¡Wassup Bitches! He decidido subir una segunda continuación de "Monster Musume no Uzumaki" en este mes, tenía planeado hacerlo para Abril pero resulta que tengo planes para el 20 de Marzo. Resulta que para ese día… ¡ME VOY DE VACACIONES MIERDAAAAAA! -grito el autor que comenzó a tirar confeti- ¡por fin me iré a descansar luego de tantos problemas! ¡A la mierda si el taller se incendie o vuele en pedazos! ¡Me iré a pasar el resto del mes en Viña del Mar en la casa que me prestaron mis tíos! -tanto Predator como Bastemon y Lizlet festejaban por el gran anuncio- es por ese motivo que subiré antes la continuación de este fic, de paso les aviso que puede que suba más de una continuación ya tendré harto tiempo libre para trabajar.

Antes de retirarme quiero nombrar a los lectores que han logrado descubrir o acertar sobre Centorea y a quien se parecerá. Esos lectores son: Seirei kenshi, leon solitario, JMR, OTAKUFire y Gadihan. Para ellos les enviare una New 3DS como premio… pero el problema es que no sé cuáles son sus direcciones de sus hogares. Es una lastima, que se puede hacer. Bien, sin nada más que decir… ¡disfruten de la conti, puercas!


"Blah bla blah" (Personajes hablando)

'Blah bla blah' (Personajes pensando)

((Blah blah blah)) (Personajes hablando por celular)


Capítulo 4: Un encuentro con una Centauro.

Otra semana transcurrió desde que se transmitió en vivo el capítulo 3 de "Monster Musume no Uzumaki" en las naciones ninjas, y como siempre fue un éxito total con un alto rating jamás visto en la historia del Canal 22. Un nuevo viernes comienza y como era costumbre, Hinata junto con su hermana Hanabi, sus amigas y Temari se reunieron en la sala principal de la mansión Hyūga para ver el cuarto capítulo del programa. Entre las féminas, solo la heredera del clan y la hermana del Kazekage se veían molestas y cruzadas de brazos porque seguían disgustadas de lo que paso el viernes pasado y de la humillación que pasaron por cortesía de Miia y Papi.

"Esas dos siguen molestas por lo del capítulo anterior" -mencionó Ino a sus amigas Sakura, Tenten y Hanabi, las cuatro chicas observaban a distancia a sus dos amigas que seguían molestas- "no entiendo que hay de malos en los personajes del programa. Solo es coincidencia que se vean iguales a ellas."

"Ponte en su lugar y lo comprenderías, yo también estaría molesta si alguien se parezca a mí y haga el ridículo frente a todo el mundo" -señaló Tenten- "pero ahora que lo pienso, ustedes creen ¿Qué Naruto esté haciendo esto como alguna especie de venganza en contra de nosotros?" -tal pregunta formó un silencio incomodo entre las chicas-.

"Imposible, recuerden que estamos hablando de Naruto. Él no es ese tipo de personas que tenga resentimientos contra los demás" -dijo Sakura segura de sus palabras pero las demás la miran con una expresión de molestia-.

"Mira quien lo dice, la persona que se la pasa golpeando a su compañero por cualquier cosa" -dijo Ino- "seamos sinceros Sakura, aquí entre todas nosotras, tú eras la que más le ha causado daño" -apunto con el dedo a la pelirosa como la mayor culpable del tema-.

"¡Que estas tratando de decir, puerca! ¿¡Me culpas que yo soy la responsable de que Naruto se vaya!?" -reclamó Sakura- "¡tú también lo tratabas mal cuando estábamos en la academia!"

"Admito que no lo trate bien en el pasado, pero tú fuiste la que lo golpeaba todo el tiempo" -remarcó la Yamanaka- "te la pasabas golpeando básicamente por todo lo que hacía. Cuando te hablaba, el pobre termina con tu puño incrustado en su cara" -al mencionar eso Sakura le respondió que se lo merecía por ser un grandísimo Baka- "¿y eso que? No es pretexto para que lo golpees cuando tú quieras. Es cierto que Naruto era algo tonto pero él es así, algo que muchos apreciábamos… todos menos tú y tu equipo."

"Ya basta Ino, no quiero seguir hablando del tema" -pidió Sakura desviando la mirada, se sentía como una especie de monstruo al recordar como la amistad que una vez existió se haya roto-.

"Podíamos dejar de culpar quien cometió más errores para otro momento, dentro de muy poco empezara el programa" -señaló Tenten al momento que Hanabi preparaba el reproductor de DVD para grabar-.

"Estúpida culebra exhibicionista roba identidades…" -murmuró Hinata sentada y cruzaba de brazos y liberar un aura negra-.

"Maldita ave descerebrada…" -Temari la imito al cruzarse de brazos y también liberara un aura negra como la Hyūga-.

"¿Y qué paso con el resto de tu clan?" -preguntó la Yamanaka a Hanabi porque no se sentía segura estando cerca de Hinata y Temari sin tener a alguien que las detenga-.

"Están al otro lado de la mansión viendo el programa. Es que todos le temen a mi hermana cuando se enfada" -respondió la Hyūga pensando que hubiera sido una buena idea estar con el resto de su clan en vez de estar con su hermana mayor- "genial, ya comenzó" -avisó ella para presionar el botón "REC" del control remoto y grabar el show-.

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A muy tempranas horas del día se observaba a Naruto Uzumaki caminando por las calles con muchas bolsas del supermercado, todo lo que había comprado era para preparar el desayuno a las dos chicas interespecies que vivían en su casa.

"Como odio ir de compras muy temprano en la mañana…" -se quejaba el rubio que bostezaba- "pero me alegra que tengamos un supermercado que este abiertos las 24 horas en el vecindario, pero aun así apesta… todo para hacer el desayuno antes que esas dos se despierten" -en eso recordó que al despertar Miia y Papi se metieron a su cama para hacerle compañía- "gracias a dios que Papi estaba ahí para tomar mi lugar hoy, porque se hubiera repetido el mismo problema."

Mientras seguía caminando, no dejaba de quejarse que las chicas comían demasiado y de costear tantos gastos que no se fijó que paso de un letrero que decía "¡Precaución! ¡El robo de bolsos es común en esta área!", tampoco se percató que al dar vuelta en la siguiente calle, a lo lejos algo que corría a gran velocidad se acercaba justo en la dirección del Uzumaki para terminar golpeado en el rostro con algo más grande que su propia cabeza.

"¡AAAHHHHHHHHHH!" –gritó el Uzumaki que salió disparado a varios metros atrás, tirando todo lo que compro mientras rodaba por el suelo para darse de cara contra una señal de transito-.

Lo que golpeo a Naruto era una Centauro que corría por las calles, esta chica interespecie conocida por tener la parte baja de su cuerpo parecida al de un caballo y la parte de arriba el de una persona normal con la excepción de sus orejas de caballo. Esta chica tenía una piel clara, largo cabello rubio amarrado a una cola de caballo y con 3 flecos, 2 a los lados de su rostro y uno cubriéndole el lado derecho de su cara. La Centauro vestía una camisa blanca sin mangas que cubría unos enormes senos y con un lazo rojo en el cuello, lleva una larga falda negra modificada para cubrir perfectamente su cuerpo de caballo y una espada en su cintura.

"No puedo creer que nos hayamos encontrado. ¡Esto debe ser obra del destino!" –Decía la Centauro- "¡me llamo Centorea Shianus, pertenezco a la solemne raza de los Centauros! ¡El destino quiere que seas mi señor!" –Se presentó la Centauro llamada Centorea a un inconsciente Naruto- "¿Eh?" –Fue lo único que dijo viendo al rubio tirado en el piso y de su boca salía un humito denotando que era su alma yendo al cielo-.

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"¡ESTO ES UNA INJUSTICIA! ¡ESTO DEBE SER UNA BROMA DE MAL GUSTO!" -grito una furiosa Sakura por lo que acaba de ver-.

"Por qué la vida tiene que ser tan injusta conmigo" -decía Tenten llevando sus manos a su busto y deprimirse-.

"Me siento como cuando tenía 12 años" -dijo Hinata algo pálida que comparaba sus pechos por los de la Centauro-.

"Porque otra chicas de pechos enormes, ¿Qué tienen contra las pequeñas como yo?" -se quejó Hanabi rodeada de un aura deprimente-.

"¡Porque la más afortunada tiene que ser esa tonta de la Yamanaka!" -reclamó Temari que señalaba a una impactada Ino que se puso pálida, ojos como platos, boca abierta como un buzón de correos y petrificarse al ver a la Centauro-.

¡Explícate puerca! ¿¡Porque tu personaje se ve mejor que las demás!? -exigió Sakura a su amiga que comenzó que no podía decir ni una palabra- "¡no te quedes callada y responde maldita sea!"

"Creo en estado de shock al ver a la que se llama Centorea" -dijo Tenten picándole la mejilla de Ino que seguía sin reaccionar- "pero que sorpresa, quien diría que hay un personaje idéntica a Ino" -todas vieron que Centorea era idéntica a la rubia, solo que no está tenía la parte baja de su cuerpo es la de un caballo al igual que sus orejas, y que tenía grandes pechos que pueden llegar a competir con los de la Godaime Hokage-.

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"¿Te encontraste con Centorea? A ella se le dio un permiso especial para salir sola" –decía la Señorita Smith por su celular al Uzumaki, ella se encontraba en su departamento echada en su cama en ropa interior- "aparentemente, los Centauros tienen la tradición de emprender viajes en búsqueda de sus señores."

((¿Sus señores?)) –Decía Naruto desde su celular-.

"Hablo de su familia anfitrión" –le aclaró Smith- "así que, mientras este en Japón, su familia anfitriona…" -en ese instante la mujer soltó un bostezo para que Naruto le pregunte si se encontraba bien- "lo siento, pero hoy es mi día libre. Dārin-kun, ¿puedes encargarte de ella?"

((¿¡Que!? ¡Espere un momento! ¡Yo no puedo…!)) –se quejó el Uzumaki pero antes de pueda continuar, Smith había cortado la llamada-.

"Buenas noches" –dijo Smith para volver a dormir tranquilamente-.

-Con Naruto y Centorea-

"…me colgó" -dijo el Uzumaki que guardo su celular y suspirar, era el colmo que la coordinadora sea tan negligente como para dejar su trabajo a otra persona-.

"¡Creo que uno no debe de tomar a la ligera los encantos mágicos de Japón!" -dijo Centorea para que el rubio pregunte de que está hablando- "¡ya sabes, ¡si uno corre hacia una intersección y choca contra alguien, él es tu ser predestinado!' Esto es un encanto mágico de adivinación japonés, ¿no es así?"

"¡Correr hacia ti fue más como un accidente de tráfico! ¡Pude haber muerto!" -le reclamó Naruto a la Centauro- "de cualquier forma, yo no soy tu predestinado y nada, y no es algún tipo de encanto mágico, solo es un cliché que se usan en los mangas."

"¿¡Qu-Que!? ¡Lo sabía, debí correr con una tostada en la boca!" –Dijo Centorea recordando lo que aprendió en un libro que leyó mientras que el rubio se llevaba una mano a su rostro-.

"Dónde diablos aprendiste sobre eso…" -murmuró el rubio en voz baja- "entonces, ¿Por qué estás buscando por tu predestinado tan temprano? Y porque estas tomando medidas tan violentas."

Para cuando Centorea iba a responderle a Naruto, un ladrón en una motoneta le robo la cartera de la mujer que paso de lado de ellos hace unos instantes. Cuando el ladrón obtuvo lo que quería, acelero para poder escapar.

"¡Apártense! ¡Apártense!" –Gritaba el ladrón para que las personas que estaban en su camino se hagan a un lado, en especial Naruto y Centorea-.

"¡Cuidado!" –Centorea apartó al Uzumaki tomándolo y apartándolo del camino del ladrón- "maldito, ¿seguirás cometiendo crímenes?" –decía la rubia sin darse cuenta que el rostro de Naruto está en una posición muy favorecedora-.

"N-No… puedo r-respirar…" -dijo el Ex-Shinobi con su cara atrapado en uno de los enormes senos de la chica mientras que su mano derecha agarraba el otro seno-.

"¡AAHHH! ¡Discúlpeme!" –Se disculpó Centorea avergonzada que se separó de inmediato del Uzumaki que recuperaba el aliento-.

"¡Bwah! Son… son inmensas…" -alcanzó a decir el Uzumaki que recuperaba el aliento- por poco me muero…

"Ajem… ¡ese hombre ha estado viviendo aquí y robando bolsas!" -decía la Centauro que desenvaino su espada- "¡Como una miembro de la altamente estimada raza de los Centauros, juro por mi espada que capturare e ese villano y darle su merecido!" –finalizó la rubia haciendo una pose de justiciera- "sin embargo…" -guardando su espada en su funda- "según la Acta de Intercambio de Interespecies, se me prohíbe ponerle un dedo encima. Esa fue la razón por la que estaba buscando a mi amo para poder pelear a mi lado" –finalizó Centorea-.

"Pero portar un arma está en contra de la ley" –señaló Naruto que apuntaba la espada de la Centauro-.

"No hay remedio" –dicho eso tomo la mano del Uzumaki- "¡incluso si no eres mi amo, tendrás que acompañarme!"

"¡Es-Esta bien, pero no me jales del brazo!" -aceptó el rubio para que Centorea lo suelte- "haaah… hoy no es mi día" -este se puso al lado de la rubia para montarla, pero Centauro reacciono y se hizo a un lado para mandar una patada que el rubio logro esquivar a tiempo- "¡GWAH! ¿¡SE PUEDE SABER QUE ESTABAS HACIENDO!? "

"¿¡Q-qué es lo que TU estabas haciendo!? ¡No soy un caballo! ¡Tú no eres mi señor, que maleducado eres!" –Decía Centorea con el rostro enrojecido para darle la espalda y cruzarse de brazos- "¡P-Por dios! ¡Los encantos mágicos japoneses no deben de trabajar tan bien como pensé…!" -el rubio no entendió lo que quiso decir la Centauro-.

"¿Entonces cómo se supone que vaya contigo…?" -preguntó el Uzumaki para que Centorea piense en un plan-.

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"No sé ustedes, pero pienso que el personaje de Centorea es muy educada y diferente a cierta rubia oxigenada" -habló Tenten para que todas asientan a lo que dijo-.

"A simple vista se ve que tiene honor por la forma que habla de su raza" -añadió Sakura-.

"No te olvides que también que no se deja tocar por cualquier hombre a menos que sea alguien que se lo merezca" -mencionó Hinata que dejo su enojo a un lado y admirar a la Centauro-.

"Pero lo más importante, es que ella no es como cierta rubia que conocemos y que no se jacta o presume su cuerpo" -finalizó Temari que hablaba de Ino y su faceta de presumida-.

"Es una suerte que Ino-san no las escuche, sigue impactada al ver a su otro yo" -explicó Hanabi viendo que la Yamanaka no salió de su impresión- "en verdad que le afecto mucho al ver a Centorea."

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-Con el ladrón de bolsos-

A lo lejos de la escena, el ladran de carteras seguía huyendo de la zona urbana y revisaba el interior de lo que acaba de robar.

"Que buen botín" –decía el ladrón viendo muchos billetes de 10.000 yenes-.

"¡Detente ahora mismo!" –gritó alguien mientras se escuchaba el sonido del galopar de un caballo, el ladrón volteo para ver a su espalda a la centauro que lo perseguía por detrás- "¡rufián, detente pacíficamente! ¡De lo contrario, la hoja de mi espada te hará probar el peso de tus delitos!"

"¡NO VAYAS TAN RÁPIDO! ¡ME VOY A CAER!" -gritaba Naruto que lo único que podía hacer era sujetarse de la cintura de Centorea

"¡Escúchame bien! ¡Si te atreves a tocar más de lo debido, te tirare!" –Amenazó la Centauro al Uzumaki-.

"¡Deberías de parar un poco primero! ¡Me es difícil sujetarme si corres tan rápido!" –gritó Naruto que se sujetaba lo que podía pero era difícil-.

"¿Tu eres la yegua de antes?" –Decía el ladrón para luego acelerar en su motoneta- "¡Jaja! ¡No podrás vencer mi modelo 36!"

"¡No dejare que se escape!" –decía la Centauro que acelero el paso para alcanzar al ladrón-.

El ladrón viendo como Centorea estaba por alcanzarlo, este cambia de dirección y tomar una ruta muy encorvada para perderla pero no se esperó que la rubia no tenga problema con eso, pero Naruto…

"¿¡Una vuelta repentina!? ¡MIERDA! ¡ME CAIGO! ¡ME CAIGOOO!" -empezó a gritar como loco aferrándose como podía al cuerpo de la Centauro-.

"¡No te sacudas como un loco, necio!" –Regaño la Centauro al Uzumaki por cómo se aferraba a su cuerpo-.

En frente de la persecución, un hombre que empujaba un carro con bidones de agua no se dio cuenta de lo que pasaba y el ladrón de carteras derribo los bidones al pasar por delante para que obstaculicen el camino de la Centauro. Centorea siguió adelanto y con su espada con su espada corto los bidones, pero al cortarlos la rubia termino toda mojada junto con el Uzumaki-.

"¡Eso fue demasiado fácil!" –Decía Centorea presumiendo sus habilidades con la espada sin notar un pequeño detalle-.

"¡O-O-Oye, t-tus p-pechos…se están v-viendo a través!" –advirtió Naruto a Centorea que no se di cuenta que la parte de arriba de su ropa se apegaba a su cuerpo y que se podía ver sus enormes senos a través de ella-.

"¡AAHHH!" –La Centauro soltó un grito para cubrir sus pechos con sus brazos-.

A pesar del percance con el agua, Centorea le faltaba poco para alcanzar al ladrón hasta que el ladrón salto con su motoneta hacia el otro lado de la carretera para así perderla.

"¡Wuuuhuuuu! ¡Hasta nunca yegua!" –Se burló el ladrón para ir cuesta abajo por la carretera-.

"¡Hah! ¡Eso es juego de niños!" -dijo la Centauro que se acercó al borde de la pista, Naruto supo lo que tramaba la chica y no le gusto para nada-.

"¡Oye! ¡No iras a…!" -no alcanzo a terminar la frase cuando Centorea salto desde lo más alto para comenzar a descender hasta la pista inferior- "¡AAAAHHH!" -gritó aterrado por la altura en la que estaban, pero por suerte de los dos rubios, un camión que pasaba por la misma carretera fue lo que amortiguo un poco la caída cayendo en la parte de al frente para impulsarse y saltar hacia delante hacia donde está el ladrón y de paso destruir el camión-.

"¡No dejare que huyas otra vez!" -declaró Centorea colocando el filo de su arma en el cuello del asustado ladrón para luego mirar por detrás a Naruto- "¡oye tú, tienes que estar a mi servicio y capturar…!"

"Pe… Pensé que estábamos acabados…" -Decía un aliviado Naruto que no se dio cuenta que sus manos se afirmaban de los grandes senos de la Centauro que se sonrojó bastante-.

"¡WWAAAAAAAHHH! ¿¡D-Donde intentas agarrar!? ¡Suéltame, bobo!" -ordenó la Centauro que forcejeaba para que el rubio la suelte, y de paso su espada se acercaba mucho al cuello del ladrón que sudaba frio-.

"¡Oye! ¡No forcejees tanto…! ¡M…Me voy a caer! ¡GWAH!" -el Uzumaki hacia lo posible para no caer al agarrarse de los pechos de Centorea-.

"¡T-Tu, canalla! ¿¡Estás haciendo esto a propósito..!?" -decía la Centauro avergonzada y molesta con Naruto- "¡D-Desgraciado…! ¡Te montaste en mi espalda y luego me asaltas! ¡Recuerda lo que dije que haría si…! ¡EEK!" -la pobre Centauro no paraba de gemir cuando el Uzumaki le pellizcaba sus pezones, los cuales eran muy sensibles-.

A medida que las cosas seguían entre los rubios, el Uzumaki sin querer abrió la camisa de Centorea y que sus prominentes senos salgan al aire, y para sorpresa del ladrón, noto que la Centauro no usaba sostén. El pobre tuvo una feroz hemorragia nasal que le costó el control de su motoneta y chocar contra varias cajas llenas de tarros de pinturas.

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Las chicas observaron todo lo que paso en la escena de persecución, cuando Centorea y Naruto lograron alcanzar al ladrón se sonrojaron como nunca en el momento que el Uzumaki empezó a "manosear" sin querer el amplio busto de la Centauro, desabrochar la camisa dejándolos expuesto al aire libre.

"Son mucho más grande de lo que pensé…" -dijeron todas al mismo tiempo y más que anonadadas al ver lo que paso- "¿Qué es lo que comió esa Centauro para tener esos pechos?" -volvieron a decir juntas, excepto Ino que aún no salía de su estado de shock-.

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"Oh, cielos… eso tuvo que doler" -dijo Naruto viendo cómo se estrelló el ladrón- "…espera, ¿eh? ¿Aun sigues corriendo?" -noto que Centorea no se detenía, es más, ella corría cada vez más rápido- "este… probablemente debamos detener ahor…" -el noto que la rubia parecía no reaccionar mientras se cubría sus pechos, se había quedado en shock- "¡AHHHH, SE PETRIFICO!"

Sin importar cuanto le gritara a la Centauro, ella seguía congelada cuando sus pechos quedaron al descubierto, sin darse cuenta que término chocando contra el portón de una fábrica y de paso derribo varias cajas que había en el camino. Naruto quedo inconsciente por el golpe pero Centorea se recuperó de su estado de shock con el golpe que se dio.

"¡Ghh! Maldito infeliz, como te atreviste…" -decía la Centauro sobándose la cabeza para luego ver sus pechos- "mi busto…" -con ambas manos se sujetó sus senos y de paso tocarlos- "¿¡Q-Que estoy haciendo!?" –Se regañó a sí misma para ver con odio al Uzumaki- "desgraciado, teñiré mi espada con tu sangre."

La Centauro busco su espada para notar que no estaba en su funda y comenzó a buscarla, ella escucho unos pasos detrás y volteo a ver al ladrón de carteras cubierto de pintura y sostenía el arma de la rubia. Cabe decir que el sujeto tenía cara de pocos amigos.

"Maldita yegua… ¡te convertiré en rebanadas de sashimi!" -exclamó el ladrón que alzo el arma y usarla en contra de la indefensa Centauro-.

El ladrón lanzo un corte vertical en contra Centorea que no se movía de la sorpresa, pero antes que el filo del arma llegue tocarla, Naruto se interpuso para ponerse como escudo humano y recibir de lleno el corte de la espada para proteger a la impactada Centauro.

'Maldición… voy a morir' -fue lo único que pensaba el Uzumaki al recibir el corte de la espada-.

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"¡No! ¡Naruto-kun!" -gritó de miedo Hinata que se cubrió la boca con sus manos-.

"¡Ese bastardo hirió a Naruto!" -dijo Sakura aterrada- "¡el ya no puede auto curarse por su incapacidad de usar Chakra!"

"¡Ese idiota…como se atreve en arriesgarse de esa manera…!" -dijo Temari alarmada de lo que vio-.

Hanabi y Tenten solo se quedaron calladas por el horror de la escena, e Ino… bueno, ella aún seguía en shock.

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"Bueno, por un momento pensé que iba a morir en ese momento Srta. Smith, pero al final estoy bien" -ahora mismo el Uzumaki se encontraba en el interior de su casa hablando por teléfono con la Srta. Smith, su torso fue vendado gracias a que Centorea se encargó de curar su herida cuanto este se puso como escudo humano- "quien diría que la espada sea falsa, ¿eh?" -mencionó el viendo la espada apoyada en el muro-.

((Por supuesto que es falsa. No la dejaría andar por ahí con una real)) -dijo Smith que estaba en la cocina de su departamento en ropa interior- ((por cierto, ¿en dónde están ahora?))

"En mi casa, Centorea quiso curar mi herida por lo que paso" -respondió el rubio- 'no puedo decirle lo que paso en realidad. Apuesto a que esta enojadísima…' -pensó el viendo como la Centauro se retiraba de la sala-.

((Pero arrestando a alguien así por tu cuenta es un poco temerario, ¿no lo crees?)) -mencionó la Coordinadora que calentaba agua en una tetera-.

"Bueno, yo en realidad no quería… Centorea fue la que empezó a perseguirlo tras esa motocicleta…" -le explicó el rubio pero es interrumpido por la Coordinadora-.

((¿Una motocicleta? Espera, no montaste su espalda, ¿o sí?)) -preguntó Smith, dejando que el Uzumaki alcance a decir un "¿Eh?"- los Centauros tienen reglas muy estrictas, 'Solo dejar al amo al que le has comprometido tu vida cabalgar sobre tu espalda'. Para las chicas, esa regla es casi como el matrimonio. Si la forzaste a que te dejara montarla… -ahora mismo el rubio empezó a sudar como loco y ponerse blanco- ((seria casi como una violación ¡Ahhh! ¡Mi Yakisoba!)) -Smith cortó la llamada en ese momento, dejando a Naruto completamente aterrado de lo que hizo, y su miedo aumento cuando Centorea regresó-.

"¡Lo siento tanto Centorea! ¡No pensé que sería un gran problema...! ¡No quise hacerlo a propósito!" -se disculpó mientras se arrodillo e inclino la cabeza en frente de la Centauro y esperar que tipo de castigo recibiría-.

"Cerea…" -dijo la rubia para que el rubio le cabeza y ver que ella no se veía disgustada con el- "llámame Cerea, no Centorea… es el nombre que usan aquellos que son cercanos a mí" -luego se arrodilló frente a un sorprendido Uzumaki- "y yo debería ser la que se disculpara. Te involucre debido a mi egoísta sentido de la justicia. Y debido a mí, resultaste lastimado…"

"Está bien… de cualquier forma yo nunca dije que no quisiera" -le dijo el Uzumaki a la Centauro- "no tienes que preocuparte mucho por eso…" -dijo Naruto que fue interrumpido cuando la Centauro tomo una de sus manos

"¡No diga disparates!" -exclamó ella que llevo su mano hasta su pecho- "siente mi pecho, aquí… ¿¡puedes sentir el latido de mi corazón!? ¡Siento al destino atándonos juntos!" -declaró ella sonrojada- "¡así es, justamente como está escrito en los mitos griegos! ¡Esto es como el encuentro del gran héroe Hércules y el sabio Quirón!" -en ese instante el rubio se preguntó a si mismo '¿Quién rayos eran el tal Hércules y Quirón?'- "los encantos japoneses seguro son fuertes… nunca creí que conociera a mi amo destinado" -Naruto no sabía que decir en ese momento pero estaba sorprendido con las palabras de "Cerea"- "¡esta es la primera vez desde que vine a Japón, más bien, desde que nací…que un hombre me ha protegido con su cuerpo y vida!" -Centorea recordó como Naruto se interpuso entre ella y el ladrón para protegerla- "¡es por eso que yo, Centorea Shianus, juro mi lealtad como tu sirvienta…! Aruji-dono… ¿¡aceptara esas palabras…!?" -preguntó ella-.

Naruto estaba impresionado ante las palabras de Centorea. Nunca pensó que aquella chica que lo arrastró a esa loca persecución ahora le juraba su lealtad. Cabe decir que era algo inesperado ya que no sabía que palabras usar en ese momento.

"Ce-Cerea…" -alcanzó a decir Naruto hasta que la puerta de la sala se abrió para que Miia y Papi entren en escena-.

"¿¡Qué!? ¡Dārin, ¿trajiste a otra mujer a la casa!?" -exclamó la celosa Lamia viendo la escena-.

"¡Esposo, estoy hambrienta!" –Exclamó Papi que tenía mucha hambre-.

"¿¡Dijo Dārin!? ¿Quiénes son ellas? ¡Qué indecente, Aruji-dono!" -regañó Centorea al Uzumaki-.

"¡Ah! ¡Dārin, estás herido!" -la Lamia vio las vendas en el torso que tenía el Uzumaki-.

"¡Y estoy hambrienta! -insistió Papi para que el Uzumaki suelte un largo suspiro de cansancio-.

"Oh, cielos... que se supone que haga…" -se quejó el rubio que ahora tiene más problemas de lo que está acostumbrado-.

-Minutos después-

"¡Escuchen! Ahora que estoy aquí, las cosas serán distintas. Nuestro Aruji-dono este primer lugar ante todo –decía Centorea que estaba reunida con Miia y Papi, todas ellas estaban desayunado mientras que la rubia solo comía una ensalada-.

"¡Yo siempre estoy pendiente de mi Dārin!" –decía Miia mientras comia-.

"Papi piensa lo mismo" –mencionó Papi con la boca llena de comida-.

'Entonces, ¿Por qué no mejor no me ayudan con los quehaceres de la casa?' -pensaba Naruto algo cansado y limpiando los platos-.

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"Así que… otra chica vivirá bajo el mismo techo con Miia y Papi" -decía Sakura viendo que el programa de hoy ha terminado- "la verdad es que no me esperaba que Centorea quiera quedarse a vivir a Naruto."

"Yo ya quiero ver que pasara en el siguiente capítulo" -dijo Tenten emocionada- "este programa tiene de todo: emoción, comedia, acción y romance" -Hinata solo gruño cuando escucho lo último que dijo la castaña-.

"¿Es que debo recordarles a todas que ese programa me está humillando en todos las aldeas?" -remarcó la heredera del Clan Hyūga- "¡insisto que Tenten debe entregarme todos los Sellos Explosivos para volar por los cielos el maldito estudio!"

"¡Ya te dije que no quiero ser cómplice de tus ataques terroristas!" -exclamó la experta en armas que no le entregaría ni un solo Sello Explosivo a Hinata-.

"Este… chicas" -habló Hanabi que sonó muy preocupada- "ya me está asustando que Ino-san siga sin reaccionar" -señaló a la Yamanaka que desde el inicio del programa, seguía en el mismo estado-.

"La pobre no se ha movido o dicho una palabra. En verdad le afecto en ver a Centorea" -decía Sakura que comenzó a preocuparse por su mejor amiga, esta se acercó y paso una mano frente al rostro de la rubia- "vamos Ino, reacciona de una vez" -le decía pero no reacciono, en eso le dio unas palmaditas al rostro para que esta despierte-.

"E…E… ¿Esa soy yo?" -habló Ino cabizbaja que por fin salió de su estado de shock- "esa… esa yegua… ¿soy yo?" -volvió a preguntar mientras las demás solo le responden con si y esperar como iba a reaccionar- "por Kami… ¡ES MARAVILLOSO!" -exclamó ella levantando el rostro y mostrar una expresión de felicidad sumada con algunas lágrimas de alegría en sus ojos-.

"Eh… ¿¡EEEEEEEHHHHHH!?" -gritaron todas las chicas que no podían creer que Ino estuviera tan feliz- "¿¡ESTO ES UN BROMA!?" -reclamaron todas ellas más que molestas-.

"¿Una broma? Claro que no, es más, me gusta el personaje de Centorea" -respondió la Yamanaka para que las demás sé que caigan la mandíbula al piso- "¡muchas gracias Naruto! ¡Es la mejor imagen de mi propia persona que haya visto en toda mi vida!"

"¡Ahora sí que perdiste la cabeza, puerca! ¡Como puede estar feliz que alguien salga en ese programa y que robe tu apariencia!" -reclamó Sakura creyendo que su amiga se volvió loca-.

"De acuerdo, admito que me sorprendió un poquito… hasta le tengo celos a Centorea por tener pechos del mismo tamaño de Tsunade-sama" -mencionó la rubia que era lo único que envidia de la Centauro- "pero su personalidad como guerrera es lo que más me encanta. Es decidida, valiente, fuerte, excelente con la espada, ¡ella es perfecta!"

"Ahora creo que si se le zafo un tornillo a la rubia oxigenada" -dijo Temari cruzándose de brazos-.

"Comparto la misma opinión tuya" -se unió Hinata, tanto su comentario como el de Temari provocaron que la Yamanaka se sienta muy ofendida-.

"¡Solo me tienen envidia que sus personajes resultaron ser una Loli pájaro que se le olvida todo cuando apenas da tres paso y una chica serpiente extremadamente celosa!" -el encaró la Yamanaka que rápidamente se tapó la boca y ver con miedo a Temari y Hinata con miradas asesinas-.

"Más te vale que empieces a correr… ¡AHORA MISMO!" -dijeron ambas Kunoichis listas para acabar con Ino que salió corriendo por su vida, seguido de la hermana del Kazekage y la Hyūga-.

"¿Deberíamos detenerlas?" -dijo Hanabi viendo como esas tres corrían por toda la mansión de su clan-.

"…Nah. Ella misma se lo busco" -respondieron Sakura y Tenten que no les importaba lo que sucediera con Ino, pues ella misma se lo busco-.

En toda la mansión del Clan Hyūga se escuchaban los gritos de ayuda de la Yamanaka, detrás suyo las seguían Temari armada de su Abanico Gigante lanzándole su Kamaitachi no Jutsu (Jutsu: Hoz Comadreja) mientras que Hinata usaba el Hakke Kūshō (Ocho Trigramas Palma del Vacío). Ambas cegadas por la ira que nunca se percataron que terminaron destruyen casi la mitad de los terrenos del clan junto con gran parte de la mansión.

Fin del Capítulo.