista era genial, y quería disfrutarla. Se sentó para admirarla. A los pocos segundos algo le llamo la atención girando la vista, ahí estaba Hermione sorprendida y luciendo hermosa, de su sola presencia sonrío. Estiro la mano para invitarla a sentarse también, nada mejor que estar ahí con la mujer que amaba, aunque fuera un sueño. Al sentir su piel en la suya le hizo que todo lo de su pasado no importara. La abrazo con fuerza, y sintió su pequeño cuerpo entre sus brazos. Ambos disfrutaban de la compañía del otro aunque no hablaran.